HISTORIA DE MUNDO ALTERNO, LOS PERSONAJES DE RANMA 1/2 NO ME PERTENECEN, SINO A RUMIKO TAKAHASHI
¡Holaaaaa!
Acá les traigo una limonadita calientita en forma de ONE SHOT, para mi participación en la página de Facebook Fanfics y Fanarts de Ranma Latino para la dinámica #Sextember4
Por cierto, gracias por la invitación =D
- Los personajes hablan: aaaa
Pdta: Disculpen cualquier error que se me haya podido escapar…
Sin más disfruten
o
o
o
"Una aventura es más divertida si huele a peligro…"
o
o
o
Si me viera alguien en estos momentos, pensaría que soy de lo peor, ya que realmente esta es una situación que bien podría ser catalogada como obscena.
No bromeo.
En realidad, sería catalogada como muchas cosas, pero todas negativas, sin duda alguna.
Bueno, yo misma me sorprendo, pues después de todo vengo de una familia muy… conservadora…, la cual si me viera en estas circunstancias o supiera algo al respecto… me trataría de inmoral, de cualquiera, definitivamente sería un horror para ellos.
Aunque bueno, no es la primera vez que lo hago.
De hecho, algo en mí despertó desde hace aproximadamente un año atrás y bueno, comencé a dejarme llevar, a hacerlo y ahora sin poder contenerme.
Es algo de lo que casi nadie sabe, ya que como bien lo dije… no es algo realmente… adecuado… y más aún para alguien como yo y en mi situación… , sino que es hasta algo… desvergonzado, inmoral y todos los calificativos negativos existentes que pudiese existir probablemente.
Suspiro sonoramente, llamando la atención de mi acompañante al parecer.
Estoy en mis pensamientos, cuando salgo de ellos y sin poder evitarlo gimo conteniéndome un poco al sentir como mi acompañante me muerde el hombro y ha aumentado el ritmo de sus embestidas, aferrándose fuertemente a mis caderas, mientras yo me apoyo contra la pared de este callejón en plena calle y madrugada. Mientras tanto desvergonzadamente aprovecha el mismo en pellizcar mis pezones ya erguidos.
Gimo un poco más, cada vez pudiéndome contener menos.
Sí, me he vuelto una desvergonzada y hasta según leí, estoy a un paso de ser una… casi, casi una ninfómana.
Si, cualquiera se horrorizaría, definitivamente.
Gimo más fuerte, pero conteniéndome aún al menos un poco, pues seguro que alguien más me ha podido escuchar, pero felizmente no ha sido así ya que no veo a nadie, o bueno eso creo, ya que sería demasiado si alguien me viera en esta situación poco decorosa.
Poco decorosa es poco sinceramente.
Bueno, en definitiva, cualquiera que me mire, diría que soy de lo peor…
Hace tan solo unas horas atrás estuve bailando alegremente con unas amistades, con un vestido ceñido hasta los muslos de color escarlata de una manga, el cual ahora está remangado tanto de arriba como de abajo. Felizmente no me puse brasier, aunque si una tanga del mismo color que mi vestido, la cual ahora está removida para dejar al intruso ingresar y que ahora me está haciendo gozar.
- ¡Ah! ¡Más! ¡Más! ¡Sigue! ¡Ah! – gimo un poco más sintiendo como estoy por llegar a la cima.
- Como quieras guapa… - me responde mi acompañante y sus estocadas son más duras y certeras, lo cual agradezco enormemente.
Yo lo ayudo meciéndome con él.
Mi acompañante según puedo apreciar tiene los pantalones en sus tobillos junto con su ropa interior.
Siento como me lame el lóbulo de mi oreja derecha, lo cual hace que sienta mucho más placer.
Cabe decir que mis acompañantes ya se marcharon a quien sabe dónde y con quien.
Ahora el intruso, voltea mi cabeza para besarnos ansiosamente hasta que siento como mis paredes se contraen sobre su intruso amigo, sintiendo incluso como él explota dentro de mí.
Se siente extremadamente bien.
Al instante de finalizar, me muerde el labio algo fuerte pero que se siente bien, sale de mí, me ayuda a arreglarme mientras se viste y se va, dejándome con mil sensaciones, aún.
Me quedo envuelta en una placentera y erótica sensación. Creo que luego podría continuar aunque sea yo sola o quien sabe.
Me muerdo el labio sola coquetamente.
Debo ir a casa a tomar un relajante baño para luego ir a dormir… con él, pienso mientras voy a tomar un taxi.
.
.
