"Carretera a Londres, Inglaterra"
Un vehículo estaba recorriendo la carretera en dirección a un lugar en específico, dentro se encontraba una joven pareja de excavadores junto a su hijo de cinco años, un niño pequeño de cabello rubio y ojos verdes que jugaba con una espada de juguete.
- Shino, pronto vamos a acercarse al descubrimiento más grande de nuestras vidas. – Expresó el hombre.
- Así es cariño, luego de muchos años de investigación finalmente logramos dar con el paradero de la legendaria espada del rey Arturo, Excalibur. – El trabajo de toda la vida de aquella pareja siempre ha sido encontrar todo lo relacionado a las leyendas arturianas, han dedicado muchos años de investigación y contado con apoyo de diversos profesores universitarios y excavadores por igual, actualmente iban al sitio de excavación donde, creen, podrán encontrar la famosa espada.
- Ya hemos llegado. – Se desviaron de la carretera para ir por una pendiente, por delante se veían unas ruinas de un castillo y un sitio de acampado, ahí se encontraban varias personas.
- Mr. Koji, Ms. Shino, sean bienvenidos. – Les recibió un hombre de complexión ancha y musculosa, cabello grisaceo y barba prominente.
- Señor Klaus. – Saludó Koji, en eso el pequeño salió corriendo.
- Pero igual es el pequeño Shoto. – Acarició el cabello del pequeño. – Finalmente… todo el trabajo de una vida nos ha llevado aquí.
- Así es… - El padre sonrió de forma suave. – Me alegra no haberme rendido en mis sueños, más que nada por haber contado con mucho apoyo, de ustedes y de mi esposa.
- Cariño… - Shino abrazó a su esposo. - ¿Cómo va la excavación?
- Perfectamente, la maquinaria pronto podrá atravesar la piedra caliza y llegar a la cueva donde, tentativamente, se encuentra la espada.
- Sí… según las leyendas, Sir Bedivere había llevado de vuelta la espada al lago donde habitaba la dama Nimue, pero en realidad resultó ser una tergiversación de la leyenda y que en realidad la espada fue escondida en una cueva en lo profundo del territorio cercano al castillo del rey, finalmente podremos dar con ella.
- Exacto, será el descubrimiento del siglo, todos aquí vamos a ganar fama gracias a ustedes dos. – Exclamó Klaus.
- ¡Shoto, no corras muy lejos! – la madre llamó a su hijo. – Ah… es alguien travieso.
- Parece que heredó mi espíritu aventurero. – Exclamó Koji.
- Vamos a romper la última capa. – Se dio el aviso, el taladro comenzó a romper la capa del subsuelo en aquel momento, la piedra salió volando hasta que entonces se pudo notar un agujero.
- Cuidado. – Hicieron retroceder el taladro, Koji se acercó y con cincel, comenzó a romper ese pedazo de piedra, entonces por debajo se abrió el agujero quedando más grande. – Lo hicimos… esta es la entrada a la cueva.
- Bien hecho Mr. Koji. – Celebró Klaus, Shoto vio con curiosidad ese agujero.
- Cuidado. – La madre sujetó al pequeño en aquel momento. – Es peligroso que entres ahí.
- Hmph. – Hizo un puchero el pequeño, sacando una risa de Shino.
- Ahora solo debemos de enviar un grupo de exploración para sacar la espada. – Exclamó Koji. – Debo ir por ella, no puedo perderme tal descubrimiento.
- Si Mr. Koji irá, yo también. – Declaró Klaus, así se formó un grupo donde irían los tres y otros dos más.
- Quisiera que alguien cuide de Shoto mientras vamos abajo. – Expresó Shino, pero no es que el resto de trabajadores supiera cuidar de un niño.
- Lo siento Ms. Shino, pero mis hombres no son precisamente niñeras. – Comentó Klaus.
- ¡No somos unos completos novatos jefe! – Reclamó alguien, generando risas alrededor.
- No sé… puede ser peligroso abajo y llevar a mi hijo no es seguro. – Ella no estaba muy segura al respecto.
- Ms. Shino, será mejor si lo mantiene con usted, después de todo nosotros los protegeremos. – Ella podía sentirse un poco más segura si Klaus los protege, ella asintió.
- Estaré contando con usted entonces señor Klaus, escucha Shoto, no te alejes de mí ¿entendido? – El pequeño asintió.
- Entonces, vamos a adentrarnos a la cueva. – Declaró Koji. De ese modo el grupo comenzó a descender por el agujero por medio de una cuerda, primero bajando él, luego fueron Klaus y sus hombres y de último Shino con Shoto en brazos, una vez pisaron suelo, tenían linternas para alumbrar el lugar, entonces Koji alumbró adelante, viendo la entrada a una cueva. – Ahí está.
Primero él fue adelante seguido de Shino, Klaus y sus hombres iban por detrás, buscaban tener cuidado con sus pasos por si hubiera alguna grieta, en ese momento volaron algunos murciélagos.
- Cuidado. – Klaus alejó a estos para que se fueran. – Esos animales no nos iban a dejar en paz.
- ¿Estás bien Shoto? – Preguntó Shino al pequeño rubio, este asintió.
- Veo algo adelante. – Señaló Koji. El grupo continuó avanzando hasta que de repente llegaron a un espacio mucho más amplio, como si pareciera haber sido formado artificialmente, se veían esculturas talladas en piedra alrededor mostrando diversos pasajes y al centro una figura celestial. – Esa debe de ser la dama del lago…
- Koji, mira. – En el centro vieron algo, ahí entonces estaba posada una espada la cual brillaba con suma intensidad, una empuñadura dorada con incrustaciones azules, el padre quedó boquiabierto.
- Eso es… Excalibur… - Se fueron acercando para verla, se encontraba reposada sobre un vitral, Koji ya quedó cerca para observarla. – No cabe duda… es la verdadera… Shino, lo hicimos, finalmente la encontramos.
- Que bien cariño, nuestro trabajo no fue en vano. – Sonrió ella.
- Ahora… solo debo tomarla con cuidado. – Koji extendió su mano, necesitaba cuidar tal antigüedad como se merece, ya estaba a solo centímetros de tocarla…
*BANG*
- ¡Aagh! – De repente una bala atravesó el hombro de Koji, a lo cual Shino quedó sorprendida. - ¿Q-Que pasa?
- Bueno… realmente le agradecemos por habernos traído al tesoro. – Quien dijo eso no fue otro más que Klaus, el cual poseía una pistola en su mano, Koji se dio la vuelta, sujetando su brazo herido.
- Klaus… ¿Qué es todo esto?
- ¿Acaso no se dio cuenta? Somos saqueadores de tesoros, a partir de ahora tomaremos esa espada y la llevaremos a vender por mucho dinero. – Tanto él como sus hombres sonrieron de forma diabólica.
- N-No puede ser… - Shino estaba temblorosa, sujetando a Shoto.
- ¿Mami?
- Todo estará bien Shoto, no te preocupes…
- Klaus… maldito… - Koji apretó los dientes debido a la traición, en ese momento Klaus pateó a este, alejándolo de la espada. – Aaagh.
- Realmente agradecemos su colaboración Mr. Koji, sin usted, nunca hubiéramos dado con este gran tesoro que será muy bien valorado, realmente me gustaría compartir una pequeña parte con usted.
- ¡Eso no, se supone que es un tesoro valioso, no es para vender! – Gritó Koji.
