¡Hola! Si, ha sido otro mes. Iba a publicar ayer, pero entre la revisión y otros deberes me tarde, por lo cual lo traigo hoy.

Por ciento esto es IMPORTANTE: hay una palabra que dice "Ipso facto" No es una equivocación, de hecho la palabra se deriva del latín y es una expresión para decir "inmediatamente" o "en el acto" Tengan en cuenta esto para no perderse en la redacción. Sin más les dejo el capítulo.


CAPITULO EXCLUSIVO PARTE 1 — CRISIS —

Un suspiro escapó de mis labios y me giré, quedando de frente a la pared. Había estado rodando en mi cama desde hacía más de media hora y aún no sentía deseos de levantarme, aunque sabía que eventualmente tendría que hacerlo, después de todo tenía un turno que cubrir en el hospital. — ¡Sakura! ¡¿Estas despierta ya?! — Un gruñido salió desde el fondo de mi garganta y luego de suspirar por segunda vez esa mañana comencé a sentarme.

— ¡Si lo estoy Mamá! — Respondí mientras frotaba mi rostro, tratando de quitarme los restos de la pereza vigente.

— ¡¿Puedes bajar un momento?! — Volví a gruñir, algo irritada, pero al final tomando una respiración profunda salí del interior de mi cómoda cama y con pasos lentos fui hasta abajo, donde mis padres me esperaban.

— ¿Qué sucede? — Pregunté curiosa de verlos de pie en medio de la sala con un par de mochilas a sus pies. — ¿Tienen otra misión? ¿Tan pronto?

Los dos se miraron un momento, antes de mostrarme una expresión grave, cosa que me retiró cualquier rastro de sueño que me pudiera quedar y me hizo ponerme alerta a cualquier tipo de noticia — Sakura, siéntate un momento — Me invitó mi madre con suavidad mientras ellos mismos tomaban asiento en uno de los sillones, haciendo que mi preocupación aumentara. Sin decir palabra me ubique justo enfrente de ellos, manteniendo la vista en sus rostros y tratando de obtener alguna pista sobre lo que querían decirme, pero no se me ocurría mucho. — Hija, sabes que últimamente hemos estado saliendo varias veces por las misiones, no es ningún misterio que son más frecuentes de lo usual.

— Eso lo sé — Confirmé suavemente.

— Pues bien… todas y cada una de ellas han sido para un mismo propósito — Giré mi cabeza hacia un lado, confusa al no saber aún hacia donde iba todo aquello.

— Mencionaron algo así antes ¿Qué pasa con eso? — Mi madre suspiró ante mi pregunta y apartó la mirada, pero mi padre permaneció con toda atención sobre mí.

— Sakura, han pedido que nos traslademos de aldea — Respondió el hombre con seriedad.

Mis ojos se abrieron ante la sorpresa y tardé un momento en procesar las palabras, — ¿T-traslado? ¿De qué hablan? ¿Cómo que trasladarnos? Esperen yo… — Mi padre hizo un gesto para que guardara silencio, así que me detuve en mis palabras y esperé a que terminara de exponer todo el asunto.

— Sabemos que tienes una vida aquí Sakura, también sabemos que no podemos pedirte que dejes tus deberes; de hecho Hokage-sama dijo que te necesitaba aquí, por ello, solo seremos nosotros dos los que nos marchemos — Me recosté contra el respaldo de mi silla y cerré los ojos por algunos segundos, aun intentando asimilar sus palabras. Estaban diciendo que se iban a marchar, dejándome sola en la aldea ¿Era eso a lo que se referían? Realmente me desagradaba la idea, ya que a pesar de que me encontraba más tranquila con mi situación, eso no significaba que me emocionara pensar en quedarme sola tan joven, y menos en esos días en que tenía tantas cosas en que pensar. Sí, realmente quería oponerme a la idea de que se marcharan, pero al ver sus expresiones podía decir que se sentían tan afligidos como yo con la situación, y siendo de esta manera no podría siquiera pensar en reclamarles.

— ¿Así que se irán hoy? — Pregunté ahora volviendo a verlos.

— Sí, tenemos que partir en algunos minutos, pero queríamos despedirnos antes y decirte… bueno… — Mi madre se detuvo un momento es sus palabras para luego levantarse y arrodillarse frente a mí — Sabes que te amamos, sé que es probable que pienses que te estamos dejando, pero no es de este modo, la misión será solo por unos años, volveremos.

— Sé que no quieren dejarme sola — Dije suavemente para luego mirarlos a los dos — también sé que es duro para los dos dejarme, pero al ser ninja entiendo que es una misión importante — Traté de sonreír lo mejor que pude y añadí — Además dicen que volverán en unos años ¿Cierto? Eso quiere decir que no nos separaremos para siempre.

— Así es — Mi madre volvió a suspirar agachando la mirada — ¿Estarás bien sola?

— No puedo decir que me vaya a sentir muy feliz, pero estaré bien, soy capaz de cuidarme por mi misma, además… tengo a Shisui e Itachi-kun, no estaré tan sola — Escuché a mi padre soltar una suave risa que pronto se convirtió en una carcajada, la cual, a mi madre y a mí nos confundió.

— Dices que no vas a estar tan sola, pero creo que esos dos son suficiente, Shisui tendrá más que suficientes cosas que decir — Mi madre y yo sonreímos de acuerdo con sus palabras — Itachi por el contrario te mantendrá ocupada tratando de sacarle algún tipo de conversación, creo que habrán muchas cosas que te distraigan… — Su mirada se suavizó y pude ver con claridad cómo sus ojos se cristalizaban — Eres una chica muy fuerte… estarás bien.

— Papá — Murmuré con la voz entre cortada, siendo completamente consciente de que a los tres nos costaba despedirnos, pero tratábamos de buscar algunas excusas para ver el lado amable, — Ustedes dos procuren mantenerse a salvo y si pueden escríbanme.

— Por supuesto que lo haremos Sakura, cuando podamos, de igual manera espero que te mantengas en contacto, aunque será un poco difícil, pero apuesto a que Hokage-sama encontrará una manera para que lo logremos — Asentí ante las palabras de mis padres y traté de sonreír ampliamente.

— Bien. ¿Pueden esperarme un momento? Iré a cambiarme rápidamente, quiero acompañarlos hasta las puertas de la aldea — Ante mi petición ellos negaron al mismo tiempo haciendo con esto que yo colocara una mirada confusa.

— Partiremos rápidamente, estamos un poco cortos de tiempo; además sabemos que en un rato tienes que ir al hospital, así que es mejor que te prepares tranquilamente — Mi madre acarició mi rostro con suavidad antes de ponerse de pie, seguida de mi padre, quien de igual manera me abrió los brazos para que pudiera abrazarlo, así que sin hacerles esperar, me levante y les abracé a ambos, mientras contenía las lágrimas que querían salir.

— De acuerdo — Murmuré por lo bajo, sosteniéndolos a ambos entre mis brazos.

Pensar que no tendría esa calidez por los próximos años me hacía sentir algo insegura, pero al mismo tiempo sabía que era algo que podría enfrentar, solo tenía que mantenerme mirando hacia el frente. El abrazo duró menos de lo que desearía que durara, escasamente fue menos de un minuto, y luego de eso ambos me dedicaron una corta sonrisa antes de tomar sus mochilas y dirigirse hacia la puerta, donde me dieron una última mirada antes de marcharse, dejándome en medio del lugar, con la sensación de irrealidad y vacío que lentamente comenzaba a apoderarse de la casa.


— ¿Puedes repetir que le paso? — La voz nerviosa de una de las enfermeras llegó a mis oídos mientras fingía revisar uno de los tantos archivos de pacientes que me sabía de memoria, ya que realmente había estado pensando en los hechos de la mañana, pero al escuchar el tono de voz de mi subalterna no pude evitar desviar mi atención hacia la mujer, la cual mantenía su mirada gacha y mostraba todos los indicios de incomodidad, aspecto me llamó la atención, después de todo conocía a la mujer y no era fácil que perdiera la compostura, por ello traté de mirar con quien hablaba, pero al haber algunas personas en medio no alcanzaba a ver a quien se estaba refiriendo.

— Van tres veces, ya le dije que fue una pelea, el ninja implicado le apuñaló dos veces ¿Qué acaso no puede retener eso? — La voz que respondía era dura y despectiva, además de que sonaba impaciente — Él está en mal estado y a usted no parece importarle.

Dejé el archivo de lado y comencé a avanzar por el pasillo hacia donde se encontraba la enfermera — Ahí van otra vez, se creen los mejores pero en realidad solo saben intimidar —, Entre más avanzaba este y más comentarios similares comenzaron a escucharse entre los pacientes, enfermeras y algunos médicos, causando no solo mi curiosidad sino también mi molestia, aunque no precisamente en contra de las personas que eran objetivo de los murmullos. Cuando logré llegar a mí destino, quedé no solo sorprendida de ver, que dos enfermeros trataban de contener en la camilla a un hombre que se revolcaba por el dolor, mientras sus dos compañeros irritados estaban enfrentando a la enfermera, sino que mi mayor sorpresa fue ver que las tres personas que estaban allí eran miembros del clan Uchiha. A pesar de mi desconcierto por la situación y de los horribles comentarios, mi modo médico se había activado en cuanto había visto al Uchiha en la camilla, así que ignorando los problemas exteriores me acerqué rápidamente mientras sujetaba mi cabello en el proceso y luego, cuando estuve junto a los dos enfermeros me arrodillé al lado del paciente, donde en un movimiento, valiéndome de los reflejos y fuerza adquiridos con los años, logré sujetarlo por las muñecas y bajar sus brazos, quedando estos pegados a ambos costados de su cuerpo, — ¡Sosténganlo ahora! — Ordené mirando a los que iban a ser mis asistentes, los cuales al escuchar mi rotunda orden, no se lo pensaron demasiado para acatarla, así que con una correa inmovilizaron el torso del hombre, mientras yo me encargaba de sus piernas.

— Oye… ella no es… — La voz de uno de los Uchiha llegó a mis oídos, pero la ignoré mientras comenzaba a analizar todos los síntomas de mi paciente, iniciando por los más evidentes, los cuales eran las puñaladas anteriormente mencionadas, que se ubicaban en el la parte derecha del abdomen y el vientre; inicie midiendo la profundidad del corte, llegando estas ser algo profundas, pero no habían alcanzado a herir ningún punto vital, sin embargo las heridas ya presentaban síntomas de enrojecimiento, hinchazón excesivo, la temperatura alrededor del corte era anormal, no estaba coagulando, dejando que sus heridas siguieran sangrando, para finalizar observaciones de esta área, la evidente muestra de suciedad que rodeaba los cortes ,me daba un claro diagnóstico con los primeros síntomas. Dejando de enfocarme solamente en las heridas, me dirigí ahora a tomar nota del resto de su condición, iniciando por el pecho, coloqué mi oído justo en el centro de sus pectorales, para escuchar los latidos de su corazón, logrando con esto percibir con mayor facilidad que sus pulsaciones eran más rápidas de lo normal, esto significaba que presentaba taquicardia. Mi entrecejo se frunció, pero seguí con mi evaluación, ignorando que de repente todos a mi alrededor se habían quedado en silencio; mi vista viajo hacia sus labios, los cuales se encontraban resecos y que comenzaban a mostrar un tono azulado, luego fui hacia sus ojos y levanté uno de los dos parpados, de esta manera, y valiéndome de la pequeña linterna que siempre llevaba conmigo, revisé sus pupilas, las cuales presentaban una contracción anormal.

Chasqueé la lengua irritada, pero preparando todo el esquema mental para el tratamiento del paciente — Llévenlo a la A&E de inmediato, además de ello quiero que comiencen a preparar todo lo necesario para desinfectar la herida, necesitaremos usar antibióticos, debido a que presenta síntomas de infección, de igual modo quiero que comiencen la prueba de venenos, necesitamos determinar qué tipo usaron en él para aplicar el antídoto, también inicien una prueba para ver que tanto tarda su sangre en coagular. Preparen todo para cocer las heridas, necesitara lo necesitaremos mientras empleamos nuestro chakra en él — Los presentes se quedaron mirándome, como si les hubiera hablado en otro idioma, lo cual me molestó aún más y casi quiebra la poca paciencia que me quedaba — ¡¿Qué esperan?! ¡Muévanse, nuestro paciente no va a esperar! —. Como si les hubiera golpeado, los dos enfermeros, junto con la mujer que había estado recibiendo el caso, levantaron al hombre en una camilla y se lo llevaron corriendo por el pasillo, fue entonces que me erguí y miré a los dos Uchiha, los cuales ahora mantenían una expresión de sorpresa en sus rostros.

— Necesito que me den los detalles del incidente, todo en resumidas palabras, desde que armas usaron, hasta donde se recargo luego de ser herido, cualquier información que sea relevante en cuanto a su estado actual — No tenía mucho tiempo para escuchar, pero sabía que necesitaba esa información.

— Perseguimos a un par de renegados fuera de la aldea, al principio no fue nada del otro mundo, una pelea limpia, pero cuando pensamos que los teníamos acorralados, uno de ellos le atacó con dos cuchillas, no eran Kunai, eran más alargadas, de un solo filo, con dientes en el borde y terminaba en punta. Fue solo en un instante cuando le hirió, luego de eso le pateó en el lugar con la suela de su bota, haciendo que rodara por el suelo hasta estrellarse contra los árboles, aunque parece ser que no consiguió contusiones severas, sin embargo no paso mucho tiempo para que comenzara a quejarse de dolor, luego perdió la consciencia y bueno… de ahí nos apresuramos en traerlo aquí — Asentí conforme con la explicación.

