-Aclaremos esto. Hokage sama se escapó de la aldea dejando clones de sombra aquí para hacerse pasar por él para poder ir a socorrer al equipo 8, donde está una de sus prometidas, Hinata. Logró ayudar y salvar a los rebeldes del país, junto a la princesa, que se hacía pasar por la actriz Yukie Fujikaze, Koyuki Kazahana cuando su tío, Doto, la secuestró. Gracias a eso y por inspirarla con tu historia tuvo el valor y coraje para asumir el trono que le correspe. En consecuencia, el País de la Primavera, anterioridad el País de la Nieve, quiere hacer una alianza con Konoha. ¿Me he dejado algo? - repasó el concejal Homura.

-Sí. Que mi maravilloso ahijado ahora tiene otra encantadora prometida, una daimio nada menos. ¡Y qué belleza!. Tienes la suerte del diablo, gaki - comentó con orgullo y un poco de celos el sannin de los sapos.

El mencionado solo gimió. En sus planes cuando fue a rescatar a la ojiperla NO había previsto nada de lo que ocurrió al final. No esperaba gustarle a la princesa. No esperaba el beso. Mucho menos esperaba la propuesta de matrimonio en los papeles de la alianza.

-¿Cuál es el curso que vamos a tomar?, ¿sabe si quiera la daimio de tus otros compromisos? - preguntó Inoichi.

-Sí, lo sabe. Le informé después de que me recuperé del shock después del beso - respondió el godaime con un suspiro.

-No te sientas mal, gaki. Es normal bloquearse cuando semejante preciosidad te da un beso sorpresa - se rió el maestro de espías.

Su antigua compañera de equipo tuvo que contenerse para no darle un puñetazo por su actitud pervertida.

-Entendemos que puede ser mucha presión para ti, hokage sama. Estás a punto de casarte con dos jóvenes y en un futuro te casarás con otra. Pero piensa que esto es lo mejor para la aldea. Tu unión con Temari reforzará la alianza con Suna y tu matrimonio con Koyuki sama garantizará una alianza con la Primavera que durará muchos años, si no más - intervino el Mitokado.

-Soy consciente y por eso no me opongo. Sencillamente no pensé que tendría que casarme con alguien más - dijo lo más calmadamente que pudo el jinchuriki.

-Es comprensible - asintió el anciano.

-Tal vez con esto decidas no abandonar la aldea. Así no hay riesgos de que tengas otro compromiso - bromeó Asuma.

-En realidad deberíamos considerar todo lo contrario. Si cada vez que hokage sama sale de Konoha hace una alianza, básicamente estaríamos garantizando la prosperidad de la aldea - afirmó un concejal civil.

-Solo ha ocurrido una vez. No podemos decir con eso que siempre pasará - protestó Chouza.

-Problemático. Esta es la segunda vez, no la primera - argumentó Shikaku.

-¿Qué quieres decir? - interrogó alguien.

-Durante la primera misión de hokage sama fuera de la aldea, él y su equipo liberaron el País de las Olas de un empresario corrupto, Gato. La gente, después de investir un nuevo daimio, mandaron una propuesta de alianza. Nombraron al puente "El Gran Puente de Naruto" en su honor - informó el comandante jonin.

Muchos en la sala se sorprendieron ya que no sabían ese dato. El propio ojiazul estaba sorprendido de que pusieran su nombre al puente. Tendría que buscar una forma de ir a Nami para visitar y agradecer a Tazuna y su familia.

-En realidad son tres. También logró convencer a Tsunade hime para que volviera - comentó el sabio pervertido.

-Eso no cuenta. No la convencí, le ordené que volviera. Ahí no hay alianza ni hay nada - negó el Uzumaki.

-Eso es cierto - apoyó la Senju.

A pesar de su exterior mayormente frío, estaba un poco contenta de lo que hizo el chico. Le molestaba reconocer que se había estado hundiendo y necesitaba una llamada de atención. No es que lo fuera a admitir en voz alta.

La reunión continuó durante un par de horas más. Se habló de los aspectos de la nueva alianza, la suerte de su líder, los asuntos de la aldea y las bodas del godaime.

