Muy buenas noches queridos lectores impacientes y pacientes.

Es una hermosa noche de Julio en la que finalmente aparezco es hermoso y aunque deseo decir muchas cosas con detalle para ustedes lo cierto es que no tengo energía, de hecho, no me esperaba poder subir capitulo hoy, pensé que sería el Domingo pero… bueno que les digo he estado tan enrollada y me he sentido tan culpable que me dije, aguanta un poco más y explicate, asi que lo haré, pero no en esta sección.

Les pido por favor lean las notas finales con detenimiento ya que creo les será ilustradoras y bueno, la verdad apreciaría que lo hicieran ya que en serio hay unas cosas que me preocupan, pero me gustaría expresar.

Sin más, les dejo el capítulo.


CAPÍTULO 13 — FIRME —

Sasuke parecía perdido en sí mismo, sus ojos no reflejaban nada y no parecían estar fijos en ningún lugar en específico, incluso si en estos simplemente estábamos reflejados. Solo cuando su hermano pronunció su nombre el niño parpadeó y enfocó su mirada, esta vez, permitiendo que las emociones se reflejaran en sus ojos. Una neblina Oscura había caído sobre su expresión, la ira fue solo una de las tantas emociones que parecían embargarlo, no obstante, esta era la más visible y la que más me preocupaba en esos momentos. — Nii-san, Sakura. — Prácticamente escupió nuestros nombres cuando habló, usando un tono despectivo y cargado de odio.

Para mí fue un shock escuchar su tenor de voz tomar matices tan oscuros, no obstante, si a mi compañero también lo afectó no lo demostró en lo absoluto, al contrario, manteniendo su mismo estoico semblante, procedió a ignorar por completo la forma en que su hermano menor se había dirigido a nosotros y le dijo —: Ya que has regresado de tu entrenamiento, ve a cenar, lo necesitarás si quieres seguir con el entrenamiento.

El mayor se movió, poniéndose de pie al tiempo en que me levantaba en brazos, lo que me sacó un grito ahogado de sorpresa mientras, por inercia me aferraba a él, abrazándolo por el cuello para mantener el equilibrio. — ¡Itachi-kun! — Con fingida indignación proferí, pero mi protesta no fue respondida, de hecho, lo único me aseguraba que había registrado mis palabras, fue el movimiento leve de sus ojos, y el pequeño apretón en mi cintura. La atención del mayor estaba puesta en su mayoría sobre su hermano, así que, consciente de que en el momento no conseguiría más respuesta que la ya suministrada, solté un suspiro inaudible y también miré hacia Sasuke.

El joven Uchiha parecía estar en una pérdida de palabras total, ya fuese por la impresión del momento o la cólera que reflejaban sus ojos de obsidiana, el punto era que esto no podía significar nada bueno. Desviando mi mirada, en un intento de evitar afrontar el estado de ánimo del niño, me dedique a evaluar su estado en general. Sus ropas estaban llenas de tierra, cortes y alguno que otro rastro de sangre seca muy seguramente de sus magulladas manos y de los arañazos que rondaban sus brazos y piernas, sus cabellos negros tenían pequeñas tonalidades de café terroso, además de estar más despeinados de lo usual. En circunstancias normales me ofrecería a sanar aquellas heridas, pero en mi condición actual dudaba que consiguiera sellar un rasguño sin desmayarme. Como si pudiera acceder a mis pensamientos finalmente Itachi me observó y dijo —: Ya mi madre se encargará de sanarlo por ahora tienes que descansar.

—L-lo sé, solo…

—Te preocupa, lo entiendo. — No podía discutirle, si usualmente era fácil de leer, incluso cuando estaba en guardia, en esos momentos en que no tenía energía para fingir, sería aún más sencillo, por ello solamente hice un puchero.

Como si mágicamente el menor hubiera recobrado el don del habla, pronunció con inquietante tono controlado — ¿Exactamente qué estaban haciendo? —Tanto mi amigo y yo no respondimos de inmediato, al contrario, posamos nuestras atenciones sobre él y le observamos unos instantes antes de que yo me decidiera a contestarle —: Yo… me desmaye hace un momento por falta de chakra e Itachi-kun detuvo mi caída, solo se aseguraba de que no me hubiera lastimado.

Su expresión se convirtió en una mueca de burla arrogante, — ¿Eres tan torpe como para permitirte perder tanto chakra? Pensé que eras más lista que eso. — su tono tenía algo ácido detrás, lo que me hizo estremecer.

La presencia de Itachi cambió repentinamente, se elevó levemente haciendo que el ambiente fuera aún más pesado, al tiempo pronunció de forma pausada —: Sakura tenía un trabajo pendiente que requería que ella fuera el médico de cabecera, como sabrás es una de los pocos médicos calificados para hacer una intervención quirúrgica, fue la única fuente constante de chakra así que es normal que haya terminado más agotada que el resto. — Su mirada no era dura, al menos no para su hermano, pero si guardaba una firmeza inquebrantable que pareció turbar al menor, no obstante, no fue suficiente como para que desistiera de su ataque verbal.

— No es motivo para que te vuelvas su burro de carga…

— Itachi-kun no es ningún burro de carga —intervine yo, esta vez, molesta por la comparación le mostré una expresión desafiante al niño — él está siendo amable, además somos un equipo, amigos desde hace mucho… creo que sabes bien que cuando un compañero o amigo está teniendo problemas lo normal es prestarle tu hombro para ayudarle. Si aún no has entendido algo tan básico como esto entonces eso quiere decir que Kakashi y yo hemos fallado en darte esta lección.

Se hizo un profundo silencio entre los tres, puesto que era la primera vez que le hablaba con tal dureza al menor. Desde que era niño le había concedido el respeto y lugar que desde antaño le había prodigado, pero ahora, escuchando sus palabras hirientes contra su hermano y contra mí, la sangre había comenzado a hervirme. Realmente no me importaba ser objeto de su ira, pero en cuanto a su hermano mayor la situación era diferente, él no había hecho nada malo, no merecía el trato que el niño estaba expresando, ni el desprecio de sus acciones. — No eres quien para… — Antes de que el menor consiguiera terminar sus palabras fue interrumpido por la severa voz de su madre, que había llegado al lugar.

— ¿Aún están dando vueltas por ahí? Creo que había dicho que fueran a descansar. Si no quieren afrontar las consecuencias les recomiendo que se den prisa. — La mirada amenazante de la mujer me hizo correr un escalofrío y sentirme enferma.

— Por supuesto madre. — Escuchar el suave y controlado tono de Itachi me provocó una dosis de envidia, No podía imaginar cómo conseguía no salir intimidado con tal amenaza y menos si provenía de una mujer como ella.

Con una última inclinación de cabeza y lanzando una mirada a su hermano, Itachi nos giró y condujo a través de los pasillos que daban hacia las habitaciones. No pasó mucho tiempo para que la familiar puerta corredera se hiciera presente y me encontrara siendo depositada sobre el tatami, justo al lado del futon que su madre me había preparado. Una vez abajo un suspiro escapó de mis labios junto con la tensión que habíamos experimentado momentos antes — Shannaro —murmuré mientras me giraba para ver a mi acompañante.

— ¿Estás bien? — El suave tenor en la pregunta mitigó levemente el sentimiento de inquietud formado en mi cabeza, sin embargo, no retiró la molestia causada por su hermano.

—Sí, solo algo desconcertada por el comportamiento tan… infantil de Sasuke-kun, ¿Por qué tiene que comportarse como…?

— Un niño —complemento mi acompañante acercándose lo suficiente como para que tuviera que levantar la mirada para ver sus ojos — Y lo es Sakura, aún es un niño.

Tenía razón, pero algo en mi interior no podía simplemente dejar que esta se convirtiera en la excusa perfecta para que no asumiera la responsabilidad de los hechos, había sido tan grosero, tan poco lógico que hacía que mi sangre se encendiera. —Entiendo que sea un niño, pero… ¿Por qué se molestó? En primer lugar, no estábamos haciendo nada malo y… bueno es cierto que podía ser confuso para él al principio la forma en que nos encontró, pero le explicamos así que no tiene que ser tan grosero.

— Sasuke suele ser irracional en ocasiones, especialmente cuando siente que le están arrebatando algo, suele ser posesivo con lo que considera propio. — Sus ojos guardaban palabras que no parecía dispuesto a pronunciar y que poco logré comprender… ¿Acaso insinuaba que le molestaba que estuviera cerca de él? Pensaba que hacía mucho había borrado aquel complejo de hermano y se había dispuesto a aceptar finalmente que era normal que Itachi y yo compartiéramos tiempo juntos.

— No lo entiendo —dije soltando un suspiro.

— No tienes que hacerlo ahora, solo trata de descansar, mañana tendremos mucho trabajo — una pequeña y amable sonrisa atravesó su rostro brevemente, justo al tiempo en que se giraba para marcharse — Descansa Sakura.

— Descansa Itachi-kun y gracias. Nos veremos en la mañana —me despedí dándole una tímida sonrisa.

Con el cierre de la puerta corredera, mi humor cambió radicalmente y finalmente permití que el cansancio obrara en mí, por ello no tardé en prepararme para dormir y caer completamente sobre la almohada. El aroma a pino fresco y hoguera inundó mis fosas nasales, y pronto mi mente se dejó llevar a la inconsciencia.

