[En busca de la primera espada]
Por la desesperación, la ira o incluso la frustración puedes hacer una locura y el corazón roto de la demonio le llevaría hasta sitios donde ningún humano podría ir mucho menos un demonio común y corriente pero la emperatriz del mundo de los demonios aunque sabía el riesgo que corría… Iría con tal de hacerse con aquel tesoro. No importaba si ella llegaba a perder su vida
[Bosque de los lamentos – Cascada de sangre]
[Asuka pov.]
-Pro ineptis illis sensibus qui nunquam nati sunt.. Nunc per eundem infernum vado sed .. Non sane curo.. cum gladios istos liberos habere possumus (Por esos tontos sentimientos que nunca debieron haber nacido.. Ahora mismo estoy pasando por el mismo infierno pero.. La verdad no me importa.. Cuando tenga esas espadas podremos ser libres) –dije entrando en el bosque era prohibido para nosotros los demonios. Con cada paso que daba sentía mi cuerpo pesado pero eso no me importo ya que continúe como si nada.
-Vis etiam separare, sed visne cum hoc pergere certus es? Haec silva periculosa est, ideo omnibus gentibus prohibetur (También quiero separarme pero ¿estás segura que quieres seguir con esto? Este bosque es peligroso por eso está prohibido para todas las razas) –Asura se había manifestado usando su cosmos.
-¿Desde cuando eres tan pesimista? –Pregunté mirando siempre al frente. Caminando junto a mi otra yo a través del camino que se formó gracias a mí poder-. –Sabes que no me importa lo que pase conmigo… Haré esto porque quiero
-Asura tiene razón. ¿Por esas dos putas vas a cometer una locura como esta? –Galas también se manifestó usando su cosmos. Ella estaba a mi lado derecho mientras Asura a mi lado izquierdo
-No es solamente por ellas... –Digo ocultando mis ojos entre los mechones de mi cabello-. –Sí no también lo hago por ustedes…
-¿Cómo que también por nosotras? –Escuche que mis otras mitades hablaron al mismo tiempo. Dejando sus lugares para impedir mí paso.
-No quiero que ustedes pasen estén atadas a mí por eso quiero –antes de que pudiera terminar esta oración gran parte del bosque donde nos encontramos se ha despejado todo debido a la gran presión de un viejo enemigo.
-Pentru ce ai venit, regină a demonilor, vrei să te înving din nou? Nu ți-ai învățat lecția prima dată când ne-am întâlnit, Suikyo sau mai bine, ar trebui să-ți spun Belgin Lias (A qué has venido, reina de los demonios ¿quieres que te derrote de nuevo? Acaso no has aprendido tu lección la primera vez que nos enfrentamos, Suikyo o mejor debería llamarte Belgin Lias) –el demonio que apareció frente a mí traía túnicas rojas que cubren todo su cuerpo salvo su cola con la que golpeaba el piso.
-A trecut mult timp de când s-a numit așa. Cred că acest nume înseamnă... (Hace tiempo que no era llamada de esa forma. Creo que ese nombre significa..) –Dije sonriendo por lo bajo. Teniendo mis ojos ocultos todavía entre los largos mechones de mi cabello blanco. Luego levante mi cabeza dejando que uno de mis ojos se pose en la figura de mi enemigo.
[Asuka pov end.]
[Mientras tanto en el mundo humano – Santuario de Athena]
[Recamara del Patriarca – Interior]
-Estamos aquí diosa Athena. ¿Cuáles son sus órdenes? –Dijeron el chico que lleva la espada espíritu y su amiga. Ellos se pusieron de rodillas justo como lo hizo el chico del parche
-Yuzu Araki esposa del caballero dorado Saga, Ramón Maldonado conocido como Ninja y discípulo de Aioros y finalmente Franco Yuzaki el poseedor del brazo informe. Les llamado a este lugar para encomendarles una misión –la diosa de la guerra estratégica y la sabiduría habló teniendo su ceño fruncido-. -Quiero que vayan al bosque de los lamentos. Allí se encuentra la idiota e irresponsable de mi tía quiero decir, la mujer que ustedes conocen como Asuka
-¿Cómo que ella…? –Preguntó desconcertado el chico que lleva la espada espíritu levantando su cabeza encontrándose con la mirada de Athena
-La muy idiota se ha ido buscando una de las espadas sagradas… -La diosa que protege el santuario apretó su báculo-. –Piensa que con esas cosas podrá..