— Pueden esperar aquí, yo iré a tratar a su compañero, luego les daré los detalles del diagnóstico general, ya que en el momento no puedo quedarme, es más importante tratarle ahora — Ellos no discutieron conmigo simplemente asintieron de acuerdo, lo cual fue mi señal para salir de allí e ir por el mismo camino que anteriormente habían tomado mis compañeros.


— Terminen de suturar la herida, déjenlo en observación y hagan pruebas regulares para ver el avance — Ordené luego de que hubiéramos conseguido neutralizar el veneno, desinfectar la herida, canalizar al paciente y sanar algunas contusiones que se habían pasado por alto en la evaluación preliminar.

— Sí sensei — Dijeron ellos para luego comenzar a hacer lo que les pedí.

Soltando un suspiro para descargar toda la tensión previa, salí del lugar y comencé mi camino hacia la sala de espera, donde seguramente encontraría a los dos compañeros de mi paciente. Ahora que la emergencia había parado podía darme algunos momentos para pensar con cuidado los hechos antes de atender al Uchiha, iniciando por el extraño comportamiento de la enfermera. En el tiempo que llevaba trabajando en el hospital nunca había visto que llegaran a ser tan deficientes con el servicio, de hecho era la primera vez que presenciaba algo así, pero… ¿A qué se debió aquello? Si repasaba con cuidado las expresiones y conductas que pude rescatar de ellos, además de los de alrededor, podía concluir que su reacción lo más probable es que se debiera a incomodidad ¿Pero por qué? Todos los comentarios apuntaban a los Uchiha, pero no lograba entender el motivo de ellos ¿Qué habían hecho aparte de molestarse porque su amigo no estaba recibiendo la atención que merecía? No creía que hubieran armado escándalo o yo lo habría notado al instante, además… el ambiente estaba tenso antes de que yo apareciera dentro de su campo de visión. — ¿Qué es lo que pasa con todos? — Murmuré ahora más irritada, debido a que el número de preguntas que tenía que responder, aumentaba considerablemente con cada día que pasaba, claro que por el momento me enfocaría en las que tenía al frente.

Con pasos lentos ingresé a la sala de espera, donde los dos Uchiha al verme, se levantaron de inmediato y se acercaron rápidamente, así que sonreí amablemente y cuando estuvieron junto a mí comencé a hablar. — Su amigo está estable por el momento, hemos extraído la mayor parte del veneno y le hemos dado un antídoto para contrarrestar lo que quede, de igual modo nos aseguramos de desinfectar la herida y darle un antibiótico en caso de que pudiera empeorar, sus heridas se han suturado para que comiencen a sanar por sí mismas, pero una vez recupere la consciencia le daremos tratamiento para acelerar el proceso, por el momento lo mantendremos en observación hasta que considere conveniente, pero una vez confirme que todos sus signos estén normales le daré el alta y las recomendaciones sobre los cuidados que ha de tener por las próximas semanas —, Sus semblantes se relajaron y el que parecía ser el capitán del escuadrón suspiró aliviado.

— Muchas gracias, nos preocupaba de que no lo lograra a tiempo. — La mirada del hombre me decía que quería decir algo más pero estaba indeciso, así que para animarlo a hablar, yo me adelanté en iniciar la segunda mitad de la conversación. — ¿Hay algo más que quieras saber? Veo que desea decirme algo, si puedo ayudar en otra cosa solo tiene que hablar — Traté de que mi expresión fuera aún más suave para que estuviera más cómodo.

— En realidad son dos cosas, lamento si sueno impertinente con lo siguiente, después de todo acabas de ayudarnos, quiero aclarar antes que no estoy siendo prejuicioso, simplemente tengo curiosidad. — Parecía tan serio al respecto que no pude evitar sentir un poco de presión, pero mantuve mi sonrisa y expresión en su lugar.

— Esta bien puedes decir lo que necesites con confianza — Le animé.

— Bien, según recuerdo le he visto algunas veces dentro de los terrenos del clan, aunque realmente no se su nombre, tampoco su edad, ni cargo, así que quiero preguntar eso mismo — No me sorprendió mucho que no me conociera, la verdad hablaba con varios Uchiha, pero como era natural no era con todos, y por la naturaleza reservada y orgullosa dentro del clan, los temas que se pasaban entre ellos solo eran de vital importancia, algo que fuese general o afectara a todos a su alrededor. Yo siendo solo amiga de Itachi y Shisui no resaltaba demasiado, incluso si se tratara de dos ninjas tan extraordinarios como ellos, la vida a su alrededor no era importante, y esto era porque podía ser todo interpretado como meras banalidades, debido al alto índice de atención que recaía sobre ambos chicos, en otras palabras yo podía ser interpretada por ellos como una fan más, una que tenía la capacidad de estar tan cerca, pero que no era de importancia más allá de una simple mirada.

— Mi nombre es Haruno Sakura, tengo 12 años y soy Jonin especial, aparte de ninja médico, actualmente dentro del hospital soy uno de los soportes cuando el médico de cabecera no está — Los ojos de ambos Shinobi se abrieron con algo de sorpresa, una que se desvaneció tan rápido como apareció.

— Eres muy joven — Mencionó el de atrás con algo de escepticismo, uno que me hizo reír suavemente.

— Gracias por el cumplido — Me detuve un momento y procuré observar directamente a los ojos al hombre — Creo que ustedes saben bien que la edad no es un indicé para marcar la capacidad de un ninja, después de todo cuentan con un prodigio propio dentro de su clan.

Ambos hombres se mostraron incómodos por un momento, pero luego de unos segundos el capitán retiró esa expresión para ahora mirarme con lo que identifiqué era respeto, un gesto que me hizo sobresaltar internamente — Si no hubieras aparecido probablemente Yamatari no estaría con vida, por eso te doy las gracias — él se inclinó y yo me sonrojé nerviosa.

— E-está bien, no tienes que agradecerme, después de todo somos miembros de la misma aldea, somos compañeros, así que si puedo ayudar en algo, salvar a un camarada lo haré, no tienes que ir tan lejos — Había colocado mis manos al frente en una reacción clara que demostraba mi nerviosismo, pero este se desvaneció cuando noté lo lúgubres que fueron sus miradas, incluso si duró solo un instante, hizo que mi instinto de auto conservación se levantara y me pusiera a detallar mejor sus reacciones, sus pequeñas manías corporales que me darían una pista del porque esa falta de brillo en sus ojos.

— Es bueno escucharlo — Le escuché decir nuevamente al capitán — Realmente nos alegra que nos considere de esa manera Haruno-san.

— Es lo normal, ustedes nos cubren las espaldas siempre, protegiéndonos de quienes dentro de los nuestros quieren dañarnos — Lentamente y midiendo mis palabras fui abriéndome paso en las sospechas que comenzaron a aparecer — Si puedo hacer algo para ayudarles lo haré, así que pueden venir a buscarme si resultan heridos de nuevo, aunque espero que ese no sea el caso.

Cuando dije aquello pude ver que aquel tono hostil no iba para mí, de hecho había algo más aterrador tras él, algo que me heló la sangre en un instante y me trajo a mi mente los momentos angustiantes que viví cuando tratamos de traer a Sasuke de regreso. Las emociones fueron abrumadoras y pronto me sentí dando vueltas sin fin en un torbellino de inseguridades, donde por algún motivo pensé en el pasado, uno en el cual Itachi y Shisui no estaban, tampoco todos los Uchiha y el único que quedaba se había perdido en un mar de locura sin retorno aparente; todo esto fue provocado por la simple sonrisa que el hombre me había dedicado justo antes de decir — Me alegro de oírlo Haruno-san, en ese caso le pido que por favor la próxima vez nos ayude. — Nuevamente se habían inclinado, provocando que un sudor frio me recorriera y se me hiciera un poco difícil respirar, pero por estas mismas emociones, me obligué a reaccionar, pensando con presteza mi siguiente movimiento.

— Hablaré con Hokage-sama y el hospital para que me remitan a los Uchiha heridos, será todo un gusto poder ayudarles si se presenta cualquier eventualidad — Sonreí lo mejor que pude y luché contra el deseo de huir de allí y buscar respuestas.

— Eso es reconfortante escucharlo, en ese caso se lo agradecemos — Ahí iban de nuevo, la mirada oculta tras sus orbes oscuros.

— Bueno, me gustaría seguir hablando pero tengo papeleo por terminar, pueden visitar a su amigo mañana en la mañana, así que por el momento les recomiendo ir a descansar, ha sido un día estresante para ustedes y sus cuerpos necesitan reposo — Los dos hombres esta vez parecieron relajarse haciendo desaparecer parcialmente la presión del ambiente, pero para mí ya era imposible no estar alerta.

— Muy bien, le agradecemos por todo — Sus palabras aunque eran sinceras me producían un vacío en el estómago, recordándome que había algo que tenía que averiguar.

Los Uchiha se fueron y yo con pasos lentos regresé hacia la recepción, dispuesta a hacer un par de preguntas a los involucrados en todo el problema, pero antes de llegar, la enfermera me interceptó. — Sakura-chan — Frunciendo levemente el entrecejo me giré hacia ella y detuve mi caminar — Que bien, lograste deshacerte de ellos —. Sus palabras me sorprendieron tanto como molestaron ¿Realmente esa mujer pensaba en el bienestar de ellos? Incluso con sus auras tan intensas debería saber que lo que decía sonaba como si fueran una peste viviente.

— Si te refieres a que logré atenderlos como se debía, lo hice — Gruñí haciendo mostrar mi enfado por el comentario, cosa que a ella la hizo retroceder un paso, consciente de su equivocación al escoger las palabras.

— Lo siento Sakura-chan, no era mi intención molestarte, es solo que… — Se detuvo en sus palabras y luego sonrió nerviosa — No, olvídalo no es nada —. Se dio la vuelta con intensión de irse, pero yo deseosa de averiguar un poco más sobre aquella extraña conducta le detuve.

— Parece que no te agradan los Uchiha — Solté suavemente, haciendo con esto que ella se detuviera en seco — No voy a criticar la razón, pero me interesa saber porque parece como si la mayoría les tuviera cierta aversión.

— ¿Qué te hace pensar que no me agradan? — Ella sonrió nerviosa y abrió los labios para añadir algo más, pero le interrumpí antes de que lo hiciera. — Nunca te he visto estar tan distraída con algún paciente, siempre eres eficiente en la toma de datos sobre los casos recién llegados, además sabes remitirlos a donde corresponden; hoy por el contrario estabas tan nerviosa que tuviste que pedir que te repitieran la información, aparte de ello no parecías con muchos ánimos de estar allí, seguido a todo esto está tu comentario, además de tu alivio de verlos marchar, con esto sirviendo de evidencia, te vuelvo a preguntar ¿Cuál es el problema con ellos?

En sus ojos pude ver la derrota al ser leída con tanta facilidad, además de ello su suspiro me indicó que me diría lo que estaba preguntando, así que esperé. — Bueno… no sé si lo sabes, pero los Uchiha son unos cobardes — Abrí parcialmente mis ojos ante la sorpresa, pero seguí esperando a que continuara — Aun sabiendo esto, ellos siguen con su actitud arrogante y déspota para con todos, últimamente más que antes, por eso la mayoría de los habitantes de la aldea les temen y les desagrada su presencia.

— ¿Unos cobardes? — Repetí en un murmullo, no comprendiendo del todo lo que quería decirme. — ¿De dónde sale aquello?

— Lo siento Sakura-chan, pero eso… no lo sé, a mí solo me molestan porque siempre están tensos y arrogantes, además te miran de tal forma que te hacen sentir desagrado de su presencia. Si me disculpas ahora tengo que irme, aún hay un par de pacientes que tengo que verificar — Cuando la vi marchar no la detuve, en cambio me quedé pensando seriamente a que iba todo aquello, realmente el asunto me daba una mala espina, y ahora que no tenía a nadie en casa para distraer un poco mi mente de las preocupaciones diarias, sentía que en cualquier momento me abrumarían, claro que de ser así solo me quedaba una opción, y esa era averiguar el tras fondo de toda la situación.


Dos días después del ingreso del Uchiha al hospital, le pude dar de alta, y aunque por parte de él y sus compañeros recibí las gracias, no pude evitar sentir la presión que les rodeaba al estar cerca de otras personas; claro que esto no fue nada en comparación con lo que había visto la noche pasada, en la cual, cuando fui a cenar fuera luego de mi ronda regular, observé como en la calle dos ebrios habían hecho un gran escándalo, ocasionando que la policía viniera e intervinieran en el conflicto. El problema comenzó cuando uno de ellos agredió verbalmente a los Uchiha, provocando con esto que inmediatamente fuera ejercida la fuerza sobre él. La acción de los policías no fue bien vista por nadie, de hecho más críticas se formaron alrededor, aparte de un ambiente pesado que llevaba fácilmente a pensar que no se estaba entre miembros de la misma aldea, sino que se estaba expulsando a extranjeros; como fuere, lo que en mi mente quedo grabado fue la expresión oscura que pintaba las facciones de los Uchiha, además de que destilaban un gran instinto asesino, helando la sangre de cualquier experimentado que pudiera sentirlo.

Desde la noche pasada había estado pensando más de la cuenta, pero llegué a la conclusión que tendría que ir a la fuente, claro que consciente en que casi nadie de los involucrados me diría nada, opte por dirigirme a las personas en las que tenía más confianza, así que cuando comenzó a atardecer me dirigí con calma hacia el distrito Uchiha, después de todo tenía la excusa de no haber visto desde hacía unos días a mis amigos. Para cuando llegué a la entrada principal de los dominios del clan, el cielo ya estaba pintándose de tonalidades lila, aunque el sol aún permanecía lo suficiente alto como para que se tuviera una buena vista del lugar, por ello me fue fácil detectar desde la distancia una pequeña silueta que iba frente a mí. — Oh, pero si es Sasuke-kun — Dije moviéndome rápidamente para quedar justo a solo dos pasos de él.

