( watch?v=TdtArl4ekOE&list=WL&index=15)

(Cuando la música comenzó a sonar, los símbolos de los elementos Bakugan pasaron como guiados por el viento hasta aparecer el símbolo de los seis atributos juntos, y adelante apareció el titulo)

Tal como gotas de lluvia que caen sin rumbo, sin fijar dirección.

(De noche, Dan ve la luna con algunas hojas llevadas por el viento pasando. Las hojas pasan cerca de su rostro, que se alzo al frente con ojos llenos de determinación. En una toma diferente, se ve a Camilo de espaldas a Dan, quien bajo la mirada con algo de tristeza. Se ve por unos instantes el domo de acceso al Interespacio de día)

¡Nuestros sentimientos siguen el camino que eligen!

(Luna mira a la luna con tristeza, para ver a Marduk ponerse a su lado y sonrió. De manera consecutiva se ve al resto de peleadores: Shun sentado en la rama de un árbol, Snow chocando sus puños con una sonrisa, Marucho tecleando en su computadora, Felipe de pie en una arena de combate, Page, Rafe y Serah hablando hasta ver hacía adelante).

Un negro amanecer, verás que pronto llega. Pronto vendrá...

(Goodwin, usando una armadura de plata encima de su traje camina por los pasillos del castillo, su capa blanca ondeo. Paso al lado de Kazarina, quien sonrió cruelmente al verlo. Se ve desde abajo y subiendo rápidamente el oscuro castillo, hasta la punta, donde Goodwin estaba de pie, a su izquierda estaban Kazarina y Sellon, y a su derecha, Anubias y Caligula. Los cuatro con sus Bakugan).

(Se ve una imagen dividida de la Puerta y la Llave que tienen Dan y Drago).

Los pedazos de este sueño solo pueden causar dolor. Incluso llegar a tener miedo a creer.

Selen lanzo un rayo de luz que Fury aparto fácilmente retrocediendo en el aire. Vladitor se acerco a Fury y choco su espada con las cuchillas de su enemigo, soltando chispas. Caligula tenía una mirada de oscura excitación al ver la batalla).

¿Qué marca, yo dejaré en este mundo junto con mi decisión? Yo quiero saber...

(H y Abbott miran al suelo azul con una mirada preocupada. Abbott y H se miran, asintiendo y el segundo se retira. El escenario cambia al Interespacio, donde Lumagrow salta en el aire y el cielo es rojizo).

Superándome a mi mismo se que yo volveré a nacer. ¡La fe es lo único que me podrá fortalecer!

(Xerxes choca sus armas con las garras de Lumagrow en un combate intenso donde ambos caen en el aire. Al mismo tiempo, Horridian esquivo una flecha, e Artemis cargaba en su arco otra flecha que disparo al mismo tiempo que Horridian lanzaba rayos de energía de sus bocas, creando una explosión al chocar. Entre las llamas de la explosión, Lirian desvía los ataques de Isis mientras ambas pelean en el aire).

¿Qué marca, yo dejaré en este mundo junto con mi decisión?

(Drago hace a un lado las llamas mientras ve como un ejercito de Bakugan Caos se acerca a él. Onix, Wolfuro y Boulderon se alza ron con su armamento y Bakunanos respectivamente. Secuencialmente, se ve el ojo de Leonidas cambiar de su color normal a un tono rojizo, a Ginebra viendo el amanecer, a alguien usando una armadura oscura, un cuerpo en el suelo con un agujero en el pecho y sangrando y a Morgan con las manos juntas como si estuviera rezando).

¡La oportunidad llegara!

(En un destello, se ve a Camilo abriendo los ojos y la imagen lo rodea para ver que estaba de pie frente a Goodwin. En su espacio oscuro, el Dragón Carmesí extiendo sus alas para que en otra toma, se vea a un individuo de armadura negra de espaldas viendo al horizonte desde el castillo negro de Goodwin con su capa roja ondeando).

