"Con esto podemos concluir nuestras negociaciones, daimyo-sama". Torifu Akimichi habló con el daimyo del país del té.
"Ha sido un placer hacer negocios con konoha, Akimichi-san". El daimyo despidió a Torifu y el equipo que konoha había enviado a las negociaciones.
El grupo de 4 shinobis de konoha se dirigió al hotel luego de haber hablado con el daimyo.
"Bueno, estas negociaciones han ido bastante bien" Torifu miró a los 3 jóvenes que estaban en esta importante misión, en especial al chico uchiha que no había dicho nada más que unas pocas palabras desde que salieron de konoha.
"Tienes bastante talento para negociar, Akimichi-sama", el tercer compañero de su equipo, shinku lo felicitó.
"Ya tengo algo de experiencia negociando con daimyos, shinku-kun. Además, el que me enseñó fue el segundo Hokage".
"Aun así es bastante impresionante, quiero decir, el daimyo y esos dos junto a él querían beneficios sin dar mucho a cambio". El indignado shinku mencionó
"Todas las personas de alto mando quieren sacar lo mejor para sus países o aldeas. Y es preferible si pueden hacerlo sin perder nada." Sakumo, el último miembro del equipo llevo la conversación a un tono un poco más serio y algo deprimente.
Torifu miró a los tres jóvenes frente a él, "De hecho. Esto ha sido así incluso desde antes de que yo naciera, pero eso no importa ahora. No creo que podamos cambiarlo".
"El sentimiento de codicia parece venir arraigado en el corazón de todo ser humano, sea shinobi o no" el uchiha pronunció sus primeras palabras desde que llegaron al puerto degarashi en el país del té.
"Deberíamos descansar. Partiremos mañana a primera hora de la mañana" hablo Torifu un poco triste de que niños tan péquelos tengan este tipo de conversaciones.
'No me extraña que quiera volver al pueblo lo más rápido posible, después de todo tiene un clan que liderar y proteger. Ahora que lo pienso, shikahiro-sensei también se preocupaba profundamente por su clan. Así que este es el peso de ser el líder de un clan.' Naruto, quien, al caer la noche, yacía acostado en su cama en la habitación del hotel y al no poder dormir, se quedó pensando profundamente hasta el otro día.
A la madrugada el equipo de konoha se fue del puerto de degarashi justo cuando el sol empezaba a salir y los cielos se pintaban de naranja.
Continuaron su camino hacia la frontera con la tierra del fuego sin parar, al llegar a un campamento de patrulla fronteriza donde decidieron parar a descansar.
"Descansaremos 5 horas en el campamento, después de eso seguiremos nuestro camino hasta la aldea". Torifu informó con un tono cansado puesto que habían estado viajando desde hace un buen tiempo sin parar.
"Por supuesto, Torifu-sama" dijeron sakumo y shinku, mientras naruto solo asentía con la cabeza
Los ninjas estacionados allí los trataron con bastante respeto puesto que Torifu era el jefe del clan Akimichi, naruto era el heredero del clan uchiha y sakumo y shinku eran ninjas bastante prometedores de la aldea.
Cuando el equipo estaba descansando en tiendas de campaña. Muy cerca la frontera se dirigían dos ninjas con la diadema de kirigakure.
"Siento varias presencias más adelante, seguramente son shinobis de konoha. Sin embargo, tienen cuatro firmas de chakra muy fuertes". Chūkichi, un hombre alto con tres rayas largas alrededor de su cara, con anteojos tapando sus ojos, un collar de perlas en su cuello y el típico atuendo shinobi de kiri, habló con el hombre más bajo junto a él.
Genji, un jounin de una edad bastante madura y el uniforme típico de kirigakure miró hacia delante, "es extraño que haya tan buenos ninjas en una frontera con un país tan pequeño como el país del té. Es probable que varios de esos ninjas estén en una misión."
"¿Que deseas hacer, Genji-san?". Chūkichi, el mejor sensor de kiri le pregunto al líder de la misión.
"A pesar de estar cansados por esa… Esa cosa. Debemos rodear el país del fuego, no queremos causar un incidente con konoha".
