UN FUTURO PROMETEDOR, UN CRUEL DESTINO

CAPÍTULO DOS: DE LA SARTÉN AL FUEGO

En la Secundaria de Royal Woods las cosas seguían con normalidad. A decir verdad, a la población estudiantil poco le afectó el resultado de las Guerras del Péndulo porque su ciudad estaba entre las privilegiadas de no haber sido tocada por ese conflicto que tanto le ha costado a personas de otros poblados.

Podría decirse que vivían en una burbuja de falsa seguridad no contemplando la idea de que en algún mañana cualquiera de ellos hubiera sido reclutado cuando fuese mayor y dando por hecho de que los Soldados Gears que ya hay serían los que resolverían cualquier problema que se presente en la ciudad y sin incomodarse demasiado por las cuestionables decisiones que la Coalición de Gobiernos Organizados tome al dar por hecho de que solo afectan a los adultos.

La inocencia de algunos y la soberbia de otros. Si el peligro no toca a sus puertas, entonces no comprenderán la verdadera magnitud de lo que ha ocurrido en casi 80 años de lucha sin tregua.

Pero no todos podían darse el lujo de relajarse y creer que los problemas de la vida no se presentaran ante ellos cuando justamente uno de estos los está agobiando.

Siendo específicamente Ronnie Anne la que ahora mismo tenía una guerra de emociones en su interior al caminar por los pasillos con una expresión que hacía que los demás alumnos se hicieran a un lado temiendo que los fuera a machacar a puñetazos.

En otras circunstancias miraría con bastante repulsión los posters y anuncios que hacían alegoría a la CGO, la abreviación de la Colación de Gobiernos Organizados, y su lucha contra la URI, la Unión de Repúblicas Independientes, debido a que le recuerdan lo que le pasó a su padre y lo que esas potencias mundiales les hacen a sus respectivos ciudadanos.

Pero este no era el momento para trivialidades y no podía distraerse con cualquier cosa.

-¡SANTIAGO!- su expresión se volvió más agria cuando Girl Jordan la saludó enérgicamente al caminar a su lado -¿Cómo te ha ido en este maravilloso día?- la molestaba a propósito.

-Vete a molestar a otra parte, Jordan. Que no estoy de humor para tus pendejadas- aceleró el paso para no tener que aguantar sus burlas y mofas.

-Me sorprende que sigas siendo tan amargada aún después de la maravillosa noche que pasaste con Lincoln en mi fiesta. ¿Es que acaso él no te pudo calmar ese mal genio? Que pena. Cualquiera diría que con lo chueca que caminaste en los días siguientes, seguramente tú…

Sus tonterías fueron interrumpidas por la morocha que la tomó del cuello y acercó peligrosamente su rostro al suyo dedicándole una mirada que podría congelar hasta el más voraz de los incendios.

-Tú… eres la culpable de lo que me está pasando ahora mismo- rechinó los dientes mientras una palpitante vena se formó en su sien derecha a punto de explotar causando que ella se pusiera pálida como un fantasma y sudara como condenada.

-Si lo que quieres es que te de las gracias por habernos hecho comportar como unos ebrios idiotas… ¡AQUÍ ESTÁN MIS AGRADECIMIENTOS!

Sin dejarla de sostener del cuello y haciendo caso omiso a sus palabras de súplica, se dirigió al baño de chicas y luego de cerrar de un portazo la entrada se escuchó el sonido de gritos, golpes, insultos y del agua de un retrete bajando hasta que todo quedó en silencio por un momento.

Ronnie salió con toda calma sacudiéndose las manos murmurando molesta unas cosas, y cuando otra chica fue ahí a hacer sus necesidades, soltó un grito de espanto por lo que vio en un cubículo.

-Auch… eso… es lo que me pasa… por jugar a ser Cupido…- Jordan gemía adolorida y escupió el papel higiénico que Ronnie le metió en la boca y retorciéndose un poco por la inhumana posición en la que terminó metida en el inodoro.

Completamente ajeno a ese suceso, Lincoln hablaba con sus amigos de trivialidades.

-¿Entonces cuánto le falta a la mayor de tus hermanas para volverse madre?- preguntó Rusty.

-Casi nada. Los doctores le calculan alrededor de dos semanas para traer su hijo a este mundo libre de guerras- mucha alegría la daba saber que dentro de poco será tío.

-¿Pero están seguros de que es hijo de Bobby? Es decir, ¿Cómo están seguros de que no le implantaron a Lori un prototipo de Súper Soldado para que una vez nazca, crezca y se desarrolle la CGO no se lo lleve para hacerle todo tipo de experimentos demenciales?- pero todos vieron fijamente a Zach cuando dijo este disparate.

El albino resopló y rodó los ojos harto de lidiar con ese tipo de comentarios tan estúpidos.

-Escucha, Zach. Admiro que desde el accidente que tus padres tuvieron el año pasado te hayas empeñado en continuar su labor de dejar al descubierto todas las teorías conspirativas que hay, pero debes aprender a mantener guardadas esas suposiciones. ¿Qué tal si dices una barbaridad como esa delante de mi hermana o de mi cuñado? Si te oyen decir algo así… mejor ni pienso en lo que te podrían hacer.

-No algo tan horrible como lo que acabo de hacerle a Jordan hace un momento- cuando el pelirrojo de menor estatura iba a decir otra cosa, todos fueron tomados por sorpresa por Ronnie.

De inmediato retrocedieron por la expresión iracunda que ella traía consigo y por un instante creyeron que los volvería puré por la tontería dicha por Zach al ser una ofensa hacia su hermano.