- Es una lástima… aunque fuera por poco tiempo, lo vi como un amigo, pero no podemos dejar ni un solo rastro de todo esto. – Le apuntó con su arma en la frente. – Lo siento, pero debe de morir.
- ¡No, no mate a mi esposo! – Empezó a gritar y llorar Shino, Koji solo pudo ver con enojo a Klaus el cual estaba a punto de apretar el gatillo.
- ¡J-Jefe, algo está pasando! – Uno de los hombres alertó al resto, de repente se abrió como una especie de portal, unos seres con una forma humanoide y brillante salieron de ahí, las pupilas de Klaus se dilataron.
- No puede ser… ¿Noise? ¿Qué diablos hacen aquí?
- ¡Jefe, debemos de escapar! – Los dos hombres comenzaron a disparar contra los noise pero no era efectivo contra ellos, las balas prácticamente rebotaban. - ¡Jefe Aaaaaaah! – Uno de los noise tocó a ese hombre el cual entonces comenzó a desaparecer, haciéndose cenizas.
- Esto es malo… - Klaus tenía que tomar la espada y escapar, pero en ese momento Koji lo empujó, haciendo que cayera al suelo. – Mierda.
- No te irás de aquí con Excalibur. – Exclamó él, aún con la herida.
- Maldito… - Quiso atacarlo pero en ese momento uno de los noise se tiró sobre él, solo se podía escuchar sus gritos agónicos mientras desaparecía, igual el otro hombre había muerto.
- Cariño… que podemos hacer, estamos rodeados… - Shino sujetaba con fuerza a Shoto, Koji buscaba una forma de salir de ahí, entonces logró ver un agujero, pero era pequeño, solo podía caber un niño, en ese momento este apretó su puño con fuerza.
- Shino… lo siento… pero al menos nuestro hijo debe de vivir.
- Cariño… - Ella estaba llorando, en ese momento se movieron hacia donde estaba el agujero, Koji le dio la espada con todo y empuñadura a su hijo.
- Escucha Shoto, por nada del mundo sueltes esa espada, si todo sale bien… podrás encontrar una salida.
- ¿Papi? ¿Mami? – Miró a sus padres los cuales se esforzaban por sonreírle, Shino besó la frente del pequeño.
- Siempre te vamos a querer, eso no lo olvides… - En ese momento ella dejó a Shoto por el agujero y entonces se comenzó a deslizar, lejos de ahí.
- ¡Mami, papi! – Él solo podía ver mientras se iba alejando, viendo por última vez los rostros de sus padres antes de desaparecer completamente, ya entonces Shoto siguió cayendo por ese agujero hasta que no se supo nada más…
Comenzó a abrir los ojos, luego de haber caído por ese agujero no recordaba nada más, ya entonces se levantó, mirando a todos lados.
- Papi, mami. – Quiso llamar a sus padres pero no hubo respuesta alguna, Shoto bajó la mirada. – Papi… mami… - Empezó a llorar, estaba solo en ese sitio, aun teniendo la espada en manos. – Quiero verlos… - En ese momento vio como portales se abrieron y entonces aparecieron noise, él sabía que era peligroso quedarse ahí por lo que tenía que correr.
Empezó a huir lo más rápido que pudo de los noise aunque este le seguían y siendo apenas un niño no es que pudiera correr más rápido que ellos, comenzó a adentrarse más en la cueva aunque no veía posibilidades de una salida, ya en cierto momento acabó tropezando. Los noise ya estaban muy cerca de él, debido al miedo cerró los ojos, abrazando la espada.
- (¡Papi, mami! No quiero morir, por favor… que alguien me salve.)
"Muy bien, si tú lo pides"
En ese momento un brillo enceguecedor empezó a salir de la espada, sorprendiendo a Shoto, los noise que buscaban acercarse a él ya no pudieron, debido al gran resplandor, este les hizo daño, causando que desaparecieran, ya entonces la luz se fue haciendo más brillante que Shoto no pudo ver nada.
Una vez la luz se fue, el rubio abrió los ojos, solo para encontrarse con un páramo vacío, no había nada, todo era blanco, pero si hubo algo que logró ver, muy adelante se lograba observar una torre blanca, no podía medir la extensión exacta pero parecía ser realmente alta.
- Donde estoy…
- Bienvenido a Avalon. – Escuchó una voz femenina, el pequeño miró a ver a todos lados.
- ¿Quién es?
- Aquí arriba. – En ese momento miró a ver al cielo. Una figura se encontraba ahí flotando, una mujer de cabello blanco, ojos rubíes, llevando un ropaje blanco que se extendía totalmente por todo su cuerpo marcándolo y con un bastón en mano, aquella mujer que tenía una apariencia sumamente hermosa acabó aterrizando frente al niño. – Deberías agradecerme, yo fui quien te salvó y además permití tu entrada a Avalon.
- Esto… ¿Quién es? – Preguntó el pequeño, la mujer sonrió.
- No puedo decirte mi nombre en concreto, pero si pudieras llamarme de algún modo… Lady Avalon, llamame así.
- … Soy Uemura Shoto.
- Lo sé. – Respondió Lady Avalon. – Te he estado observando a través de la empuñadura, puedo verlo todo desde la torre de Avalon aunque en sí no tengo muchos permisos para intervenir con el mundo exterior, usé gran parte de mi magia en salvarte y traerte aquí.
- Esto… gracias señorita Avalon. – Hizo una reverencia, la mujer se sonrojó.
- Jeje, que tierno eres~ - Ella aprovechó en sujetarlo y abrazarlo. – No tienes nada qué temer, tu querida Onee-san te cuidará a partir de ahora~
- Yo… debo volver, quiero encontrar a papi y mami. – Respondió él, la sonrisa en el rostro de Avalon se borró.
- Esto… es difícil de decírtelo pero… no podrás volver a ver a tus padres, ellos… ahora están en el cielo, donde te estarán viendo por siempre.
- ¿En el cielo? Acaso papi y mami… ¿no puedo ir con ellos? – Avalon abrazó con fuerza a Shoto.
- Así es… pero no estarás solo, yo ahora voy a cuidarte como tu Onee-san… pero igual ahora serás mi nuevo discípulo.
- ¿Discípulo?
- Así es, la espada… Excalibur te ha reconocido, desde que estés dentro de Avalon y que haya podido responderte, demuestra que eres digno de portar la espada y con ello hacer uso de sus poderes, porque no cabe duda… posees parte de la sangre del rey de los caballeros, un Pendragon.
- Esto… no lo entiendo. – El pequeño no llegaba a entender algo tan complicado para su edad, Avalon sonrió.
- Lo diré de forma sencilla, voy a ser tu maestra de ahora en adelante, aprenderás a usar la espada y algo de magia de reforzamiento igual. – Los ojos de Shoto se iluminaron.
- ¿Magia? Podré lanzar hechizos como en Harry Potter.
- Tampoco nada tan vistoso, tu fuerza reside más en el uso de Excalibur, así que solo podrás usar magia puntual para ser más fuerte o lanzar ráfagas de mana, bajo mi tutela aprenderás todo lo necesario para ser un caballero.
- ¡Sí! – Exclamó el rubio con emoción, Avalon sonrió.
- Admiro ese entusiasmo, entonces, a partir de ahora Uemura Shoto no existe más, ahora llevarás el apellido de tu ancestro, un gran rey que lo dio todo por Inglaterra hasta el final… serás llamado Shoto Pendragon.
Ese fue el inicio que empezó a mover el destino de ese pequeño, en ese espacio en blanco con solo una gran torre, él empezaría un arduo entrenamiento para aprender a usar Excalibur en todo su poder, todo para encaminarse a un futuro tanto lleno de obstáculos como de encuentros y superaciones.