El niño se giró a verme y entonces noté el pequeño puchero que adornaba sus facciones — Sakura… ¿Qué estás haciendo aquí? — Reí por su expresión y luego bajé mi mano y acaricié sus cabellos, logrando que su mohín se profundizara.

— Venía a visitar, hace días que no puedo verlos así que he venido de paso — La mirada de Sasuke me decía que no me creía todo lo que había dicho, pero especialmente parecía molesto por otra cosa.

— Si vienes buscando a Nii-san no está, salió a toda prisa hace un momento — Internamente me impresioné por lo acertado de la información, pero aparte de ello me alegré al poder enterarme que era lo que le molestaba al niño.

— Ya veo… así que estas molesto por eso — Sonreí con un poco de burla, ocasionando que él se mostrara incómodo y un poco avergonzado — Querías ir a entrenar con Itachi-kun ¿Cierto?

— Cállate — él apartó mi mano de su cabeza y comenzó a introducirse a los dominios del clan, yo por mi parte mantuve mi sonrisa y le seguí, por el momento contenta de poder cambiar de aires. — Ya te dije que Nii-san no estas y aun así me estas siguiendo, no soy un mentiroso.

— No dije que lo fueras, pero no creas que siempre vengo para visitar a Itachi-kun, te dije que vine a saludar — Mi expresión ahora fue más tranquila y suave, de esta manera podría mostrarle que mis palabras en su mayoría eran reales.

— ¿No tienes nada más que hacer? — Siguió quejándose, aunque noté cierto tono oculto entre su voz que delató un poco de felicidad.

— La verdad es que no… aunque, si te parece bien ¿Qué te parece si te ayudo con tu entrenamiento? Podemos dedicarnos una hora a ello antes de que sea la hora de la cena — Ambos nos detuvimos y entonces fije toda mi atención en él, observando que su expresión parecía casi completamente en contra de mi propuesta, pero al mismo tiempo dudaba — Si no quieres está bien, solo era una idea — Decidí seguir el camino que habíamos anteriormente emprendido, pero antes de dar dos pasos él habló.

— No es que no quiera — Murmuró casi inaudiblemente, pero conseguí rescatar sus palabras.

— En ese caso ¿Quieres ir? ¿O hay algo que te lo impida? — Sasuke infló los cachetes aún más por mi comentario, así que yo finalmente mostré mi confusión por su actitud.

— Solo… ¡Olvídalo! — El pelinegro se apresuró a continuar, esta vez sin mirarme y manteniendo su mirada abajo.

Con un suspiro y tratando de borrar de mi mente la actitud tan extraña del niño, le alcancé para continuar el camino en silencio, principalmente porque al verle de reojo pude notar que se había enfrascado en sus propios pensamientos, aparte de que parecía tratar de evitar el contacto visual conmigo. Honestamente el lado inocente de Sasuke me provocaba ternura, era un rasgo que agradecía poder conocer, y rogaba porque se mantuviera algunos años más, incluso si no lograba que bajara la guardia cuando yo estaba alrededor, con tal de poder verlo tranquilo y feliz haría lo que pudiera. — ¡Estoy en casa! — Proclamó el pequeño cuando llegamos a la residencia.

— Disculpen la intromisión — Le seguí yo, manteniéndome en la entrada y esperando algún indicativo para que siguiera.

— Si ya llegaste hasta aquí no te quedes quieta en la puerta — Gruño Sasuke luego de quitarse las sandalias — Apuesto a que mamá estará feliz de verte.

Sonriendo casi imperceptiblemente imité al niño e ingresé al interior de la casa, luego acompañada de él fuimos caminando hasta el jardín, donde sentía que estaba la firma de chakra de Mikoto. — Mamá — Llamó Sasuke cuando la vimos sentada mirando al jardín con una taza de té.

— Bienvenido a casa Sasuke. Ah, y hola Sakura-chan, no te había visto hace mucho tiempo ¿Estás buscando a Itachi? — Solté una suave risa al ver la mirada de Sasuke sobre mí.

— Hoy no es mi prioridad. Lamento si vengo sin avisar, solo quería pasar a saludar un rato — La mujer suavizó su mirada y me sonrió amablemente.

— Entiendo ¿Quieres quedarte a cenar? Después de todo he oído que estás sola en casa — Asentí confirmando sus palabras, lo cual noté, fue un sinónimo de alegría para ella — En ese caso no se diga más, será un gusto que te quedes a comer con nosotros, apuesto a que Fugaku estará contento.

Ella se puso en pie dispuesta a ir a la concina, pero antes de que se marchara proclamé — Mikoto-san déjeme ayudarle —, Ella me observó unos momentos antes de volver a sonreírme y responder, — Ya lo tengo todo casi listo, solo falta colocar la mesa, así que si lo deseas puedes ayudarme con eso.

Asentí en respuesta y luego seguí a la mujer hacia la cocina, en donde al llegar pedí las indicaciones para tomar todo lo que necesitaba y poco después me encontré organizando cada utensilio sobre la superficie de madera donde comeríamos. — Escuché que ayudaste a uno de los oficiales de Fugaku — Me sobresalté ligeramente cuando Mikoto comenzó a hablar, ya que no me esperaba que decidiera iniciar un tema, especialmente uno en el que tocaba los hechos en el hospital.

— Solo hice mi trabajo Mikoto-san, no podría dejarlo morir, especialmente por un veneno como aquel — Mis palabras eran ciertas, pero la sonrisa que le estaba dedicando a la mujer no, debido a que el tema aún me parecía incómodo.

— Sakura, oímos que fuiste muy eficiente y amable no solo a la hora del tratamiento, sino también cuando les atendiste, por eso quiero agradecerte y sé que Fugaku también te dará las gracias — Ella se acercó hasta el lugar en que me encontraba y comenzó a dejar los platos con la comida que cenaríamos, quedando junto a mí — Realmente me alegro que contemos con tu ayuda, tantas veces que también has curado las heridas de Itachi o y las de Shisui.

Ella parecía absorbida en el tema, tanto que no daba espacio para decir algo, así que simplemente la escuché y observé mientras me preguntaba qué era lo que había cambiado para que ella se mostrara casi nerviosa, y decía casi, porque realmente no identificaba del todo aquel brillo inquieto en su mirada, además de ello, por la leve y casi imperceptible flexión de sus cejas y tensión en su mandíbula, podía afirmar que algo le preocupaba. Pasar tanto tiempo con los Uchiha me había afilado mi habilidad para ver los pequeños detalles que otros pasarían por alto, pero al mismo tiempo esto me hacía pensar demasiado, especialmente ahora en que mi inquietud avanzaba con cada gesto, acción o palabras que escuchaba de alguno de los que interactuaban con los Uchiha o de estos mismos. — Mikoto, mañana… — La voz de Fugaku llegó desde el pasillo, parando la conversación que anteriormente teníamos, pero al mismo tiempo la voz del hombre se detuvo cuando llegó a la puerta, así que ambas volteamos a ver al comandante, quien se había quedado observándonos desde la entrada.

— Buenas noches Fugaku-san — Saludé haciendo una corta reverencia y luego sonriendo suavemente.

— Buenas noches Sakura. No sabía que nos visitabas hoy — Aunque sus palabras podrían parecer secas, el tono de su voz indicaba que en realidad estaba tranquilo y genuinamente sorprendido por mi presencia.

— Lamento llegar tan repentinamente, hacía un tiempo que no pasaba a saludar por el trabajo en el hospital, así que aproveche para venir ahora que se me concedió un descanso — Fugaku se sentó a la cabeza de la mesa sin desprender su mirada de mí, posando toda su atención sobre lo que decía.

— Es entendible, he escuchado sobre tu trabajo y tengo que agradecerte por el trato que le diste a mis sub alternos — La mirada que me dedicó Mikoto junto con su sonrisa cómplice, me decía las mudas palabras de "Te lo dije", cosa que internamente me hizo reír, pero decidiendo concentrarme en la conversación con el hombre me apresuré a reafirmar mis anteriores ya dichas palabras. — No fue nada Fugaku-san, realmente solo hacía mi trabajo.

— Entiendo bien que siempre atiendas correctamente a tus pacientes Sakura, pero realmente fuiste la única que les ayudo de manera eficiente — Su mirada seria me dio un indicativo de que no aceptaría réplicas al respecto, así que decidí simplemente aceptar sus palabras de agradecimiento con una sonrisa.

— Me alegro poder haber sido de ayuda, espero que no vuelvan a terminar heridos de gravedad, pero cualquier cosa que se presente, mientras este en la aldea pueden buscarme, estaré dispuesta a ayudar — La sonrisa de aprobación de ambos adultos me hizo sentir un tanto cohibida, pero no tenía nada que ver con la incomodidad que había sentido en el hospital cuando había hecho la misma propuesta a los otros tres Uchiha, por el contrario, era casi como me agradecieran profundamente mis palabras.

— Escuché de eso, el Hokage también me informó que hablaste con él, nos hizo saber que pediste encargarte personalmente de los casos de nuestro clan — Asentí con una tímida sonrisa cruzando por mis labios.

— No me habías dicho de aquello Fugaku — Mikoto, quien había seguido poniendo los platillos sobre la mesa se detuvo y nos miró consecutivamente, esperando una explicación.

— Fue esta tarde, el Hokage me informó que de ahora en adelante Sakura será el médico de los Uchiha, también me expresó que fue la propia Sakura que le pidió que le concediera la posibilidad de hacer esto — la pelinegra me observaba sorprendida, pero luego de unos momentos sonrió.

— Sakura-chan — pronunció ella con suavidad, pero no dijo nada más solo mantuvo una mirada de agradecimiento.

Antes de poder continuar con esa conversación la puerta de entrada sonó, y a eso le siguió un "Estoy en casa"; para los que estábamos allí era evidente quien era, especialmente porque poco después del anuncio, los pasos apresurados del menor de la casa, junto con su infantil voz resonó en toda la morada. — Nii-san, bienvenido —, el suave murmullo de lo que sería una risa por parte del mayor me llegó, haciendo que una sonrisa se formara en mis labios.

Mikoto quien había terminado de colocar la comida salió de la cocina, dejándonos al patriarca Uchiha y a mí solos. Eran raras las ocasiones en que me quedaba a solas con él hombre, y aunque podría afirmar que el Uchiha no me caía mal, siempre me hacía sentir incómoda por carácter serio y severo, especialmente ahora, que su anterior actitud había cambiado, mostrándose más serio que antes y haciendo que el ambiente lentamente fuera cambiando a uno más tenso. El silencio se prolongó unos minutos más, hasta que regresó Mikoto-san, seguida poco después de Sasuke, el cual parecía bastante feliz con respecto a algo y por último entro Itachi quien al verme por unos segundos mostró sorpresa en su expresión, pero luego retomó a su semblante de siempre. — Bienvenido Itachi-kun — Le sonreí alegre de verlo luego de tanto tiempo.

— Sakura — Pronunció, para luego acercarse y sentarse en su lugar.

— Sakura-chan tú también toma asiento — la voz divertida de Mikoto me hizo sobresaltar un poco y luego enrojecer de vergüenza, ya que como ella dijo, yo era la única que seguía en pie; así que sin darle más vueltas me apresuré y senté justo al lado de mi amigo, el cual me observó de reojo por unos segundos más antes de sonreír levemente y volver su atención al resto de sus familiares.

El ambiente que anteriormente había empezado a mejorar con la presencia de los otros tres miembros de la familia, decayó con fuerza, y para mi sorpresa la tensión fue tan palpable que me alarmó en unos segundos. Entre bocados observé a la familia, siendo Sasuke el único que no parecía percatarse de nada, de hecho pronto comenzó a hilar una historia sobre su día, comentando sobre cada uno de los logros alcanzados; Itachi prestaba atención a sus palabras, e incluso yo misma trataba de concentrarme en lo que el niño decía, pero su padre parecía más bien enfrascado en otro tipo de pensamientos, en los cuales, en su prioridad parecían rondar a Itachi, ya que su mirada no se separaba por mucho tiempo de su hijo mayor. Entre más minutos permanecía alrededor de ellos podía estar más segura que lo que sea que pasara allí, se centraba en padre e hijo mayor, claro que saberlo solo me provocaba un serio malestar, haciendo que perdiera casi todo mi apetito. — Gracias por la comida — Proclamé cuando terminé de comer, entonces forcé una sonrisa y miré a Mikoto — Todo estuvo delicioso, agradezco que me invitaran a cenar.

— No es Nada Sakura-chan, ¿Deseas quedarte a dormir? — Me preguntó la mujer amablemente — Es muy tarde y has de estar cansada.

— Agradezco mucho la oferta Mikoto-san, pero por hoy creo que declinaré, no deseo molestar y además no traje más ropa que la que llevo puesta — Ella se mostró un poco decepcionada con mi respuesta, pero no insistió.

— De acuerdo, en ese caso espero nos visites de nuevo, pero que sea pronto — Yo reí ante la demanda tan honesta de la mujer.

— En cuanto tenga un descanso vendré — Me puse en pie y le dediqué una mirada a cada uno antes de proclamar — Me iré ahora.

— Gracias por la visita — Dijeron ambos padres.

— Hm… cuídate Sakura — Sasuke murmuró por lo bajo algo enfurruñado, actitud que me hizo reír nuevamente.

