Naruto soltó un suspiro de alivio cuando por fin llegaron a la aldea. Los últimos tres días habían sido algo tensos. A pesar de su desconocimiento de quién era Kurotsuchi hasta que ella se lo dijo, la mayoría de los shinobis seleccionados para su protección sí sabían quién era.
Aunque ninguno la trató mal en el camino de regreso, se notaba que intentaban interactuar lo menos posible con ella y estaban muy rígidos. Solo Fu y él se relacionaron positivamente con ella.
Más de uno lo había cuestionado, solos y en privado, sobre su decisión de llevarla a la aldea. Francamente, se había vuelto irritante, pero no lo dejó ver. Entendía su desconfianza, pero creía que estaban exagerando.
Sí, Konoha e Iwa no tenían la mejor relación, pero esa era su oportunidad de cambiar eso. La pelinegra era la nieta de Onoki, sandaime tsuchikage y actual líder de la roca. Se sabía que el hombre tenía debilidad por su nieta, por lo que ayudarla podría hacer que tenga una visión al menos un poco más positiva sobre la hoja.
¿Qué había y estaba corriendo un riesgo al confiar tanto en la ojinegra? Sí, pero no se arrepentía. Muchas otras veces en el pasado había corrido el mismo riesgo y le había ido bien la mayoría de las veces.
Sí, era consciente que, como hokage, debía ser más prudente y considerar cada paso que daba ya que no le afectaba solo a él sino a todo el pueblo, pero sentía que a veces había que dar un salto de fe y correr riesgos para lograr algo. Por suerte para Konoha, su suerte era lo opuesto a la de Tsunade.
Despidió a todo su séquito y se fue al hospital con Kurotsuchi y Fu siguiéndolo. La condición de la chunin era mucho mejor que cuando la encontró y ya podía caminar cortas distancias sin necesidad de ayuda, pero realmente necesitaba un médico para garantizar su recuperación.
Dado que la sannin babosa no estaba en el hospital en ese momento, el rubio dejó a la pelinegra en manos de Shizune con órdenes implícitas de que solo ella y su maestra podían atenderla. No quería correr el riesgo de que algún doctor o enfermera hiciera algo contra ella como alguna especie de venganza por algo que ocurrió en el pasado.
Una vez eso estuvo arreglado, se fue con Fu a su oficina. Se había prometido a sí mismo explicarle toda la situación a la peliverde cuando llegaran y no iba a romper su promesa, incluso si se la hizo a sí mismo.
Algunas personas en la calle lo saludaron mientras pasaba. Les devolvió el gesto con una pequeña sonrisa. Esto era lo que había deseado desde que era pequeño. Que la gente lo notara y lo aceptara. Se sentía tan bien haberlo logrado.
Observó cómo su acompañante miraba todo con asombro y saludaba a todas las personas que los saludaban con una enorme sonrisa. Se veía tan feliz. Era triste pensar en el hecho de que todos los jinchurikis tenían vidas tan miserables.
Llegaron a la torre hokage y subieron a su oficina. La ojinaranja miró a su alrededor. Primero emocionada. Luego con un puchero. Solo pudo suponer que estaba decepcionada por lo poco impresionante que era el lugar.
-Toma asiento, Fu. Tenemos que hablar de algunas cosas - le dijo mientras se sentaba en su silla y le hacía un gesto para que hiciera lo mismo.
Pareció vacilar durante unos segundos antes de volver a sonreír y sentarse. Su sonrisa no llegaba a sus ojos.
-¿De qué quieres hablar? - preguntó en un tono alegre claramente falso.
Suspiró internamente. Era obvio que sus interacciones anteriores con las personas no fueron muy buenas. No podía culparla por actuar así. Diablos, muy bien podría haber hecho lo mismo en su lugar.
-No has hecho nada malo. Así que no te preocupes. De lo que te quiero hablar son de cosas de mí que necesitas o al menos creo que deberías saber - le informó con un tono calmado para intentar que se calmara. Por suerte pareció funcionar - Lo primero que debes saber es que no eres mi única esposa - hizo una pausa esperando que ella hiciera una pregunta. Al pasar unos segundos en completo silencio, decidió seguir -T engo dos esposas a parte de ti y una prometida. Mis esposas son Hinata Hyuga y Temari Sabaku, y mi prometida es Koyuki Kazahana.
Volvió a hacer una pausa. Esta se alargó por casi un minuto. Realmente esperaba que hiciera una pregunta, no que se quedara callada.
-¿No dices nada? - cuestionó el ojiazul confundido.
-No - él la miró sin comprender - Que tengas más esposas significa que tendré más amigas. Ellas estarán contigo y yo también por lo que viviremos todos juntos. Nunca estaré sola de nuevo y habrá mucho amor - explicó su punto de vista sobre el asunto.