Capitulo 30: Luna Revelada

En lo más profundo del edificio de la Corporación Win, en un sub nivel que nadie, salvo el propio Goodwin conocía y tenía acceso, un hombre estaba encadenado en la pared de brazos y pies con grilletes. Estaba casi todo a oscuras, salvo por un pequeño espacio en lo más alto de la pared donde entraba un minúsculo rayo de luz, que a esta hora era producido por la luna.

El individuo encadenado tenía ropas muy andrajosas y maltratadas, no se le podía ver bien sus facciones por la oscuridad, pero se notaba que era un hombre.

Los oídos del hombre escucharon el sonido del ascensor bajar, y tras un pitido, las puertas que estaban a oscuras delante de él se abrieron, dando paso a Goodwin.

-Pero si es mi estimado señor. Es raro que venga verme cuando ni siquiera ha pasado veinte años, ¿me tiene un trabajo? Por que el último lo disfrute mucho, viendo como todas esas personas se tiraban o decidían quemarse de las llamas- el prisionero río por lo bajo. Claramente estaba loco y trastornado por haber estado encerrado por quien sabe cuanto tiempo.

-Silencio. No olvides que estas en estas condiciones porque fallaste el trato que teníamos y el que hiciste con nuestro Dios. Agradece lo misericordioso que fue al permitirte vivir por tus útiles habilidades- asevero Goodwin. Sus expresión facial no cambio, pero sus ojos mostraban una ira fría. -Pero si, tengo un trabajo para ti que te puede gustar. Hay algo que quiero que recuperes...-.

-¿Perdiste algo? Olvídalo, no hago eso. Escuche que tienes nuevos peones para usar, que ellos te lo traigan- interrumpió el hombre con rechazo en su voz.

-Te interesara, porque fueron dos personas las que me lo robaron. El primero es el compañero de H-03 que esta con él-.

-¿Vladitor? ¿Ese tipo sigue vivo? Si que es duro de roer- dijo el hombre con una sonrisa, identificando a este "D-03" como Vladitor.

-Y es mucho más poderoso que antes, ya que ahora tiene la capacidad de hacer Sky Rider-.

El prisionero silbo impresionado. -Si su compañero fue lo suficientemente compatible para volverlo tan fuerte, suena a una presa digna de mi grandeza-.

-La otra persona que los acompaña es Luna. Tomaron la Piedra Filosofal y necesito que se las quites- ordeno Goodwin.

-¿La pequeña Luna ya entro en la etapa de rebeldía? No me sorprende. ¿Quieres que los mate?-.

-Sería bueno si pudieras deshacerte de Marduk y Vladitor, sería una amenaza menos- eso le sonó a un "si" al loco prisionero. -Y preferiría que no eliminaras a Luna, pero si no tienes de otra, tienes permiso-.

El hombre ahogo una risa lunática. -Para que me envíes a una misión como esta... estas desesperado, ¿no?-.

La ceja de Goodwin tembló por un segundo.

-Este es tu tercer intento por resucitar a tu "Dios", ¿no es así? ¿Quieres que la tercera sea la vencida? ¿Es por la profecía que se te dicto hace más de 1000 años?- Río.

Goodwin gruño mientras apretaba las manos detrás de su espalda. -Guarda silencio-.

-¡Oh! ¡Ya se! Es porque tienes miedo de fracasar, ¿no es así? Crees jugar un juego de ajedrez donde mueves tus peones, pero temes que uno de esos peones llegue a ser Rey e intente destruir todo lo que has hecho, ¿cierto? ¡Tienes miedo! ¡Tienes miedo! ¡Jajajaja!- Río histéricamente.