Ahora viviendo dentro de Avalon, Shoto comenzó a tener un duro entrenamiento para manejar la espada, todo bajo la tutela de Lady Avalon, ya que no sabía cuántos años le tomaría para ser alguien diestro, ella veía potencial en el pequeño.
- Muy bien Shoto, empecemos con tu entrenamiento. – Declaró esta. – Antes de que siquiera levantes la hoja de la espada, primero debemos de enfocarnos en tu poder mágico, al ser un sucesor directo, debes tener un poder mágico escondido que es lo que vamos a revelar el día de hoy.
- ¡¿Podré volar!? – Exclamó Shoto con ojos brillantes, la peliblanca desvió la mirada.
- Esto… no realmente, tu magia no se enfoca en lanzar hechizos, sino que lo harás para fortalecer tus ataques físicos, Excalibur se volverá una extensión de tu propio cuerpo por el cual canalizarás tu mana junto a tus circuitos mágicos, ahora vamos a hacer la prueba, necesito que te pares frente a mí.
- Sí. – El pequeño se puso frente a ella y esta posó su mano sobre Shoto, entonces cerró los ojos para concentrarse, en ese momento comenzó a ver con su magia los circuitos mágicos de Shoto, observando como una red brillante que se marcaba por todo su cuerpo.
- (Esto… aún no está totalmente desarrollado, pero si logro trabajarlo, será algo que esté casi al nivel de él…) – Abrió los ojos. – Muy bien chico, ya terminé, por ahora no puedo decirte nada seguro pero realmente tienes un potencial escondido.
- ¿Puedo hacerlo? – Preguntó él, Lady Avalon asintió.
- Para eso estoy yo, te ayudaré a sacar todo el poder que tienes y dentro de unos años serás alguien tan bueno como tu antepasado, eso te lo aseguro. – Respondió ella. – Ahora que ya sé cómo está tu sistema, es momento de empezar a trabajar, vamos primero con lo básico, tienes que aprender a canalizar el mana que tienes.
- ¿Eh? – El pequeño no entendía mucho al respecto, la peliblanca buscó una forma de explicarlo.
- Lo que quiero decir es que sientas como si una especie de corriente recorriera tu cuerpo desde adentro, sí quieres ponerlo de algún modo, como si delfines estuvieran nadando en el agua dentro de ti.
- Delfines… - Shoto cerró los ojos y comenzó a tomar aquella imagen, la de unos delfines que tomaban forma dentro de su cuerpo, que lograra sentir el poder por todo su cuerpo mientras este iba recorriendo los cauceles de agua que se imaginaba, por fuera Lady Avalon observaba el desempeño de Shoto en aquel momento, fue entonces que lo vio brillar.
- (Este brillo y mana… jeje, parece que está empezando a entenderlo.) – Fue solo durante un par de segundos pero surgió, fue entonces que el rubio cayó agotado.
- No pude…
- No es verdad. – reconfortó ella. – Vas por un buen camino, no a la primera se puede ser bueno, para eso estoy yo aquí, como tu maestra, te enseñaré a manejar tu mana y aplicarlo a la espada lo mejor que puedas.
- … ¡Sí!
Desde ese momento empezó el entrenamiento para Shoto, Avalon le hizo expulsar su mana en muchas ocasiones, con el paso de los días se empezó a ver un progreso lento pero seguro, antes solo eran segundos, a los dos meses ya lograba expulsar por dos minutos y un año y medio más adelante sobrepasaba los cinco minutos, eso llevó a que ahora le enseñara técnicas de espada.
- Intenta darme. – le ordenó a Shoto, este tenía una espada de práctica, el rubio fue hacia ella con un ataque frontal, a lo que esta bloqueó con su bastón. – Nada mal, tienes iniciativa pero la técnica te falta totalmente. – Lo apartó e hizo caer al suelo. – Una vez más.
- ¡Sí!
Le pedía que la atacara y ella lo derribaba, así fue en cada ocasión hasta que pudiera darle un golpe al menos, del mismo modo siguió haciendo que expulsara mana y lo aplicara a la espada de práctica.
- ¡Aaaah! – En ese momento él saltó y atacó a Avalon, ella lo bloqueó como siempre pero cuando iba a derribarlo, se llevó la sorpresa que Shoto se dio la vuelta y pasó su bloqueo, este sonrió. – Te tengo.
A pesar de estar confiado de lograrlo, la peliblanca extendió la mano y con un hechizo levantó una barrera para protegerse, expulsando en el aire a Shoto.
- Eso no me lo esperaba… jeje, estás mejorando cada vez más chico.
- Auch. – Cayó en el suelo de forma pesada, a pesar de todo, se levantó. - ¡Una vez más!
- ¡Adelante! – Le retó.
Así pasaron más años, Lady Avalon fue transmitiendo más de su conocimiento, tanto de la magia como del uso de la espada a Shoto, quien fue mostrando un crecimiento constante, haciéndola sentirse orgullosa del desempeño de su nuevo alumno, fue así que doce años pasaron rápidamente…
- Ah… no más jeje… - En una cama estaba Lady Avalon durmiendo plácidamente, el asunto es que ella dormía desnuda, en otra cama dentro de esa habitación estaba Shoto, el tiempo lo había cambiado, ahora teniendo un cuerpo mejor trabajado, sin demasiada musculatura pero sí más esbelto, su cabello era largo, llegándole hasta la cintura, en ese momento se levantó.
- … Maestra, voy a preparar el desayuno. – Le avisó.
- Ah… sí… - Fue todo lo que dijo entre sueños, Shoto sonrió, ya así fue a la cocina donde se puso el mandil encima y empezó a cocinar, sacando la leche y huevos para preparar el desayuno en la estufa de piedra, así el olor de la cocina empezó a inundar el sitio.
- Huele bien~ - La peliblanca entró en ese momento. – Buenos días Shoto.
- Buen día maestra… le recuerdo que no debería andar solo en ropa interior. – Avisó Shoto sin verla, ya que sabía de las costumbres de la maga.
- Que no es ropa interior, es un traje de baño. – Ella hizo un puchero. – Me siento cómoda yendo así, no me lo recrimines.
- No sé cuántas veces hemos hablado de esto, pero debería de cuidar mejor su imagen, está frente a un hombre después de todo.
- No quiero. – Ella se cruzó de brazos. – Avalon es mi territorio así que puedo hacer lo que yo quiera.
- Lo hago porque me preocupo por usted. – Respondió de regreso, Avalon soltó un suspiro.
- Ya hasta en personalidad te vas pareciendo a Arthur… bueno, vamos a desayunar~ - Ella fue a sentarse a la mesa, Shoto terminó de prepararla y dejó los platos, así ambos se sentaron a comer. – Hmmm~ está delicioso como siempre~
- Entonces maestra ¿Qué voy a entrenar el día de hoy? – Preguntó Shoto, la peliblanca lo vio.
- Shoto… has pasado doce años entrenando, controlando tu mana y aprendiendo a manejar la espada, a estas alturas considero que ya te he enseñado más que suficiente… voy a hacerte la prueba final. – Eso sorprendió al rubio.
- ¿Prueba final?
- Así es. – Ella entonces se puso seria. – Tienes que darme un solo golpe letal con Excalibur, si lo haces, habrás terminado con tu entrenamiento.
- Pero eso… no estoy seguro. – Él no tenía confianza en haber aprendido todo de ella, ya entonces esta sonrió.