Llegando a una ciudad costera entre los países del fuego y el té, los dos ninjas de kirigakure fueron interceptados por 2 shinobis de konoha.
Uno de ellos se adelantó para decir, "kirigakure shinobi, pareces estar algo lejos de tu casa. ¿Cuál es tu propósito tan cerca del país del fuego?". El ninja, que no parecía mayor de 15 años habló con dureza y algo de odio.
"Apártate, chico. Venimos de una larga misión y no querrás meterte con el shinobi de kiri". Chūkichi le respondió al shinobi de konoha con la misma dureza
Las palabras de Chūkichi solo sirvieron para enojar mas al shinobi de konoha, que se preparaban para una batalla ante los shinobis de kiri.
Justo cuando Genji pensó que una confrontación con los dos chicos de konoha era inevitable. 4 ninjas llegaron para solucionar este pequeño problema.
"Renjiro. Detente" una gruesa voz dijo desde la cima de un árbol a unos metros de distancia.
Todos voltearon a ver al dueño de la voz para encontrarse con Torifu Akimichi el líder del clan Akimichi, y a su alrededor se encontraba el heredero del clan uchiha junto a sus compañeros sakumo hatake y shinku yuuhi.
"Pero, Torifu-sama. Estos dos se han estado moviendo muy cerca de la frontera con el país del fuego" Renjiro intento convencer a Torifu para atacar a los shinobis de kiri. Los cuales esperaban la decisión que tomaría Torifu con gran anticipación y aún con su guardia alta.
"Lo más probable es que se dirigían hacia una ciudad costera. Seguramente vienen de una misión, y según el tratado que tenemos con kiri. Ustedes son libres de ir hasta el puerto para llegar a su aldea."
Los dos jounin de kiri finalmente bajaron la guardia y le agradecieron a los recién llegados, "Muchas gracias. Akimichi-san, esto hubiera creado tensiones entre nuestras aldeas, como agradecimiento te diré que el motivo por el que estamos aquí es por que han desaparecido varios ninjas de nuestra aldea que son poseedores de líneas de sangre. Así que ten cuidado con los tuyos."
Con eso los dos ninjas de kiri siguieron su camino para llegar a su aldea.
Con los dos ninjas de Kirigakure alejándose, el grupo de Konoha retomó su camino hacia la aldea de la hoja. La luz del sol se filtraba a través de las hojas de los árboles mientras avanzaban por el bosque, cada paso les acercaba más a su hogar.
Naruto caminaba junto a sus compañeros, reflexionando sobre la breve pero intensa confrontación con los shinobis de la niebla. La idea de que algunos ninjas de Kirigakure estuvieran desapareciendo, especialmente aquellos con líneas de sangre, lo hizo preguntarse sobre las posibles razones detrás de estos eventos.
"Es extraño, ¿verdad?" Sakumo rompió el silencio, dirigiendo su mirada hacia Torifu. "¿Crees que podría haber algo más detrás de estas desapariciones?"
Torifu asintió con seriedad. "Es difícil decirlo con certeza, sakumo. Las desapariciones podrían estar relacionadas con una variedad de factores, desde conflictos internos en Kirigakure hasta problemas con otros clanes o incluso acciones de fuerzas externas. Debemos estar alerta y listos para cualquier eventualidad."
Naruto, el silencioso miembro del equipo, finalmente habló. "Tiene razón, sakumo. No podemos subestimar las posibles implicaciones de esta situación. Nuestra prioridad sigue siendo cumplir nuestra misión y garantizar la seguridad de nuestro país y aldea."
A medida que continuaban saltando en las ramas de los árboles el equipo llegó a un camino que los llevaba directamente a las enormes puertas de la aldea.
"Finalmente estamos en casa, informemos nuestra misión al Hokage y podemos irnos a casa." Torifu hablo mientras se dirigía hacia la torre del Hokage.
Torre Hokage
'Parece ser que alguien ha estado robando los linajes de kiri'. Hiruzen Sarutobi reflexionó mientras observaba al equipo enviado a las negociaciones con el país del té salir de su oficina.
Usando su chakra, Hiruzen llamó un anbu que pareció repentinamente frente a él de rodillas y con la cabeza agachada.