— Te acompañaré — Las palabras de Itachi nos sorprendieron a todos, y aunque estaba agradecida con él por ofrecerse, pude ver que su padre parecía no estar muy de acuerdo, sin embargo no objetó en contra de la decisión de su hijo, en cambio proclamó con voz severa, — No tardes demasiado Itachi —. Mi amigo ante la demanda de su progenitor, solo asintió, para luego mirarme y con mudas palabras indicarme que nos marcháramos, así que con una última despedida a todos salí de allí junto al chico, para poco después estar caminando hacia mi casa.

— Gracias Itachi-kun — Mencioné suavemente, pero al parecer él tenía en la cabeza otras cosas, porque en vez de responder a mis palabras, me observó atentamente antes de preguntar — ¿Te encuentras bien? —. Me sorprendí.

— Sí, ¿Por qué lo preguntas? — Le vi suspirar para luego enfocar su mirada al frente.

— Te vi un poco incómoda en la cena ¿Pasó algo? — Eso era lo que yo debería decir, de hecho aún podía ver inquietud en su mirada, parecía un poco más lejano que de costumbre.

— No, solo… — Ahora fui yo la que suspiró y apartó la mirada — Tengo muchas cosas en la cabeza, ya sabes, debes estar enterado de que mis padres se marcharon a una misión bastante larga, eso, lo del hospital y otras tantas cosas me tienen algo inquieta —, en realidad no quería admitir que había notado que la relación de su familia con la aldea se estaba tornando cada vez más tensa, aparte de ello, había otro tema que no había podido pensar por todo lo demás, pero eso era asunto de otro momento, en esos instantes no podía simplemente mostrarme incómoda en la presencia de él, no podía darle prioridad a esos sentimientos recién descubiertos, no cuando parecía que algo más grande estaba pasando en mis narices.

— Entiendo — Quizás solo me sorprendió demasiado no escuchar la frase "puedes decirme lo que te inquieta", que era una costumbre que ya teníamos desde hace mucho, o quizás realmente era un indicativo de que algo pasaba, porque esta vez sin dudarlo y frente a la inseguridad creciente que sentía, dije. — ¿Mañana tienes alguna misión en la tarde?

— No — Su mirada expectante apareció y supe que él estaba analizando cada una de las cosas que hacía.

— Mañana quisiera entrenar un poco, si tienes una hora libre… oh y si Shisui viene sería aún mejor, claro que no sé si él también esté disponible — Sonreí lo mejor que pude para que él no sospechara de mí, aunque sabía que eso era poco probable, conociéndolo, lo más seguro era que ya estuviera formulando algunas hipótesis sobre mi comportamiento.

— A las cuatro — Respondió — En el acantilado.

Sonreí genuinamente con su respuesta — Ahí estaré Itachi-kun —, le miré asentirme para luego inducirnos en un cómodo silencio, aunque por algún motivo sentí que pronto las cosas cambiarían.


Tal y como habíamos quedado el día anterior, nos reunimos los tres en el acantilado que daba al rio Nakano, allí, luego de intercambiar un rápido saludo comenzamos una sesión de entrenamiento, en la cual estuve algo distraída al pensar en el verdadero motivo por el que les había pedido reunirnos allí; aunque parecía no ser la única con la cabeza en otro sitio, ya que tanto Itachi y Shisui, parecían un poco más tensos de lo normal, aunque el mayor lograba disimularlo bastante bien, manteniendo en su gran mayoría cada uno de sus movimientos de forma fluida y certera, mostrando con ello, la diferencia de experiencia, con la cual finalmente nos venció. — Oigan ustedes dos, parece como si tuvieran la cabeza en las nubes — Se burló el mayor, aunque a mi parecer fue solo una estrategia para apartar el ambiente incomodo que se mantenía de trasfondo en nuestro encuentro.

— Puede qué… — Murmuré con admisión poniéndome en pie y haciendo el sello de reconciliación con ambos — Aunque parece ser que no soy la única.

Los dos chicos parecieron ligeramente nerviosos con mi observación, pero como siempre y haciendo alarde de su gran autocontrol no demostraron aquello más allá de un leve tic en la punta de sus dedos. — Parece que lo has descubierto — Dijo el mayor suavemente, sorprendiéndome de que fuera a ser tan directo — Tienes razón, estoy un poco distraído —. Itachi miraba a nuestro amigo con cautela, aspecto que me puso más ansiosa por saber que era lo que diría al respecto.

— ¿Por qué? — Insistí.

— Bueno la verdad es que… — Su seriedad me hizo poner toda mi concentración en él, casi olvidando que Itachi de igual modo estaba allí, solo que no vi que su expresión era bastante seria y un tanto oscura, como si estuviera esperando a ver en qué momento intervendría en las palabras de nuestro amigo — Estos días, me he preguntado si estas sociabilizando bien con otras chicas, ya sabes, siempre estas rodeada de chicos que en ocasiones parece como si no tuvieras un lado femenino.

Fruncí el entrecejo con molestia, sin saber que parte de las palabras de burla de mi amigo tenían un poco de preocupación detrás — Shisui… insúltame de nuevo y te golpearé tan fuerte que caerás directamente en el hospital — Él soltó su risa normal, pero algo en ella no me convencía del todo — Además eso no es algo de lo que preocuparse, no es que no pueda relacionarme con los demás, lo hago un poco, pero es difícil encontrar chicas de mi misma edad que tengan el mismo espacio de tiempo que yo — Era la verdad, me era difícil entablar una relación con alguien más debido a que mi carga era más grande que otros, era una vida muy parecida a la que ellos dos llevaban, solo que algo me hacía intuir que realmente a ellos les pesaban muchas más cosas por provenir de un clan tan antiguo.

— Sakura, ni en la academia te relacionabas los suficiente — Me contradijo mi amigo, haciéndome inflar mis cachetes.

— Itachi-kun tampoco tenía más amigos en la academia y no veo que le estés recriminando aquello — El nombrado enarcó una ceja en mi dirección, haciéndome una muda pregunta con ello, lo cual me hizo sonrojar fuertemente y rápidamente añadir — N-no estoy juzgando tu manera de hacer las cosas, pero sabes que es verdad… ¡Y no me mires así! — Ante mis nervios terminé girándome para evitar que viera mi rostro y tomé mis mejillas entre las palmas de mis manos, tratando de calmarme.

— Itachi es diferente, me tiene a mí, pero Sakura… tú no tienes amigas, no se alguna para charlar sobre cosas de chicas… — Me molesté un poco por la insistencia así que miré a Shisui con fiereza.

— ¿Por qué tan repentinamente tocas ese tema? Es la primera vez que pareces muy interesado en que comparta con otras personas, nunca te había visto quejarte de que no tuviera muchas personas de confianza — Lentamente estaba cayendo en cuenta de que el repentino tema podría estar significando más de lo que parecía a simple vista, si sumaba el asunto que realmente quería preguntarles, podía estar casi segura que una cosa tenía que ver con la otra.

— No es repentinamente Sakura… siempre me he preguntado que… — Esta vez no permití que continuara mucho más lejos en sus palabras.

— No es cierto Shisui — Proclamé con firmeza, haciendo que el callara repentinamente y se quedara mirándome, aunque su expresión permanecía aparentemente tranquila. Cerré momentáneamente los ojos y respiré profundo antes de enfrenarme a ambos, esta vez me aseguré de que sus atenciones recayeran sobre mí — Hay algo que me he estado preguntando estos días y quisiera que me respondieran — Los dos intercambiaron una mirada rápida, pero sus rostros no cambiaron nada, haciéndome sentir algo insegura de mis palabras, pero recordándome todos los hechos anteriores, tomé el valor para continuar, — Quisiera saber si hay algo mal, últimamente he estado notando ciertas actitudes extrañas dentro de la aldea, así que quiero saber si hay algo que no sepa y sea importante.

Un suspiro de Shisui me hizo dirigir mi atención sobre él, pero yo vi que en realidad no parecía preocupado ahora, aspecto que me confundió ¿Acaso había levantado sus defensas en alto y estaba precavido de levantar cualquier tipo de sospecha? — En realidad no es que pase mucho Sakura, es solo que últimamente los Uchiha han estado más tesos de lo usual, ha habido algunos aumentos en la inseguridad, entonces se han puesto más estrictos de lo que deberían, eso ha provocado algunas quejas y ha hecho que las cosas se pongan algo pesadas, pero eso es un asunto que Fugaku-san ha estado solucionando estos días. Claro que también ha estado algo estresado porque Itachi, aquí presente ha estado más ocupado con sus misiones, ¿ya sabes que lo van a promover a capitán de escuadrón? Todo ha sido un completo lio, es por eso que probablemente habrás notado la tensión, pero no es nada de lo que debas preocuparte — Su sonrisa esta vez no logró tranquilizarme, de hecho aunque sus palabras me sonaran convincentes, podría decir que en realidad me estaba tratando de ocultar algo, lo cual me dolió un poco, pero al no tener pruebas de que mintiera, y sabiendo que no mediría nada más me relaje y solté un suspiro.

— Bien, me preocupaba que algo verdaderamente malo estuviera ocurriendo — Fingí creer en sus palabras cuando en realidad mi inquietud no había desaparecido aún.

— Es bueno que hayas solucionado tus inquietudes… ahora volviendo al tema de tus amistades… — Rodé los ojos resignándome al hecho que él continuaría molestándome con ello, así que le di la espalda y me acerqué a Itachi.

— Honestamente no entiendo a qué viene todo aquello — Murmuré.

— Solo se preocupa de que seamos tus únicos apoyos, especialmente ahora que tus padres se han ido — Comentó Itachi, haciendo que me sorprendiera de lo directo que era y reafirmando mi intranquilidad posterior.

— Entiendo que en nuestra vida de ninja siempre haya la posibilidad de morir, pero decir aquello… ¿No crees que es algo lúgubre? — Él no comentó nada al respecto, lo cual me causo algo de malestar, así que añadí — Yo… confío en ustedes dos, así que igualmente quiero que crean en mí —. Me perdí la leve mirada de sorpresa en el rostro de ambos, debido a que estaba mirando hacia la cascada, pero poco después me giré y les dediqué una sonrisa — El día en que les vea rodeado de más personas, ese día podrán regañarme, aunque yo pienso que de los tres yo soy la más sociable — Reí por mis propias palabras.

— Eso dolió Sakura-chan — Gruño Shisui, pero luego sonrió ampliamente — Bien entonces no tocaremos más el tema. Parece que va siendo hora de marcharse, mañana tengo una misión… Tú también ¿no Itachi?

— Sí — ambos chicos me observaron esperando a ver qué diría.

— Yo no tengo mucho que hacer mañana, pero igualmente he tenido una dura semana así que descansaré — Con esto dicho los tres comenzamos a caminar hacia la salida del campo de entrenamiento, aunque yo me quedé un par de pasos atrás, observando sus espaldas y llenándome del sentimiento de lejanía, como si repentinamente un muro se hubiera levantado entre nosotros, uno que me llenaba de una sensación desesperante y dolorosa.


Una semana más había pasado desde que había visto a mis amigos, y la verdad cada día la tensión que percibía entre los Uchiha y los habitantes de la aldea aumentaba considerablemente; no es como si en un principio hubiera creído las palabras de Shisui, pero el cada día estar más segura que algo pasaba, me llenaba de temor, cosa que había empeorado a raíz del sueño que había tenido la noche pasada.

Flash back

Me vi a mi misma caminando por la aldea, pero no era mi yo de siempre, no, esta era mi versión pequeña, la cual se encontraba cargando su mochila mientras caminaba en solitario hacia la academia. Él día se veía muy tranquilo, el sol brillaba en lo alto y las personas al rededor parecían más felices que nunca, todo aparentaba ser un sueño tranquilo y feliz, y de hecho así era, hasta que frente a mis ojos paso la imagen de Itachi y Shisui, quienes caminaban en dirección contraria a mi miniatura, los dos viéndose más grandes que yo e ignorando mi pequeña presencia. Siguiendo el sueño, entendí que eso se trataba de la versión pasada de mí, probablemente un recuerdo perdido en el cual nosotros no nos conocíamos y yo vivía mi vida ignorando el hecho que ellos dos existían, algo que no me traía muchas angustias de momento, de hecho solo podía sentirme casi completamente ajena a la tranquila situación, la cual duró un par de momentos más antes de cambiar a una escena en la que estaba observando a Sasuke, el cual para mi estremecimiento interno mantenía una expresión lúgubre y llena de dolor, cosa que me hizo sentir miedo, y preguntarme lo que había pasado para que mantuviera tal semblante.

Mi respuesta no tardó en llegar al ahora el sueño imbuirme en un pasaje en el cual volvía a la primera parte del sueño, solo que esta vez yo iba al lado de Itachi y Shisui, hablando y riendo, mientras que a nuestro lado pasaba otra vez mi pequeña yo, solo que en esta ocasión este aspecto me parecía ajeno e irreal. El sueño se mantuvo en este punto hasta que mi cuerpo se paralizo y solo pude ver cómo mis dos amigos seguían adelante, al parecer ignorando el hecho de que me quedé atrás. Traté de moverme y alcanzarlos, pero mi cuerpo no se movía, solo pude ver como la escena a nuestro alrededor se tornaba negra hasta que ambos desaparecieron, dejándome en aquella profunda nada, que poco después comenzó a llenarse de imágenes horrorosas, en las cuales se hizo presente el barrio Uchiha y con ello los cientos de cuerpos que conformaban al clan, todos muertos, con heridas profundas donde la carne había quedado completamente desgarrada, mostrando el interior claramente, además de ello la sangre se esparcía por todo el lugar, pintando todo de rojo. La escena era simplemente brutal, y me causaba nauseas el estar allí, pero aún no podía moverme, solo observar cómo al parecer la sangre llegaba hasta mi posición, mostrándome un charco que reflejaba el cielo oscuro y con ello la última escena que congelo mi alma y me llevó a despertar abruptamente. En uno de los edificios cercanos podía ver a Itachi, manchado completamente en sangre y manteniendo una fría expresión mientras sostenía el cuerpo inerte de Shisui en una mano y en la otra tenía desenfundada su kodachi, su sharingan giraba perezosamente mientras me observaba, casi como amenazando con hacerme lo mismo que a todos.

