imposible".Biju/Bestia Hablando.
"por ella" Pensamiento de personajes.
"¿como olvidarte ?"Pensamientos de Biju/Invocación/Bestia.
interesante".Personaje hablando.
Ningún personaje de Naruto o la serie rwby me pertenecen ,este trabajo es por mero entretenimiento,de antemano gracias por leer este fanfic
Las alarmas sonaban por todo el reino, anunciando un ataque inminente. Los soldados se esforzaban por detener la avalancha del enemigo, los Grimm, que no se detenían ante nada. No les importaba si alguno de ellos caía, solo seguían atacando sin piedad ni lealtad. No había forma de razonar con ellos, solo destruirlos o morir.
Solo habían pasado unos minutos desde el inicio del ataque y los únicos que habían reaccionado a tiempo eran los soldados de Atlas y sus robots y paladines. Estaban tratando de contener la invasión, ofreciendo un buen respaldo, pero no era suficiente. Tarde o temprano se quedarían sin municiones o sin fuerzas y los Grimm entrarían al reino y acabarían con todos. Algunos ya habían logrado infiltrarse, pero fueron neutralizados por los soldados, no sin antes causar algunas bajas.
—¡Señor, se nos están acabando las balas! ¡Tenemos que recargar!.
—¡Pues traigan más!.
—¡Señor, no podemos abandonar nuestra posición, dejaríamos un hueco por donde podrían entrar! ¡Ya somos pocos! .
Todos estaban abrumados por la situación. Esta invasión había sido una sorpresa total. Hacía poco, según los informes del general y del mismo director, no había ningún Grimm cerca del reino. Todos habían sido eliminados después del ataque del Colmillo Blanco. Eso había tranquilizado a la ciudadanía, a los soldados y a los cazadores. Significaba que el festival podría celebrarse sin incidentes, como estaba previsto. Pero en un instante, cuando esa llamada anónima se escuchó en el estadio de Amity, los Grimm aparecieron de la nada.
¿Dónde se habían escondido? ¿Cómo era posible que no los hubieran detectado? El problema no era solo ese. El problema era que, según los informes recientes, más Grimm se acercaban a gran velocidad. Venían de todas las formas y tamaños y era francamente terrorífico.
Los soldados de Atlas sentían miedo. Sabían que la situación no iba a mejorar. Pronto esos Grimm serían imposibles de repeler, incluso para los cazadores.
—¡Señor!
—Llama al general. Esto es muy grave. Dijo un alto mando que estaba cerca de ese pelotón. A lo lejos pudo ver cómo una niebla oscura se acercaba al reino. Pero no era una niebla, era una multitud de Grimm. Eran tantos que parecían simplemente humo.
—Sí señor. Dijo un soldado con temor mirando hacia esa nube.
Se escuchó otro grito a la distancia. Otro Grimm había pasado y acababa de matar a un soldado junto a una familia: una mujer, un niño y un hombre adulto.
—Maldición. Se lamentó el soldado.
—¡Cubran esa brecha! ¡No dejen que entren más! Gritó la orden y otro soldado reemplazó al caído y mató a tantos Grimm como pudo.
—Esto no tiene sentido. ¿Cómo diablos vamos a detener esto?
Ruby se sentía totalmente destrozada. Había visto a Mercury Black caminando por los pasillos que conducían a la arena de combate, pero eso era imposible. El tipo acababa de ser herido gravemente por su hermana, pero ahí estaba, como si nada. Algo no cuadraba. Mercury empezó a correr y Ruby lo siguió,no sabía por qué lo hacía, pero tenía que averiguar qué estaba tramando el idiota. Sin embargo, cuando estaba a punto de alcanzarlo, un incidente ocurrió. Se oyó un grito de dolor, un grito que reconoció al instante. Era un grito de horror, como si fuera un shock.
Caminó lentamente y se dirigió hacia la arena, dejando que Mercury escapara. Y ahí pudo ver a Pyrrha de rodillas, rodeada de restos metálicos esparcidos. Pudo distinguir un brazo, del que salían chispas y un líquido.
Y reconoció una cara. Era la chica extraña con la que se había chocado ese día en Vale. Pero ¿por qué estaba en ese estado? .
Estaba tratando de procesarlo.
—¿Penny? ,dijo ella en voz baja, avanzando hacia la arena de combate.
Todos los que estaban en el estadio de Amity salieron corriendo, excepto algunos. Y esos eran los estudiantes que aún observaban la escena.
¿Por qué demonios no se movían? Ni siquiera Naruto dio un paso, pero tenía los ojos cerrados. Estaba teniendo una conversación con su inquilino.
—Carajo, ¿así que vienen más Grimm, Kurama?
—Sí, puedo sentir su negatividad. No puedo decirte con exactitud cuántos son, pero te diré que vienen muchos. ¿Te acuerdas de la gran horda de Grimm con la que combatiste ese día? .
—Sí, me acuerdo. Estuve a punto de morir.
—Bueno, digamos que tal vez sea cuatro veces más grande.
—Puta mierda ,suspiró Naruto.— Bueno, supongo que se acabó el secretismo.
—Síiiii, fue bueno mientras duró. Acaba con ellos, muchacho.
Naruto abrió los ojos lentamente y procedió a levantar las manos lentamente en un signo de cruz. —Bueno, supongo que era hora de revelar los secretos. No quería que fuera de esta manera. De hecho, no quería que se enteraran de ningún modo... Pero qué más da. Es mejor ahora que nunca.
—Kage...
Y cuando iba a decir la palabra, el techo del estadio se derrumbó. Un Grimm entró. Era un acechador de la muerte, uno muy grande en realidad. Aterrizó contra la arena de combate cerca de Pyrrha, pero ella seguía sin reaccionar.
Ligeramente sorprendido, Naruto se preparó para saltar hacia donde estaba Pyrrha, pero no tuvo que hacerlo. Ruby se acercó directamente al Grimm y procedió a amenazarlo con una espada de Penny. Ella gritó fuertemente para que no se acercara, pero el Grimm no se sintió intimidado. Naruto simplemente vio la escena y sonrió. Parece que Ruby, a pesar del estado de shock, aún tenía algo que hacer. Y era proteger a Pyrrha.
—Bueno, acabemos con esto ,Naruto tomó el mango de su espada. Esta arma nunca fue usada en el torneo de Amity desde que fue forjada por él. Solo sería empuñada contra alguien y nadie más. Pero ahora se canceló el festival.
De repente también se escuchó un sonido, un silbido. Y el techo fue completamente destruido por innumerables casilleros que cayeron encima del Grimm. La bestia colisionó en el piso fuertemente.
Los casilleros se abrieron y se mostraron todas las armas de los estudiantes.
—Vaya, eso sí fue una entrada ,dijo Naruto.— Bueno, ¿por qué no nos unimos a la fiesta?.
Los estudiantes se armaron y atacaron al Grimm volador sin piedad. Lo aniquilaron por completo. Naruto no tuvo que intervenir, solo saltó desde su posición. Al caer, hizo una grieta en el suelo con la forma de sus zapatos. Se acercó a Pyrrha, que estaba en shock.
—No hay tiempo para esto ,le dijo Naruto, tocándole el hombro suavemente. Ella lo miró.—¿Estás bien?
—Naruto ,murmuró ella, con los ojos abiertos y a punto de llorar.
Entonces oyeron unos pasos firmes y fuertes. Era Jaune, que caminaba increíblemente hacia ellos. Pyrrha se asustó un poco y retrocedió. Acababa de matar a una persona, aunque fuera sintética esa persona era compañera de este chico rubio.
Él se acercó a la pelirroja con una expresión vacía y dura, pero sonrió con tristeza y le alzó las manos con las armas de Pyrrha.
—¿Qué? ,preguntó ella, confundida.
—No te confundas... Escucha, no tenemos tiempo para venganzas. Ahora no puedo ocuparme de esto. Vale está siendo invadida.
Ella seguía sorprendida y con la boca abierta.
—No me mires así. No tenemos tiempo para esto. Toma tus armas y enfréntate a los Grimm. Para eso te entrenaron ,le dijo el rubio, con los labios temblando pero firme—... Luego... luego podré llorar.
Jaune se giró y miró a Naruto. —Los Grimm están atacando, Naruto. Pero supongo que ya lo sabes.
—Sí, vienen muchos. Tenemos que actuar rápido ,respondió Naruto.
—Tenemos que proteger a los civiles y llevarlos a los bullhead para que los alejen de aquí ,dijo Jaune.
—Los robots y paladines estarán en el frente, un grupo de militares y cazadores darán apoyo en la retaguardia ,dijo Naruto.
—¿Lo escuchó, general? ,preguntó Jaune.
—《Es lo más óptimo》.
—con los equipos de ataque compraremos el tiempo necesario para que los grupos de evacuación puedan poner a todos a salvo ,dijo Jaune, con una mirada dura. Su expresión había cambiado. Ya no parecía el chico despistado y torpe que se veía a simple vista, sino un soldado experimentado y valiente.
—《Los llevaremos al pueblo más cercano》.
—Vale no podrá ser salvada, pero al menos podremos salvar a los ciudadanos. Necesitaremos toda la ayuda posible. Ahora tenemos que bajar de este estadio cuanto antes ,dijo Naruto.
Él también tenía el semblante serio, pero a diferencia del rubio de Atlas, él tenía un toque de ansia de batalla. Todos en el estadio miraban a Naruto y a Jaune, estaban fascinados por esa escena. Veían a los dos hombres que tenían todo bajo control. Ellos estaban un poco confundidos con lo que podrían hacer, solo pensaban en atacar a los Grimm, pero cuando vieron a Naruto y a Jaune planeando y tomando medidas contra la situación no pudieron evitar admirarlos.
—Tomaremos un bullhead y acabaremos con todas estas bestias, Jaune ,le dijo Naruto sonriendo a su amigo rubio.— ¿Podrás seguirme el ritmo?.
Jaune le devolvió la sonrisa a Naruto. —La pregunta es si tú podrás seguir el mío.
—¡Qué injusticia!, ¿por qué tengo que hacer todo yo?, Bueno, sé que el jefe no está de ocio ni nada, no es un vago, pero podría mandarme a mí en su lugar. Estoy seguro de que todo ese trabajo que hace es más bien ir de fiesta y hacer política, solo está persuadiendo a la gente y yo aquí haciendo el trabajo duro,...¡qué rabia!.
—Tengo que enfrentarme al Colmillo Blanco, lidiar con Cinder, cumplir el favor de Román y sobre todo asegurarme de que todo el caos siga siendo caótico,...es algo muy raro de decir.
Una figura caminaba por un bosque espeso en la noche, en ese bosque un montón de Grimm pasaban por donde él estaba, cuando lo veían lo atacaban, pero no les servía de nada, él los mataba en un instante.
También miraba al cielo como Grimm voladores se dirigían directamente al reino y a Beacon Academy.
—Vaya, esto sí que es impresionante, se han lucido, se han lucido. No entiendo cómo Cinder trajo a tantos Grimm,...se necesita más que un simple asesinato a una chica robot en un estadio para elevar el pánico en el público y la tanta negatividad en el aire.
La figura se tocó la barbilla con el dedo,—estos son muchos Grimm, para tener control absoluto de estas bestias esta tal reina de los Grimm debe ser muy poderosa. ¿Debería preocuparme por ella?.
La figura se encogió los hombros y le restó importancia. Un Grimm saltó sobre él, pero en un instante él alzó la mano y lo agarró del cuello.
—¿En serio, chico? Ustedes deberían tener algo de sentido de autopreservación para ser bestias estúpidas. Esa reina suya debería darles una advertencia, no sé, como simplemente: Oye, solo ataquen cuando estén en el reino, no ataquen a cualquier estúpido que aparezca en el camino porque no es su misión. Algo así. Esa señorita necesita dar órdenes más específicas. Perdón por esto.