- Descuida, eres mi querido alumno, te he estado preparando para este momento en el que finalmente puedas salir al mundo a cumplir tu misión… es solo la etapa final de tu primer capítulo.
- Maestra… muy bien, lo daré todo. – Respondió Shoto, Avalon sonrió.
- Me parece excelente, terminemos de desayunar. – Así continuaron comiendo hasta que terminaron, en ese momento salieron de la torre, ahora estaban en un páramo lleno de flores blancas, Shoto tenía a Excalibur en su mano, la tomó y desenvainó en aquel momento, la hoja brillaba en todo su esplendor, como lo recordaba.
- Estoy listo maestra.
- Muy bien Shoto, yo igual iré en serio, así que espera cualquier cosa de mi parte, entonces… cuando estés listo.
- Claro. – Así se quedaron por unos segundos, un leve soplo de viento pasó y entonces cuando terminó… - ¡Ahora!
Shoto fue en aquel momento hacia ella, haciendo un ataque horizontal, Avalon lo bloqueó con su bastón, sintiendo la fuerza y presión.
- ¡Jeje, has mejorado en fuerza, pero veamos que tal en técnica! – Avalon lanzó un hechizo de rayo hacia Shoto, este lo vio venir, saltando hacia atrás pero no era todo, ella hizo crecer unas ramas para que se tropezara, casi al momento que Shoto se iba de espaldas, este dio la vuelta y con su mano se impulsó para ponerse de pie, Avalon estaba frente a él y le atacó con su bastón, este apenas y logró bloquearlo. – Nada mal, veo que estás aplicando lo que te enseñé, pero no es suficiente.
Avalon levantó su mano libre con la cual empezó a conjurar una fuerte ráfaga de viento, dispuesta a atacar de gravedad a Shoto, eso demostraba lo muy en serio que iba.
- (Tengo que concentrarme, siente el mana.) – Shoto cerró los ojos, en ese momento empezó a sentir el mana a su alrededor, viendo una gran masa que provenía de su maestra, entonces esta comenzó a moverse. – Lo tengo.
Shoto comenzó a correr por la izquierda, Avalon no iba a dejarlo escapar por lo cual lanzó el viento, pero en ese momento el rubio tomó la espada con fuerza e hizo que un aura rojiza la rodeara.
- ¡Mana Burst! – En ese momento una fuerte ráfaga de presión fue expulsada de la espada, chocando directamente con el viento lanzado por Avalon, por lo cual generó un choque que hizo temblar los alrededores, la peliblanca soltó un silbido.
- Ya puedes usar el mana burst hasta ese nivel, y eso que solo usé una pequeña parte de mi magia.
- No te distraigas maestra. – Shoto saltó a un costado de ella para atacarla, cuando iba a cortarle por la cadera, esta colocó su bastón para bloquearlo, momento en el que Shoto aprovechó a usar otra ráfaga de mana para apartarlo. - ¡Ahora sí te tengo!
Shoto entonces hizo un corte a su maestra, eso le hizo creer que finalmente lo logró, pero entonces vio como esta desaparecía en un humo blanco, fue entonces que un rayo lo golpeó por la espalda, cayendo al suelo.
- Menos mal preparé esa ilusión, puesto que me tomaste por sorpresa… debo decir que estoy sorprendida, llegaste tan lejos como para acercarte a mí a esa distancia y lanzarme un ataque directo, eso demuestra cuanto has avanzado… no tengo nada más que decir. – Ella extendió su mano y entonces comenzó a curar al rubio.
- Maestra… - Este se levantó, ella entonces acarició el cabello de Shoto.
- Pasaste Shoto, terminaste tu entrenamiento, felicidades.
- … Gracias maestra. – El rubio hizo una reverencia. – Aprendí bastante durante todos estos años.
- No fui solo yo, le pusiste tanto empeño como esperaba y eso me alegra, ahora que finalmente ha terminado mi misión, puedes empezar la tuya… Shoto, ahora es momento de que salgas de regreso al mundo a buscar a tus caballeros.
- ¿Mis caballeros? – Preguntó él.
- Así es, aquellos que te acompañarán y pelearán a tu lado en el futuro, sé muy bien que te espera una dura batalla ya que Excalibur es una reliquia muy buscaba, la cual puede desatar poderes grandes, por eso te entrené, para que seas capaz de aprovecharlos y gracias a todo el tiempo que has estado junto a ella, ya has formado una afinación con la cual podrás usar la armadura que te proporcionará.
- ¿Mi armadura? Así que… Excalibur tiene más poder del que pensaba.
- Eso llegará a su debido tiempo. – Señaló Avalon. – Muy bien Shoto, es momento de que empieces tu propio viaje, pero antes de eso… - Ella chasqueó los dedos, en ese momento una luz comenzó a rodear a Shoto, fue entonces que su apariencia cambio, su cabello ahora era corto y su ropa era una totalmente distinta, una camisa azul con una playera blanca por debajo y un pantalón de color oscuro con zapatos. – Ahora sí, estás más presentable, esto te lo daré como mi regalo de despedida.
- Así que no volveré a verte. – Eso puso algo triste al rubio.
- No estés triste, después de todo seguiré estando dentro de la empuñadura, solo que no tendré la libertad de comunicarme contigo, pero cuando la situación lo requiera, te daré una mano. – Soltó un guiño, en ese momento se abrió una puerta blanca. – Esa es la salida, entonces Shoto, es momento de que empieces tu propia cruzada, reúne a aquellos que estarán contigo y que compartirán tu carga y pelearán a tu lado, y sobre todo… has lo que consideres que sea lo mejor.
- … Así será maestra. – Shoto puso la espada en su cintura y entonces caminó hacia la puerta donde entonces todo se puso blanco…
Al momento de atravesarla, la vista de Shoto se aclaró, entonces vio a sus alrededores, estaba en un bosque, ahí entonces vio una especie de ruinas y un agujero.
- Ya entiendo… estoy de regreso a las ruinas, donde mis padres… - Bajó la mirada, entonces se dio cuenta de que llevaba una bolsa en la mano. - ¿Y esto?
La revisó puesto que no la llevaba antes, al abrirla se encontró que adentro había dinero, al menos unos diez mil euros, un pasaporte que tenía sus datos, su nuevo apellido e incluso una foto actual y un mapa de Inglaterra con varias localizaciones señaladas, aparte había una carta, la tomó para leer su contenido.
"Para mí alumno:
Te dejo esto como parte de tu regalo de despedida, no creías que iba a olvidarme que no tuvieras dinero para sustento y que puedes viajar, además el pasaporte que tienes es oficial, lo tenía todo planeado, de igual forma el mapa que te entregué tiene señaladas las ruinas donde encontraras las reliquias pertenecientes a los caballeros de la mesa redonda, es importante que las reúnas y guardes contigo ya que deberás entregarlas a quienes reconozcas como tus caballeros, podrás mantenerlas a salvo dentro de Avalon, ya espero que te vaya bien.
Tu querida y hermosa maestra, Lady Avalon.
Pd: Si durante tus viajes, llegas a ver a un animalejo de pelaje blanco, por favor dile que estoy muerta"
- Jaja… mi maestra nunca cambiará… muy bien. – Miró al frente. – Es momento de que me ponga en marcha, a reunir esas reliquias, por mi futuro… y por mis padres que amaban hacer esto… - Se puso en marcha, ya ahora con un nuevo rumbo, Shoto comenzaría su viaje, antes de regresar a su país natal, reuniría esas reliquias para tenerlas a salvo, ya no sabía cómo es que podría saber quién será digno de ser su caballero, pero seguro es algo que su corazón le dictará, un nuevo capítulo se comienza a abrir para él.