-¡Cállate! ¡Yo soy quien controla todas las piezas en esta partida! ¡Si el peón puede convertirse en Rey es solo porque logro llegar a tanto por mi, y solo para que me sirva!- Por primera vez en mucho tiempo, Goodwin perdió su rostro estoico a cambio de uno de furia. Se acerco hasta el hombre que tenía prisionero y lo levanto del cuello, haciendo sonar las cadenas que lo ataban. -Si dices que todos son piezas de juegos, tu no serías diferente a una Torre. Solo sirves para eliminar a las otras piezas, esa es la única razón porque sigues existiendo-.

A pesar de tener la firme mano de Goodwin apretando su cuello, la sonrisa enloquecida no dejo sus labios. -¿Estas dispuesto a sacrificar las piezas más importante por un peón?-.

-Este peón es el más importante de todo: tiene el poder, la voluntad, y la sangre de un rey. Todas las cualidades para convertirlo en el mayor rey que cambiara al mundo. Yo me aseguraré de explotar a este peón para que alcance su potencial-.

-¿Y si se sale de tu control?-.

-Mientras cumpla con su propósito es lo único que importa... porque un Rey nunca será superior a un Dios- Goodwin soltó su cuello, haciendo que caiga de rodillas. -No olvides nunca tu lugar, o con gusto me aseguraré de recordártelo-.

-Bien, bien...- el hombre se sobó el cuello. -Entonces haré mi papel como Torre y eliminaré a las piezas que quieres fuera del juego. Solo dime donde encontrarlos y haré el resto-.

Rex chasqueo los dedos, y los grilletes que lo ataban lo soltaron. -Ven. Báñate y arréglate. Te daré la información que necesitas una vez que este listo... ¿quedo claro, Caligula?-.

El ahora identificado como "Caligula" asintió. -Si... aunque, si Vladitor esta ahí, también necesitaré un Bakugan con el poder suficiente para enfrentarlo-.

-Ya tengo uno preparado. No le gustará seguir ordenes en un inicio, pero creo que podrán trabajar bien juntos-.

-Muero por conocerlo-.

(En la Dimensión de la Perdición)

En la parte más profunda de la dimensión maldita, destinada a los Bakugan más malvados para estar encerrados por toda la eternidad en ese lugar, sin distinguir sin han estado un día o mil años.

Un grito de odio interrumpió la calma abismal de la Dimensión, seguido de una explosión que levanto una cortina de humo.

Cuando la cortina de humo se despejo, se vislumbro a un Bakugan Darkus de cuerpo negro que usaba una armadura de diseño de hueso y dos grandes alas de murciélago de color purpura detrás suyo. Su rostro era una mascara con dos ojos rojos y tenía tres puntas que hacían parecer un tipo de gran corona.

El nombre del Bakugan era Fury, un Bakugan que fue enviado hace Eones a la Dimensión de la Perdición por Genesis Dragonoid por ser muy peligroso, aunque no fue el único.

-¡Maldición! ¡Siento que estoy cada vez más cerca de lograrlo! ¡¿En que fallo?!- Grito en cólera Fury. -Se que puedo crear no solo uno, sino a varios Mechtogans con mi propio poder, pero aun no lo consigo, ¡y esos inútiles no me quieren ayudar! ¡Los Nonets se han ablandado! ¡Sobre todo Betadron, que dice seguir odiando al Dragonoid, pero es claro que le importa más su "código de honor y de guerrero" que su propia venganza! ¡Se han vuelto unos inútiles! ¡Pero yo no!-.

Fury aun recuerda claramente como paso: los Bakugan comenzaron a nacer en Vestroia, siendo dirigidos por Genesis Dragonoid en sus primeros días, pero él vio que era diferente al resto, más fuerte y poderoso. Pronto se dio cuenta que Genesis estaba cada vez más débil, como si su hora llegara. Vio eso como su oportunidad para gobernar tener el poder definitivo. Conoció y recluto a un grupo de Bakugan que también eran diferentes y más poderosos que el resto, asegurándoles que reinarían a su lado al acabar con Genesis.