La mano del sujeto se apretó y mató a la bestia. El hombre enmascarado se miró la mano y vio como ese rastro que podría haber sido sangre se esparcía en el aire y desaparecía.
—La verdad es que su fisiología es muy interesante de hecho. Es increíble que no dejen rastro una vez que mueren. Esos pozos deben tener un compuesto interesante. Me pregunto quién diablos los ha creado. Siempre hay un origen en todo.
La figura siguió caminando y cada vez que aparecía un Grimm los mataba.
El hombre entró a un claro en el bosque. Era hermoso, iluminado por la luz de la luna destrozada.
—Este claro sería un sitio ideal para acampar con los amigos. El hombre paró una garra de un ursa con la mano y la rompió como si fuera cartón. Luego señaló con el dedo a la cabeza del enorme animal. Una descarga eléctrica lo carbonizó y lo despedazó.
—Sí, creo que tienes razón amigo.
El hombre caminó hacia el centro del claro y sacó un kunai de tres puntas. —Espero que hayas practicado, jefe, porque si no esto será una pérdida de tiempo. La verdad es que no me apetece hacer el trabajo yo solo. No saldrá bien si él participa en la pelea, activamente claro.
Clavó el kunai de tres puntas en el suelo y esperó pacientemente. Esperó y esperó, pero nada pasaba. Esto era muy extraño, no debería tardar ni un momento, ni siquiera un segundo en ocurrir algo.
—Qué mierda, ¿es en serio? ,se frustró el hombre.— ¿Qué madres? ¿Es en serio? Se supone que ya debería estar aquí, hace unos cinco minutos.
Y de repente una luz cegadora apareció y desapareció en un instante, como si hubiera sido un relámpago. Y se vio la silueta de un hombre con una túnica negra.
El hombre estaba parado, con la mirada perdida. Alzó la cabeza y miró la luna. Dio el primer paso con su pierna izquierda, pero se tropezó y cayó de rodillas. Se tambaleaba como si estuviera borracho, pero no lo estaba. Se tocó la cabeza como si le doliera. Intentó levantarse de nuevo pero volvió a caer de rodillas y se agarró la cabeza con las dos manos. Se estaba arrancando los cabellos.
El sujeto que lo había convocado se preocupó mucho por el convocado.
—¡Jefe! ,gritó alarmado el clon al ver al hombre que acababa de aparecer con un destello . El recién llegado se dobló y empezó a echar la pota.
—Guácala. ¿Qué le pasa? ¿Es por el viaje? No es nada cool para usted, jefe le dijo el clon con sarcasmo.
El hombre que resulta ser Sasuke le devuelve una respuesta haciendo un gesto obsceno con la mano.
El hombre se limpió la boca con el dorso de la mano y se incorporó con dificultad. —Por... kami, esto no debería suceder. ¿Será un efecto secundario del hiraishin?, Es una estupidez. A Naruto no le pasaba esto cuando lo vi ,se quejó el hombre vestido de negro.
—Quizás sea porque usted no domina los fundamentos de esta técnica y solo los estaba imitando. Y bueno, usted no tiene ni idea de cómo se hace esa técnica correctamente ,le reprochó el clon.
—Quizás tengas razón, maldita sea... ¿No tienes agua?
—Lo siento, no tengo agua ,respondió el clon.
El hombre suspiró y se puso de pie. Miró a su alrededor y vio el kunai clavado en el suelo.
—Mierda, ¿cómo va la situación? ,preguntó Sasuke.
—Pues como debe ir, hecha un caos.
—¿Eso es bueno o malo? ,se confundió Sasuke.
—Es un caos bueno, todo está saliendo según el plan.
—El plan de Cinder querrás decir ,dijo Sasuke mientras se ponía la capucha y sacaba una máscara blanca de su túnica y se la colocaba en la cara.
—El plan de ella es increíblemente simple en realidad. Y yo pensando que era algo más complicado, como usurpar el poder de los altos mandos de Vale, o matar al director, o... no sé, poner a un títere en el puesto de director para controlar todo Beacon. Pero no... supongo que lo simple funciona ,dijo el clon.
—Bueno, supongo que hasta aquí termina mi trabajo jefe. ¿Me puedo disipar?
—Sí puedes, necesitaré toda la energía posible por si me encuentro con él.
—Entendido ,y el clon se desvaneció en una nube de humo. El hombre se quedó solo en el claro.
—La vista es completamente desoladora ,murmuró al ver el paisaje oscuro y siniestro por el enjambre de Grimm.
El hombre respiró hondo y suspiró. Su mano empezó a temblar, a pesar de las cosas que estaban pasando y que él podía evitar, no iba a mover un dedo para salvar el reino ni a ninguna vida que estuviera en él. No tenía por qué hacerlo, porque él era el enemigo y tenía que ayudar en esto. Su trabajo y su misión era destruir el reino. Y aunque se lo repitiera muchas veces, la verdad era que estaba dudando y temiendo.
sabía que lo que esta haciendo era una ilusión, una mentira que se había contado a sí mismo para justificar sus acciones. No había nada posible en este mundo cruel y corrupto. Solo había guerra, odio y sufrimiento. Y él era parte de eso, él era el causante de eso. un asesino, un monstruo.
Se preparó para seguir su camino, pero antes miró una última vez el kunai que había dejado atrás.es un arma importante que podría ayudarlo en la batalla, pero no importa ,él tenía 2 de esas.
Ese kunai representaba más que una simple técnica para asesinar a la gente, ese kunai y esa técnica fue realizada con el único propósito de acercarse a la persona que más amas, para que cuando ella necesite ayuda estés ahí para ella, fue creada por el cuarto Hokage para el amor de su vida, pero este día sera usada para el fin de un reino.
Hizo una reverencia, luego caminó lentamente hacia Vale, dejando el claro vacío y silencioso.
—Si fuera de otra manera... si la humanidad y los faunos se entendieran entre sí, si solo ellos se unieran para luchar contra el verdadero enemigo que tienen delante. Yo no tendría que hacer esto. Cuando el mundo conozca el dolor podrá comprenderse entre sí y habrá... habrá paz Delilah.
—¡Mantengan la formación!, ¡no se desanimen ni se rindan!. ¡Esto no es para luchar contra ellos, es para proteger a todos!, ¡Si todos sobreviven, esta victoria está asegurada!, ¡El reino se derrumbará, pero podrá ser reconstruido mientras haya ciudadanos! ¡Ahora no se detengan, sigan adelante!.
Así gritaba Jaune a un pelotón de soldados que formaban un escudo humano, mientras los robots y los paladines de Atlas atacaban a los Grimm. El enjambre era inmenso, pero los contenían mientras evacuaban a los ciudadanos.
Activó su intercomunicador. —Naruto, ¿cómo va el lado Este?.
—《Los tenemos bajo control, la formación no dejará que ningún Grimm pase》.
—Bien, mantenlo así. Luego abrió otra línea. —Especialista Krill, ¿cómo va el lado Sur?.
—《Los tenemos bajo control, señor... p-pero la verdad es que deberíamos... quizás》.
—¡No nos retiraremos!. Tenemos que estar aquí el tiempo suficiente para evacuar a todos, ¿me oíste?.
—《Sí, señor》. Dijo el especialista con miedo.
Se preguntarán por qué un especialista está recibiendo órdenes de un simple soldado, que es estudiante de cazador y que ni siquiera se ha graduado, no los ha intimidado ni nada. La respuesta tiene más que ver con que en los momentos de paz se puede decir que ninguno de los especialistas que están activos en el reino de Atlas ha vivido nada parecido a una invasión, ni siquiera Jaune.
Pero él era reconocido como un gran héroe, y también podría decirse que él se ha enfrentado a algo muy parecido a una horda de Grimm en una de sus tantas misiones. Una vez que bajó y descendió del estadio de Amity, procedió a tomar el mando, sin importar las quejas de todos. Además, los soldados lo aceptaron de buena gana y decidieron seguirlo, pues a diferencia de los demás líderes de Atlas, Jaune siempre se quedaba en el frente con ellos a combatir.
Jaune abrió otra línea de comunicación. —Flynt, Neón, ¿cómo va la evacuación?.
El tiempo era crucial, no podían demorarse mucho. —《¡Estamos en eso!》, gritó Flynt. —《Son demasiados ciudadanos》.
—《Los bullhead no nos dan abasto》, gritó Neón. —《Tardaremos más tiempo, por favor, resistan》.
—Entendido. Dijo Jaune y cortó la línea de comunicación. Podía ver Grimm tras Grimm llegando. No importaba cuántos mataran, seguían viniendo.
Jaune apretó los dientes y levantó su mano y señaló a los Grimm. —¡No les daremos ni un centímetro de terreno! ¡Luchen con todo lo que tienen! ¡Por Atlas! ¡Por Remnant! ¡Por nuestros amigos!.
Los soldados gritaron con fuerza y se lanzaron contra los Grimm con más coraje. Jaune sabía que era una lucha sin esperanza, pero no iba a claudicar. Tenía un compromiso que honrar. Tenía que frenar a Cinder. Tenía que proteger el mundo.
Pero sobre todo, tenía que sobrevivir. Porque él era Jaune Arc y él nunca se rendía.
—Esto se está poniendo más difícil de lo que pensé, la formación no aguantará mucho más, Sería genial que solo hubiera Grimm terrestres, pero los malditos monstruos también atacan por el aire.
Un gran ursa logró colarse y avanzó hacia el centro del reino para poder atrapar a cualquier presa. Jaune no lo iba a permitir, cerró su puño y un potente golpe impactó en el pecho de la gran bestia y lo mandó a volar de vuelta a la multitud.
Jaune en un momento de valor o locura caminó hacia adelante y se paró al lado de los paladines y los robots, todos vieron esa acción con asombro, ¿por qué diablos su líder fue hacia adelante?.
Jaune luego sonrió hacia el gran ejército de Grimm, —¡OÍGANME MALDITOS IMBÉCILES!, ¡¿DE VERDAD CREEN QUE USTEDES HAN TRIUNFADO?!, ¡NO IMPORTA CUÁNTAS VECES USTEDES ATACEN CUALQUIER POBLACIÓN HUMANA O FAUNA! ¡NOSOTROS NOS RELEVAREMOS!, ¡ESTO NO SE QUEDARÁ ASÍ!, ¡UNA VEZ QUE TERMINE DE EVACUAR A LOS CIUDADANOS DE VALE VOLVERÉ POR USTEDES!.
Se dio vuelta y caminando de regreso hacia los demás soldados, todos miraban con admiración las acciones de Jaune. Y de repente una explosión se escuchó por el centro de Vale, Jaune abrió los ojos, ¿cómo era posible?, ningún Grimm logró pasar la formación, claro que algunos pasaron antes de que él llegara, pero fueron aniquilados por él mismo y Naruto, y los demás cazadores y estudiantes.
—¿Por qué diablos hay explosiones allá?, recibió una llamada del intercomunicador y era Naruto.
—《Jaune, maldita sea. Esto se complicó》.
—¡¿Qué pasó Naruto?!. Gritó Jaune.
—《¡Colmillo Blanco, están atacando!》.
—¿El Colmillo Blanco?, ¿en serio?, ¿justo ahora?, ¿en medio de este caos?. Está bien, Naruto, quiero que vayas y acabes con..
¡pumm!
Un proyectil de polvo de fuego impactó en el hombro de Jaune que lo mandó a volar, él cayó en el suelo, pero se levantó y quedó de rodillas.
Su mirada se oscureció de ira, luego alzó la vista y vio a miembros del Colmillo Blanco que empezaron a disparar a sus soldados y también a disparar a los robots y a los paladines.
El rubio apretó los dientes con furia y se puso de pie.—¡Estos tipos están locos!,pensó mientras esquivaba una ráfaga de balas. —¡No les importa nada más que su odio!
