Hello Gente! ¿Cómo me los trató abril? A mi…? Bueno bien hasta que llego mayo y me enfermé, aún tengo tos aunque la disfonía se marchó, de todas formas es bueno.
Como sea el capítulo 34 Honestamente ya lo tenía redactado desde hacía tiempo pero no había podido corregirlo y más con tanta medicina encima (de hecho el capítulo 35 ya va casi finalizando XD) En fin bueno les dejo para que lean y al final del capítulo nos vemos n.n/
CAPITULO 34 — OVER TIME —
Lo primero en venir fue un embate por detrás, habiéndose movido en el tiempo era difícil seguirlo, pero Itachi quien parecía haberse anticipado bloqueó rápidamente con la espada prestada, luego giró el mango consiguiendo colocar la hoja sobre el reverso del arma de Zen, movió su cuerpo hacia un lado y luego presionó hacia abajo, todo en un segundo haciendo que Zen trastabillara hacía adelante perdiendo el equilibrio y punto de apoyo, dejándome vía libre para poder girarme a tiempo y amenazarle con un golpe al rostro nuevamente; no obstante, Zen aunque con una abertura evidente desapareció antes de que lo tocara y reapareció arriba, listo para caer encima de nosotros, específicamente apuntaba hacia mí, pero aunque él lo pensara de otra manera, yo no era una niña incapacitada, por eso cuando clavó la espada en lo que pensó era mi cuerpo este estalló en agua distrayéndolo el tiempo suficiente para que Itachi apareciera detrás de él arrojando sobre este una bola de fuego, que impacto en su espalda.
El grito desgarrador cubrió el claro por unos instantes, pero luego este se desvaneció junto con las llamas y el cuerpo de Zen, solo para re aparecer en el punto de inicio jadeando y lanzándole una mirada de odio a Itachi, sin embargo, mi amigo no se inmutó ante él y contrario a eso levantó su arma, listo para recibir su ataque si se lanzaba. Por mi parte que me había apartado cuando había dejado el clon de Agua, luego de que Itachi cubriera la vista del sujeto por unos instantes, me encontré cayendo esta vez sobre Zen que, aunque estuvo brevemente distraído con el Uchiha, consiguió notarme justo a tiempo para apartarse de que lo tocara con mi puño, sin embargo, eso no evitó que este destrozara el terreno cuando tocó la tierra, causando que perdiera el equilibrio cuando esta vibró.
Los segundos fueron rápidamente aprovechados por Itachi, que había arrojado un Housenka no jutsu, donde las pequeñas bolas de fuego cubrían las Shuriken ocultas que pronto se clavaron en el cuerpo del sujeto haciéndole volver a soltar un alarido de dolor al tiempo que olía a Carne quemada. Esta vez retrocedí hasta donde estaba mi amigo y coloqué la espada frente a mí, observando a Zen que esta vez se tomó su tiempo; en vez de saltar nuevamente vimos como las shuriken desaparecían de su carne y las heridas se cerraban como si nunca hubiera existido. "Romper o neutralizar el tiempo" Rescaté entre mis pensamientos apretando el mango de la espada un poco antes de estrechar mi mirada, presentía que la clave estaba en lo que teníamos en nuestras manos, algo que era y no era del tiempo… ¿La manera de romperlo era una paradoja? Podría ser… de alguna manera tenía la certeza de que si lográbamos herirlo con alguna de las dos armas conseguiríamos detener su molesta habilidad.
Llegado a ese punto solo podíamos intentar golpearlo cuando bajara la guardia, así que antes de que pudiera moverse fui yo la que salí disparada hacia adelante, esta vez blandiendo la espada en mi mano en un tajo en diagonal. Tiempo atrás había aprendido un poco de Kenjutsu con Fugaku y aunque no era mi fuerte, había absorbido lo suficiente, por eso cuando él detuvo mi embate con su arma chocando desde el lado contrario, cambié rápidamente de postura permitiendo que el arma se deslizara en un movimiento suave bajo la de él, para poder ahora cortar desde abajo.
Notando mi intención Zen retrocedió lo justo para que la hoja no alcanzara a tocarlo, luego lo vi mover su propia arma en horizontal para cortarme, así desplazando mi pierna izquierda hacia atrás para tomar distancia y reajustarme en un instante, balanceé mis brazos hacia abajo e intercepté su corte logrando desviarlo, luego me impulse de lado hacia el para empujarlo con mi hombro, justo done Itachi estaba listo para cortarlo. Nuevamente el albino previó nuestros movimientos y soltando su arma retrocedió para desaparecer de mi lado derecho hacia el izquierdo justo donde volvió a tomar su arma, deslizándola debajo de mi hoja para luego subir a cortar a Itachi desde abajo, no obstante, si yo podía manejarme con una espada, Itachi había heredado muy bien las artes enseñadas por su padre; Por lo cual sin esfuerzo alguno se reposicionó con gracia y bloqueó el corté, tomando inmediatamente la ofensiva al lanzarse hacia adelante, donde rompió su guardia y dirigió un corte hacia su cabeza. Esto obligó a Zen a agacharse cortando solo algunos de sus cabellos que no le acompañaron cuando volvió a saltar en el tiempo esta vez intentando tomar a mi amigo por la espalda.
Fue entonces que yo volví a relevarlo, colándome por debajo y deteniendo su espada y aplicando la suficiente fuerza desde el mango para al seguir derecho hacia la izquierda, donde abrí otra abertura, por la cual Itachi al girar volvió a atacar con un corte en diagonal, haciendo que obligáramos a Zen nuevamente a saltar en el tiempo. Lo siguiente se sintió casi como bailar, mientras que Itachi y yo cubríamos nuestras espaldas cada vez que el albino trataba de atacarnos por algún lugar, nos turnábamos en bloquear, romper y atacar. Pronto el claro se en volvió en un continuo sonido del metal chocando y chirriando en pequeños intervalos, donde nuestra defensa no fue rota en ningún momento obligando a Zen a apartarse finalmente de nosotros a una distancia más prudente, mientras jadeaba y veía como el sudor corría su frente, aunque de nuestra parte tampoco había sido fácil, ya que cualquier error podría haber resultado fatal.
— Sabes… haces mejor equipo con este —repentinamente Zen comenzó a hablar soltando una risa irritada — Ah romance…
Los ojos de Zen destellaron cambiando de color por un tono casi dorado, igualmente sus manos comenzaron a brillar y su energía se desprendió como una nube de gas venenoso, que hizo que lo que había alrededor comenzara a cambiar, parecía ir más lento hasta que parecía detenerse. Reconocí la técnica, la había empleado cuando había matado a Tenryu y le provocó el corte en el pecho a Hayato. Apreté con fuerza el arma en mi mano y miré de reojo a Itachi, era evidente que también le había afectado, solo yo que tenía la protección del tiempo gracias al poder de Shin no era afectada por este, así que tendría que hacerle frente por mí misma mientras pasaba el efecto. No fue más de un segundo en el que pensé aquello y el instante en que Zen se movió desapareciendo del lugar, así que rápidamente dejé mis pensamientos y observé los alrededores, entonces lo vi por el rabillo del ojo.
— ¡Ahí! — Proferí girando rápidamente, a tiempo para parar la espada de él y evitar que apuñalara al Uchiha, no obstante, al hacerlo Zen aprovecho para devolverme con la misma moneda el golpe que le había dado, así que pronto estalló el dolor en mi abdomen que me quitó el aliento, pero al aferrarme con chakra al suelo no logro moverme de mi lugar, sabía que iría por Itachi así que no le dejaría apartarme de él; por lo tanto aunque me faltaba el aliento tomé impulso con mi cabeza y lo golpeé con esta, rompiéndole la nariz.
— Eres terca niña —gruñó él, pero aun no me di por vencida, en cambio dejé mi chakra correr por la espada y mis músculos, consiguiendo que al maniobrar me fuera más fácil empujarlo hacia atrás.
Apenas tuve tiempo para tomar una bocanada de aire antes de tener que detener otro golpe, solo que esta vez sentí algo diferente, como si él me quitara mi energía, ya que repentinamente sentí mis piernas débiles, haciendo que el esfuerzo que tenía que ejercer fuera mayor. — Si… sin habilidad es fácil repeler la protección —le escuché murmurar antes de darme una sonrisa malvada.
Las alarmas se prendieron en mi cabeza así que usé mi pie izquierdo para expulsar mi chakra en un punto concentrado y resquebrajar la tierra bajo él, que al instante borró su sonrisa para mirar hacia abajo, estos segundos los aproveche para levantar mi pierna y golpearlo en la quijada hacia arriba, lo que alivio la presión de su espada contra la mía y tan rápida como antes con el mismo pie que lo elevó, le propiné otro golpe en el centro del pecho lanzándolo lo suficientemente lejos como para que pudiera reajustarme para enfrentarlo y evaluar brevemente mi situación. Él había hecho algo, ¿Drenó mi chakra? Lo cierto era que lo sentía más abajo que antes, pero ni siquiera había sentido cuando lo hizo.
Limpiando con el dorso de mi mano el sudor de mi rostro, mantuve mi mirada en Zen quien se levantó de donde estaba y se sacudió el polvo, a continuación, me volvió a mirar, pero con una sonrisa similar a la de un gato que se había comido al canario. — Sabes, estas más agitada con este hombre en particular, con el otro pensé que eran pareja porque te besó a conciencia y parecías salir de este mundo por unos momentos, pero… cuando te miro frente a este hombre en particular puedo ver, algo más profundo, un nivel de agresividad y sentido de protección que no veía con el otro. Así que me pregunto ¿Qué pasaría si él se rompiera? — No reaccioné de inmediato, sentía que no lograría colarse en mis defensas… o al menos lo pensé hasta que declaró —: ¿No has visto que el tiempo ya retomo su flujo hace unos momentos? Pero tu amigo no se ha movido… ¿Me pregunto en que doloroso pasado habrá quedado atrapado? Oh, espero ver como reaccionarás cuando ni siquiera pueda reconocer la realidad actual del pasado.
Perdí contra la imagen presentada ante mis ojos, la misma dolorosa imagen cuando vi a Hayato sufrir bajo los efectos de su horrible técnica, pero sobre todo recordé la traumática experiencia de cuando Itachi me olvido, no quería volver a pasar por eso; así que lo que dijo fue un detonante que por unos segundos heló mi sangre por el miedo, pero luego en solo un instante esta comenzó a hervir, y aunque normalmente no era prudente hacerlo, impulsada por la ira ciega aparecí frente a Zen lista para golpearlo. Él previendo mi primer ataque esquivó y decidió atacarme hacia mi costado con una patada, sin embargo, ya estaba lista para ello y consiguiendo sorprenderlo, con mi mano izquierda, la misma con la que planeaba lanzarlo contra el suelo, detuve su pierna en el acto y agarrándolo con fuerza lo levanté sobre mi cabeza, para luego tirarlo al suelo en un golpe seco, luego repetí la acción varias veces, hasta que lo giré y arrojé contra los árboles, rompiendo varios en el proceso. Tenía miedo, Itachi era fuerte pero ya una vez lo había perdido cuando recupero sus memorias y esa técnica… esa técnica revelaba emociones pasadas y te mantenía en un bucle sin fin. Tenía que sacarlo, no estaba Nox para guiarme, pero tenía que intentarlo. Decidida me giré para ver a mi amigo que estaba de rodillas en el suelo, con sus cabellos cubriendo sus ojos, y además parecía temblar levemente.
— Itachi-kun… —pronuncié dispuesta a ir, pero repentinamente mis piernas fallaron, dejándome sorprendida cuando me encontré de rodillas justo frente a él, a unos cinco metros — ¿Qué es esto?
— Eres fácilmente manipulable... algo me dice que tras la fachada controlada tu verdadera personalidad es la de una persona muy sensible ¿no? — Levante mi vista ahora hacia arriba donde Zen aunque golpeado había aparecido nuevamente, sus heridas desapareciendo a una velocidad más lenta según vi, como si hubiera sido afectado finalmente por mi ataque.
— ¿Qué hiciste? — Gruñí estrechando la mirada y tratando de mover mi cuerpo, pero era como si mi chakra estuviera al mínimo, no podía invocarlo y ni mis brazos o piernas respondían, solo temblaban cuando intentaba levantarlos.
— Oh bueno, es sencillo —declaró poniéndose en cuclillas frente a mí y tomando mi mentón con sus dedos, sus ojos verdes brillando con satisfacción — Me es evidente que no podría derrotarte en una batalla cuerpo a cuerpo, tu ventaja es que eres una guerrera, yo nunca fui realmente versado en la batalla, pero… mi ventaja esta sobre lo que te has negado a aceptar. Sacar los factores que me ponen en una mala posición, tu amante y tú… era evidente que lo intentaría ¿no crees?
Zen se detuvo un momento como saboreando algo y acarició mi mejilla antes de declarar —: normalmente tu fuerza podría consumir la mía, podrías aplastarme con los poderes de mi hermano, pero al negarte a ellos solo haces sencillo poder romperlos, si los desgasto en el tiempo, aunque vuelvan más adelante solo tengo que consumir los de ahora dejándote vulnerable… y si te hago mía lo que tienes también lo será. — Aunque tuviera un rostro atractivo, en ese momento Zen a mis ojos se veía como un demonio, haciéndome estremecer.
Era una batalla perdida en su terreno, tenía que afrontarlo, sin embargo… gracias a mis experiencias, había desarrollado una columna vertebral tan fuerte como para cargar la frustración y peso de las vidas Naruto y Sasuke siendo su compañera, superar el infernal entrenamiento de Tsunade, luego afrontar ese endemoniado y enloquecedor cambio sin perder la cabeza, al tiempo que superaba una crisis que pudo terminar en una guerra civil donde podrían haber muerto los que eran mis preciadas personas; además ese hombre aún nos debía a Hayato y a mí una deuda de sangre que no estaba dispuesta a ceder. — Con el contacto —dije en un susurro antes de que mis ojos también brillaran — Lo tomas con el contacto.
— Un punto para la niña inteligente, pero como vez ya es tarde para darte cuenta.
Ahora fue mi turno para sonreír, lo que le desconcertó y más cuando dije—: ¿En serio? Creo que es momento para que pagues tu deuda Zen, porque no necesito de un poder maldito para patear a alguien tan patético que deja su guardia abierta. — Sin darle tiempo, el sello en mi frente se desplegó liberando mi reserva de chakra lo que me dio el tiempo extra que necesitaba para levantar la espada que me había dado Shin y clavársela en el estómago, donde al mismo tiempo y para mi sorpresa salió la punta de su gemela por el otro costado. Levanté mi rostro justo a tiempo para ver a Itachi tomar la mano de Zen que había estado tocando mi rostro y en un movimiento veloz girarla hacia atrás.
Un crujido se escuchó en el claro al tiempo que el grito de Zen se duplicaba, su brazo estaba roto, y no había margen para que no se supiera ya que aun sin haber sido médico hubiera sido evidente, considerando que el codo se había doblado hacia el lado contrario, sobresaliendo grotescamente. Itachi tenía su Sharingan activado, pero no en su fase de tres aspas, no, ahora mismo parecía una Shuriken de tres puntas, su expresión de enfado tampoco se escapaba y su figura lo hacía ver tan imponente que me parecía casi una escultura irreal.