Cuando llegó el momento, a pesar de que todos juntos le dieron batalla, Genesis Dragonoid termino por derrotarlos, y en vez de eliminarlos, decidió enviarlos a la parte más profunda de la Dimensión de la Perdición por toda la eternidad.

Desde ese momento, todos los Nonets odian a Genesis Dragonoid por condenarlos a este lugar, aunque algunos los odian menos que otros, como Wortong, o Profesor, como últimamente le gusta que le llamen, quien fue el que más se oponía a enfrentar a Genesis Dragonoid, seguido de Balista.

Pero aunque comparten un odio por el mismo ser, ya no le tienen el mismo respeto que antes, probablemente porque también lo culpan por haber terminado encerrados aquí, aunque no lo dicen, lo sabe por las miradas que le dan de vez en cuando. Han olvidado que fue él quien los unió en primer lugar.

-Pero ya verán, cuando sea capaz de crear mis propios Mechtogan, ellos me obedecerán y tendré el poder necesario para salir de este maldito lugar- aseguro el Bakugan Darkus.

-¿Y porque esperar?-.

Fury se giro hacía una estructura de rocas que flotaba en el aire. De pie arriba de un pilar, vio a una criatura de un tamaño muy diminuto de cabello grisáceo que le hablo.

-¿Quién eres tu? Nunca te había visto antes por aquí-.

-Mi nombre es Rex Goodwin, un servidor del Dragón Carmesí que se presenta ante usted con una oferta- se presento Goodwin llevándose una mano al pecho y haciendo una pequeña reverencia.

-¿El Dragón Carmesí? Eso es solo un mito...- comento Fury.

-Oh, le aseguro que es tan real como usted y yo, señor Fury, y yo soy su emisario que lo hará regresar; pero para eso necesito aliados poderosos que apoyan su causa, y usted fue elegido para ser uno de sus guerreros de elite-.

-Yo no le sirvo a nadie más que a mi mismo. Dile al Dragón Carmesí que no me interesa lo que tenga que ofrecer- Fury se dio vuelta para irse.

-¿Ni siquiera la oportunidad de ser libre y tener venganza?-.

Fury se detuvo.

-¿A que te refieres?- Miro sobre su hombro al humano.

-Hay enemigos que quieren evitar el despertar de mi señor. Si accede ayudarme, puedo sacarlo de la Dimensión de la Perdición, sería libre. No solo eso, sino que también tendría la oportunidad de enfrentarse al descendiente de Genesis Dragonoid que vive, aquel que se llama Drago-.

-¿El legado de ese bastardo aun vive?- Fury se giro con furia al escuchar eso. -¡Aun después de muerto, sigues burlándote de mi...!-.

-El trato es simple: usted jura trabajar para mi señor, no como siervo, sino como uno de sus generales que lo traerán de regreso, y será recompensado con salir de la Dimensión de la Perdición y tener su venganza con el descendiente del Dragonoid- Goodwin puso las cartas en la mesa.

Fury medito la oferta de Goodwin. Sonaba demasiado buena para desperdiciarla, y si tuviera cualquier oportunidad de escapar, debía tomarla.

-Tengo que consultar esto con mis compañeros primero-.

-Esta oferta es solo para una persona, Fury. Lamentablemente para sus amigos, no están invitados, son demasiado problemáticos que podrían perjudicar nuestra empresa-.

Goodwin considero usar a todo el equipo de los Nonets. Es un grupo con miembros muy poderosos que podrían pelear a la par con los peleadores; pero sus diversas opiniones y el carácter de todos que les hace difícil seguir ordenes estrictas es por lo que rechazo en usarlos, ya que a la larga, no sería capaz de controlarlos y podrían traer más problemas que beneficios.

-¿Me dices que abandone a mis compañeros?- Inquirió Fury con mirada amenazante.

-Si le ofreciera esta misma oferta a uno de ellos, ¿cree que dudarían?-.

