Disclaimer: No soy dueño de Pokémon ni de sus personajes, solo de algunos propios.
Cap3: Un encuentro inesperado.
Habían pasado varios días desde la llegada de Flannery y Pyra a la casa de los Ketchum, dónde nuestro condimento favorito tubo varios problemas con el tema de convivir con una amiga y/o futura esposa y su hija, aunque no esté convencido de perder su "pureza", no negará que la pasó genial con ambas chicas y su madre, sin embargo, no podemos ignorar que vivir bajo el mismo techo con una mujer, pueeede que traiga algunos problemas.
*Flashback, el día después de la llegada de Flannery*
Se puede ver como Ash se despertaba lentamente, sintiéndose algo más pesado de lo normal, lo primero que pensó fue que uno de sus compañeros se salió de su pokebola sin decirle nada, pero lo descartó al recordad que los dejó con el profesor Oak para que los estudiara al no conocer algunos de ellos.
Después pudo recordar todo el día anterior y recordó a una pequeña con zetas en sus mejillas, en ese momento la volteó a ver y dio una pequeña risa al ver a su hija Pyra dormir encima de él y durmiendo como cuando él lo hacía hace tiempo, con las extremidades extendidas sin importarle nada, vistiendo una adorable pijama de color rojo con estampados de diferentes bayas; le recordaba mucho a sí mismo antes de pasar tiempo con el señor L.T Surge, dándole un pequeño escalofrío al recordar cómo lo despertaba.
Dejando de lado los recuerdos, decidió que era momento de levantarse, con algo de dificultad y sigilo para no despertar a la niña, pudo salir como un si fuese un Seviper moviéndose.
Con su misión cumplida, decidió tomar rumbo al baño, necesitaba estar al cien por ciento para pasar el día con Flannery y Pyra, no quería tener la cara como un Slaking.
Llegando hasta su destino, por su pensamiento lento, pensó que todas estaban durmiendo, por lo que no llegó a la conclusión de que tal vez el baño estaba ocupado, abriendo la puerta y mirando enfrente, se quedó congelado al ver cómo estaba Flannery, su cabello rojizo estaba algo húmedo dando a entender que apenas y salía del baño, con solo una toalla alrededor su esbelta figura, dejando descubierta las piernas y los hombros, dándole a nuestro mostaza una hermosa vista, que no iba a olvidar nunca.
Ahora nos movemos a fuera de la casa de nuestro protagonista, dónde se escuchó un potente grito "QUE CREES QUE ESTÁS HACIENDO, PERVERTIDO?!!", al mismo tiempo que se podía escuchar varios objetos golpear contra algo o alguien, no sin antes escuchar muchas disculpas de quién recibía dicho ataque.
Después de haber escuchado el grito, Delia junto a Pyra solo se quedaron mirando al mostaza bien inconsciente, una tenía una mirada divertida y la otra preocupada ; nuestro mostaza tenía una marca roja en toda su cara en forma de suela de zapato, dando a entender el porqué quedó noqueado.
Estará bien, abuela? – preguntó preocupada la niña, quién sabía la fuerza que tenía su madre, la cuál no se debe tomar a la ligera.
Si, ha estado en peores momentos que esto, solo hay que dejarlo descansar, ven vamos a preparar el desayuno – le respondió la peli castaña mientras le tendía la mano a la menor, siendo tomada enseguida.
Está bien – olvidándose del moribundo en cuestión de segundo, siguió a Delia para preparar el desayuno, dejando al mostaza en el suelo.
Delia no quería romperse la espalda por intentar ayudar a su hijo a llevarlo a la cama, ya no era tan joven.
Fin flashback*
Todo ese día tubo que lidiar con una malhumorada peli roja y un risueño roedor amarillo que presenció todo el problema, con una salsa de tomate como si fuese palomitas, aunque todavía se preguntaba de dónde saca las botellas de ketchup, un misterio que tal vez nunca consiga resolver.
Intentó hablar con la pelirroja mayor solo para acabar ignorado por esta última; casi acabando el día pudo llegar a un acuerdo con la líder de gimnasio, el cual consistía en pasar la mayor parte de tiempo junto a él, aunque se le quedó viendo raro al verla susurrar a sí misma algo que no pudo escuchar y olvidó por completo al verla feliz.