— Sakura —la voz profunda de mi amigo me despertó de mi ensoñación. No tuve que pensarlo demasiado para saber lo que estaba diciendo, así que rápidamente y con Itachi inmovilizando el brazo mi chakra se cargó en mi mano formando un bisturí con el que alcancé a tocar su brazo izquierdo cerca al corazón, al menos antes de que Zen intentara retroceder nuevamente, solo que en esta ocasión se dobló de dolor y solo cayó unos metros más allá de donde nos encontrábamos.
—¿Qué es…? ¿Cómo tu saliste? — Itachi miró con ojos fríos al sujeto, luego dio un paso hacia adelante con suavidad, pero enfatizando en cada uno de sus movimientos, dando una sensación tan intimidante, que hasta a mí me hizo estremecer lo suficiente como para no decir nada, incluso si estaba aliviada de verlo bien.
— En ningún momento me atrapaste en tu segunda técnica —respondió Itachi deteniéndose a menos de medio metro — Tengo que decir que detener el tiempo y liberarlo en el momento justo fue una carga física, pero el querer enviarme al pasado nunca se cumplió.
— ¿Entonces simplemente me dejaste atacar a tu compañera? ¿Y qué, querías quedarte el crédito al clavarme la espada? Entonces ella es simplemente remplaza… —antes de que pudiera completar la frase, Itachi le tomó por el cuello levantándolo y haciendo que Zen le mirara a los ojos, silenciándolo por primera vez por completo.
— Estuve tentado en más de una ocasión a intervenir, pero… Sakura tenía una deuda pendiente, simplemente no estaría satisfecha si no le permitiera luchar sus propias batallas y cobrarte por separar a su equipo. Así que sí, fingí que me afecto y espere para que cuando ella clavara la espada que le dio tu hermano, hacer lo mismo… después de todo, presiento que ambas son precisamente para eso ¿no? Un objeto que rompe las normas y envenena tus habilidades con el mismo poder que estabas robándole —Una sonrisa cruel cruzó por primera vez el rostro de mi amigo apretando más su cuello al tiempo que sus ojos brillaban — Clavaste tu propia tumba y… solo para que estés seguro, lo único que pensabas que era especial en ti, no significa nada contra ella, después de todo, ella es el punto muerto de tu técnica y la venció sin necesidad de depender de ella.
Zen tembló y luego me miró con un brillo peligroso, no obstante, no tuve ni siquiera tiempo de alarmarme, ya que automáticamente Itachi le hizo regresar su atención sobre sí mismo al apretar su tráquea y mover la espada que yo había clavado. — Ahora que ella se desquitó creo que es mi turno… quizás algo similar a tu propia medicina —murmuró para él, antes de que el sharingan girara en sus ojos y repentinamente Zen comenzara a proferir alaridos.
Con el sello retrocediendo, mi cuerpo tembló y caí nuevamente solo que esta vez no sobre mis rodillas, sino sobre mi trasero, al tiempo que veía como Itachi soltaba el cuerpo inerte de Zen. — Usaste el Tsukuyomi —afirmé viendo a nuestro enemigo temblando en el suelo, al parecer perdido en lo que sea que Itachi lo hubiera metido.
— Incluso una tortura mental no es menos dolorosa… ¿Estas bien? — Itachi finalmente se giró hacia mí y se acercó.
Por algún motivo sus movimientos me recordaron a los de una pantera y aunque no conservaba la misma mirada helada y cruel de hacía unos momentos, sentía que algo se ocultaba tras esos ojos carmesí, algo que hizo que sintiera cosquillas en el estómago y debilidad en mis miembros, incluso más de lo que sentía antes ¿Qué… pasaba con él? — Estoy bien… solo cansada —declaré en un susurro antes de mostrarle abiertamente mi preocupación. — ¿Y tú? ¿Cómo evitaste caer en su técnica?
Itachi sonrió de medio lado y se inclinó hacia mi tomándome por mi espalda y detrás de las rodillas antes de levantarme y acunarme contra su pecho donde finalmente respondió mi duda —: Creo que la pista que colocó Yagi se aplicaba bien a mí… ya sobreviví a tener dos vidas dentro de mí cabeza, cuando detuvo el tiempo fui afectado pero cuando trato de lanzarme hacia atrás lo único que hizo fue darme el tiempo para ver mis dos vidas en un color diferente, entonces simplemente recuperé algunas memorias más, pero no pudo lanzarme o encerrarme en ellas, por ello esperé a que te sintieras a gusto golpeándolo.
— Pudo casi dominarme al final —declaré con un sonrojo — No esperaba que "robara" mi chakra.
— Sabía que lo resolverías, no eres una chica que se rinda solo por eso, además eres lista, si no hubieras liberado tu sello, quizás hubieras intentado revertir su técnica de forma imprudente. — Agradecía su confianza en mí, pero de alguna forma también intuía que lo último lo había dicho como una crítica sutil a mis constantes imprudencias.
— No puedes… —un murmullo débil provino de Zen atrayendo nuestra atención, su cuerpo tembloroso levantándose con las espadas habiendo desaparecido, pero dejando en el lugar lo que pude distinguir era dos manchas oscuras, como sellos que comenzaban a extenderse —: Mío… ese poder… es mío. Mi hermano lo tenía… no sabía, yo quiero lo mismo…
— Siempre envidiaste a tu hermano —declaré golpeando suavemente a Itachi en el hombro dos veces para indicarle que me bajara sobre mis pies, solicitud que se vio reacio a aceptar por completo al mantenerme de la cintura cuando toque el suelo, quizás preocupado de que me pudiera caer lo cual agradecía porque sin mi selló la verdad sentía mis fuerzas fallar — ¿Sabes? Te burlaste mucho hace un momento, pero tu diario contenía algunos pasajes realmente decepcionantes. Siempre envidiando lo que tu hermano podía hacer, pero solo porque él fue considerado un "genio" de tu clan, pero… ¿Te molestaste en conocerlo? ¿En saber realmente si eso era lo que él quería? Es patético envidiar a alguien y lastimar a los otros solo por desear obtener algo que no es tuyo…
—¡Jamás lo entenderás! — Profirió Zen tambaleándose, pero logrando ponerse en pie, con un rostro ceniciento y los ojos cambiando entre verde y dorado como tratando de evocar su poder — Lo tienes… ¡Tú lo tienes! Talento, fuerza ¡No eres la copia de alguien más! Débil, por detrás de otro y siempre comparado por ello, el destino le sonríe a los más fuertes ¿Por qué no ser equitativo? Somos hermanos, pero Shin nación con fuerza, poder ¿En cambio yo que?
— Te auto compadeces, pero no miras a los demás, y tampoco es que te importe el sufrimiento de los otros. Leí tu diario, ni siquiera te importó acabar con vidas inocentes ni antes ni ahora, niños, jóvenes que tenían sueños y probablemente futuros que tú destrozaste. Tu destino tú mismo lo forjaste, eres débil no porque nacieras bajo una mala estrella o porque tu hermano tenga más "dones", eres débil porque no fuiste capaz de afrontar la realidad y tu propia vida, sin mirar tus propios talentos te enfocaste en alcanzar los de otros descuidando lo que seguramente pudiste haber explotado y crecido en ello, enserio eres un ser en desgracia —declaré con firmeza, intentando reprimir más cosas. Ahora que estaba en el suelo, habiendo sido derrotado tenía tantas emociones negativas, realmente deseaba hundirlo en tierra, asegurarme de que sintiera el peso de sus pecados… pero me contuve; como dijo Itachi había cosas más dolorosas.
— Perra… ¿Me miras así porque piensas que ganaron? ¡¿En serio lo crees?!
— ¿Y no debería ella? —la voz escalofriantemente suave junto a la presencia de Tsukino se hicieron presentes en el claro, justo detrás de Zen, el cual se quedó estático por unos momentos antes de girar sobre su hombro para encontrar al guardián mirándolo con indiferencia — Como dijo Yoru, cada cosa se alineo perfectamente.
— Tu…—balbuceó Zen antes de que en un pestañeo su boca comentara a expulsar sangre y un pequeño apéndice rosado, que reconocí como su lengua cayera a su lado — ¡Gahhh!
Dirigiendo sus manos a su boca Zen se inclinó hacia adelante profiriendo un alarido doloroso que solo hizo fruncir el entrecejo a Nox con lo que evidentemente era irritación. —Como mencionó Sakura eres un gusano bastante lamentable y ruidoso… de todas formas gran trabajo ustedes dos ¿No era tan difícil como pensaban cierto? — Sus ojos brillaron en rojo, pero solo había una burla juguetona hacia nosotros, no había malicia.
— De no ser por Shin… —empecé, pero Nox chasqueó la lengua y pareció aún más divertido, lo cual me hizo detenerme en mis palabras iniciales y reformularlas por —: ¿Exactamente qué te parece divertido?
— Oh es sencillo, estaban tan aterrados anoche y ahora que terminó se dan cuenta de que, si bien terminaste con tu energía abajo, no están heridos. Aunque dices que fue por Shin lo cierto es que evaluaron bien sus equipos, después de todo tú y este Uchiha eran la respuesta más acertada para enfrentar a este sujeto con facilidad ya que ambos hasta cierto punto tenían inmunidad de sus técnicas. Probablemente tu amigo… Uchiha Shisui hubiera sido la segunda mejor opción considerando que Yoru le dio a un familiar que le hubiera arrancado la garganta a este sujeto y también sellado sus habilidades, lo que nos lleva a que con Shiratora era la opción menos recomendada pero no es que no hubieran podido juntos, solo que el camino largo a golpes los hubiera matado… probablemente. — Sentía que Nox estaba disminuyendo la gravedad de la situación y estaba ocultando algo más, no creía que hubiera sido así de simple, pero lo cierto era que me aliviaba que como decía estuviéramos en una pieza.
— Entonces ¿Qué pasa con él? — Cuestioné mirando a Zen retorciéndose aun en el suelo intentando al parecer evocar sus poderes.
— ¿Hm? ¿Te preocupa? — Cuestionó Tsukino girando su rostro.
— No, particularmente quiero saber porque si estás aquí, quiere decir que tomaras tú mismo cartas en el asunto.
El guardián me miró por unos momentos antes de sonreír nuevamente con diversión — ¿Quieres vengarte? ¿Por lo que hizo? No te vez solo satisfecha con la pelea de ahora. — Me estremecí y recosté más contra Itachi que me sujeto con más firmeza contra sí; no es que pensara que nos fuera a hacer algo, pero ese guardián tenía un aura bastante salvaje en esos momentos.
— Yo… mentiría si dijera que pienso que es lo único que merece, pero… no me corresponde ahora mismo decidir su destino ¿no?
— Tengo que dar crédito a Yoru… eres una chica brillante y justa. Tienes razón, este chico ya está bajo nuestra jurisdicción, o mejor dicho la mía así que puedes estar tranquila… me aseguraré de darle un merecido castigo. — Dichas sus palabras chasqueó los dedos y de la misma sombra de Zen brotaron manos oscuras y huesudas que le envolvieron por completo y comenzaron a arrastrarlo hacia abajo, al tiempo que se veía que donde tocaban el cuerpo del albino comenzaba a surgir un aroma a quemado junto a un vapor carmesí. Así entre alaridos desapareció entre la oscuridad que se desvaneció solo cuando ya no se pudo ver ni un cabello de Zen. — Bueno, él quería adquirir el poder de su hermano, pero se mezcló con un caído así que juzgarlo como se juzgaría a un caído es lo correcto.
— ¿Pasa algo con eso? Si lo mencionaste quiere decir que lo hace ¿Qué lo hace diferente de su antiguo estado? — Siendo tomada otra vez en brazos por Itachi, yo pregunté curiosa al guardián, que tarareó un momento mirando al cielo antes de volver su mirada ahora desinteresada sobre mí.
— Bueno ¿lo pone a una altura similar a un caído? No tan fuerte pero su energía vital se mantiene, vieron que al principio se ¿curaba rápido? De no ser por las espadas que le clavaron nunca le hubieran matado… o bueno tu podrías haberlo inhabilitado si usabas tu chakra, pero no matado… — Entonces Tsukino frunció el entrecejo y miro directamente a Itachi estrechando los ojos y se acercó hasta quedar a un palmo de distancia.
— ¿Pasa algo? — Esta vez cuestionó Itachi que hasta el momento solo había sido un oyente entre nosotros y, aunque estaba mirando directamente al guardián a los ojos no mostró sorpresa o temor, algo que me recordó a Shisui el día de ayer.
— Tu tenías otra carta bajo la manga en caso de que confirmaras que no podían matarlo. — Declaró el hombre estrechando la mirada — Es la primera vez que veo a un mortal poseer dos reliquias de los dioeses. Un sello de tu nivel es de considerar y la defensa igualmente impresionante.
Itachi no respondió inmediatamente, contrario a eso pareció meditar las palabras de Tsukino un momento antes de declarar —: ¿Hay algún inconveniente con ello?
—No, pero eres interesante. De todas formas, en un principio cumplieron con derrotarlo y me dejaron solo la parte de limpiar el desastre así que lo agradezco. Por ahora creo que deberían ir con sus amigos.
— Shisui y Hayato ¿Están en problemas? — Me tensioné asustada, ero Nox solo soltó una risa divertida antes de responder —: No están en peligro de morir si eso preguntas, pero digamos que están cansados, ellos tuvieron la mala suerte de encontrarse con el caído, pero han logrado una hazaña loable por resistir contra ella antes de que llegara Yoru.
Estaba preocupada, aunque dijera que estaban bien si realmente se habían enfrentado a alguien como ellos no creía que estuvieran en una pieza, así que miré a mi amigo que asintió de acuerdo con mi pregunta silenciosa. — ¿Están muy lejos? — Cuestioné al guardián, que al escuchar mi pregunta sonrió con complicidad al tiempo que se daba la vuelta.
— Bueno… si quieren saber, puedo hacer una concesión y llevarlos allí…
-0- Shisui/Hayato -0-
Shisui nunca había dudado de que estar del lado incorrecto de los guardianes era malo… no corregía, no dudaba que estar del lado malo de "esa" guardiana en específico era una petición de muerte… quizás no inmediata, pero si inevitable, fue por eso que había sido tan cuidadoso en las interacciones que tenía inicialmente con Yui y la observó con cuidado, midiendo sus reacciones, pensamientos y emociones; no obstante, entre más tiempo la observaba más intrigante le parecía. Era una mujer de varias fases y oculta bajo capas que con el tiempo le gustaba desvelar y ver, fue por esto que, aunque debería estar seguramente alarmado por la cantidad de hostilidad que la chica había desprendido en los pocos minutos de estar allí, realmente se sintió tranquilo y expectante, intrigado por ver este lado, que incluso era peor que el que había dejado ver cuando vio a su primer caído, donde había un airé de peligro a su alrededor, frío y sin la característica arrogancia que había marcado antes, solo era una mujer con un trabajo y objetivo en mente. Es por esto que, aunque estaba apartado de su batalla y ahora observaba en su descanso junto a Hayato desde una distancia prudente, mantenía una estricta vigilancia sobre las dos mujeres, especialmente la albina que desde que había llegado, no se había movido mucho de su posición simplemente había acabado una y otra vez con los lacayos de Dalya que ahora reposaban en el suelo como una montaña de cuerpos alrededor de Yui.
