- *suspiro* No he usado un vestido tan decorado en bastante tiempo... - me digo mientras veía mi reflejo en el espejo -. ¿Es lindo? ¿Ella creería que es lindo? - me pregunto pensando en Keke -. Ahh... Supongo que su opinión estará fija en alguien más...

- ¡Hermana~! ¡Mamá ya está abajo con el auto que te llevará!

- ¡En este momento bajo! ... Regresa tu cabeza a la tierra Sumire, ya es hora de irse...

El baile de graduación era hoy y de hecho quedaban pocos minutos antes de que empiece, por lo que debía apurarme si no quería llegar tarde. Al final tomaría un auto ya que, aunque quise ir caminando para despejar mi mente un poco, mi madre me lo impidió para que así no ensuciara el vestido en el camino, como si ensuciarlo fuese lo que más me preocupaba ahora.

- No lo olvides Sumire, el mismo auto te recogerá en cuanto el baile termine - me dice mi madre desde la puerta -.

- Lo se mamá *sonrisa* Estaré en casa ni bien acabe. ¡Las quiero! Nos vemos dentro de un rato

Y así el auto comenzó su camino. El instituto no estaba muy lejos, así que unos diez minutos deberían ser más que suficiente para llegar, pero quizás no los necesarios para que ordenase mis pensamiento.

- (Me pregunto si ella ya llegará con alguien al baile...) - pensaba con mis ojos fijos en el estrellado cielo -. (Seguro encontró a alguien, ella es una chica asombrosa, aunque no se lo haya dicho... Muchas darían todo solo por hablarle) O ta- tal vez puede que llegue sola... ¡Si! E- ¡En cuyo caso me vería en la obligación de invitarla a bailar! No podría dejar a esa boba sola sin pareja jaja~ S- Si, eso es...

- Ehh... Se- ¿Señorita Heanna, está bien?

- ¿¡Qué!? Ah- S- Si, super bien jaja *rubor* ¿Por qué?

- Bueno, jamás en todos los años que la he llevado la había escuchado hablar sola *riendo*

- Ugh- Solo estaba pensando en voz alta, es todo...

- Como diga *sonriendo* Bueno, ya hemos llegado

- Mu- Muchas gracias - le contesto avergonzada mientras bajaba -. Oh y pu- ¿Puedo pedirte un favor?

- Por supuesto señorita, lo que usted necesite

- ¿Podrías no venirme a recoger más tarde? Re- Regresaré a pie a casa

- *risita* Se ve que tiene algunos planes con esa chica de la que hablaba ¿No?

- ¿¡Cómo!? Cla- ¡Claro que no! E- Es solo que yo bu- bueno...

- Tranquila, no le diré nada a su madre. Que se divierta señorita Heanna

- E- ¡Espera un momento! - le digo tratando de tenerlo -. *suspiro* Genial, ahora el chofer de mi familia piensa que soy alguna clase de "don juan" cuando en realidad soy el peor desastre en las relaciones...

El viento estaba algo frío, pero por alguna razón se sentía agradable. Tal vez fuese por todas las luces que decoraban el instituto o quizás fuese por el animado ambiente, lleno de las voces de todas las estudiantes que charlaban entre ellas. Aun con todo eso a mi alrededor, mis ojos estaban centrados en buscar a alguien más.

- Y- ¿Ya habrá llegado? - me pregunto mientras llevaba mi vista a todos lados, sin encontrar absolutamente nada -. ¿Acaso estará adentro?

- ¡Sumire! Así que ya llegaste - me dice una voz amistosa mientras se me acercaba alegre -.

- ¿Kanon? - al regresar a verla ella me dirigió un amistoso gesto mientras se paraba frente a mi -. Hola *sonrisa* Se ve que llegaste temprano

- Un poco jaja~ Chii-chan quiso venir antes para ayudar con los puestos de comida

- Como esperarías de ella *risita* ¿Hmm? Pero entonces ¿Por qué no estás con ella?

- ¡Oh! N- No vayas a decirle si la vez por allí pero... - entonces ella me mostró una pequeña cajita la cual al abrirse revelaba dos colgantes -. Acabo de comprar estos para dárselo, solo que ahora estoy buscando a alguien que me ayude a envolver el paquete *sonrisa*

- Ya veo *risita* Son muy lindos, estoy segura de que le va a encantar. Tal vez te encuentres algo caminando por allí, había muchos stands con cosas así que quizás encuentres uno con fundas o algo así

- ¿¡De verdad!? ¡Muchas gracias Sumire! - estaba a punto de irse corriendo hasta que llamé su atención por un segundo -.

- ¡Kanon!

- ¿Sí? ¿Pasa algo más?

- Qui- ¿Quizás no viste a Keke de camino?

- ¡Oh! Si la vi, estaba en la puerta de entrada al gimnasio

- Po- ¿Por sea caso estaba con alguien?

- ¿Hmm? N- No lo creo... Cuando yo la vi estaba sola...

- ¿¡En verdad!? ¡Jaja~! ¡Gracias por el dato Kanon, nos vemos luego!