"Informa al clan Hyuga que sus miembros deben tener cuidado al salir de la aldea. Alguien ha estado robando los linajes de kiri."
El anbu, aunque un poco sorprendido por la información, reprimió sus emociones y se dirigió al complejo del clan Hyuga para informar al líder del clan.
Hiruzen vio cuando el anbu desaprecio. 'El clan uchiha será informado por naruto, ya que en el clan senju nadie ha despertado el elemento madera de Hashirama-sama, no serán informados. Debería informar al clan Kurama y mandar a alguien a la aldea oculta en los remolinos.'
Con esos pensamientos Hiruzen puso sus planes en marcha.
Santuario nakano
En el sótano debajo del santuario, los uchihas que poseían el sharingan estaban todos reunidos. Se encontraban sentados frente a los cuatro ancianos y frente su heredero, quien los citó para informar sobre lo dicho por Genji en su misión más reciente.
"Como saben, recientemente tuve que salir en una misión al país del té. Sin embargo, no estoy aquí para informar sobre eso, sino más específicamente cuando regresábamos de dicha misión en la frontera con el país del té y el país del fuego. Nos encontramos con dos shinobis de kiri, quienes estaban a punto de participar en una pelea con dos shinobis de konoha." El clan uchiha esperaban con bastante expectación sobre lo que su heredero diría, algunos pensaban que había matado a los kiri ninja y había salvado a sus compañeros de konoha.
Naruto continuó contando lo sucedido, "al llegar parecía que los ninjas de konoha estaban por iniciar una batalla por cuestiones personales, y violarían el tratado entre nuestras aldeas. Pero Torifu-san intervino y detuvo cualquier conflicto, como agradecimiento los ninjas de kiri nos dieron información crucial sobre un suceso que estaba teniendo lugar en sus fronteras, y habían estado rastreando hasta el país del té."
Una miembro del clan lo interrumpió, "que sería eso, ¿naruto-sama?".
Naruto suspiró, "a eso estaba llegando. Genji de kirigakure nos dijo que alguien ha estado secuestrando a los shinobis con líneas de sangre, y todavía no han logrado saber quién es el autor de estos crímenes. Aunque él y su compañero parecían bastante cansados".
El silencio se apoderó de la sala mientras los miembros del clan Uchiha procesaban la información que Naruto acababa de revelar. Los cuatro ancianos intercambiaron miradas significativas, conscientes de la gravedad de la situación.
Uno de los ancianos, con voz profunda y serena, finalmente habló. "Naruto, agradezco que hayas compartido esta información con nosotros. Es preocupante que alguien esté llevando a cabo tales actos en el mundo shinobi. Los linajes de sangre son un recurso valioso, y su desaparición podría tener implicaciones significativas."
El heredero del clan Uchiha asintió con seriedad. "Sí, lo entiendo. Genji mencionó que están tomando precauciones y que esperan resolver esta situación en Kirigakure. Pero deberíamos estar alerta en caso de que el problema se extienda más allá de sus fronteras."
Otro de los ancianos habló, su tono lleno de preocupación. "Si alguien está detrás de estos secuestros, podrían tener motivaciones oscuras y un plan más amplio. Debemos estar preparados para proteger a nuestro clan y a nuestra aldea."
Naruto asintió con determinación. "Por supuesto. Mantendré a los miembros del clan Uchiha informados sobre cualquier desarrollo y seguiré trabajando con mis compañeros de Konoha para asegurarnos de que estamos preparados para cualquier eventualidad."
Los cuatro ancianos intercambiaron miradas nuevamente antes de asentir en acuerdo. "Mantén la vigilancia, Naruto. Los Uchiha han enfrentado adversidades en el pasado, y esta situación no es diferente. Como el futuro líder de nuestro clan, es tu responsabilidad liderar y proteger a nuestro linaje."
Después de la reunión en el santuario Nakano, Naruto se retiró a su habitación, reflexionando sobre las palabras de los ancianos. Sabía que su papel como líder del clan Uchiha era cada vez más crucial, y estaba dispuesto a hacer todo lo posible para proteger a su clan y a su aldea.