-Lo que quiso decir Athena es que esas espadas son peligrosas. Tienen un poder destructivo increíble y si caen en las manos equivocadas quien sabe que podría pasar –tomó la palabra el patriarca quien se puso al lado de la mujer de pelo lila.
-Esperen si esas espadas son tan peligrosas ¿Por qué no las destruyen? –Pregunta el chico del parche al ponerse de pie.
-Lamentablemente no podemos destruir esas espadas. Sí fuera así de fácil, créeme Yuzaki-san que habría mandado por ellas hace mucho tiempo pero para nuestra mala suerte estás fueron creadas por la misma Asuka con ayuda del dios herrero Hefesto, solamente el creador de las mismas puede acabar con las espadas del caos –Athena dijo desviando su mirada de los presentes
-Entonces vamos con ese tal dios. Las espadas de las que hablan si son tan peligrosas debemos evitar que Tachibana-san las coja -Yuzu se puso también de pie exponiendo la preocupación por su amiga
-Eso es imposible. Hace milenios que el dios herrero ha desaparecido, aunque pudiéramos dar con su paradero, no creo que Athena esté muy feliz de verlo –comentó el peli-verde dejando que un pesado suspiro escape de el
-Patriarca Shion usted se refiere a lo que se cuenta en los mitos ¿cierto? –Preguntó la gatita mágica recibiendo un asentimiento por parte del ex Aries
-Quiero que me respondan algo –para sorpresa de todos los presentes Franco el chico del parche llamó la atención de las personas que estaban en ese lugar. Teniendo sus ojos fijos en la figura de la mujer con quien tuvo relaciones sin darse cuenta y el patriarca del santuario
-¿Qué ocurre? –Sin ánimos o mejor dicho todavía molesto por lo que sucedió con la deidad. El hombre de cabellos verde preguntó elevando sin darse cuenta su cosmos provocando un pequeño escalofrío al muchachito de cabellos celestes
-Ustedes dijeron que esas espadas son peligrosas. Que la misma Asuka fue quien las ha creado junto al dios Hefesto ¿cierto? –Recibió un asentimiento-. –Mi pregunta es ¿para qué querría usar esas armas? ¿Qué propósito tiene ir en busca de esas espadas?
-Senpai quiere usar el poder de la espada del cielo nocturno, la espada del fuego primario y la espada de hielo para que su poder le conceda su deseo. Puede sonar extraño pero según lo que me contó cuando las tres espadas sagradas se unan liberarán a la gran espada GX capaz de cortar el destino de humanos, demonios e incluso los dioses. En otras palabras desea el poder de esa arma suprema para deshacerse de su maldición –entrando a la cámara del patriarca llegaba el caballero de Acuario de esa era quedando de pie frente al patriarca y la diosa Athena
-Parece que sabes mucho del tema, Camus –Shion dijo
-Cómo ya he mencionado patriarca, senpai me contó sobre ellas. Debo suponer que ella ha ido por las espadas que dejó hace mucho tiempo ¿me equivoco? -El caballero de Acuario preguntó mirando a las autoridades del santuario
-No, no te equivocas. La ex Saintia de Ofiuco también conocida como Suikyo la emperatriz del mundo de los demonios está en busca de dichas espadas. Cómo eres quien más tiempo pasó con ella y sabe de la existencia de estas armas, Camus de Acuario irás junto a ellos tres en busca de tu maestra –exclamó el gran patriarca con voz fuerte recibiendo el asentimiento de las ya mencionadas personas junto al caballero dorado. Los tres autores y el santo de oro se pusieron de rodillas inclinando sus cabezas en señal de respeto tras haber entendido su nueva misión
-Cómo ordene, gran patriarca –dijeron los cuatro al mismo tiempo
[….]
