Capítulo XVIII:
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MIENTRAS LLORAS
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Conoces a miles de personas pero solo una te marca.
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Naruto. Sasuke. Sus mejores amigos.
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Sintió la mano de Matsuri apretar la suya con fuerza, los ojos se le llenaron de lágrimas y las manos le temblaban aún así no dejaba de ver ese maldito video reproduciéndose en el móvil de su hermana menor.
―Sakura― La llamo la castaña, era inútil su hermana no reaccionaba ―Tenemos que irnos― Murmuró al notar todas esas miradas sobre Sakura.
Matsuri la tomo con fuerza de la mano y la obligo abandonar el corredor escolar dejando a los dos chicos atrás. Sasuke frunció el ceño furioso, Naruto solo borro ese video de su móvil incrédulo.
Esa no era Sakura ¿Verdad?
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―Tranquila― Murmuró Shizune cuando ambos niñas entraron a la enfermería del Colegio ―Recuéstate en la camilla―
Sakura lloro con más fuerza sintiendo como el corazón se le iba a salir por la garganta. Tenía nauseas y le temblaba todo el cuerpo. Matsuri la miro preocupada cuando se recostó en la camilla y se hizo un ovillo llorando, desde hacia cuarenta minutos no había pronunciado ni una sola palabra. Shizune le alcanzo un vaso con agua y un calmante, Sakura lo tomo de prisa y volvió a hacerse un ovillo sobre la camilla apretando sus rodillas contra su pecho con fuerza sin dejar de llorar un segundo.
―Voy a llamar a mamá―
―No― Chillo la pelirrosa levantándose de golpe ―Llama a Rin― Le pidió entre el llanto ―Dile que nos venga a buscar a la salida de clases―
Matsuri asintió y le pidió a su hermana mayor que viniera por ellas en la tarde. Shizune le permitió a Sakura quedarse en la enfermería el resto del día.
―¿No prefieres esperar a tu hermana aquí?― Le preguntó al verla ponerse la mochila rosada y encaminarse a la salida de la enfermería escolar.
Sakura negó con la cabeza. El timbre había sonado hacia unos cinco minutos y necesitaba alcanzar a Sasuke y Naruto en el estacionamiento y explicarle todo antes que Rin pasara por ella y Matsuri.
―Gracias―
Shizune la observó con pena al salir de la enfermería y la pelirrosa apresuró el paso al estacionamiento escolar. Diviso el cabello rubio de Naruto y se apresuró a alcanzarlo.
―Naruto― El Uzumaki se detuvo a unos metros y Sakura comenzó temblar a medida que avanzaba hacia él ―Yo se lo que debes estar pensado― Susurro, el rubio seguía sin verla dándole la espalda ―Déjame explicarte―
―¿Cómo pudiste hacer algo así? ― Le preguntó dolido volteando a verla y Sakura observó los ojos llorosos del chico clavarse en ella.
―Me drogaron― Susurro y el rubio abrió los ojos asustado ―Yo no hice nada― Gimoteo y Naruto tuvo la inmensa necesidad de abrazarla en ese momento.
Pero no lo hizo.
―Cogerte a mi hermano y sus amigos ¿No es nada?― Escuchó su voz déspota y fría detrás de ella.
Sasuke paso por su lado sin verla y Naruto avanzo unos pasos al coche del pelinegro.
―No. Yo no― Lloró y sintió las miradas de sus compañeros sobre ella, ninguno de los dos chicos voltearon a verla ―Sasuke― Lo llamo.
―Me das asco, Sakura―
Matsuri llegó en ese momento evitando que la pelirrosa se largara a llorar enfrente de esos dos.
―Vámonos― Ordeno la menor apretando su brazo ―Rin ya llego por nosotras―
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―Sakura― La llamo la Haruno mayor esperándola en el coche de Obito.
Sakura se largo a sus brazos a llorar y Rin la apretó con fuerza contra su pecho. Matsuri la miro preocupada y Sakura observó con miedo el interior del coche pero se calmo al ver que no había nadie dentro. Rin la soltó y le abrió la puerta del copiloto, Matsuri subió al asiento trasero.