—Malditos idiotas, ¿cómo se atreven...? ¿Cómo se les ocurre hacer esto, en medio de lo que está pasando?,murmuró con furia.
—No crean que seré benevolente con ustedes.
El estruendo del metal chocando contra el metal resonaba en todo el campo de batalla, junto con los alaridos de las personas y los disparos de polvo.
Todo se había complicado en un instante. Todo iba bien, la formación se mantenía firme, los Grimm no podían pasar, era una formación perfectamente equilibrada. Pero el Colmillo Blanco empezó a atacar y no solo en la formación para dejar entrar a los Grimm, sino también en el centro de Vale, asaltando a cualquiera que se cruzara en su camino.
Naruto tuvo que reaccionar rápidamente. No podía matar a los idiotas porque todos lo verían, pero podía herirlos mucho, los hizo sufrir mientras luchaba contra todos ellos y aniquilaba a cualquier Grimm.
—Oye mocoso, creí que ya no te ibas a contener. Mata a los imbéciles de aquí, usa clones y acaba con todos.
Naruto esquivó una bala de polvo y luego lanzó un shuriken al miembro del Colmillo Blanco, haciéndolo caer de dolor.
—Lo pensé muchas veces, pero prefiero mantenerlo así.
—¿En serio? Porque no te entiendo la verdad. ¿Por qué simplemente mantienes tus habilidades escondidas? Podrías simplemente acabar con todo esto. Tal vez quizás salvar el reino.
—Lo pensé también. El problema con mostrar todo lo que hago es que habrá demasiadas preguntas y francamente prefiero ahorrarme esas molestias. Además de que la paranoia de tener a alguien como yo puede causarme problemas.
Naruto bloqueó un puño que iba directamente a su rostro con la mano y luego torció la mano del sujeto y con su mano libre le dio un golpe en la cara, rompiendo la máscara del miembro del Colmillo Blanco.
—Bueno, yo no te mataré, pero es seguro que un Grimm podrá comerte. Se dio media vuelta y siguió atacando a los demás.
—Lo entiendo, pero eso también significa que tú no des todo de ti y pongas fin a esto. ¿Qué te importa si se rebelan contra ti? Acaba con ellos, no hay problema. Cualquier bicho que se interponga lo vas a aniquilar, nadie te puede detener en este mundo.
—Sasuke podría hacerlo. Dijo Naruto recordando a su otro yo.
—Lo sé, él es el único que puede y el tonto no se está reprimiendo. Mientras tú estás aquí luchando con un shuriken y solo con un rasengan, dime, ¿hay algún motivo por el que te estás limitando tanto? Porque me irrita verte así, sujeto a estas normas humanas.
—Es muy simple Kurama. Porque si revelo que tengo técnicas así y que nadie ha visto en el mundo, entonces habrá cuestionamientos. Cuestionamientos que llevarán a decir: Oye Naruto, ¿quién eres tú en realidad? Nadie hace lo que tú haces. Y luego cuando me niegue a responder eso, exigirán e insistirán. En algún momento ellos conectarán los puntos y se darán cuenta de que yo hago lo mismo que Sasuke, el idiota que acaba de provocar todo esto. Dijo Naruto señalando con sus manos a todo el reino en caos.
—¿Y qué? ¿Qué te importa lo que piensen o digan? ¿Qué te importa si te odian o te temen? Tú eres más fuerte que todos ellos juntos. Tú eres el único que puede acabar con esta locura. Tú eres el único que puede enfrentarse a Sasuke y vencerlo. ¿Por qué te preocupas tanto por lo que opinen unos humanos insignificantes?.
—Porque yo también soy humano, Kurama. Porque yo también tengo amigos aquí. Porque yo también quiero vivir en paz y armonía. Me importa lo que ella piense de mí.
El zorro de las 9 colas bufó divertido. —Idiota, si yo fuera tú ni siquiera me preocuparía.
—Sí, Naruto suspiró. —Pero no lo eres, y a mí sí me preocupa.
Desde el cielo una gran sombra se cernió sobre Naruto, era increíblemente grande.
—Vaya, así que este es el gran acorazado de Atlas... no está mal, pero es un poco raro, el enemigo estaba al otro lado, pero este acorazado se dirigía directamente a Beacon.
—¿Qué demonios está pasando? Él debería estar aquí atacando al enemigo, ¿por qué va en esa dirección? .
Luego vio cómo un bullhead que iba directamente a ese acorazado explotó. Naruto lo observó con mirada calculadora.
—Algo no está bien, Kurama.
—No me lo digas, chico, a tu izquierda.
Naruto esquivó una garra de un ursa y con su kunai atacó directamente en la yugular de la gran bestia matándola al instante.
—¿Por qué no usas tu espada? Preguntó Kurama.
—Todavía no ha llegado el momento Kurama,todavía no.
Naruto siguió avanzando hacia el acorazado, esquivando y eliminando a las criaturas del Grimm que se le cruzaban en el camino. Tenía la sensación de que algo malo iba a pasar y quería averiguarlo.
—¿Crees que Sasuke esté detrás de esto? Preguntó Kurama.
—No lo sé, pero no me sorprendería. Dijo Naruto con rabia.
—¿Y qué vas a hacer cuando lo encuentres? ¿Vas a seguir conteniéndote o vas a usar todo tu poder?
—Eso depende de él, Kurama. Si él quiere pelear en serio, yo también lo haré. Pero si él quiere hablar y razonar, yo también estoy dispuesto a escucharlo. Dijo Naruto con determinación.
—Eres demasiado blando, chico. Él no merece compasión ,Él solo merece tu ira y tu castigo. Dijo Kurama con desprecio.,— ¿acaso olvidaste lo que le hizo a Rubí?
—no ,no lo he olvidado...haaaaj, quiero pensar que hay algo en su historia que lo hace actuar así, Tal vez sea porque es exactamente igual a mí que quiero que el sé redima,Dijo Naruto con nostalgia.
—Eres un iluso, chico. Tal vez él te haya dicho abiertamente que no tiene nada en contra de ti, pero personas como él saben ocultar muy bien sus intenciones.. Él solo quiere destruirte, a ti y a todo lo que te importa. Dijo Kurama con severidad.
Naruto no respondió.
—¡Flynn! ,gritó Neón a su compañero,—Un bullhead ha llegado, sube a los demás.
—Entendido,muy bien, vayan arriba y por favor suban, los llevará lejos de aquí.
Los ciudadanos asintieron con la cabeza al estudiante de Atlas y subieron. —Esto va a tomar mucho tiempo. No tenemos suficientes bullhead y el Colmillo Blanco también está atacando.
Neón y Flynn y un gran grupo de estudiantes, al igual que soldados de Atlas y algunos robots Atlas y paladines estaban en Beacon Academy. Ellos evacuaron a la mayoría de la gente de Vale y los trajeron a esta academia, pues era un lugar muy seguro. Eso debió haber sido, pero en un instante el Colmillo Blanco apareció y atacó. Esto era completamente desalentador. Los estudiantes no tuvieron más opción que enfrentarse a los faunos. Podrían simplemente acabar con ellos matándolos, pero se contenían para no causar más bajas de las que ya había. Pero ellos eran muchos y numerosos, y la mayoría de los estudiantes y los demás soldados estaban allá en Vale, conteniendo la horda de Grimm.
Se escuchó el sonido de hélices. Eran dos bullhead que estaban llegando. Hacían esto, era un poco complicado por la escasez. Hacían viajes de ida y vuelta para traer a más ciudadanos y dejarlos en el pueblo más cercano. Era un poco tardado pero era lo mejor que tenían.
—Maldita sea, ¿cómo es posible que algo así pasara en este festival? Esto obviamente no fue al azar. Ya tiene tiempo de planificación y pensar que fue Cinder... Jaune debe estar devastado... y Penny ,dijo Neón.
Lo que no se dieron cuenta ellos y ninguno de los cazadores era que algo se orquestaba en la oscuridad, entre sus narices. Un robot atleciano que estaba defendiendo a los ciudadanos, que estaba haciendo un perímetro parpadeó en rojo y luego se dio la vuelta. Rápidamente con su arma apuntó a una mujer y le disparó.
Todos los estudiantes miraron en silencio. Ese robot acababa de matar a un ciudadano. Pero eso no fue todo. Muy pronto los demás robots también apuntaron a los ciudadanos. Entonces Neón y los demás estudiantes procedieron a interponerse, atacaron a los robots.
Flynt no daba crédito a lo que presenciaba. De repente una sombra lo cubrió. Encima de él un paladín atleciano lo estaba apuntando con sus armas. —¿Qué está pasando aquí? .
El paladín disparó una ráfaga de balas hacia Flynt, quien apenas pudo esquivarlas con su saxofón. Neón vio la escena y se lanzó hacia el paladín con sus patines, golpeándolo con su bastón luminoso.
—¡Flynt! ¿Estás bien? ,preguntó Neón preocupada.
—Sí, sí, estoy bien ,respondió Flynt mientras se levantaba,—Pero esos robots están locos. ¿Qué les hicieron? .
—No lo sé, pero tenemos que detenerlos antes de que maten a más gente ,dijo Neón.
Román Torchwick suspiró frente a una pantalla en el acorazado de Atlas. Fue una jugada muy astuta que lo capturaran justo en ese lugar. Cinder lo había planeado de alguna manera. Él era una pieza clave para el futuro ataque que se iba a realizar en Vale, así que el general no se arriesgó a ponerlo en una simple prisión de Vale. Lo llevó directamente a su arma más poderosa, lo cual le resultó muy conveniente. Escapó gracias a la ayuda de su cómplice Neo, se liberó, mató a todos los soldados de esa gran nave y tomó el control de la misma.
Pero no bastaba con haberse apoderado del acorazado. Aún tenía algo que hacer, algo que le había encargado su jefa, y aunque no le gustara, debía cumplirlo. De su bolsillo sacó su pergamino, lo miró con desagrado y frunció el ceño.
Insertó el dispositivo en una ranura que estaba frente a él y se cargó un programa. Todas las pantallas parpadearon en rojo y volvieron a su color original en un instante. —Ya está hecho ,murmuró para sí mismo.
—《Espero que el trabajo ya esté hecho, Román》 ,la voz era completamente serena, como si ya supiera que él iba a llamar en ese momento.
—El virus está cargado. Ahora tengo pleno acceso a todos los dispositivos de Atlas.
—《...Muy bien... muy bien. Quiero que los programes para atacar》.
—De acuerdo ,Román presionó los botones del panel de mando del acorazado. Esta nave en particular tenía acceso a toda la maquinaria de Atlas que vino a Vale por el festival,—Programado para atacar a los cazadores y a los estudiantes.
—《No》 ,Cinder habló de nuevo, interrumpiendo lo que iba a hacer.— 《Román, quiero que ataques a todos》.
—Cinder, son civiles.
—《¿No me escuchaste, Román? ,Ataca a todos》.
—...Entendido ,Román lo programó de esa manera. Las armas atlesianas iban a atacar a todos, sin distinción de género o raza.
—Está hecho, Cinder ,Román suspiró y luego simplemente miró las pantallas. Vio cómo todos los paladines se volvían en contra de su propósito original: proteger a la gente. —Están atacando ahora.
—...《Excelente trabajo, Román》.
—Ya sabes el acuerdo, Cinder ,Román puso una cara seria.—Tus Grimm no las atacarán y tú no irás en contra de ellas.
—《Tranquilo, Román. Tus sobrinas estarán a salvo. No las atacaré y los Grimm tampoco. No puedo decir lo mismo de los paladines, pero ellas serán lo suficientemente inteligentes como para evitar el problema. Soy una mujer de palabra》.
—Eso... me alivia ,Román no le creyó. Eran palabras vacías de una criminal que lo tenía chantajeado. Y la llamada se cortó.