— Kruuuu —su atención se desvió un poco hacia el dragón que había vuelto a su tamaño pequeño y reposaba en su hombro.
— ¿Ahora que dijo? — Gruño Hayato a su lado, espalda recostada contra el tronco derribado en el que él estaba sentado, mientras una mano cubría su rostro y sus piernas yacían extendidas contra la tierra.
— Hm dijo que Zen ha sido reducido, Itachi y Sakura lo derrotaron con facilidad al parecer —respondió el Uchiha con una sonrisa pensando en sus dos mejores amigos, parece que había juzgado bien con Itachi los equipos.
La noche anterior habían estado tratando de desglosar el acertijo extraño que había colocado Yagi antes de ir a dormir, y al final llegaron a la conclusión de que lo más seguro era que Itachi correspondiera a uno de ellos siendo inmune a ser atrapado en la técnica del hombre, lo demás sería cuestión de predicción; Por otra parte también Itachi mencionó que llegado el caso él poseía la forma de sellarlo, así que los dos tenían más probabilidades de terminar con su oponente de forma limpia si se lo llegaban a encontrar. — Espero que Sakura le haya humillado y cobrado por lo que hizo —murmuró Hayato apretando los puños.
Lo cierto era que el Shiratora había luchado con la idea de sentirse derrotado dos veces y que en las dos su compañera le haya tenido que salvar, por eso habría querido acompañarla, sin embargo, entendió de alguna manera el motivo de los equipos de ese día, así que delegó la venganza a Sakura como igualmente retribución de que ella había sido la que había reparado su cuerpo roto en dos ocasiones y había sufrido la traumática experiencia de perder a su compañero bajo sus propias manos. — Seguramente le habrá golpeado en más de una ocasión, Sakura no se quedaría con pocos impactos, sea lo que sea Tsukino-san parece que lo ha puesto bajo custodia.
— Ese dragón es muy versátil —se burló Hayato ligeramente, pero reconociendo con un poco de envidia que era conveniente.
— Kruuu kruu — Orgulloso Yagi infló el pecho y Shisui río entre dientes para luego dar unas palmaditas en la cabeza al pequeño y retomar su atención en la albina que les estaba permitiendo ser ociosos en ese momento y recuperar energías al enfrentarse ella misma a Dalya, quien desde que había visto a la chica no había parado de temblar y proferir murmullos bajos mientras creaba más malditos contra ella.
Por su parte Yui no se había movido solo por un motivo, evitar el despliegue de su temperamento de forma descuidada. Cuando vio a la mujer al llegar había estado tan cerca de simplemente ceder a la pereza y optar por el trabajo fácil e instintivo o como ella lo denominaba al el "estilo Nox", arrancando su cuello o doblegándola a un estado tan deplorable en un instante, pero no hizo, ya que ella tenía que ser juzgada y… también, existían otros dos motivos más para contener su ira, el primero según lo hecho merecía enfrentar la desesperación bajo su mano y lo segundo, no quería mostrar ese lado a los dos hombres que esperaban más allá. Por lo tanto, ahora con la cabeza más fría y segura de cuál era su siguiente paso a seguir, finalmente chasqueó los dedos, entonces múltiples estacas de luz cayeron y perforaron la carne de los nuevos malditos que se acercaban a ella a gran velocidad, haciendo que estallaran todos en polvo platinado que se extendió en el campo dejándolo resplandecer como pequeñas estrellas sobre este.
Seguido a esto Yui dio un paso al frente y luego otro acercándose a Dalya que se estremeció y levantó la mano para intentar sacar otro, no obstante, Yui siendo más veloz apareció frente a ella y con un movimiento elegante desenvainó la espada en su cinto y cortó la mano de su oponente para un segundo después volver a envainar su arma. No hubo un grito desgarrador pero la rubia se quedó mirando su miembro cercenado antes de volver su atención a la albina que tenía una expresión plana, pero sus ojos tenían un pequeño destelló carmesí dentro de las profundidades azules que para ese punto estaban tomando una tonalidad casi violeta — ¿Has terminado? — Declaró Yui que, aunque era un poco más baja que la rubia la hizo retroceder, al tiempo que le lanzaba miradas furiosas. — ¿Sabes por qué sigues respirando Dalya?
— ¿Por qué hablas ahora en nuestro idioma? ¿No quieres que los humanos se enteren más de lo que eres?
— Ellos ya lo saben, pero hay cosas que prefiero que no se filtren… ya sabes reglas que has decidido claramente lanzar por la borda con tus caprichos —contestó la albina ladeando ligeramente la cabeza, su mirada estrechada.
— ¿Caprichos? — Viendo que la albina quería mantener una conversación privada se decidió por volver a hablar dentro del idioma humano, solo para irritar a la joven guardiana, no obstante, Yui ya lo esperaba considerando su personalidad y quizás sus motivaciones. — Lo dice la que tiene todo en la palma de la mano, alguien que finge ser la buena de todo esto, sin embargo… ¡¿Acaso no eres una perra egoísta?! ¡Te crees la gran cosa y siempre crees que tienes todo en tus manos! Pero si no tuvieras tu puesto no serías nada, tuviste un golpe de suerte antes, pero de no ser por ello seguirías siendo la misma debilucha que cuando eras una mocosa.
Suspirando y conteniendo su irritación Yui dio un paso atrás, entonces cerró los ojos por unos momentos, en los cuales repentinamente su cabello se volvió negro la presencia que mantenía cambió radicalmente para compararse a la de cualquier mortal, incluso su ropa que parecía antes resplandecer ahora era común. — Si así lo quieres, entonces permitiré una lucha a mano —declaró la pelinegra ahora abriendo los ojos revelando un tono café oscuro — Quieres una batalla a tu altura ¿no? Por supuesto no emplearé mis habilidades "ganadas" como dices, y por supuesto si me derrotas podrás marcharte, no te seguiré.
— ¿Sin tu poder? — Una risa estridente de parte de la rubia resonó en el claro, al tiempo perdió el temblor constante en su cuerpo y ahora miraba a la pelinegra como si prometiera una cacería exitosa. — ¿Así de arrogante eres? Lucharas como esos mortales.
— ¿Hm? Pues sí, solo lucharé con mis armas regulares, después de todo esas son herencias de mi madre. Además ¿Hay algo de malo? Shisui y Hayato para ser la primera vez que luchaban contra un caído té abrumaron bastante —declaró Yui con un brillo de burla en los ojos, al tiempo que ajustaba sus guantes.
— No me hubieran derrotado, al igual que tú, sin la protección de tus poderes de la luz la corrupción también te consumirá, ¡has hecho una jugada muy estúpida! ¡No solo te derrotaré para que no me sigas, te eliminaré por completo! — Incluso sin darle aviso y habiéndose su brazo regenerado invocó otro de sus malditos que en menos de una fracción de segundo salto sobre Yui que parecía aun estar arreglando sus guantes, pero que no perdió de vista a su atacante lo que hizo que consiguiera esquivarlo en un salto hacia atrás.
El lugar que impacto el monstruo se tiño de negro extendiéndose como peste, no obstante esto no disuadió a la pelinegra, que tomó impulso antes de en una carrera de chakra lanzarse hacia Dalya, ignorando completamente a su juguete creado, una cuchilla pequeña en mano similar a una ninjato, pero que no llegaría la hoja a ser de más de 20 cm. Con suavidad la joven deslizó el arma hacia Dalya, que confiada decidió detenerla con sus propias manos esperando que esta no hiciera más que un corte como cualquier otra arma mortal, no obstante, esta en cambio de detenerse corto limpiamente la carne, dejando solo el pulgar a la vista mientras los cuatro dedos caían al suelo, igualmente en esta ocasión el lugar donde la carne fue separada contrajo un color morado al instante.
— ¿Qué? — Recobrando el miedo Dalya retrocedió a traspiés, pero no hubo momento de descanso ya que al instante la pelinegra como si danzara giró sobre sí misma y uso su pierna izquierda para dar una patada baja con el reverso de su pantorrilla hacia la de la rubia, rompiendo su equilibrio, seguido a eso volvió a levantar la cuchilla hacia la rubia con toda la intención de cortar su cuello, pero esta vez conociendo los efectos Dalya usó la sombra para desaparecer del punto y aparecer detrás de Yui de dónde ella misma materializó su propia arma para cortar a la pelinegra por detrás en un movimiento horizontal.
Sin embargo, aun sin ver la joven guardiana se agachó a tiempo para esquivar el movimiento, seguido a esto se impulsó hacia atrás, consciente de que su oponente no estaba lejos, luego cambio el arma de mano, dejando libre su derecha con la cual tomó del antebrazo a la mujer, asegurándola para que no escapara y golpeo con la parte de atrás de su cabeza su rostro, rompiéndole la nariz en el proceso. Sin detenerse uso su propia fuerza, con su cuerpo como punto de apoyo para para jalarla por su costado y dejar a la rubia en frente, donde dando un giro a su cuchilla con su izquierda cortó ahora el brazo de Dalya de abajo hacia arriba y luego pateó elegantemente a la caída con el borde de su pie, lanzándola contra los árboles a su derecha.
El movimiento fue tan fluido y elegante que desde donde estaban Shisui y Hayato casi habían pensado que estaba bailando en el sentido literal, no había movimientos desperdiciados y considerando la experiencia y conocimiento sobre su oponente, esto le daba una ventaja que ellos no tenían en el momento de enfrentarla, pero que estando a esa distancia ambos aprovecharon para observar y recaudarlo como experiencia propia de batalla. Shisui especialmente tenía su sharingan activo para tratar de evitar perderse algún movimiento, pero aún con este todo pasaba tan rápido que era complicado seguirlas.
— ¿Cómo es que Yoru puede aún luchar con ella cuando redujo su poder a como si fuera un humano? —murmuró Hayato frunciendo el entrecejo.
Shisui estaba preguntándose algo similar y sacando sus propias conclusiones, pero la respuesta llegó más rápido de lo que esperaban. Fue cuando Yui salto hacia un lado, a tiempo para evitar ser golpeada por la bestia de Dalya que rugió al tiempo que golpeaba el suelo. — ¿Te molesta que lastimara a tu creadora? Es hilarante que la defiendas considerando que fue ella la que te torturó y te volvió un demonio de bajo perfil —resoplo ella girando la daga en la mano y regresándola a tomar con la derecha.
— ¿Cómo? ¿Qué tiene esa cosa…? No puedo regenerarme —Dalya temblaba y miró hacia la pelinegra que seguía manteniendo una expresión aburrida, pero viendo que su oponente no tenía planes de moverse pronto, regresó la daga a su funda, que estaba fuertemente sujeta a su pierna derecha y comenzó a recoger su cabello ahora en una coleta alta, dejando solo el flequillo suelto. — ¡Hiciste trampa, mentirosa! Si estas usando tus trucos…
— Llamar a alguien mentiroso solo porque no sabes porque estoy pateando tu trasero cuando quité mis habilidades principales, es típico de alguien sin cerebro para la batalla y solo se concentra en lo fácil, junto a la fuerza bruta —declaró Yui sacudiéndose el polvo antes de cruzarse de brazos — No he usado ninguna trampa, simplemente las armas que uso están adecuadas para luchar contra gente como tú y como yo, ¿Olvidas que ya hubo antes un humano que lucho mano a mano con alguien de mí mismo nivel? Si bien nunca logro matarlo, hizo lo que otros no pudieron. Y ese humano pudo matar caídos en su tiempo ¿Sabes por qué?
Realmente no era una pregunta real, la pelinegra simplemente lo preguntó debido a que la mujer había omitido evidentemente un punto vital en todo esto, algo que parecía que acababa de recordar considerando que su expresión se hizo más cenicienta, entonces continuó —: es correcto, cuando te vuelves un perdido o caído pierdes la protección innata de nuestra sangre, puedes tener más fuerza y resistencia, incluso regeneración pero esta se reduce considerablemente, solo tengo que retirar el margen de protección con algo más… "persuasivo".
Dalya tembló mirando el arma y luego a Yui, estaba pensando en lo injusto de todo, pero no dejaría que la humillara así. Así que esta vez fue ella la que se lanzó, hacia adelante, apareciendo en un segundo frente a la pelinegra y con su único brazo cubierto de oscuridad, la corrompería, la haría revivir también sus peores pesadillas y se aseguraría de matarla luego, ella podía hacerlo si la hacía caer con ella y la fortuna es que los guardianes que estaban hacia el lado de la luz cuando caían lo hacían de forma terrible, así que si era inteligente esquivaría hacia donde su creación estaría esperando para envenenarla.
Había siempre un plan, pero como lo había dicho la joven guardiana, Dalya no tenía la forma de pelear con cerebro, porque si lo hubiera hecho hubiera pensado desde el primer momento que ella no era tan arrogante como para subestimar a su oponente y reducir sus ventajas si no supiera que ganaría la batalla. Por su puesto siempre existía un margen de error, ya sea contra un oponente novato o uno experimentado, nunca podías bajar la guardia y eso era algo que había aprendido hacía muchos siglos, algo que parecía que esa mujer había omitido por completo en favor de pensar mancharla al mostrarse ''vulnerable'', lástima que, para ella, o desconocía quien era su principal compañero de entrenamiento y que… desde hace años la oscuridad no hacía efecto en ella.
Fue por esto que sin temor alguno detuvo su golpe sin miedo, con su mano izquierda, dejando que la chica sonriera triunfal por al menos treinta segundos antes de que la moviera hacia donde la quería; tomándola firmemente de la muñeca del puño que había lanzado, la ajusto también con su mano del cuello, entonces la movió a la izquierda donde había aparecido la bestia creada por ella y que ya tenía las fauces abiertas para intentar morderla, sin embargo Yui se aseguró que lo que tuviera en primera línea fuera su misma creadora.
Finalmente, un grito desgarrador apareció en el claro saliendo de la boca de Dalya, producto de ser víctima de la propia corrosión de su pequeño demonio maldito. Entonces Yui ya cansada de ese juego mordiendo un poco la punta de su pulgar colocó una gota en su propio antebrazo donde había aparecido un sello de invocación y de este salió limpiamente una kodachi. El color del arma era de un bonito dorado claro con pequeñas piedrecillas zafiro en la empuñadura y llevaba un cordel con un escudo de una estrella colgando de este. Sin meditarlo demasiado desenfundó el arma y corto a ambos enemigos en un corto movimiento en diagonal; al instante la bestia soltó a Dalya y profirió un alarido antes de estallar en polvo negro que fue absorbido por la hoja del arma, igualmente de la herida de Dalia salió una sustancia similar al petróleo que tuvo el mismo destino a manos de la Kodachi. Concluido aquello Yui volvió a enfundar el arma, pero esta vez la ajusto en el cinto que llevaba — Bueno, has perdido. Ahora ni siquiera tendrás fuerzas para sacar otro de esos.
— Tú ¿Cómo? Si no hiciste trampa ¡¿Cómo explicas que no te afectara?! — Gritó Dalya intentando ponerse de pie, pero las fuerzas le fallaron y cayo de espalda —Y… ¿Qué me hiciste?