-0-

Una brisa suave y cálida acariciaba mi rostro y hacía mover mis cabellos. Los rayos del sol caían con ligereza, una que casi podía pensar que estaba premeditada para no lastimar a quien tocara, su brillo era reflejado en el familiar río que en esos momentos estaba observando desde el puente. Aquella imagen era tan nostálgica que me sumergí de lleno en los recuerdos que abarcaban ese lugar, por ello no fue una sorpresa que no me percatara inmediatamente de que no me encontrara sola o que alguien venía corriendo directamente hacia mí; solo cuando mi nombre fue pronunciado con fuerza mi cerebro salió de su estado letárgico y me obligó a buscar al dueño de la voz.

— ¡Sakura-chan!

— ¿Naruto? — Pronuncié sorprendida al ver a mi viejo amigo correr hacia mí con una expresión decidida. Lo que me mantenía confundida no era este pequeño hecho sino su apariencia adolescente que en pocos momentos me alcanzó — ¿Qué estás…? — Las palabras murieron en mi garganta, al muchacho tomarme por la cintura y arrojarme al suelo junto a él.

Incluso si no comprendí inicialmente que era lo que había ocurrido, poco segundos después si entendí la razón de sus acciones impulsivas y poco delicadas. Un destello electrificado claramente de un jutsu cayó con un estruendo, justo en el sitio donde momentos antes había estado de pie; esto evidentemente era una de las formas de chidori. Que Naruto de 16 años estuviera allí y el inminente ataque me hizo consciente de la situación y de quien era el perpetrador, incluso antes de que el rubio pronunciara su nombre. — ¡Idiota! ¡Casi lastimas a Sakura-chan!

Justo después de sus palabras el rubio se levantó y se posicionó delante de mí. Alarmada por la agitación de Naruto inmediatamente me puse de pie y observé con horror como Sasuke se acercaba a nosotros con una expresión que mostraba claramente su ira. Un escalofrío me recorrió y mis instintos de supervivencia se elevaron ¿Qué acaso Shin no había dicho que eso no podía ser posible nuevamente? De todas formas, era inútil pensar eso en esos momentos, ahora lo que importaba era enfrentar la presente situación.

— Callate perdedor y apártate — El Uchiha se detuvo al inicio del puente, su sharingan resplandeciendo con un destello amenazador que helaba la sangre, lo cual me llevó a tomar una posición defensiva en caso tal que se requiriera la defensa.

— ¡Y luego te quejas de la razón por la que Sakura-chan permanece lejos de nosotros! Tu actitud es insoportable. — Naruto se acercó más, ocultandome de la mirada del pelinegro. Su recriminación en vez de hacerle reflexionar lo que provocó es que el estado de ánimo del aludido empeorará, y aumentó la presión a nuestro alrededor.

De forma inconsciente acumulé chakra en mis puños, esperando el siguiente movimiento. — Naruto, si no te apartas, no responderé si terminas herido —dijo Sasuke dando un paso al frente, justo al tiempo que el sonido del chakra electrificado comenzaba a aparecer, incluso si no tomo forma del chidori.

— Si tratas de herir a Sakura-chan no te lo perdonaré… ¡La última vez provocaste todo este desastre por tus acciones irreflexivas! — Incluso aunque sus palabras sonaban a advertencia, el rubio se lanzó directamente hacia Sasuke, quien le esquivó con facilidad y luego le pateó, arrojándole contra los cedros que rodaban el puente.

— Y buscas pelear conmigo. Si cuando estabas en tu máxima capacidad no pudiste vencerme ¿Qué te hace pensar que podrás ahora que tus fuerzas están sesgadas por el imbecil? — Se burló el Uchiha dándole la espalda y ahora enfocándose en mí.

— Aun así, no dejaré que dañes a Sakura-chan… ¡Ya has hecho suficiente con…!

— ¡Cállate! —rugió Sasuke ocultando su mirada de nosotros tras su flequillo, al menos así fue por el tiempo que tardó Naruto en ponerse en pie. — He escuchado tus primeros cien reclamos, así que guardate tus propias opiniones para ti mismo, en este momento mi asunto no es contigo.

— Oh claro… te quejas de la falta de actividad mientras estamos aquí y lo que se te ocurre cuando Sakura-chan aparece es directamente armar un peor escenario, me parece muy inteligente… ¿Y yo soy el idiota? — Naruto se burló.

— Quieres llamar la atención a pesar de que no podrías ni provocarme un rasguño en tu estado actual… bien, si quieres que te recuerde a donde debes ir lo haré antes de que continues estorbando. — El violento chakra del pelinegro se hizo presente en la forma del chidori en su mano izquierda, al tiempo que su mano derecha se dirigía a la espada que reposaba en su cinto.

Previendo que este enfrentamiento podría resultar contraproducente en más de un sentido, tomé la decisión de intervenir. Algo que Sasuke estaba en lo correcto era que, si tenía algún problema conmigo, yo no iba a esperar como antaño a que Naruto lo solucionará mientras esperaba atrás, espacio temporal roto o no, yo tenía mis propios principios y si mi apariencia inalterada a la actual decía algo, significaba que yo tampoco estaba limitada a mi antiguo yo. Por ello, antes de que el pelinegro consiguiera ejecutar su técnica, en una explosión de velocidad ataque directamente. El Uchiha notando mi repentino arranque se giró a tiempo para conseguir ver y esquivar por solo unos milímetros mi devastador puño, no obstante, para garantizar que tomara una distancia prudente mi siguiente ataque lo ejecuté con mi pierna izquierda al girar por mi espalda e intentar conectar mi talón con su mandíbula.

Chasqueando la lengua con fastidio, Sasuke retrocedió un par de pasos antes de tomar real distancia de mí, distancia que aproveche para saltar y posicionarme en medio de Naruto y él. — Sakura-chan… —dijo el rubio — No tienes que…

— Naruto, sé que quieres protegerme y lo agradezco, pero si Sasuke tiene algún problema conmigo no esperes que me quede detrás esperando a ver como tratas de razonar con él y sacarme de la ecuación. Tengo la fuerza para luchar mis propias batallas; y… también odio ver cuando los dos terminan peleando, asi que dejame manejar esta situación a mí. — No había retirado en ningún momento mi atención sobre Sasuke, que, aunque trataba de ocultarlo parecía ligeramente sorprendido por mi reacción, claro que eso no cambió su estado de ánimo.

— ¿Así que quieres pelear Sakura? ¿No aprendiste de la última vez? — Su espada fue desenfundada y luego de un giro en su mano me apuntó directamente con ella.

— No va ser igual que aquella vez —respondí dando un paso al frente y apretando mis puños — Si es necesario te daré una buena lección.

Repentinamente Sasuke desapareció de la vista para reaparecer justo a solo un par de centímetros de mi rostro, sin embargo, yo ya estaba preparada para esto. Antes de que él pudiera usar su espada para dañarme giré mi cuerpo hacia la derecha y use mi mano izquierda para tomarlo de la muñeca, deteniendo su movilidad, lo que me permitió enfocarme ahora en el ataque de su puño izquierdo, con el que trato de golpearme por la parte superior de mi cabeza, sin embargo, conseguí bloquearlo con mi antebrazo, desviarlo y asirme de su brazo. Aprovechando mi movimiento Sasuke imito mi agarre y buscó jalarme hacia él, quizás para que pudiera verlo a los ojos, pero ya acostumbrada a combatir con dos expertos del sharingan, me enfoque en mantener mi mirada en su pecho, al tiempo que doblaba mi pierna derecha en medio de los dos y le pateaba con fuerza en el abdomen.

Mi reacción fue tan veloz que esta vez mi embate consiguió conectar sin problemas, empujando a Sasuke con el feroz golpe varios metros más allá, hasta que finalmente se detuvo junto al río. Un quejido escapó de sus labios al tiempo en que comenzaba a toser, parecía que esta vez mis ataques surtían el efecto deseado en él, no le sería tan sencillo esta vez golpearme. — Al parecer tu confianza ha crecido más de la cuenta —escuché que dijo el pelinegro, al tiempo que se reía, aunque este sonido no era para nada alegre, no había nada de gracioso en las profundidades de su voz, lo único que podía percibir allí era un vacío oscuro que convergía en mis recuerdos del último enfrentamiento.

La imagen mental me distrajo unos segundos, segundos que él aprovechó para moverse y atacarme por la espalda, devolviendome el golpe y arrojandome en la misma dirección en la que él había estado momentos antes. Afortunadamente mi respuesta ante el dolor fue rápida y pude prever el siguiente intento de ataque. Volviendo a moverse hacia adelante en busca de esperarme en el lugar donde iba a caer, Sasuke intentó tomarme por el cuello, pero antes de lograrlo alcancé a tomarlo por la muñeca y jalarlo hacia mí, haciéndonos chocar y llevándolo conmigo hasta el suelo donde rodamos un par de metros antes de detenernos, quedando yo sobre él. A pesar de que la cabeza me daba vueltas por el choque, busque levantarme y asegurarme de inmovilizarlo, desafortunadamente para mí, luego de conseguir tomar su muñeca con mi mano izquierda e intentar ir por la derecha. mis intentos se vieron incompletos al él adelantarse y tomar mi mano libre desde la muñeca con su propia mano.