Mis palabras nunca hubieran salido, aún si lo hubiera querido, lo único que sabía es que antes de despertar vi el movimiento brusco de Itachi al ir hacia mí y que a pesar de su expresión en blanco, por su rostro caían silenciosas lágrimas.

Fin del flash back

Fue evidente que desperté con un grito histérico, que solo fue escuchado por las paredes de mi casa, además de ello estaba temblando de forma incontrolada, mientras que inevitablemente se derramaban por mi rostro lágrimas de desesperación. Tarde mucho tiempo en calmarme pero cuando lo conseguí, había llegado a dos conclusiones, y una de ellas era que si no me podía firme en averiguar lo que en verdad pasaba, luego lo lamentaría, la segunda era que a cada momento estaba más segura que todo el asunto tenía que ver con la masacre del clan, pero para confirmar mis sospechas ya no podría ir con Itachi y Shisui, porque sabía que no me dirían nada, de hecho si quería resolver mis dudas tenía que ir con el Hokage o indagar por mí misma, pero eso significaría inmiscuirme directamente en el clan Uchiha, y no quería tener más de cincuenta pares de sharingan encima de mí siguiendo mis movimientos, lo otro era robar los archivos de anbu, los cuales estaba segura que tendrían información sobre lo que pasaba esos días en la aldea, pero eso significaría ponerme una diana en la cabeza, lo cual no ayudaría a nadie; así que por estas conclusiones termine en el lugar en que me encontraba, mirando directamente al Hokage mientras él parecía tratar de ver a través de mí.

— Dijiste que querías hablarme de algo en privado, y terminaste preguntando esto — Yo me mantuve firme en mi lugar. — Pero tengo que decir que no tengo nada que aportar a tu pregunta…

— Hokage-sama, Shisui ya trato de engañarme antes, así que le pido que no trate de sacarme una excusa como "las cosas solo están algo tensas por la dureza de las acciones de los Uchiha", puede que en parte sea cierto, pero no estoy ciega como para no notar lo tensas que están las cosas, mis amigos pensaron que estaba un poquito ciega al respecto pero llevo conociéndolos el suficiente tiempo como para saber ver a través de sus miradas y lenguaje corporal, las cosas no están en "regular" o "mal", las cosas están en un "terrible asunto" y que sé que usted no ha dejado pasar — Fruncí levemente el entrecejo y añadí a mis palabras sin dejar de perderme las acciones del hombre — Estoy suficientemente preocupada y segura de mis palabras como para venir a pedirle explicaciones.

El silencio llenó el lugar, dejando que solo el sonido de las calles se escuchara, o al menos eso fue por un par de minutos, hasta que el anciano tomó una bocanada de su pipa y luego de que exhalo el humo preguntó — ¿Tienes en muy alta estima a los Uchiha, Sakura? — Me extrañaron sus palabras, pero le deje continuar — ¿Les quieres lo suficiente como para arriesgar tu vida?

— Sí, al ser miembros de la aldea… camaradas nuestros, igualmente arriesgaría mi vida, especialmente si se trata de Shisui, Itachi-kun o Sasuke-kun — El hombre estrechó ligeramente la mirada y luego se enderezó en su lugar.

— ¿Y si te dijera que ellos probablemente en algún momento podrían ponerse en contra de la aldea? ¿Qué opinarías? — Probablemente él esperaba que me mostrara confusa, pero mi reacción fue una triste mirada, que coloqué al recordar a Sasuke.

— Buscaría la manera de evitar que eso ocurriera, y si no es posible, trataría de ver porque harían aquello y buscaría encontrar una solución, pero en lo posible no les guardaría rencor — el hombre siguió analizándome con la mirada.

— Hay cosas que son muy difíciles de lograr, y otras imposibles de solucionar Sakura — Parecía tratar de mostrarse compasivo conmigo, pero la verdad es que yo no deseaba aquello, puesto que solo me hacía sentir peor.

— Hokage-sama, estoy consciente de ello, pero no es malo intentarlo… eso lo aprendí hace un tiempo. Además… creo que dije que haría lo que estuviera en mis manos para salvar a mis amigos, si yo veo que pude haber hecho algo para ayudarlos, pero por no intentarlo dejé de hacerlo, solo me arrepentiría toda mi vida, por eso mismo estoy aquí — el hombre suspiró, y de repente lo vi más cansado de lo usual.

— Veo que no es posible persuadirte de que dejes de indagar en el tema — Yo asentí justo antes de que él se inclinara un poco hacia adelante y me observara con severidad, — Escucha Sakura, lo que vas a escuchar, no puedes repetirlo, es del más alto secreto, y la filtración de esta información podría poner tu vida en riesgo, al mismo tiempo, confió en que tus sentimientos por Itachi y Shisui pueden ayudarlos un poco en estos momentos.

— Entiendo Hokage-sama — Mí corazón comenzó a latir rápidamente y esperé pacientemente.

Cuando el tercero comenzó a hablar, inició con los hechos que iniciaron todo el problema, y eso fue el día del ataque del zorro. Según contó, habían surgido sospechas contra el clan Uchiha debido a que esa noche, tal parecía que el animal había estado siendo controlado y el único clan con el poder para aquello eran los Uchiha, debido a su línea de sangre. Frente a las sospechas que se tenían, se obligó al clan a mudarse a las afueras, siendo rodeados por algunas de las sedes de Anbu, y con esto, desde entonces se ha mantenido una estricta vigilancia sobre ellos, aunque la mayoría de los Uchiha no lo sabía, era evidente que esto estaba ocurriendo, aunque esto solo fue una parte de lo que les hizo comenzar a crecer en irritación, ya que el problema fue avanzando cuando los aldeanos comenzaron a rechazar al clan, alegando en muchas ocasiones de que ellos eran unos cobardes al no haber estado luchando contra el zorro en las líneas delanteras, y esto siempre terminaba en acciones donde se ejercía la fuerza bruta y con ello el rechazo aumentaba; pero ahí no acababa todo, porque a raíz de todo lo anterior el clan había perdido sus conexiones principales en la aldea, dejándolo afuera de las opiniones más relevantes dentro de ella. Al final, todo el conjunto de cosas había desatado la ira de sus miembros, llevándolos a rechazar ellos mismos a la aldea; Así que los altos mandos, frente a esta actitud decidieron actuar colocando un espía dentro, el cual les había dado información con la que confirmaron de que el clan Uchiha planeaba un golpe de estado.

Toda la información fue difícil de digerir, ya que a pesar de que sabía parte de la verdad sobre la masacre del clan Uchiha, en el pasado nunca había llegado a conocer todos los detalles sobre este incidente, pero ahora, lentamente todas las piezas comenzaban a colocarse en su lugar, aunque aún habían algunos huecos entre fichas que esperaba que se pudieran solucionar. — ¿No han intentado hablar con ellos? ¿Darles un acuerdo? Después de todo no están seguros de que ellos realmente hubieran estado controlando al zorro — Mi pregunta se deslizó de mis labios frente a la creciente angustia, pero aún con esto traté de mantener la cabeza lo más fría.

— Realmente quisiera solucionar todo esto de la forma más pacífica Sakura, por ello asigne una misión a cierto amigo tuyo — Me vi confundida ante sus palabras y él prosiguió — ¿Conoces las habilidades del Sharingan de Shisui? La habilidad especial que tiene.

— Sí, antes hemos hablado de ello es el Kotoamatsukami… — Mis palabras fueron apagándose a raíz que el significado de las palabras del tercero tomaban forma en mi cabeza, — ¿Shisui va a emplear su técnica sobre su clan?

— De esa manera podemos conseguir tiempo para formar las debidas alianzas, del mismo modo podemos llegar a un consenso. Shisui fue quien tomó la decisión de hacer esto y confío en que lo logrará — No podía dejar de sentir que en realidad eso no pasaría, tenía un horrible presentimiento desde mi sueño y ahora no hacía nada más que aumentar, aunque, algo me decía que mi sueño tenía pistas para evitar que mis temores ocurrieran; no sabía si era cierto pero tenía la corazonada, por ello me apresuré a analizarlo, iniciando por el principio, en donde me vi caminando en el pasado y mis dos amigos Uchiha pasaban de largo… probablemente tenía que ver con el hecho de "tú estabas y ellos también", frase para declarar que incluso si antes no lo sabía sus existencias y propósitos se mantenían, ajenos a lo que en ese momento era mi vida; ahora apartando la parte de Sasuke, en la que sabía me decía "Este fue el resultado de tus temores", pasé a la antepenúltima parte, en la cual igualmente me vi ahora caminando con ellos, la misma escena del principio… nada cambió, lo único era que yo era consciente de la existencia de ellos. La realidad me golpeó duro y casi me marea, pero con esto había logrado comprender que era lo que no había estado viendo anteriormente, y eso me hacía temblar, pero me llenó de un creciente espíritu de lucha.

— Hokage-sama… ¿Alguien más sabe de la misión de Shisui? — Pregunté suavemente.

— No, Itachi solo será su apoyo por si ocurre algo, pero no tiene nos detalles de la misión — Algo no me cuadraba, de hecho estaba segura de que algo no estaba en su sitio.

— ¿Está seguro? — Insistí.

— Completamente seguro, esto solo lo saben los altos mandos, eso quiere decir que ningún ninja, aparte de ti conoce los planes que se realizaran hoy — Me sorprendí por la rapidez de los hechos.

— ¿La misión es esta noche? — Murmuré sorprendida y con la sensación de que se me hacía tarde.

— Así es. Sakura, creo que no debo repetirme cuando te digo que esto es muy importante, no lo repitas a nadie — Él estaba serio con todo esto y yo podía entender porque.

— Lo sé y lo entiendo Hokage-sama. Sé que por la seguridad de ellos no debo decir nada, le agradezco que me confiara esta información, de ahora en adelante le pido que confíe en mí si necesita ayuda con él tema, estaré dispuesta a ayudar en todo lo que este en mi alcance — El hombre asintió y trató de regalarme una sonrisa.

— Tranquila, todo se solucionara — Ya había escuchado eso antes, por parte de Kakashi y la verdad en esta ocasión no me dejé tranquilizar tan fácilmente, ya que estaba muy consciente de que esto no era real.

— Sí Hokage-sama, confió en eso — Hice una profunda reverencia y luego, lentamente me retiré de la oficina.

Caminé por los pasillos mientras aún pensaba con cuidado en toda la información recibida y agregando a esto la información que ya conocía posteriormente, así que para cuando llegué a la salida de la torre también había llegado a una conclusión. Antes había fallado en evitar que Sasuke se fuera porque era débil, pero en esos momentos no era la misma niña que se conformaba con un par de palabras y esperaba al último momento para tratar de hacer algo, pero que al final, solo conseguía una amarga despedida y la confirmación de todos sus temores; No, en esos momentos tenía la fuerza para esforzarme y tratar de cambiar algo. Sin pensarlo demasiado y en un salto comencé a moverme con rapidez por las calles de la aldea, solo con mi mente puesta en un objetivo, y ese tenía que ver principalmente con encontrar a Shisui, aunque ¿Dónde comenzar a buscar? ¿Dónde estaría? El atardecer estaba comenzando y por lo que intuía, lo más probable es que mi amigo pensara usar su técnica en algún tipo de reunión, ¿Cómo lo sabía? Eso era porque si pensaba usarlo en el que liderara toda la revuelta, podría cambiar lo que diría a su conveniencia y poder influenciar al resto con mayor facilidad, y eso solo se lograba si estaban todos reunidos, pero por lo que presentía, si eso hubiera ocurrido en el pasado, lo más probable era que la masacre del clan no se hubiera llevado acabo o al menos no tan pronto y Shisui hubiera vivido más, ahora también iba el asunto de que a Itachi se le había adjudicado el asesinato de su mejor amigo, el cual fue hallado en el rio Nakano. Todo esto me llevaba a que Shisui no llegó a los dominios del clan por algún motivo que no pudo prever, pero si fue porque se reunió con alguien antes, me llevaba a pensar que no debió hacerlo lejos de su destino. Me detuve en lo alto de un árbol y me permití sentir un momento la sensación de vértigo que crecía en mi estómago al saber que a pesar de que hablara en pasado, lo cierto era que todo eso estaba por ocurrir — Solo a mí se me ocurre pensar en preguntar luego de una semana — Murmuré respirando profundamente y tratando de pensar los posibles lugares en que mi amigo podría estar, pero realmente no se me ocurría nada. — Genial, es posible que él este en problemas y yo no soy capaz de hacer más que estar desesperada mientras pienso en las posibilidades —. Levanté mi mirada al cielo un momento mientras contenía las ganas de llorar frente a la impotencia.

Anbu… — Casi era un murmullo en mi oído, pero realmente presentía que en realidad la palabra se había escuchado en mi cabeza, así que alarmada me enderecé y miré a mi alrededor.