―Vamos a casa― Comentó la castaña encendiendo el coche ―Y me cuentas que paso―
―No― Hablo seria la pelirrosa y apretó las manos en el dobladillo de su falda escolar ―Necesitó que me lleves con Kakashi―
Rin frunció el ceño confundida por el pedido de su hermana, aún así no la cuestiono y manejo hasta la estación de policías. Kakashi ya las esperaba allí junto con Óbito.
Matsuri se tapo la boca con las manos al borde del llanto al oír lo que Sakura pasó aquella noche, Kakashi aún estaba en su escritorio sin poder pronunciar palabra y Rin comenzó a llorar cada vez más fuerte a medida que Sakura contaba lo que recordaba de aquella noche.
―Ya le di la baja al video― Murmuró Obito dejando la laptop de lado ―Si llegan a compartirlo o re subirlo a alguna página el mismo se auto eliminara por pornografía infantil―
Sakura suspiro algo aliviada que el video desapareciera finalmente.
―Gracias, Obito―
El Uchiha solo la miro con ternura y lastima, aún no podía creer lo que su primo había sido capaz de hacerle a esa niña.
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―¿Te quedas a dormir conmigo? ―
Rin asintió metiéndose bajo las frazadas con su hermana. La pelirrosa apoyo su cabeza en el hombro de la castaña y respiro muy fuerte clavando sus ojos hinchados y llorosos en el techo.
―Perdón, Rin― Gimoteo y la castaña sintió los pequeños espasmos que desprendía el cuerpo de su hermana menor ―Siempre te causó problemas―
―Sakura― Suspiro con ternura y enredo sus dedos con los de su hermana ―Tu jamás me has causado problemas― Murmuró aunque esa frase se la había dicho muchas veces, Rin solo se sintió más culpable por haberle dicho eso a ambas ―Eres lo mejor que tengo junto con Matsuri y Konan―
Sakura sonrió entre la penumbra de la habitación, a los pocos minutos se quedó dormida. No volvió al Colegio después de ese día.
Matsuri las escucho desde el otro lado de la puerta del dormitorio de su hermana mayor no tuvo valor para entrar, apoyo la espalda en la pared y se deslizó despacito hasta acabar sentada en el suelo del pasillo, apretó sus piernas con sus brazos y comenzó a llorar.
¿Cómo fueron capaces de hacerle algo así a Sakura?
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―Itachi― Lo llamo serio ingresando a su dormitorio.
El Uchiha mayor sonrio de lado, sabía que tarde o temprano su hermanito vendría a encararlo.
―¿Qué carajos le hiciste a Sakura? ―
Itachi largo una carcajada levantándose del escritorio y se aproximo a su hermano que aún continuaba de pie en la puerta de su dormitorio.
―Le quite la virginidad― Se burlo ―Así como su primer beso―
Lo siguiente que sintió fue el puño de su hermanito estrellarse en su mandíbula. La sangre le escurrió desde los labios hasta el mentón manchando la alfombra del dormitorio. El Uchiha mayor sonrió de lado limpiándose la sangre con el dorso de la mano.
―Y no sabes como gritaba mi nombre mientras me la cogía―
La sangre le hervía, apretó los puños con fuerza y se volvió a tirar sobre su hermano, Itachi lo esquivo tomándolo con fuerza del cuello y lo estampó contra la pared. Sasuke abrió la boca buscando aire cuando los dedos de Itachi se incrustaron con más fuerza en su cuello y apretó sus manos entorno al brazo de su hermano mayor en un vano intento de liberarse.
―Ella se me entregó― Siseo con malicia y lo soltó.
Sasuke cayó al suelo tosiendo y agarrando su cuello.
―Estúpido hermano menor― Se burlo marchándose de la habitación.
Sasuke apretó los puños furioso observándolo irse del dormitorio.
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―Naruto aun no ha llegado― Comentó al verla en la puerta de su casa.
Se veía horrible. Estaba despeinada, pálida, ojerosa. Llevaba un pantalón deportivo muy holgado y una sudadera gris que le quedaba demasiado grande por encima.