Pero Lincoln fue el único en sonreír enormemente por su presencia.

-¡Ronnie, muy buenos días!- sin pena alguna la abrazó y plantó un beso en la mejilla haciendo que lo viese fijamente enarcando una ceja -¡NO, NO, LO SIENTO! No quise… este… si quise, pero si tú no querías…- también se asustó como sus camaradas, aunque estos ahora reían por su actitud.

-Ya, ya. No te comportes como mi hermano ante tu hermana- desvió la mirada algo apenada y manteniendo las manos en los bolsillos de su abrigo morado hasta que carraspeó -ven, tengo algo muy importante que hablar contigo… a solas- de nuevo asustó a los amigos del albino al dedicarles una mirada de advertencia.

-Lo que tú digas, Ronnie- ofreció su mano derecha, pero ella la apartó de un manotazo diciéndole que se dejara de cursilerías y se retiraron.

-Bien… ¿Apostamos a que quiere terminar con él o algo parecido?- para aligerar el ambiente, de nuevo Rusty hizo una de sus apuestas no aprendiendo nada de lo que pasó en esa fiesta.

-Cállate, Rusty- ordenó Clyde no teniendo el humor para aguantar sus tonterías.

Porque la charla que tuvieron hace unos instantes sobre Lori embarazada era algo que lo ponía de un peor estado de ánimo del que tuvo en la residencia de Jordan al recordarle que la mujer que ama nunca podrá estar a su alcance.

-Entonces… ¿Cómo has estado tú y tu familia últimamente, torpe?- Ronnie debía saber cómo decirle a Lincoln que dentro de poco será un padre adolescente una vez que llegaron a un rincón alejado de las miradas chismosas de los otros estudiantes.

-Más feliz cada día. Si vieras la emoción que mis hermanas y padres sienten porque Lori se volverá mamá dentro de poco, en especial papá que ha llorado de la ilusión peor que cuando corta cebollas en su restaurante- en escenarios diferentes le daría la mayor de las penas la actitud tan sensible de su progenitor, pero con esa bendición en forma de nieto camino, puede entenderlo.

Ronnie apretó los labios al apenas contener el impulso de decirle sin tapujos que dentro de poco y de parte suya un nuevo Loud se unirá a su familia, porque duda que despertaría esas mismas emociones de alegría en sus futuros suegros y cuñadas.

-No creo que chille más de la dicha como mi abuela… ¿O sí?- compartieron la misma risa -mira, Lincoln. Quería hablarte de algo de suma importancia, de… lo que hicimos en la fiesta de Jordan, de lo que me hiciste- se supo seria y no daría espacio a más tonterías y menos a meras indirectas.

-Eh…- inmediatamente se incomodó y miró hacia otro lado rascándose la nunca algo ruborizado -ya… ya te había dicho que lamento mucho lo brusco que fui. Es que solo me dejé llevar y…

Solo otro golpe en el estómago de parte suya bastó para que dejase de divagar.

-¡No vine para reclamarte de nuevo por eso, cabeza de alcornoque!- esa palpitante vena en su frente volvió a manifestarse y casi parecía una serpiente bajo su morena piel -en verdad, si quiero hablar de ese tema y por eso vine lo más rápido que pude a la escuela para tratarlo.

-¿Qué quieres decir? No… ¿No me vas a decir que repitamos eso aquí en la escuela o sí? No quiero decirte que no, pero si lo intentáramos, nos podrían suspender o incluso expulsar por…

Se ganó un nuevo golpe en el abdomen que le quitó esos pensamientos tan morbosos.

-¡Ya deja de pensar con la cabeza de abajo y piensa con la que tienes sobre los hombros, tarado!- su vena casi salta de la cabeza para estrangularlo -y presta mucha atención a lo que te diré porque es de vital importancia y no una tomadura de pelo.

Cerró los ojos y respiró hondamente para reunir paciencia y valor y después miró de un lado a otro para asegurarse de que no hubiese ningún entrometido en los alrededores.

-¿Ronnie? ¿Qué te ocurre?- sobándose el abdomen la vio extrañado por su comportamiento.

-Lincoln, yo… yo…- las palabras se le atoraban en la garganta y nuevamente apretó los párpados arrugando la cara al juntar con fuerza los labios haciendo que él se preocupase.

-Dime por favor que te pasa, Ronnie- al ponerle una mano en el hombro hizo que lo viese.

La confianza que le transmitía, con la que le decía que contaba completamente con su apoyo tanto en las buenas como en las malas, bastó para que recuperase el coraje necesario para decirle que era aquello que la angustiaba.

-Lincoln… estoy esperando un hijo tuyo.

Él se quedó rígido como una estatua, su boca se volvió una perfecta línea horizontal, la piel de su cara se volvió casi tan pálida como su pelo y el corazón dejó de latir por unos segundos.

Lo único que se oía era el sonido de los alumnos a la lejanía y del timbre de inicio de clases. Parecía que ambos habían abandonado la realidad que los rodeaba y fueron metidos en un mundo más allá del tiempo en dónde lo único que existían eran ellos en dónde se repetía una y otra vez la frase: "estoy esperando un hijo tuyo" a modo de eco dentro de sus cabezas.

Hasta que Lincoln soltó una pequeña risa vacilante.

-Je… je, je. Buena esa, Ronnie. Por un momento me la creí- pensó que estaba tomándole el pelo.

-¡No estoy bromeando, pedazo de pendejo!- le hizo retroceder al hacer el ademan de darle ahora un puñetazo a la cara -estoy hablando totalmente en serio.