La chica con la que primero se casaría sería Hinata. En matrimonios poliamorosos la primera esposa era quien tenía más peso. Es por eso que su primera mujer tenía que ser de Konoha para asegurar los mejores intereses de la aldea.

La segunda sería Temari poco después. Cuanto antes se casaran, mejor. La relación con Suna era sorprendentemente buena dado los acontecimientos, pero era mejor prevenir que curar.

Naruto no se casaría con Koyuki hasta que tuviera al menos 16 años, por lo que tenían al menos tres años para planear la boda. Eso convertía a la daimio en la tercera esposa, a menos que el chico se casara con otra antes de ese momento.

La primera boda estaba planeada para el fin de semana de la semana que viene. Todos los preparativos estaban casi listos. Un gran número de figuras importantes del País del Fuego asistirían a la ceremonia, incluido el fire daimio.

La segunda estaba planeada para tres días después de la primera. A esta ceremonia habría que añadir a la lista de invitados a los altos mandos de Suna y al daimio del viento junto a algunos miembros de su corte.

Por suerte para el futuro marido, la casa que le había pedido construir a Tazuna ya estaba amueblada y todo, razón por la que el viejo constructor se había vuelto a su país hacía unos días. Sorprendentemente, para el adolescente, todo le había costado menos de lo que había imaginado en un principio, por lo que aún tenía casi 200 millones en su cuenta.

Al jinchuriki le hubiera gustado llevar a sus futuras esposas a una luna de miel después de su boda. Desgraciadamente, sus deberes como hokage le habían impedido hacer eso. Aún así, se tomaría unos días fuera de la oficina para pasar con ellas. Sus clones se podían hacer cargo del papeleo.

Una vez estuvo todo arreglado y hablado, se dió por terminada la reunión y todos salieron de la sala.

Jiraiya había decidido perseguir a su ahijado para obtener todos los detalles jugosos sobre su tiempo con la daimio recién nombrada. Lo único que logró fue que le cerraran la puerta en las narices.

Una vez solo en su despacho, el rubio creó varios kage bunshin y los puso con el papeleo mientras él se escabullía por la ventana. No quería correr el riesgo de tener que lidiar otra vez con su padrino.

Saltó de techo en techo buscando a Hinata. Se sorprendió cuando la vio hablando tranquilamente con Temari en la calle. Debatió consigo mismo si debía aparecer o dejarlas hablar a solas.

Luego recordó que no le había dicho a la ojiverde de su nuevo compromiso. ¿Cómo reaccionaría?, ¿se molestaría o simplemente le daría igual?, Hinata estaba con ella, ¿se lo había dicho o esperaba que él se lo contara?

Con un suspiro de cansancio, bajó a la calle para hablar con ellas. Él nunca había sido de los que huía de un problema y no iba a empezar ahora. La risa de sus prometidas le sacó de sus pensamientos.

-No me puedo creer que se congelara - se rió la rubia - Estoy bastante segura de que muchos hombres habrían estado encantados y celebrando.

-Sí, pero Naruto kun es diferente. No está acostumbrado al afecto, y definitivamente no esperaba el beso - comentó la pelinegra.

-Sí - suspiró con un poco de tristeza - Gaara es igual. Aún se desconcierta cuando le doy un abrazo - en sus ojos se podía ver el dolor por este hecho.

-No te rindas. Estoy segura de que mejorará con el tiempo - animó la ojiperla.

-Eso espero, pero no es como que pueda verlo. Gaara y Kankuro volverán a Suna después de la boda y yo me quedaré aquí - dijo algo desanimada la hija del yondaime kazekage.

-No estás sola - le aseguró mientras le ponía una mano en el hombro.

-Gracias - le dió una sonrisa triste.

-De nada - la Hyuga también tenía una sonrisa triste.

El hokage decidió alejarse al escuchar su conversación. Obviamente necesitaban tiempo, especialmente Temari.

Se fue a su oficina a paso rápido. Quería buscar en los libros que tenía allí algo para que su prometida pudiera volver a su aldea siempre que quisiera. Eso probablemente la animaría un poco.


