Una enfermedad estaba azotando gran parte del reino de Edo, aunque parecía ser una intoxicación alimentaria normal, parecía que había otra cosa más en todo este embrollo.

Una de las pistas más grandes que poseían era justamente lo del arroz, del cual notaron que una compañía llamado Ichigo estaba bajando la producción y muchos negocios dejaron de comprarlo, por lo que sospechaban que algo pasaba con esto.

Yoshimune decidió ir con Nico y Franco hacia el sitio en donde se hacía el arroz Ichigo, no tardaron mucho en llegar hacia un sitio de extensiones de tierra en donde nada más arribar, notaron a una gata mágica recorriendo los cultivos y tomando el arroz que se cultivaba.

- Joder, esto es duro, pero todo con tal de que mi abuelo y la compañía se salven, soy capaz de todo, aguantando este Sol.

- ¿Estás tú sola recogiendo este montón de arroz? – la peli rosa preguntó a lo que la joven de cabello negro dio un gran brinco.

- ¡Miau! ¡¿Qué demonios?! – la gata se calmó un poco – ¿Quiénes son?

- Lamento si te asustamos – Franco decía – solo venimos a ver esta planta de arroz.

- ¿También vienen por los rumores? – preguntó molesta la gata – ¿vienen a burlarse sobre nuestra producción de arroz y decir que está horrible?

- No venimos a eso, solo queremos saber cómo es que se produce el arroz Ichigo – aun con desconfianza, la gata siguió con lo suyo, aunque unos momentos después llegó el abuelo de esta.

- Ouse, ¿sigues trabajando así? Te he dicho que no te asolees mucho ya que te puede hacer daño.

- Abuelo, estoy bien, el arroz está creciendo de forma normal, he recogido bastante para que sea vendido y ya de una vez dejen los rumores de esto.

- ¿Qué rumores son? – Nico preguntó a lo que el viejo solo miró hacia sus cultivos de arroz.

- Mi arroz siempre lo he sembrado de una forma única, sin pesticidas ni nada por el estilo ya que, entre más natural, mejor es el producto, no obstante, en este último tiempo he experimentado algo que sigo sin comprender. El arroz ha tenido algo que hace que la gente ya no quiera comprarlo, además, ha llegado el mal de Edo que ha afectado más la reputación de mi compañía. No solo eso, sino que tuve que invertir mucho dinero en el mantenimiento de las plantaciones, además de otras cosas que me han dejado con poco dinero, de seguir así, tendré que cerrar la producción de arroz que tanto tiempo me dejó.

- ¡No dejaré que hagas eso! – Ouse exclamó – si tengo que trabajar todo el día agarrando arroz, no me importa.

- Por favor Ouse, no hagas eso, no quiero que te termines enfermando por hacer eso, es mi deber como el dueño de la arrocera tener empleados múltiples que me ayuden con este trabajo – el hombre decía, Nico se sentía mal por eso, Franco estaba buscando alguna respuesta de lo que pasaba.

Yoshimune fue por algo de arroz que tenían y al verlo, esta no notó nada extraño en el arroz, es más, le gustaba mucho como se veía, era como el que ella amaba comer. La peli rosa habló con el hombre y con la muchacha.

- ¿Cree que alguien esté intentado sabotearlo?

- No lo sé, pero es que no entiendo cómo es que mi arroz pasó de ser algo que se vendía mucho a no ser nada y repudiado por los ciudadanos de Edo.

- ¡Y ahora van por la competencia! – exclamó Ouse – ese arroz Ace es feo, ya lo probé una vez y no me gustó, el nuestro es más rico y natural, al otro siento que le echan mucho producto químico.

- No se preocupen, investigaré esto ya que siempre he probado su arroz y me gusta mucho – la peli rosa decía.

- Por cierto, no me presenté adecuadamente, soy Ichigo Yoshida y ella es mi nieta Ouse.

- Soy Nico Yazawa y él es mi pareja, Franco Yuzaki – el peli azul saludó.

- Y yo soy Shino Tokuda – sonrió la peli rosa y así fue como inició la investigación en ambas arroceras.

En la otra compañía, se encontraban Osono y Sukehachi quienes se dieron cuenta que las instalaciones de esta eran grandes, por lo que se decidieron infiltrar en estas. Al ser gatos mágicos, nadie sospecharía de unos gatos paseando por ahí por lo que no sería ningún problema.