Le extendió la prueba de embarazo y la tomó dudoso sosteniéndola con ambas manos abriendo los ojos tanto como lo hizo cuando ella lo beso apasionadamente en la fiesta.

Empezó a respirar agitadamente al ver las dos rayitas y negó despacio con la cabeza, porque eso, es igual a que todo su mundo estaba por derrumbarse, que su vida jamás volverá a ser la misma.

-No, no, no, no…- las manos le temblaron, haciendo que ella se asustara al creer que le iba a dar un colapso nervioso o un paro cardiaco.

-¡NO, NO, NO, NO!- soltó la prueba y miró sin control de izquierda a derecha intentando hallar desesperadamente algo o alguien que lo saque de tremendo predicamento -¡¿TÚ ESTÁS EMBARAZADA DE MÍ?! ¡ES IMPOSI…!

-¡CIERRA ESE HOCICO, GRAN IDIOTA!- Ronnie le tapó la boca con una mano y también vio en diferentes direcciones -¡¿No te das cuenta de que alguien te puede escuchar?!

-¡PERDÓN, PERDÓN! Es que… ¡ES QUE DIABLOS! Tú… esperando un hijo mío… ¡¿QUÉ SE SUPONE VAMOS HA HACER AHORA?!- le dio la espalda y se sujetó los costados de la cabeza para tratar de calmar la misma tormenta emocional que ella tuvo cuando la prueba dio positivo.

-No lo sé. Por eso vine por ti, para ver que podamos hacer y como se lo vamos a explicar a nuestras familias- por primera vez en todo lo que llevaron charlando Ronnie expresó su mismo miedo y se abrazó para calmar los nervios generados por imaginarse las reacciones de todos.

-Y también porque… necesitaba saber si ibas a seguir conmigo- hizo que la mirase confundido por el tono casi de súplica que usó al decirle estas palabras -me refiero a… si aún sabiendo que estoy embarazada de ti, tú… quisieras seguir conmigo… juntos… como una pareja, ¿Entiendes?

Si algo podía asustarla aún más que una reacción negativa por parte de su familia y de los Loud ganándose el odio de todos por ser una "chica fácil" incapaz de controlar sus más bajos deseos, es que él al saber que se volverá un padre adolescente la quisiera hacer a un lado ya no deseando saber nada de ella e incluso detestándola por haber arruinado su vida con ese embarazo.

El primer impulso que el peliblanco tuvo fue echarse a correr tapándose los oídos y hacerse el desentendido para no lidiar con semejante carga para la cual no estaba para nada listo; siendo una reacción que seguramente varios chicos, y adultos, en su posición harían.

Pero no hizo eso y se contuvo. Tampoco estaba en sus planes de vida volverse padre adolescente y al igual que ella pensó que si tendría hijos sería cuando tuviese al menos 20 años en adelante.

Y es justamente por ella que no se echó para atrás, porque la quería, la apreciaba y ama mucho como para hacerle algo tan ruin y despreciable como dejarla a su suerte.

Sus fuertes principios y convicciones evitaban que tomase la ruta del cobarde y le obligaron a mantenerse firme, como un verdadero hombre dispuesto a afrontar los desafíos que aquello que ella ahora mismo lleva en el vientre le traerán más adelante.

-Ronnie… ¡Pero claro que quiero seguir junto a ti!- bastante asombrada la dejó cuando le sujetó las manos volviendo a dedicarle esa mirada y sonrisa de confianza.

-¿Me lo estás diciendo en serio o solo tratas de burlarte de mí?- no lo podía creer y por instantes pensó que solo quería devolverle el impacto emocional que ella le generó con su noticia.

El beso que recibió directamente en sus labios era lo único que necesitaba para saber que él no bromeaba de ningún modo.

-Jamás mentiría con algo así. Si yo me voy a volver padre y tú tienes ahí a mi futuro hijo o hija, estaré ahí para recibirlo con los brazos abiertos; jamás lo dudes ni por un segundo.

Eso la desubicó bastante. Daba por hecho que él estaría tan horrorizado por ser un padre joven que intentaría por todos los medios posibles librarse de tal responsabilidad, o peor, que usase su ingenio característico para hacerle perder a su hijo antes de que se le formase una imposible de disimular barriga de embarazo o alguna barbaridad como esa.

Al oírle decir que la apoyará en todo la lleno de una dicha que no esperaba y que le hizo lagrimear de una felicidad que desde hace mucho tiempo no sentía y menos en un escenario que se suponía debía causarles la mayor de las angustias.

-Lincoln… ¡POR ESO TE AMO TANTO!

Esta vez no necesitó de alcohol ni nada parecido para expresarle lo mucho que lo valora y otra vez se le arrojó para besarlo apasionadamente y en esta ocasión él no se demoró nada en corresponderle el gesto ya no importándoles si alguien los viese.

-Con lo que te demostré esa noche, creí que quedó más que claro que te amo y mucho- pudo permitirse bromear, ahora ganándose un leve rodillazo en el estómago.

-Eso sí me quedó más que claro, por algo me costó caminar mucho en los días siguientes- después de reír, miró al suelo pensativa y recuperando su expresión de preocupación.

-¿Cómo se lo diremos a nuestras familias? ¿Qué tal si se lo toman de la peor manera posible?

-Estoy 100% seguro de que mis hermanas harían el mayor de los escándalos y me tacharían de un calenturiento incapaz de controlarse que le gusta levantarle las faldas a todas.