A horcadas sobre él, la posición incómoda fue llevada a una serie de forcejeos entre nosotros en las que en todo momento evité fijarme en sus ojos, siempre llevé mi atención por debajo de su cuello. — Oigan… paren — cerca de nosotros escuché a Naruto que se acercaba, probablemente buscando detener nuestro pseudo combate, que a este punto me parecía más una pelea de niños que una real batalla a muerte, no obstante, quizás fuera así porque hasta el momento no habíamos conseguido dar un golpe sólido, o tal vez porque aunque mi corazón temblaba ante su sed de sangre una parte de mí aún lo apreciaba y le veía como aquel joven gruñón que se estaba preparando para las finales de los exámenes chunin.

— Finges que has cambiado, pero sigues siendo la misma Sakura… te metes donde no te concierne y levantas la cabeza mientras contienes las lágrimas. — Las palabras hirientes del Uchiha no fue lo único que me golpeó, habiéndose inclinado sobre su espalda, sus rodillas golpearon con fuerza mi espalda y me empujaron hacia adelante, arrojandome sobre su cabeza. Mi espalda golpeó el suelo con dureza, sacando el aire de mis pulmones junto a un quejido seco.

Aturdida y tratando de recuperar el aliento perdido me giré sobre mi estómago y comencé a levantarme. Sasuke ya hacía unos segundos estaba en pie, listo para volver a atacar, pero antes de que lo hiciera, dije en un arrebato de ira —: Al principio me sentí tan mal de que solo significara eso en tu vida un estorbo, pero ahora, me alegro tanto que hayas pedido este cambio… este deseo. — Aturdido el Uchiha se detuvo al igual que Naruto quien mostró una expresión herida.

El momento de estupor del pelinegro lo aproveche para levantarme y darle una mirada feroz. Aún no estaba recuperada del todo por el golpe, pero eso no significaba que fuera a quedarme de brazos cruzados permitiendo que me atacara, podía ser que para él seguía siendo la misma niña de antes, pero yo mejor que nadie conocía mis límites actuales. Recobrando el control sobre sus pensamientos, Sasuke estrechó su mirada y permitió que sus ojos pasaran de su sharingan básico al Mangekyo. Al instante que vi sus renovadas fuerzas para la lucha, me tensé y preparé por si se decidía a usar alguna de sus técnicas visuales, sin embargo, en esta ocasión no se movió, tampoco sobrevino ninguno de sus habilidades especiales; no, su ataque fue completamente verbal, al contestar —: ¿Feliz por tener quien te recoja con lastima? Solo porque ellos te hayan permitido formar parte de su círculo no quiere decir que realmente tengas algo que ver con ellos, eventualmente Itachi y Shisui formarán sus vidas dentro del clan ¿Y entonces qué? Es evidente donde quedarás no, un extraño siempre será eliminado del clan, así que deja de interrumpir el orden de… — No permitiendo tolerar sus venenosas palabras y con lágrimas al borde de mis ojos, sin que se lo esperara le planté una fuerte cachetada en su rostro, dejando a los dos muchachos sorprendidos.

— ¡Qué tú no desees que permanezca cerca no quiere decir que ellos sean iguales! Itachi-kun y Shisui siempre han estado cerca, incluso cuando estuvimos separados en diferentes equipos, cuando ocurrió todo el asunto de tu clan… sé que incluso si en el futuro… si en el futuro ellos consiguen alguien que amen y con quien estar, va a estar bien porque estaré feliz por ellos y también les apoyaré, incluso si no nos podemos seguir viendo seguido… Para mí ellos son personas importantes y sería capaz de sacrificar mi vida para salvar la de ellos ¡Al igual que lo haría con vosotros!

— ¡No puedes! — Rugió Sasuke dando un paso al frente.

— ¡Sasuke! — Profirió Naruto cuando el moreno terminó de hablar. — Déjalo ya.

— He dicho que cierres la Boca Naruto, te he dicho que este es nuestro problema.

— Yo también soy miembro del equipo siete, tengo derecho a decir lo que pienso y creo que estás yendo demasiado lejos. — El rubio se colocó a nuestro lado casi en medio de nosotros, lo que nos dejó en un triángulo perfecto.

—Pues adivina que… Sakura parece ser que ha decidido jugar a que no es miembro del equipo siete, así que tu opinión para ella es irrelevante. — Lastimaban, sus palabras me lastimaban más de lo que quería admitir.

— ¿Quién fue el que deseó en primer lugar que Sakura-chan nunca hubiera pertenecido al equipo siete? Tú fuiste quien en se marchó primero de la aldea y causó todo este disparate —respondió Naruto con frustración, — Ella siempre buscó ayudar y tu…

— Siempre se mete en donde no le concierne —interrumpió el Uchiha — especialmente en nuestras batallas, y ahora mismo tu estás jugando su papel idiota, así que apártate.

— Sakura-chan sería bueno que trates de regresar, yo me encargaré de Sasuke así que…

— No —dije finalmente, aun conteniendo las lágrimas — Esto me concierne, aunque Sasuke no lo vea de la misma manera, sigo pendiente del equipo siete incluso en estas circunstancias. Además… ¿Acaso ejercer este tipo de presión no les arrebata chakra a sus cuerpos físicos? Si continúan así no tendrán fuerzas para los exámenes chunin. Shin lo mencionó una vez… si salen de su control sus cuerpos reales comienzan a…

— Es cierto… pero…

— Esta conversación no tiene sentido si solo les perjudica.

— ¿Y de qué otra manera esperas que "hablemos"? — Se burló Sasuke — No hay manera de hacerlo que no sea en este mundo, el que tú abandonaste.

— No abandoné nada —refuté — en un principio yo no fui la que deseé ser arrojada fuera a un lugar desconocido y completamente sola, al menos si hubiera aparecido en la misma línea temporal podría haber entendido que hacer. Tú te quejas de lo que yo hago, pero por mi parte me he tenido que hacer un lugar para sobrevivir en donde no conocía a nadie y todo era… diferente.

— Sakura-chan… —Pronunció Naruto suavemente, pero antes de que continuara con un tono condescendiente le interrumpí. — No me estoy quejando, pero es injusto que me critiques cómo he vivido cuando inicialmente decidiste que no merecía la pena que permaneciera con ustedes. Así que si vas a seguir encaminando tu discurso a que debo alejarme de Itachi-kun y de tu clan, te digo que de una vez puedes desistir porque no te escucharé.

La repentina velocidad con la que el Uchiha me tomó por los brazos nos tomó por sorpresa tanto a Naruto como a mí, sin embargo, no me aparté de su agarre, al contrario, me erguí con toda mi altura y enfrente ahora su mirada, en esa instancia no me importaba correr el riesgo de ser atrapada por su sharingan en un genjutsu, si lo hacía buscaría destruirlo, pero de lo que estaba segura es que en esos momentos prefería enfrentarlo. — ¡No perteneces ahí! En un inicio no debiste relacionarte con ellos.

— ¡¿Tu que sabes de mí?! ¡¿Qué sabes de lo que debí o no debí hacer?! — Introduje mis brazos en medio de nosotros y de un manotazo hice que me soltara, sin embargo, di un paso al frente — Ellos vinieron, ellos aparecieron en mi vida y de ahí las cosas simplemente se dieron, ellos fueron los que me ayudaron cuando más sola estaba. Shisui… Itachi-kun, siempre han estado ahí y de corazón se los he agradecido cada día que puedo. En estos momentos te estás comportando como un idiota, culpandome por algo que no he hecho.

— ¿Eso crees? Eres demasiado ingenua — Un destello cruel alumbró las profundidades de sus ojos. — Has entrado a alterar el tiempo con tu sola existencia. Creo que sabes que el flujo del tiempo mantiene un parámetro, ya te lo he dicho pocas cosas se quedan sin ser alteradas y eso implica el deseo original.

— ¿Qué quieres decir? — Murmuré.

— Lo que te digo es que ese nunca fue, es y será tu lugar. Los únicos amigos que Itachi se relacionó originalmente fueron Shisui e Izumi, cordialmente se relacionaba con sus compañeros de equipo, pero por lo demás no tuvo otra conexión. Es más… sé que Itachi tuvo en algún momento sentimientos por Izumi eso antes de que masacrara al clan. Tu solo eres un error en el espacio temporal de ellos que alteró su relación, pero incluso hay cosas que no cambian ¿No es así? Si ellos tomaran esos recuerdos de sí mismos ¿Dónde te dejaría? — Como si me hubiera apuñalado sentí un fuerte dolor en mi pecho ¿Izumi? Era cierto que ellos se relacionaban entre sí, de hecho, lo que había observado en el poco tiempo que los veía interactuar es que mantenían una relación formal y amigable, pero… ¿Realmente ella había tenido algo con Itachi originalmente? La lógica de Sasuke era aceptable, de ser así podía volver a ocurrir, pero… hasta el momento no había ocurrido nada. La inseguridad me golpeaba con fuerza, pero traté de reprimir el impulso de mostrar lo mucho que sus palabras me habían afectado.

— En el mismo lugar donde estoy —respondí — te lo dije soy su amiga, ahora pertenezco a su lado.

— No pareces muy segura de tus palabras. ¿Te afecta saber la verdad del pasado? No puedes mofarte de que los conoces si ni siquiera puedes saber realmente cómo eran originalmente, solo te queda lo que has vivido, pero mientras ellos conocen tu pasado tu no tienes nada de ellos — Dio otro paso al frente, entonces me estremecí, mi mente se sentía abarrotada de pensamientos negativos mientras que mi lado luchador gritaba que le golpeara, que no escuchara nada de lo que decía. — Sigue existiendo un fallo en su relación ¿No crees? ¿Qué puedes esperar realmente del futuro si no sabes cómo fue su línea temporal inicial?