— Anbu — Repetí sin entender inmediatamente de donde había salido aquello, hasta que un pequeño destello de comprensión pasó por mi mente — ¡Shin! — Llamé, pero no hubo respuesta, solo escuché el viento a mi alrededor junto con el suave balanceo de las copas de los árboles — Por favor… tú dijiste que estábamos conectados, así que si me escuchas te pido que me des una pista, tú sabes donde esta ¿No es así? — Cerré los ojos y me concentré tratando de entrar y no entrar en aquel lugar donde podía comunicarme con el manipulador del tiempo, pero parecía como si algo se resistiera a dejarme pasar, era difícil conectar y eso solo me provocaba más ansiedad.

Justo cuando iba a darme por vencida logré escuchar algo — Raíz… bosque… templo… cerca de… — Las palabras fueron lejanas, casi como si fuera un radio mal sintonizado, pero las alcancé a rescatar. Y cuando lo hice abrí los ojos y me quedé pensándolas un momento, "anbu, raíz, templo… cerca de", lentamente comencé a interconectar las palabras siendo las dos principales "anbu y raíz" las cuales no iban en ese orden precisamente, pero que me dieron la pista principal del lugar al cual se refería.

— Gracias Shin — Solté en un susurro antes de aplicar chakra en mis pies y moverme lo más rápido que podía.

Había un lugar que completaba todos los requisitos que buscaba y esa era la sede de la raíz anbu ubicada a las afueras de Konoha, no muy lejos del complejo Uchiha, pero lo suficiente como para mantener cierta discreción de lo que ocurría allí, su fachada era una especie de templo entre las rocas. Recordaba que alguna vez Sai había mencionado que no se iba mucho allá, pero que eso pertenecía a esa organización; no hubo más información de aquello, puesto que el sello en su boca le impedía dar más detalles, pero con eso era más que suficiente por el momento. No me detuve ni un momento debido a que sentía que mi tiempo se acababa, y la verdad mí intuición fue correcta, ya que cuando llegué, solo tuve un par de segundos para apreciar la escena antes de tener que pensar rápidamente en algo y entrar en acción. El lugar era una sección bien rodeada del bosque, donde se alzaba lo que parecía exteriormente un templo construido dentro de la roca, con un par de esculturas de dioses furiosos en la entrada, claro que esto fue a lo que menos le presté atención, ya que en el centro, se encontraban Shisui y Danzo, y como dije no tuve tiempo de ver más, ya que al llegar el anciano desapareció del lugar donde anteriormente le había dejado mí amigo y reapareció frente a él, tomándolo por sorpresa y dándole la oportunidad para comenzar a golpearlo, primero en el estómago para aturdirlo y de ahí continuar con una sucesión de golpes, los cuales no me quedé viendo, ya que temía por el bienestar de Shisui; por ello tomé rápidamente una de las bombas de gas venenoso que tenía en mi bolsa trasera y en un movimiento ágil la lancé al centro de ambos, haciendo con esto que el anciano se apartara antes de que pudiera continuar lastimando a mi amigo. Moviéndome en un veloz saltó hacia al frente y teniendo listo el antídoto, me introduje dentro de la nube de humo, donde al llegar al lado del Uchiha, le inyecte, anulando así los efectos de la sustancia, luego sintiendo el peligro sobrevenirnos, le tomé del brazo y con un tirón, le hice ir conmigo cuando salté hacia atrás, saliendo de la nube de veneno, justo a tiempo para evitar una ráfaga de Kunai.

No aparté mi vista de enfrente y al mismo tiempo mantuve mis sentidos en alerta, lista para presentar batalla. La tos a mi lado me indicó que mi amigo estaba tratando de soltar lo que había respirado, y que aún no se había dado cuenta del todo de que era yo la que me encontraba allí, cosa que me fue confirmada segundos más tarde cuando pronunció — ¿S-Sakura? — No me molesté en responder inmediatamente, en cambio saqué un kunai justo a tiempo para desviar algunas Kunai que se dirigían a nosotros.

— Luego hablamos, ahora mira la manera en que vamos a salir de aquí — Murmuré mientras observaba como comenzaba a dispersarse la nube y comenzaba a mostrar frente a nosotros a cuatro anbu que protegían a su líder, el cual se encontraba más atrás observándonos con lo que identifiqué era molestia.

— No me esperaba que alguien vendría aquí — Dijo Danzo — Lo siento, pero tengo asuntos con ese Uchiha, pero ahora que has visto esto tengo que…

— No es necesario que entre en detalles Danzo-sama, se perfectamente lo que pasa cuando uno ve algo que no debería, especialmente si se trata del ataque contra un miembro activo y leal de la aldea, por ello no se preocupe, puede ahorrarse el discurso, porque no estoy dispuesta a dar mi brazo a torcer — Mi chakra ya estaba cargado en mi puño y con una corta mirada a mi amigo pude mandarle mis intenciones, a lo cual él me respondió con un leve estrechamiento de sus ojos.

— Eliminen el testigo y traigan el sharingan — La orden explicita a los anbu fue también nuestro indicativo para movernos, así que antes de que los otros miembros que estaban ocultos nos alcanzaran, yo ya había levantado mi puño y Shisui ya había hecho los sellos correspondientes.

— ¡Shannaro! — Proferí al golpear con casi toda mi fuerza el suelo provocando así que no solo colapsara la tierra bajo nosotros, sino que al mismo tiempo la pared de roca que nos rodeaba comenzó a fraccionarse, provocando un derrumbe que hizo a los anbu retroceder; simultáneo a esto, mi amigo pelinegro profirió — Katon Goukakyuu no Jutsu — la bola de fuego fue se dirigió hacia los anbu frente a Danzo, los cuales entre trompicones lanzaron algunas técnicas de agua para contrarrestar la gran bola de fuego y con esto nos armaron nuestra escena de salida.

Shisui me tomó por el brazo para luego a su siempre impresionante velocidad sacarnos de allí en un parpadeo, quedando bastante lejos como para detenernos unos instantes antes de retomar nuestra huida. No dijimos nada, de hecho ambos estábamos alerta por si algún anbu nos seguía, pero por el momento todo estaba despejado por lo cual pudimos seguir sin problema un par de kilómetros más, hasta que estuvimos cerca de nuestra zona secreta, donde estaríamos seguros de que no llegarían, a no ser de que desearan de que media aldea se enterara de que nos habían atacado. — Sakura… — Me llamó mi amigo, haciendo denotar en su voz la gravedad de la situación, pero en ese momento yo no deseaba hablar, de hecho aún estaba tratando de procesar todo la información recibida en menos de una tarde, era increíble, casi de ensueño que en un momento no sabía nada y al siguiente me enteraba de tantas cosas que pudieron matar a mi amigo mayor.

— No quiero hablar contigo ahora Shisui, luego — Pareció abrir los labios pero yo aparté mi mirada, enfocándola en el frente. Ahora que las cosas estaban aclaradas, y con las pruebas explicitas de sus mentiras, podía permitirme sentir el enojo y dolor por haber sido tratada de engañar por dos personas que apreciaba mucho y en quienes más confiaba, claro que aún no era momento de exteriorizarlo, primero tenía que hablar con los dos varones.

Pasados unos minutos más sentí a Shisui detenerse, así que de igual modo me detuve solo que un poco más atrás. Iba a preguntar porque nos habíamos detenido cuando otra voz llegó desde abajo — ¿Shisui? —, el corazón me dio un vuelco cuando recordé lo que el Hokage me había dicho, Itachi también estaba involucrado en la misión de ese día, solo que sería el apoyo del mayor. — Llegas tarde —. Ante la falta de respuesta de Shisui, Itachi continuó hablando desde abajo, pero manteniendo un tono suave y sutil, pero que en sus profundidades podía percibirse un pequeño toque de preocupación.

— Lo siento, ocurrió algo — Se disculpó él y con esto yo tomé algo de valentía para saltar y posarme al lado del mayor, mirando hacia abajo con enojo, hacia la ahora sorprendida expresión de Itachi.

— Sakura… — Pronunció él, pero antes de que pudiera decir algo más le interrumpí secamente, — Ahórrate la pregunta Itachi, ya se lo que vas a decir. Y no solo fue un "algo" Shisui.

— Oye… realmente necesitamos hablar — Me dijo el mayor a lo cual yo le dirigí mi mirada de ira, haciendo que callara al instante.

— ¿Oh… ahora vamos a hablar? — Solté dando un paso hacia él, notando su incomodidad y un pequeño nerviosismo tras sus ojos serios — ¿En serio lo vamos a hacer o solo me dirán otro par de mentiras? — él abrió los labios para refutar pero yo al instante golpeé el árbol junto a nosotros, partiéndolo ipso facto, por el lugar en que había aterrizado mi puño. — No te atrevas, porque puedo darte uno como ese sin arrepentirme.

— Sera mejor no hablar aquí — Dijo Itachi observando alrededor con cautela, pero manteniéndose pendiente de nosotros.

— El acantilado es el mejor lugar — Mencionó el mayor ahora apartando la mirada de mí y en consecuencia yo retrocedí y esperé a que ellos iniciaran la marcha, la cual comenzó solo unos segundos después.

Me mantuve tras ellos, no perdiendo de vista sus figuras mientras luchaba contra las lágrimas que amenazaban con salir. Estaba aliviada de ver a Shisui allí, pero al mismo tiempo estaba furiosa, también mis nervios no se habían calmado porque entendía que el problema no había pasado, simplemente fue un retraso momentáneo, pero nada que en esos momentos pudiera llamar permanente. El ambiente era frio y pesado, y eso no era algo que no cambiaría hasta que consiguiéramos solucionar nuestros problemas, porque sí, lo que en su mayoría mantenía la incomodidad en el aire, era el pequeño detalle de la mentira dicha hace días y también mi conocimiento sobre el tema; por ello cuando llegamos al lugar indicado tardamos un par de momentos en iniciar la conversación pendiente, pero al final y como siempre fue Shisui quien inició hablando. — Sakura… ¿Qué tanto sabes de este tema? — Directo y al punto, nada raro en esa situación donde el tiempo apremiaba.

— ¿Por qué tendría que responder? ¿Acaso ustedes lo hicieron cuando les pregunte hace una semana sobre si tenía que saber algo? — Los dos chicos se mostraron incómodos.

— Sakura, es importante — Esta vez fue Itachi quien intervino, pero esto no redujo ni mi enojo ni mi malestar, solo provocó que frunciera aún más el entrecejo y las lágrimas aparecieran en el borde de mis ojos.

— Oh, por supuesto ahora es importante ¡¿Y antes no lo era?! — Comencé a temblar mientras las expresiones de mis amigos se agravaban, y mis emociones comenzaban a salir a la superficie — Exactamente… ¡¿Qué debería decir?! Si al final van a tratar de cambiar lo que escuchen.

— Sakura, realmente no haremos eso, pero tienes que decirnos ¿Cómo supiste que estaba allá? Y ¿Qué sabes exactamente de lo que pasó? — Por las palabras de Shisui, me di cuenta de que en realidad no sabían de que yo estaba enterada sobre lo delicado que estaba el asunto con su clan, solo estaban preguntando si tenía idea sobre el ataque reciente; saber esto me enojó aún más.

— Realmente… — Murmuré cerrando los ojos y dándoles la espalda — Debería golpearlos a ambos.

— Sakura, esto es serio, Danzo… — No dejé que Shisui siguiera, en cambio volví a interrumpirlo, esta vez con un grito fuerte — ¡Al carajo con Danzo! ¡Si bien estoy molesta por lo que vi, no es con quien estoy más furiosa ahora! — Ahora volví a enfrentarlos, ojos cristalizados en dolor, además de rostro contraído entre la ira y el sufrimiento.

No me perdí los rostros sorprendidos de ambos, especialmente el de Itachi, que al no comprender la mayoría estaba uniendo cabos mientras que trataba de analizar mi repentino comportamiento agresivo. — Entonces explícate ¡¿Por qué estás tan molesta?! — Esta vez Shisui sonó severo, usando el tono duro que solo empleaba cuando las cosas eran algo que no podía tolerar, cosa que terminó de romper el poco autocontrol que tenía y terminé en un movimiento brusco frente a él dándole un fuerte golpe en el rostro, que aunque fue sin chakra logró tumbarlo en el suelo.

— ¡Porque ustedes dos me mintieron! — Mis lágrimas resbalaron por mi rostro ya sin poderlas detener — ¡Porque no confían en mí! ¡Porque tuve que buscar externamente la información! ¡Porque tengo miedo de perderlos! ¡Por tan tantas cosas idiota!

Su rostro mostraba aturdimiento, quizás no solo por el golpe sino por verme así, cosa que deduje al Itachi estar cerca casi con la misma expresión — ¿Quién dijo que no confiamos en ti? ¿Por qué piensas que te mentimos? — Un quejido de frustración abandonó mis labios ante las preguntas de Shisui, y poco después di un golpe al suelo con mi talón, provocando una fisura pequeña en el suelo.

— Realmente… ¿No tienes ni una pequeña idea de algo que quisieran ocultarme? ¿No sé algo que ver con la relación de su clan con la aldea? ¿O una explicación poco creíble para que dejara de preguntar? — Ambos palidecieron y yo estreche mi mirada y les miré a ambos con dolor — Eso pensé — Murmuré dándoles la espalda y comenzando a caminar, aunque realmente no pensaba marcharme, simplemente estaba tratando de calmar mis nervios, por ello me detuve unos metros más adelante y respiré profundo.