Ambas mascotas de la Shogun pasearon por ahí y llegaron a donde estaba la principal fabrica en donde el arroz era llevado para su limpieza y posterior empacamiento. No obstante, las cosas no eran como esperaban.

- ¿Añado más químico o así está bien?

- Añádele más, entre más tenga, más durará y más la gente lo comprará – uno de los empleados asintió e hizo eso.

- Este arroz posee mucho químico, además, parece que no tienen medidas de control ni nada – Osono decía a su compañero quien asintió.

- Se supone que los controles de calidad tienen que saber de esto, pero me pregunto cómo es que el inspector de salubridad no ha dicho nada de esto – el gato mágico solo acabó de decir eso cuando notaron al inspector de salubridad el cual era reconocido por su gafete.

- Aquí huele a puro químico – exclamó este encontrándose con el jefe de la compañía – pero puedo hacer como que no vi nada, ¿no es así Ace?

- Claro que sí, además, ya tengo a mis compañeros que me echarán una mano – junto al dueño de la compañía, aparecieron tres sujetos: dos hombres y una mujer quienes poseían unas cosas ocultas como cuernos en sus cabezas y colas de demonio.

- ¿Ellos son los que riegan esa especia en los campos de cultivo de Ichigo?

- Sí, nadie parece darse cuenta de eso – susurró este, aunque todo era escuchado y visto por Osono y Sukehachi quienes iban grabando las cosas en sus celulares. La tecnología en Edo estaba avanzada, no solo eso, debían tener evidencias audiovisuales para estos casos.

- Hoy en la noche irán de nuevo a los campos de cultivo de arroz de Ichigo, supe que están cultivando de nuevo y a pesar de que no venden, no se dan por vencidos, en especial la nieta de Ichigo, Ouse-san – el peli negro apretó su puño – por eso, hoy en la noche no solo atacarán los cultivos de Ichigo, sino que también inhabilitarán a su nieta y así mi arroz se quedará como el principal grano de Edo jajajajajaja.

- Esto es horrible – susurró Osono, su compañero asintió y ya con algo de evidencia volvieron con su ama para comentarle lo que encontraron.

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En la noche…

La región de la compañía de arroz de Ichigo estaba calmada, la gata mágica Ouse estaba regresando adentro de su casa, no obstante, lo que no esperaría es que detrás de ella aparecieron 3 seres.

- ¿Quiénes son ustedes? ¡¿Qué quieren?!

- Tu vida – dijeron los 3 quienes sacaron sus alas de murciélagos.

- ¡¿Demonios?! – los sujetos atacaron a la chica quien trató de defenderse, pero la fuerza de estos era mayor a la de ella y la dejaron en el suelo con varios golpes y magullones, aunque esto no parecía que fuera a acabar pronto ya que los demonios fueron con la gata.

- Creo que podemos humillar más a esta gatita, yo la miro buena.

- Sí está buena – los dos hombres comentaban, la única fémina miraba eso con indiferencia.

- Bueno, viólenla si desean, yo iré a esparcir las especias en las plantaciones de arroz.

- De acuerdo, veremos cómo esta gatita maúlla jaja – Ouse no podía liberarse y solo podía llorar porque sería desvirgada de esa manera horrible, pero su destino era otro.

- Que vergüenza que personas como ustedes hagan cosas tan feas como esas – una voz nueva invadió el sitio siendo esta Yuzu quien venía con Franco.

- ¡¿Quiénes son ustedes?!

- Puede que les diga mi nombre, pero definitivamente no necesito hacerlo – Franco fue el que siguió sacando un artefacto parecido a un pequeño dinosaurio el cual se volvió una memoria – lo pagarán.

- ¿Y qué harán? – los demonios se alejaron de Ouse y los dos sudamericanos se pusieron a su lado.

- Hagámoslo Yuzu – el chico se lo colocó.

- Supongo que tendremos que darles con todo – esta sacó una memoria USB de color morado.

¡FANG!

¡CYCLONE!

- ¡HENSHIN! – los dos unieron las memorias a sus cinturones provocando la transformación Rider de ambos, aunque esta vez el cuerpo principal era el de Franco, el de Yuzu fue tomado por la gata peli negra.

- Por favor cuida mi cuerpo, Fran no quiere que se dañe por mi estado de embarazo – decía la peli lavanda siendo uno de los lados del Rider Doble, el de color negro mientras que Franco era el color blanco.

- Supongo que esto es lo que siente Philip cuando es el cuerpo principal, pero da igual, no es como que sea débil como él, ¡vamos compañera!

