Un escritor sentando en una habitación oscura, con poca luz para ver y sosteniendo un fino lapiz el cual tiembla en su brazo. Mira a sus alrededores con una cara de terror, pero en cuanto escucha un ruido su expresión facial cambia drásticamente a enfado, rabia se sujeta con fuerza a la mesa y empieza a escribir lo que le sale de la mente, mientras los ruidos aumentan el escribe más y más rápido cuando de repente olle un susurro y cesa de escribir inmediatamente. "quien es la mano que pertuba mi paz " susurra esa voz y el con voz firme responde " es de aquel que ya no tiene miedo". Despues de un minuto de silencio sigue escribiendo pero esta vez mas lento y tranquilo, sus trazos parecen como el viento deslizante en el cielo. Nota que su sombra es algo rara, procede a quitar el brazo y ve que ese no era su mano la que escribia si no que era otra, una mano oscura que manipulaba su trazo, golpea con fuerza la pared y exclama " el camino lo marco yo" y en ese momento rompe la hoja y la casa entera tiembla las cuadros se agrietan y la voz susurrante grita sin control, el coje otra coja esta vez escribe con un trazo unico con delicadeza con sultura y los temblores disminuyen a medida que ese es estilo sacado del alma sale a la luz el hombre con una sonrisa finaliza su obra y se dispone a sacar un trozo arrugado de papel del cajon con una foto de su padre. fin