—Neo ,Román pronunció su nombre, el nombre de su fiel compañera que apareció junto a él.— Creo que ya hemos cruzado la línea, jeje. Nunca creí que sería capaz de hacer todo esto. He hecho muchas cosas malas, pero llegar a este punto... en verdad ya estoy condenado, jejejeje ,Román rió con tristeza.
Miró a su compañera a los ojos. La pequeña chica lo miraba.—¿Puedo pedirte un último favor? Ya sabes, antes de que todo esto termine.
La chica retrocedió unos pasos. No le gustaba el tono con el que hablaba.—Es muy probable que no salga vivo de esta. Y aunque sobreviva, creo que no tendré el valor para seguir... Es muy posible que me entregue a las autoridades y lo más seguro es que me ejecuten.
La chica se asustó."No".
—No te preocupes, lo prefiero así. Ya era hora... Hace mucho tiempo que ya estoy muerto, solo seguía por ellas, pero ellas estarán mejor sin mí... Ellas ,su voz se quebró, al borde del llanto, pero se mantuvo firme.— Ellas ya ni siquiera me recuerdan, me aseguré de eso.
La chica negó con la cabeza. "No". Quería decirle que no era verdad, que sus sobrinas lo amaban, que ella lo amaba. Quería abrazarlo y consolarlo. Quería huir con él de ese infierno.
Roma sacó algo de su bolsillo y se lo dio a Neo. —Cuando todo esto acabe, por favor, dale esto a Rubí. Jeje, claro, no quiero que vayas a su encuentro y se lo des, solo déjalo cerca. Eso es todo.
El silencio era sepulcral y triste.
—Sabes, por un momento pensé en pedirte que tomaras a Yang y a Rubí, las dejaras inconscientes y las sacaras de aquí, directamente a Patch, pero sé que no te alejarás a más de 100 metros de mi lado ,Román rió divertido. —Es un poco frustrante que después de todos estos años nunca pude lograr que me obedezcas. Fueron muy raros esos momentos en los que me hiciste caso.
Neo movió las manos tratando de decirle algo a Román, pero era muy rápido, estaba muy nerviosa. Ella no quería que Román hiciera esa locura. ¿Qué haría si él se iba?
—Neo, no puedo escapar de esto, ya basta. Fue entretenido los años que pasamos juntos, pero incluso yo tengo un peso en la conciencia enorme... ya es suficiente.
Neo trató de hablar. Por un instante consideró noquear a Román y escapar de ahí, pero él no lo iba a aceptar . Si ella hacía eso, había una gran posibilidad de que él la odiara para siempre y se abstuvo de hacerlo.
Román sonrió. Se sentó en el asiento del piloto. —Este asiento es muy cómodo. Puedes irte... ah, una cosa más Neo: asegúrate de que Rubí y Yang estén bien.
Neo no se movió, aún seguía ahí, con el objeto que Román le dio. —Neo, por favor, ya es hora de que te vayas ,Neo asintió mansamente con la cabeza y desapareció.
Las facciones de Román eran caídas. Estaba triste y muy solitario en ese acorazado lleno de cuerpos. Se sentía muy solo y sobre todo decepcionado de sí mismo. Al final así es como él iba a terminar.
—Mujer de palabra, ¿verdad Cinder? Es una lástima que en verdad no te crea nada.
Román tomó su pergamino y marcó un número. Esperó a que la llamada se conectara y ahí estaba.
—《Hola Román》.
Todo se había desmoronado y el caos reinaba por una causa desconocida. El general Ironman tenía la sospecha de que algo no iba bien y no se equivocaba.
—¡Maldición, Román! ,exclamó Qrow con ira,— ¿Cómo se te ocurrió ponerlo en tu maldito acorazado, James? Deberíamos haberlo encerrado en una prisión de Vale.
—Una prisión de Vale no habría sido suficiente para detener a Román ,respondió James. —Él es muy hábil y siempre se las arregla para escapar.
—¡Ya basta de discutir! ,intervino Glynda, interponiéndose entre James y Qrow. —Esto se está saliendo de las manos. No podemos perder el tiempo en peleas. Tenemos que atacar y proteger a los civiles.
—Tienes razón, Glynda ,admitió James con un suspiro,— Esto es inútil. ¿Qué hacemos ahora?
Una enorme oleada de Grimm se acercaba a ellos. Se prepararon para luchar, pero en un instante todos fueron destrozados por una silueta que pasó frente a ellos. Era muy rápida, casi invisible.
—Eso fue muy rápido ,dijo Qrow con asombro.— ¿Quién fue ese tipo? Solo conozco a dos personas que se mueven a esa velocidad: Naruto Uzumaki o Jaune Arc.
—Sí, es lo más probable ,coincidió Glynda, que lanzó su fusta contra un Grimm que se acercaba y lo hizo volar.— Esos dos chicos son realmente excepcionales. Espero que ellos hagan la diferencia en esta invasión, pero el reino está perdido en este momento.
—Me sorprendió mucho que tu soldadito haya tomado el mando de sus superiores ,comentó Qrow refiriéndose a Jaune.
—Jaune siempre fue un soldado excepcional desde el primer día. Tiene una mente brillante y muy perspicaz. Tal vez pueda parecer torpe a simple vista, y lo es, pero cuando llega el momento él toma las riendas del asunto y siempre está al frente. No puedo pedir mejor soldado ,dijo James con orgullo.
Naruto corría a toda velocidad hacia el acorazado, eliminando a cualquier Grimm que se cruzara en su camino. Sentía que tenía que llegar allí, Kurama le había dicho que solo detectaba una presencia humana en todo el vehículo, lo cual era extraño. La nave se dirigía a Beacon, y Naruto no podía permitir que pasara nada malo.
Pero en su carrera, se detuvo al ver a sus compañeros de equipo: Ren y Nora, que luchaban contra los Grimm. Naruto notó algo raro en ellos, y se acercó preocupado.
—¡Ren, Nora!
—Naruto ,respondió Nora, mientras aplastaba a un ursa con su martillo. Ren también usaba sus armas para acabar con los enemigos.
—¿Dónde está Pyrrha? ,preguntó Naruto.
—Pyrrha... bueno... ella... ,Nora vaciló. —Pyrrha nos pidió que no te diéramos su ubicación.
—Nora ,Naruto se puso serio. —¿Dónde está Pyrrha?.
—E-ella dijo que no te lo dijéramos...
Naruto la miró fijamente. —...Está con Ozpin, ¿cierto?
Nora no respondió, pero sus ojos lo delataron.
—¡Maldición! ,Naruto se enfadó y asustó a Ren y a Nora. —Lo siento, no era mi intención asustarlos ,se disculpó Naruto y sacó su pergamino. Marcó el número de Pyrrha, pero no contestaba. Lo intentó varias veces, pero nada. Guardó su pergamino frustrado.
—Bueno, supongo que ha llegado el momento ,dijo Naruto, mientras sacaba un kunai de tres puntas y se preparaba para hacer algo. Ren y Nora lo observaron con curiosidad.
Hacía 5 días, Naruto había hecho algo a escondidas de sus amigos. Mientras todos dormían él había usado su tinta para sellos y había hecho una pequeña marca en la espalda de cada uno de ellos. Era tan pequeña que apenas se notaba, pero le había costado mucho trabajo hacerla. Sobre todo con las chicas, ya que tenía que levantarles la ropa. Naruto había resistido la vergüenza y el deseo de hacer otra cosa. Esa marca era una especie de seguro en caso de que alguno de ellos hiciera algo peligroso o fuera a un lugar donde no debía estar.
—Naruto, ¿qué vas a hacer? ,preguntó Ren.
—Voy a traer a Pyrrha de vuelta, esa tonta. Ozpin solo la está usando, no sé para qué, pero no puede ser nada bueno.
—No lo hagas, Naruto ,dijo Ren con voz firme. —No tenemos tiempo para eso. Mira a tu alrededor ,señaló a todos lados. —Todo está hecho un caos, no puedes simplemente irte, necesitamos toda la ayuda posible.
—Ella también necesita ayuda —,dijo Naruto, concentrándose. Había hecho esta técnica casi mil veces, pero nunca a tanta distancia. Tenía que localizar el sello.
—Ella es una gran cazadora en entrenamiento y una de las mejores ,insistió Ren. —Ella puede cuidarse sola.
— ella.
—ella puede cuidarse sola Naruto ,Ren lo callo.
Naruto en todo momento no dejo de intentar localizar el sello ,tenía mucho en su mente, tenía que ir con Pyrrha, sabía que algo malo iba a pasar,el suspiro y simplemente procedió a seguirlos.
En los pasillos desiertos de Beacon, solo se escuchaban los pasos apurados de Ozpin y Pyrrha Nikos.afuera el sonido de la invasión era terrible y aterrador, pero dentro solo reinaba el silencio. Ambos se dirigían hacia un elevador.
— Espero que el señor Uzumaki lo entienda. Luego hablaré con él,murmuró Ozpin, pulsando un botón del elevador.
Pyrrha no dijo nada. Ella había aceptado la propuesta que Ozpin le había hecho antes, la cuál había rechazado por la intervención de Naruto. Ahora, ante el ataque sorpresa y devastador de los Grimm ella había ido a buscar a Ozpin para ofrecerse como voluntaria. Quería recibir el poder para evitar que cayera en manos equivocadas, en manos de quien había dejado a Amber en ese estado crítico.
Ozpin no le hizo ninguna pregunta. Simplemente la llevó al elevador más cercano. No había tiempo que perder. La persona que había atacado a Amber y sus cómplices seguramente estarían en camino a Beacon para acabar con su objetivo. Había que actuar rápido.
El elevador bajó en silencio. Ninguno de los dos habló. Ozpin sostenía su bastón con sus manos. El director estaba pensando en las consecuencias de lo que iba a hacer. Por un lado, estaba el beneficio: al transferirle el poder a Pyrrha, el atacante de Amber no obtendría el poder completo de la doncella. Por otro lado, estaba el costo: había involucrado a una chica inocente y bondadosa en un destino cruel y despiadado: una vida de persecución donde nunca tendría paz ni tranquilidad. Pero también tenía que explicarle a Pyrrha algunos detalles que no le había dicho sobre el proceso de transferencia del poder de la doncella.
Cuando el elevador llegó a su destino, entraron en una habitación fría y oscura. Era un búnker debajo de Beacon, donde estaba conectada a una máquina enorme Amber, la doncella moribunda. Estaba en coma, agonizando y sucumbiendo. Su destino era inevitable: moriría.
Ozpin se acercó a la cápsula donde yacía Amber y tocó el cristal con su mano, observando con pesar a la joven. Ella no se merecía ese destino, pero la vida era cruel. Nunca se podía predecir lo que iba a ocurrir, y por desgracia para ella, su vida no tuvo un final feliz ni tampoco una buena existencia. Solo esperaba que en algún momento haya disfrutado de momentos de felicidad y de compañía, pero eso nunca lo sabría. Solo se consolaba pensando que ella alguna vez fue feliz. Quitó la mano del cristal y miró a Pyrrha.
— ¿Comprendes las implicaciones de aceptar esto, verdad? ,preguntó Ozpin con seriedad.
— Lo comprendo, director Ozpin, y estoy dispuesta a asumirlo ,respondió la pelirroja con firmeza.
Ella bajó la mirada y observó el frío suelo de ese lugar.
— Los Grimm han invadido Beacon, han atacado Vale y están exterminando a todos los ciudadanos. Si este poder de la doncella que me menciona es tan increíble como lo dice, entonces es una oportunidad de acabar con ellos y salvar al mayor número de personas posible.
— Sabes que si aceptas este poder, la que hirió a Amber vendrá por ti ,dijo Ozpin.
— Lo sé y estoy dispuesta a enfrentarme a ella y a cualquiera si es necesario.
Ozpin, con la mirada calmada pero con el corazón apretado, continuó:
— Sabes lo que significa enfrentarte a ella, ¿verdad?
— ...Sí... Un final inevitable... Una muerte de una de los dos.