"2 meses después
Tokio, Japón"
En el aeropuerto, el vuelo había descendido y entonces de la entrada se veía al joven rubio, llevaba su ropa junto a unos lentes de sol, mirando al frente.
- (Finalmente estoy de regreso, me tomó doce años pero he regresado…) – Llevaba una maleta y también en su espalda un objeto envuelto en una tela. – (Ahora, según mi maestra, debería de poder encontrar a quienes serán mis caballeros, pero como es que podré identificarlos…) – Mientras se ponía a pensar en como hacerlo, escuchó algo, entonces de una pantalla panorámica se veía la presentación de un dúo de chicas.
- Los boletos para el concierto de Zwei Wing saldrán a la venta, no se lo pierdan.
- Han salido nuevos artistas y música que no conozco… quizás debería ponerme al día con muchas cosas. – Antes que nada necesitaba hospedarse, así fue que pidió un taxi para llevarlo a un hotel, al llegar y pedir su habitación, este se recostó en su cama, entonces abrió la maleta de la cual sacó una laptop, al encenderla, comenzó a buscar todo sobre la actualidad en su país.
- Así que Zwei Wing son un grupo de idols muy famoso… no lo sabía. – Decidió colocar uno de los videoclips de las chicas y escuchar la canción, cerrando los ojos, se dejó llevar por la música. – Son buenas… puedo notar la sinergia que hay entre ambas.
Una vez terminó de escuchar la canción, comenzó a buscar otras cosas, más que nada necesitaba algún tipo de sustento, un trabajo por el cual ganar dinero ya que no le quedaba mucho de los viajes que hizo para encontrar el resto de reliquias de los caballeros, así que con una búsqueda en internet se puso a encontrar algún trabajo posible.
- Parece que esa compañía de mudanzas podría servirme… lo anotaré. – Fue apuntando posibles trabajos, ya entonces tuvo hambre por lo que bajó y salió del hotel para ir a comer, en su camino fue a un pequeño restaurante de ramen, entró donde el dueño le saludó.
- Un ramen de cerdo con caldo extra.
- ¡Saliendo! – Solo debía de esperar a que le sirvieran su comida, así fue que revisó su teléfono por más información, entonces la puerta se abrió.
- Pero Kanade, se supone que debemos ir pronto con el tío.
- Vamos Tsubasa, comer un ramen no hará daño. – Entró un par de chicas las cuales llevaban ropajes casuales y lentes de sol. - ¡Maestro, sirva dos ramens, uno con extra de repollo!
Las dos chicas se sentaron en la barra donde igual se encontraba Shoto, al ser los únicos tres en el establecimiento, la chica de cabello anaranjado saludó.
- ¿También te gusta el ramen?
- Claro. – Respondió el rubio de forma cortés. – Aunque es la primera vez que lo comeré en años.
- Kanade, no creo que sea bueno perder demasiado el tiempo. – Exclamó su amiga de cabello azulado.
- Eres demasiado correcta, mira que hasta a Ogawa-san no le molesta que tengamos esta parada.
- Eso es porque colgaste antes de que dijera algo… - Ella soltó un suspiro. – Lamento si resultamos ser una molestia.
- Para nada, la compañía es bien recibida. – Respondió Shoto. – Poder relacionarme con gente de mi país luego de doce años fuera es algo reconfortante.
- ¿Vivías en el extranjero? – Preguntó la chica de nombre Kanade, Shoto asintió.
- Específicamente en Inglaterra, mis padres eran exploradores de ruinas, ellos tenían un sueño bastante apasionado de descubrir reliquias antiguas y preservarlas, pero lastimosamente los dos murieron cuando tenía cinco años.
- Oh… lamento su perdida. – Se disculpó Tsubasa, el rubio negó con la cabeza.
- No pasa nada, a raíz de eso, me acogió mi maestra quien me enseñó todo lo que necesitaba para luego regresar a Japón.
- Esa es una gran historia. – Sonrió Kanade. – Por cierto, me llamo Amou Kanade y ella es Kazanari Tsubasa.
- Lo sé, son las de Swei Wing. – Respondió Shoto. – Vi el anuncio de su concierto apenas salí del aeropuerto.
- ¡Kanade, se supone que no debemos revelar quienes somos! – Reclamó Tsubasa.
- Descuiden, no diré nada de este encuentro. – Aseguró el rubio. – Por mi parte, me llamo Shoto Pendragon.
- Que apellido más raro… - Comentó la pelirroja. - ¿Eres mitad inglés?
- No realmente, fue el apellido que me otorgó mi maestra. – En ese momento llegaron los tazones de ramen. – Es momento de comer.
- ¡Perfecto, me ruge el estómago! – Exclamó Kanade, ya entonces tomaron sus palillos y agradecieron por la comida, empezando a comer. - ¡Está bueno!
- Es verdad, el umami se siente perfectamente. – Comentó Shoto. – Encontré un buen establecimiento.
- Realmente sabes apreciar el ramen, me agradas. – Exclamó Kanade. – A decir verdad, Tsubasa ¿no tenemos entradas que podríamos regalar a quien queramos?
- Las que nos dio Ogawa-san, sí, tengo las mías.
- Excelente, entonces Shoto ¿Qué te parece si vienes a nuestro concierto?
- ¿Puedo? Siento que estaría haciendo trampa por aquellos que desean comprar boletos.
- Para nada, te doy la entrada como amigo. – Respondió Kanade con una gran sonrisa. – Así podrás ver de cerca lo grandiosas que somos.
- Supongo que deberías aceptarlo, Kanade puede ser terca a veces si la rechazas. – Comentó Tsubasa ganándose una mirada de enojo de su amiga.
- ¿Qué dijiste? – Shoto soltó una risa por debajo.
- Entonces, sí no es molestia, tomaré la entrada.
- Perfecto, entonces te estaremos esperando, que lo disfrutes. – Ya entonces continuaron comiendo, ambas chicas ya se fueron de ahí mientras Shoto decidió quedarse un rato más, mirando el boleto en su mano.
- (No soy realmente un adepto a la música, pero hay algo en esas dos chicas que me llama la atención, una corazonada que no puedo ignorar… quizás no sería nada malo ir a su concierto y conocer un poco más de esta música que ellas hacen…)
Poco a poco se iba acercando la hora del concierto, justamente entre la gente que iba se encontraba una chica de cabello castaño oscuro y ojos color miel, llevaba una blusa de color blanca con manga corta junto a una falda negra de corte medio, zapatillas con medias cortas.
- Que mal que Miku no pudo venir al concierto conmigo, bueno, ella se lo pierde. – Esta chica en especial se encontraba entusiasmada por el concierto de Zwei Wing, desde que su mejor amiga le enseñó unas cuantas canciones de dúo de cantantes, quedó sumamente encantada y resultando que esta misma ganó entradas para el concierto, aunque no pudo ir, dejó que ella pueda disfrutar del mismo. – Ya estoy por llegar… wow, hay mucha gente…
No esperaba ver una gran fila de fanáticos, pero eso solo señalaba la fama que poseía Zwei Wing, ella se encontraba tan entusiasmada como ellos por lo cual los entendía.
- Veamos… creo que debo entrar por aquí y… - Ella intentaba ubicarse pero con tanta gente se le revolvía tanto. – Ah… estoy mareada, creo que me perdí.