-Y yo también estoy 100% segura de que Bobby y mamá me gritarían todas las ofensas que se saben decepcionados por no haber mantenido mi pureza hasta el altar… y luego lidiar con las cataratas de lágrimas de alegría de mi abuela por que será bisabuela doble- visualizar a la madre de su madre haciendo otra escena igual a la que hizo cuando Bobby dijo que se volverá padre llenaba de descomunal vergüenza a la pelinegra.

-Tenemos tiempo antes de que se te note la panza hinchada. Por lo que procura no decírselo a nadie, lo que menos necesitamos es que alguien nos comience a molestar con eso.

-Y también pensar en alguna excusa para esos mareos que me hacen vomitar como una aspirante a súper modelo. Aparentar las apariencias es lo mejor que podemos hacer por ahora.

Teniendo mejor ánimo del que tuvo al llegar al instituto al saber que el chico que ama seguirá con ella hasta el final, fue con él a juntarse con los demás alumnos con la esperanza de que a su lado todos los problemas de la vida serán mucho más fáciles de superar.

La ingenuidad y burbuja de falsa seguridad que los otros jóvenes poseen también la envolvió sin darse cuenta, porque si creen que un embarazo no deseado es la mayor de sus preocupaciones, pronto la vida le hará sentir lo mismo que otros chicos y chicas han vivido en las tantas décadas de guerra continua y que desearían por estar en su misma posición.

(…)

Otra semana pasó y los próximos padres juveniles se partían las cabezas al pensar en la manera y en el momento correcto para informarles a sus familiares sobre el embarazo.

De hecho, la mejor (O sea la menos delirante) idea que tuvieron era que cuando Lori al fin diera a Luz aprovecharan la enorme emoción del momento para avisar que Ronnie también está embarazada confiando en que no les darán una fuerte reprimenda y no reaccionaran del modo histérico en el que lo harían en otro escenario.

Era una jugada algo cobarde, pero no tenían más opciones a decir verdad.

-Ah… ¿Por cuánto más podré disimularlo?- suspiró al mirar su aun plana panza en un espejo.

Fue a la cocina a buscar algo para comer y ahí vio a la Abuela Rosa que tarareaba de lo más feliz una canción mientras preparaba el almuerzo. Le dedicó una triste sonrisa porqué aunque dentro de poco un nuevo milagro llegará a su mundo para hacer de su vida y del resto de la familia más alegre y maravillosa, temía que con el suyo propio no planeado acabe con esa alegría.

-¿Puedes ayudarme con estas ollas, Mija? Debo terminar el postre preferido de tu hermano para cuando llegue- pidió su ayuda pasándole esos recipientes metálicos que sostenía con guantes.

-Por supuesto, abuela- las tomó y dejó a un lado teniendo cuidado de no quemarse ni derramar el caliente contenido que traían.

-¿Puedes creer que dentro de poco estará de nuevo con nosotros? Siempre supe que los Santos lo protegerían de todo mal y peligro y lo enviarían de regreso con nosotros para volverse un padre y estar junto a la familia que ha formado junto a la mujer que ama- juntó sus manos y suspiró ilusionadamente.

Ronnie quiso decir algo como: "desearía que papá pudiera estar aquí con nosotros para disfrutar el momento" pero no quiso acabar con su ilusión al reabrir esa vieja herida.

Pero cuando el horno microondas emitió una alarma sobre que la comida dentro suyo ya estaba lista, una idea para su pequeño gran problema llegó a su mente.

-Oye, abuela… ¿Cómo tus familiares reaccionaron cuando tú te volviste madre?- la matriarca la vio confundida por esa pregunta -es decir… cuando tú y el abuelo le anunciaron a sus padres que también iban a volverse padres… ¿Cómo se lo tomaron ellos y tus otros familiares?

Su objetivo era ganarse su apoyo cuando ella y Lincoln dieran la gran noticia y si lograba hacerle recordar cómo se sintió en esa ocasión cuando experimento la dicha de ser madre puede que consiga un importante aliado que los ayude a superar los posibles reclamos de los demás.

-Oh, eso… pues fue algo complicado, Mija. Héctor y yo tuvimos a tu Tía Frida cuando teníamos 16 años como tú y mis padres se pusieron como locos, haciendo un escándalo como nunca se ha visto- su sonrisa nostálgica se combinó con un gruñido de exasperación de ella al dar por hecho de que ellos también reaccionarían así por su embarazo.

-Pero los padres de tu abuelo lejos de enfurecerse o aterrarse, estuvieron de lo más felices- eso le hizo enarcar una ceja de la impresión -mis suegros siempre fueron mucho más flexibles en los temas sobre el amor y siempre dijeron que si dos personas se amaban podían expresarlo como quisieran y que si a una edad temprana dieron sin querer el siguiente paso en su relación, es porque la Vida y el Destino así lo quisieron. Por eso nos apoyaron en todo, alentándonos a formar nuestra propia familia y que nos mantuviésemos juntos para superar todas las duras pruebas que la Vida nos ha impuesto hasta el día de hoy…- apoyó la cara en su mano derecha volviendo a suspirar con enorme nostalgia.

Era lo único que Ronnie necesitaba para aligerar un poco la enorme carga en su espalda. Con todo eso dicho tiene casi la completa seguridad de que su abuela la respaldará con su embarazo, y como es una de las cabezas principales de los Casagrande, podrá convencer al resto de su familia para que también la respalden y a Lincoln en caso de que los familiares de este lo repudien.

-Entonces… si Bobby a mi edad hubiese dicho que embarazó a mi cuñada… ¿Los habrías apoyado también como mis bisabuelos lo hicieron contigo y el abuelo?