La noche avanzaba mientras Naruto se recostaba en su cama, sumido en sus pensamientos. A lo lejos, se podía escuchar el suave murmullo del viento y el crujir de las hojas en el bosque cercano. A medida que el silencio lo envolvía, Naruto se llenó de una determinación renovada.
El futuro estaba lleno de incertidumbre y desafíos, pero eso no lo asustaba. Se había enfrentado a obstáculos muy difíciles de superar en el pasado y había salido más fuerte de cada uno de ellos. Y ahora, con la responsabilidad de liderar a su clan y proteger a su aldea, no tenía intención de detenerse.
Naruto cerró los ojos, concentrándose en su chakra y en la conexión con su linaje. Sus pensamientos se centraron en sus maestros, en las lecciones que había aprendido y en las habilidades que aún tenía que dominar. Sabía que para proteger a su clan, necesitaba volverse aún más fuerte, más hábil y más astuto.
En los días por venir, Naruto se sumergiría en su entrenamiento muy riguroso con todo el material que había leído de su biblioteca privada. En la que tenia mucha información que los antiguos jefes de clan habían almacenado durante siglos.
Al día siguiente. Naruto Uchiha se encontraba en el campo de entrenamiento del clan, con su gunbai en mano. Se había estado enfocando en dominar la técnica ancestral "Regreso de los Uchiha". La técnica implicaba una combinación de precisión y control de chakra para redirigir los ataques enemigos. Naruto sabía que esta técnica era fundamental para que él defendiera al clan y estaba decidido a dominarla.
Concentrándose en su chakra, Naruto realizó los movimientos precisos que le habían enseñado. Levantó su gunbai en un rápido movimiento, creando una corriente de aire que desvió los proyectiles de entrenamiento lanzados hacia él. Sin embargo, aunque lograba cierto nivel de éxito, aún no había perfeccionado la técnica al máximo.
Frustrado, Naruto dejó escapar un suspiro. A pesar de su dedicación, sentía que había llegado a un punto muerto en su entrenamiento. Además, su Sharingan de tres tomoe no parecía avanzar como esperaba. Había estado practicando activamente para mejorar su capacidad de anticipar y reaccionar a los movimientos del oponente, pero los resultados eran mínimos.
Para diversificar su entrenamiento, Naruto continuó con sus duelos de taijutsu contra Might Dai. A pesar de que Naruto había crecido más fuerte, Dai seguía siendo un oponente formidable, puesto que, al no tener la capacidad de usar chakra, solo tenía que entrenar un arte durante todo su tiempo de entrenamiento. Sus duelos eran intensos y desafiantes, lo que impulsaba a Naruto a superar sus límites constantemente.
Además, Naruto seguía reuniéndose y teniendo encuentros en el arte del kenjutsu con Kosuke, un experto en la materia, y la persona que le enseñó sobre el arte. Aunque ya había aprendido los movimientos y habilidades que Kosuke le había enseñado, Naruto estaba decidido a dominar completamente estos movimientos. Pasaba horas practicando movimientos precisos y las técnicas de espada bajo la atenta mirada de Kosuke. Quien estaba muy sorprendido por cómo naruto dominaba sus técnicas en tan poco tiempo.
Sin embargo, el compromiso de Naruto con su entrenamiento tenía un costo. Aunque pasaba tiempo con los miembros más jóvenes de su clan, había descuidado un poco su interacción con ellos. Se dio cuenta de que debía encontrar un equilibrio entre su entrenamiento personal y su papel de modelo a seguir para la generación más joven.
Decidió dedicar tiempo para entrenar con los jóvenes, compartir consejos y ayudarles a desarrollar sus habilidades. Aunque esto significaba un esfuerzo adicional, Naruto encontró gratificación en ver cómo sus compañeros de clan mejoraban gracias a su ayuda.
Los días pasaban, y Naruto continuaba entrenando incansablemente, impulsado por su deseo de proteger a su clan y convertirse en un líder digno. Aunque se sentía estancado en algunos aspectos, seguía adelante con determinación y valentía, confiando en que su arduo trabajo eventualmente daría sus frutos.