Llegó a mi casa, ingreso al baño, tomó una ducha e inmediatamente me visto con mi pijama. El baño ayudó a que se me pasaran las ganas de más cosas. Este acompañante me dejó con ganas de más.
Al ingresar a mi habitación, lo veo dormido a él, el cual seguramente debió haber tenido un día muy pesado.
Suspiro mirándolo dormir, pues está en mi dirección su rostro apacible.
Ingreso a la cama, y casi inmediatamente siento que me abraza.
Me siento mal por él, creo que debemos hablar lo más pronto posible, ya que no es justo para él.
Lo siento roncar, pues definitivamente no lo es para él.
Cierro los ojos.
.
.
Ya es un nuevo día, debo decir que mi vida es casi monótona, lo cual creo que es en parte lo que me llevó a hacer esas cosas completamente descaradas, aunque son cosas que realmente disfruto, aunque no sean justas para todos.
En serio, debemos hablar lo más pronto y seriamente posible, aunque seguramente será muy incómodo, sobre todo para él…
Suspiro resignada, ya que es algo que tarde o temprano debe de hacerse.
Lo veo a él y estoy pensando en hablarle, al menos adelantarle algo, cuando solo me mira, me sonríe y se despide de mí con un beso en los labios, debido a que mirando la hora, me doy cuenta de que se le hace tarde.
Suspiro, esto tendrá que esperar, aún.
Definitivamente, soy una mala persona.
Alisto las demás cosas que tengo que alistar, me despido de quien tengo que despedirme y regreso a mi aburrida y monótona vida de todos los días.
Suspiro resignada, de nuevo.
A esperar a más tarde.
Como diría Fiona… de día soy una y de noche otra… aunque claro en otras circunstancias, pues las suyas no son iguales a las mías.
El teletrabajo está algo fofo últimamente, creo que debo cambiar de empleo. Creo que debo de cambiar más de una cosa en realidad, ya que no me siento feliz y no hago feliz a quien me importa, sino todo lo contrario.
Hoy según tengo planeado, volveré a salir y espero tener suerte.
Sonrió coquetamente.
.
.
Estando con un crop top plateado con la espalda desnuda y un pantalón de cuerina negro, estoy mirando el panorama, hasta que veo llegar al bar a alguien que me interesa, ya que está extremadamente apetecible.
Uff
¡Qué espécimen!
Es muy guapo.
Creo que me estoy comenzando a sentir húmeda de ahí abajo.
Al mirarlo, no sé pero siento que nuestras miradas se conectan, pese a haber muchas personas en el lugar y más aun sabiendo que no soy la única que lo veo así o me mira de la misma forma, lividinosa.
Me hago la loca como que no he visto a nadie, pues después de todo… los hombres son muy… creídos y algunos con los egos hasta las nubes… así que continuo con mi bebida, haciéndome la loca nuevamente.
De pronto, noto la presencia de alguien a mi costado.
Sorprendida de pronto, siento una mano en mi espalda baja, la cual se encuentra desnuda.
Estoy por decir algo, ya que es un atrevido, aunque después de todo he venido para buscar acción, no quita que sea atrevido, ya que su mano traviesamente baja bordeando mi trasero.
Su mano es grande y está caliente.
Eso hace que me sienta excitada, pero todo a su momento siempre me digo.
- Hola preciosa… te vi al llegar y bueno… pensé que quizá tú y yo… podemos pasarlo muy bien… - me dice con su voz grave en mi oído.
Lo cual hace que la piel se me ponga de gallina, ya que me gusta ese timbre de voz en los hombres, además que sea directo, me agrada y le suma más puntos.
Siento que me mojo más aún.
Así que sin poder esperar ni cuestionar mucho… le respondo.
- Claro guapo… - Contesto extasiada, pues ya solo quiero ir al plato fuerte… - ¿Aquí o sugieres algún lugar? - le pregunto ansiosa.
- Estaba pensando en mi departamento… - me dice seductoramente.
- ¿Así que en tu departamento? Pensé que quizá me dirías que eras casado… - le digo aunque inocentemente ya que un hombre así, seguramente podría serlo.
- Pues si y no… ¿Vamos? - me pregunta ansioso, lo cual me agrada, ya que estoy comenzando a ver a su amigo queriéndose hacer presente, pese a la oscuridad relativa del lugar.
- Preguntaría, pero no soy quien para hacerlo pues mi situación es extraña…- le digo la verdad, aunque luego podríamos hablar, ya que ahora solo quiero acción.