No. Era una respuesta demasiado clara para Fury. Todos aquí estarían dispuestos a hacer cualquier cosa por escapar de este maldito lugar a como sea.

-Muy bien, Rex Goodwin, acepto tu oferta. Pero no soy alguien que puedas desechar y ordenar. Si me voy a unir, quiero un asiento en la mesa- asevero Fury.

-Tenga seguro que ya lo tiene- Goodwin sonrió condescendientemente. -Y como primera misión, usted hará equipo con uno de mis hombres e irán a recuperar un objeto de gran importancia para mis planes. Espere mucha resistencia, ya que se enfrentara a Vladitor-.

-¿Vladitor? ¿Ese tipo escapo?- Los Nonets conocía a Vladitor porque también termino siendo enviado a las profundidades de la Dimensión de la Perdición hace mucho, haciendo que tuvieran que convivir juntos por bastante tiempo, hasta que un día de la nada él desapareció. -¡Ja! Entonces espero que vaya a valer la pena-.

Si los peleadores son un equipo unido como familia e iguales, Goodwin formo a su grupo de leales seguidores con talentos para ciertas áreas, unidos por diferentes deseos, pero que se unen para su objetivo.

(Con Marduk y Luna)

El dúo fue a un laboratorio a unas cuadras del punto donde se reunieron después de robar la joya. El laboratorio le pertenecía Corporación Win y estaba dedicado a estudiar energía limpia y como usarla sin dañar el medio ambiente.

Fue fácil entrar, Luna aun tenía la carta de acceso que usaba cuando trabajaba como secretaria para Goodwin, esa le permitía entrar a cualquier parte que perteneciera a Compañía Win, ya que al haber sido su secretaria muchas veces tuvo que ir a revisar los avances en otros sectores de la compañía.

Luna (ya cambiada a su ropa normal) dejo la joya dentro de un equipo tecnológico que tenía forma de microondas. Dentro de la maquina, se estaba analizando la joya y revisaban los datos a través de una pantalla.

Marduk dio un ojeo por el lugar. Él no era un experto tecnológico y amante de las computadoras como Marucho y Camilo, pero si estaba al día con las últimas tecnologías que salían. Corporación Win era una de las compañías más exitosas en los últimos años por haber creado equipos de tecnología en todos los campos posibles que daban un salto tecnológico. Una de las cosas por las que él conocía a la compañía fue porque patrocino y creo los estadios que se usaron en los torneos preludios al TDB y el mismo torneo final.

Eso le ha llevado a preguntarse como logro crear esas arenas de combate. Los entornos que decoraban las arenas para hacerlas más representativas con los atributos que representaban (como la arena en el torneo Subterra, el calor en el torneo Pyrus) fueron muy reales. Había escuchado que se usaron hologramas para proyectar los campos y se sintiera más real, pero con todo lo que ha vivido, tiene sus dudas.

Al menos sabe lo de las estatuas: fueron maquetas en movimiento hechas a diseño de los Bakugan más famosos de cada atributo que, irónicamente, fueron los Bakugan de los peleadores en ese entonces.

Desecho esos pensamientos innecesarios en este momento. Tenía que concentrarse. Llámenlo paranoico, pero todo estaba saliendo fácil. Demasiado fácil que lo ponía alerta.

-¿Ya has descubierto algo?-.

-Más o menos- respondió Luna. -Esta joya no fue creada naturalmente de la tierra... alguien la creo, no lo digo por su diseño o constitución, sino por sus materiales-.

-¿A que te refieres?- Pregunto Vladitor intrigado.

-Esta joya esta compuesta por otros minerales unidos y pegados uniformemente de una manera que la maquina no puede explicar, lo cual me sorprende mucho-.

-¿Por que?-.

-Por que esta maquina tiene partes de tecnología alienígena. Debería ser capaz de analizar cualquier cosa que escanee, pero no sabe con que se unieron los minerales para crear esta joya-.