El Uzumaki estaba anonadado. Nunca había visto las cosas de esa manera. Sabía que su lógica tenía varias fallas considerables, pero no pudo evitar sonreír al verlo a su modo. Después de todo, él tampoco quería volver a estar solo.
-¿Tendrás más en el futuro? - preguntó alegremente.
Si le hubiera preguntado eso hace dos minutos, le habría respondido que esperaba que no, que cuatro eran más que suficientes. ¿En ese momento? Su respuesta era otra.
-No lo sé. Dependerá si en el futuro hace falta algún matrimonio político para crear o fortalecer una alianza - le contestó.
-Oh, espero que los haya. Cuantos más mejor - comentó con una gran sonrisa.
Sacudió la cabeza en negación. Una pequeña sonrisa tirando de sus labios. Podía ver de dónde venían su respuestas y él mismo no pudo evitar sentir la cálida sensación al pensar en tener una gran familia feliz.
Que quede claro, esto NO significaba que buscaría activamente una relación con otras mujeres. Cuatro era un buen número en lo que a él respecta. Sencillamente no estaría tan reacio y molesto si se viera envuelto en otro matrimonio político.
-¿Algo más?, me gustaría conocer a mis nuevas amigas - cuestionó casi saltando en el sitio.
El rubio se rió de todo corazón por su emoción. Era como verse reflejado en un espejo de cuando era un poco más pequeño. Salvo por el hecho de que es una chica y no se parecían físicamente.
-Desgraciadamente sí. Aún tengo que contarte un par de cosas.
La peliverde hizo un puchero. Realmente quería conocer a las otras esposas de su marido. Tenía mucha curiosidad por saber cómo eran.
Negó con la cabeza con diversión. Estaba bastante seguro de que la vida sería mucho más divertida con Fu en ella.
Suspirando ligeramente, se preparó para seguir contándole lo que creía que debía saber. Empezó con su condición de jinchuriki. La ojinaranja se sorprendió por la noticia, pero también estaba muy feliz por conocer a alguien como ella.
Luego le habló de Akatsuki, que fue la razón principal por la cual se llevó a cabo ese matrimonio y su traslado. Pensó que se asustaría o se molestaría. No imaginó la respuesta que le dió, aunque en parte debería haberlo sabido.
-Si vienen a por nosotros, entonces no serán mis amigos, sino mis enemigos. Y les mostraré de lo que soy capaz - proclamó en voz alta e hizo gestos de golpear a alguien.
La fuerza de la chica no era nada que despreciar.
Había creado algunos kage bunshin para que se ocuparan del papeleo mientras él llevaba a su nueva esposa a su casa cuando un chunin entró en su despacho. Al parecer el consejo estaba reunido y lo estaban esperando. Supuso que querrían saber cómo fue la misión. Tal vez incluso supieran de Kurotsuchi.
Murmurando una disculpa a la antigua kunoichi de Taki, la dejó con uno de sus clones para que la llevara a casa mientras él se iba a la sala de reuniones del consejo. Tenía el fuerte presentimiento de que la reunión iba a ser muuuy larga.
Hola, espero que os haya gustado el capítulo. Por si no lo dejé en claro antes, Naruto NO buscará parejas activamente. Gracias a Fu tiene otra perspectiva sobre todo el asunto de estar casado con varias mujeres, pero no quita que esté feliz con el número actual.
Comentarios a las reseñas:
deniswanheda: tendrá varias apariciones en el corto plazo, pero tengo muy claro cómo se arreglará un matrimonio entre ellos que, si me sale bien, será una escena de risa. Sí, Tayuya no será buena hasta más adelante, y eso es si gana en la votación, que es lo más probable.
grankpo99: me alegra que te haya gustado. Bueno, en parte lo era, pero para aclarar los malentendidos, no para otra cosa. No me siento atacada, en realidad me viene bien ese tipo de reseñas para saber si estoy haciendo algo mal o no lo dejo suficientemente claro. Sí, se entiende y te doy la razón. Descuida, lo entiendo y no me siento ofendida. Gracias, siempre es bueno leer eso. Te lo agradecería, esta es mi primera historia de harem y me gustaría saber si estoy haciendo algo mal.
El Vagabundo: sí, se puede votar por Yugao. Las restricciones son las mismas del capítulo 8.
Andres: gracias, me alegra que te guste. Tienes muy buenos puntos.
Votaciones:
1º. Chica Uzumaki:
Tayuya: 4
OC: 0
2º. Chica de Konoha:
Yakumo Kurama: 2
Yugao Uzuki: 3
Hana Inuzuka: 1