11. Capítulo 11. Deseos y nuevos horizontes.
Al día siguiente, los osos saludan a los demás y con entusiasmo, Pardo pregunta, "¿Qué se va a hacer hoy?"
Los demás, organizándose para iniciar el día, contestan: "Vamos a practicar las presentaciones y luego el modelaje".
Con esas instrucciones, todos se sumergen en el entrenamiento. Durante las presentaciones, Pardo, con un brillo anhelante en sus ojos, murmura para sí mismo, "Desearía tener más protagonismo en esto..." pero rápidamente se sacude ese pensamiento.
Polar, observando los ágiles movimientos de Vinnie, suspira en silencio. "Ojalá pudiera bailar así junto a él" piensa.
Mientras tanto, Panda, cada vez que ve a Penny Ling moverse con gracia y elegancia, siente un tirón en el corazón. "Sería un sueño bailar junto a ella", murmura, casi imperceptiblemente.
Los tres osos, a pesar de sus esfuerzos en las presentaciones, sienten un vacío en sus corazones, deseando poder hacer lo que realmente quieren.
Durante un break, Polar se acerca sigilosamente a Panda, y con un gesto sutil señala a Vinnie. Panda, mirándolo comprensivamente, susurra: "Yo también quisiera bailar pero algo de gimnasia rítmica".
Mientras comparten sus anhelos, Pardo se acerca, y con una mirada inquisitiva pregunta, "¿Ustedes también sienten que quieren hacer algo más en la presentación?"
Polar y Panda, mirándose entre ellos, asienten simultáneamente.
Con una expresión decidida, Pardo propone, "Quizás deberíamos hablar con Blythe y ver si podemos ajustar un poco el programa. Yo... realmente desearía actuar como presentador y participar más activamente en las actividades".
Panda, con esperanza en su voz, agrega, "Y yo deseo bailar algo de gimnasia rítmica. Polar también quiere bailar, pero algo original y rápido con Vinnie".
Pardo, tomando una respiración profunda, concluye: "De acuerdo, hablaremos con Blythe cuando regrese de la escuela. Espero que podamos hacer esos cambios".
Enseguida, al llegar de la escuela, Blythe, con una sonrisa en su rostro, saluda, "¡Hola a todos!" y procede a darles de comer a las mascotas. Mientras se acomodan para disfrutar de su comida, Blythe, con entusiasmo en su voz, dice: "¡Tengo grandes noticias! Ya logré terminar los diseños para los trajes de los osos, me tomó menos tiempo de lo esperado".
Pardo, con los ojos brillando de emoción, pregunta: "¿En serio? ¿Podemos verlos?"
Blythe saca los diseños y se los muestra. Los osos los miran con asombro. "¡Son increíbles!" exclama Panda.
La joven diseñadora, alentándolos, sugiere, "Prueben los trajes y vean cómo se sienten con ellos puestos."
Una vez que los osos se prueban los trajes, Panda murmura, admirado, "Esto se siente y luce increíble. Gracias, Blythe".
Blythe, con una sonrisa en su rostro, responde: "De nada, chicos. Es un placer verlos tan felices".
Las demás mascotas, no pudiendo contener su entusiasmo, elogian a los osos. "¡Se ven fantásticos y muy adorables!" exclama Minka.
Los osos, un poco ruborizados, agradecen con humildad, "Gracias a todos".
Luego, Pardo se acerca a Blythe y, con un tono serio, le pregunta: "Blythe, ¿sería posible hacer algunos cambios en el plan de actividades que enviamos al encargado del evento? Queremos mantener lo que ya hemos practicado, pero agregar algunos detalles".
Panda, apoyando a Pardo, interviene: "Sí, hemos estado hablando de ello". Mientras tanto, Polar solo asiente en acuerdo.
Blythe, mirando a los osos con atención, dice: "No estoy segura, pero puedo preguntar. ¿Qué cambios tienen en mente?"
Pardo, tomando la iniciativa, explica: "Quiero actuar como presentador y agregar un segmento propio para interactuar con el público. Y Polar... bueno, él quiere hacer un baile rápido como el que hace Vinnie, y si es junto a él mejor".
Vinnie, al escuchar el deseo de Polar, pregunta con entusiasmo: "¿Te gustaría que bailáramos juntos?" Polar asiente con emoción.
Blythe, intrigada, luego dirige su atención hacia Panda, "¿Y tú, Panda? ¿Hay algo que quieras agregar?"
Panda, un poco tímido, responde: "Me gustaría probar un baile de gimnasia rítmica, pero..." deja la frase en el aire, evitando mencionar que desea hacerlo con Penny Ling.
Penny Ling, percibiendo la intención de Panda, interviene con dulzura: "Panda, si quieres, puedo enseñarte algunos movimientos".
Panda, nerviosamente y con una sonrisa tímida, le agradece: "Eso sería genial, gracias Penny Ling".
Luego, Blythe, asegurándose de tener todo en orden, dice: "Muy bien, osos. Me pondré en contacto con el encargado del evento y veremos si podemos realizar esos cambios. Los mantendré informados".
Después de la conversación, la joven se despide y se va. Los osos, emocionados con sus nuevos trajes, deciden modelar.
Pardo, con confianza pero buscando la aprobación de los demás, pregunta: "¿Qué les parece, chicos?"
Los demás, sin dudarlo, exclaman: "¡Lucen espléndidos!"
Los osos, nuevamente ruborizados, responden con gratitud: "Gracias a todos".
Con esa nota positiva, las mascotas proceden a hacer el modelaje con sus trajes, mostrando con orgullo sus elegantes diseños.
Y así continúan todos practicando hasta la noche, y al terminar todos vuelven a dormir.
En este capítulo, busqué resaltar la importancia de seguir nuestros propios deseos y pasiones, incluso cuando estamos inmersos en compromisos y responsabilidades. Cada oso, con sus deseos y anhelos personales, refleja una parte de todos nosotros, aquel deseo de expresar nuestra autenticidad en un mundo que a menudo nos pide que nos adaptemos a moldes predeterminados. Es un recordatorio de que siempre deberíamos buscar el momento y el espacio para ser nosotros mismos, incluso en medio de la rutina. Espero que cada lector pueda sentir una conexión con los osos y sus deseos, y se inspire para seguir sus propios sueños.