Debía corroborar de que sí la apoyaría y no resultase tener una especie de doble moral como la que tienen muchos padres y abuelos cuando en un momento dicen que apoyarán a sus hijos sin importar la decisión que tomen en algún especto importante solo para que al segundo siguiente les digan que están decepcionados y los intenten apartar de sus vidas.

-¡Claro que sí! ¿Qué clase de abuela sería yo si no apoyase a mi nieto en algo tan importante como eso? Mis suegros me jalarían los pies en las noches por no haber aprendido nada de ellos.

La carga se hizo aún más ligera.

-Gracias, abuela- amañó con abrazarle, pero se detuvo porque podría levantar sospechas de que es ella la que repitió sus mismos pasos -pero… dudo que papá hubiese compartido tu misma flexibilidad. Apostaría todo el dinero del mundo a que hubiese iniciado una guerra peor que las del Péndulo si Bobby a los 16 soltase tal noticia.

Luego de reír cómplices, la ayudó a preparar la comida ahora teniendo una sensación de alivio que solo se puede comparar con la de alegría cuando Lincoln le dijo que seguirá con ella hasta el final.

(…)

-¡VOLVÍ, FAMILIA!- fue el enérgico saludo de Bobby al entrar al apartamento de los Casagrande.

-¡VOLVISTE, PRIMO, TE ECHÉ MUCHO DE MENOS!- CJ fue el primero en saludarlo al darle un aplastante abrazo pudiendo alzarlo del suelo.

Todo el lugar estaba decorado para una fiesta, siendo un letrero que decía: "¡BIENVENIDO DE VUELTA, SOLDADO!" lo que más destacaba.

No solo estaba su familia, sino también casi todos los otros inquilinos del edificio que lo recibieron como si de un héroe de guerra se tratase llenándolo de felicitaciones y cumplidos que eran un reflejo del fuerte aprecio que le tenían por todo lo que ha hecho antes de que lo reclutaran.

-¿Dónde está mi amada esposa?- quiso saber después de haber cargado al pequeño Carlitos.

-Pensé que te habías olvidado de mí- los invitados se hicieron a un lado para darle paso a la mayor de las hermanas de Lincoln y que poseía una gran barriga de embarazo.

-Lori, mi cielo…- con todo el amor del mundo la besó y abrazó acariciando con la mayor de las ternuras su vientre -¿Cómo está el pequeño Bobby Jr.?- posó ahí la oreja derecha recibiendo una leve patada desde adentro -me alegra ver que sigues creciendo sano y fuerte- también le plantó un beso.

Ronnie ya lo había saludado y se alejó un poco para admirar la escena manteniendo los brazos cruzados mientras negaba teniendo una expresión algo apenada por lo cursi que le resultó ser.

En verdad, deseaba que eso mismo pasase con Lincoln y ella. Una vez que la verdad se sepa y también posea un enorme estómago él la salude de ese modo recordándole a cada segundo que ella y su futuro hijo son los seres que más ama y que los demás estén felices por ellos deseándoles todas las bendiciones posibles.

Luego vio lo que Bobby trajo consigo y que dejó a un lado para saludar a los demás. Hizo una mueca de disgusto al ver la armadura azulada de Soldado Gear raso y el Lancer Retro, el rifle de asalto con bayoneta reglamentario que todo soldado de la CGO usa.

No los tendrá puestos ahora mismo, pero con solo visualizarlo usándolos, lo ve casi como un calco perfecto de su padre en su juventud. Otra cosa que no admitirá abiertamente es que todas las noches oraba para que la guerra terminase antes de que a él lo enviasen a su primera misión por temor de que la historia se repitiera y lo último que sepa de parte suya es que también murió en el cumplimiento de su deber.

¿Cómo ella, su familia, su cuñada y la familia de esta hubiesen reaccionado ante ese escenario?

No quiso pensar en eso y fue a divertirse con los demás cuando inició la celebración. Habría querido que Lincoln y los demás Loud pudieran estar ahí también, pero ellos ya tenían sus propios problemas, específicamente, en el restaurante de Lynn Sr. al que últimamente han ido muchas más personas de lo normal para también festejar el regreso de sus respectivos seres queridos.

-¿Qué más quieren que les diga? La guerra, como diría mi reina, literalmente acabó justo el día antes de que terminara mi formación como soldado. Por lo que nunca tuve que luchar contra soldados de la URI o algo parecido- contestó a una de las muchas preguntas que CJ le hizo.

-De la que te salvaste, Bobby. Tomando en cuenta como eres, seguramente habrías sido el primero de tu batallón en terminar con una bala en la cabeza al marchar en dirección opuesta al campo de batalla con los demás sacos de carne que son puros tiros al blanco- el pelmazo que tiene como primo, Carl, no contuvo esta broma de pésimo gusto.

-¡¿Cómo dices?!- justo cuando la Abuela Rosa se dispuso a regañarlo por ese insulto, el hermano de Ronnie lo tomó de la oreja izquierda alzándolo unos centímetros del piso -si crees que soy el mismo de antes y voy a aguantar tus tonterías, estás bastante equivocado. Así que piénsalo mejor antes de faltarle de nuevo el respeto a aquellos que han dado su vida para lograr esta tan ansiada paz, ¿Entendido?- solo los soltó cuando el pelinegro menor asintió derramando lágrimas y gimiendo agudamente para que fuese corriendo a los brazos de su madre.

-¿Quién lo diría? Parece que únicamente se necesitó de un duro entrenamiento militar para volverte un completo hombre hecho y derecho- pero Ronnie también le dedicó una broma.