Cada vez que ellos salían Pyra exigía, si, exigía pasar tiempo con ellos como la familia que debería ser, después de tanto pedir y patalear, consiguió pasar tiempo con los dos adultos jóvenes, dándole así al pueblo la idea de que su campeón ya no estaba soltero.
Podemos observar como nuestro mostaza junto a las dos pelirrojas se dirigían a comprar la alacena, con la llegada de las chicas y el Snorlax como hijo, Delia le encargó la compra de los alimentos, aunque al principio el pelinegro se rehusó, bastó enseñarle un listón naranja para que lo hiciera obedientemente.
Papá, hay que llevar esto? – preguntó Pyra al levantar una baya aranja.
Si, dáselo al dependiente para que nos cobre – afirmó el mostaza mientras se encargaba de cargar todas las bolsas, se sentía como un pobre Mudbray, no de mala manera.
Después de hacer las compras y darle un helado por la insistencia, pasando por un pequeño parque del pueblo dónde decidieron descansar.
Haaa, estoy muerto – dijo un agotado el azabache muestras se dejaba caer en una de las bancas del parque.
Gracias por el buen trabajo querido – le agradeció la pelirroja mayor con una pequeña sonrisa mientras le ofrecía una botella de agua.
G… gracias Flann… querida – tubo que cambiar rápido al verla poner una cara sombría al casi llamarla por su nombre.
De nada – volviendo con su alegre tono de voz y rostro, decidió sentarse junto al mostaza para disfrutar así también de su bebida.
Los dos jóvenes adultos no pudieron evitar sonrojarse al estar juntos y solos, casi siempre la pasaban con Delia, los Pokémon o con Pyra, la cual por cierto se fue a jugar en algunos juegos que brindaba el parque, al ser una pequeña niña, tenía mucha energía en su cuerpo y debía buscar maneras de estar siempre en movimiento y no quedar como un Torkoal tomando el sol.
Todavía me sigo preguntando, cómo tuvimos una hija? – se preguntó a sí mismo Ash mientas veía el cielo con unas pocas nubes.
Sigues con eso?, mira, ya te lo dije, cunado estabas conmigo en el gimnasio y pasó… - no pudo seguir al escuchar el llamado de su hija, volteando a verla y notar que no venía sola.
Junto a Pyra venía una niña de alrededor de su misma edad, cabello azabache algo desarreglado pero con dos mechones que caían a los costados de sus cachetes, las cuales traían unas curiosas marcas en forma de zetas, piel algo clara y ojos color verde, llevaba una pequeña boina en su cabeza de color verde, un overol del mismo color de la boina, debajo traía una camisa blanca, unas zapatillas azules con suela blanca y unos anteojos redondos de color negro, traía consigo un pequeño libro de tapa azul.
Mamá, papá, encontré a una persona perdida! – gritó con alegría la niña al momento llegar con sus padres.
Emm, hija, técnicamente sigue perdida para la otra persona que busca, por lo que la perdiste aún más de lo que estaba – no estaba segura si decirle o no, pero como madre, siempre debe corregir a su hija.
Pyra solo se le quedó viendo con los ojos en blanco al entenderlo mejor, empezando a casi llorar por hacer algo malo.
Papi, *snif* lo hice mal? – poniendo los adorables ojos de Furfrou, dejando sin escapatoria al azabache.
Suspiro* no, no hiciste nada malo, al contrario, hiciste bien en intentar ayudarla – le dijo mientras le daba palmaditas en la cabeza para reconfortarle, consiguiendo una sonrisa de la pelirroja menor – es solo que tu madre es algo estricta con las reglas y no se toma las cosas a la ligera – le aseguró mientras le guiñaba un ojo con una sonrisa.
Pues disculpa señor me voy de viaje cuando quiera y vuelvo cuando quiera sin decirle nada a nadie – dijo ofendida Flannery al pensar que le están diciendo aburrida.
Padre e hija solo atinaron a reírse mientras chocaban los cinco disimuladamente para no hacerla enojar más.