Rodando los ojos Yui chasqueo la lengua antes de responder —: Olvidas que estoy acostumbrada a enfrentar la oscuridad… mi compañero, es después de todo el líder de los de su facción, por otro lado, mi condición puede parecer desventajosa, pero es realmente útil. Por otra parte, alimentar mi ira no era posible, tengo mi cabeza bien puesta sobre mis hombros y… respecto a lo que te hice, simplemente sellé tus poderes con Rin… ¿Oh la recuerdas? Es completamente valida dentro de nuestro acuerdo ya que es herencia de parte de mi madre, así que, aunque tenga una esencia diferente a la de una espada originalmente, actualmente es una.
— ¡Tramposa! ¡Incluso con todo esto, siempre les sonríe a ustedes! Vida afortunada, poder… pero si quieres conseguir pasar tus límites eres un villano, pero los que tienen el poder de nacimiento se quedan con todo. Incluso ahora, cuando eras una mocosa te arrastrabas, pero repentinamente tuviste la fuerza ¡¿Es normal?! Apuesto que hiciste algo alguien con tus orígenes nunca podría haber escalado hasta allí, y adquirir su atención… tú… —como si hubiera recordado el motivo por el cual odiaba a Yui el rostro de la mujer se torció en una mueca de odio antes de declarar — ¡De no ser por ti él me hubiera aceptado! ¡ÉL! ¡ELLOS!
— Afortunada ¿he? —murmuro Yui suavemente con una burla sin humor. — Para que sepas mis orígenes son lo de menos ¿Y en serio quieres hablar de eso? Aunque no es una transgresión directa no es mi culpa que no sepas elegir tus batallas. Además ¿No me digas que hiciste todo este berrinche porque alguien te mando al diablo?
— ¡Eres tú! De no ser porque estas pegada a él me hubiera aceptado… ¿Qué tiene de hermoso alguien como tú? No tienes encanto, o sensualidad, siempre vistiendo de manera tan vulgar, juntándote con humanos… y el linaje de tu perr… —esta vez antes de que pudiera terminar la oración el sonido del hueso partirse fue más rápido, al deliberadamente Yui aplastar una de sus piernas con su pie, haciendo que la mujer soltara un alarido de dolor.
— Antes de que caves tu tumba más allá voy a detener tu parloteo y declararé simplemente tus crímenes —aunque Yui lo pronunció esto con un tono parejo sus ojos habían mostrado un color carmesí similar al de Nox por unos segundos, sin embargo, luego de una respiración profunda el tono de sus ojos volvió a la normalidad.
— Cierra la boca… ¡Ya veraz una vez que el niño desate el poder original podré acabar contigo! Tu… jactándote de tu fuerza, además presumes lo cercana que eres a él… ¡Una perra completa! — Yui suspiró y frunció el entrecejo, estaba muy enfadada de hecho quería arrancarle la garganta a Dalya y darle una muerte lenta de ser posible, sin embargo, se estaba conteniendo porque necesitaba que hablara.
— Sigues siendo tan infantil como siempre ¿No te cansas de "coleccionar" galanes? Incluso eres tan audaz para querer ir tras quienes ya tienen familias —declaró Yui haciendo una mueca de desagrado antes de añadir — e incluso por a quien acabas de ver por primera vez. Por otra parte, ese chiquillo ya no es un problema del cual tenga que ocuparme.
Temblando en el suelo Dalya apretó los dientes, esa fuerza abrumadora era lo que más odiaba de Yui, pero no solo eso, odiaba como estaban clasificados y destinados a hacer algo desde el nacimiento, sin posibilidad de escapar, pero ella… por su maldita condición… lo sabía ella sabía que no la regían las normas normales de ellos, era solo una frágil novicia cuando era pequeña, sin que los demás esperaran nada de ella, pero cuando la volvió a ver había cambiado, nunca supo que fue lo ocurrido pero le pareció injusto como comenzaron a prestarle atención aunque ella no la buscaba, pero la gota que derramo el vaso fue cuando uno de los únicos hombres —al menos el que no tenía hijos— le rechazó brutalmente, y se burló de ella mostrando claro desagrado en su cuerpo, solo para días más tarde ver que era cercano a la maldita de Yoru.
Fue entonces que la línea del tiempo se alteró y pudo salir de su rutina, entonces decidió buscar poder, poder donde podría manchar la reputación y fuerza de Yui, donde podría cambiar su destino y demostrar que alguien como ella no era nadie, devolviéndola a donde debía. Ella era responsable del tiempo, así que aliarse con Zen había sido lo principal, después de todo no encontró a su hermano, al parecer la maldición o castigo impuesto había sido tan severo que al usar su último poder había desaparecido… o así lo creyó hasta que Zen le dijo que él sabía que su hermano estaba vivo y probablemente ligado a alguien. Intentó encontrar a la persona, pero solo encontraba vestigios débiles que rodeaban una aldea ninja, no sabía que había cambiado allí, pero notó que había alguien que parecía perdido y a quien podía usar para consumir su odio al tiempo que lo aumentaba contra lo que sea que había destruido su destino. Así que usó la flauta y la hizo bailar hacia ella, cortando en ella lo que pudiera hacerla entrar en razón, solo vive odiando consumida hasta que la oscuridad del cambio te consuma, entonces… él aparecería cuando tuviera que hacerse cargo de ella, podría verlo trabajar de lejos y fantasear con él.
Lo hizo por años sin que la tonta supiera lo que le ocurría, pero luego, la decepción llegó cuando repentinamente un día la oscuridad había sido consumida, él se había adelantado cuando menos lo esperaba. Así que como tantos años desde que había formado el acuerdo con Zen, siguieron matando, acumulando corrupción, y haciéndose más fuerte al tiempo que aumentaba los poderes de Zen gradualmente. Oh claro que recordaba antes de todo eso que hubo uno que al recuperar su cuerpo luego de que Zen segara su vida, decidió mantenerlo, era guapo ella lo deseaba así que lo trajo hacia ella y lo hizo de ella… hasta que él se fue, y ella lo dejó porque volvería, había roto las reglas de los muertos para convertirlo y dejarle vivir, así que volvería… y ella consumiría como un súcubo lo que él trajera, tal como otros habían caído.
— Tu mente retorcida es asquerosa en más de un sentido —declaró Yui repentinamente sacando a la mujer de sus cavilaciones, había estado tan callada, y ella se había perdido en su mente que se había olvidado, olvidado que esa maldita estaba allí.
— Él vendrá y…
— Sigues con eso… me he contenido porque necesitas un castigo y también… bueno acabas de confirmar el resto de mis sospechas. Ahora es más claro que fuiste tú quien manipulo a Izumi Uchiha, mando a matar al compañero de Sakura y casi lo consigues con su otro compañero, igualmente al parecer estuviste jugando a Dios trayendo de regreso a uno, a quien según vi usaste para satisfacer tus deseos depravados… aunque le aplaudo a la criatura por irse y hacerte creer que volvería, igualmente destrozaste cuántas vidas inocentes… ¿Y todo porque querías mi lugar? ¿Estás celosa de que Nox y yo seamos cercanos? ¿Por qué te parece divertido tener hombres bajo tu cuidado? Eres realmente repugnante —declaro Yui — De todas formas, pronunciando tus crímenes no tengo motivos para aplazar lo inevitable.
Aunque no había sido un despliegue de información detallada, hubo información que los dos pelinegros pudieron sacar de la conversación que habían mantenido ambas, datos que para ese punto cada uno detalló de forma diferente, pero ambos tenían algo claro, parece que había una manera de enfrentar a un caído o un guardián, incluso siendo humano. — ¿Ya terminó? — Siendo tomados por sorpresa los dos hombres voltearon solo para encontrar al compañero de Yui soltando el hombro de Itachi que estaba cargando a Sakura, ambos parecían un poco enfermos, pero estaban tan bien como ellos.
— Ella la aplastó sin sudar, incluso habiendo retirado sus habilidades… lo que sea que signifique porque ¿En serio pueden…? — Estaba diciendo Hayato cuando Nox mostrando una expresión de sorpresa por unos instantes lo silenció cuando cambio por una fuerte risa y que se quedó como en una sonrisa que parecía malvada, mostrando su deleite con la noticia.
— Quien diría que peleara sin sus poderes solo para ello, quiere decir que estaba lo suficientemente molesta como para humillarla de esa manera ¿En serio lo hizo? Dime ¿Cuántos movimientos hizo?
— Parece que disfrutas con el sufrimiento de los demás —murmuró Sakura bajando de los brazos de Itachi, pero manteniendo un agarre de hierro sobre él, no sintiéndose capaz de estar de pie sola, considerando que el movimiento a través de la oscuridad había sido nauseabundo.
— De hecho, lo hago en este caso, me molesta no haber llegado a verlo porque para que Yoru luche en una condición similar a un humano contra alguien de nosotros o un caído quiere decir que sus emociones no son estables para no asegurar un desastre, y solo significa que quiere romper el maldito orgullo de alguien con lo que considera una debilidad. Es cuestión de la situación niña… y viendo de quien se trata realmente me sorprende ¿Qué habrá hecho que pierda los estribos? Quizás debería preocuparme por peso, pero es realmente interesante —respondió Nox sin inconveniente mirando como su compañera procedía a atar a la mujer con su propia técnica.
Ahora que la miraba la recordaba, era aquella mujer vulgar que se había intentado insinuar a él cuando aún podría estar en su juventud temprana, lo que los humanos llamarían "adolescencia", pero no solo a él. Ahora yacía en su naturaleza con los pechos al aire, ropa desgastada, sin un brazo, pierna rotos y la condena inicial de Yoru. Para ese punto Nox consideró dejarle ambos trabajos de castigo a ella, después de todo lidiar con ella sería una pérdida de tiempo y de paso, dejaría vía libre para que su compañera hiciera lo quisiera… quizás lo propusiera.
— ¿Ustedes pueden volverse humanos? —Cuestionó Sakura con curiosidad, algo que los otros tres varones estaban preguntándose también luego de escucharle hablar a Nox.
— ¿hm? Realmente no, dije "similar" a un humano, personalmente no puedo hacerlo pero, Yui sabe es especial, puede suprimir su poder hasta un grado similar —declaró él encogiéndose de hombros, habiendo modificado la forma en que la llamaba fácilmente lo que les sorprendió, sin embargo antes de que pudieran preguntar algo más él volvió a hablar — ¿Deseas que termine? Tienes una expresión bastante aterradora.
Acercándose en silencio Yui había llegado, nuevamente con su cabello plateado bailando detrás de ella, pero aun siendo sostenido por una coleta. — Es tu tarea después de todo, ella pertenece a tu facción y lo que sea que hayas pensado elimínalo, no voy a irme por el camino fácil —declaró la joven sin el tono jovial de siempre.
— Hm… así de mal entonces, bien creo sería un desperdicio, pero te concederé esto, pero solo contéstame esto ¿Mencionó la palabra tabú?
— Solo fue la cereza del pastel, de todas formas, un viaje por tu vía con las ataduras que le puse… creo que será agradable —contestó la joven dejando que solo por un momento se deslizara un pequeño brillo de satisfacción en sus ojos — De todas formas quiero asegurarme que ellos cuatro estén bien.
— Como digas —dejando de lado a los shinobi, Nox paso de largo a su compañera hasta donde estaba la otra mujer atada.
Entonces la albina suspiró y frotó su frente un momento tratando de calmar sus ánimos, no obstante, era difícil considerando lo que la molestaba. — ¿Estas bien? — La mano cálida de Shisui se posó en su hombro atrayendo su atención y cercanía y voz sugerían que su preocupación era real y esto ayudó a aplacar la lava hirviendo que sentía se había convertido su sangre, pero aún se sentía mal, irritada y de alguna manera también sentir la mano del Uchiha y su cercanía provocaban que deseara ir contra su decisión y volver atrás y hacer sufrir un poco más a la mujer, pero nuevamente se contuvo.
— Un poco irritada pero bien tu… ¿Estas bien? Ella… ella… —ni si quiera podía mencionarlo sin sentir que sus ánimos se volvían a elevar y sus mejillas se volvieran dos faros rojos, por dos motivos completamente diferentes.
— ¿Quieres que ayude? ¿Estas tratando de preguntarle si está bien luego de casi ser violado por una loca que estaba casi completamente desnuda sobre él? — Cuestionó Hayato desde su posición desde el árbol, sin embargo, supuso no había medido bien sus palabras ya que hubo dos reacciones distintas al tiempo habiéndose roto el suelo debajo de Yui cuando el poder que había tenido contenido se filtró con fuerza y junto a este el grito sorprendido y furioso de cierta chica de cabellos rosa —: ¡¿Qué esa hizo que?!
Sintiendo de repente que estaba mejor, Sakura sintió fuego formándose en su interior y dirigió su mirada sobre sus dos amigos, y luego hacia la mujer que parecía ahora temblar de cara al suelo mientras Nox estaba hablando algo con ella al tiempo que se aseguraba con su pie que no pudiera levantar este del suelo. — ¿Esa mujer intentó violarte Shisui? ¡Yui déjame aunque sea golpearla una vez! No creo que importe cierto — Casualmente renovada los ojos verdes de la joven pelirosa miraron por primera vez a la guardiana sin ningún tipo de reserva, parecía una leona que en cualquier momento iba a arrancar cabezas.
Por increíble que pareciera fue justamente esa reacción la que hizo que la albina repentinamente perdiera gran parte de su enfado, y repentinamente comenzara a temblar que reía alegremente haciendo que los hombres presentes e igualmente su compañero la miraran sorprendidos, sin embargo Sakura hablaba muy enserio y ella lo sabía, por eso intentando controlar su ahora creciente buen humor ella suspiró y miró ahora con una cálida expresión a la joven por unos segundos antes de hacerle un pequeño gesto para que se acercara, a lo cual Sakura dando una pequeña mirada a Itachi para que la dejara ir obedeció. Entonces cuando estuvo a menos de medio metro Yui toco su frente donde una luz la envolvió, por unos momentos, entonces asintiendo con voz clara y fuerte declaró —: ¡Nox!
— ¿Hm? ¿Cambiaste de parecer?
— No mucho… pero creo que Sakura tiene también una deuda pendiente, después de todo ella fue la que ordenó que mataran a su compañero antes y… desea tener un poco más de venganza defendiendo el honor de su hermano mayor, así que de mi parte le autorizó a… dar su propia dosis de justicia ¿Qué dices? — Con un brillo juguetón bailando en sus ojos Azules la joven miró a su compañero.
— Claro, tiene unos minutos… si deseas romper algo más que su cara no me opongo —aceptó rápidamente el chico haciendo un gesto con la mano como quien sirve un plato de comida.
Con el permiso de ambos Sakura ni siquiera dudó en marchar con paso decidido, habiendo ya cargado chakra en su cuerpo, porque no solo iba a propinarle un golpe. Incluso habiendo sido derrotada ella había tocado a su familia, no una, sido más de dos veces y estaba harta, no solo de cargar con una responsabilidad como esta, sino que además pudiera atraer a sus amigos a ese pozo sin fondo, si iban a estar en esto se haría responsable de ello también. Retirándose un par de metros Nox observó expectante como lo manejaría la pequeña humana, incluso para mayor comodidad como vio que las ataduras de Yoru se habían desvanecido como medida temporal hizo lo mismo de su parte, esperando quizás un golpe o dos… sin embargo nunca se esperó el arranque crudo se salvajismo.