Aunque no rio, porque si le hizo eso a Carl por tal pésimo comentario, ¿Qué podría hacerle a Lincoln cuando diga que está esperando un hijo suyo? Duda que sea tan flexible como la abuela.

-¿Entonces que harás ahora que ya no hay guerra, hijo? ¿Acaso te pedirán volver a la academia para que adiestres a los nuevos reclutas o te asignarán una tarea que te mantenga lejos de nosotros?- María, su madre, temía que su regreso sea algo temporal y que cuando menos lo esperen otra vez lo aparten de la familia.

-De momento a los recién graduados nos darán un tiempo de descanso. Tal vez nos asignen a puestos de control en ciudades cercanas a las que procedemos para así aligerarnos algo del estrés y fatiga que nos causaron al moldearnos como guerreros.

-Y para mantenerlos contentos luego de darles tantas patadas para que no se les revelen y lidien con las consecuencias de crear unos "guerreros fieros y sedientos de sangre" ¿Verdad?

Quisiera poder darle otro nuevo escarmiento a Carl por esta otra broma, pero al recordar las palizas que sus superiores le dieron en todo lo que duró el entrenamiento básico, debía darle toda la razón y reír un poco en retrospectiva.

-Mientras que puedas permanecer a mi lado, al de nuestro futuro hijo y de tu familia y la mía, entonces todo valió completamente la pena- Lori se paró a su lado para que le rodease su ahora hinchada cintura y le besara la frente.

-¡GRUAH! Entonces que los niños se vayan a dormir para que los adultos sigamos celebrando como se debe tu retorno, ¡GRUAH!- el momento tierno y romántico entre ellos fue interrumpido por el plumífero de Sergio sosteniendo con sus patas una botella de alcohol mientras batallaba para mantenerse volando debido a que ya estaba algo pasado de copas.

-¿Cómo es posible que esa avestruz a la que coqueteas no haya venido aquí a darte una sorpresa en forma de un enorme huevo?- Ronnie le dedicó la más osca mirada de desprecio por lo muy delicado que es ese tema para ella.

(…)

En los días siguientes, parecía que todo volvió totalmente a la normalidad, o incluso mejor.

Con Bobby de regreso, sabiendo que Lincoln seguirá a su lado y con el apoyo de su abuela, Ronnie sentía qué a pesar de su embarazo no deseado, un mejor mañana se alzaba en el horizonte junto al inicio de esta nueva Era de paz y tranquilidad que ni sus abuelos han experimentado.

Se hallaba en el sofá principal de la sala teniendo la cara apoyada en la mano izquierda mientras que con la derecha se sobaba el abdomen. No podía cantar victoria todavía y aún necesitaba pensar en la manera de decirle a los demás que también se volverá madre.

Y tener a sus bulliciosos primos peleándose por el control de la TV no le ayudaba mucho al tratar de pensar en una solución para eso.

-¿No pueden mantenerse en silencio por al menos 5 minutos?- frotó su cabeza para mantener la compostura -Tío Carlos, ¿No les puedes pedir que hagan silencio?- en otros tiempos los haría callar con sus propias manos y a la fuerza de ser necesario, pero ahora no tenía ganas para eso.

-Niños, dejen de hacer escándalo. Necesito de silencio y paz para poder terminar de calificar estos exámenes- ordenó el esposo de su Tía Frida también poseyendo una cara de exasperación (Que seguramente es causada por el bajo rendimiento académico de sus estudiantes)

-Ya lo oíste, CJ, ¡MANTANGA DIJO LA CHANGA!- sonriendo victorioso, Carl tomó el control y puso el canal en dónde pasarían la serie del Halcón, su Súper Héroe favorito.

-¡Oigan todos!- llamó de repente Carlota entrando al apartamento -¿Ya se enteraron? ¡Tenemos vecinos nuevos! Unos tal Chang compraron el apartamento de en frente, ¿No quieren darles la bienvenida?

-¡Que bueno, que bueno! Vamos a recibirlos como se lo merecen, ¿Andando?- CJ accedió sin dudarlo ni un segundo luego de dar unos pequeños aplausos de emoción.

-Tal vez en otra ocasión. En verdad, yo ahora lo último que necesito es que algo o alguien me agite más la existen…

-"¡INTERRUMPIMOS ESTE PROGRAMA PARA UNA NOTICIA DE EMERGENCIA!"- el programa que Carl miraba fue reemplazado por este anuncio.

-¡AY, NO MAMEN! ¡¿Qué puede ser más importante que ver al Halcón patearle el trasero a…?!

-"¡ESTAMOS BAJO ATAQUE!"- la queja de Carl murió en sus labios cuando la reportera dijo esto.

-¿Pero qué carajos…? ¡CJ, CARLOTA! ¡BUSQUEN A BOBBY Y A LOS ABUELOS! ¡RÁPIDO!- ordenó Ronnie y sus primos de inmediato y sin poner objeción hicieron lo pedido.

-¡MAMÁ, TÍA FRIDA, SERGIO, VENGAN ACÁ!- solicitó al poner a todo volumen el televisor.

-¡¿Qué ocurre, hija?!- le preguntó María cuando llegó con la Tía Frida y Sergio.

-¡MIREN ESO!- señaló la pantalla mordiéndose la uña del pulgar izquierdo.

En todos los canales se habló de un ataque sorpresivo en muchas ciudades claves de planeta. Inicialmente se creyó que fue una arremetida de la URI que rompió el Tratado de Paz que hizo con la CGO para apuñalarla por la espalda apenas las aguas se tranquilizaran.