— Sakura… tú… —. Anticipándome a la pregunta de Itachi le respondí — No me convenció su explicación, así que cansada del sentimiento de que algo estaba mal fui directamente con el Hokage, a quien tan amablemente le agradezco que me diera las respuestas que buscaba, claro que para ello tuve que ser más firme de lo que fui con ustedes, aunque eso se debe a que yo pensaba que me dirían la verdad, pensaba que confiaban en mí. — Me detuve un momento cuando sentí que mi voz se iba a quebrar, pero me apresuré a continuar antes de ser interrumpida, — Él fue quien me dio los detalles de la misión de hoy, el modo en que te encontré Shisui, fue pura suerte, solo seguí mi instinto de que algo no andaba bien y terminé allí después de pensar posibles lugares en los que podría encontrarte, aunque realmente no me esperaba que estuvieras siendo atacado por Danzo — Si bien estaba hablando de dientes para afuera, realmente yo tenía mis motivos para mentir, después de todo ¿Cómo creer en todo lo que sabía o había vivido? Era de locos y probablemente solo terminaría ocasionando más problemas.

El silencio cayó sobre nosotros y yo me concentré en una pequeña hoja de pasto, estaba tratando por todos los medios de reducir mis emociones, pero me era muy difícil, especialmente cuando todo el día había pasado como si fuera una tortura mental. — Sakura, nosotros no queríamos involucrarte en esto — La voz de Shisui llegó justo detrás de mí, aunque eso no me sorprendió, solo me hizo soltar más lágrimas — Escucha, el asunto… del golpe de estado es bastante delicado, no sabemos que pueda pasar y no queríamos involucrarte en eso, no es que no confiemos en ti.

— Shisui… si yo tuviera un problema serio, en el cual mi vida esté en riesgo y no les dijera por quererlos proteger, ¿tú que pensarías? — Murmuré sin apartar mi mirada del suelo.

— Ella tiene razón en ese punto — Dijo Itachi — Nosotros intervendríamos incluso si ella no quisiera.

Sollocé y traté de apartar mis lágrimas, pero estas seguían saliendo — Lo siento Sakura, realmente no queríamos que te vieras envuelta, ya tienes tantas cosas en que pensar — Los brazos de Shisui me hicieron girar hacia él y poco después me rodearon en un abrazo, donde inevitablemente me rompí a llorar y terminé aferrándome a su camisa, mientras hundía mi cabeza en su pecho — Par de idiotas — Solté temblando — Estaba tan asustada… ¡No vuelvan a hacer algo así! — Las manos de Shisui me frotaban tanto la espalda como mi cabeza, tratando de reconfortarme con esto — E Itachi también ven aquí — Le ordené extendiendo mi mano derecha hacia donde la última vez lo había visto.

— ¿Quieres un abrazo grupal? — Murmuró Shisui con suavidad, casi con burla pero al mismo tiempo con comprensión.

— Por supuesto, sé que aún no puedo decir que todo esté bien, pero por lo menos me ayudará a clamar mis nervios — Un suspiro débil se escuchó desde atrás del Uchiha mayor y poco después sentí la mano de Itachi envolver la mía en un suave toque, aunque no se acercó más, solo sostuvo mi mano de esa manera mientras yo me calmaba.

Nos quedamos así hasta que dejé de llorar, solo entonces pusimos una pequeña distancia entre nosotros y nos regalamos una corta sonrisa. — ¿estamos bien? — Preguntó Shisui con suavidad, a lo cual, luego de soltar un suspiró respondí — Lo estamos, pero si vuelven a ocultarme algo así les golpearé a ambos tan fuerte que llegaran a la aldea de la arena en un parpadeo — Shisui soltó una pequeña risa antes de revolverme los cabellos y ponerse serio.

— Bueno, sé que acabamos tener una discusión bastante fuerte, pero ahora que sabes del problema, necesitamos tomar en nuestras manos el asunto — Asentí de acuerdo, ahora más tranquila y mentalizada para hacer lo que pudiera.

— Exactamente que pasó hace un rato — Preguntó Itachi mirándonos a ambos con su típica expresión en blanco.

Shisui y yo nos miramos un momento, pero siendo él quien había tenido el principal encuentro con el líder de la raíz anbu, fue quien tomó la palabra para responder — La misión que tenía hoy, era para usar mi Kotoamatsukami sobre tu padre Itachi, de esa manera podríamos conseguir tiempo para evitar el golpe de estado, de igual forma el Hokage prometió hacer lo posible para que la aldea deje de desconfiar de nosotros y las cosas puedan verse un poco más tranquilas; en general ese era el plan, pero Danzo interfirió antes de que pudiera reunirme contigo, él no confía en mí y piensa proteger solo a Konoha, con sus propios medios, para ello planeó robar mi sharingan, claro que antes de conseguirlo apareció Sakura y lo detuvo — Me lanzó una corta sonrisa antes de añadir — Aunque me pregunto si querías matarme de igual modo, mira que lanzar una bomba de humo venenoso cuando había sido golpeado.

— En parte tenía la intensión, pero me dije que por mentirme merecías un castigo más severo que la muerte — Bromeé un momento y disfruté su expresión escandalizada, aunque sabía que en realidad estaba actuando — Es una broma, en realidad sabía que Danzo se alejaría lo suficiente para darme tiempo para ir por ti y darte el antídoto, tenía esperanza de que lograra inhalar un poco, después de todo no era mortal, aunque tenía un efecto paralizante, pero nada de lo que no pudiera recuperarse luego.

— Suenas casi como si a él si desearas matarlo — Lo pensé un momento, la verdad nunca había tenido intenciones asesinas contra el sujeto, pero realmente nunca me cayó bien, especialmente luego de enterarme que había enviado a Sai para matar a Sasuke, también, en una ocasión le había escuchado a Tsunade decir muy molesta que ese viejo había tratado de retener a Naruto en una especie de celda, aunque de eso mi amigo no se enteró nunca al mi maestra luchar con uñas y dientes por mantener al viejo a raya, ahora de igual modo estaba hostigando a Shisui; realmente ese hombre podría matar a sus camaradas si creía que no eran convenientes para la aldea.

— Nunca lo pensé, pero no me agrada, especialmente con lo que hizo hoy, parece estar dispuesto a matar a todo aquel en que no confié o no le sirva, entiendo que hay ciertas medidas que uno toma para evitar desgracias, pero esto simplemente es absurdo, aquel que levanta la mano contra un camarada sin que este haya hecho nada, solo puede ser peor que la escoria, no debería siquiera vivir — Realmente el tema me molestaba, pero me detuve cuando noté las miradas sorprendidas en los dos varones. — ¿Qué?

— Honestamente pienso que tu lado oscuro es algo que no quiero ver. Como sea ahora tenemos un problema que solucionar y es lo que vamos a hacer, Están a solo unos minutos de comenzar la reunión y aún tenemos que tener en cuenta que probablemente Danzo este vigilando los alrededores — Itachi frunció el entrecejo y me miró.

— También está el detalle que es probable que vaya por Sakura — Ante su preocupación me encogí de hombros y suspiré.

— No sería raro, de hecho lo estaba pensando, pero no podemos detenernos por algo así — Ahora fui yo la que recibió sus miradas molestas.

— ¿Algo así? Es tu vida de la que hablamos Sakura, no queremos ponerte en peligro, es por eso que no dijimos nada — Me encogí ante la reprimenda de Shisui, pero especialmente la mirada de Itachi me ponía los pelos de punta.

— No me refiero a arriesgar mi vida, hablo de que no debemos detenernos a pensar demasiado en que van tras nosotros, es mejor que enfoquemos nuestras energías en pensar en una estrategia para solucionar este lio — Aparté la mirada un tanto avergonzada por la situación.

— Bien, en ese caso te diré el plan — Inicialmente me sorprendió ver que Shisui ya lo tuviera, pero después de pensarlo un poco, recordé que en realidad no debería asombrarme de este aspecto, por el contrario, esto debería ser lo más común. Itachi y yo nos acercamos a Shisui, y luego de eso escuchamos con atención sus palabras, procurando no perdernos ningún detalle, aunque cada palabra que él decía me hacía sentir cada vez más ansiosa, consciente de que lo que él proponía era arriesgado, y cualquier tipo de error podría terminar en dolorosas consecuencias. — ¿Han entendido?

— La mayoría — Solté con un suspiró antes de añadir — Para no levantar sospechas irán a la reunión… pero Shisui, no vayas a arriesgarte demasiado, después de todo no sabemos…

— Lo sé, no hay garantía de que funcione, pero por el momento es lo mejor. Si en esta ocasión no sale, tendremos que considerar otras opciones — El silencio se posó sobre nosotros un par de momentos, recordándonos la gravedad de la situación, aunque poco después Shisui volvió a hablar. — Itachi encárgate de dejar a Sakura a salvo en mi casa.

— Hn — Junto a este sonido vino asentimiento de cabeza, además de una mirada completamente seria.

— Insisto en que no hay que tratarme como una tasita de cristal, pero estoy de acuerdo en que sería peligroso ir a casa ahora, estar dentro de los terrenos del clan Uchiha es más seguro por ahora, y como no puedo asistir a sus reuniones clandestinas — Ambos enarcaron una ceja y yo sonreí con fanfarronería.

— ¿Clandestinas? — Repitieron ambos, lo cual internamente me hizo reír.

— ¿Lo negarán? No, no respondan, no es el momento, tenemos que movernos y el tiempo se nos acaba — Los dos suspiraron, para luego enderezarse.

— Tienes razón, no hay tiempo — Shisui miró a Itachi — Nos reuniremos nuevamente en el templo Nakano, traten de no entretenerse demasiado con los anbu que seguramente rodearán la zona cercana.

— Shisui, no dejes que otra vez te tomen por sorpresa y promete que una vez termine la reunión irás directamente a casa — él asintió y me sonrió para tratar de tranquilizarme.

— No dejaré que coloques esa expresión de nuevo, así que puedes estar tranquila — Ahora se mostró serio y me tendió un pequeño objeto, el cual recibí con cuidado — Esa es la llave de repuesto de mi casa, mantenla contigo, no le abras a nadie, yo tengo la original así que solo yo entraré, mantente oculta en todo momento y…

— Se las recomendaciones básicas para la supervivencia cuando se está siendo perseguido, así que puedes estar tranquilo. — Parecía que quería volver a suspirar, pero se contuvo, en cambio a eso cerró un momento los ojos y asintió, luego simplemente se dio media vuelta dándonos la espalda.

— En ese caso comencemos, recuerden lo que tienen que hacer… — Antes de que pudiera continuar Itachi y yo ya habíamos hecho un clon de sombras respectivamente, los cuales luego de un momento se movieron en las direcciones en que debían ir.

— Ve Shisui — Proclamó Itachi, haciendo notar el tono firme tras sus palabras, un pequeño indicativo que lograba transmitir la confianza, tanto hacia él como hacia lo que teníamos que hacer.

El mayor no pronunció más, en cambio desapareció del lugar, dejándonos solos, mientras contábamos tres minutos desde la partida de nuestro amigo, e íbamos reduciendo nuestras presencias. — Vamos — Susurró mi acompañante, para seguido a esto comenzar a moverse, aunque no sin antes comprobar que yo le seguiría.

El plan era relativamente sencillo, pero siendo los anbu de Danzo, quienes tenían la vista puesta sobre nosotros, era mejor ser precavido, por ello los dos habíamos hecho clones, los cuales harían el reconocimiento preliminar del área, y alejarían a posibles atacantes, claro que al mismo tiempo el que nos mantuviéramos en un bajo perfil, sin permitir que nuestras presencias se notaran y que nos moviéramos completamente en silencio, hacían parte de la estrategia; Shisui por otro lado, se movería a su anormal velocidad para evadir a cualquier ninja que estuviera a más de un rango de cinco kilómetros, además de ellos estaría alerta para plantar un rápido genjutsu, así inhabilitaría a quien trata de atacarlo en el caso de que llegara a estar muy cerca. En esos momentos todo me parecía surrealista, el estar saltando por los árboles junto a Itachi, el haber ayudado a Shisui, el tener una diana en la cabeza producto de haber ayudado a mi amigo… todas y cada una de las cosas que acababan de pasar comenzaron en algún momento a ser casi ajenas, parecía como si parte de mi consciencia pasada hubiera tomado más fuerza, trayéndome consigo los recuerdos de lo que no pasaría, pero que en algún momento pasó, y mezclándolos con el ahora, haciendo que al final en el fondo de mi cabeza surgiera una fuerte incomodidad. La mano izquierda de Itachi se levantó, justo antes de detenerse, y yo al ver esto me quedé quieta una rama más atrás, esperando y observando alrededor; sin previo aviso el movimiento entre las ramas cercanas se hizo presente, así que suavemente me deslicé contra el tronco del árbol en que me encontraba, y pegándome a la corteza me quedé atenta a cualquier ataque.

El tiempo pasaba lentamente, y a medida que esto ocurría, era más consciente de los sonidos del bosque, poniéndome cada vez más nerviosa. Finalmente mis ojos captaron la silueta de un anbu que esperaba atento a cualquier tipo de movimiento cercano, estaba tan quieto como Itachi y yo, además de ello parecía tener todos sus instintos de cacería arriba, lo cual solo significaba problemas. Miré hacia Itachi, quien parecía que había detectado otra presencia un poco más allá, eso nos dejaba rodeados y con pocas probabilidades de escape. ¿Cómo habían sabido donde estaríamos? Esa pregunta era realmente algo que me incomodaba, pero en esos momentos la prioridad era pensar la manera de salir de allí. Itachi era un factor que Danzo no conocía, así que solo estaría tras de Shisui y de mí, por consiguiente la mejor manera para que saliéramos de eso era que yo me lanzara a distraerlos mientras Itachi determinaba cuantos anbu habían enviado tras de mí y lentamente eliminaba a los que no pudiera manejar; al menos ese era mi plan, ahora la cuestión era que Itachi no se molestara por lo que haría y al mismo tiempo entendiera mis intenciones, por ello antes de cualquier cosa le miré por un par de segundos, para seguido a esto en un rápido movimiento sacar dos kunai de mi porta shuriken, los cuales lancé hacia nuestros perseguidores, justo al tiempo en que de un salto salía de la zona, y me dirigía en otra dirección diferente a la original, pero procurando que la distancia no fuera un impedimento para poder llegar en poco tiempo.