-Patriarca yo también iré –entrando a la sala y quedando a un lado del caballero de Acuario. Una chica de no más de 16 años habló con voz fuerte y decidida.
-¿Quién eres? –Preguntó la maga de cabellera lavanda al voltear junto a sus dos fieles amigos.
-Mi nombre es Cris. Soy la Saintia de Cabello Berenice y quiero ir junto a ustedes –dijo la chica.
-Sería imprudente dejar ir a una novata en una misión tan peligrosa. Pero ¿Por qué quieres ir? –Shion habló sin dejar escapar su mirada de aquella chica
-La verdad hay dos razones por las que me convertí en una Saintia.. La primera es porque quiero ser alguien capaz de proteger a los más débiles de la opresión de aquellos que se dicen ser los justos –responde con una pequeña sonrisa la chica que viste la armadura de Berenice. Tomando un poco de aire Cris continúo pero a medida que el tiempo pasaba sus mejillas se teñían de rojo y su valerosa actitud fue finalmente reemplazada por otra siendo está una que le mostraba como una doncella enamorada-. –Pues… Yo quería… Era mi sueño conocer a la Saintia de Ofiuco… Mi sueño es conocer a Asuka-sama sé todo sobre la primera mujer dorada de la historia por eso quiero ir a esta misión
-Alguien más piensa que esto es muy raro –susurró el argentino con una pequeña gota de agua cayendo por su mejilla.
-Tal parece que encontramos una fan de Asuka ¿he? Además parece que Mei y tu Yuzu tendrán algo de competencia –bromeó el autor hondureño riendo divertido pero al ver donde su amiga y compañera de armas quedó callado- -¿Yuzu?
-Eso sí que no… Primero tuve que soportar a esa hielera con patas que iba detrás de mi esposo y ahora está que va tras mi demonio. Hermana será que busques a otra súcubo que la diosa de pechos grandes es mía –siendo cubierta por un aura oscura y sus ojos que brillaban con maldad la maga comenzó a murmurar.
-Esto se está saliendo de control –se escuchó decir al chico del parche que volteo y noto que también Athena estaba mirando molesta a la Saintia-. –Oye, Ninja dime que no estoy viendo mal
-Nadie me quitara a mi tía.. Digo ella es solamente mía y como la diosa que soy tengo más autoridad que cualquiera de ellas dos -decía la peli-lila apretando con fuerza su báculo.
-Am… Yuzu será mejor que te calmes. Estás armando una escena –el dueño de la espada espíritu toco el hombro de su amiga quien le dedico una mirada de muerte. Una mirada tan fría que congelo incluso hasta al mismo Camus.
-Senpai es muy popular –rió nervioso sintiendo el pesado ambiente.
-Sigo diciendo que hacía en su juventud -susurró Franco tras dejar que un pesado suspiro escape de el-. –Ninja, Camus será mejor que las dejemos porque conociendo a las mujeres cuando están así… Es mejor alejarse
-Su-Supongo que tienes razón, patriarca es mejor hacer una graciosa huida. Me imagino que no querrá estar cuando ellas tres comiencen a discutir –ahora fue el autor hondureño que toma la palabra
-Todavía hay muchas cosas que quiero hacer así que… ¡A la baticueva! –Exclamó el peli-verde ganándose la mirada confusa de los otros tres chicos-. -¡Que hagamos como los magos y desaparezcamos!
-Ah, eso –dicen los dos autores y el santo de oro que escaparon junto al patriarca dejando a las féminas solas en el lugar
[….]
-¿Cómo está eso de que sabes todo de mi tía? –Preguntó Athena con una pequeña sonrisa en su rostro. Ella había bajado de su trono llegando donde las dos féminas que le miraban también un poco molestas por esas palabras
-Pues quien no ha escuchado de las hazañas de Asuka-sama cuando era una Saintia. Ella era fuerte, noble, una guerrera temida y respetada además es hermosa tiene un cuerpo que es el sueño de cualquiera -contestó la joven guerrera teniendo sus manos en sus caderas.