Pero resultó ser que no era nada de lo que se esperó.

Entre vídeos en vivo por parte de los diversos medios de comunicación, se pudo apreciar el caos desmedido que puso nuevamente en alerta máxima a toda la humanidad.

Decenas de agujeros de dos o tres metros de ancho se habrían en el suelo para dar paso a, lo que fácilmente podría interpretarse, como demonios salidos de las entrañas del planeta.

No eran seres de color rojo, ni poseerán cuernos, tridentes o ese tipo de atributos tan trillados y como han sido representados en diferentes historias, pero podían ser más aterradores que cualquiera de los diablos que se hayan descrito en pasajes religiosos.

Estos seres son humanoides, más altos y corpulentos que la persona promedio, unos reptiles antropomorfos debido a la piel escamosa que los recubre siendo de color gris y sus grotescas facciones faciales que son un cruce de rasgos humanos con el de las bestias más salvajes que iban acorde con los diferentes rugidos y gritos que generaban al atacar.

No peleaban como unos animales embravecidos sin control, al contrario, esos individuos poseían su propia vestimenta y armamento militar como rifles, escopetas, explosivos e incluso lanzallamas con los que masacraban a toda persona que estuviese en su camino sin hacer distinción entre soldado y civil desarmado escuchándose perfectamente sus sádicas carcajadas de gozo por asesinar humanos; incluso a niños inocentes.

Por eso son peores que los demonios más abominables de cualquier cuento o relato.

-¡¿QUÉ SON ESAS COSAS?!- horrorizada, la Tía Frida le tapó los ojos a Carl y CJ mientras que Carlitos se había puesto a llorar en los brazos de Carlota que lo mecía intentando calmarlo.

-¡¿CUÁL ES LA EMERGENCIA?! ¡¿QUÉ OCURRE?!- preguntó Bobby llegando al apartamento junto con sus abuelos.

Nadie dijo nada y con tan solo ver lo mismo que ellos veían en la TV, fue suficiente para quedar igual de impactado.

Aun con la tembladera de las cámaras de los diversos noticieros, podía perfectamente apreciarse como esas cosas mataban a los humanos que no eran capaces de huir.

Acribillados a punta de disparos de rifles, despedazados con tiros de escopetas, reventados en mil pedazos por culpa de granadas e incluso por lo que parecían ser flechas explosivas que se incrustan en sus cuerpos y quemados vivos.

No estaban solos esos seres, sino que de esos mismos agujeros que se creaban sistemáticamente en diferentes zonas también salían otros monstruos aún más grotescos y aterradores.

Manadas de animales que parecían ser una aberrante fusión de perros y monos se movían como jaurías de lobos, tanto en el suelo, como en las paredes y techos de las estructuras para arrojárseles a cualquier incauto y devorarlo luego de soltar un colectivo rugido que aún a través de la pantalla de la TV hela el alma de aquel que los escuche.

Criaturas del tamaño de un cerdo corrían a gran velocidad en todas partes, siendo unas minas ambulantes, porque al llegar hasta los humanos daban un leve salto para activar un explosivo adosado a sus lomos matando a todo el que estuviese cerca y muriendo en el proceso.

Bestias tan grandes como un edificio de cuatro pisos, parecidas a un dinosaurio terópodo, estremecían el suelo con sus potentes pisadas y roncos gruñidos teniendo en sus grande brazos y espalda armamento pesado como ametralladoras y cañones siendo unas fortalezas andantes capaces de destruir todo a su paso y que no podían ser abatidos ningún arma convencional.

Y tal vez lo más aterrador de entre todos los monstruos vistos hasta ahora, eran unas bestias gigantes parecidos a arañas que surgían del suelo bajo los soldados que combatían mandándolos a volar y a sus vehículos militares al extender hacia arriba sus patas también soltando un también atronador rugido dejándolos a la completa merced de las otras bestias para que los asesinasen a su gusto.

En esos pocos minutos de vídeo, parecía mostrarse masacres mil veces peores que cualquiera de las vistas durante las casi 8 décadas de lucha continua de las Guerras del Péndulo.

-"¡NECESITAMOS AYUDA, NECESITAMOS AYUDA! ¡A LA COALICIÓN DE GOBIERNOS ORGANIZADOS LES SUPLICAMOS QUE…!"

Las suplicas de esa reportera fueron interrumpidas por una explosión. La cámara no fue destruida y siguió gravando mientras volaba por los aires hasta caer a un lado del cadáver de ella tendido bocabajo en el piso sobre un charco de su propia sangre.

Todos los televidentes podían ver con claridad la expresión en su cara. Tan solo duró una fracción de segundo, pero la agonía que sufrió antes de morir representaba las torturas que ni la más retorcida mente humana podría idear.

Y eso no fue lo peor.

-"¡PATEA SUELOS PATÉTICOS E INSIGNIFICANTES!"- lo último que esa cámara logro filmar fue a uno de esos reptiles humanoides que alzó su pie derecho recubierto por una gruesa zuela para aplastarla finalizando así con esa transmisión.

Quedando en las pantallas de TV el anuncio de transmisión interrumpida.

-Dios… Dios mío…- María juntó sus las manos a modo de rezo y las puso delante de su boca respirando entrecortadamente no haciendo nada para contener las lágrimas que les generó todo lo visto en ese comunicado.

-Esto… esto… ¡ESTO ES HORRIBLE!- Carlos abrazó a Frida que está en ese mismo estado emocional mientras que Carlota apego a Carl y CJ intentando calmarlos aún cuando ella temblaba de pavor.