- Perdón ¿puedes encontrar la entrada a la fila catorce? – Le preguntó alguien, volteó a ver, encontrando a un joven de cabello rubio y ojos verdes.
- Esto, no… igual estoy perdida jeje… - Soltó una risa nerviosa. - ¿También entrarás por la fila catorce?
- Eso dice mi boleto, ya que no conozco este estadio, se me hace algo complicado ubicarme.
- Podríamos buscarlo juntos. – Sugirió la chica, el joven asintió. De ese modo los dos comenzaron a buscar la entrada por la cual debían de llegar para sus asientos, revisaron el mapa del estadio hasta que finalmente dieron con él, así entraron y fueron a sus asientos. - ¡Finalmente estamos aquí! Y no pensaba que nuestros asientos están uno al lado del otro.
- Es toda una casualidad. – Proclamó él.
- Es cierto… es verdad que no me he presentado, mi nombre es Tachibana Hibiki, un gusto.
- Me llamo Shoto Pendragon, igualmente.
- Ese es un apellido extranjero… ¿eres de otro país? – Shoto negó con la cabeza.
- Soy aquí de Japón pero viví doce años en Inglaterra, de ahí que tenga ese apellido.
- Oh, eso es genial. – Ella sonrió, en aquel momento apagaron las luces. – Ya está por empezar el concierto!
- Muy bien, vamos a disfrutarlo. – Respondió Shoto. Él prestaría especial atención a este ya que sentía cierta curiosidad.
Justamente por detrás, tras bambalinas se estaban haciendo las preparaciones para el concierto, en su camerino se encontraban Tsubasa y Kanade las cuales estaban terminando de prepararse para salir.
- ¿Estás lista para dar otro gran concierto Tsubasa? – Preguntó la pelinaranja, su amiga asintió.
- Tío, estamos por salir. – Avisó Tsubasa por un comunicador que llevaba.
- Perfecto, ya le avisaré a Sakurai para que empiece el experimento de sincronización. – Se escuchó una voz grave del otro lado.
- Está bien. – Miró a Kanade. – Vamos.
- Claro. – Esta sonrió de forma segura. En ese momento se apagaron las luces y entonces, en el centro del escenario se abrió una trampilla, entonces se elevó una placa en la cual estaban las dos paradas, al momento de salir a escena, el publico estalló.
- Wow, son ellas. – Exclamó Hibiki con ilusión, Shoto se mantuvo callado observando con atención la presentación de ambas chicas, en ese momento comenzó un espectáculo de luces el cual bañó los alrededores del escenario y entonces ambas sujetaron sus micrófonos.
"Reproduciendo: Gyakkou no Flugel"
Kono kyō e to
Tsudzuite ita kinō wo
Zutto
Hokoritai
Kono kyō e to
Tsumuide kita merodi
Zutto
Wasurenai
Hito to
Hito ga
Fureru
Koto de kizutsu itatte
Te to te
Tsunagu
Kimochi
Zutto wasurenai to chikatte ayumunda
Dakara
Yume wa
Hiraku yo
Mita koto nai sekai no hate e…
Yes, just believe
Kami-sama mo shiranai hikari de rekishi wo tsukurō
Mirai mezashi
Ikiru koto wo
Zettai ni nigenai!
Yes, just believe
Sennen-go no kyō ni
Hito no taisetsu na nani ga wo Fly
Sore ga "uta" dato shitta
Kono monogatari
Owaru koto wo kowagarazu ni ikiyō
Hibiki atte
Habataku koto no imi wo
Uta de
Tsutaetai
Dareka ni mata
Kono akashi wo takushite
Tomo ni
Hashiritai
Hito to
Hito wa
Zutto
Seichō shite yuku mono
Sedai
Koete
Yume wo
Tomo ni tsukuri aitte sodatte yukitai yo
Dakara
Tsumugu
Ima wo
Mita koto nai sekai no hate e…
Yes, just believe
Ongaku no kotae wo mada mitsukerarete wa inai
Dakedo ashita wa
Kotae ni mata
Ippo wa chikadzukeru
Yes, just believe
Baton wo watashite mo
Se wo osu-gawa ni nattatte Wish
Dareka ga sono kotae wo
Sagaseru yō ni
Shin jidai wa mōsugu soko ni mieru
Hito to
Hito ga
Fureru
Koto de kizutsu itatte
Te to te
Tsunagu
Kimochi
Itsumo saigo ni ai wa makenai to ieru
Dakara
Yume wa
Hiraku yo
Mita koto nai sekai no hate e…
Yes, just believe
Kami-sama mo shiranai hikari de rekishi wo tsukurō
Mirai mezashi
Ikiru koto wo
Zettai ni nigenai!
El nivel de las dos chicas estaban a uno bastante alto, Hibiki mantenía esa mirada de ilusión todo el tiempo, Shoto sonrió, ellas realmente podían emocionar a la gente con su canción.
Yes, just believe
Sennen-go no kyō ni
Hito no taisetsu wo nani ga wo Fly
Sore ga "uta" dato shitta
Kono monogatari
Owaru koto wo kowagarazu ni ikiyō
Sore ga tsugi no… mata hajimari no kaze ni…!
Al acabar la música, todo el público comenzó a alabarlas y aplaudir por el gran espectáculo, las dos se encontraban en medio del escenario, respirando agitadamente luego de dar esa demostración, en ese momento Kanade le sonrió a su amiga.
- ¡Gracias por todo, somos Zwei Wing! – Expresó ella hacia el público ensordecedor, Shoto aplaudió en aquel momento.
- (Este presentimiento que tenía no estaba equivocado, ellas son buenas, pero no creo que sea todo… hay algo más que atrajo hacia ellas, y no creo que sea solo su música…)
Mientras tanto, tras bastidores se veían muy orgullosos de lo conseguido en el concierto, ahí se encontraba un hombre de cabello rojizo oscuro, musculatura prominente mientras lleva una camisa roja que se marca en su cuerpo y pantalón beige.
- Parece que resultó en un éxito, doctora Sakurai ¿Qué tal el crecimiento de ganancia fónica?
- Todo perfecto Genjuro-san, las lecturas se han mantenido estables. – Se escuchó una voz femenina del otro lado.
- Es bueno saber eso, entonces podemos… - En aquel momento se escuchó una alarma.
- ¡Alerta Genjuro-san, se ha detectado una señal fuerte de noise y está surgiendo… desde el estadio!
- ¡¿Cómo!?
En aquel momento empezó a ocurrir una fuerte tormenta, todos veían por todos lados cuando entonces portales se abrieron, de los cuales empezaron a surgir noise.
- ¡Que hacen noise aquí! – Exclamó Tsubasa con asombro, comenzaron a salir muchos, lo cual alertó a la gente que empezó a huir por sus vidas.
- ¡Ah, cuidado! – Hibiki empezó a perderse entre la conmoción, Shoto quiso verla pero fue demasiado tarde.
- Tsubasa, no podemos dejar que esto se quede así, hay que proteger a la gente. – Declaró Kanade, en ese momento tomó un colgante que llevaba en aquel momento.
"Crotizall Ronzell Gungnir Zillz"
De repente una luz envolvió a Kanade y entonces un nuevo traje apareció, ahora llevando lo que era una ropa ajustada de color naranja fuerte y unos guanteletes, miró con seriedad a los Noise.
- ¡Vengan por mí si pueden! – Les retó, ella saltó y comenzó a golpear a las criaturas, acabando con ellas, cada golpe que daba lograba acabar con uno, Shoto vio con algo de asombro lo sucedido.