- ¡Vamos! – ambos chicos unidos en uno solo se batieron en duelo contra los dos demonios quienes no podía creer la cantidad de poder que poseía la fusión Rider.

Esta parecía ser más fuerte que la unión normal por lo que los demonios que los atacaban no podía dañar muy bien a la fusión de Yuzu y Franco.

- ¿Cómo estos humanos poseen tanto poder? – exclamó uno de estos recibiendo una fuerte patada que lo mandó a estrellarse violentamente en el suelo.

- Podemos hacer esto de la manera fácil o de la difícil – Yuzu decía – solo responde ¿Qué demonios estás haciendo con los cultivos de arroz?

- ¿Y por qué querían acabar con Ouse?

- No tengo porque decirles eso, además mi compañera ya está haciendo el trabajo.

- ¿Qué has dicho? – los dos observaron a la otra demonio que estaba esparciendo una especie de polvo.

El Rider Doble corrió rápidamente pasando por las plantaciones y dio un fuerte salto hacia donde estaba esta, la demonio tardó en reaccionar por la velocidad de ambos chicos y fue golpeada con una fuerte patada que la dejó inconsciente.

- D-Diablos, tengo que huir – el único demonio que quedaba en pie sacó sus alas y salió volando a toda velocidad de ahí.

- Ese tipo huyó.

- No importa, tenemos a dos de los culpables, solo queda interrogarlos – el Rider tomó a los dos demonios y los ató con fuerza para evitar una huida.

- ¿Q-Que son ustedes? – Ouse preguntó mirando al Rider.

- Bueno, podemos decir que es una habilidad que tenemos de fusión, es una explicación larga, pero solo tómalo como eso, una fusión – Yuzu explicaba, Franco desactivó la transformación y la consciencia de la colombiana volvió a su cuerpo.

- Mucho mejor.

- Se siente raro estar en otro cuerpo, ahora creo entender a Mei – río la gata de cabello lavanda.

- Mira esto Yuzu – Franco encontró una bolsita con una especie de polvo, este estaba con la demonio – creo que hemos encontrado lo que esparcía.

- No solo eso, siento que esto es la clave de todo este embrollo.

- ¿Eso es lo que ha causado que nuestro negocio se esté yendo hacia abajo? – Ouse preguntó.

- Eso creo, aunque tendremos que preguntarle a Asuka sobre esto – Franco sacó su celular llamando a su amiga y ella sabría que era.

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En la fábrica Ace, el dueño de esta estaba reunido con el inspector, así como varios de los socios y empleados de la empresa, todos en una cena.

- Mis demonios andan haciendo su trabajo, con esto quedaría sentenciado el destino del arroz Ichigo y toda la distribución de Edo será mía.

- Buena esa, el mal de Edo está relacionado con ese arroz, por lo que no les será fácil recuperarse de esto y cerrarán.

- Gran plan jefe.

- Lo sé, nadie sabrá de eso al final.

- Puede que no sea así – una voz femenina llamó la atención de todos volteando a ver a donde estaba la dueña de esta, apareciendo de entre las sombras Yoshimune acompañada de sus dos gatos.

- ¡¿Quién eres tú?!

- Soy la Shogun de la oscuridad y he venido a castigar las malas prácticas que han estado haciendo, todo esto con tal de hacer sufrir a un grupo humilde de arroceros y vender el suyo haciendo trampa.

- Pequeña niña, ¡no sabes de que hablas!

- Tú, inspector, se supone que debes evaluar de forma imparcial para que los productos de Edo sean de calidad, con esto, solo permites que la gente coma productos llenos de químicos, además, ustedes han arruinado el arroz Ichigo y provocado la enfermedad de Edo, para así que su arroz quedara en el olvido y ustedes fortalecerse económicamente. ¡No permitiré esto!

- ¿Quién te crees que eres?

- Soy la Mahou Shoujo Shino Tokuda, la defensora de los débiles y la que se encargará de llevarlos a la cárcel – esta sacó su Driver – más vale que sepan que no saldrán impunes.

- Maldita… ¡mátenla muchachos! – los demás sacaron espadas y armas de fuego y comenzó la masacre.

- ¡HENSHIN! – la peli rosa activó sus poderes llegando a su forma Kamen Rider OOO.

TATOBA TATOBA TATOBA

- ¡Mátenla! – la batalla dio inicio, Sukehachi y Osono obtuvieron su forma humana y comenzaron a pelear, acabando con varios de estos en cuestión de segundos.