Sin decir una palabra o esperar reacción de parte de la caída que aturdida parecía levantar la cabeza del suelo e iba a declarar algo al verla acercarse, Sakura eliminó el poco espacio que le quedaba en un estallido de velocidad y en un movimiento pateó a la mujer desde la quijada elevándola en el cielo lo que fueron más de cincuenta metros, que fueron acompañados de un audible crujido, que seguramente significaba no solo que el área golpeada fue fracturada, sino también podía sospecharse que el cráneo había sido afectado. Seguido a esto y sin dejar brecha en la acción Sakura saltó esperándola arriba donde la recibió con un golpe en el pecho que la devolvió hacia abajo.
Un cráter se formó donde cayó el cuerpo de la mujer, y este solo se amplió cuando Sakura cayó con la pierna extendida rematándola en el abdomen, luego levantó ambos puños y comenzó una serie de golpes devastadores que solo profundizaban el hueco con cada uno de ellos, al tiempo que la tierra vibraba y los arboles colindantes comenzaban a caer uno a uno. Nox se acercó a Yui, nuevamente con una expresión asombrada en sus facciones, mientras veía desde allí como la tierra se levantaba del hueco formado.
— Yoru… ¿Crees que quede algo? Sé que no va a morir, pero a este paso ¿si quiera podrá decir algo? —declaró, realmente no importándole si lo hacía o no, pero le preocupaba que Yui lo viera por otro lado, sin embargo, al ver la sonrisa divertida en su rostro supo que de alguna manera ver el despliegue de fuerza la había relajado, así que dudaba que se opusiera a ello.
Caso contrario eran sus compañeros que parecían un poco preocupados, ya sea por su compañera o si habría consecuencias no lo sabía, sin embargo, no creía que tuvieran que preocuparse por ello, Yui le había dado una bendición para evitar la contaminación al tocarla e igualmente ella le había retirado sus poderes con su kodachi, y sobre todo Nox tenía cubierta cualquier salida por la oscuridad que intentara hacer. Fue de esa manera que pasaron los próximos casi cinco minutos, hasta que los golpes se detuvieron y del cráter fue arrojado lo que quedó de lo que fue Dalya, que, aunque sus heridas provocadas por Sakura parecían estarse curando, era innegable que el rostro desfigurado y los miembros torcidos harían el trabajo difícil, por no decir que según los daños al parecer cada golpe tenía también técnicas médicas para destrozar las células.
Como fuera cuando la pelirosa salió del hoyo sus manos manchadas de sangre y las salpicaduras en rostro y ropas eran un claro manifiesto de la brutalidad de la paliza — Bueno… me la llevaré ahora que has acabado ¿Luego iras Yoru?
— No, puedes encargarte solo, no tengo ganas de ver la cara a los viejos ahora mismo y parte de mi castigo se lo acabo de delegar a Sakura, así que es toda tuya para disponer por el momento. — Encogiéndose de hombros Nox caminó hacia los restos sangrantes de la mujer, pero antes de marcharse cuando paso al lado de Sakura colocó una mano en la cabeza de la chica, sorprendiéndola y más aún cuando declaró —: Buen trabajo… yo me llevaré la suciedad por ti ahora.
Con esto dicho y sin dejar más cabida a palabras Nox fue tragado por la oscuridad al igual que el guardián caído. Con ello quedaron los cinco en el lugar, siendo Itachi el que primero se acercó a Sakura que miraba asombrada como la Sangre había sido retirada de ella cuando el sádico guardián se había marchado. — ¿Te sientes mejor? — no solo lo preguntaba por su estado de ánimo, sino que había estado preocupado cuando sus reservas de chakra habían disminuido gracias a Zen, sin embargo, ahora mismo parecía revitalizada.
— Sí, un poco cansada, pero siento como si mis niveles de chakra hubieran vuelto a la normalidad… bueno a lo que no gasté realmente en batalla porque a pesar de todo no tuvimos que emplear grandes cantidades —respondió ella con una sonrisa — También… de alguna manera me sentí mejor de golpearla… por todo.
— Es un alivio que tú también pudieras… esa mujer no era fácil de matar, la atacamos con todo lo que teníamos, incluso nuestro capitán usó ese… espectro en sus ojos ¿Susanoo? Para darnos algo de ventaja en batalla, aunque de los dos él fue quien más saco el cuello por ambos —dijo Hayato levantándose finalmente de su lugar.
— Bueno, por un momento fue una situación grave, pero para responder la pregunta de hace un momento estoy bien, Yagi la alejó antes de hacer algo más y… justo entonces apareciste Yui así que, aunque fue una experiencia que prefiero no repetir, agradezco que estuvieras allí, pero… ¿En serio tu estas bien? Hace un momento parecías estar muy fuera de ti —declaró Shisui dirigiendo la pregunta hacia la ahora pelinegra que tenía un pequeño sonrojo en sus pómulos.
— Suena como si hubiera sido una especie de salvaje —murmuró ella antes de suspirar y responder — Estoy bien ahora, solo era una mujer que sacaba de quicio, de todas formas será mejor regresar, les gustará anunciar que terminaron la misión ¿no?
— Una buena noche de sueño también es necesaria —declaró Hayato girándose en dirección al castillo — Vamos a informar, descansar y dormir… mañana supongo que partiremos de aquí. No quisiera quedarme más tiempo.
-0-Sakura-0-
— Gracias por todo, en serio siempre que nos vemos Sakura superas mis expectativas —declaró la joven princesa tomando mis manos, sus ojos suaves ahora mientras nos despedía. — Me alegro que el reto no haya significado más que un pequeño tropiezo.
— Creo que solo teníamos que prepararnos para detenerlo, no pensaría que Zen no fuera un buen luchador, sino que aprovechaba sus habilidades corruptas —declaré suavemente, omitiendo por completo el hecho de que fue Shin quien nos dio las armas y los dos guardianes quienes limpiaron el desastre final, habíamos acordado con Yui no mencionar que estuvieron presentes para omitir incomodidades, y ella había argumentado que de igual forma habíamos sido nosotros los que habíamos terminado con la parte pesada, ellos solo se aseguraron de evitar que los detractores siguieran sueltos.
— Das poca importancia, pero en serio fueron de ayuda ¿Cierto hermano? — A un costado en silencio Shin se encontraba observándonos con las manos dentro de los bolsillos, con un brillo de complicidad en sus ojos azules.
— Ciertamente lo fueron, de todas formas, involucrarlos en todo esto no es lo que quisiéramos, pero nuestro clan no es un luchador por naturaleza y como vieron se enfocaban más en predicciones. Mi pequeño y molesto hermano consiguió manipular su propio tiempo, pero no contó que ustedes tienen una protección mayor —declaró acercándose hasta mi lugar antes de dar una pequeña reverencia a nosotros cuatro, algo que no solo me sorprendió a mi, sino que por mi vista periférica pude percibir que fue lo mismo con los chicos.
— ¿Shin? —Pregunté nerviosa sin saber qué hacer.
— Tengo que dar las gracias, y como antiguo líder de este lugar se cuándo tengo que agachar la cabeza. — Luego de sus momentos solemnes sentí que cuando me miró indicó que luego hablaríamos así que solo pude asentir.
— Bien. Gracias por su hospitalidad nosotros tenemos que irnos ahora —dijo Shisui dando un paso al frente y una inclinación cortés antes de sonreír y mirarnos.
— Son bienvenidos cuando gusten —dijo Kazumi alegremente algo que sus compatriotas no parecían compartir mucho, sabía que para ellos éramos forasteros y también parecía que nuestra cercanía con Shin les ponía nerviosos, así que sin compromisos los cuatro asentimos dando la última despedida y finalmente descendiendo por la escalinata de piedra que nos llevaría hacia el bosque, alejándonos de la vista.
Finalmente íbamos a casa, se sentía como años considerando el tipo de tensión al que había sometido mi cuerpo y que, en principio, aunque no había dicho nada, quería simplemente llegar y entrar en los baños termales para descargar mi tensión. — No sé ustedes, pero no creo querer volver por aquí en los próximos tiempos —declaró Hayato suspirando — Todo lo que tenga que ver con ellos es un problema.
— No puedo argumentar nada contra eso —concordó Shisui e Itachi asintió.
Al menos algo bueno había salido de esa misión, al parecer la relación de esos tres era menos tensa, aun había comentarios burlones de parte de Hayato pero luego de que estuve atrapada en su mente y luego de que Shisui y él trabajaron por primera vez como equipo su actitud había perdido el selló de resentimiento característico que lo había distinguido mientras interactuaba con ellos, en gran medida eso me aliviaba, aunque… desde que habíamos derrotado a Zen, Itachi tenía algo diferente, parecía de alguna manera en guardia y cuando miraba a Hayato aunque no había odio si algún tipo de desconfianza, me preguntaba si algo había visto que lo hubiera puesto de esa forma.
— Parece que terminaron con ellos ¿no? — En medio de nuestra carrera que habíamos emprendido y ya llevando un tramo considerable nos detuvimos abruptamente cuando fuimos interceptados por Tsukino, que estaba de pie sobre el árbol frente a nosotros.
— ¿Volviste? —murmuró Hayato luego de suspirar — Pensé que luego de que Yoru se fuera estarían ocupados con lo que sea que tenían que hacer.
— ¿Hm? Ah ciertamente yo me fui antes y terminé con mi parte, Yoru aún tiene pendientes que resolver, sin embargo, me pidió que los sacara de aquí y los acercara a su aldea —declaró él con seriedad, no había burla o diversión, estaba actuando profesional, así que tenía que tener un motivo para hacerlo, pero eso no hizo que mi deseo de usar su técnica de traslado apareciera, de hecho la sensación era horrible.
— ¿Hay otra forma que no sea por la sombra? —Murmuré con un suspiro.
— Lamentablemente para ti mi elemento es la oscuridad así que no puedo llevarte en destellitos como lo haría Yoru, aunque imagino la sensación será similar —declaró con una sonrisa antes de retomar su semblante serio — Bien andando, los dejaré en un punto en que esten a un día de camino.
Sin permitirnos decir nada sentí como si la oscuridad me tragara entera nuevamente y me encontré siendo aplastada por ella sin nada a que aferrarme. No por haberla experimentado una vez fue más fácil pasarlo, contrario a ello me sentía peor, al menos por unos momentos antes de sentir que el aire volvía a mis pulmones, sin embargo, cuando abrí los ojos no me encontré en el bosque en cambio estaba en el mismo espacio oscuro solo que mis ojos parecían haberse adaptado y pude ver con claridad a Tsukino frente a mí, solo a él — ¿Por qué? — Cuestioné preocupada de haberme separado de mis amigos, ¿Había hecho algo?
— Dame un minuto por favor, antes de que te mande con tus amigos —dijo el hombre cruzado de brazos — Quiero preguntarte ¿Cómo conseguiste las espadas del sello para Zen? Esas dos armas son espadas antiguas que Shin creo y desaparecieron hace tiempo.
Me sorprendió su pregunta más que todo porque en cierto modo había creído que él lo había sabido todo este tiempo, pero según sus palabras no parecía ser el caso, ¿De ser así porqué hasta ahora? — Shin, él me las dio —declaré con sinceridad — ¿hay algún motivo para…?
— Sí — me cortó de inmediato para acercarse hasta quedar a un palmo, observándome con cuidado — El Shin actual no pudo dártelas está demasiado débil para ello, pero no estás mintiendo así que ¿Podrías explicar?
Su cercanía me puso nerviosa porque no estaba jugando, había una seriedad que nunca había experimentado viniendo de él, incluso la primera vez fue más amenazante y gruñón, pero siempre mantenía una presencia confiada, burlona, sarcástica, pero en esos momentos todo había quedado de lado sus ojos carmesís casi habían adquirido un tonó café pero no disminuía su intensidad. Esto era importante… así que dije con cuidado —: Yo viajé al pasado al parecer, uno muy lejano donde me encontré con un Shin joven…. No sé cómo pasó, pero él fue quien me dio las espadas.
Sus cejas se fruncieron, pero no parecía mirarme a mí, permaneció unos segundos antes de asentir y sonreír sin humor murmurando algo antes de volver su atención a mí, entonces declaró — Las espadas de sello llamaron la atención, Yui está resolviendo la situación ahora, pero Sakura, te digo esto porque de alguna manera considero que has ganado un poco de mi respeto, no des por sentado que Shin es un ente aparte, estas experimentando muchas cosas que le pasaban a él, y eso es preocupante.
— ¿De qué hablas? — Cuestioné.
— Bueno, solo diré que un don con el que todos sueñan es más una maldición para aquel que lo tiene. Una mentalidad débil te romperá, entonces no podrás distinguir de arriba y abajo así que ten cuidado. — Nuevamente sus palabras eran demasiado crípticas pero mi miedo había retrocedido, y pude entender porque Yui confiaba en ese hombre que parecía que en cualquier momento podría matarte sin dudarlo… ese hombre no te traicionaría, él siempre sería franco incluso si sus palabras eran difíciles de entender estaba tomándose el momento de explicarme que había un problema que había surgido de nuestra batalla, uno que no estaba en obligación de explicarme pero que ellos nos estaban protegiendo ¿Pero por cuánto? ¿Qué estaba dispuesta a hacer? ¿Qué estaba dispuesta a arriesgar? La convicción para mantenerte en pie era importante así que retroceder no era una opción.
— Gracias Tsukino-san —declaré dándole una sonrisa — tomaré tus palabras y las meditaré, no puedo decir que lo entienda del todo, pero no retrocederé a mis convicciones.
— Será agradable probarlo —respondió él ahora retomando su personalidad confiada — Entonces será mejor que vayamos tus amigos estarán impacientes.
Nox me tomó del hombro con una mano y sentí nuevamente la sensación de ser envuelta por la oscuridad, sin embargo, en esta ocasión no hubo opresión, sino que fue como si me cubriera con una cobija gruesa, para solo descubrirme cuando finalmente el bosque apareció ante mis ojos junto a tres hombres que, aunque lucían enfermos parecían preocupados, pero en cuanto me vieron se acercaron.
— Sakura — declararon los tres en tonos diferentes.
Itachi llego primero a mi lado y me observó de pies a cabeza antes de detenerse en mi brazo derecho donde aún sentía el agarre de Nox pero de una forma más suave, así que dirigí mi mirada hacia allí y me encontré a un joven de al menos 10 a 11 años en vez de al hombre, llegándome al hombro y con una sonrisa satisfecha como el gato que se comió al canario.
— Bien, ya la trajiste ¿Qué haces aun aquí? —Gruñó Hayato llegando a mi otro lado y mirando al chico, que parecía pegarse un poco más y apretar mi brazo con un poco más de fuerza, pero sin llegar a lastimarme.