— ¡Basta! — Naruto finalmente intervino colocando un brazo sobre Sasuke en un intento de apartarlo y ponerse en medio, no obstante, su intento fue inútil.

Lo que pasó a continuación fueron hechos desarrollados en tan solo un par de segundos. Sasuke se había deshecho del agarre de nuestro amigo rubio, había girado por su derecha, terminó de acortar la distancia entre nosotros, me tomó por la cintura y me estrechó contra su costado, al tiempo que Naruto era arrojado hacia el río por el estallido de poder que el Susanoo de Sasuke emitió al ser invocado a nuestro alrededor, atrapandonos en su interior.

— ¿qué estás haciendo? — Coloqué una mano en su hombro y le aparté de mí.

— Si te reclamo aquí no hay posibilidad de que regreses con ellos, estarás tal y como nosotros en ese mundo. — Un escalofrío me recorrió de pies a cabeza, la boca se me secó y el miedo ante su afirmación se posó en mi estómago, como una horrible araña que trataba de escalar por mis entrañas.

— ¿Qué dices? — Haciendo a un lado mi evidente estremecimiento, me aferré a la valentía que trataba de escaparse entre mis dedos, con una fiera mirada le enfrenté y añadí — ¿Piensas que te dejaría hacerlo? Es más no puedes… no hay posibilidad alguna de que puedas hacerlo.

Sasuke sonrió con burla. Era claro que no estaba bromeando él intentaría mantenerme retenida en ese mundo. Apreté los dientes al tiempo que la tensión a nuestro alrededor aumentaba, no sabía exactamente que planeaba, pero me acordaba que Shin había afirmado que sería imposible que algo así ocurriera, no había posibilidad alguna que él rompiera la protección de Shin ¿o sí? ¿Acaso sabía algo que desconocía? El movimiento al frente me sacó de mis abarrotados pensamientos oscuros y me regresó a ese preciso instante, preparada para la lucha incliné mi cuerpo hacia el frente y abrí mis piernas para tomar una postura defensiva. El susanoo, erguido a nuestro alrededor como una barrera inamovible que limitaba el espacio en que podía actuar; era una estrategia bastante razonable considerando mi forma de combate.

Fue cuando estaba pensando exactamente como solucionar mi inconveniente que él atacó. Con su mano brillando con el chidori, dio una estocada limpia al frente. Por mi parte di un salto a la derecha para apartarme, pero choqué abruptamente contra el costado del guerrero espectral que evocaban sus ojos. Maldije por lo bajo al encontrarme limitada ante ese espacio tan estrecho, no obstante, antes de que el Uchiha comenzara un nuevo ataque junte mis manos y forme rápidamente sellos — Arte ninja: Estilo de agua jutsu gran dragón de agua.

Mi técnica predilecta se arremolinaba alrededor de mí al tiempo que tomaba forma y me protegía de cualquier intento del chico por acercarse. Con un rugido espectral mi invocación elemental se abalanzó sobre el Uchiha, que en medio de mi ataque había hecho los signos para su propia técnica de fuego, la cual se estrelló contra mi dragón en un ruido inicialmente seco y que pronto se transformó en el sonido vaporoso del agua al cambiar su estado líquido. En medio de la ceguera autoproducida desaté el sello de mi frente y golpeé con toda mi fuerza la figura esquelética que nos rodeaba, rompiendo su lateral y dándome la abertura para escapar del confinamiento.

Estaba a punto de salir cuando mi muñeca fue aprisionada y fui jalada hacia atrás, dentro de la nube de vapor enceguecedora. Sabía que era Sasuke quien había impedido mi escape, también sabía que era la persona que ahora me tenía inmovilizada contra una de los lados de su Susanoo y su cuerpo; lo que no conseguía procesar y que me había provocado un shock tremendo fue la sensación de unos labios posados contra los míos. ¿Qué estaba pasando? La inexplicable sensación de pavor estaba suspendida en mi estómago, mis músculos estaban tensos y entumecidos, pasando por ellos el familiar hormigueo de pesadez. Mis ojos estaban abiertos y enfocados en los dos orbes rojos que me devolvían la mirada, retandome a moverme, desafiando mi cordura y apuñalando mi pecho.

Solo era un rose, pero fue suficiente para que la explosión de emociones contundentes se abriera paso a través de mí, provocando que la más cruda ira, indignación, miedo y tristeza se reflejarán en mis facciones. No fue de extrañar que cuando finalmente se separó un par de centímetros yo aprovechara para darle un fuerte golpe en su cabeza con mi frente y darle una patada en el estómago para apartarlo de mí. — ¡¿Que rayos crees que estás haciendo?! — proferí en un grito ahogado, mirando al Uchiha tendido en el suelo.

El Susanoo se tambaleó ligeramente al tiempo que Sasuke comenzaba a reír, aunque no había nada de humor en su tono. —Eres una molestia Sakura… —dijo el muchacho mientras se sentaba y me dedicaba una mirada mordaz.

— Tu has perdido la cabeza —refuté molesta al tiempo que las lágrimas de ira se asomaban en mi rostro — ¿Piensas que con un… beso vas a atarme a ti? Llegas tarde Sasuke, llegas 16 años tarde. Te lo dije ya tengo una vida.

— Una vida que no debes tener —murmuró oscuramente —No lo entenderás hasta que no lo veas.

La ira escaló como una serpiente por mi pecho y se sintió como si se enredara en lo profundo de mi pecho. Quería hundir su hermoso rostro bajo tierra y golpearlo hasta que comprendiera, hasta que su fantasma dejará de atormentar mis pensamientos, sin embargo, antes de moverme o siquiera reaccionar ante mis turbulentos pensamientos, la armadura de Susanoo cayó al tiempo que Sasuke se apartaba de un salto, ahora mirando con desconfianza a nuestro alrededor; no comprendí qué le ocurría hasta que una voz familiar se hizo presente. — ¿Buscas a alguien en particular? — Repentinamente Shin se materializó detrás de Sasuke, al tiempo que le tomaba del cuello, inmovilizando sus movimientos.

— Tú… —gruñó el pelinegro intentando moverse e ir contra el albino.

— Mantener tus impulsos abajo siempre es complicado ¿No es asi Uchiha? — La mirada azulada del albino se posó sobre mí y con una sonrisa de disculpa proclamó — No es mi mejor jugada tengo que decir, lo siento.

— Me esperaba algo menor que todo esto ¿No afirmaste que esto jamás volvería a ocurrir? De todas formas, te agradezco tu intervención, estaba casi controlado, pero no creo que soportara más insensatez.

Una sonrisa de medio lado cruzó el hermoso rostro de Shin antes de volver su atención al chico entre sus manos. —Hora de regresar a casa chico —murmuró el manipulador de tiempo, antes de recibir una mirada mordaz por parte del pelinegro.

— Incluso si me miras así, fuiste tu quien deseó esto, asi que estas son las consecuencias. — Sin esperar una respuesta por parte del pelinegro hizo que el Uchiha desapareciera en un pequeño destello azulado.

Casi al mismo tiempo Shin cayó de rodillas y soltó un jadeo intermitente. — ¿Estas bien? —Cuestioné ligeramente preocupada al ver su estado y finalmente sintiendo mi ira descender, al igual que mi creciente estado de alerta.

— Lo estaré cuando tu amigo deje de causarme dolores de cabeza… perseguirlo cada vez que se zafa de mi control es una situación desgastante.

Casi sentí lástima por el hombre, pero conociendo su situación entendía que él mismo se había ligado a ese destino al cometer tantos errores; la lastima solo le ofendería y no serviría de nada, por ello solo pude brindarle una amable sonrisa. — Me alegro de que hayas venido, probablemente esto no hubiera terminado tan bien de no ser por tu intervención. — Miré a mi alrededor tratando de encontrar a Naruto, quería despedirme de él antes de regresar, pero no pude localizarlo por ningún sitio.

— No podía dejarlo fuera —respondió Shin a la pregunta no formulada, mientras se cruzaba de piernas y se sentaba más solemne. — La inconsciencia de ambos no evita que sus miniaturas no pierdan chakra. Es más como un estado constante de drenaje, diminuto pero que eventualmente termina por causar estragos si se prolonga; esto es algo que a Sasuke no parece importarle en el momento y por eso se vuelve tan imprudente.

— No puedo creer que se perjudique de esa manera… —me detuve un instante en mis palabras y luego miré al hombre aterrorizada — Espera, eso quiere decir que yo también…

— No, tu situación es diferente —respondió antes de que yo pudiera continuar, sin embargo, antes de que pudiera respirar tranquila por sus palabras una sonrisa burlona cruzó su rostro y añadió — Mientras que para ellos drenar chakra solo significa un flujo pequeño pero constante, tu estas completamente ligada a tus reservas en tu estado inconsciente, así que es probable que…

— ¡Y ahora es momento de decirlo! —Mi terror le hizo reír y entonces sentí ganas de poner mi bota en su hermoso rostro — ¡Shin! Ayúdame a regresar, ya me había desmayado por el cansancio y mañana tengo patrulla, esto no es divertido…

— Tranquila —El albino dejó de reír un momento, aunque no dejó su mirada burlona de lado — Me he hecho cargo de eso mientras estabas peleando con tu viejo romance. Aunque tengo que agregar que debes dejar de meterte en ese tipo de problemas, no siempre podré restaurar tus reservas de chakra.