— ...No solo eso, Pyrrha. Ozpin la miró a los ojos y le preguntó con sinceridad:
— ¿Estás segura de querer hacer esto?,Ozpin volvió a preguntar, no quería que la chica tuviese dudas de la decisión que estaba tomando.
— Sí, estoy segura, hagámoslo.
—... Hay algo más que debes saber. Algo que no te dije antes. Algo que quizás cambie tu decisión.,Ozpin caminó alrededor de Pyrrha y le dio la espalda.— Esto no es simplemente pasar el poder de Amber a ti nada más.
— Es un traslado de poder, dijo Pyrrha.
—No ,es más como un traslado de esencia en sí, como el poder de la doncella no te se es dado naturalmente ,entonces tendré que forzar el poder de Amber hacia ti, Lo que implica también llevar cierta parte de ella hacia ti Pyrrha.
Ozpin dio pequeños golpecitos en el piso con su bastón ,en verdad estaba un tanto temeroso de lo que iba a decir ,lo que implica decirle esto a Pyrrha, por que es probable que ella tenga dudas y escape
–Es que no es seguro al 100% de que cuando tú adquieras el poder de Amber seas tú .
—¿A qué se refiere director?, ella estaba dudosa lo que implicaba eso.
— Amber morirá completamente O podría vivir en ti, es a lo que me refiero.Y no me refiero a compartir conciencia ni nada de eso, me refiero a que todo en tu alma se entrelazará ahí ,se mezclará.Es una posibilidad alta y muy teórica, pero es muy probable que cuando salgas de esa máquina no seas tú la que uses tu cuerpo sino Amber, O tal vez ni siquiera seas Amber ni tú misma ,sino otra persona nueva...
Pyrrha lo interrumpió ,—o puede ser que sobre todo eso siga siendo yo ,Pyrrha dijo seriamente.
Ozpin abrió los ojos, pareciera que todo lo que dijo no menguó el espíritu de esta chica,— Sí ,también puede ser eso.
–Entonces no hay que hablar más, Llévame y dame ese poder, Yo haré lo necesario, seguiré siendo yo a pesar de todo, dijo ella sin dudar.
—Naruto va a matarme después de esto , dijo Ozpin en tono de broma, aunque con una cierta verdad en ello ,sufriría unos buenos golpes una vez que se concretara el traspaso de poder de la doncella.
— lo sé ,le explicaré todo y lo entenderá,Este momento es crítico y necesitamos todas las cartas posibles para detener la invasión ,al menos el tiempo necesario para salvar al mayor número de personas. Yo cumpliré con mi deber como cazadora.
Ozpin asintió con la cabeza y se acercó a la máquina donde estaba conectada Amber. La joven doncella estaba inconsciente y apenas respiraba. Su rostro mostraba una expresión de dolor y sufrimiento. Ozpin sintió una punzada de culpa por lo que iba a hacer. Sabía que era necesario para salvar el mundo, pero también sabía que era injusto para ambas chicas.
— Pyrrha, ven aquí ,dijo Ozpin, señalando el otro lado de la máquina. Había un otra cápsula igual en la que esta Amber
— Está bien ,dijo Pyrrha, caminando hacia él. Antes de llegar, se detuvo y miró a Amber. Sintió una mezcla de compasión y admiración por ella. Era una heroína que había sacrificado todo por proteger el poder de la doncella. Pyrrha se preguntó si podría estar a su altura.
— Gracias, Amber ,dijo Pyrrha en voz baja. Luego se adentro en la máquina que le permitirá obtenerel poder de la doncella.
— ¿Estás lista? ,preguntó Ozpin, activando la máquina.
— Sí ,respondió Pyrrha, cerrando los ojos.
— Que los dioses te bendigan, Pyrrha ,dijo Ozpin, presionando el botón.
La máquina comenzó a zumbar y a emitir luces. El poder de Amber empezó a fluir hacia Pyrrha. Las dos chicas sintieron un dolor insoportable en sus almas. Era como si se estuvieran desgarrando y fusionando al mismo tiempo. Sus recuerdos, sus sentimientos, sus personalidades se entremezclaron en una sola esencia. No sabían quiénes eran ni dónde estaban. Solo sabían que estaban sufriendo.
Ozpin observaba con angustia el proceso. Esperaba que todo saliera bien. Esperaba que Pyrrha sobreviviera y mantuviera su identidad. Esperaba que Amber encontrara la paz. Esperaba que el mundo se salvara.
Pero no sabía si eso era posible.
Esmeralda observaba con desolación el caos que habían causado. Aunque solía disfrutar de sembrar el terror, algo en su interior se removía con culpa. ¿Por qué? No lo sabía.
—Tanta muerte,murmuró con pesar, tratando de ocultarlo.
—Sí, bueno, ¿quién tiene hambre? ,preguntó Mercury con indiferencia.
Esmeralda lo miró con repugnancia. Él era un idiota que no sentía nada por nadie, solo por sí mismo. Trabajaba para Cinder por dos razones: porque ella lo mataría si no lo hacía y porque ella tenía un poder increíble. Cinder era alguien a quien no convenía enfrentar. Si estabas de su lado, podías ganar algo.
Los tres se encontraban en la azotea de una casa, contemplando el desastre que ellos mismos habían provocado.
—Bueno, Cinder, ¿qué tenemos que hacer? ,preguntó Mercury, buscando a su jefa con la mirada. Se sorprendió al ver que no estaba a su lado. Entonces oyó una voz desde abajo.
—¿Qué hacen ahí? Muévanse ,ordenó Cinder desde las calles destrozadas por los Grimm. Los dos jóvenes se miraron y saltaron hacia abajo, siguiendo a su empleadora.
Ella caminaba tranquilamente entre el desastre. Curiosamente, ningún Grimm los atacaba y ningún cazador los detenía. Estaban demasiado ocupados combatiendo a las bestias y no reconocían al culpable de todo esto. No se daban cuenta de que era ella quien caminaba frente a ellos. En algún momento llegaron a unas calles vacías que habían sido arrasadas por los Grimm. Cinder había usado su habilidad para controlarlos y ordenarles que pasaran por ahí. Era una habilidad muy peculiar que le había enseñado su maestro.
A lo lejos vieron cómo un bullhead bajaba y aterrizaba en el suelo. Cinder sonrió maliciosamente. Ahí estaba su medio de transporte para llegar a Beacon.
Cuando planeó el ataque sabía que algunas personas se darían cuenta de que era ella y la buscarían. No podía arriesgarse a que la atraparan tan rápido, así que envió una señal desde Vale para que los Grimm llegaran y distrajeran a los cazadores y soldados. Ella aprovecharía el tiempo y la confusión para buscar el poder de la doncella y cumplir su objetivo.
Esperó en su base dando órdenes específicas al Colmillo Blanco, esperando que los Grimm debilitaran las defensas del reino y sobre todo esperando a que Román tuviera el control del acorazado de Atlas y así poder hacerse con todo el armamento de dicho reino y atacar a los ciudadanos. Todo esto fue planificado meticulosamente, no habría fallas, nada podría salir mal... Lo único que podría reprocharse a sí misma era no poder controlar las acciones estúpidas de sus secuaces. Castigaría muy duramente a Mercury por cometer tal tontería de no quedarse en la base e ir al estadio de Amity para simplemente presenciar el caos. Era un imbécil.
—Hola, amigo, ¿qué tal estás? ¿Disfrutando de tu siesta? ,dijo Mercury con una sonrisa maliciosa mientras le daba una patada a un cuerpo que yacía en el suelo. —Descansa amigo, te espera una larga noche.
—¿Podrías mostrar un poco más de respeto, imbécil? ,Esmeralda le espetó a su compañero.
—¿Para qué? Está muerto, no lo sintió, ni siquiera sabe lo que está pasando. Se fue a un lugar mejor ,Mercury juntó las manos como si fuera a rezar y miró al cielo—. Descansa en paz, amigo, te lo mereces ,se burló.
—Idiota ,Esmeralda odiaba este comportamiento de Mercury, era un cínico despreciable que disfrutaba haciendo daño a la gente. Pero ¿qué otra opción tenía? Era su compañero y tenía que soportarlo por orden de su ama. Ella no iba a desobedecer a la persona que amaba.
—Apúrense, no estoy de humor para escuchar sus discusiones insignificantes ,dijo Cinder con veneno en la voz. Ellos obedecieron al instante y siguieron caminando.
—Supongo que esto me da un bono extra, ¿verdad, jefa? ,Mercury le habló a Cinder con una sonrisa. —Digo, hice un buen trabajo. Soy un excelente actor. Tal vez unos días de vacaciones, tal vez...
Un sonido fuerte y estruendoso interrumpió sus palabras. A un centímetro de su pie, una espada se clavó en el suelo. Estuvo tan cerca que le rozó el muslo. La espada estaba incrustada en la tierra, cerca de su pie metálico cubierto por su bota. Eso lo alertó bastante y se puso en guardia, al igual que los demás.
Cinder miró la espada fijamente. La reconocía, era inconfundible entre todas. Ella miró hacia arriba, en el techo de una casa. La luna brillaba hermosa detrás de una silueta. Por la posición de la luz que golpea la espalda de la figura daba la impresión de que una sombra oscura los observaba, como un cazador y su presa.
—¡¿Quién demonios eres?! ,Mercury gritó con furia. Esa arma estuvo a punto de golpearlo.
—Mercury, Esmerald ,Cinder habló. —Pónganse en guardia. La figura los miró en silencio y luego saltó desde la cima de la casa. Cuando tocó el suelo, hizo temblar la tierra.
Lo vieron mejor. Era el héroe inmortal del que tanto hablaban: Jaune. Tenía una mirada seria y distante, con furia contenida. —¿Quién diría que yo sería el primero en encontrarlos? Supongo que hoy es mi día de suerte... O tal vez no ,habló con mucha calma.
Jaune no se molestó en mirar a los dos secuaces de Cinder. Solo tenía ojos para ella, para los ojos ámbar de la chica. Sentía un nudo en el corazón. ¿Cómo era posible que ella fuera la responsable de todo este caos? No lo entendía.
Jaune parecía ignorar a Mercury y a Emerald, no los consideraba una amenaza. Miraba a su alrededor, como si estuviera contemplando el paisaje, el paisaje sombrío de la desolación y la destrucción. —Este hubiera sido un buen lugar para traer a una cita... Qué pena.
Cinder se quedó callada, sin pronunciar palabra. Estaba un poco, ¿cómo decirlo?, "nerviosa". Lo último que quería era encontrarse con Jaune, no se sentía capaz de enfrentarlo, pero no tenía más remedio. Y sinceramente, no quería hacerle daño. Veía la situación y era complicada. La imagen de Jaune era desoladora. Él llevaba su armadura gastada y sucia, le faltaban piezas de ropa en el cuerpo por los múltiples disparos que había recibido del Colmillo Blanco, los pantalones estaban rasgados y el cabello despeinado, su mirada era vacía y frágil, y manchas de sangre adornaban ciertas partes de su ropa y su cuerpo. Además, su rostro tenía una gran salpicadura de sangre, pero no había ninguna herida visible en él. Así que la sangre no era del guerrero rubio.
—Mercury, Emerald, manténganse alertas ,susurró Cinder detrás de sus secuaces.
Jaune sonrió levemente con desgana, como si estuviera cansado, como si no quisiera estar ahí. Caminó lentamente hacia el grupo con pasos lentos y despectivos.
—Allá atrás la situación está muy fea. ¿Saben lo que tuve que hacer? El Colmillo Blanco atacó de repente en medio de todo ese caos, aprovecharon la situación. ¿Para qué? No sé qué pretenden, está todo complicado y ya tenía suficientes problemas como para que ellos vinieran y lo empeoraran más. No les importó la gente en absoluto... Así que tuve que tomar la penosa decisión de acabar con ellos definitivamente. No me dejaron muchas opciones, muchas veces les dije que se rindieran pero eran muy tercos... Así que resolví la situación lo más rápido posible... ,Jaune suspiró.— Claro, siempre venían más y me encargaba de ellos en el camino, pero nunca esperé encontrarme con la causa del problema tan pronto. Así que fue una gran sorpresa verte Cinder. Te preguntaría por qué haces esto, pero francamente no me lo vas a decir.