— Nunca dije que traerlos fuera lo único que haría, yo decido donde y con quien quiero estar ¿Cierto Sakura? ¿Puedo quedarme un poco más? — Fueron dos golpes completamente desconcertantes, por dos hechos, el más evidente fueron sus palabras que me cuestionaban y si fuera simplemente con un tono autoritario o siendo retorica la pregunta lo entendería, pero Tsukino había puesto un tono con sacarina y sus ojos desde debajo de su flequillo castaño oscuro, ahora me miraban como su fuera un dulce cachorro con ojos humedecidos, además para acentuar su acto había tomado mi brazo con su otra mano.
Debería haberme dado escalofríos, pero de alguna forma sus rasgos suavizados por la juventud, además de su lindo rostro fue como si viera a otra persona y aunque mi cabeza me recordara que este astuto hombre era el mismo guardián peligroso y arisco, de alguna manera también despertó un inevitable sentimiento maternal en mí. — Yo… no puedo decir que tengas que marcharte —declaré con un sonrojo evidente e intentando evitar su mirada, pero luego añadí — Nos has ayudado mucho y… puedes hacer lo que quieras ¿no?
— ¡Sakura! —Curiosamente fueron Shisui y Hayato los que exclamaron al tiempo, parecía que ambos no tenían miedo del hombre-niño que ahora parecía haber ganado con una sonrisa triunfal.
— Ejem —me apresuré a aclarar mi garganta para mirar nuevamente a Nox, no ignorando el hecho de que Itachi parecía acercarse más por mi otro lado y su presencia comenzaba a envolverme, sin despegar su mirada del niño — de todas formas, Tsuki…
— Nox —declaró él deslizando sus manos de mi brazo y tomando mi mano como si realmente fuera un niño inocente, sin embargo, me quedé sorprendida por su declaración, algo que notó inmediatamente porque añadió —: Puedes llamarme Nox, Sakura.
— Yo… no estaría… esto… — ¿Se había golpeado la cabeza? ¿Cambiaron al guardián cuando habíamos aparecido? ¿Por qué actuaba así?
— Descuida si yo te doy permiso está bien ¿O no quieres llamarme así? — Su expresión dolida rompió algo en mi cerebro ¡¿Qué estaba mal?! Mi rostro enrojeció y como si me hubiera olvidado completamente con quien estaba hablando tomé ahora sus manos entre la mías y me incliné para mirarlo directamente a sus ojos ahora un poco sorprendidos.
— No, está bien Nox, pero no, no te pongas… —repentinamente caí en cuenta de lo que decía y mi vergüenza se duplicó ¿Pero que se me había pasado por la cabeza? Ese no era un niño. — Yo…
— ¡Vaya! Que alegría en serio Sakura. — Antes de poderme apartar repentinamente saltó y me abrazó por el cuello, haciendo que me congelara en mi lugar sin saber cómo reaccionar e ignorando completamente que mientras estaba paralizada él estaba dándoles una sonrisa de suficiencia a mis tres amigos, que para ese momento dos de ellos tenían el Sharingan destellando y el último estaría enumerando la manera de matar a un guardián, buscando tirar por la borda su seguridad.
— Bien entonces regresemos a su aldea —dijo por fin soltándome y dándonos la espalda, su actitud altiva siendo retomada, pero manteniendo una sonrisa que fingía completamente inocencia.
Inesperadamente en medio de mi aturdimiento la mano de Itachi tomó la mía atrayendo mi atención, sus ojos como carbón mirándome con intensidad antes de inclinarse hacia mi oído y declarar —Luego tendremos que hablar Sakura. — Sus palabras me provocaron otro tipo de desconcierto ya que mi corazón esta vez casi se sale de mi pecho y mis piernas se sintieron débiles mientras era arrastrada de la mano por él. ¿A qué se refería con ello? Itachi también había estado raro, pero no entendía que pasaba no parecía molesto conmigo, pero... ¿Por qué me sentía culpable? ¿Y por qué de alguna manera pensaba que eso sonaba como si me fuera a castigar? No lo sabía, pero repentinamente me sentí muy cansada y asustada, demasiadas emociones en solo unos instantes ¿Llegaría bien a la aldea?
-0-
Aunque me estuve preparando para lo que sea que tuviera que decir Itachi, lo cierto es que no hubo lugar para ello, ya que tan pronto como regresamos a la aldea e informamos de la misión junto con el ahora nuevo "incidente" llamado Nox, hubo un llamado de parte del clan Uchiha para mis dos amigos, y luego de eso fueron solicitados a una misión de reconocimiento al día siguiente por lo cual habiendo pasado ya dos días desde que regresamos me encontraba terminando de prepararme para salir, ya que había quedado de encontrarme con Hayato para comer algo ya que estábamos "libres", aunque realmente creía que quería asegurarse de que estuviera bien considerando que desde hacía dos días tenía un pequeño intruso en mi casa, que aunque no se quedaba a dormir o comer parecía estar cerca casi todo el tiempo.
— No entiendo cuál es el punto de todo esto —escuché decir al guardián desde la sala — Simplemente podría matarlo sin problema, no sería necesario tanto drama con quien se quedaría, eliminando uno y ya estaría bien… especialmente ese bastardo.
Suspiré dejando de lado las enciclopedias médicas que había estado leyendo esa mañana y volviendo donde había dejado al chico tirado sobre el sofá. — No todo se resuelve cortando cabezas —declaré acercándome y mirándolo con una ceja enarcada — el corazón no es tan fácil y de ser el caso no habría historia si se resolvieran las cosas así, sobre todo matar tiene consecuencias y… ¿Por qué estás leyendo eso?
Bajando la novela que estaba sosteniendo en sus manos y dejándome ver sus ojos que en ese momento tenía un color café rojizo él respondió —: Lo otro que tienes son puras cosas técnicas que no me vienen al caso, Yoru es la que disfruta aprendiendo como salvar vidas o aprender toda esa tontería de libros, esto fue lo más decente que encontré dentro de toda la basura que tienes. — Algunos considerarían que la basura era lo que él estaba sosteniendo, pero ¿Quién diría que ese hombre pensara que una novela romántica era material valioso en vez de los libros de medicina? Con toda honestidad podía decir que era y al tiempo no era una sorpresa.
— ¿Consecuencias? Simplemente tener a la mujer ¿no? El tipo es una basura y ella sigue pensando en él, lo cual es estúpido, en cambio tiene al otro que es considerado y la cuida, pero ella duda ¿Qué hay que dudar? Lo único que tiene que hacer Tenshi es elegir a Ao y ya está y si no Ao puede simplemente quitar a su rival del camino, la mejor forma es… si se niega elimínalo, es basura si no puede decidirse. Aunque la mujer también es estúpida ¿Quién cambia a alguien que te trata bien por una basura? — Que dijera cosas tan crudas con la apariencia juvenil que tenía era algo horrible pero lo que me hacía lograr entender es que era inevitable que ese chico tuviera un tornillo zafado bajo nuestra lógica.
— Nox-san…
— Nox solamente —declaró volviendo a ocultarse tras su libro — Ya te he dado mi permiso, así que solo llámame por mi nombre sin honoríficos.
— Esta bien Nox, ¿En serio quieres entenderlo? Que sepa no te interesan los temas de los humanos —declaré arrodillándome a su lado y reposando mi mano en mi rostro.
— Tienes razón, no me interesa. Me importa más entender porque a Yoru le interesa todo esto y que tipo de relación pegada ahora tiene con tu amigo, sin embargo… hay cosas —declaró volviendo a detenerse en su novela y ahora mirándome — Como por ejemplo ¿Por qué una humana como tu piensa que puede estar tranquila con alguien como yo alrededor? O qué tipo de lealtad muestras a pesar de que sabes lo que está pasando, defendiste a Yoru antes con lo de Izumi, te enfadaste con ella por faltarle al respeto, pero luego hiciste lo que te pedí aunque pudiste permanecer en silencio y aunque pudiera ser por miedo, pude ver que también lo hiciste por tu voluntad por agradecimiento, te levantaste como un oso asesino cuando te enteraste de que alguien había intentado lastimar a tu amigo y no te importo que fuera un ser que no pudieras matar, solo destrozaste sus huesos y ahora… aunque podrías intentar echarme o reclamar porque estoy aquí me permites rondar alrededor ¿Entiendes que eres extraña?
— Entonces ¿piensas que vale la pena intentar entenderme?
— No entiendes ni una palabra, eso no es lo que me refiero —declaró sentándose y dejando la novela de lado — Simplemente encontré algo con que entretenerme y existe otro motivo, pero no es importante ahora mismo, de todas formas ¿Has desarrollado algún tipo de inmunidad contra mí? Antes estabas toda tensa alrededor.
— No precisamente —respondí con sinceridad, un poco irritada por sus palabras de que era como un juguete de entretenimiento, — Simplemente sé que no harás nada sin que tenga una justificación, digamos que confío en tu juicio, aunque no quiere decir que si intentas hacer daño a alguien aceptaré una respuesta cualquiera, especialmente si es gente valiosa para mí.
— ¿Oh? ¿Una advertencia? Realmente eres increíble si me amenazas de forma tan directa —declaró con una sonrisa arrogante — ¿Quieres una sesión de entrenamiento para medir fuerzas?
— Y ahora estas siendo malo, es evidente que no podré tocarte un pelo y también tengo hoy que reunirme con Hayato —respondí — ¿Vas a quedarte en casa?
Con una mirada contemplativa Nox pareció meditarlo un momento antes de tomar el libro y volver a acostarse — Lo haré, no es divertido si no están los otros dos… oh por cierto Sakura quiero preguntar ¿Si me interesara entender esto me lo explicarías?
— Lo haría —aseguré encogiéndome de hombros.
— ¿Por qué? Estoy siendo intrusivo y ¿Qué sentido tiene enseñar a los otros?
— Bueno… depende quien pregunte, pero Nox siento que estas siendo y no siendo honesto, puedo ver curiosidad en tus ojos como un niño que descubre algo, de alguna manera… y aunque sé que puede ser irrespetuoso pero esa curiosidad infantil que guardas me hace sentir con ganas de enseñarte... de alguna manera me recuerda cuando veía a Sasuke curioso de niño.
— ¡No! Definitivamente No — declaró frunciendo el entrecejo y haciendo una extraña mirada de desagrado — que diga que medianamente me caes bien no es para rebajarme a…
— Lo sé, como dije solo es… no se —dije suspirando y de alguna manera sintiéndome abatida lo que me llevó a sentarme en el sillón que estaba frente a él de él.
— ¿Y ahora qué? ¿Por qué los humanos son volátiles?
— Lo dice quien no dudaría de arrancar la tráquea de un personaje de ficción —declaré resoplando.
— Eso es más directo que esa expresión de mierda que tienes ¿Qué es? El tema de la familia parece que lo desató —declaró moviendo el libro hacia mí — Suéltalo ahora que tengo la paciencia de escuchar.
Rodé los ojos, pero… quizás contarle podría ser un poco liberador, después de todo podría esperar una respuesta directa y cruda y no pasiva, lo cual sentía necesitaba, así que inicié —: La verdad desde que vi los recuerdos de Hayato y supe que nos conocíamos, recordé cosas sobre nuestra vida entre ellos sobre sus padres y alguien que era muy importante cuando era niña que era su hermano mayor. De alguna forma comencé a pensar en el pasado, en lo que olvide, en lo que él perdió y en lo que yo tengo, luego sobre mi familia y bueno… yo solo tengo a mis padres y soy hija única, pero hace mucho no los veo y aunque no estaba pensando mucho en eso… repentinamente siento mucha nostalgia. Hace mucho no se de ellos así que estoy también preocupada.
Sentí la mirada intensa de él antes escucharlo suspirar y volver nuevamente al libro que sostenía, sin embargo, no pareció retomar la lectura en cambio Cuestionó —: ¿Tus líderes te han dicho que han perdido contacto o algo?
— No.
— Y sobre lo de ese tal hermano, no entiendo eso, no tengo hermanos para saber, pero si se siente como tener a Yoru… no creo que pueda imaginarlo, yo soy mayor, pero ella nunca ha actuado como no sé… no creo que pueda imaginarlo.
— Bueno de alguna forma siento que siempre he tenido personas que me han tratado como su hermana, me he sentido la hermana de Shisui, y luego… recuerdo que Yun-nii hizo algo similar, no interactué mucho con él y mis recuerdos son borrosos, pero sé que lo apreciaba mucho, supongo que, aunque no haya lazos de sangre se puede sentir como si fueras familia ¿no? Así que también te preocupas por ellos y ahora que lo he recordado…. De todas formas ¿no sientes algo similar?
— Si lo planteas de esa forma, bueno… Yui es quien más me importa —admitió sin tapujo algo que me sorprendió — No tenemos una relación romántica, ni podríamos tenerla nunca y no la necesitamos… así que si lo llegaras a pensar por mis palabras quítatelo de la cabeza. La relación con ella es… complicada, pero si alguien se atreviera a lastimarla otra vez… —Sus ojos volvieron sobre mí y en su rostro se dibujó una sonrisa cruel antes de continuar —: Créeme que le daría la muerte más horrible.
— ¿Otra vez?
— No necesitas saberlo, pero no somos de piedra, hay cosas que influyen en nuestra vida, y ella tiende a apegarse más, como sea eso fue hace mucho tiempo. De todas formas, tus dudas no se resolverán solo dándoles vueltas, si quieres saber algo pregunta, creo que más bien estas preocupada por preguntar algo diferente a ese mocoso, así que vete antes de que venga a irrumpir en mi tiempo de relajación. — Debería sentirme ofendida de que me echara de mi propia casa, pero no pude discutir, de hecho, iba tarde a reunirme con Hayato, así que me volví a levantar de mi lugar.
— ¿Te quedaras hasta que regrese?
— No, tengo cosas que hacer, pero de antemano te digo que me llevaré el libro y… creo que vendré dentro de dos días hay algo que tenemos que hablar —dijo dándole la vuelva a la hoja y frunciendo el entrecejo — Que mierda ¿En serio va a caer con una línea tan fácil ¿No se da cuenta que ese tipo es un fanfarrón?
Supe que no sacaría más de la conversación con Nox, así que rodando los ojos finalmente salí de casa hacia el restaurante donde quedamos reunirnos con mi amigo. Quizás el guardián tenía razón si quería saber algo solo tenía que preguntar tanto por lo de mis padres como el destino de Yun-nii y… lo que sea de lo que quería hablar Itachi. De alguna manera mi corazón saltó en mi pecho al pensar en él, era injusto que hubiera tenido que irse apenas regresáramos, pero sabía que estaba con Shisui y solo era un recado de su clan el cual sabía que terminarían rápido, tendrían que volver esa tarde ¿Podría hablar como se debía con él? Había estado tan raro, pero también me emocionaba su actitud ¿Qué estaría pensando? Me gustaría decir que era el mismo Itachi que conocía, pero de alguna manera sus acciones protectoras o acercamientos eran diferentes, por eso en ocasiones pensaba que lo hacía para compensar el pasado o hacer lo que creía que era lo que hacía antes, pero también sus movimientos me desvelaban que lo hacía sin pensarlo demasiado, era demasiado fluido ¿Qué era?
— kura…— ¿Podría ser otra cosa? Y ahora con la actitud que tenía luego de la misión, como un animal contenido pero que está esperando para saltar sobre su presa.