— Espera ¿Cómo que has restablecido mi chakra? ¿Cómo?

El albino se encogió de hombros — ¿Tiempo? Sakura no hagas preguntas que tienen una respuesta evidente. Como sea deseo evitar más problemas así que te enviaré de regreso, hasta pronto Sakura…

— No, espera… — Mis palabras no terminaron de ser pronunciadas antes de que todo se desvaneciera y yo cayera en la oscuridad.

-0-

El albino se quedó solo en medio del puente destruído por la batalla previa. Su rostro ahora inexpresivo y ojos que se clavaron en un punto detrás de él. — Decir que no estoy en problemas ya es una mentira ¿Qué estás esperando? ¿Solo te quedarás allí observando lo que hago? Sé que has estado pendiente desde hace un tiempo así que no comprendo porque...

— Bastantes divagaciones niño.

Los ojos zafiro de Shin se abrieron con sorpresa al sentir su error. — Tu… no eres.

— Eso es evidente —respondió una figura oscura entre las sombras, donde solo un par de destellos carmesí destellaban como un par de faros — Aunque me gustaría ser yo quien te diera el escarmiento, solo me quedaré a ver qué es lo que pasará — La voz era profunda, aburrida, pero con un matiz de advertencia tras su tono. Definitivamente el albino sabía que no tenía que provocar la ira de su interlocutor.

—Espero que te diviertas.

— Oh, lo estoy haciendo… creelo solo espero comprobar el plan de acción que se llevará a cabo, y lo que pasará con tu… pequeña protegida.

— No tocaran a Sakura, ella no tiene…

—No me lo digas a mi, yo no tengo responsabilidad contigo, solo reviso lo que pasa como un pasatiempo. Tengo un gusto macabro por seguir la pista de su trabajo, pero como sea… tu sabes de primera mano cómo trabajamos, solo espero que no olvides las reglas, a no ser que desees terminar involucrando a personas inocentes. — Shin lo sabía mejor que nadie, pero que alguien se lo advirtiera solo quería decir que las cosas estaban peor de lo que estimaba ¿Que tanto ya se habían movido? Mientras estuviera ligado a la promesa y deseo de Sasuke estaba a salvo por los pelos, pero la suerte era caprichosa y retorcida, así que no sería de extrañar que en cualquier momento las reglas del juego cambiaran.

Lo tengo en cuenta todos los días de esta maldición —respondió a nadie en particular, después de todo su acompañante le había abandonado tras sus últimas palabras.

— Será mejor que estés lista Sakura.

-0-

Oh, separar las dos visiones de Sasuke que tenía era prácticamente un desafío cuando acababa de tener una de las peores experiencias de mi vida junto al fantasma del pasado y la discusión con el menor la noche anterior. Un completo desastre podía prever; no estaría cómoda cerca de él y tampoco podía asegurar que no estuviera con la guardia en alto en todo momento. Incluso si sabía que Shin había vuelto a ponerlo bajo una barrera restrictiva, no podía estar segura que no se zafaria nuevamente, por ello la mañana siguiente me había dispuesto a tomar mis pensamientos, hundirlos lo más abajo para tratar de parecer normal frente al resto de la familia y evitar a toda costa un enfrentamiento directo con el Uchiha menor. Lastima que mis planes nunca salían como quería, y menos cuando estaba en pleno terreno Uchiha y siendo ordenada por una matriarca espeluznante, de hermosa y amenazadora sonrisa. Fue por ello principalmente que ahora tomaba mi desayuno en total silencio y justo frente a la razón de mis molestias actuales. Quizá la buena noticia de todo esto era el hecho de haber recobrado cada gota de energía empleada el día anterior; tal y como lo había previsto Shin antes de enviarme de regreso.

Enfocada en los alimentos que tenía al frente y mis turbulentos pensamientos, por poco no escucho la voz del Uchiha menor, sin embargo, su balbuceo incómodo en el manejo de sus palabras fue lo que me sacó de mi ensoñación y me llevó a fijar mi atención en él, aunque permanecí desconfiada. — Mamá… me dijo que tuviste una operación desgastante ayer, dijo que ese era el motivo por el cual colapsaste. — Le ví apretar sus palillos justo antes de levantar su mirada hacia mí — Yo… lo siento por lo de ayer, no estaba pensando claramente.

Su sincera disculpa rompió mis defensas y causó que soltara un suspiro de derrota. No podía enojarme mucho tiempo con él, nuestra dinámica nunca fue de esa forma y dudaba que en un futuro próximo cambiara, así que decidí ser más específica con lo ocurrido.

— Sabes cual es el resultado del combate de Rock Lee y Gaara ¿Cierto?

— Se que terminó seriamente herido, algo de que no podría ser ninja —respondió sinceramente.

— La técnica que Usó Gaara destrozó sus huesos hasta el punto en que pequeñas esquirlas quedaron incrustadas en los nervios de su columna, cualquier tipo de operación para retirarlos podría poner su vida en riesgo, o peor dejarlo parapléjico de por vida. O eso fue hasta ayer — Bebí un sorbo de mi té y continué — La operación fue de alto riesgo, ya que se trataba de eliminar y regenerar de forma continua, no hay muchos médicos que puedan mantener un control de chakra continuo y en uso por largos periodos de tiempo, solo dos personas podrían haber llevado esa operación, Tsunade Senju-sama y yo. Ya que Tsunade-sama no está en la aldea, yo era la única que podía tratar de salvarlo. Es por eso que al final del día estaba sin una gota de chakra. A veces sacas conclusiones demasiado rápido Sasuke… Lo que hiciste ayer, insultando a tu hermano y a mí, sigo sin comprender porque, desde que eras niño te ha disgustado que acapare la atención de Itachi-kun pero comienza a ser molesto no poder hacer nada sin que te enfades.

Sus ojos oscuros se estrecharon al tiempo que hacía una mueca de incomodidad. — Esa no fue la razón de mi disgusto —gruñó entre dientes.

— Si no fue aquello ¿Qué fue? Si no me lo dices no podremos encontrar una solución.

Sus jóvenes manos se apretaron sobre sus palillos, y se vio casi perdido en lo que respondería, no obstante, su mirada y voz no vacilaron cuando dijo — No es mi hermano, no estoy molesto contigo por acaparar su atención. — Sus palabras me confundieron, pero esperé a que continuara — Itachi siempre ha estado en su propio ritmo, tan lejano. En cambio de alguna manera, tu, que estas a su nivel te sientes tan cerca… familiar que, ver ese tipo de interacciones entre los dos es molesto, casi como si de repente fueran a romper algo que está ahí.

No había más molestia, pero sus palabras me parecieron una tergiversación amable de las palabras que empleaba el mayor; no, de hecho sonaban completamente diferentes, no había nada en su tono donde me negara acercarme a su familia o compartir su espacio, contrario a eso parecía más temeroso de perder la relación que manteníamos todos hasta el momento.

Aliviada por sus palabras, mi corazón se calentó y cualquier tipo de pensamiento oscuro que me hubiera rondado en la mañana por culpa de su ser alterno se desvaneció en el aire. — Gracias —dije conmovida, ganándome una mirada de confusión por parte de él, así que me aclaré — Pensé que me odiabas por estar alrededor. Escucharte decir que realmente te disgusta que… bueno las cosas puedan cambiar me alivia un poco; en realidad estaba muy preocupada porque desearías que no me acercara a ustedes, no quería terminar peleando por algo así.

— ¿Por qué desearía que no te acercaras? Eso es ridículo. — Por un momento su expresión formó un mohín de disgusto, haciendo que recordara su rostro cuando era un niño pequeño.

Una sonrisa atravesó mi rostro y casi deseé que regresara a su tierna infancia. Sin embargo, mis pensamientos fueron interrumpidos por la repentina presencia de Itachi, quien ingresó a la cocina tranquilamente y se quedó observándonos. — Buenos días Itachi-kun —saludé.

— Hermano —gruñó Sasuke antes de retornar su atención a los alimentos.

— Buenos días Sakura, Sasuke. — Se detuvo un momento en el nombre de su hermano antes de retornar su atención a mí — ¿Has descansado bien?

— Perfectamente, mis reservas estan practicamente al 100% y estoy lista para el trabajo.

— Eso es aceptable, después de todo tendremos mucho más trabajo el día de hoy — El joven se cruzó de brazos al tiempo en que yo formaba una mueca de disgusto.

— Había olvidado que correspondía en la agenda.

— Shisui nos esperará en la torre principal en una hora. Así que tenemos tiempo para pasar a recoger las listas y comprobar la planificación de seguridad para el exámen.

— No hay manera de escaquearse el trabajo —respondí con una sonrisa luego de dejar de lado mi plato ya vacío.

— ¿Vendrán a Cenar? — Dijo Mikoto ingresando a la residencia.

— No creo que podamos. — Contestó Itachi — Tenemos varios trabajos extra hoy, creo que tampoco llegaré para cenar.

La mujer frunció el entrecejo y nos mostró una mirada aguda. — No vayan a descuidarse solo porque tienen trabajo, si escucho que alguno de ustedes se desvaneció por falta de alimento…

— Le aseguramos que no lo haremos. Somos muy conscientes de las consecuencias —dije murmurando lo último.