Jaune se detuvo a un paso del grupo de Cinder, muy cerca de Emerald y Mercury que estaban tensos. Pero Mercury sonreía confiado, conocía la fuerza de Jaune, pero tenía a Emerald consigo. Así que tenían una buena posibilidad de ganar.
—¿Qué estás diciendo?, preguntó Emerald con confusión.
—¿Qué te pasa? ¿No lo recuerdas?; se burló Jaune con sarcasmo. —Festejamos juntos sus triunfos en el torneo...cantamos y bailamos, Tal vez Cinder era el lazo que nos unía, pero... yo creí que había algo entre mi equipo y ustedes, pero resulta que me han estado mintiendo todo este tiempo. Hubiera aceptado cualquier otra mentira o excusa, como que en realidad no querían formar parte de mi equipo ni ser mis amigos, pero esto es totalmente devastador. ¿Cómo pudieron hacer esto? ¿Saben cuántas vidas se han cobrado? .
La voz de Jaune se elevó con ira, no alzaba la voz pero se notaba su furia. —Ya de por sí la paz en este mundo es frágil, pero ustedes solo están causando muerte. ¿Por qué tienen tanto odio en su interior? No lo entiendo.
Emerald por un momento desvió la mirada, se podría decir que de alguna manera las palabras de Jaune le afectaban pero lo apartó rápidamente. Mercury simplemente sonrió con arrogancia.
—No seas ingenuo, Jaune. Esto es más grande que tú o nosotros. Estamos siguiendo un plan, un destino. Cinder es nuestra líder y nosotros somos sus fieles seguidores. No tenemos que darle explicaciones a nadie, mucho menos a ti. Así que deja de lamentarte,No tienes ninguna posibilidad contra nosotros.No tienes ni idea, Jaune. No sabes nada. Así que mejor cállate y prepárate para morir. dijo Mercury con frialdad.
En un abrir y cerrar de ojos sin que Mercury pudiese reaccionar la mano Jaune le tapó la boca con tanta fuerza que podría sentir que casi le rompía la mandíbula, Mercury con sus dos manos cogió la mano de Jaune para tratar de liberarse pero parecía inútil.
—No recuerdo haberte dado permiso para que hablaras basura, se podía sentir la furia en Jaune, miró a Mercury como si fuera un insecto aplastado en el suelo, con solo mover su brazo hacia la izquierda el cuerpo de Mercury salió volando como un trapo y chocó contra una casa, eso dolió, el aura de Mercury parpadeó, se levantó y se quejó de dolor, sintió todo eso, fue un golpe muy fuerte.
En ese momento Esmeralda y Cinder se alejaron unos metros y le dieron espacio, miraron a Jaune y él cogió su espada y apuntó a Cinder con ella.
—Cinder Fall, por autoridad del reino de Atlas estás bajo arresto, cualquier oposición o resistencia será respondida con fuerza letal.
Cinder frunció el ceño y miró a Jaune con desprecio. —¿Qué te has creído para dirigirte así a mí? Eres solo un mocoso insignificante, sin talento ni poder. No eres rival para mí ni para mis planes. Estás metiéndote en algo que no te incumbe.
Jaune no se dejó intimidar por las palabras de Cinder. —No me importa lo que digas o lo que planees. Eres... ,la voluntad de Jaune flaqueó por un segundo pero la recuperó ,—una criminal, una asesina, una traidora. Has causado mucho daño y sufrimiento a este mundo y a las personas que quiero. No voy a dejar que sigas haciendo lo que quieras. Voy a detenerte aquí y ahora.
–Emerald, Cinder le ordenó que atacara , Esmeralda obedeció y también Mercury se unió a la batalla contra Jaune.
Cinder simplemente se quedaba mirando, ¿por qué no escapaba?, podría haberlo hecho ahora que tenía la oportunidad de irse y simplemente cumplir con lo que tenía que hacer ,pero no, de alguna manera no tenía el valor de irse. Quería ver porque había una gran posibilidad de que sus secuaces lastimaran a Jaune, se quedaba solo para asegurarse de que Jaune fuera incapacitado y nada más.
Jaune se defendía como podía, usando su escudo y su espada para bloquear los golpes de sus enemigos. Pero estos eran rápidos y hábiles, y lograban acertarle varios impactos.
La batalla se complicaba cada vez más, pero Jaune no se rendía. Había aprendido de Naruto a analizar a su oponente hasta el más mínimo detalle, y eso le permitió descubrir algo extraño. El pantalón de Mercury estaba intacto, cuando él le había hecho un corte al principio. Entonces se dio cuenta de que algo no estaba bien.
Jaune se alejó un poco de sus atacantes, y dijo:
– Ya veo, una maldita ilusión o alteración de la percepción... jejeje, quién diría que una de tus locas historias me sería útil.
Dicho esto, sacó una navaja de su bolsillo y se la clavó en el hombro. Cinder se sorprendió al ver ese acto de autolesión. ¿Qué pretendía Jaune con eso? En ese momento, el Mercury que iba a golpear a Jaune desapareció, como si hubiera sido una ilusión.
– Muy bien, así que en realidad no estaba peleando con ustedes, pedazo de imbéciles. Ya me cansé de jugar, segunda puerta abierta.
Jaune activó su habilidad que le permitía amplificar su aura y capacidad física al límite, ignorando sus heridas. Sintió un aumento de fuerza y resistencia. Ahora solo tenía que enfrentarse a Emerald, la responsable de las ilusiones. Pero antes,
en un movimiento veloz Jaune desapareció de la vista como si se hubiese teletransportado. Para el ojo menos entrenado eso podría haber sido así, pero Cinder lo vio. Se movió a alta velocidad y se puso al lado de Mercury. El idiota apenas lo pudo sentir y giró su cabeza para mirar hacia atrás y ver solo un puño que iba directamente a su rostro. No podría esquivarlo y eso le iba a doler. El puño impactó e hizo una fuerte sacudida. El cuerpo de Mercury cayó en el piso agrietando la tierra. Su aura parpadeó y quedó inconsciente en un instante.
—Tienes suerte de que solo te hubiese dado un golpe, porque si por mí fuera ya te hubiese matado. Pero tienes que responder preguntas y enfrentar la justicia , Jaune dirigió su mirada a Emerald.
Emerald no podía creer lo que había pasado. Había usado su Semblance para crear una imagen falsa de Mercury, y así distraer a Jaune. Pero él había logrado ver a través de su truco, y ahora estaba más furioso que nunca.
Emerald sacó sus armas, unas pistolas con forma de hoz que podía usar tanto para disparar como para cortar. Se preparó para luchar contra Jaune, pero este ya estaba sobre ella.
Jaune atacó con su espada, buscando un punto débil en la defensa de Emerald. Ella intentó bloquear el golpe con sus hoces, pero sintió un fuerte impacto que la hizo retroceder. Jaune había usado su escudo para empujarla con fuerza.
Emerald se recuperó y disparó varias balas hacia Jaune. Él las esquivó con agilidad, y siguió avanzando hacia ella. Emerald trató de crear otra ilusión, pero esta vez no funcionó. Jaune había aprendido a ignorar lo que veía, y confiar en sus otros sentidos.
Jaune logró acercarse lo suficiente a Emerald como para darle un golpe en el estómago con su escudo. Ella se dobló por el dolor, y soltó una de sus armas. Jaune aprovechó la oportunidad para arrebatársela, y la usó para cortarle el brazo a Emerald.
Emerald gritó de dolor y rabia, y soltó su otra arma. Jaune la tomó también, y las apuntó hacia ella.
—Ríndete , le ordenó ,– No quiero matarte, pero lo haré si es necesario.
Emerald lo miró con odio, pero sabía que no tenía escapatoria. Estaba herida y desarmada, y Jaune tenía ventaja sobre ella.
— Está bien , dijo con voz débil, —Me rindo.
Jaune bajó las armas, y las tiró al suelo. Luego miró a Cinder, que seguía observando la escena.
— ¿Y tú qué esperas? , le preguntó,— ¿Vas a seguir ahí parada o vas a venir a pelear?.
Cinder no respondió. Solo lo miró con una mezcla de ira y curiosidad. ¿Qué sentía por él? ¿Por qué no podía dejarlo ir? Ella recordó el día en que lo conoció, Ella sintió algo que nunca había sentido antes, una chispa de calidez en su frío corazón. Pero ahora lo traicionó y lo hizo sufrir. Ella se odiaba por eso, pero también lo deseaba. Ella quería tenerlo a su lado, pero sabía que él la odiaba. Ella estaba confundida y atormentada por sus sentimientos.
—Jaune... ,susurró ella, sin saber qué decir.
Jaune la escuchó, y sintió una punzada de dolor en su pecho. Él también recordó el día en que la conoció, y cómo se enamoró de ella. Él pensó que ella era diferente, que era especial. Pero luego hizo todo este desastre. Él se sintió traicionado y herido. Él la odiaba por eso, pero también la amaba. Él quería olvidarla, pero sabía que no podía. Él estaba enfadado y dolido por sus sentimientos.
— Cinder... , dijo él, sin saber qué hacer.
Los dos se quedaron mirando el uno al otro, sin atreverse a moverse. Había una tensión entre ellos, una mezcla de odio y amor, de rencor y arrepentimiento, de deseo y miedo. No sabían qué iba a pasar entre ellos, ni qué querían que pasara. Solo sabían que estaban destinados a enfrentarse, pero también a amarse.
Jaune Arc soltó un poco su espada, pero no la dejó caer en esa situación. Se sentía agotado y débil, como si le faltara la fuerza. Había imaginado esta escena muchas veces, pensando que tendría el valor para enfrentarse a Cinder, pero ahora se daba cuenta de que no era así. En su cabeza le resultó más fácil fantasear con la escena. Es cierto lo que dicen: es más fácil decirlo que hacerlo.
—¿Sabes?,dijo Jaune con voz suave y gentil. —Podrías haber escapado cuando estaba peleando con ellos. ¿Por qué no lo hiciste? ,Su tono cambió cuando hablaba con ella, ya no sonaba con ira, sino dulce y aterciopelado. No podía evitarlo. —¿Por qué te quedaste? ¿Tanto quieres enfrentarme?.
—Tú sabes que no ,le respondió Cinder en un susurro, con dolor en su voz.— Nunca... nunca quise enfrentarme contigo.
—Y sin embargo sigues aquí. ¿Por qué? ,preguntó Jaune con curiosidad.
—Yo... yo... ,titubeó Cinder, sabiendo que sonaría un poco idiota por lo que iba a decir, pero era lo que sentía. Tenía que mentir.— Solo me dio morbo verte, me dio tanta curiosidad cómo un estúpido imbécil que, aún sabiendo quiénes son los principales culpables de la situación y aunque sabe muy bien de lo que son capaces sus enemigos, viene y nos enfrenta solo sin pedir refuerzos. Me dio curiosidad y me daría mucho placer verte derrotado... p-por eso me quedé, solo por eso ,formó una sonrisa malvada. Era lo mejor que podía hacer, pero Jaune vio a través de ella.
—¿Ya acabaste? ,dijo con aburrimiento.— Esa sonrisa podría engañar a cualquiera, pero a mí no. Te conozco. Te conozco desde hace mucho tiempo. Fuimos amigos una vez.
—Yo no quería que ellos te lastimaran ,dijo Cinder.
Jaune se burló ante eso.