— Sakura…
—No creo que sea eso, pero… —murmuré ignorando completamente mi alrededor, hasta que sentí un suave golpe en mi cabeza que me hizo saltar más que dolerme — ¿Qué rayos?
Girándome me encontré con Hayato que vestía una camisa sin mangas de color negro, dejando al descubierto sus músculos y un pantalón azul oscuro que parecían más de civil que el ninja, que normalmente llevaba, además su cabello lo tenía recogido en una pequeña coleta hacia arriba, pero al no ser tan largo algunos extremos quedaban sueltos, especialmente el frente que estaba revuelto, dándole un aire más casual. — Hayato… ¿Por qué hiciste eso?
— Mira a ver si ibas a seguir derecho y sobre todo te llamé tres veces y no escuchaste una palabra ¿En qué estabas pensando? ¿No me digas que estabas esperando ansiosa por verme? Oh espera déjame pensar —declaró él acercándose y colocando su rostro cerca al mío con una sonrisa un tanto arrogante para luego en un murmullo continuar —: Estabas pensando en el beso en el bosque.
No tardé en enrojecer desde mi cuello hasta las raíces de mi cabello, porque había olvidado el evento en favor del estrés de la misión, pero ciertamente había ocurrido algo así, no obstante, había sido sin mi consentimiento y aunque tenía que admitir que había sido un buen beso, no quería decir que lo quería con él, por mucho que apreciara a Hayato mi corazón estaba resuelto por una persona. Fue por eso que di un paso atrás al tiempo que levantaba mi puño y declaré —: Nada de eso, estaba pensando en otra cosa, pero no era eso, pero… tiene que ver contigo.
— Hm —tarareo cruzándose de brazos antes de responder seriamente — Bien, supongo que podemos hablar, pero primero ¿Vamos a comer? Después de todo estamos frente al restaurante.
— Sí, hace un tiempo no lo hacemos así que…
— Oh ¿Qué son esas propuestas Sakura y en público? ¿Cuándo lo hicimos? A no ser que tú me hayas…
— ¡Comer juntos estúpido! — grité atrayendo atención innecesaria pero que ignoré en favor de darle la mirada más mortal que tenía a mi amigo y conteniendo mis ganas de asestarle un buen golpe, ya que gracias a esto él se reía con libertad mienta entraba al restaurante.
Solté un bufido considerando si golpearlo o tolerarlo como una broma que hacía para despejar la tensión; al final me decidí de contener mi ira cuando esperó a que me sentara luego de acomodarnos en una pequeña mesa, no muy lejos de la entrada, y ordenamos dos platos de Yakisoba, los cuales trajeron unos minutos después, solo entonces con la comida en frente me decidí a tocar el tema en cuestión.
— Bien ¿Entonces…?
— No sé yo les hubiera dejado un poco más en el fuego y quizás les hubiera agregado cebolleta —declaró mi acompañante limpiando una gota de la salsa de sus labios antes de añadir —: pero no está mal.
A su respuesta suspiré un poco irritada y luego le di una expresión seria — Hayato esto es en serio —declaré chasqueando los palillos hacia él.
— Y yo también lo digo en serio —respondió encogiéndose de hombros y dándole otra probada a sus fideos.
— Hayato, por favor.
Él finalmente se detuvo y suspiró rodando los ojos. — Bien ¿Qué quieres preguntar? Déjame adivinar… tiene que ver conmigo, el pasado que viste… entonces ¿Mi hermano quizás? —Ahora me dio una sonrisa, aunque era un poco amarga lo que me hizo dudar un poco, pero recordé las palabras del guardián, solo tenía que preguntar.
— Así es… yo, no recuerdo bien sobre lo que paso con Yun-nii, bueno sé que probablemente…
— ¿Qué quieres que te diga Sakura? Esa guerra nos cobró a todos algo —declaró él jugando con sus palillos al tiempo que fingía tomar un poco de los fideos en su plato.
— Entonces él también… yo no recuerdo haber estado en…
— No dije que estuviera muerto Sakura, no mal interpretes mis palabras —me interrumpió él moviendo la mano hacia un lado como si intentara restarle importancia, sin embargo, su expresión no fue tan buena.
A pesar de esto mi sorpresa y esperanza solo creció al escucharlo, así que teniendo cuidado con mis palabras declaré — Entonces Yun-nii… ¿Sobrevivió? Pero ¿Qué pasó con él? no lo he visto, y tú tampoco vives con él.
— Te lo dije, a todos nos cobraron algo, solo que a él un poco más. No solo perdimos a nuestros padres ese día, mi hermano… luego de esa paliza sus pulmones se deterioraron, o al menos eso dijeron, desde entonces le costaba respirar, sufría de ataques… así que no pudo seguir siendo ninja —contestó con su mirada adquiriendo una tonalidad más oscura mientras hablaba y tomaba otro bocado de Yakisoba, dejando en evidencia que no era un tema que le gustara tocar mucho — desde entonces no sale del complejo.
—Así que al final… yo
— No te atrevas —se apresuró a decir mi amigo nuevamente cortando mis palabras —no es tu culpa y mi hermano sabía que no podrías ir a visitarlo de todas formas, después de todo las cosas luego de la guerra se complicaron para nuestro clan.
No comprendía por qué decía que entendían el motivo por el cual no había ido en tantos años, pero una cosa era el pasado y otra era el ahora, así que dejando mis palillos de lado miré directamente a los ojos del pelinegro, haciendo que estrechara la mirada. — Voy a ir a verlo —declaré tomando la decisión.
La reacción de mi amigo fue sorpresiva al casi escupir los fideos en su boca y tomar un vaso de agua mientras tocía, solo cuando logro calmarse levantó nuevamente su mirada hacia mí, mostrándome su incredulidad y declaro — ¿Disculpa? Creo que mis oídos han comenzado a fallar ¿Acaso dijiste que querías ir a ver a mi hermano? ¿Sabes que él no sale del recinto cierto?
— No sabía que no salía, y tus oídos no están mal, dije lo que escuchaste —respondí cruzándome de brazos y observando su expresión llena de incredulidad.
— Sakura, creo que no has recobrado todos tus recuerdos, ir a mi casa…
— Hayato —le corté con firmeza y declaré — Quiero ver si yo puedo sanar a Yun-nii, hace tiempo no lo veo, no sé qué ha soportado y por tu expresión puedo decir que es grave, por lo tanto, quiero verlo con mis propios ojos.
Hayato suspiró y removió sus cabellos exasperado — Sakura no es conveniente que vayas, sé que quieres ayudar a mi hermano, pero no es lo mejor ahora mismo. — Entonces tomó otro poco de su comida como intentando dejar el tema allí, pero yo no era distinguida por ser alguien que acepta fácilmente una negativa.
— ¿Por qué no? Dime un buen motivo que sea más importante que la salud de tu hermano —declaré frunciendo el entrecejo.
— Él mismo lo pidió hace años porque es más importante tu felicidad y tu libertad que cualquier otra cosa. Los Haruno tienen poder limitado al no ser un clan como tal, sabes bien que tus padres vienen de civiles, así que pueden llegar a ser absorbidos por otro clan, como sea si no te lo dijeron o no lo recuerdas es mejor así —declaró con firmeza Hayato haciéndome fruncir el entrecejo aún más ¿De qué hablaba?
— ¿Qué dices que no sé?
Hayato abrió los labios para responder, pero antes de hacerlo miró sobre mi hombro segundos antes de que sintiera un brazo rodearme junto a un peso y aroma familiar. — Al fin hemos vuelto.
— Shisui —dije sorprendida mirando a mi amigo mayor, parecía bastante cansado.
— Hemos vuelto —declaró él dándome una sonrisa cansada antes de mirar a Itachi que estaba detrás de mi amigo y a su lado Sasuke le acompañaba.
— Itachi-kun bienvenido también —declaré dándole una sonrisa, luego retomé mi mirada hacia el menor — Sasuke-kun.
— Sakura, pensé que estarías en una misión como mi hermano —respondió ahora mirando hacia Hayato que estaba terminando su comida.
— No. Tsunade-sama no nos delegó misiones y fue tu clan el que le dio una a Shisui e Itachi-kun, que por cierto ¿Cómo fue todo?
— Sin novedades, era un reconocimiento de rutina —respondió el mayor soltándome finalmente y sentándose a mi lado — Por otro lado, veo que alguien estaba aprovechando que no estábamos.
— Bueno, el que se mueve primero gana ¿No es así? — Hayato sonrió al decir esto, una sonrisa burlona qué, aunque pensé irritaría a Shisui, fue Itachi esta vez el que dio un paso al frente y con un barítono suave pero que ocultaba una pizca de irritación declaró —: Los movimientos descuidados sin conocer el terreno solo llevan a una derrota inminente, sin importar que te hayas movido antes.
De alguna forma sentía que no estaban hablando realmente de tácticas de combate ya que Hayato estrechó su mirada por unos momentos antes de recostarse contra su lugar, cruzarse de brazos y sonreír con burla, como si hubiera descubierto algo muy divertido, entonces declaró —: No tienes que cubrir tus errores con palabras bonitas, admitir una derrota no es de perdedores… ¿O quizás sí?
Repentinamente sentí los cabellos cortos en mi nuca se erizaron y un escalofrío me recorrió cuando vi la sonrisa de Itachi, una que hacia saltar el corazón no solo por lo guapo que se veía sino también porque era tenebrosa, como una agresión arrogante oculta tras esta ¿Por qué repentinamente parecía que iban a pelear? ¿Acaso ya no habían pasado por eso? —: Me pregunto… no soy yo quien entró en una batalla perdida desde el primer momento —respondió Itachi haciendo que Hayato frunciera el entrecejo.
— ¿De qué están hablando? —murmuró Sasuke que se había acercado a Shisui y a mí mientras que su hermano y mi viejo compañero se miraban intercambiando un lenguaje silencioso.
— No lo sé… —admití confundida ahora mirando a Shisui que parecía más interesado en jugar con el collar que albergaba a Yagi inmóvil, al parecer él sabía de qué hablaban si su desinterés aparente significaba algo; definitivamente la actitud de mis dos amigos era muy extraña.
— Hablas como si todo hubiera sido decidido ya —declaró Hayato repentinamente atrayendo nuevamente nuestra atención, su actitud repentinamente amargada.
— Nunca está todo decidido, pero en esta variable existe el de "consentimiento", un factor que muchos suelen omitir en favor de la emoción.
— ¿oh? ¿Te refieres a la audacia? No todos somos tortugas que se mueven esperando un milagro, algunos si tenemos nuestras convicciones firmes. — Ahora fue el turno de Itachi de fruncir el entrecejo.
Realmente no sabía que pasaba allí, pero ese no era el punto que quería tocar ahora mismo, había algo más importante que necesitaba solucionar, así que antes de que pudieran seguir en su lucha personal interrumpí en su conversación —: No sé a qué va todo esto, pero Hayato, no estás escapando de lo que hablamos.
— Ya he dicho que No, no tienes idea en lo que te quieres meter así que ni lo sueñes —respondió con la misma firmeza que yo, pero no me dejé amedrentar y lo miré directamente a los ojos sin retroceder.
— No puedes…
— He dicho que No.
— Ustedes dos ¿Qué están discutiendo? — Cuestionó Shisui volviendo su atención a nosotros, algo que hicieron los otros dos Uchiha al tiempo.
— Bien, ahora podrían apoyarme para detenerla —respondió Hayato habiendo perdido la agresividad anterior y pidiendo con la mirada ayuda sincera.
— ¿Qué tiene de malo que quiera ver si puedo ayudar a Yun-nii? Es tu hermano. — Aunque era una cabina aparte y la tienda estaba relativamente vacía, procuré no hablar con tanta fuerza, pero siendo muy enfática con mis palabras, no obstante, el que reacciono esta vez fue Shisui que parecía haberse estremecido por mis palabras y ahora me daba una mirada casi horrorizada, claro que no fue el único Itachi también tenía el entrecejo fruncido. — Oh vamos, denme un buen motivo por el cual no pueda ir ya que tienen esas expresiones como si estuviera loca.
— No, no es que lo estés es solo que ¿Por qué repentinamente quieres ir allá? — Cuestionó mi amigo mayor.
Me disponía a responder, pero Itachi se me adelantó declarando —: Tiene que ver con lo que paso en nuestra misión ¿cierto? Como antes no pudiste acércate ahora quieres hacerlo — Fue claro que estaba siendo prudente frente a su hermano evitando decir el problema principal de la misión, así que asentí.
— No podía hacer mucho antes, pero ahora creo que puedo ayudarle —confirmé decidida.
— ¿Sobre los recuerdos…? — Antes de que Shisui pudiera continuar con sus palabras le pisé y rápidamente le lancé una mirada de advertencia señalando a Sasuke sutilmente antes de que pudiera reclamarme.
— Como sea, fue una infancia difícil y algo que acordamos con Hayato de no hablar antes pero ahora mismo las cosas son diferentes —afirmé cubriendo el error de mi amigo.
— Hablan de un tal Yun pero realmente ¿Quién es? — Dijo Sasuke cruzándose de brazos confundido por lo que estábamos hablando.
— Es mi hermano mayor —respondió Hayato y luego yo añadí a su afirmación —: Antes de conocerlos era muy amiga de Hayato y Yun-nii, pero luego de la guerra… no pudimos volver a hablar.
— De todas formas, eso no es importante, mi respuesta sigue siendo que no, las cosas no son como en ese entonces.
— Hayato, pero…
— Si vamos con ella no creo que haya problema —interrumpió Itachi repentinamente trayendo nuestra atención y haciéndome sonreír ampliamente con ojos brillantes.
— ¡Itachi! ¡Uchiha! — Declararon los dos mayores con miradas un poco diferentes, siendo la de Shisui una de sorpresa y la de Hayato una de ira.
Por su parte Sasuke veía a su hermano con sorpresa mal contenida, era evidente que se preguntaba que le estaba pasando por la cabeza para ir en contra de su mejor amigo y seguramente el que él consideraba sabía mejor de la situación. — No hables a la ligera de esto como si no supieras, apuesto que ya has hecho tus investigaciones para saber porque no quiero que Sakura vaya. — Hayato colocó una mano sobre la mesa levantándose, atrayendo finalmente las miradas no deseadas de otras personas.
— Creo que será mejor terminar esta conversación afuera —respondí levantándome de mi lugar finalmente y lista para ir a paga la cuenta, pero incluso con la inconformidad en su expresión al notar mis intenciones Hayato se adelantó.
Entonces los cinco salimos de allí y nos dirigimos hasta un mirador alejado del resto de personas, siendo Sasuke más un espectador que un participante activo. — ¿En serio quieres ir? — Cuestionó Shisui seriamente al tiempo que se cruzaban de brazos.
— Sí, quiero poder ver si puedo hacer algo y si no… al menos saludar luego de tanto tiempo —sabía que decirlo era extraño ya que no nos veíamos desde que tenía como tres o cuatro, pero realmente no me importaba, quería eso.
— Shisui —atrayendo su atención Itachi le dio una mirada pasiva y como siempre se inició una conversación silenciosa, donde al final el mayor suspiró y dijo — De acuerdo ¿Tanto quieres ir?