-Ahora que lo dices, también mencionaste que a pesar de que eres de la Tierra, ya has ido al espacio antes, cuando nos conocimos. ¿Puedes explicar eso ahora?- Dijo Marduk, casi exigiéndolo.

Luna dio un suspiro interno antes de responder. -: Goodwin conoce a alguien del espacio. No se como o cuando se conocieron, pero esa persona le trae partes de tecnología cada cierta cantidad de tiempo...-.

-Lo que explica la superioridad tecnológica que tiene su compañía- termino Marduk. Un misterio resuelto.

Luna asintió. -No es un comerciante, no uno normal al menos para estándares de la Tierra. Goodwin lo acompañaba a veces y como su secretaria y asistente, lo acompañe un par de veces. En uno de esos viajes, fuimos a Neathia a recolectar plantas exóticas de ese planeta. Fue ahí donde conocí a Selen-.

-Así que eres un Bakugan de Neathia- dijo Vladitor, observando a la Bakugan.

-Si... yo... había escapado. Habían muchos Bakugan en Neathia que no querían arriesgar sus vidas en la guerra por temor. Yo era una de esos Bakugan. No me arrepiento el haber conocido a Luna, aunque fue para huir; pero viendo hacía atrás, me avergüenza mi cobardía- admitió Selen con vergüenza y pena.

-No te sientas mal. Aunque los Bakugan amamos la batalla, una guerra es diferente- la consoló.

Selen quedo en silencio. No se espero que Vladitor la consolara de entre todos, se esperaba una burla o que la llamara cobarde, pero no esto.

Aunque Marduk si dijo algo, pero no a Selen. -¿Fuiste un par de veces con él? ¿Por que? Aunque fueras su asistente, no entiendo porque te llevaría literalmente a otro planeta- para alguien tan metódico como Goodwin, sonaba muy irresponsable llevar a un empleado de su compañía a otro mundo. Luna había demostrado con lo que sabía que no era solo una empleada, sino que estaba hasta cierto punto involucrada en sus planes y por eso lo traiciono, pero aun así debía tener un método para asegurarse que ella no diría nada o lo traicionaría, método que no tenía porque ella lo termino traicionando. -¿Algo que decir?-.

Empezando a sentirse atrapada, Luna evito por todo los medios la mirada inquisidora del peligris y se concentro en la pantalla. -N-No se a que te refieres...-.

Marduk suspiro. Ya se harto de ser paciente. -Escucha Luna, he sido muy paciente para ser yo... pero es obvio que hay más de lo que me dices, así como que tienes otra razón para querer detener a Goodwin, aparte de que es peligroso- veía como con cada palabra, Luna parecía encogerse. -¿Quieres que confíe en ti? Demuestra que puedo confiar en ti y esto no es más que una artimaña para usarme-.

-No lo es- dijo Luna, casi gritando y se volteo para enfrentar la mirada a Marduk. -Además, ¿como puedes pedir que confianza con todo lo que hiciste en el pasado?- Sabe que era un golpe bajo, pero usaría lo que sea para defenderse.

-No niego que querer conquistar a los Bakugan y aliarme con Naga fue una idea de mierda, impulsada por el ego de un niño que hacía un berrinche- Marduk sabe que la cago hace años. -Pero no me arrepiento, ya que así pude conocer a Vladitor, y también a un buen amigo que me soporta, además de otros inútiles que considero mis amigos y ellos me consideran uno de los suyos-.

Aunque nunca se los diría de cara, tenía su orgullo y no sabría que cara poner si ellos se enteraban que en realidad los aprecia tanto.

Dio un paso al frente y ella uno atrás, chocando con la mesa. Luna se sentía acorralada.

Selen intento decir algo, pero Vladitor se puso frente a ella. Aun en modo esfera, Selen sintió la fuerte mirada que le ordenaba quedarse callada, y que no tuvo la fuerza de oponerse.