- No hay problema… vamos – me responde seductoramente y que yo escucho ansiosa pues me muero por saber muchas cosas de él.
Nos levantamos ahí agarrados de las manos y tomamos un taxi.
Sin contenernos, en el taxi comenzamos con algunas caricias, bueno yo especialmente ya que no aguanto.
Al llegar, felizmente el departamento queda en segundo piso, me quedo sorprendida por la zona y el departamento en sí.
Todo es muy bonito, me gusta el gusto de este individuo, así como todo él que ya quiero sacarlo del empaque.
Después de observarlo, siento como una mano traviesa comienza a desatarme el crop top hasta dejarme desnuda de la parte superior, para darle atención a mis senos.
Sonrió tirándome para atrás para darle más acceso, mientras suelto pequeños gemidos y tiemblo de anticipación.
De pronto comienza a desabrocharme mis pantalones hasta dejarme en mi diminuta lencería inferior de encaje negro. Siento esto lo único que llevo puesto ahora.
Comienzo a ayudarlo a él a desnudarse, hasta dejarlo como Kami lo trajo al mundo.
De pronto, me trepo sobre él como un koala, hace a un lado mi lencería e ingresa en mí. Gimo de sorpresa, pues quería ver a mi intruso previamente y quizá devorarlo previamente a la penetración.
Todo eso queda en el olvido, cuando comienzo a saltar sobre él como puedo y el me sostiene fuertemente.
De pronto se sienta en lo que parece ser un sofá y me ayuda a seguir saltando sobre él, pues me estoy comenzando a agotar.
De pronto, me voltea y terminamos recostados sobre el sofá, él se coloca sobre mí e ingresa nuevamente, gimo más fuerte, mientras él me enviste a veces suave y otras más duro.
Casi al poco tiempo llegamos misteriosamente a la paz al clímax.
Nos besamos y al poco tiempo le toma en brazos y nos dirigimos a la que parece ser su habitación.
Ingresamos y comienza a devorarme literalmente a besos, algo curioso, pues hace unos momentos estábamos en modo rudo, aunque bueno, siempre es bueno intercalar en el lado íntimo.
Aprovecho en hacerle sexo oral. Este acompañante se entrega totalmente, lo cual me agrada. Incluso más allá noto esposas y cadenas, lo cual me trae ideas locas a la cabeza, quizá algo de esto pueda usar, espero no se moleste.
Estoy casi segura de que no descansaremos, lo cual me agrada mucho.
.
.
Siendo de madrugada, me levanto y comienzo a vestirme. Escucho como mi acompañante balbucea cosas inteligibles, pero eso no es impedimento de irme de aquí hacia mi casa.
No sé por qué, pero me acerco a sus pantalones a buscar algo, lo hago y en su bolsillo derecho, encuentro lo que parece ser un aro de matrimonio, sorprendida e indignidad, me voy rápidamente del lugar.
.
.
Han pasado tres días desde mi último día de aventuras divertidas a escondidas.
Hoy estoy tranquila, aunque relativamente, pues tengo un retraso, retraso que me está angustiando, pues después de tantas Aventuras divertidas más aún si huelen a peligro…, esto es malo, muy malo.
¡Hoy debo de hablar con él!
.
.
Son las 11 de la noche y ya no habiendo moros en la costa, llega él.
¡Por fin llega el rey de Roma!
- Hola… - le digo tratando de aparentar tranquilidad, aunque es lo que menos siento en estos momentos.
- Hola Akane… ¿Está todo bien? Pocas veces sueles esperarme… - me dice el recién llegado algo sorprendido.
Se acerca a mí dándome un beso en los labios. Se siente tan… incómodo esto.
- Ranma… quiero hablar contigo y muy seriamente… - le digo.
- Akane me estas asustando… - me dice angustiando ahora - ¿Estás bien? ¿Qué sucede Akane?
- Esto no está funcionando Ranma… esto debe de terminar… - suelto de pronto dejándolo al parecer muy sorprendido.
No me dice nada, pero su expresión es todo.
- Akane me estas asustando… en serio… ¿Estas jugando conmigo? – dice perplejo.
- Ranma… hablo en serio… muy en serio… te estoy haciendo daño… nos estamos haciendo daño… - le digo.
Hay silencio.
Un horrible silencio.
Bueno después de todo… no pienso que sea algo agradable de oír o conversar algo así y menos con él.
Seguimos en silencio hasta que lo rompe…
- ¿Qué? Acaso… ¿Acaso estas terminando conmigo… Akane? ¿No te soy suficiente? No entiendo… pensé que nosotros… - dice dolido.