Asentí enérgicamente y entonces ahora todos miramos a Hayato que frunció el ceño y se cruzó de brazos, mostrando su inconformidad con la respuesta, parecía inamovible a su decisión y sabía que sin él no podíamos ir. Estaba pensando cómo convencerlo cuando por un momento recordé algo, vino como una imagen borrosa y entonces sonreí un poco con nostalgia, tal vez fuera tonto, pero igualmente si podía hacerlo bajar la guardia… — Hayato, si lo haces te haré una bolsa de galletas de chispas de chocolate —declaré con confianza dando un paso al frente.
Paso un segundo en el que él se quedó un momento quieto, como procesando lo que había dicho y luego, repentinamente comenzó a temblar, para luego soltar una fuerte carcajada que relajó completamente su postura. — ¿De dónde…? Ah ¿En serio quieres sobornarme con galletas? — Una sonrisa se extendió en su rostro y sus ojos brillaron con burla debajo de su flequillo, haciéndome avergonzar.
— ¿He… así que tenía un gusto por lo dulce? —murmuró Shisui con sorpresa.
— Aprecio el gesto Sakura, pero tu vida creo que es más valiosa que un poco de dulce —respondió dándome una mirada suave — No cederé con eso, pero… ¿En serio no darás marcha atrás?
— No lo haré.
Finalmente suspiró y revolvió sus cabellos hasta soltarlo de su coleta a tiempo que decía —: Bien, en ese caso iremos bajo tu responsabilidad, haremos control de daños si algo pasa. — Miré a Itachi y Shisui que me dieron ambos su propia sonrisa y asentimientos de apoyo.
— Entonces supongo que saldré sobrando ahora —gruñó Sasuke — de todas formas, iba a buscar al idiota para decirle que volví. Quizás mañana entrenemos con todos así que, tengan suerte en lo que sea que vayan a hacer.
Antes de que pudiéramos decirle algo el niño se giró y desapareció, al parecer molesto por no ser incluido correctamente en la conversación, aunque como él dijo era una cuestión de nosotros, precisamente mía pero como siempre no estaba sola. — Bien, los terrenos de mi clan no están lejos así qué andando, es mejor salir de esto cuanto antes —declaró Hayato comenzando a caminar para guiar el camino, así que pronto les seguimos, con Itachi a mi derecha y Shisui a mi izquierda.
Al parecer no era un camino muy largo, pero mientras el silencio nos envolvió mi mente se fue a las palabras inflexibles de Hayato y su preocupación, lo que al final me hizo preguntarme si estaba haciendo lo correcto ¿No estaría presionando? ¿O pasaría algo que nos metería en problemas? Mientras pensaba en esto sentí la mano de Itachi envolver la mía, lo que me hizo sobresaltar con un tono carmín sobre mis mejillas y mirarlo. Sus ojos oscuros me observaban pasivamente, pero con confianza entonces declaró —: Cualquier cosa que pase estamos aquí y sé que lo resolverás así que puedes estar tranquila. Siempre tiendes a cargarte con el pensamiento de salvar a otros, pero tú misma dijiste que somos un equipo y cubrimos las falencias de otros, así que ten confianza en lo que quieres hacer, como prometimos yo estaré aquí también para ti.
— Yo… — sonreí suavemente por sus palabras y también apreté su mano sintiéndome reconfortada y conmovida. Me sorprendía que lo recordara, aquella promesa que hicimos de niños hacía tantos años cuando no quería perderlo, cuando se había vuelto valioso para mí — Gracias Itachi-kun.
— Somos un equipo —respondió en un susurro para mi dándome una cálida sonrisa. Realmente Itachi había cambiado un poco, de alguna forma era el mismo y al tiempo parecía más maduro, era tan emocionante verlo, si me ponía a mirar hacia atrás cuando no sabía nada de él nunca me imaginaría que tras la fachada seria, fría e inexpresiva, había alguien cálido y amable, aunque con un toque dominante que desmentía cualquier duda (si alguna vez existió) de que no fuera un Uchiha, entonces si ya la apariencia lo mostraba como uno, los detalles arrogantes o dominantes lo reafirmaban.
— Es reconfortante ver que hablan que somos un equipo ¿no? —Dijo Shisui con una sonrisa burlona — O ¿Nos están sacando de la ecuación?
— No lo hacemos, antes éramos tres ahora somos cuatro los que podemos enfrentarnos a todo. Shisui siempre has estado con nosotros también —declaré segura mirando también la espalda de Hayato que en respuesta a mi declaración movió su mano derecha como signo de que nos oía.
— Sí… es una pena que no siempre podré involucrarme en todo —respondió con una mirada nostálgica en el rostro antes de mirar a Itachi con complicidad.
— Llegamos —finalmente nos detuvimos al llamado de mi viejo compañero.
Miré la construcción frente a nosotros, era una casa grande y antigua, con una entrada en madera de sauce que tenía el símbolo de su clan tallado, siendo este tres zarpazos en medio de un rombo; igualmente el complejo estaba rodeado por una muralla de piedra caliza y con tejados enlozados de color azul oscuro. Una imagen vaga del pasado de esas mismas puertas pareciendo más grandes y yo cruzándolas de la mano de Yun me vino a la mente, haciéndome revolver el estómago. Había pasado mucho tiempo desde la última vez que crucé esas puertas siendo una niña que no sabía nada, pero ahora estaba frente a ellas nuevamente con otro propósito.
— Sakura —me llamó Itachi atrayendo mi atención hacia él cuando apretó suavemente mi mano, así que le interrogué con la mirada y él añadió —: Si ocurre cualquier cosa, por favor confía en mí, y sigue la corriente.
Su declaración me confundió y más por su mirada firme, no era realmente una petición como la estaba pintando cuando dijo "por favor" en este caso era un comando de orden, su expresión firme no admitiría una negativa, incluso sabía que debajo de las palabras iba una promesa que solo si cumplía con esto me dejaría ir, de lo contrario era probable que se echara hacia atrás. Era realmente astuto, aceptó esa visita sabiendo que no discutiría si estábamos frente al recinto. Debería sentirme molesta por esto, pero no podía hacerlo, él había tomado precauciones por mi bien y, además, no es como si fuera a ir en contra de su solicitud, si él sentía que tenía que hacerlo lo haría.
— De acuerdo, lo prometo —dije asintiendo con seriedad antes de mirar al frente donde al final él soltó mi mano, pero permaneció cerca.
Habiendo ya llamado a la puerta hacia un momento estas se abrieron y por ella se asomó una mujer mayor de cabellos castaños claros que ya poseían entre ellos algunas canas que revelaban su edad, sus ojos igualmente más pequeños pero afilados enmarcaban una pupila color miel con una ligera tonalidad grisácea en los bordes. Siendo una mujer menuda incluso más baja que yo, la cual vestía un kimono elegante de color marrón oscuro con un Obi blanco; por sus movimientos y la forma en que se sorprendió al ver a Hayato debía ser miembro de los siervos de la familia.
— Joven amo —declaró la mujer que parecía alegre de verlo, sin embargo, tosco como siempre Hayato con los brazos sobre el pecho y un semblante frío declaró —: No te hagas ilusiones, hoy vine a ver a mi hermano.
La mujer frunció el entrecejo, pero no dijo nada, especialmente cuando Hayato comenzó a cruzar el umbral sin pensarlo demasiado — Andando, no me gusta estar mucho tiempo aquí, así que terminemos con la visita pronto —declaró dándonos una mirada para que lo siguiéramos.
Así que, aunque algo incomoda fui la primera en entrar seguida de mis dos amigos que parecieron pegarse más a mi cuando cruzamos frente a la mujer que se quedó mirándome sorprendida. No debería parecerme raro, después de todo estábamos hablando de que probablemente recordaran mi cabello cuando era pequeña, pero por algún motivo su mirada me hizo sentir incómoda. — Apresúrate. — Hayato tomó mi mano y me jaló un poco más rápido, para que lo acompañara.
Parecía más nervioso de lo normal, pero eso no evitó que Shisui e Itachi nos alcanzaran siendo el mayor el que declaró —: No seas tan agresivo, entendemos perfectamente tu ansiedad, pero baja tus caballos. — Itachi por su parte tomó mi mano libre maniobrando para que mi mano escapara de las de mi viejo compañero y me permitiera quedarme junto a él, lo que le hizo recibir una mirada molesta que mi amigo igualó con una de advertencia.
— Uchiha…
— No creo que debamos detenernos por esto ¿No crees? Así que vamos —le cortó Itachi con seriedad.
En esta ocasión Hayato no discutió, aunque a regañadientes y siguió el camino, pasando por varios pasillos que se me hacía vagamente familiares, de hecho, casi podía ver los fantasmas de nosotros corriendo por allí hacía mucho tiempo. Era tan extraño que casi me pierdo en mis memorias, al menos hasta que llegamos a un pequeño campo de entrenamiento bastante usado por las marcas en los postes de entrenamiento y las Kunai clavadas en ellos, además todo el terreno era baldío y cortes parejos de lo que seguramente debió haber sido generado con una Katana marcaban varias paredes y los maniquí rotos en una esquina. En el centro de todo había un hombre de espaldas, de cabellos casi tan largos como los de Itachi de color café oscuro, él vestía un Kimono negro con gris y su postura, aunque parecía elegante se veía que tenía algo raro.
— Yun-nii-san —declaró Hayato alarmado y repentinamente acercándose al hombre.
Entonces el nombrado se giró en su lugar y por primera vez en casi 12 años vi al que en un tiempo había olvidado, sus cabellos moviéndose suavemente con él y revelando un pálido rostro que aunque atractivo mostraba claros índices de enfermedad con el tono de piel de un tono ceniciento, y una capa de sudor recorriéndole la frente sobre el que caía un flequillo desordenado sobre sus apacibles ojos café, que cuando vio a su hermano menor abrió los ojos sorprendido — Hayato — salió de sus labios que pude notar tenían un pequeño rastro de Sangre.
Se veía frágil y enfermizo, parecía que su condición tal como lo presentí no era buena, y sin embargo a pesar de esto, e incluso cuando sabía que debería tener alrededor de 30 a 32 años, se veía tan joven como Shisui como si de alguna manera se hubiera conservado bien. Mi corazón dolió con los recuerdos borrosos de ese hombre sonriéndome dulcemente al tiempo que me daba dulces o me cargaba en sus hombros cuando solo era una pequeña y entonces como si de repente no hubieran pasado casi 12 años mis labios se movieron por sí mismos dejando que se deslizara su nombre — Yun-nii…
Entonces todo su cuerpo se tensiono y apartando lentamente la mirada de su hermano la dirigió hacia mí que me encontraba detrás de Hayato, aun flanqueada por mis amigos, pero que noté el no detalló, solo se quedó mirándome con una clara sorpresa en su rostro, sus ojos ahora completamente abiertos al tiempo que daba un paso al frente y una suave brisa de fin de verano movía sus cabellos, entonces con mi corazón doliendo por la nostalgia vi el momento en que sus labios finalmente se movieron y una sola palabra se deslizó de estos —: Sakura…
Bueno esta capitulo cambio completamente del original, ya digo yo, pero es porque luego de leer el original, aunque tiene sus cosas interesantes, sentí que le hacía falta sabor para Sakura. Reescribí tres versiones diferentes de este capitulo y al final siento que esta fue la correcta, porque de lo contrario sentí se extendería un montón y bueno tampoco quería dejarlo así, yo también quería entrar al punto que vamos a tocar en estos tres capítulos XD.
Bueno sobre el cap que puedo decir, en la batalla Zen/Sakura e Itachi, podría decirse que tuve momentos en que me plantee más movimientos y jugar con mucho más de los poderes de Zen, pero aquí el punto era terminarlo. Itachi estaba listo para usar susanoo de ser necesario pero quería que Sakura solucionara el problema inicialmente algo que se consiguió al final.
Por otra parte dejo pistas con la pequeña batalla de Yui contra Dalya para más adelante y por supuesto, aunque aquí fue evidente que Yui (si había duda) se preocupa por Shisui, han formado una buena amistad.
No entrando en detalles por otra parte ahora Nox entrara a participar un poco mas, incluso si solo vemos que esta actuando como un pequeño mocoso, tiene sus razones para llegar a este punto de presentarse en una versión joven y claro ahora apareciendo como medio paracito en la casa de Sakura… leyendo sus novelas románticas.
Por último… si alguien noto el motivo por el cual Itachi esta tan alerta… bueno si no lo tomaron lo harán en el próximo capítulo y solo diré que se vienen tiempos interesantes. Espero les gustara el capitulo, este es solo un abre bocas para lo que viene. Los comentarios alimentan la imaginación, no duden de eso asi que si se les desliza un comentario no me molestaré n.n/
Kaoru gatito: Hay pocas cosas que decir, pero supongo que te hacía falta tu dosis de Itachi y Shisui, se que te llamo la atención el fic que recomendé y me alegro por ello asi que espero que disfrutes también este.
Igual sigo esperando en próximas ocasiones tus dibujos los cuales me gustan mucho :3 Por otra parte lo mejor esta por venir, no se que pensaras al respecto pero igualmente prometo muchas sorpresas para el prosimo capitulo también asi que serán grandes las cosas que traerán ja ja jajajajaja.
Luego hablaremos :D
LadyGabiLun: Hello here! I hope this chapter didn't give you other information overload, and I will try to answer with the most coherence that I can, because my English is good but I don't have much confidence write or talk it. Anyway I love you comment! I like when is large and you said many things :D
So about Hayato… yeah his relationship with Sakura isn't romantic, crashed before starting. I think Sakura's feelings is so solid, in the anime and Manga she never change about her heart, she loves Sasuke with all of his problems and his shit. That's the reason that she in this fic don't change her thinks or feelings about Itachi, and although she appreciates Hayato, she will never love him the same way he loves her. Regardless, Hayato is strong and can get through this.
In Itachi's case, I understand that is hard to put the Akatsuki's Itachi and the more "soft" Itachi than never killed his family. But Itachi is Itachi, if we see when Itachi dies, his mask fall and he can put a smile in his face, he never change, only madurate and need to be more "cold" and have his guard up.
Exist a Sasuke's book when he was in akatsuki, where he investigate about his brother and he found a village that Itachi protected in silence and where he adquired his "medicine". In that Village he talk about his little brother and everyone in this place have a good impression of him, so Itachi only change his mask when he it was infront of his "parners".
Finally, about Shisui... yes, he is also one of my favorite characters, and well, the relationship with Yui is... fun to write, because yes, she is older than him, but Shisui gives her special treatment, and she acts like a shy and insecure person, also almost like a little girl. I think they both make a fairly compact duo and well... we'll see how this evolves n.n
Well that is all for now, I appreciate the time you take to write this. Send you Greetings!
Alex H: Gracias por el comentario, me alegro que te guste tanto el fanfic, si bien mejore de una cosa empeore de otras, pero bueno estoy recuperándome, igualmente agradezco la preocupación :D.
Rihybin: Hola! Me alegro que te gustara la historia, de todas formas seguiré esforzándome por dar lo mejor y que la historia siga cautivando y dando hermosos momentos n.n/
Bueno gente eso es todo por hoy espero disfruten del capitulo y como comente, antes sus comentarios alimentan el espíritu de escritura y también la buena fortuna… espero recuperarme pronto de todos mis males :')