La sonrisa divertida de la mujer y la mirada lúdica que me dieron los dos hermanos me hizo sonrojar de vergüenza. — Me iré ahora, quiero entrenar algo más antes de que Kakashi se decida a aparecer —dijo Sasuke.

— Suerte con el entrenamiento, espero que nos sorprendas en las finales.

Con un asentimiento de su parte el chico salió del lugar, lo que prácticamente fue una señal para nosotros para también comenzar a movernos. El tiempo apremiaba y con las amenazas que se alzaban como una serpiente en las sombras, era mejor estar preparado y ser preciso en los detalles de seguridad.

-0-

— No debería ser un crimen cortarle la lengua —gruñó Shisui por lo bajo mientras salíamos a almorzar. — Recuérdeme la próxima vez solicitar trabajar en el detalle estratégico de defensa, esta es la última vez que aceptó atender a los estúpidos y pomposos sirvientes de los señores feudales.

Con pasos largos y directos íbamos hacia el centro del pueblo, buscando aprovechar esos escasos minutos de libertad para buscar algo de comer. — Concuerdo contigo, aunque… me divirtió ver su cara de terror luego de tu mirada "sutil" de asesinato —dije sonriendo — Aunque la cereza del pastel fue la intervención de Itachi-kun, creo que sin eso no hubiéramos conseguido escapar a tiempo para almorzar.

— Tenemos poco tiempo libre antes de iniciar nuestra patrulla de la tarde, permitir que el hombre dominara por más tiempo la conversación hubiera sido perjudicial.

Itachi permaneció mirando al frente con su expresión impasible, sin embargo, Shisui y yo sabíamos que realmente sus palabras no eran tan profesionales como lo hacía parecer. Con un par de sonrisas y miradas que intercambiamos entre nosotros, supimos que pensábamos que nuestro amigo realmente había estado al borde de perder la paciencia. — ¿Qué? — Nos preguntó con sospecha.

— No es nada. — respondimos al tiempo entre una pequeña y cómplice risa.

Pronto llegamos a un pequeño restaurante de sushi. Allí tomamos asiento cerca a la entrada y ordenamos un poco de su especial del día. Pronto, buscando un cambio de tema fuera de nuestro trabajo diario, iniciamos una charla un poco más trivial, donde el principal tema fueron pequeñas anécdotas de nuestros recuerdos más significativos de la infancia, como aquella vez en que recién graduados de la academia ninja habíamos ido a una aldea cercana a visitar una pequeña pensión con termales. Mis dos acompañantes estaban sentados junto enfrente de mí sonreían con nostalgia cuando los detalles del viaje se volvían más claros, y poco a poco la tensión que habíamos acumulado en las pocas horas de la mañana se disolvió, trayendonos de regreso nuestra tranquilidad.

Fue cerca del final de la cena que nuestra conversación se vio repentinamente interrumpida — Vaya, es raro encontrarlos comiendo a tiempo a los tres. Oh solo me refiero a comer, porque la parte de estar juntos no es rara — al tiempo los tres dirigimos nuestra atención a la alegre morena que nos saludaba justo al lado de nuestra mesa.

— Izumi…

— Hola a ustedes también. — Con un movimiento suave la chica se sentó a mi lado — ¿Cómo va todo con las preparaciones para el examen?

Al tiempo soltamos un suspiro de agotamiento, pero Shisui respondió — bien en general, pero creo que terminaremos enloqueciendo si tratamos con otro pomposo y…

— Lo que Shisui quiere decir —interrumpió Itachi notando que nuestro amigo mayor iba a comenzar a hablar con desdén y probablemente con algún tipo de referencia oscura sobre nuestros no agraciados visitantes de los meses venideros — es que ha tenido sus inconvenientes, al tiempo que nuestra paciencia ha sido puesta a prueba.

— Realmente no me quiero imaginar qué expresión consiguieron que colocaran —dijo Izumi en medio de una suave risa — Si uno de ustedes tres ya es aterrador no me imagino lo que provocaron los tres.

— No hicimos nada —repliqué, aunque realmente ella tenía razón. Al final de las conversaciones habíamos adquirido una mirada tan tenebrosa y nuestra voz se había tornado tan fría que fue el motivo más evidente para que el último emisario del señor feudal saliera corriendo despavorido —Eso y las palabras casi amenazantes de Itachi—.

— Sí claro —respondió ella, para nada convencida en mi afirmación. — Por otro lado, me alegro de verlos, casi pensé que ya no vivían en la aldea con todo el poco tiempo que se dejan ver.

— Bueno, ser ermitaños no suena tan mal, aunque lo más seguro es que cuando pase esto me llevaré a estos dos a un viaje a unas termales muy lejos de aquí, unas merecidas vacaciones es lo que necesitaremos. — Shisui se recostó contra su asiento y mostró una mirada suave y determinada.

— Eso sería extraordinario. — Estuvo de acuerdo Izumi — Por cierto… Sakura, ¿Luego tendrás unos minutos? Quisiera que saliéramos un rato de compras.

— Pues… tengo que pasar primero por el Hospital a revisar a mi paciente, luego de eso iremos a patrullar.

— Entonces qué te parece si te acompaño al Hospital, de hecho, quiero hablar un rato contigo.

— No me importaría, de hecho, tu compañía es apreciada. — Le sonreí amablemente.

— De alguna manera salimos de la ecuación —murmuró Shisui — Solo asegurate de llegar a tiempo a la patrulla Sakura, e Izumi, asegurate de reportarte con Fugaku-san esta tarde, escuché que estás a cargo de un escuadrón, asi que no vayas a dejarlos desamparados.

— Como si pudiera —respondió ella — Después de que Fugaku-san me pido ayudarle. Simplemente tengo un poco de tiempo libre antes que reportarme en la sede ¿Acaso te pone celoso que me llevé a Sakura-chan? Eres demasiado pegajoso Shisui…

— Oye… —gruñó mi amigo mayor.

— Pareces un padre preocupado por la integridad de su hija ¿No te parece Itachi-kun?

Itachi dio una mirada rápida entre nosotros y poco después respondió — Sakura es una persona importante para nosotros, Shisui solo esta siendo natural con su preocupación. — Su mirada me causo un sonrojo y una tonta sonrisa que no pude evitar que atravesaran mis rasgos.

— Casi olvido lo unidos que son —no hubo cambio aparente en Izumi con su afirmación, pero me causó un pequeño estremecimiento — No me extrañaría que si Sakura algún día se casará ustedes lo harían con ella, incluso en contra de la voluntad de sus padres.

— No exageres —refutó Shisui, pero la morena soltó una risa divertida por su respuesta.

— ¿Enserio? Quiero ambos se imaginen a Sakura-chan en un hermoso vestido blanco de boda y junto a ella algún hombre, que no sea alguno de los dos y diganme con honestidad que no tratarían de saltar al frente y evitar la boda.

Los dos Uchiha pusieron una expresión similar, cada uno con una mueca que parecía sopesar la posición que la chica les estaba haciendo tomar. No hubo respuesta pasados unos segundos y de hecho sus expresiones se agravaron a sombras oscuras que adornaban sus hermosos rostros, lo que me causó un revoltijo de emociones, desde la emoción más profunda hasta un pinchazo de molestia. No obstante no estaba en mis planes casarme con nadie —Que no fuera Itachi—, así que sus preocupaciones eran completamente adorables y ridículas.

— Lo ven —respondió la chica con un tono suave y burlón, inclinándose hacia al frente para encarar a ambos chicos. — Si son tan protectores con Sakura, ni siquiera conseguirá más amigos y probablemente nunca pueda casarse con alguien, sería condenada a pasar el resto de sus días como una soltera mientras que ustedes adquieren vidas dentro del clan.

— Oye detén tu carrera —proclamó Shisui — Estas asumiendo como si Sakura se fuera a casar fuera de…

— Osea que asumes que se desposará con un Uchiha —le interrumpió ella con una sonrisa socarrona — Ya estas armando su futuro sin su consentimiento.

No fue una pregunta, pero la contundencia de sus palabras fue como un golpe en el estómago para los tres. Yo realmente no había pensado a profundidad la realidad que Izumi me planteaba, ni siquiera cuando Sasuke lo sugirió la noche pasada lo medite demasiado a causa de mi ira, pero, ¿Qué pasaría si mis amigos se casaban? Es evidente que no dejaríamos de ser amigos, pero… yo no quería alejarme de ellos, si ellos hacen sus propias vidas, solo iría de visitas ocasionales y probablemente fuera doloroso entrar en las vidas de sus matrimonios. Shisui había insinuado varias veces que me casara dentro del clan, pero yo solo quería asumir ese compromiso con Itachi, pero la pregunta era ¿Él quería? ¿Sus padres estarían de acuerdo con que se casaran con una persona externa? Una cosa era ser un activo y amigo de la familia y otra muy diferente que dejaran que alguien externo se casara dentro del clan. ¿Acaso los padres de Izumi no tuvieron el mismo problema? La madre de ella había terminado saliendo de los alrededores de su familia para vivir en el exterior con su esposo, hasta que ocurrió la tragedia del ataque del Kyubi que la obligó a ella y a Izumi a regresar con su clan, y a ella solo la reconocieron porque a partir de esa fatídica noche sus ojos se vieron dotados con el kekkegenkai del clan. Dicho todo esto ¿qué posibilidades tenía yo?