Dis… disculpen – llamó la atención la pelinegra con nerviosismo al no estar familiarizada con los desconocidos.
O si, lamento que éste par de cabezas huecas te hayan dejado de lado – se disculpó la líder de gimnasio, ignorando el "oye!" de parte del dúo – y dinos, sabes dónde te dijo tu mami a dónde ir si te perdías?
Mmm… me dijo que buscará unas señoras con trajes azules con líneas rojas, pero no e visto a ninguna vestir así – decía con vergüenza al pensar que si no podía encontrar a una persona vestida así, no tendría la oportunidad de encontrar a su madre.
Cambiamos de cámara para ver a una oficial Jenny agarrándose el lugar donde estaba su corazón, al sentir como alguien le decía que se estaba volviendo una anciana, una realidad que ninguna mujer quiere vivir.
Volviendo con nuestra familia y la niña perdida, Ash se guardó la información de que en pueblo paleta, al ser un pueblo pequeño, no había ningún tipo de robó o asalto, era un pueblo próspero y no requerían de una agencia de policías, por lo que no habían policías hasta ciudad verde.
Está bien, tranquila, estarás con nosotros hasta que encontremos a tu madre, de acuerdo? – le dio una sonrisa nuestro azabache mientras le palmeaba la cabeza.
La pelinegra solo pudo ver con admiración al mostaza, sentir la mano grande y fuerte de él, le daba un sentimiento extraño, como el de su madre cuando la reconfortaba cuando ella hacía algo que no era lo esperado.
Y cómo te llamas pequeña? – le preguntó la líder de gimnasio, no había escuchado que dijera su nombre, por lo que era apropiado preguntarle.
Me… me llamo Sora – le dio su nombre con nervios, todavía estaba procesando la caricia del azabache.
Bueno, un gusto en conocerte pequeña Sora, yo soy Flannery, mi esposo Ash y nuestra hija Pyra – le dijo Flannery mientras le daba una mirada de muerte a nuestro condimento favorito al verlo levantar un poco la mano.
Yo no dije nada – se excusó el azabache al momento de voltear su rostro a un lado e inflar los cachetes.
Con esa nueva información, la pequeña Sora no pudo evitar desilusionarse al escuchar que eran pareja, tenía una pequeña esperanza de tener al chico como su padre, cosa que no pudo conseguir.
Y dinos cómo es tu mami? – le habló con amabilidad para intentar animarla al verla con una mirada algo perdida.
Si, cierto, casi lo olvido – se tapó el rostro con su libro al sentir su cara arder al olvidarse de ese pequeño detalle – mami tiene el cabello rubio, anda una bata blanca, usa unos lentes parecidos a los míos y tiene una boina verde más grande que su cabeza.
Por alguna extraña razón a nuestro mostaza le pareció curiosa esa descripción, casi que conoce a alguien así, pero no es alguien muy… brillante por así decirlo.
Decididos a ayudarle a encontrar a su madre, optaron por la ayuda de sus amigos para que llevaran las compras hasta la casa, cosa que no le gustó a Charizard que lo consideraran como un Mudsdale de carga (deja vú?), retirándose no sin antes quemar al azabache.
Tomaron como punto de inicio el nuevo centro pokemon, decidieron comenzar hacía el sur y terminar en el norte, en la entrada del pueblo.
Mientras la estaban buscando, decidieron comenzar una pequeña plática con Sora, aunque esta última respondía con nerviosismo.
Al parecer su madre era la ayudante y asistente de una científica, la cual le ayudó para que tuviera una carrera diferente a la de entrenadora, por si esta última no resultase bien; pero curiosamente no dijo absolutamente nada de su padre, solo había escuchado de él por algunas anécdotas de su madre, como que era más joven que ella y era algo infantil, aunque de buen corazón y le ayudó con un tema que no le convenía nada.
Haha dijo que si no fuese por chichi, no hubiese podido seguir su sueño de ser una de las mejores entrenadoras de la región, también me aseguró que lo podía ver hoy, pero me enojé con ella al no decirme cómo o quién es – finalizó la pelinegra con tristeza al recordar el porqué se perdió, no conocía a nadie ni nada del lugar, solo que su tou-san vivía ahí y nada más.