—Por favor. ¿Me estás diciendo que provocaste una maldita invasión al reino de Vale? Estoy intuyendo que tú eres la responsable de que el maldito armamento del ejército de Atlas esté atacando a los ciudadanos y estoy más que seguro de que tú eres la responsable de que el Colmillo Blanco también esté atacando a los de su misma especie y a todos los ciudadanos del reino de Vale. ¿Y me estás diciendo que a pesar de todo eso te preocupas por mí?.
—Sí ,dijo Cinder secamente, su mirada y sus facciones se pusieron serias y decididas.
Jaune le sonrió amablemente a la chica, la primera y única mujer que había amado hasta el momento. Nadie ocuparía ese lugar en su corazón, no importaba cuántas personas lo hayan intentado. Y le daba mucha pena decirlo, pero no fueron muchas. De hecho, solo fue ella.
—Por favor, entrégate. Puedo ayudarte. Sé que tú no ocasionaste esto ,se mintió a sí mismo,—Sé que alguien más te lo ordenó. Sé que te están obligando a hacerlo. Por favor, entrégate. Yo te protegeré. Podremos solucionar esto. Por favor.
Cinder se rió secamente.
—Yo ocasioné esto. Lo disfruto. Odio a la gente. Odio que ellos sean felices... esos estúpidos tienen todo solucionado, mientras yo tuve que sufrir toda mi vida.
—Cinder, por favor, tú no eres así. Yo te conozco. Sé que esto no lo quieres hacer. Por favor, ordena a quien diste la orden de controlar el armamento de Atlas ,que detenga todo esto. Sé que puedes. Aún hay tiempo de arreglarlo. Hablaré con el general. Sé que me hará caso y podremos colaborar juntos. No tienes que...
—¡Maldita sea, Jaune! ¡¿Eres tan ciego?! ,gritó ella con furia. Las manos de Cinder se prendieron en fuego y le lanzó una llamarada a Jaune, que la esquivó con velocidad.
Jaune cargó con su espada hacia Cinder y empezaron a pelear, una batalla en la que no podía dar el 100% por miedo a lastimarla y Cinder, a pesar de todo lo que decía y sus actitudes, no quería lastimar a Jaune. Se contenían entre sí, pero en algún punto tenía que parar.
Las llamas y el sonido del metal y el cristal formado por Cinder resonaban por el ambiente y Emerald solo se limitaba a ver. Estaba herida y se concentró en ayudar a su compañero, aunque no quisiera.
—¡Ya basta! ¡No quiero pelear contigo, Cinder! ,gritó Jaune.
—Pues no creo que tengas otra opción, Jaune ,replicó Cinder.
Cinder le pegó en el costado y le dio un derechazo en la mandíbula para luego darle una llamarada de fuego. Jaune se cubrió con su escudo para luego desaparecer en un estallido de velocidad y propinarle un golpe en la espalda a Cinder, la cual rebotó en el suelo pero se recompuso rápidamente. Un simple golpe como ese no la dañaría. Ella era mucho más fuerte que cualquier cazador. Tenía el poder de la doncella, o la mitad de él.
—¡Basta por un demonio! ¡Tú no eres así, deja de hacer esto! Sé que te duele hacer esto, por favor ,suplicó Jaune.
—Tú no... ¡no hables como si me conocieras, Jaune! ,gritó ella con más furia. —¡No me conoces! ¡Te separaste de mí! ¡Me abandonaste!.
—¡Por supuesto que no!,exclamó Jaune y volvieron a enfrentarse. —Si hubiera habido otra forma, te habría llevado conmigo. Sabes muy bien que no tenía opción. ¡Era solo un niño!
—¡Lo sé! ,le respondió Cinder lanzándole llamaradas,—Sé que eras un niño, p-pero aun así... ¿por qué me dejaste sola? E-estaba tan asustada, me abandonaste en esa casa. Me maltrataban todos los días. Poco a poco las lágrimas de Cinder empezaron a brotar y Jaune también lloró. Él recordaba esos días.
Un puñetazo le golpeó la mandíbula a Jaune y lo estrelló contra una casa. Se recuperó otra vez y siguió atacando a Cinder. Cada golpe que le propinaba a Cinder le dolía más que los golpes que recibía.
—Cinder, por favor, no quiero seguir así. No quiero hacerte daño,dijo Jaune.
—No tienes otra elección ,dijo Cinder y le dio un puñetazo a Jaune que lo hizo doblarse y luego le dio otra patada en la mandíbula haciendo espacio. Otra vez Jaune empezó a atacar a Cinder. Consiguió impactarle muchos golpes, pero le dolía mucho herir a esta mujer, a su querida amiga.
—¡Tú, el amado héroe de Atlas! ¡Desde que te conocí lo tenías todo! ¡Una hermosa familia! ¡Un lugar cálido al que volver! Y... yo... ¡yo no tenía nada! ¿Por qué simplemente no me dejas? ¡Yo hice esto porque me gusta! ¡Odio ver a la gente feliz! ¡Odio que todos tengan lo que yo nunca tuve!.
Jaune le dio un golpe en el vientre y luego atacó con su espada. En contraste, Cinder contraatacó con una espada de vidrio y los dos forcejearon.
La pelea continuó durante unos minutos más, hasta que ambos estaban agotados y heridos. Ninguno quería rendirse ni matar al otro, pero tampoco podían dejar de luchar. Era una situación sin salida, una tragedia sin final feliz.
—¡Tú no eres así!, basta de esto por favor.
—¡Deja de engañarte Jaune!,¡yo soy así!,¡hace mucho tiempo que cambié!.
—¡No es verdad!, los dos aumentan su fuerza en sus respectivas armas.
–¡Tú no me conoces!,¡nunca me conociste!.
—Te conozco, la voz de Jaune fue suave pero llena de dolor,—yo sé quién eres, yo lo vi desde el primer día,¿Por qué crees que sigo peleando aquí contigo?.
--
—65...64... 63...62 ,no aguanto más ,se lamenta un niño ,le ardían los brazos ,en algún momento sentía que se iban a romper ,se iban a fracturar.
—Si no puedes hacer esto tendrás que olvidarte del entrenamiento , tienes que seguir sino no tiene sentido entrenarte como cazador.
—Podrías abrir mi aura,... padre, ..como los demás niños en formación ,pidió Jaune con voz débil.
—¿Y qué te facilite las cosas? Todavía no. Si te voy a entrenar, no va a ser como los demás niños que abren sus auras y luego se ponen a entrenar. No, por supuesto que no. Si no eres capaz de soportar esto, entonces olvídate ,replicó Nicolas Arc con dureza.
—Padre, estoy muy seguro de lo que tratas de hacer. Tengo la formación suficiente, pero me estás exigiendo demasiado ,protestó Jaune.
—¿Te estás quejando? ,inquirió Nicolas con tono amenazante.
—No padre... por supuesto que no ,respondió Jaune rápidamente,—56.
—Ya ríndete, Jaune ,dijo Nicolas Arc.
—55 ,contó Jaune.
—Ya ríndete, Jaune. No tienes madera para ser cazador. No puedes. ¿Por qué sigues insistiendo? ,insistió Nicolas.
—54 ,siguió contando Jaune.
—¡Ya ríndete de una vez! ¿Tienes idea de la vida que te espera siendo un cazador? ,preguntó Nicolas.
—53 ,continuó Jaune.
—¿Crees que serás un héroe como las historias que contaba tu abuelo? ,se burló Nicolas.
—52 ,prosiguió Jaune.
—Por favor, lo único que encontrarás serán decepciones e infortunios ,sentenció Nicolas.
—51 ,persistió Jaune.
Jaune sentía que los músculos ya estaban a su límite. Se iba a rendir. Ya no sentía nada. Esto era todos los días desde que inició el entrenamiento con su padre. Desde el primer día le decía que ya era suficiente, que no tenía el valor ni la madera para ser un cazador, que no valía el tiempo entrenarlo. ¿Por qué lo hacía? ¿Por qué le decía esas cosas? Su padre... ¿Por qué no creía en él? Pero no le importó. Seguía y seguía insistiendo. No se rindió. Pero sentía que poco a poco su alma ya no daba más. Las palabras de su padre le estaban llegando.
Muchas veces lloraba de impotencia en las noches porque en verdad le dolían esas palabras, pero seguía insistiendo. Creía que podía hacerlo como las historias que le contaba su abuelo. Él creía en él, pero él se fue hace mucho. Ya no tenía ese apoyo, ni de él ni de nadie en su familia. En realidad ni siquiera su madre. Pero no le importó. Seguiría insistiendo. Era su sueño.
—49... 48... 47... 46... 45... 44 ,contaba Jaune con dificultad.
—Es en serio, Jaune, ya basta ,dijo Nicolas con impaciencia.
—43 ,respondió Jaune con determinación.
No le hizo caso y siguió haciendo las flexiones.
—No te entiendo. ¿Cuántas veces tengo que decírtelo? Y no solo lo digo yo, lo dicen todos. Tienes otras aptitudes. ¿Por qué insistes en seguir este camino? ¿Fue por tu abuelo? Él ya no está. No le debes nada. No tienes por qué seguir un camino que te encomendó ,razonó Nicolas.
Jaune no hizo caso, solo siguió haciendo lo que tenía que hacer: seguir entrenando. Pero cada vez que llegaba hacia el final se hacía más duro. Sus músculos le gritaban que parara. Su mente estaba fallando y su cuerpo estaba fallando. No escuchó los pasos que se acercaban a él.
Era Cinder, una pequeña Cinder de una época distante. Ella lo estaba viendo entrenar desde hacía tiempo. Tenía curiosidad desde el primer día. Siempre lo veía entrenar y siempre pasaba lo mismo: escuchaba las palabras del padre de Jaune y la molestaban. ¿Cómo podía alguien tratar a su hijo así? Ella no lo comprendía. ¿Pero quién sabe? Ella fue tratada de la misma manera siempre. Pero ¿por qué un alma tan buena como Jaune, un chico que siempre estaba dispuesto a ayudar, tenía que sufrir tanto? ¿Qué tenía de malo que él quisiera cumplir sus sueños? Así que inconscientemente se acercó al joven chico y apenas llegó hacia él lo primero que dijo fue:
—¿Qué haces? Ya te falta poco. No te vas a rendir ahora, ¿verdad? ,le animó Cinder con una hermosa sonrisa.
Jaune sintió que el dolor de sus músculos por un instante desaparecía. Sintió que el peso del mundo ya no estaba en él y siguió haciendo lo que tenía que hacer: seguir entrenando. Pero también sintió algo más: una chispa de esperanza en su corazón. Alguien creía en él. Alguien le sonreía. Alguien le hablaba con dulzura. Alguien que no conocía, pero que le hacía sentir bien.
—42 ,dijo Jaune con una sonrisa.
—¡Vamos!, ¡ya falta poco! ,ella siguió animándolo a pesar de que no tenía que hacerlo,—¡Vamos, vamos! ,él seguía y seguía sin parar.
—10.
—Basta Jaune,dijo Nicolas,— Ya basta, no probarás nada. ¿Crees que ser cazador es fácil? El camino es andrajoso y muy complicado, lo digo por experiencia propia.
Jaune no hizo caso, solo siguió.
—6.
—¡Vamos!, ¡no lo escuches! ,en cambio Cinder solo seguía animándolo.
—¡Ya basta! ,En serio no entiendo tu terquedad, ¿por qué eres así?.
—¡No le hagas caso Jaune! ,ella gritó más fuerte interponiéndose en el grito del padre de Jaune,— ¡Solo continúa!, ya mismo.
—3.
—¡Vamos! ,gritó más.
—2.
—¡Solo uno más!
—1.
Jaune se desplomó en el suelo, agotado. Sus manos le ardían, pero no le prestaba atención al dolor. Solo tenía ojos para la chica que lo animaba. Hacía mucho tiempo que anhelaba esas palabras de su familia, pero solo las escuchaba de esta chica que apenas conocía. ¿Qué la motivaba a hacerlo? No lo sabía, pero no podía apartar la mirada. ¿Cuándo se había vuelto tan hermosa?
