N/A: Disclaimer: Todos los personajes y el mundo es de SM. Yo solo juego con ellos.
Tras leer los libros de nuevo muchos, muchos años después de hacerlo por primera vez, mi perspectiva de toda la historia cambió y decidí que, en mi madurez, me había vuelto repentinamente del llamado team Jacob por lo que decidí regalarme un final alternativo que me sacara esa espinita y he decidido compartirlo aquí por si en algún momento alguien también siente la necesidad de leerlo.
Para Jacob, la vida empezó en ese mismo instante.
Sabía cómo funcionaba todo ese asunto, lo había visto en la mente de Sam y Jared, como era, como se sentía, la forma en la que el mundo cambiaba en un infinitesimal segundo.
Pero sentirlo, vivirlo en carne propia… no creía que nadie estuviera preparado para algo así.
Él amaba a Bella, el cariño y la conexión que había sentido de niño había crecido convirtiéndose en atracción cuando sus caminos volvieron a cruzarse. Al principio se había visto deslumbrado por ella, por esa belleza suave y atemporal y se había enternecido con su torpeza y su forma de cuidar de los demás. Más tarde, mientras iban forjando una amistad que jamás habría esperado, se fue enamorando de cada pequeña parte que vislumbraba de su personalidad. Debajo de aquella debilidad en la que estaba sumida tras el abandono del chupasangre, encontró una chispa de fortaleza que iba abriéndose pasó día a día, tras las ojeras y el dolor había sonrisas y un humor similar al de él. Ella era mucho más de lo que se veía a simple vista y tras aquellos meses juntos Jacob había encontrado en ella un alma afín.
¿Cómo podría cambiar su mundo otra persona que no fuera Bella Swan del modo en el que Emily había cambiado el mundo de Sam?
Era por eso que había anhelado tanto como temido el momento de volver a verla desde que toda esa locura de la manada había comenzado. No solamente la orden de Sam había impedido que buscara a Bella, sus propios miedos habían tenido más peso del que quería reconocer.
¿Qué ocurriría si al verla nada hubiera cambiado? ¿Qué pasaría si al mirarla todo fuera igual que antes? ¿Y qué sucedería si se imprimara en ella estando como estaba perdidamente enamorada de un vampiro?
Lidiar con todo eso de las fases, de la fuerza y del descontrol ya era malo de por sí, pero sumar a la mezcla sentimientos y miedos adolescentes era una auténtica bomba de relojería
Por eso, en el momento en que la olió en el prado, se vio desgarrado en dos.
Una parte de él quería cerrar los ojos e ignorar su presencia, quería mantener su loca carrera tras la sanguijuela que se había atrevido a pisar sus tierras y acechar a Bella mientras la otra parte quería mirarla y terminar con esa angustia y esa terrible incógnita que le estaba volviendo completamente loco.
Por eso, cuando la escuchó gritar y el sonido de su voz arañó su corazón, supo que tenía que mirarla a los ojos, supo que tenía que arriesgar el todo por el todo y dejar las dudas atrás, dejar los temores y los miedos y enfrentar la verdad.
Así que lo hizo, la miró.
Y en cuanto sus ojos se encontraron estuvo a punto de quedarse absolutamente paralizado en mitad de su loca carrera tras el vampiro.
Fue una fracción de segundo pero Jacob lo sintió como una eternidad.
El mundo se inmovilizó y comenzó a pasar a cámara lenta. El parpadeo de aquellos ojos del color del chocolate caliente, la forma en la que sus labios demasiado grandes se abrían con creciente horror, el modo en que se tropezó y cayó al ver pasar a la manada.. Jacob sintió un cosquilleo en la planta de las patas que subió hasta su corazón, su piel hormigueaba, vibrando y la sangre bombeaba en sus oídos impidiéndole escuchar otra cosa que no fueran los atronadores latidos de su corazón, si hubiera estado en su forma humana habría comenzado a temblar y sudar sin duda alguna.
De pronto todo volvió a la normalidad, los gritos de sus hermanos en su mente, el olor del vampiro mezclado con el de Bella, el sonido del viento y los aullidos de Jared y Sam.
Gruñó girando la cabeza para concentrarse de nuevo en su misión sabiendo, sin género de duda que todo había cambiado para él y que ya nada volvería a ser lo mismo.