- (No esperaba que algo así pasara, ella puede pelear contra los noise de ese modo…) – En ese momento sintió una especie de señal en su cabeza. – (Esto… no deja de resonar con fuerza, acaso esto es la señal de… una de las espadas, y me sucede cuando veo a Amou Kanade, será que ella…)
- ¡Kanade! – En aquel momento Tsubasa saltó, ella igual llevaba puesto un traje, un leotardo azul con protecciones de hombros, rodillas y cabeza, poseyendo una espada en sus manos. – No dejaré que hagas esto sola.
- Jeje, eso esperaba, compañera. – Las dos continuaron peleando en aquel momento contra los noise, a pesar de sus esfuerzos por bajar los números, estos no disminuían para nada.
- (Ellas están teniendo problemas…) – Shoto debía de hacer de algo, entonces recordó algo que le dijo su maestra.
"Flashback"
- Escucha Shoto, en el estado actual de Excalibur no podrás usar su poder. – Avisó ella, el rubio asintió.
- ¿Cómo puedo usarlo entonces?
- Tiene su propio modo de activarse, aunque viene con un limitador natural, hasta que no te fortalezcas, no podrás usar todo el poder de la espada, ya que sería demasiado para ti, así que tienes que hacer el siguiente canto…
"Fin del flashback"
Shoto en aquel momento tomó a Excalibur en sus manos y entonces lo desenvainó, la hoja brilló con fuerza en aquel momento y entonces comenzó a cantar…
"Excalibur, give me your power"
En ese momento el sitio empezó a brillar, un brillo tan intenso que llamó la atención de las dos chicas.
- ¡Que es eso! – Exclamó Kanade, en ese momento del sitio que brillaba se vio una figura, esta llevaba puesta una armadura de un color plateado que le cubría esencialmente el torso, piernas y hombros, llevaba puesto una capucha de color gris que cubría la parte superior de su rostro, acompañado de un pantalón azul con telas que se extendían por los costados y la parte superior de blanco, en sus manos llevaba una espada que brillaba como el oro.
- ¿Quién es? – Preguntó Tsubasa, justamente en ese momento Genjuro observaba todo con asombro.
- ¿Quién es ese?
- Genjuro-san, se ha detectado la señal fónica de una reliquia. – Avisó una chica del otro lado, el hombre vio aquello con seriedad.
- No puede ser… un usuario de Symphogear.
La figura encapuchada saltó y al aterrizar en aquel momento al escenario, con su espada llegó a cortar a unos tres noise sin problema, ambas chicas no podían creerlo.
- ¿Quién eres? ¿Un enemigo? – Exigió saber Tsubasa, este hizo una señal de silencio con su dedo y entonces señaló a los noise.
- Tsubasa, no tengo idea de quien sea este sujeto pero parece que nos ayudará a combatir, no podemos dejar que salgan de aquí y maten a la gente. – Kanade regresó a la batalla, mientras tanto el encapuchado también fue a pelear, Tsubasa no entendía nada pero no quería quedarse atrás por lo que fue a dar apoyo.
Kanade fue hacia tres noise los cuales golpeaba mientras cantaba, su ganancia fónica al cantar le permitía sacar mayor poder a su traje y con ello los guanteletes que tenía se estiraban para golpear una mayor cantidad de enemigos, Tsubasa daba saltos mientras con su espada partía en pedazos a los noise, su velocidad era por mucho superior a estos.
El encapuchado estaba rodeado de noise, este no expresó nada en lo que apuntó al frente con su espada, así entonces los enemigos saltaron hacia él, entonces dio un giro y lanzó lo que fue una ráfaga, causando que estos salieron volando.
- Wow, los derribó sin tocarlos, es bueno. – Sonrió Kanade. Ella no quería perder contra él por lo que fue con mayor fuerza hacia los noise. Los tres continuaron combatiendo un buen tiempo sin resultados favorables, no dejaban de venir.
- Estoy llegando a mi límite… - Tsubasa respiraba agitadamente, el cansancio se hacía latente en su cuerpo, Kanade igual, ella era la más agotada debido a la condición especial en su cuerpo.
- Tsubasa… no puedo continuar así por más tiempo, no me inyecté el Linker… debemos de recurrir a un ataque final… - La armadura de Kanade estaba destruyéndose, la peliazul miró a su amiga con asombro.
- Espera Kanade, no me digas que… - Ella sonrió.
- Tengo que hacerlo o la gente morirá, así que es momento de mi canto final… canto del cisne.
- E-Espera Kanade, no debes de… - En ese momento la pelinaranja cerró los ojos y entonces comenzó a cantar una tonada especial, Tsubasa se veía con temor en su rostro. – No… no lo hagas…
Shoto por su parte continuaba peleando contra los noise, no paraban, no entendía como es que seguían llegando, pero debía de hacer algo.
- ¡Aaaah! – Escuchó un grito, miró a ver, encontrándose a alguien familiar.
- (Es la chica que fue conmigo) – Vio a Hibiki la cual estaba siendo perseguida por noise, no sabía como es que ella no huyó, tenía que salvarla; en aquel momento él saltó y con su espada acabó con los noise que iban tras ella.
- ¿Eh? ¿Estoy a salvo? – Vio a Shoto, aunque por la capucha que cubría su rostro, no lo reconocía. – Esto, gracias…
En aquel momento se sintió una fuerte presión en el lugar, Shoto entonces miró a ver al centro del escenario, Kanade estaba irradiando un fuerte brillo.
- ¡Kanade! – Vio a Tsubasa gritarle desesperadamente a su amiga pero la fuerte presión no le permitía acercarse.
- ¡Que es eso! – Exclamó Hibiki, en aquel momento Kanade de repente abrió los ojos.
Gatrandis babel ziggurat edenal
Emustolronzen Finé el balal zizzl
Gatrandis babel ziggurat edenal
Emustolronzen Finé el zizzl.
En aquel momento una gran luz comenzó a bañar todo el sitio, perdiéndose todo, Shoto se cubrió los ojos pero entonces vio algo, el cuerpo de Hibiki cayó pesadamente al suelo, entonces notó como estaba sangrando del pecho.
- (Está herida… debió de alcanzarle el corazón.) – La tomó como pudo en aquel momento y la protegió. Aquella luz fue más que suficiente para acabar con cada noise que hubo dentro del estadio pero igual fue tan poderoso que esta luz se alzó hacia el cielo, causando destrucción dentro de la zona, cuando se disipó, Shoto pudo ver los alrededores. Lo que alguna vez fue un estadio moderno ahora no era más que ruinas destruidas. - ¿Está bien? – Miró a ver a Hibiki, estaba inconsciente y continuaba sangrando del pecho, acercó su oído y entonces escuchó latidos. – Sigue viva, mejor la llevo afuera para que una ambulancia la tome, pero… - Se apresuró como pudo, saltó a la entrada y entonces dejó a Hibiki ahí, a vista de las personas, entonces regresó rápidamente al escenario, no había nada en aquel momento pero debía de encontrarla. – Donde está…
En ese momento vio una mano, fue rápidamente hacia ella y entonces la jaló, dentro de unos escombros entonces la sacó, Kanade seguía entera, aunque todo su cuerpo estaba destrozado, sangraba de la boca, ojos y otros orificios, Shoto tenía un rostro serio.