Con el poder de Yoshimune, su batallase hacía fácil ya que al poseer las medallas que le daban distintos poderes, los enemigos que se le iban caían como moscas, ni siquiera las armas de fuego podían tocarla.

- ¿D-Donde están mis demonios cuando los ocupo? – dijo el señor Ace y justo en ese momento, apareció el último de los demonios el cual estaba para ayudar a su jefe – que bueno que llegaste Garg, ¡mátala!

- Lo haré – el demonio se lanzó hacia la Shogun quien evitó un golpe directo y luego de eso, dio vuelta en el aire hasta caer con todo su poder en sus piernas.

- ¡OOO KICK! – la patada fue tan fuerte que derribó por completo dejándolo fuera de combate, aun con su transformación fue hacia el inspector y el dueño de la arrocera.

- T-Tu… ¡¿Qué diablos eres?!

- La Mahou Shoujo Shino Tokuda, una simple estudiante e hija de una pobre madre soltera, pero además de eso, una justiciera – esta le dio dos golpes dejando a los sujetos fuera de combate, ya con eso estarían las cosas calmadas, en eso, las puertas de la fábrica se abrieron de golpe revelando a una mujer de cabello azul parecida Umi entrando con muchos hombres.

- ¡Soy la Bugyō de Minamachi, Echizen Ooka Sonoda! ¡Quedan todos detenidos! – los sujetos arrestaron a los involucrados en el asunto, Shino fue hacia la peli azul junto con Sukehachi y Osono – ¿se encuentra bien, mi Señora?

- No te preocupes Tadasuke, estoy bien, apuesto que Yuzu-san y Yuzaki-san se habrán encargado de lo demás, solo queda llevarlos a juicio.

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Al día siguiente…

Las dos Bugyōs de Edo estaban reunidas ahí. La primera era Yuzu la cual se encontraba con Echizen, ambas tenían a los dos culpables de todo este embrollo con el mal de Edo.

- Ryuta Ace, levanta tu cabeza – decía la peli azul y el sujeto estaba hincado en el suelo del patio de la oficina de Yuzu como Bugyō.

- También tú, Hidoku Kanako, inspector de salubridad – ahora el sujeto hizo eso – hay muchas pruebas en tu contra por tu corrupción en el caso del arroz.

- Además, Ryuta Ace, por tu culpa se ha casi llevado a la quiebra el negocio del arroz Ichigo usando tácticas sucias como el emplear demonios para esparcir especias de otro mundo.

- ¿Tiene pruebas de eso?

- Claro que sí – Yuzu miró hacia atrás en donde apareció justo Ángel con los demonios atados y tirando las especias.

- ¿Q-Que eres tú? – una enorme presión hizo que este se callara.

- Más respeto humano, estás ante la reina de los demonios, así que guarda silencio – la peli blanca decía – esas especias son oriundas de mi reino, es Polvo Picante Demoníaco, para nosotros los demonios es solo un poco picante, pero para las demás especies son duras y pueden provocar intoxicaciones y otros males.

- El mal de Edo fue provocado por este polvo el cual rociaban en el arroz de Ichigo, las personas estaban enfermándose y eso haría que solo fueran por el arroz Ace.

- Los químicos que les metieron serian cancerígenos, aun así, al introducirles más químicos evitarían que eso pasara ya que tenían al inspector comprado para evitar que esto saliera a la luz.

- Podríamos darles la sentencia, pero alguien más quiere decirla, ¡muestren sus respetos!

- ¡LA SHOGUN ESTÁ AQUÍ! – se hizo el anuncio y los sujetos aprisionados bajaron sus cabezas, así como los demonios que Ángel tenía en su poder. La peli rosa se sentó en medio de sus funcionarías.

- Antes que nada, quiero que sepan que me siento asqueada de sus acciones, simplemente por querer más dinero fueron por personas inocentes y eso no lo puedo permitir – Yoshimune exclamaba con molestia – ambos… levanten la cabeza.

- S-Sí – estos al hacerlo y ver el rostro de la peli rosa quedaron de piedra al recordar que la misma chica que los enfrentó, era la gobernante de todo el reino.

- T-Tú eres…

- Ustedes dos, por sus viles y horribles acciones, ¡serán condenados a muerte por decapitación! ¡Han puesto en peligro la vida de muchas personas de Edo! ¡No se los perdonaré! ¡Llévenselos! – los sujetos fueron llevados por los guardias.