-No te he cuestionado nada y hasta te ayude a robar una piedra de un millón de dólares, y si quieres hablar de buenas acciones, yo ayude a salvar a dos mundos de Apocolyps cuando perfectamente podía irme a la Tierra- dio un paso más, colocando su rostro muy cerca de Luna. Uno pensaría que estarían a punto de besarse, pero la seriedad en los ojos de Marduk y el miedo que empezaba a salir en las facciones de Luna decían lo contrario. -¿Quién eres en realidad, Luna? Si es que ese es tu verdadero nombre-.

-Yo... yo...- Luna no sabía ni a donde ver para no mirar esos ojos rojos que la acusaban como si hubiera echo algo horrible. Se sentía tan pequeña y débil. -Yo... no quiero que me odien-.

Marduk levanto una ceja. ¿Odiarla? ¿Por que?

Pero no pudieron seguir conversando, porque una figura fantasmal salió del techo y se puso frente a ellos. Se separaron mientras retrocedían para ver como la figura se hacía tangible.

-¿John?- Marduk lo reconoció, sorprendido. -¿Qué haces aquí?-.

El marciano no respondió. Vio la Piedra Filosofal dentro del aparato tecnológico y se acerco a ella.

Marduk corrió hacía él y lo tomo del hombro. -Espera John..-.

Pero este lo aparto con un manotazo, lanzándolo por encima una mesa y que chocara con unos estantes en la pared, dejándolo adolorido en el suelo.

-¡Marduk!- Vladitor fue flotando hacía su compañero.

-¡Se quiere llevar la joya!- Grito Luna viendo como John abría la tapa y tomaba la joya, deteniéndose a verla por un segundo.

John miro a Marduk, que estaba abriendo los ojos adoloridos en el suelo. -Lo siento pero... es mi última oportunidad de ser feliz-.

Y cuando se disponía a irse... las puertas literalmente explotaron, sorprendiendo a todos.

-Hola, hola. ¡Ya empezó la fiesta!- Grito Caligula con una sonrisa loca, sosteniendo con una mano una escopeta y en la otra jugaba lanzando de arriba a abajo una granada.

-¡¿Caligula?!- Exclamo sorprendida Luna.

No se veía diferente a la última vez que lo vio. Era un hombre en sus treinta de rasgos extranjeros de cabello castaño oscuro de piel coloreada por mucha exposición al sol, ojos azules y complexión atlética. Sus ojos eran de color azul con iris negras. Estaba usando una especie de uniforme de color negro sin mangas de pantalones holgados y botas negras. Tenía hombreras de metal en cada hombro y de ellas colgaba una capa roja.

Ante el grito de Luna, Caligula la miro. -Vaya, pero si es la pequeña Luna. Mira como has crecido. He escuchado de tus acciones. Niña rebelde, ¿te cansaste de seguir a tu papi?-.

-¿Quién es este inútil?- Pregunto Marduk cuando al fin pudo levantarse.

-Es Caligula es... un asesino. Si, es la mejor forma de describirlo. Es el asesino más despiadado que tiene Goodwin. Solo lo usa cuando realmente quiere eliminar a alguien y no tiene más opciones. ¿Has escuchado del incidente de las Torres Gemelas hace años?-.

-Por supuesto-.

-Él fue quien lo causo. Es un amante del caos y la muerte-.

-Ya para, Luna, me haces sonrojar con tantos halagos- Caligula se tomaba todo eso como si le describieran sus mejores virtudes. -Hoy vine por eso...- señalo la Piedra Filosofal que sostiene John. -Así que dámela y nos iremos. Aunque, por favor, siéntete libre de resistir-.

-¡No! ¡Nadie me detendrá!- Grito John.

Caligula sonrió. -Como me encanta que la gente diga eso-.

Saco el seguro de la granada que tenía en la mano y la tiro al medio de la sala.

El tiempo pareció congelarse para todos mientras la granada caía al suelo.

¡BOOOM!