Me quedo un momento muda, pues no pensé que podría reaccionar así, aunque después de todo… no es para menos después de todo.
Yo misma reaccionaría así.
Suspiro dándome valor.
- Ranma… estas mal entendiendo las cosas… pero hablo en serio… - le digo de pronto de nuevo.
- ¿Yo? Pero si tú… Akane… estás echando por la borda 10 años de matrimonio… a nuestra familia… sé que no somos la familia perfecta… que mi trabajo me consume, pese a ello… siempre he tratado de ser un buen esposo para ti… ¿Hay alguien más? Dímelo… - me dice triste y al parecer hasta molesto.
- Lo sé… lo sé… y yo amo a mi familia… y ¿Qué? - le respondo.
- ¿Pero? Sinceramente que no te entiendo… ¡No te endiento Akane! - dice desencajado queriendo levantar la voz, pues no podemos gritar, nos podrían escuchar.
- Ranma… nos estamos haciendo daño… debemos de parar… - le digo de nuevo, aunque no me gusta su expresión.
- No te entiendo Akane… dices que nos amas, pero dices que nos estamos haciendo daño… solo me hace pensar que quieres que nos separemos y posteriormente, divorciemos… ¡No lo permitiré! – dice contrariado y molesto.
Lo conozco.
- ¡No! – digo rápidamente. – No, Ranma… jamás querría divorciarme de ti… yo solo… solo pienso que debemos de parar con lo que estamos haciendo… ¡Estas mal! ¡No estas entendiéndome! - le digo más claramente.
- ¿Te refieres a esto que hacemos? – me dice entendiendo.
¡Por fin!
- Sí… ¿Qué pensabas? Ay Ranma… pues no está bien… tú te desvives trabajando por nosotros… yo no he tenido buena racha en el trabajo… por estresarme y aburrirme, además de ponerme ansiosas, te he pedido cosas que van más allá de ti… y no es justo… no lo es para ti… por eso últimamente tienes más ojeras de lo normal… y por eso estás más cansado… ¡Estas agotado! ¡Por mi culpa! - le digo culpable.
- Ay amor… ¡Me asustaste de muerte! Pero si lo hago con gusto... además de que yo también lo disfruto mucho estando contigo, mi amor… es como si cada vez fuera una aventura… muy indecorosas y desvergonzadas por cierto, pero unas aventuras contigo donde el peligro le da diversión… me encanta esta versión de ti… toda desinhibida… y en circunstancias poco decorosas… - me dice abrazándome, algo que no sé cuando se acercó a mí y dándome besos, además de morderme el lóbulo izquierdo de mi oreja.
- Ranma… pero alguien nos podría ver… son situaciones peligrosas… - le digo queditamente, para no despertar a los niños.
Sí, tenemos dos niños, uno de 8 años y otra de 5 años de edad.
Sus nombres son Kenta y Ranko. Son nuestros dos retoños, los cuales en ocasiones terminan en casa de sus abuelos por las cositas que hacemos Ranma y yo.
- No me importa… no hacíamos nada malo, después de todo somos esposos… - dice asertivamente.
- Pero Ranma… eso no quita que seamos poco pudorosos e indecorosos… - le digo con remordimiento de conciencia que aunque fue mi idea eso de crear situaciones como si fuéramos desconocidos y posteriormente tener encuentros en lugares poco comunes o inapropiados.
Realmente todo este tiempo ha sido muy… excitante y emocionante.
- Ay Akane… me encanta las situaciones que hemos pasado y en ninguna de ellas nos han descubierto… además… lo pasamos muy bien… y con eso que te gusta el sexo… me vuelves loco…- dice pegándome más a él.
- Es verdad… todo hasta ahora ha salido bien… y Ranma… ¿Ese departamento del otro día? Y no lo digas de esa manera… shhhh… te podrían escuchar… – le pregunto, pues es verdad, me sorprendió con eso.
- A pues… lo compré y quería darte una sorpresa… ese será nuestro lugar de vez en cuando… pues aunque vivimos en el Dojo, casi no tenemos privacidad… y me encantan tus momentos de timidez también… - dice pensativo, resignado y juguetón a la vez.
- Es verdad… antes era la familia… entre nuestros padres y mis hermanas… y ahora son ellos, pero también nuestros hijos… gracias… gracias Ranma por seguir mis locas ideas… y por ahora este departamento… te amo… - le digo resignada y enamorada al mismo tiempo.