Mmm, debe ser duro no saber cómo es tu padre – le dijo Ash al casi no recordar nada de su propio padre – no te preocupes, verás que te encontrarás de nuevo con tu madre y lo resolverán muy rápido.
En serio? – quería estar segura de que hablaba en serio, no quería que su último recuerdo con su haha sea una discusión.
Te lo aseguramos, recuerda querido, no estarás solo nunca más – le aseguró Flannery quien llevaba tomada de la mano a su hija, mientras que el azabache llevaba a la pequeña con lentes.
Jejeje… - se rio con algo de vergüenza al mismo tiempo que se rascaba la parte trasera de su cabeza por olvidar ese detalle – emmm… una carrera hasta la fuente de la entrada!
Con entusiasmo y alegría, tomó sin problemas a la pequeña Sora y la puso sobre sus hombros para tener mayor facilidad a la hora de correr, sacándola de su trance y hacerla que ponga una sonrisa.
Esta acción tomó por sorpresa a todas ya que no se lo habían esperado para nada, aunque esa acción le hizo sacarle una pequeña sonrisa a la líder de gimnasio.
No sabes que tus decisiones traen felicidad a los demás – se dijo a sí misma Flannery al notar la baja autoestima que tenía la pequeña Sora.
Vamos mami, no quiero perder contra papi – la sacó de sus pensamientos Pyra para poder alcanzara su veloz padre.
Si, si ahí vamos – finalizó con un suspiro al momento de empezar a caminar más rápido, no era tan fuerte como su futuro esposo.
Decidieron descansar junto a la fuente para ver si podían localizar a la madre de pelinegra, pasando el tiempo y las personas, no logró encontrar a quien buscaban, llegando así a la puesta de sol, dándole un hermoso color naranja al cielo.
Estaban a punto de irse de la entrada para brindarle algo de comida a Sora que no sean dulces, se podía divisar un objeto que se movía con gran velocidad hacia donde estaban nuestros protagonistas; en ese momento solo las féminas se hicieron a un lado del objeto identificado como algo imparable, dejando solo a nuestro condimento favorito en el camino de lo que era una silueta de una persona, la cual esta última solo pudo gritar "a un ladooo!!!", solo que no pudo parar a tiempo y se llevó a lo que tenía en su camino a la fuente, o sea el azabache.
Ash no sabía que había pasado, solo vio como una silueta venía hacia donde estaban ellos y fue en vestido con gran fuerza, gracias a su gran resistencia pudo apaciguar la mayor parte del dolor, pero eso no quiere decir que no dolió.
Porqué esto ya lo viví antes – preguntó a la nada al momento de observar mejor a su atacante, llevándose una gran sorpresa.
Itetete… perdón por caer encima de ti pero es que vi a mi hija y no pude evitar alegrarme – se disculpó la silueta mientras se tomaba la cabeza para evitar que se cayera su sombrero.
… Bianca? – no sabía por qué, pero estaba seguro que la única persona que lo empujaba a los cuerpos de agua en su viaje por Uno a, era la misma que tenía en la cara, literalmente, ya que casi se dan un beso Everest.
Si, como me conoces? – era extraño que un desconocido la conociera a ella, hasta que pudo observar mejor a quien tacleo, notando las zetas en las mejillas y el mismo cabello azabache rebelde, era… - Ash?
A pasado un tiempo, no lo crees? – no estaba seguro de si lo podía reconocer, habían pasado varios años desde que se vieron, y vaya que cambió.
Si antes pensaba que linda, ahora era hermosa, con ese cabello rubio con mechones a los lados, remarcando su cara redonda, llevando unas gafas circulares desarreglada por el accidente de hace poco, llevaba una camisa naranja debajo de una larga bata blanca, llevaba unos pantalones verdes ajustados y unas botas naranjas con suela de color negro.
Ash! – con entusiasmo lo abrazó en el cuello, durando unos segundos hasta que se separó un poco e hizo algo que ninguna de las otras chicas se hubiese esperado.