-Tienes razón en eso. Ella era una de las más fuertes Saintias de todo el santuario -comenzó diciendo la peli-morada quien se detuvo unos segundos para luego continuar- -aparte mi tía está buenísima digo, tiene sus años pero sé ve muy bien, y soy la que pudo hacerlo con ella no solamente en esta era sino también en la era del mito por eso les llevo ventaja
-Discúlpeme pero perdóneme Athena. Usted puede ser la diosa que protege la tierra y todo eso pero yo soy su esposa. Creo que eso me da un poco de ventaja sobre ustedes dos -comentó Yuzu orgullosa por sus palabras
-Podrás ser mucho su esposa pero ella pasa más tiempo conmigo que contigo –esta vez fue una mirada llena de superioridad acompañada por palabras de burla las dichas por la diosa
-Bue-Bueno… ella tiene también su familia y tiene otras cosas que hacer. Por eso no nos podemos ver tanto -rebatió la gatita mágica aquellas palabras sonriendo debido a su cercanía con la demonio- -aunque ella y yo lo hicimos varias veces antes de casarnos
-Cómo sea, yo soy la que manda aquí y aquí solamente mis chicharones truenan. De modo que hermana puedes olvidarte de ella porque es mía –comentó Saori sonriendo triunfal.
-No se me hace justo que estemos peleando por Asuka-sama como si fuera un trozo de carne. Somos adultas y deberíamos dejar que ella decida a quien escoge –mencionó Cris recibiendo la mirada de dos mujeres listas para atacar en cualquier momento. Esto obviamente hizo que la Saintia retrocediera-. –A-Además estoy segura que Asuka-sama me escogería a mí
-¿Y qué te hace pensar eso? –Preguntaron Athena y Yuzu al mismo tiempo
-Pues… Soy más joven que ustedes dos. Usted Athena-sama puede ser la diosa de este lugar pero supongo que nada la hace excitarse. Me refiero a que es una diosa frígida. En cuanto a usted, Yuzu-san mm… solamente puedo decir que ya los años le están cayendo -dijo la Saintia solemne mirando a sus dos rivales que bajaron la cabeza-. –De modo que soy la indicada para darle las mejores noches a mi heroína
-¡Sobre mi cadáver! –Exclamaron las mayores.
[….]
[En las afueras de la recamara del patriarca]
-Está seguro de que fue buena idea el dejarlas solas –preguntó Franco
-Es mejor... no quiero terminar en el bando de alguna de ellas –dijo el patriarca temblando por un pequeño recuerdo de hace algunos años
-Dejando de lado el bullicio hecho por ellas quiero preguntarle qué piensa de toda esta situación, patriarca Shion -habló el chico de pelo azul claro fijando su mirada en el peli-verde
-Lo único que puedo decir es que… Espero y ella no haga alguna tontería. Escuche vagamente por parte de Asuka algo sobre las espadas que creó junto al dios herrero pero no pensé que fueran reales -Shion dijo frunciendo un poco el ceño para luego desviar la mirada de los dos chicos presentes
-Todavía no entiendo para que las quiere. ¿Qué motivos ocultos tiene? –Pregunta nuevamente el chico del parche ganándose la mirada de su amigo y compañero de aventuras-. -¿Qué sucede? ¿Por qué me miras así?