— Nunca tomaríamos decisiones por Sakura. — Itachi rompió el silencio repentino y pesado que la situación planteada había provocado y con un tono suave añadió — Ella es libre, al igual que Shisui y yo lo somos, te aseguro que el futuro no está escrito y los tres sabemos que sin importar las decisiones que tomemos en nuestras vidas buscaremos protegernos entre nosotros. Además, puede que Sakura no esté tan lejos de ser adoptada dentro del clan, después de todo… mis padres la estiman bastante, casi tanto como nosotros mismos.

La mirada que me dió al decir sus últimas palabras conservaba un brillo misterioso que apartó la nube oscura en mis pensamientos y la hizo reemplazar por una calidez esponjosa y emocionante que me hizo sonreír. Él tenía razón era demasiado pronto para pesar cosas sin sentido — No dudo que tu Madre tendrá un cuarto de secuestro para ella — añadió Shisui, habiendo recobrado sus emociones alegres.

— Con sus acciones de los últimos años no lo dudo en lo absoluto —concordé.

En el rostro de Izumi cruzó una sonrisa de chesire y sus ojos brillaron antes de proclamar — En serio los tres son demasiado lindos cuando se hablan como si fueran inseparables. Ojalá la mitad de las asociaciones tuvieran su confianza, en serio dan ganas de apoyarlos. Son como dos príncipes que custodian ferozmente a su dama, no obstante, esta princesa también tiene amigas que la reclaman, así que… por el momento la robaré de sus manos.

Izumi se puso de pie al tiempo que tomaba mi mano — Espero se encarguen de pagar también la cuenta de ella caballeros, la regresaré a tiempo para su patrulla.

— Oye… no puedes venir, abrir un tema asi e irte —protestó Shisui, sin embargo, ella solo le sonrió y me jaló con ella.

— Izumi… —dije siguiéndola al tiempo que me giraba y les daba una despedida con la mano a los dos muchachos — Oye…

— Lo siento Sakura, pero ver sus expresiones es sumamente divertido, además los verás más tarde ¿no es así? — No bien terminó sus palabras le di alcancé por completo y me igualé a su ritmo que nos conducía hacia el hospital. No sabía que pensaba Izumi o porque había planteado esas preguntas sobre la mesa, pero bien por primera vez en mucho tiempo me hizo sentir insegura sobre mi futuro y el de los chicos. — Tienes suerte de tenerlos.

— Mucha —estuve de acuerdo — Creo que ya antes lo habíamos dicho.

— Sí, pero creo que no me cansaré de recordarlo cuando estemos las dos. Como sea no era por eso que quería hablar contigo. — Su expresión cambió a una más seria que me provocó un par de escalofríos — En realidad quería hablar de algo que escuché recientemente.

— ¿De qué trata?

— Ya sabes que hay una alerta de peligro desde el segundo exámen, bueno mejor dicho fue tu equipo que se percató. Pero parece que eso no es lo único, dicen que ha habido una anormalidad alrededor del perímetro de seguridad que protege la aldea, no saben que lo provoca pero viene y va, así que se ha estado avisando a los escuadrones que tengan cuidado. Ahora el asunto y el porque te remito esta información solo a ti y no a los chicos es porque ellos ya la conocen. — Me sorprendió lo que me decía, y ella como previendo mis pensamientos añadió — No les juzgues por no decirte aún, Fugaku-san pidió discreción para no asustar a nadie fuera de tiempo, especialmente porque aún no sabemos si es una violación del perímetro y si es peligroso, ya que la barrera ni siquiera se ve lastimada. Lo extraño es que esas irregularidades están pasando cerca del complejo Uchiha, es por eso que se ha mantenido solo para algunas personas, pero ya que eres prácticamente del clan pensé que era mejor decirlo. Y ya que Shisui e Itachi-kun tuvieron alguna vez planes fuera del conocimiento del clan es mejor que no vuelvan a causar un alboroto, así que esta vez pensé ser yo la que te diera la noticia, así ellos no se meterían en problemas y los ancianos no puedan argumentar que puedes provocar que se vuelvan contra el clan.

— Gracias Izumi —dije en respuesta luego de unos segundos de pensar en sus palabras.

— No es nada, solo asegurate de cuidar de esos dos.

La morena era una chica misteriosa en ocasiones, especialmente luego del tipo de argumentos que usaba, sin embargo, solía ser muy amable también, por eso… quizás su compañía me provocó una dolorosa punzada de nostalgia. Romper el castillo de cristal no era una prioridad en esos momentos y de hecho no me podía siquiera imaginar que en algún momento cercano las circunstancias serían las que hablaran por si solas…

-0-

La revisión de Lee fue más que satisfactoria, el chico llevaba lágrimas en los ojos cuando había entrado a su habitación, y de no ser por Tenten que lo había ido a visitar estaba segura que habría saltado de la cama solo para abrazarme —Si de alguna referencia sirven los incontables elogios que me dió en mi estadía y mi control médico—. La joven de moñas también se había mostrado feliz y agradecida, pero sus palabras fueron más cortas y modestas a comparación de su compañero.

Mi apoyo mientras hacía el control también había provocado una fuerte impresión en ambos muchachos, pero especialmente en el de cabellos oscuros que con una sonrisa me sorprendió al repetir la misma promesa que había hecho en el bosque de la muerte, aquella que me aseguró que cumpliría a cabalidad para protegerme. Su sinceridad removió mis entrañas, así que con la promesa de regresar pronto le deje en claro que apreciaba su promesa pero que lo importante para cumplirla en el futuro era la paciencia en la recuperación, que como sospeché solo le había amargado cuando se enteró el tiempo que llevaría, pero que aseguró que cumpliría para recuperarse pronto.

Mi acompañante Uchiha se mostró interesada en el intercambio, no obstante, no argumentó nada mientras estuvimos con los menores, solo cuando salimos de la habitación me elogio por mi trabajo. No preguntó los detalles, pero sus acciones y palabras me dieron a entender que había podido entender más de lo que necesitaba una explicación, por ello me relaje pensando que simplemente que al menos no reciiría otra cantidad de pregutas por mi situación. Así que, con ese encuentro y luego de despedir a Izumi en la entrada del Hospital, me había llevado a mi misma hasta el punto acordado con los muchachos. Aún era temprano así que mis pasos se movieron un poco más hacia el norte, hacia el río que cruzaba la aldea. El verano estaba entrando a su apogeo alto así que el calor era más intenso, por eso mismo tomé la decisión de refrescarme un poco mientras esperaba. Con cuidado retiré mi chaleco rojo, quedándome solo con mi camisa negra de malla, al tiempo me retiré mis botas y los guantes; pertinentemente doblé y dejé todo en una roca cercana. metí mis pies al agua y me senté en una de las rocas de la orilla, a la sombra de un árbol circundante. Cerré mis ojos y dejé que mi mente se espaciara en el lugar, sin perder por completo mi estado de alerta. Fue pasados unos instantes que sentí dos presencias cercanas, no me eran desconocidas pero tampoco eran de las personas que esperaba; por algún motivo me daban una mala espina, así que cuando reconocí de donde venían sus presencias, me levanté de un salto y lancé una Kunai hacia el lugar indicado, lista para entrar en combate de requerirlo.

Un grito espantado salió del otro lado de los arbustos al igual que una voz bastante familiar — ¿Y esto de donde salió 'ttebayo? — La conocida referencia me hizo bajar la guardia y acercarme al lugar.

— ¿Naruto? — Murmuré al tiempo que atravesaba los matorrales para al final encontrarme cara a cara con el espantado niño nombrado, que con una cara de terror miraba la kunai incrustada en la roca a solo unos milímetros de su pierna derecha, sus manos apoyadas en la parte de atrás al tiempo que sus piernas se recogían hacia su cuerpo, tratando de poner distancia entre el objeto asesino y él. — ¿Qué estás haciendo aquí?

Levantando la mirada el niño me observó y aunque su expresión se relajó un poco su miedo no se fue del todo, lo que me hizo sospechar de sus motivos de estar allí, sin embargo, no iba a juzgarlo antes de recibir una respuesta. — S-Sakura-chan… tú q-que estás haciendo aquí… y… así —lo último lo balbuceó mientras me recorría con la mirada con un pequeño sonrojo.

Fue entonces que recordé cómo estaba vestida en esos momentos. No es como si estuviera desnuda, o si algo fuera de lugar se viera, pero aún era un poco incómodo mostrarme en mi camisa de malla; esto solo me recordaba que era una fina tela lo que me separaba de estar en ropa interior. Fue mi turno de sonrojarme, aunque ante el nivel de confianza con Naruto mi incomodidad no se exaltó tanto como lo hizo cuando escuché hablar a la segunda persona que había sentido — Nada mal señorita, pero creo que esto le pertenece…

Cuando me giré, y vi quien sostenía mi ropa, creo haber soltado un grito lo suficientemente fuerte como para que incluso lo escucharan en Suna, fue una fortuna no haber alterado la paz de la aldea, porque de otra manera mi vergüenza y circunstancias podrían haber sido peor.