Le había plantado beso en la boca, sorprendiendo al mostaza y la pelirroja, saqueando a Pyra por el beso de adultos y emocionando a Sora por encontrar a un nuevo chichi; después de varios segundos se separaron para tomar aire, una mirada aturdida y otra feliz chocaron hasta que…
Que crees que haces con MI marido eh?! – gritó enojada Flannery con los brazos cruzados y un aura en llamas que solo daba señales de que se iba a poner fea la situación, se podía notar el enojo y los celos.
O, parece que los encontré – se unió otra voz a la conversación, salvándole el pellejo al mostaza de ser molido brutalmente, siendo esta nadie más que Delia quien presenció todo – será mejor ir a casa y que se cambien, no querrán atrapar un escalofrío, verdad?
*Regreso a casa*
El regreso al hogar de los Ketchum fue algo tensa, luego de que Ash y Bianca se cambiaron por separado, fueron q la sala dónde se podía ver a una no muy feliz Flannery y a una nerviosa Bianca.
Chicas no tienen algo que decirse? – les preguntó Delia a las mayores para que puedan dejar de verse como dieran Sevipers y Zangoose.
Suspiro* perdón por actuar así, es difícil ver a tu futuro marido ser besado por otra mujer – se disculpó Flannery mientras se rascaba su brazo derecho con vergüenza.
Está bien, yo también me quiero disculpa, fue un impulso que no pude evitar – esta vez fue la oportunidad de Bianca en disculparse por su arrebato de hace pocos minutos.
… y? – por alguna razón para la extrañeza del mostaza, su madre agregó algo más, como si faltara algo, y lo que escucho después fue más extraño.
Que la luz guíe tu camino – fue dicho la pelirroja mayor a la pelirrubia al momento de alzar la mano.
Mientras sigues consiguiendo nuevas experiencias en tu viaje – respondió Bianca a Flannery al mismo tiempo que estrechaba la mano.
Con solo esas dos frases el ambiente antes tenso se opacó por completo, cambiado por uno más ameno, extrañando aún más al mostaza.
Y dime querida, que te trae a Pueblo Paleta? – preguntó curiosa la peli castañas la chica de la boina.
O cierto, casi lo olvido – se rascó la parte trasera de su cabeza con nerviosismo al momento de casi olvidar su propósito, sacándole unas gotas de sudor a las persona que estuvieron con Sora casi todo el día – Vine a casarme con Ash si es posible.
Eh?
Haha, entonces él es chichi? – Sora no podía salir de su asombro, todo el día la pasó con su padre y ni siquiera se dio cuenta, aunque claro su madre no le dijo nada del cómo era.
Perdón hija, pero quería que fuera una sorpresa, así que… sorpresa – se disculpó Bianca con las mejillas rojas haciendo un ligero movimiento de jazz con las manos.
Esperen eso significa que?...
Ash, tú no tuviste solo a una hija, tuviste más – le aseguró su madre con una mano tapando su boca para que no la vieran riéndose de su hijo.
Solo se pudo escuchar un ruido sordo y algo de movimiento en la casa Ketchum, fue doloroso escucharlo pero meh, situaciones de la vida.
Han llegado unas nuevas integrantes a la familia , las cuales dieron la idea de que no son solo ellas las únicas que tuvieron un romance con el azabache, pobre, lo van a dejar más muerto que vivo, pero nosotros disfrutamos de las situaciones hilarantes de nuestro condimento favorito que deberá vivir para ser feliz con las personas que ama y amará.
Hola a todos, espero y hayan disfrutado de este capítulo, vimos la llegada de otra hija y la revelación de que muy posiblemente tenga más hijas, y eso es cierto.
Pronto traeré la actualización para ver cómo nuestro azabache vivirá locas aventuras con sus futuras esposas e hijas.
Un dato curioso que nadie va a leer es que a Sora la pensaba poner la personalidad de cierta Kaichou demoníaca, pero después de reflexionar con la almohada, decidí hacerla más reservada, como a Sacarosa de G.I.
1)Madre – 2) Padre – 3) Dolor
Me disculpo por la ortografía y nos leeremos pronto.
Hasta otra ocasión.
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