El padre de Jaune lo observaba con una mueca de desaprobación. —Mañana te levantas temprano, no tienes tiempo para descansar si quieres ser un cazador... Te lo he dicho mil veces, Jaune, pero no eres digno ni apto para esto ,dijo Nicolas, dándose la vuelta y caminando sobre la nieve fría hacia la posada donde se alojaban. —Tú mismo sabes que no tienes lo que se necesita... Solo que te niegas a aceptarlo.
—Cómo te atreves,Las palabras de la chica resonaron en los oídos de Nicolas Arc y se detuvo.
—No sabes nada, niña. No te entrometas en esto.
—¿Cómo puedes hablar así de tu propio hijo? ¿Por qué no lo apoyas?, Ella elevó el tono de su voz. —¡Él está luchando por cumplir su sueño! ¿Por qué no lo animas? ¡Él se esfuerza cada día! ¡Yo lo sé! ¡Pero tú solo le dices lo inútil y lo insignificante que es!.
—Tú no tienes idea de lo difícil que es la vida de un cazador, respondió Nicolas. —Noches sin comer, sin saber si volverás a casa... Solo le estoy dando un consejo sensato a mi hijo para que abandone esa vida y viva feliz.
—¡Qué más da si eso le espera! ¡Es su sueño! ¡Y él está dispuesto a seguirlo y a trabajar duro por él! ¿Por qué no lo apoyas? Replicó Cinder. —Me hablas de lo difícil que es la vida, jajaja... No me hagas reír. Yo sé lo que es eso, ella apretó los puños y los dientes con frustración. —¡Eres un padre terrible! ...¡Y no me importa si Jaune se molesta!, Gritó con rabia ante la cara impasible de Nicolas. Parecía que el dolor que sentía Jaune lo sentía ella.
Nicolas Arc ignoró a Cinder y siguió su camino, lo que enfureció más a la chica.
—¡Jaune lo conseguirá! ¡No importa cuántas veces lo humilles, lo logrará! ¡Será el héroe más grande que haya existido! ¡Lo sé! ¡Lo he visto! ¡Él nunca se ha rendido y no lo hará ahora! ¡Él se convertirá en el mejor cazador de todos! .
Las lágrimas empezaron a brotar de ella. ¿Por qué lloraba? No tenía sentido. Jaune solo podía mirar con asombro a esa niña que lo defendía.
—¡Lo verás en el futuro! ¡Verás que no se rendirá! ¡Él será un gran cazador y yo estaré ahí para verlo! ¡Y si él no tiene el valor para decírtelo en la cara, yo misma iré a tu casa y te daré una paliza! ¿¡Me oíste?!
Jaune solo podía observar la discusión, ella seguía gritándole a su padre, en algún momento dejó de escuchar, solo se concentraba en la chica.
Sin darse cuenta, las lágrimas salían de sus ojos como cascadas y no podía contenerlas, esta chica lo defendía cuando no debería haberlo hecho.
--
—¡Esa es la clase de persona que eres, Cinder!, Jaune forcejeaba con su espada y Cinder también, poco a poco ella sentía que sus fuerzas se desvanecían por las palabras.
—D-Déjame, esa no soy yo, ya no.
—Claro que lo eres, no has cambiado nada, solo te engañas a ti misma.
– Jaune, no puedo hacerlo, este es mi destino. Yo nunca...nunca volveré a sentirme débil.
— Tercera puerta, Jaune logró abrir la tercera puerta con un fuerte empujón que hizo retroceder a Cinder. Ella se levantó rápidamente, pero su mirada era una mezcla de tristeza, derrota, seriedad y determinación. No quería lastimar a Jaune, el único que podía hacerle frente con su poder de doncella, pero tampoco quería renunciar a su destino de causar el caos y la destrucción. Era su amigo... tal vez...
Así que tomó una decisión difícil. Tenía una carta bajo la manga que solo usaría en caso de emergencia, pero necesitaba distraer a Jaune el tiempo suficiente para escapar. Así que usó su habilidad especial, otorgada por su amo, para despertar a la terrible criatura que dormía en la cima de las montañas. Se concentró y envió su voluntad hacia el monstruo que se agitó en su letargo. Pronto volvería a sembrar el terror en la tierra, como lo había hecho en el pasado.
Jaune observaba con curiosidad y recelo a Cinder, que había dejado de atacar y cerrado los ojos. ¿Qué estaba tramando? ¿Se había rendido? No, él sabía que ella era cuidadosa y astuta. Cinder estaba haciendo algo peligroso, algo que requería mucha concentración.
—No sé qué pretendes hacer, Cinder ,dijo Jaune frunciendo el ceño,—pero se acabaron los juegos.
Cinder abrió los ojos lentamente y miró a Jaune con ternura. Sus ojos eran hermosos, pensó él.
—Jaune, por favor, ríndete ,le suplicó ella.—Yo no voy a detenerme. Voy a cumplir con mi destino. Nunca más me sentiré humillada. No habrá nadie ni nada más poderoso que yo.
Jaune apuntó con su espada hacia Cinder, dispuesto a atacar.
—Entonces yo tendré que detenerte antes de que vuelvas a hacer algo como esto otra vez.
—Lo siento ,murmuró Cinder.
A lo lejos, en Mountain Glenn, dentro de una colina, unos ojos rojos se abrieron. La colina temblaba con los rugidos y golpes de la criatura que intentaba salir. Poco a poco, la roca se resquebrajaba bajo las garras del monstruo. El sonido y el temblor se extendían por toda la ciudad abandonada y llegaban hasta el reino de Vale. Jaune también los oyó.
Los golpes eran cada vez más fuertes y los temblores más perceptibles. Los cazadores y los ciudadanos sentían el miedo bajo sus pies. Los Grimm también lo sintieron y levantaron la vista hacia la luna. La bestia encerrada en la colina estaba despertando. Era grande, fuerte e invencible. La cima de la colina se partió y una mano gigantesca negra y oscura emergió.
Jaune desvió la mirada hacia el horizonte, donde podía ver claramente la silueta de la montaña. Desde allí emanaba una oscuridad abrumadora, la presencia de la criatura que poco a poco iba desgarrando la colina hasta hacerla pedazos. La bestia emergió como si fuera un niño curioso, observando el paisaje nocturno, la luna rota, el cielo estrellado. Batió sus alas y levantó una nube de polvo, movida por un instinto primario de destruir, diezmar y aniquilar a la humanidad y a cualquier forma de vida similar.
Lanzó un rugido ensordecedor, que hizo temblar a los ciudadanos y a los cazadores que contemplaban atónitos a esa criatura. Nunca habían visto nada igual, solo habían oído hablar de ella en los libros de historia, una leyenda viviente, un monstruo ancestral. La criatura olfateó el ambiente, percibiendo la negatividad, la desesperación, el miedo y la muerte que se cernían sobre ellos. Y lo disfrutaba.
Abrió sus alas y se elevó en el aire, como si anunciara la llegada del fin del mundo. Se dirigió hacia el reino con intención de arrasarlo.
Jaune miró cómo esa criatura se acercaba al reino, y luego volvió a mirar a Cinder, con los ojos llenos de dolor. Vio cómo ella sonreía con crueldad. ¿Acaso había perdido para siempre a la mujer que amaba? ¿Acaso ya no quedaba nada de la bondad y la alegría que una vez caracterizaron a esa chica? No quería creerlo.
—Qué pena, qué lástima. Los acontecimientos no juegan a tu favor, Jaune Arc. ¿Qué vas a hacer? ¿Vas a enfrentarte a mí? ¿A luchar contra mí? ¿O vas a enfrentar a la bestia que trae consigo la destrucción de Vale? Decide de una vez ,Cinder sonrió.— ¿Qué vas a hacer?,héroe
Cinder fue despiadada, le planteó a Jaune una situación difícil. ¿Qué debía elegir? Él quería detener a Cinder por sus propias razones, pero antes que eso era un soldado y tenía que salvar a la gente. Con el corazón encogido y lleno de pena, se dio la vuelta y corrió hacia la gran bestia.
Cinder suspiró aliviada, tenía que irse también, tenía que conseguir el poder de la doncella.
—Lo siento Jaune, no sabes cuánto lo siento.
Ruby Rose contempló con asombro a la criatura que tenía ante sus ojos. Era difícil de creer que algo así existiera y que ella tuviera que enfrentarlo. Algo en su interior le resultaba familiar, como si hubiera escuchado hablar de ello antes. Sus ojos plateados brillaron levemente, y recordó una historia que su tío le había contado cuando era niña, una historia sobre su madre. Pero ¿por qué no podía recordar el rostro de su tío en ese recuerdo?
--
—¡Tío! ¡Tío! ,gritaba Ruby Rose con impaciencia, mientras se movía inquieta en su habitación. Compartía el cuarto con su hermana, y su tío estaba sentado en un escritorio haciendo el trabajo escolar que le correspondía a ella. Pero Ruby era caprichosa y no quería hacerlo, así que le rogó a su tío que lo hiciera por ella y él accedió.
—Ruby, estoy haciendo tu tarea, lo menos que puedes hacer es intentar hacer menos ruido ,le dijo él.
—Pero estoy aburrida ,se quejó ella, haciendo un puchero.
—Ruby, escúchame, haremos algo después, ¿de acuerdo?
—Pero si papá llega, tú ya te vas a ir. Quiero jugar ahora.
—Si jugamos ahora, no podré hacer tu tarea, Ruby. Así que no puedo hacer las dos cosas.
—Aburrido ,murmuró ella, resignada. Miró por la ventana, estaba nevando ese día. Era esa época del año.
—Dime una cosa, tío ,le preguntó.
—¿Sí? ,respondió él, sin apartar la mirada del cuaderno.
—En esa historia que me contaste...
—¿Qué historia?
—La del lagarto gigante, en la que tú y mi madre pelearon juntos. ¿Podrías contármela de nuevo? Me gusta esa historia.
—... Bueno, si te soy sincero, Ruby ,suspiró él, —no matamos al lagarto.
La pequeña Ruby abrió los ojos y miró a su tío.
—¿En serio?
—¿Crees que yo mataría a un Grimm así ? Tu madre era hábil, pero no tanto como para enfrentarse a una criatura así. No es fácil.
—¿Entonces qué pasó?
—Bueno... lo único que pudimos hacer ,mintió él,— fue... emmm... encerrarlo. Lo hicimos dormir en la cima de una montaña.
—No te creo.
—Créelo pequeñita. Lo dormimos y lo encerramos. No despertará.
—¿En serio?
—Bueno, despertará algún día ,dijo él.— Eso es inevitable. Algún día esa criatura despertará.
--
Ruby Rose recordaba esas palabras, mientras veía a la bestia que se acercaba al reino.
—Esa criatura ,susurró ella, repitiendo las mismas palabras de su recuerdo,— tiene garras afiladas, un cuerpo oscuro como la noche y una armadura de hueso blanco. Traerá la muerte y la desesperación. Porque ella es una criatura de leyenda, imparable. Es un dragón.
Espero que les haya gustado el capítulo,disculpen los errores ortográficos y me escriben en los comentarios cualquier idea que podría yo agregar en esta historia
Aclaro, que muchas cosas podrían no tener sentido, por lo que se agradece cualquier consejo.
Aclaro que me tomaré ciertas libertades con algunos personajes y no será 100% fiel al canon original.
Lamento haber estado tan ausente últimamente, pero el trabajo me ha consumido mucho tiempo y energía. Sé que esperan los nuevos capítulos, pero no podré publicarlos tan seguido como antes. Les pido paciencia y comprensión, y les agradezco su apoyo, Espero que disfruten de lo que he escrito hasta ahora, y que sigan acompañándome en esta aventura literaria. ¡Un abrazo!
Gracias por leer.