―Quería hablar contigo, Pain― Susurro Sakura.
El chico la dejo pasar. Se sentaron en la mesa de la cocina y Sakura no pronunció palabra por diez minutos hasta que Pain dejó aquella taza azul con café frente a ella.
―Tú tampoco me crees. ¿Verdad? ―
Pain suspiro apoyando su mano en la cabeza de la chica y despeinado aún más sus cortos cabellos. Le hacía recordar tanto a Konan.
―Dime que paso― Hablo serio sentándose frente a ella ―Yo te creo―
Sakura sonrió ente lágrimas y a medida que avanzaba en su relato al Uzumaki mayor se le revolvía el estómago. Dejó el cigarro a medio terminar y apenas si pudo pasar el café cuando ella acabo de contarle lo que recordaba de aquella noche.
―Ay, Sakura― Murmuro con la boca reseca.
Apago el cigarrillo por la mitad en el cenicero y recordó la noche de la graduación cuando Konan volvió con los ojos llorosos del baño detrás de Sakura y lo abrazo con fuerza.
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La de cabellos azules sonrió tomándolo de la mano y lo arrastro al medio de la pista de baile.
― Konan ¿Qué pasa?― Preguntó preocupado pasando sus brazos por la cintura de la chica.
― Nada― Negó con la cabeza aún apoyada en su hombro y lo abrazó con fuerza apegándolo a su cuerpo ― Necesitó que me hagas una promesa―
― Lo que sea―
Konan sonrió. Él era la única persona a quien le confiaría lo más importante que tenía en la vida.
― No dejes que nada le pase a Sakura―
Sus hermanas.
Dos horas más tarde su pequeña cuñada lo llamó para decirle que Konan había saltado del veinteavo piso.
Pain jamás creyó en la teoría del suicido.
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Lo comprobó aquella tarde.
―Mejor me voy― Dijo la pelirrosa al ver ingresar a los mellizos Uzumaki a la casa.
―¿Qué pasa, Sakura? ― Se burlo Naruko ―¿Cómo mi hermano y Sasuke no te creyeron ahora vienes a llorarle a mi hermano mayor? ― Preguntó burlona dejando el bolso sobre el sillón.
―Ya basta, Naruko― La reto Pain enojado.
Naruto se mantuvo callado, Sakura solo la ignoro tomando su móvil y las llaves de su casa de encima de la mesa.
―Gracias, Pain―
Naruto respiro profundo el aroma a cerezas cuando ella pasó por su lado rozando levemente su brazo con el suyo. Quiso detenerla, quiso abrazarla, quiso hacer tantas cosas esa noche pero solo se quedo quieto observando el piso. No despertó hasta que sintió el portazo cuando Sakura se marcho de la casa y Naruko subió las escaleras furiosa a su dormitorio.
―Naruto― Lo llamo Pain, él clavo sus ojos azules en su hermano mayor ―No la dejes sola― Le aconsejo.
―Ella me mintió― Murmuro en voz baja ―Esto ni siquiera se parece a lo que paso con Sasuke― Dijo dolido y frunció el ceño enojado ―Yo no la puedo perdonar―
Pain suspiro.
―Tu no tienes nada que perdonarle―
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Sasuke los observo sobre la cama de aquel hotel al que iban todos los viernes desde hacía casi tres meses. Se deshizo del pantalón y se bajo el bóxer para quedar completamente desnudo sobre aquel sillón color rojo.
― Ah, Naruto― Gimió la pelirrosa retorciéndose sobre la cama y abriendo más las piernas si era posible.
Naruto sonrió de lado cuando le metió la lengua en la vagina y comenzó a masturbarla despacito frotando su clítoris con sus dedos índice y medio. Sakura entre abrió los ojos y clavo la vista en Sasuke que se encontraba sentado a su izquierda en aquel sillón tapizado de rojo.
La habitación estaba en una semi penumbra solo iluminada levemente por la luz de aquella lámpara roja que había sobre la mesita de noche.