- ¿¡Ehh!? Va- Vaya que la estaba buscando ansiosa *risita* Ojalá esas dos al fin se sinceren, ha sido un martirio verlas tres años jugueteando a no saberlo jaja~

Y así fue corriendo hacía el gimnasio. El camino no debió ser muy largo, pero gracias a todas las chicas que había por el camino tuve que bajar la velocidad de mis pasos, además que hice una pequeña parada en medio.

- De- Debo llegar rápido... So- Solo debes invitarle a bailar Sumire, n- no es nada difícil... *latido* A- Aún puedo llegar... ¿Hmm? - de repente vi como uno de los stands a mi lado vendía flores, y de entre todas ellas un ramillete resaltaba por sobre todos los demás -. Ugh- Vaya momentos en los que se te ocurre querer lucirte Sumire...

Al acercarme al puesto pude ver como Ren estaba atendiendo, con un poco de suerte eso haría las cosas más rápidas.

- Ha- ¡Hagan fila por favor! - decía mientras trataba de acomodar a todas las chicas que se morían por comprar -. *suspiro* M- Me volveré loca al final...

- ¡Ren! ¡Oye, Ren! - digo tratando de abrirme paso entre todas -.

- ¿Hm? ¡Oh! Hola Sumire *sonrisa* ¿Necesitas algo?

- Que- ¡Quería comprar un ramo de flores! O- ¡Oigan no empujen! *quejido*

- L- Lo siento, Sumire... Pero no puedo venderte nada mientras no haya atendido primero a todas las demás

- ¿¡De verdad!? Ugh- (¡Vamos Sumire! Piensa en algo, que tu experiencia en el mundo del espectáculo sirva de algo... Son solo un montón de chicas románticas empedernidas... ... ¡Espera! ¡Tengo un plan jaja!) - y entonces tomando una gran bocanada de aire grité -. ¡Kyaaah! ¡Acaba de abrir un puesto de doujinshis yuri en la entrada del instituto~!

Y como si de un hechizo se tratase, todas las chicas se habían ido despavoridas de camino a la entrada de Yuigaoka, dejándome el camino completamente libre. A veces era un poco sorprendente lo mucho que podías hacer con unas palabras.

- *risita* Listo, con eso todo debería estar perfecto~ Entonces Ren, podrías ayudarme con este ramo de flo- ... ¿Ren? ¿¡TAMBIÉN CAYO EN ESE ENGAÑO!? - al parecer mis cálculos no tomaron en cuenta ese detalle -. *suspiro* Supongo que me lo llevaré igual...

Y así tomando un ramo de hermosas rosas azules y dejando el dinero en el puesto seguí mi camino hacia el gimnasio. Luego de un par de minutos llegué y por suerte tal y como Kanon me había dicho, pude ver una figura conocida parada cerca de la puerta.

- ¡Keke! *risita* - no había nadie junto a ella y de hecho parecía que estaba buscando a alguien... ¿Podría ser acaso que me estaba buscando a mí?... -. *latido* N- No me importa eso, solo sé lo que quiero decirle... - me decía en voz baja mientras comenzaba a acelerar mi paso hacia ella -. (Nuestros días de instituto están a punto de acabar, ella quizás encuentre a alguien dentro de un rato... Es ahora o nunca... Lo que siento, lo que he sentido todo este tiempo...) ¡Keke! jaja~ ¿Quisieras bailar con- ... ... conmigo...

A tan solo un par de metros de ella vi como una chica que no conocía se le acercó, saludándole con un beso en la mejilla mientras le daba una pequeña flor blanca que luego colocó en su vestido.

Mis pasos se habían detenido de golpe y mis latidos comenzaron a bajar su ritmo, haciendo que mi pecho doliese en el proceso. Mientras las veía a ambas, una amarga sonrisa se dibujó en mi rostro a la vez que mis manos apretaban con fuerza el ramo que acababa de comprar.

- Al parecer llegaste tarde Sumire... Q- ¿Qué esperabas? *riendo* ¿Que ella te esperase por siempre? ... ... Como si hubiese habido una mínima oportunidad en todo esto *sollozo* Que idiota fui...

Dejando caer el ramo de flores en el piso, me di media vuelta para caminar de regreso a la salida. El baile, esta noche, nada tenía sentido si la única razón por la que vine fue ella. Con mi ánimo roto en mil pedazos saqué mi celular solo para ver la hora. Las 8, el baile iba a comenzar, y yo estaba aquí sin pareja, sin la chica que amo, llorando mientras salía de este lugar que ahora solo me lastimaba.

- Keke... *sollozo* Tenías razón, re- realmente soy solamente una tonta... *sollozo* Una tonta que se dio cuenta tan tarde de lo que su idiota corazón siente...

Sin poder contener más mi tristeza caí sentada en el pasto, arrimada contra el tronco de uno de los árboles de la entrada mientras intentaba callar mis quejidos con mis manos. Pero al final solo logré que mis manos doliesen mientras mi vista se hacía cada vez más y más borrosa.

Solo quería que la noche terminase, solo quería regresar a mi casa para llorar en mi cama; pero entonces algo llamó mi atención ligeramente, algo que hizo que mis lágrimas poco a poco se fuesen deteniendo. Apenas, a lo lejos podía escuchar...

...Una voz llamando a mi nombre...