- Por cierto, ¿qué harás con los demonios? – Yoshimune preguntó a su madre, aun debían hablar de esos temas.

- Oh, tengo un castigo para ellos, esto por haber atacado a un reino amigo – la sonrisa de Ángel era clara – serán enviados a los Pozos de Brea Negra.

- ¡Eso no!

- ¡Cualquiera cosa, menos eso!

- ¡No quiero morir en los pozos! – exclamaron estos, pero siendo ignorados por la reina del Kólasi, esta abrió un portal por el cual estaba por irse, esta miró a la peli rosa.

- Tendremos que hablar muchas cosas contigo ¿escuchaste honey? – esta le guiñó el ojo y sin más se fue con estos al Kólasi.

Cabe decir que luego de eso, el arroz Ichigo volvió a ser el mejor arroz de Edo una vez dispersado el rumor del mal de Edo ya que se calmó toda la situación y los enfermos se recuperaron rápidamente.

- Todo ha vuelto a la normalidad, además de que me gusta cómo es que el arroz ha vuelto a ser lo que era – Nico decía al lado de Franco.

- Para mí sabe bien – Nico decía – por cierto, linda espada que te dio Shin-san.

- Me dijo que me quería dar un título oficial, no lo acepté ya que no es como que me interese, pero al final dijo que esta espada me permite entrar aquí sin ningún problema, así que no creo que todo esté mal al final – cuando ambos llegaron, se encontraron justo con Ouse.

- Ouse-san.

- Solo quería venir a agradecerles por lo que nos ayudaron y bueno, les he traído esto – esta les mostró unos costales de arroz.

- Esto es genial, realmente aprecio eso, mis chicos comen como no tienes idea.

- Lo que son mis chicas en casa comen mucho arroz y es un gasto menos si llevo uno de estos, muchas gracias.

- Es lo menos que puedo hacer por la ayuda, las ventas han vuelto a ser mejores, por lo tanto, ayudaré a mi abuelo a dirigir el negocio.

- Me alegro que las cosas marchen a la perfección, lo diré de nuevo, la Shogun se encargó de castigar a esos tipos, no por algo ella se merece el 100% de aprobación – Franco solo rodó los ojos por eso.

La vida en Edo volvió a la normalidad, los habitantes podían seguir con sus vidas normales bajo el régimen de Yoshimune quien seguía batallando para que el bien seguiría reinando en Edo.

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Continuará…

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Y hasta aquí el capítulo de hoy.

Este crimen fue aclarado, una especia demoniaca la cual hace que los que no sean demonios se enfermen, pero al menos la cosa se detuvo a tiempo.

Yuzu y Franco uniéndose de nuevo, ahora con Franco como cuerpo principal que tengo que decir que cuando hice aquel capítulo hace tiempo cometí muchos errores, ahora lo he podido arreglar un poco para que Franco tenga la memoria Joker y Yuzu la Cyclone.

Yoshimune mostrando su poder una vez más para vencer a los autores del crimen, aunque la pelea del Rider doble fue mejor.

Y pobres de los demonios que serán castigados por Ángel por tal imprudencia en atacar un reino aliado.

Al menos, el arroz Ichigo vuelve a ser el mismo y todo estará genial a partir de ahora.

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Modo serio.

Creo que aquí ya saben que voy a poner, ya saben de qué voy a hablar sobre "eso". Miren, la mera verdad no me molesta, lo que si me incomoda y me enfada un poco es que vayan palabras mayores dirigidas hacia ustedes, eso no lo quiero, esas palabras me las merezco yo que soy el creador de este fic, el que tuvo la idea de crear este universo.

Por eso, solo deseo que no se le diga a nadie palabras mayores o de hate que vayan dirigidas hacia alguien, no quiero que esto se vaya de las manos, entiendo su malestar y lo respeto, como dice mi hermano, el tiempo cura todo y eso haré.

Lo me dejó dolido es que justo, 16 de agosto, pero de hace 2 años perdí contacto con un amigo, creo que a lo mejor tal vez sepan quién es, a lo mejor no, pero justo que pasara esto el día de ayer pues fue duro la verdad.

Y si preguntan ¿Qué pasará? ¿Lo dejarás? Por supuesto que no, seguiré de forma normal hasta que todo vuelva a la normalidad.

Solo por favor, no quiero que se digan cosas malas sobre este asunto, y si van dirigirse palabras de odio, por favor que sean hacía mí que soy el que se las merece.

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Sin más, este ninja se despide.

Bye.