El sonido del metal siendo repelido no tardo en escucharse por el claro, además de las presencias que se habían elevado justo detrás de mí, por ello justo cuando caí, y para lograr mantener su atención, expulse el chakra que había concentrado en mi pie derecho y conseguí hacer temblar el terreno, pero sin llegar a formar mayores deformaciones, después de todo no quería llamar la atención del clan Uchiha. A pasos veloces, volví a ubicarme sobre las ramas, para seguir corriendo de los anbu, aunque en conjunto a esto estaba observando el terreno y ubicando a mis perseguidores por el sonido que hacían al saltar y la firma irregular de su chakra, con lo cual mostraba su estando de agitación. Según podía percibir tenía a al menos cuatro cerca, de los demás desconocía si me seguían o no, pero esperaba que no fueran así, puesto que no quería que la pelea llegara a elevar más su grado de dificultad y riesgo. Girando levemente la cabeza, para poder mirar de reojo, pude apreciar que uno de los anbu se preparaba para lanzarme algunas kunai con sellos explosivos, así que volviendo mi vista hacia el frente tracé un rápido contrataque, en el cual en el siguiente árbol que tuve al frente, en vez de calcular mi apoyo sobre las ramas, lo hice sobre el tronco, el cual use para impulsarme con chakra acumulado en mis pies y tener un rápido retroceso, con el que logré pasar de mis perseguidores y ubicarme a sus espaldas, donde saque mis propias armas y usando el jutsu de shuriken que había entrenado desde hacía años lancé las kunai, para aumentar la distracción de ellos en su intento por desviarlas dándome tiempo para volver a caer contra el tronco de un árbol y casi volver a usar la misma técnica de antes, la diferencia fue cuando, en vez de pasar de largo, me dirigí directamente al anbu que tenía más cerca y le golpeé con la fuerza suficiente como para lanzarlo contra su compañero más cercano, el cual mientras desviaba mis armas no pudo detener el impacto y por consecuencia fue alcanzado por el cuerpo, derribándolo de su lugar.

Estaba por aterrizar en una rama cuando sentí el ataque inminente por mi espalda, así que velozmente saqué otra Kunai de mi porta shuriken para alcanzar a desviar las armas que me habían lanzado, luego al caer tuve que bloquear una patada con mi brazo derecho, con lo que se inició una batalla de taijutsu, en la cual, por mí posición me vi obligada a retroceder en más de una ocasión, llevándome lentamente hasta donde estaba el cuarto anbu, que al tenerme al alcance necesario trató de apuñalarme con una kodachi; afortunadamente para mí, logré sentirlo a tiempo, así que conseguí girar en el último momento, consiguiendo solo un pequeño corte en el lateral izquierdo de mi cadera. Tuve que dar dos saltos hacia la derecha para alejarme de mis oponentes y poder reevaluar mi situación, aunque solo tuve un momento antes de que los dos anbu volvieran atacarme, esta vez empleando senbon, los cuales procuraron dirigirlos en las direcciones que limitaran mis movimientos, dando como resultado que terminara chocando de espaldas contra un árbol.

— Eso es todo — Dijo el de la kodachi, quien me atacó con una estocada directa, la cual en esta ocasión detuve con mis manos llegando a adquirir una herida algo profunda, pero que comencé a curar al instante, mientras que al tiempo en un jalón le acercaba a mí, para a continuación con mi pierna derecha cargada en chakra golpearle en el abdomen.

El sonido de los huesos al romperse, además de la conocida sensación de fractura en el lugar de impacto, pude percibirlas con claridad, claro que eso no era para extrañar considerando que, luego del impacto, el anbu salió volando varios metros más allá, para chocar finalmente contra al menos dos docenas de árboles. Sin perder de vista al último oponente y consciente de que estaba por atacarme por un lateral, giré la kodachi que antes había detenido con mis manos, y ahora tomándola por el mango, la dirigí hacia el anbu, el cual tuvo que retroceder un par de pasos para evitar ser cortado por el arma. Tomando una posición completamente defensiva, pero manteniendo la pequeña espada en su dirección, proseguí a dejar circular mi chakra para sanar las heridas que había adquirido, mientras esperaba cualquier acción de mi oponente, pero luego de un par de segundos en que no se movió caí en cuenta de que su postura se había relajado y parecía estar dando por terminada la lucha, aspectos que me alertaron de que algo no estaba bien, así que siguiendo mis instintos apresuradamente me giré, solo para ver cómo sobre mí caía un quinto enmascarado, dándome finalmente las noticias de que estaba en un serio aprieto.


Buenas! Ya dije arriba que había pensado en subir ayer pero por tiempo y revisión no había podido.

Como sea diré antes de responder los comentarios que esto se divide en dos, principalmente porque no quería tenerles esperando tanto tiempo por capítulo, (ya es suficiente con un mes). Asi que en el siguiente cerraremos esta parte de la historia. El motivo es porque quiero que quede bien hecho, que se note como se soluciona el asunto sin llegar a ser demasiado simple ni complejo, pero al mismo tiempo dando esa sensación de peligro.

Igualmente tuve que investigar de venenos, asi que le pregunte a una amiga que estudia medicina y ella me ayudo dandome unos documentos para leer, pero al estar la mayoría en idioma médico, solo pude rescatar algunas cosas, por eso es una explicación sencilla.

Para los que no leyeron arriba las notas hay una palabra que dice "Ipso facto", No es un error, esa palabra existe y proviene del latín, y traduce como inmediatamente o en el acto, les dejo para los que no lo supieran.

Bueno, eso es lo que quería decir. Ahora las respuestas!

Daliaovperez: Bueno, quisiera saber porque piensas que es malo que recuperen sus recuerdos. Pregunto no más me causa curiosidad ^^. Y lo que vendrá con Itachi y Sakura luego buajajajaja ok eso será después. Te mando Saludos!

Naomipy: Cielos, tienes razón! No me había percatado de ese error, te agradezco por resaltármelo jejeje ^^ creo que hace tiempo el auto corrector me corrigió al respecto (la palabra existe con "m", por lo cual creo que lo ignoré y comencé a escribirlo así T-T) Bueno no siendo más te agradezco nuevamente la corrección y te mando un abrazo!

Fangirl1266: Cof cof, me sorprende todo lo que leíste en tan poco tiempo, eso quiere decir que es bueno buajajaja. No soy fan del spoiler asi que tendrás que averiguarlo por ti misma.

Me alegro de conocerte y espero sigamos leyéndonos. Saludos!

ItzeelJs: ¡Vaya! Me alegro mucho que te guste la historia y el cómo manejo la narrativa, es muy grato saberlo. Siempre trato de mantener una coherencia en los personajes, pero dándole el ambiente que siempre se busca en este tipo de relatos, así que me alegro que la personalidad de Itachi te guste :D eso siempre me permite pensar que voy por buen camino. Reitero, los personajes super poderosos de la noche a la mañana no me agradan, siempre prefiero que se dé un avance lento pero seguro, dando como resultado una historia lo más coherente que se pueda, además es mejor cuando te explican desde el principio el como ocurrieron las cosas.

Oh más adelante tendremos unos capítulos para explicar la perspectiva de Itachi, asi que no te angusties, aunque aún faltan varias cosas para eso, pero ten por seguro que tendrán la vista desde la perspectiva de Itachi.

No tengo nada, esta cuenta fue creada para subir este fic xD, aunque he sido escritora de fanfic desde antes mis otros fic están subidos en otro foro y bajo otro nombre.

En fin, me alegro de conocerte y espero nos sigamos leyendo. Saludos!

Dulcecito311: Totalmente diferente a la versión anterior ¿no? Bueno como anteriormente me expresaron que Naruto casi no salía, pienso que en esta versión podemos hacer que aparezca más (aunque este capítulo no fue el caso). Sasuke por otro lado quiero que se mezcle la inocencia y bueno ya sabes el resto, xD pero igualmente el que aparezca siempre ayuda mucho al desarrollo del fic, igualmente el que ella lo moleste (aunque en la serie original no pasaba), da como la sensación de juego de niños, asi que se combinan muy bien ambas cosas.

Oh Shisui, que haríamos sin él, siempre con su buen humor :3 honestamente me alegro de haberlo incluido, es uno de mis Uchiha favoritos y espero en esta versión mostrar su lado maduro (mucho más que el anterior) pero sin llegar a que raye en su alegre personalidad.

Espero te haya gustado la primera parte, la segunda trataré de hacerla aún mejor, para que haga honor al resto de la historia. Sabes que aprecio mucho tus comentarios, y espero seguirlos viendo, siempre me alegran tus apuntes :D te mando un abrazo y nos seguiremos leyendo.

Grace-ayo: Hahahaha en parte me alegro que no te deje dormir al imaginarte lo que pasará, pero solo espero que no afecte a tu vida diaria. Lamento si me tardo mucho, pero es lo que hay con mi tiempo *suspiro*, pero bueno espero que valga la pena la espera. Creo que los personajes que rondan a Sakura siempre son bastante interesantes, especialmente para jugar con ellos, por eso las situaciones se presentan para ese tipo de cosas (especialmente las de Naruto, Sasuke y Shisui) creo que igualmente lo que seguirán en los siguientes capítulos te gustará.

Creo que muchas dudas se han resuelto y otras se habrán formulado, eso es lo hermoso de las historias. Lo de Itachi se sabrá a su debido tiempo, así que no hay que desesperar, por el momento hay que disfrutar lo que hay. Espero que nuevamente nos leamos pronto, te mando saludos :D y te doy la bienvenida, cualquier inquietud puedes remitirla y la contestare. (solo exceptuando lo que lleve a spoiler)

Yaleth: Cof cof, creo que estoy loca por querer re escribir 60 capítulos pero hasta ahora han valido la pena, estoy conforme con la redacción, el control de cada uno y además con lo que puedo agregar. Tratare de dar momentos más… ligeros, así no será tan doloroso esperar por el beso hahahaha.

Lamento la poca frecuencia de actualización, pero ya he expresado que mi tiempo es diferente al que tenía antes, asi que no puedo traer capítulo cada que quiera, por eso mismo dividí esta mini saga, porque a este paso hubiera tardado más. Entre tantas cosas he tenido que afrontar algunos problemas y demás asi que no puedo estar siempre conectada.

Espero que el capítulo hasta ahora sea de tu agrado :3 y lo que falta, espero poder plasmar como se debe todo el rollo.

Respuesta PD1: Si, creo que Yui es un personaje muy… querido hahaha me alegro porque es mi creación :D también el pequeñín y Hayato. Por otro lado Sai, cielos, tengo planeado algo para él pero será luego, lamento si es lento todo el asunto. Veré que hago con lo de las actualizaciones.

Respuesta PD2: ¿Qué te pareció la tensión del capítulo? Espero que haya movido fibras sensibles, porque quiero que sea de ese modo, como sea voy a seguir mejorando y voy a mirar cómo me arriesgo para el siguiente.

Respuesta PD3: Me alegro que la explicación te haya dejado satisfecha, lo importante es que se comprenda el fic, asi que es un honor poder hacer este tipo de aclaraciones.

En serio me alegro que aunque hayas sido una lectora fantasma, ahora me dejes tus opiniones, seguiré esforzándome y voy a mirar que hago para que los capítulos sean más seguidos.

Con respecto a tu otro comentario, lo entiendo, hahaha si yo también me desespero cuando releo el fic y digo "¿Por qué no les hice besar aquí? El momento es perfecto!" luego recuerdo de que soy mala con las relaciones y se me pasa, además de que no encontraba el momento Justo para eso hahaha pero bueno como dije miraré como hago para que los que ya leyeron se sientan a gusto releyendo la historia.

Te deseo feliz noche y te mando Abrazos!

Tenshin anime: Descuida, mírame a mí me tardo subiendo capítulo, así que tomate tu tiempo para comentar, no hay lio, yo soy paciente… ok un poco pero igualmente comprendo las circunstancias de cada uno. Me alegro que te gustara el contenido general del capítulo, tengo que decir que lo de Naruto y Sasuke es casi nuevo, puesto que las situaciones originalmente ocurrieron en la primera versión, pero cuando reescribí decidí agregar un par de cosillas más, y quitar otras que me parecían demasiado exageradas, por ello estoy contenta con el resultado. Gracias por esperarme, seguiré esforzándome, espero este capítulo te haya gustado, y que el siguiente igualmente ponga a volar corazones.

Sin más espero nos leamos pronto, suerte con tu tesis! Y te mando buenos deseos, ánimos y un abrazo!

Gest: Y lo que vendrá hahaha. Gracias por comentar siempre, y espero te siga gustando. Me esforzare! Saludos!

Seia9175: ¿Qué tal? ¿Te gustó? Y lo que falta por venir buajajajaj ¡Saludos!

Animo: Gracias, en verdad es un honor que te guste. Por supuesto que la continuaré, pero cada cosa a su tiempo, por el momento tengo que publicar mensual, pero espero algún día publicar cada dos semanas o algo así. En fin saludos!

Bueno eso es todo, su escritora se despide, espero verlos pronto aunque no prometo nada. Saludos!