- No es nada… como ya sabes ambos somos fuego juntos… y quiero que nos quememos juntos… te amo más Akane… - me dice ronroneándome sobre mis labios… encima ya lo noto muy emocionado ahí abajo.
Pero antes… hay algo que debo decirle.
- Ranma… - lo llamo.
- ¿Uhmm? – dice a punto de besarme los labios, pues está sobre mi cuello.
- Tengo un retraso… - deja de besarme para mirarme fijamente.
- ¿Es lo que creo que es? – pregunta…
¿Emocionado?
- Pues… no estoy segura… pero Ranma… quería establecerme primero… tanto estrés… pensé que eso ayudaba a no poder embarazarme… - digo haciendo puchero, pues eso esperaba.
- Te establecerás mi amor… a veces son solo momentos en donde solo pasan las cosas y si es cierto lo que me dices… será con esta bendición… - me dice seguro mirándome el vientre.
Cómo amo a este hombre.
- Pero no estoy segura Ranma… - le digo, pues es la verdad.
- No importa… haremos que sea seguro entonces… – y sonriente me carga en brazos en dirección a nuestra habitación de manera casi silenciosa por los niños.
Estando en nuestra habitación, nos desnudamos mutuamente y mirándonos a los ojos nos decimos…
- Te amo… - al unisonó, para luego entregarnos al gran amor que nos tenemos, asegurarnos de la venida de nuestro tercer hijo y de manera silenciosa volvernos unos, pues de lo contrario nuestros hijos se despertaran y ahora no es conveniente para nuestra entrega en esta aventura que es más divertida si huele a peligro.
Algo que confirmo, pues mientras que Ranma está en sus embestidas, me doy cuenta de que no cerró la puerta de nuestra habitación, sino que la dejó empujada el muy olvidadizo.
Sonrío coqueta, escapándoseme de vez en cuando suspiros y gemidos… espero que nadie nos moleste.
.
FIN…
.
Unos días después….
- Por cierto amor… - digo levantándome de la cama - No te quites el anillo de bodas… pues eso me cae mal…
- ¿Mira quién lo dice? La que no lo usa hace mucho tiempo… - me responde a la defensiva, pero en modo jocoso.
- ¿Cómo que no lo uso? Pues si lo uso, pero en una cadenita en mi cuello… - respondo.
- Uhmm… pero no se te ve en el dedo y muchos hombres seguro piensan que eres soltera… cuando no lo eres señora Saotome… - es tan celoso mi esposito.
- Ay señor Saotome que celoso… pero lo mismo te digo… porque esa vez que encontré tu aro de bodas en tu bolsillo me sorprendió y molestó… - le digo.
- Está bien amor… Akane prometo ya no quitármelo… aunque las situaciones aparenten que somos solteros… - dice bromeando y prometiendo.
- Esta bien te voy a creer amor… - le digo bromeando en parte, pero si le creo.
- Ahora ven aquí… - me dice sujetándome por la cintura para colocarme sobre nuestra cama de nuestro departamento, ya que me levanté desnuda a sermonearlo, o casi, después de darnos una escapada…
Después de todo… tía Nodoka, la madre de Ranma nos descubrió, así que apoyando moción del nuevo heredero… nos ayuda con esto… ya que según dice… con nuestras aventuras que huelen a peligro… nuestros hijos pueden ver cosas que no son aptas para menores de edad…
Sonreímos mirándonos a los ojos, para luego darle rienda suelta a nuestros bajos instintos, los cuales nos ayudan y fortalecen como pareja.
Insisto… como amo a este hombre… a este espécimen tan guapo y hermoso por dentro y por fuera que para mi fortuna es mi amado esposo, aunque algo… egocéntrico, pero que me poya en mis locuras…
Ahora si…
.
FIN
.
.
.
.
¡Tercer año que participo en esta divertida dinámica del #Sextember!
El primer año no participé, pues recién me animé a escribir en noviembre de ese mismo año y la dinámica fue en septiembre xD, pero ahora siempre participo xD
Gracias por la invitación Facebook Fanfics y Fanarts de Ranma Latino para la dinámica #Sextember4 =D
¿Qué tal esta limonita caliente con algo de misterio y suspenso?
Me gusta variar en los géneros como se habrán podido dar cuenta xD
Espero les haya gustado =D y también espero ansiosa sus reviews, pues me encanta leerlos a ustedes =D
Nos seguimos leyendo en mi fic que está en actualizaciones "APARIENCIAS" el cual ya va en su cap 11.
Abrazos de Oso!
Saludos desde Perú!
=)