Si el capítulo es corto, muchísimo más corto que los demás pero hay un motivo específico para no añadir leña al fuego *risas*

Antes de comenzar cualquier tipo de explicación creo que tengo que decirles gracias a todos los que me han apoyado y seguido en estos meses de espera, especialmente a quienes han dejado un comentario de aliento. Me han subido mucho la moral. Tengo que decir que doy especial gracias a Fangirl1266, por escribirme esta semana y recordarme que están todavía ahí para mi, oh en serio no tienes idea de lo feliz que estaba y como me ayudaste a expresar lo que me estaba comiendo por estos meses de silencio.

A pesar de que a Fangirl le doy infinitas gracias no quiere decir mis queridos lectores que no sean ustedes tan especiales, es solo que me frustraba no hallar el tiempo para responder sus hermosos comentarios, sus elogios, apoyo, preocupaciones. A pesar de que están los PM de fanfiction, no he tenido tiempo de nada, sin embargo, he leído cada uno de sus comentarios y los guardo en mi corazón, especialmente a las personas más antiguas que me han acompañado desde el anterior foro.

Nombro a todas a quellas personas que han comentado los últimos dos capítulos, Asura, Angelzafir0, Tenshin Anime, Yuevk, xXxXxYoOsYxXxXx, Dulcecito,mis lectoras anónimas, Mishi, Sol, Noemitg-chan, Maribalza, Faena, Girl-chan,CompassionateKunoichi, Janis Gry, Tsuki, Pchan, AliceTedy-chan, Lulyta,Rhaenyss,Valu,Feli, Mary1322, Senbonzakura19, Polala0, Briyitt, daliapv perez, Between White and black, Carols2497,SNC,Imperial doll,Selenekou 13, fer Davis 12,SayuriHatake1702,Himeno Sakura Hamasaki

Hay muchas mas personas a las que les debo un saludo y responder comentarios, no obstante honestamente no tengo la misma energía de antes ni el tiempo, es por eso que me siento tan impotente.

Este espacio no solo lo reservé para decir gracias, sino también porque quiero ser clara con algunas cosas, ya que he visto que parte de la preocupación de algunos se dirige a fuentes turbulentas que afectan mi estado de animo.

Primero que todo, quiero aclarar que esta historia la cree si bien para compartir, también para mi misma. Es algo que se olvida con facilidad cuando se tiene éxito, pero, es importante recordarme que mi ritmo a pesar de verse alterado no me debe significar replantearme mis decisiones. Asi que para tan amables personas que me han exigido, perdón, esa no es la palabra, es más bien sugerido, subir la versión anterior les informo que no planeo hacerlo, al menos no ahora o en un futuro próximo, porque hay cosas que dejé sin tocar y sin darle su lógica que estoy corrigiendo en esta versión.

Se que es desesperante porque me estoy tardando tres meses en publicar, créanme cuando digo que no es como si quisiera tardarme TRES sagrados meses. Dios es que es frustrante no poder tener al menos unas 35 horas al día para poder hacer lo que me plazca, sin embargo, soy humana y me canso y más con todo lo que estoy pasando en este momento, y aunque trato de justificar el hecho de que es una historia que gusta y que por eso hay personas que ya habiendo leído la versión anterior quieren saber como termina, no dejo de sentir un fuerte dolor de cabeza cada vez que siento que desean presionarme psicológicamente para que deje de hacer lo que hago ahorita para subir algo que probablemente no me sienta satisfecha de terminar si no la estructuro bien. Tomenlo como que la historia original era el borrador, lo siento si mis palabras suenan… duras, pero creo que estoy en mi derecho de decir también como me siento.

Ahora para mis hermosos seguidores que se preguntan porque no he subido capitulo tan rápido y porque esta vez es tan corto, les seré muy clara y concisa con respecto a mi estilo de vida actual.

Iniciaré diciendo que trabajo de Lunes a Viernes desde las 3:00 de la mañana hasta la 1:30 y eso si no me quedo enrollada con una llamada de último minuto. En un horario de 10 horas.

Si bien diré que me acuesto a las 7:00 p.m por tarde, y las condiciones de trabajo me proveen de 3 descansos y una hora de almuerzo, no quiere decir que no salga mentalmente agotada.

Los días que puedo programo clase de ingles d de la tarde, en lo cual no almuerzo hasta que no llegue a mi casa (no planeo almorzar a las 8 como dicta mi horario, moriría, asi que tomo alimentos regulares en mi turno). Por lo general eso es Lunes a Miercoles.

Al tiempo todos los jueves tengo clase de catequistas de 7:00 a 8:45 de la noche, lo que significa acostarme tarde. Cada dos semanas también tengo una reunión los miércoles a las 5:30 de catequistas de confirmación.

¿Y ahora Los fines de semana que hago? Pues en la mañana voy a Karate que es como mi forma de relajación física. Y los sabados me paso fuera de casa en dos tipos de catequesis, donde yo soy la que dirige un grupo. El domingo es el único dia para estar con mi familia o dormir lo que me haga falta antes de tener que madrugar al dia siguiente.

Ahora creo que sabrán que no tengo tiempo para nada, los días que tengo un poco en las tardes cabeceo sobre el teclado del computador mientras escribo un par de líneas y entre mi trabajo el poco tiempo que tenga libre escribo asi sea un párrafo que tengo que corregir varias veces por las interrupciones.

Tengo asuntos familiares precarios en estos momentos también asi que mi moral esta en el traste, sin embargo, no me he quejado hasta ahora y es simplemente porque aunque no sean todas las personas, hay quienes que hacen entender que mi esfuerzo por corregir y hacer bien lo que amo es… demasiado lento *risas*. Dios… es que en sus comentarios que se dice que se sabe que estoy ocupado pero que lo que estoy haciendo no es bueno para lo anterior… que es mejor simplemente dejar como estaba todo y seguir allí. ¿No creen que lo he pensado? Seria todo mas simple solo tomar lo escrito y darle "subir" ¿Pero me sentiré satisfecha? ¿Será suficiente claro para los que no habían leído la historia?

¡Si! Se que me arriesgaba mucho al hacer eso pero por el amor de Cristo, lo hago porque ME GUSTA, pero ser simplemente responsable de preguntar por la historia y recriminar el hecho de que no he subido no quiere decir que este bien. Para los que escriben saben de lo que hablo, el estado del escritor es importante también, nadie nos paga por esto y tampoco me importa si se hace, con sus comentarios sus apoyos me es suficiente, pero cuando empiezo a ver que es más… importante la historia que siquiera preguntar si es que estamos vivos es como.., no se ¿Egoísta? No estoy regañándoles, pero en serio, cuando veía algo como "¿para cuando vas a subir?" pensaba en "Pues estoy bien gracias, quizás en un pozo pero lo importante es que sacie su curiosidad".

Me llenaba de alegría quienes decían "no te presiones, tómalo a tu ritmo, esperaremos" Oh como quería abrazar a quienes comprenden los sentimientos encontrados en el momento oscuro de las vidas del escritor y esto me motivaba a escribir más rápido, a encontrar mis momentos a pensar nuevas ideas.

Yo también soy lectora, me frustro cuando veo una historia que no continua y que amo. Personalmente estoy siguiendo una en la que no han actualizado igualmente hace 4 meses, pero como entiendo que no se puede forzar un acto creativo, espero impaciente sin decir nada, entonces cuando suben un capitulo celebro. No les miento cuando afirmo que estoy en ambos lados de la moneda.

Me disculpo por mi rudeza pero todo el tiempo trato con gente que exige cosas como si se les debiera y si, se que son pocas personas que han dicho esto y probablemente no con intenciones de lastimar o de hacerme sentir así, pero esta es la realidad. Lamento escribir un testamento y probablemente ni la mitad lea esto *bufido* Si estoy usando asteriscos para que sepan que cara estoy poniendo en este momento.

Creo que lo peor de todo es que deseaba hacerles saber como me sentía y que estaba trabajando en el capitulo sin olvidar la historia, que realmente me interesa terminarla, sin embargo, no podía, por eso inicie agradeciendo a Fangirl quien amablemente me contacto esta semana por tumbrl y me dejo su preocupación por mi sobre la mesa. Dios como me encantó tener ese foro abierto, incluso si ahora también me es imposible decir hola allí lo tengo para comunicarme, y pude decirle que efectivamente estaba viva que no, no he dejado la historia. Charlar asi me ha ayudado y me hace pensar que desearía una manera de comunicarles en que estoy, pero tampoco quiero tomar tumbrl para andar publicando mi vida, lo hice aquí no para que me compadezcan sino para que entiendan que no es que "tenga una vida", es que realmente no tengo vida *risa sarcástica*, al menos no una social, porque amo lo que hago pero me frustra no hacer todo lo que quiero.

En resumen, para no aburrirles más con pretextos que a la mayoría ni le importará. No, no dejaré la historia aunque me tarde en terminarla, y TAMPOCO voy a cambiar de editar los capítulos como a mi me de la… ejem ustedes entienden. Disculpen pero no he dormido bien solo 3 horas, además que estuve recibiendo a clientes molestos por cosas comunes, y entenderán que estoy un poco de mal humor. Estoy entusiasmada por escribir el otro capitulo y el siguiente a ese y a ese… asi que si alguien tiene una sugerencia de como puedo comunicarme con todos en un mensaje general estoy abierta a sugerencias.

Nuevamente disculpen y que tengan una buena noche yo he terminado por ahora, ire a dormir lo que me queda de la noche porque mañana tengo convivencia todo el día *suspiro* si alguien quiere hablar estoy disponible por tumbrl por el momento.