Hola, espero que les haya gustado el capítulo. Como creo que pueden apreciar en este capítulo, si no para eso estoy yo, la relación de Naruto y Tsunade en esta historia es muy diferente a la del canon. Debido a que su comienzo es muy diferente, Tsunade no ve en Naruto a su hermanito y amante, por lo que no tienen una relación cercana. Ellos se tienen un respeto a regañadientes. Naruto reconoce sus habilidades médicas y Tsunade reconoce su autoridad, no tanto por ser hokage sino por plantarle cara y decirle sus verdades.

Comentarios a las reseñas:

Diego Culebro: gracias a ti por leer mi historia y comentar. Las actualizaciones son una vez por semana. Haré todo lo que pueda para que sea lo más realista y agradable posible. Los clones principalmente serán para que hagan el papeleo, dejándolo con tiempo para estar con sus chicas.

Josemar Bertotti: Karin ya está en el harem. La encuesta es para si Tayuya es Uzumaki y está en él también o si pongo una OC Uzumaki.

deniswanheda: sí, por eso quería hacerlo. Aunque en este capítulo parece que Kakashi no fue castigado, más adelante mencionaré su castigo. En mi historia la película de Princesa Gale no se estrenará en Iwa hasta después de la alianza, pero como me gustó tu idea, hice un pequeño omake al respecto. El omake está más abajo.

hpinvidente: gracias, me alegra que te haya gustado. La chica que mencionas es Yakumo Kurama. La puse como ejemplo cuando expliqué la votación.

Votación:

1º. Chica Uzumaki:

Tayuya: 3

OC: 0

2º. Chica de Konoha:

Yakumo Kurama: 1

Ahora, antes de despedirnos hasta la semana que viene, les presento el omake que se me ocurrió basado en la idea de deniswanheda.

Omake: Princesa Gale en Iwa antes de tiempo

Iwa estaba en su mayoría tranquila. El tsuchikage estaba haciendo su papeleo. Los shinobis estaban haciendo su trabajo, entrenando o descansando. La población civil trabajaba o disfrutaba de su día libre. En general todo era muy pacífico.

Un grupo considerable de gente, fans de las películas de Yukie Fujikaze, se pararon enfrente del cine para ver el estreno de la última película de la Princesa Gale. Estaban emocionados por lo que les traería esta nueva entrega.

Se compraron refrescos, palomitas y golosinas. Las personas hablaban unos con otros sobre lo que creían que verían. Varias kunoichis y algunos shinobis también participaban en los chismes y conjeturas.

Una vez llegó la hora y todos estaban en sus asientos, las luces se apagaron y se encendió el proyector. Durante casi una hora y media, vieron a su actriz favorita viviendo su última aventura. Algunos lloraron cuando uno de los seguidores de la Princesa Gale murió y la propia mujer lloró su muerte.

Quedaron fascinados con lo realistas que fueron las escenas de la lucha de los samuráis bajo el tirano y los rebeldes. Aunque más de un shinobi se preguntó por los múltiples chicos rubios que se podían ver en el fondo.

A más de uno casi le da un ataque cuando vieron al joven que se enfrentaba al hombre de la armadura negra. No pudieron evitar ver sus similitudes con el Destello Amarillo, pero se convencieron a sí mismos de que solo era una casualidad. Sencillamente habían arreglado a uno de los actores para que se pareciera a él.

El silencio de la sala se volvió caos cuando vieron la esfera de chacra en su mano. No había dudas de que esa técnica era el rasengan del yondaime hokage. Su banda ninja, que se habían negado hasta entonces a ver, mostraba claramente el símbolo de la hoja.

El pandemonio se desató poco después.

Los shinobis y kunoichis salieron del cine e informaron a sus colegas, amigos, compañeros y superiores de lo que habían visto. Por supuesto, al principio no les creyeron, pero después de verlo con sus propios ojos, ya no podían negarlo.

Una reunión de emergencia se llevó a cabo. Los distintos miembros del consejo discutían de un lado para otro cómo proceder. Era obvio que su peor pesadilla en la Tercera Guerra Shinobi había tenido un hijo y que dicho chico estaba siguiendo los pasos de su padre.

Unos exigían su muerte. Otros proponían una alianza o al menos tregua con Konoha para que no volviera a pasar como en la última guerra. Onoki solo podía maldecir a Minato Namikaze por darle más problemas incluso muerto. Todo ese lío le iba a dar una montaña de papeleo.