― ¿Te gusta?―
Sakura asintió aún con la vista clavada en Sasuke sintiendo como los dedos de Naruto entraban y salían cada vez más rápido de ella. Él pelinegro apretó su miembro erecto entre sus dedos sintiendo el líquido pre seminal mojar su mano derecha y comenzó a masturbarse observando como su mejor amigo se cogía a Sakura sobre la cama. Su mano subía y bajaba por el largo de su pene mientras observaba fijamente esos ojos verdes. Sakura estaba completamente desnuda sobre la cama, los labios ente abiertos, el pecho subía y bajaba.
Esa habitación apestaba a sexo.
― Ah, si― Gimió la pelirrosa cuando el rubio le apretó las caderas para poder penetrarla más profundo.
Naruto se quedó de rodillas sobre la cama y las piernas de Sakura envolvieron su cadera restregándose contra su miembro. La pelirrosa gimió muy fuerte retorciéndose sobre el colchón a medida que Naruto la embestía sin despegar los ojos de Sasuke.
― Naruto― Gimió la pelirrosa.
Y Sasuke se acabó en su propia mano.
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Entre los dos, Sasuke siempre supo que él la amaba mucho más pero Naruto la amaba mucho mejor.
Por eso cuando llego la ambulancia y minutos después la policía y Naruto confesó haber visto a Sasuke en el balcón de la habitación de Itachi minutos después de que Sakura callera Sasuke no se molesto con él. Naruto estaba haciendo lo correcto.
Sasuke paso veinte días en prisión hasta que Madara Uchiha lo sacó bajo fianza.
Casualmente unos días después de aquella fiesta el cuerpo de Pain fue hallado sin vida a las afueras de Konoha. Madara Uchiha tomó ese caso. Ajuste de cuentas. Así lo cerraron.
Nadie ratifico la versión de Rin. Obito el único testigo junto con ella de lo que realmente había pasado esa noche con Pain, había muerto en el accidente junto a Kisame que manejaba el otro coche en estado de ebriedad.
Fue justo dos días antes de comenzar las clases cuando Sasuke aún tenía esa tobillera electrónica en el tobillo izquierdo que la policía se presentó en su casa. Lo habían absuelto del cargo de intentó de homicidio.
―¿Cómo hiciste?― Murmuro el Uchiha menor acercándose a la mesa del comedor de su casa.
La policía se había ido hacia diez minutos y le habían quitado aquella tobillera electrónica, una enorme marca morada le había quedado alrededor del tobillo izquierdo.
Madara sonrió de lado sirviéndose una taza de café y observó a sus dos sobrinos favoritos.
―Yo no lo hice― Comentó sin interés, Sasuke se sentó a la mesa justo frente a su hermano mayor, Itachi lo miro serio ―Alguien decidió liberarte―
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1 de Agosto.
Cuando empezaron su último año de secundaria un extraño sentimiento embargo a ambos chicos. Pasaron todo el verano sin hablarse, sin verse, Naruto creía que Sasuke lo odiaba por casi haberlo mandado preso y Sasuke pensaba que Naruto lo odiaba por haber lanzado a Sakura de la habitación de Itachi, aunque eso era falso pero nadie más que él lo sabía.
No fue hasta la tercera materia cuando la puerta del salón de clases sonó con tres golpes y la vieron ingresar con una sonrisa que Naruto y Sasuke volvieron a cruzar miradas.
No podía ser verdad.
Naruto la miró con los ojos llorosos y Sasuke al fin entendió las palabras de su tío. Ella había confesado haberse intentado suicidar.
Azuma, el profesor de ese año escolar clavo sus ojos en ella y sonrió.
―Bienvenida al último año, Sakura―
Sakura Haruno había vuelto por segunda vez en la vida de la muerte y se veía incluso mas linda que la noche de su suicidio.
Sasuke. Naruto. Ya no eran sus mejores amigos.
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Nota*
Calculo seran unos veinticinco a veintisiete capitulos porque aun quedan muchos asuntos por resolverse.
Tengo pensado hacer dos finales alternativos.
¿Con quien les gustaria que Sakura se quedara?
¿Con Naruto. O con Sasuke?
¿O con ambos? ¿O quizás sola?
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