-Hace unos días fue a mi casa. Ella me contó sobre la maldición de los géminis… Yo me doy una idea de la razón por la que quiere esas dichosas espadas pero quisiera estar equivocado. Además este problema también es por ti y por Shiki –dijo finalmente Ninja provocando que su amigo enarcara una ceja. Antes de que este personaje pudiera responder la voz fuerte de otra persona llegó a los oídos de los muchachos
-Ita Asoúka mentem suam tandem amisit et pro illis gladiis iturum me rogavit ut auxilium crearet. Et omnes propter cordis contritionem erraverunt a duobus mortalibus, scilicet fatuo, qui in monte Olympo rem suam fecit. Propter gladios rogavit me ut eum crearet.. Tune es patriarcha huius situs? (De modo que Asoúka por fin perdió la cabeza e iría por aquellas espadas que me pidió que ayudara a crear. Y todo por el desamor, un error de dos simples mortales, la idiota que hizo de las suya en el monte olimpo. Fue por las espadas que me pidió que le ayudara a crear... ¿Tú eres el patriarca de este sitio?) –Subiendo por las escaleras que daban acceso a la cámara del peli-verde. Llegaba un hombre con aspecto amenazante hablando en el idioma de los dioses quedando finalmente frente a los dos autores y el patriarca-. -Responde, homo, ubi est matertera mea? Immo stultus, qui discipulus meus fuit (Responde, humano ¿dónde está mi tía? Mejor dicho la idiota que fue mi aprendiz) –volvió a exigir el recién llegado. Siendo un hombre joven de cabellos castaño claro y ojos fríos llevando túnicas parecidas a las que usaban los antiguos reyes de Grecia y Roma
"Qué es...Esta sensación de opresión…no puedo moverme... será por su cosmos" –pensó el hondureño sintiendo como su cuerpo se quedaba sin fuerzas
"Este cosmos... es parecido al de Athena pero el suyo es mucho más agresivo" –ahora fue Franco el que temblaba estando frente al dios
-Hefesto-sama ¿qué desea con nosotros? –Preguntó el patriarca desde su lugar.
-Deseo saber dónde se encuentra la idiota de la diosa Ceres… -Mostrándose más que molesto el dios de las forjas exige la presencia de su tía
-Lamentablemente no sabemos el paradero exacto de Asuka. Pero por qué el dios de las forjas vino hasta aquí… Hasta el mundo de los humanos –Shion dijo notando la mirada gélida de aquel dios
-Es típico de esa idiota hacer este tipo de cosas… -Susurró con molestia el castaño rascando su nuca mientras mi mirada estaba fija en otro lugar-. –Oye el humano que tiene la cara de un pasivo ¿qué tienes en tu brazo?
-¿Có-Cómo que pasivo? –Un poco molesto Franco habló luego de haberse liberado de aquella presión invisible.
-Yuzaki. Aunque quiera verte hecho puré por lo que le hiciste a la diosa Athena será mejor que enojes a un olímpico –decía por lo bajo el gran patriarca mirando de reojo al chico del parche.
-¿Y bien? ¿Vas a contestarme, humano? –Pregunta el dios de las forjas elevando un poco su cosmos provocando que todo el lugar comenzara a temblar
-Franco… Te digo esto como tu amigo… No hagas enojar a este tipo. No sabes cómo son los dioses cuando se molestan –Ninja como era llamado por sus amigas miró de reojo al argentino que dejó escapar un pesado suspiro para enseguida contestar
-Cómo si fuera a decirle algo a un dios prepotente como tú -terminó diciendo el autor que lleva el parche en su ojo
-Tienes valor para decirme eso. Aun siendo un sucio humano que no vale más que la mierda de estos humanos arrogantes. Estoy cabreado por no encontrar a mi tía y ahora me faltas el respeto –chasqueando sus dedos el dios de las forjas trajo a sus guerreros. Dos autómatas más grandes que un adulto- -ahora muere
-No creas que con eso vas a… -Sin que pudiera terminar su oración esta persona fue lanzada contra los muros de la recamara del patriarca debido al fuerte golpe de uno de los guardianes de Hefesto. Este ser tenía su brazo mecánico levantado y su amo una sonrisa en su rostro
-¡Franco/Yuzaki! –El patriarca al igual que Ninja vieron asombrados como el chico que se atrevió a falta el respeto a un dios caía sentado en el piso después de aquel golpe.
-Creo que es peligroso… Hacer enfadar a este hombre –susurra el caballero de Acuario quien estaba frente al antiguo caballero de Aries.
-Este tipo es demasiado fuerte. De todos los olímpicos es el más irascible –mencionó el patriarca
-Dios Hefesto quiero pedir disculpas por mi amigo. Él siempre habla de más sin medir las consecuencias -dijo Ninja llevando su mano a su espalda donde tenía uno de sus artefactos de pelea
-Eres solo un humano… -El hombre de cabellos castaños con su velocidad divina llegó donde el hondureño quedando frente a este-. –y estás mintiendo