- Esa canción desató un fuerte poder pero dejarla en este estado, aun puedo salvarla… - En ese momento el rubio tomó a Avalon. – Mi maestra me dijo que la vaina tiene poderes curativos, así que solo debo de introducirla en su cuerpo… - En aquel momento Shoto acercó esta al cuerpo de Kanade y entonces comenzó a brillar, introduciéndose dentro del cuerpo de la pelinaranja. – Sí aun le queda algo de vida, ella se recuperará. – La tomó en brazos en aquel momento. – (Debo de irme…) – Entonces comenzó a correr lejos de ahí llevándose a Kanade.
Las autoridades no tardaron en llegar para ayudar a la gente, ambulancias se llevaron atendiendo a heridos, Hibiki fue atendida en una de estas y se la llevaron al hospital, afuera estaba Tsubasa que tenía un rostro demacrado, Genjuro se acercó a ella.
- Tsubasa-kun…
- Tío… dímelo ¿encontraron a Kanade? – Preguntó ella, el pelirrojo negó con la cabeza, en aquel momento ella no pudo aguantar más y se lanzó a llorar, su tío la abrazó con fuerza, ese día se perdió mucho más de que creía…
Flotaba, Amou Kanade sintió que ahora podía estar en paz, el haber utilizado la canción del cisne marcó el final de su vida, pero no pensaba que la muerte pudiera ser tan pacífica.
- (Se acabó entonces… realmente lo hice, me sacrifiqué por todos, jeje… seguro ahora mismo Tsubasa debe estar llorando, siempre ha sido alguien delicada, lo siento… realmente lo siento por haberte abandonado…)
"Despierta"
- ¿Eh? – En aquel momento la pelinaranja abrió los ojos, respiraba agitadamente mientras miraba a sus alrededores, notó que estaba en alguna especie de bosque, entonces se vio, estaba sintiendo, respiraba… seguía viva. - ¿Qué me pasó?
- Ya te encuentras mejor. – Escuchó una voz, miró a ver, encontrando a quien fue su salvador.
- Tu eres… el chico del restaurante de ramen.
- Parece que no me olvidaste. – Este sonrió, en aquel momento le pasó una botella con agua. – Toma, haber cantado esa canción debió dejarte ronca.
- … Es verdad. – Tomó del agua, aunque ella tenía muchas preguntas. - ¿Qué me pasó? Se supone que debo estar muerta, usé la canción del cisne que desata todo el poder del Symphogear.
- Seguro piensas en la razón y la respuesta puede que no la creas, yo te salvé, imbuyendo un artefacto dentro de tu cuerpo.
- ¿Un artefacto dentro de mi cuerpo? ¿Dónde? – Se empezó a recorrer todo el cuerpo.
- No lo introduje por cirugía, sino por un método mágico, Avalon es una vaina que tiene propiedades curativas, estabas en un mal estado pero mientras tengas un aliento de vida, podrá curarte.
- Entonces… este Avalon está dentro de mí ahora. – Respondió ella, el rubio asintió. – Yo… no sé que creer, todo esto es irreal.
- Creo que lo es aún más que te hayas transformado para pelear. – Comentó él. – Si no hubiera estado ahí, habrías estado muerta realmente.
- Estuviste ahí, entonces fuiste al concierto y…
- Así es, soy aquel que luchó con ustedes.
- ¿Eres un usuario de Symphogear? – Preguntó ella.
- No sé que sea eso, pero te puedo asegurar que no, yo manifesté el poder de Excalibur para pelear contra los noise, eso me otorgó una armadura para pelear.
- La verdad no entiendo demasiado, solo dejémoslo en que es tu Symphogear. – Respondió ella. – Gracias por todo, pero ahora debería regresar.
- No puedes hacerlo. – La detuvo.
- … ¿Por qué? – Ella entrecerró los ojos, en aquel momento Shoto le mostró su celular, ella entonces leyó el titular. – La famosa cantante del dúo Swei Wing, Amou Kanade es declarada muerta luego del ataque de noise… - Ella de repente se puso pálida. – Esto…
- Has estado dormida durante tres días y pasó mucho en ese tiempo. Ahora eres alguien oficialmente muerta, aunque intentes volver a tu vida normal, solo causaría problemas para ti y tus conocidos. – Shoto no deseaba haberle dicho eso, actualmente observaba el rostro de pánico y depresión en Kanade.
- … Jeje… yo… lo he perdido todo, a mi amiga, mi Symphogear, mi vida… no tengo nada… - Ella comenzó a soltar lágrimas. – Por qué pasa esto… ¿por qué me salvaste? Estaría mejor muerta si esto iba a pasar. – Ella se levantó, observando con enojo a Shoto. - ¡Por qué lo hiciste!
- Porque no podía permitirlo, lo supe cuando te vi y además una de las reliquias que poseo reaccionó a tu presencia.
- ¿Una reliquia? – En ese momento Shoto sonrió y extendió su mano a la pelinaranja.
- Amou Kanade, quiero pedirte algo… quiero que te conviertas en mi caballero.
- … ¿Tu caballero? – El rubio asintió.
- No todo se ha acabado para ti, puedo abrirte nuevas puertas, un nuevo poder, una nueva razón para luchar, mi maestra me envió de regreso al mundo con una misión, reunir a quienes serán mis caballeros para luchar contra los peligros del mundo… ahora sé que los noise son una amenaza, deseo proteger a la gente pero no puedo hacerlo solo, así que quiero que luches a mi lado, como mi fiel caballero de la mesa redonda.
- … Eso… - Ella se quedó callada, no sabía como responder a la propuesta de Shoto, ahora mismo ella era una persona sin nada en el mundo, sin la posibilidad de regresar a donde está su vida, a donde se encuentra su amiga… - Tú… ¿prometes que me darás una razón para vivir?
- Eso haré, mientras tengas la voluntad para pelear, no te dejaré sola. – Las palabras de Shoto resonaban como si fueran una luz de esperanza para la pelinaranja, ella en aquel momento se limpió las lágrimas, entonces extendió su mano.
- Yo… me volveré su fiel caballero entonces. – Ella agachó la cabeza. – Combatiré contra los noise y salvaré este mundo. – Declaró, Shoto asintió.
- Entonces así queda, a partir de ahora eres mi primer caballero de la mesa redonda, Amou Kanade. – Shoto dio el inicio a su nueva cruzada de ese modo, ahora con Kanade como la primera de sus caballeros, enfrentará muchas cosas en el futuro, conocerá a más gente pero lo que es más… luchará sin ver hacia atrás, todo sea por traer la paz al mundo, como el sucesor de aquel rey que deseaba un reino pacífico… seguirá sus propios ideales hasta el final.
Buenas, aquí RinMakoto con una nueva historia, ya empezaremos una nueva ronda de fics que estaré desarrollando, y empezamos con esta historia, un crossover entre Fate y Symphogear, como tal deseo enfocarme en aspectos de ambas, y pues la base para mi pj es Proto Arthur, ya sé muy bien que la base arturiana de Fate es muy utilizada en fics pero creo que en sí, lo que respecta al Arthur de Prototype no es tan desarrollado como lo es la Arturia así que ahí quiero poner el enfoque.
Ya igual vieron como es que Kanade será una caballero de Shoto, ya con eso deben de saber como irá la cosa, las demás chicas igual van por el mismo camino y serán caballeros, tendrán habilidades basadas en los caballeros de la mesa del nasuverso e incluso tengo cosas originales preparadas a futuro, no pienso solo seguir calcada la historia de Symphogear, ya verán todo lo que tengo en mente con este fic, por ahora eso es todo, nos vemos en el próximo cap. Saludos.