-Pero… pero… ¡¿PERO QUÉ SON ESAS COSAS?! ¡¿NO SE SUPONÍA QUE LA GUERRA YA SE HABÍA ACABADO?!- al parecer en el hombro de un también shockeado Héctor, Sergio se sujetó los costados de la cabeza con sus alas.

-No tengo ni la más remota idea…- Bobby al también abrazar a Ronnie y a Lori desvió la mirada teniendo los labios temblorosos, pareciendo a punto de llorar como ellos.

Pero se contuvo y optó por el más firme semblante que podía esbozar.

Porque sabía muy bien que era lo que debía hacer a continuación.

-Tengo que alistarme- al soltar a su hermana y a Lori, se quitó el delantal que usó cuando estuvo en el mercado y lo tiró -¡ABUELA! ¿En dónde pusiste mi armadura de Gear y mi Lancer Retro?

-¿Qué? ¡¿PERO QUÉ ESTÁS DICIENDO, BOBBY?! ¡¿ACASO VAS A IR A PELEAR CONTRA ESOS MONSTRUOS?!- indignada, Ronnie lo tomó de una muñeca.

-¡POR UN DEMONIO!- agresivamente se soltó -¿No lo comprendes aún, Nini? ¡AHORA SOY UN SOLDADO! No me puedo quedar aquí cruzado de brazos y debo reportarme con el Alto Mando de la CGO. No tengo ni la menor idea que sean esas cosas, pero por lo poco que vi, ¡VAN A NECESITAR DE TODO SOLDADO POSIBLE PARA DETENERLOS!

Con un valor y determinación dignas de admirarse por alguien que no ha tenido la oportunidad de luchar en un verdadero campo de batalla, él la dejó con la palabra en la boca tampoco teniendo la sutileza de intentar calmar a sus demás familiares y haciendo oídos a lo que su esposa le decía.

Ronnie volvió a tomar asiento y posó una mano en la frente para intentar procesar esta nueva y mucha más crítica situación.

La mayor de sus preocupaciones hasta el momento fue su embarazo no deseado, ¿Solo para que ahora unos monstruos que aparentemente salieron de la nada den inicio a un nuevo conflicto armado a escala mundial?

Debía ser solo un mal sueño… ¡DEBE SER LA PEOR DE LAS PESADILLAS! ¿Cómo es que algo así podía ocurrir tan solo poco tiempo después de conseguir esa anhelada paz?

Lo que más la asustaba era su hermano. Imaginarlo en el frente, luchando con todas sus fuerzas contra esas bestias barbáricas hasta ser asesinado de alguno de los modos tan horribles que se mostraron en ese comunicado…

Detuvo sus delirios cuando su celular comenzó a sonar. Al verlo descubrió que se trataba de Lincoln queriendo hacerle una vídeo llamada.

Ya se imaginaba que iba a decirle.

-"¡RONNIE ANNE!"- tuvo que apartar el artefacto de su cara porque apenas contestó fue golpeada por el potente grito del albino -"¡¿SUPISTE LO QUE ACABA DE…?!"

-¡SÍ, SÍ! ¡LO ACABO DE VER EN LA TV CON MI FAMILIA!- pasó una mano por su cabello para recuperar compostura -¿Qué se supone vamos hacer ahora?

-"No tengo la más remota idea. Con lo poco que vi… temo que sin importar si estás embarazada o no, algún día te recluten a ti, a mí, a mis hermanas y a toda persona que pueda sostener un arma para que combatan a esos monstruos en un futuro cercano. ¡ES UNA LOCURA!"

Ese temor no pasó por la mente de la pelinegra. Solo pensó en como Bobby sería enviado al campo de batalla y tuviese un destino peor que el de su padre, ¿Y está la posibilidad de que ella y sus primos en el mañana deberán pelear contra ellos?

Frotó nuevamente su estómago y miró por la ventana. ¿Qué clase de vida le espera a su hijo?

Una fuerte cucharada de realidad no solo para ella, sino para los pertenecientes a su generación para que salgan de sus burbujas de seguridad y se hagan una idea de que sus vidas y futuros serán incluso más difíciles que las de sus antepasados.

Capítulo dos completado el 17/08/2023.

Y hasta aquí llegó el capítulo de hoy. Sé que la parte del inicio cuando Ronnie busca a Lincoln (Luego de darle su merecida paliza a Jordan XD) fue medio sosa o incluso cursi, pero eso que eso iba a ser parte del capítulo anterior que tuve que recortar para que no me saliera muy grande.

Es bueno ver qué, aunque también quedó impactado por esa revelación, él se comportó como un verdadero hombre al decirle que estará a su lado y responderá por su hija, cosa que no cualquier padre juvenil está dispuesto a hacer (Incluso varios hombres adultos)

Pero, al imaginar las reacciones de los Loud y los Casagrande ante eso… no puedo evitar atorarme de la risa XD ¿Cómo se imaginan las reacciones de ellos ante eso?

Cuando todo parecía que efectivamente las cosas iban a salirle bien a Ronnie debido a que contará con el apoyo de su abuela y con el regreso de Bobby… resulta que de la nada surgen unos monstruos rectilíneos que sin demora iniciaron una nueva guerra a escala mundial.

¿Qué son esos seres? Si creen que con lo visto en los noticieros fue de lo más violento, es solo la punta del iceberg comparado a lo que sucederá más adelante, porque créanme cuando les digo, que ríos de sangre es lo que va a correr (Música dramática)