(En Nueva Vestroia)

Camilo y Leonidas se habían alejado de las zonas rocosas. Ahora estaban en una zona de plantas y agua que era habitada por algunos Bakugan Aquos. Los Bakugan que los vieron no se acercaron, probablemente intimidados por Leonidas al ser un desconocido para ellos.

Ambos estaban acostados encima de un campo de césped mirando las estrellas. Camilo tenía su cabeza sobre el manto que usaba para dormir para no aguantar la tierra en su cráneo.

-Las estrellas de Vestroia son hermosas...- comento Camilo.

-Si... nunca me intereso venir a Vestroia, pero ahora puedo ver porque Drago y los demás se esforzaron tanto para proteger este mundo- dijo Leonidas.

Ambos han tenido muchas cosas en la mente después de la visión en la cueva. Ni siquiera han tocado el tema, Leonidas estaba en negación a querer hablar de eso y Camilo no sabía que pensar, la imagen de él con esa armadura aun lo sigue.

Camilo de repente se río.

-¿Qué es tan gracioso?- Pregunto Leonidas curioso.

-Es que me acorde de una vez que fui a acampar con mi abuelo, de parte de mi madre. Falleció hace cuatro meses de Cáncer Cerebral. Él era de Irlanda, pero vino a Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial, donde conoció a mi abuela. No fuimos muy cercanos, pero a veces era divertido escucharlo, ya que decía cada que podía que su familia tenía la sangre de un rey de sus tierras y más cosas. Eran las desviaciones de un enfermo, pero era divertido estar con él mientras se pudo-.

Camilo suspiro con tristeza.

-Ver las estrellas me hizo acordarme de él-.

-Suena a un viejo loco- opino Leonidas.

-Y tu suenas la mayor parte del tiempo a un viejo cascarrabias- bromeo Camilo.

-¡Oye!-.

Humano y Bakugan rieron por sus payasadas. A pesar de que no vinieron a divertirse, relajarse un poco y disfrutar como compañeros sin duda era útil, sobre todo para alguien con la situación tan difícil como ellos.

-Camilo...-.

-¿Si?-.

Leonidas se quedo en silencio, parecía que pensaba las palabras, como decidiendo si decirlas o no. -...Tenemos que volver un día con los demás, cuando todo este mejor-.

Camilo mantuvo la mirada fija a las estrellas. -Si... un día, volveremos aquí a disfrutar, junto con todos-.

Eso era una promesa.

(En la Tierra)

El techo del laboratorio a nombre de la Corporación Win colapso cuando Selen y Vladitor emergieron del interior, las partes del techo cayeron a las calles de los lados. Cada uno sosteniendo a su compañero mientras salían a la calle.

John también logro salir libre de la explosión gracias a sus poderes de cambio de densidad. Viendo que la joya estaba intacta, planeaba irse, pero recibió un disparo en la mano que le hizo gritar de dolor y tirar la joya.

-Esa cosa es mía, compañero- dijo Caligula, apuntando a John con su escopeta.

-¡No te la daré!- John voló para golpear al sujeto. Pensó que sería un golpe fácil, pero no se espero que Caligula esquivara su puño a último minuto moviendo su cabeza a un lado, haciendo que pasara de largo.

-¿A donde apuntas, viejo?-.

La explosión no tardaría en llamar a la policía a investigar, además de que tener una batalla Bakugan ahora seria contraproducente. Era una suerte que el laboratorio se encontrara en una zona privada cerca del limite de la ciudad, por lo que no hay civiles.

-Debemos irnos, ahora-.

Marduk asintió a las palabras de Luna, pero antes de ordenarle a Vladitor, las balas de escopeta resonaron al ser disparadas.

-¡¿A donde creen que van ustedes, mocosos?!- Grito Caligula. -No me he olvidado de ustedes, y aquí les tengo un amigo para jugar- saco una esfera Bakugan purpura.

-¿De donde consiguió un Bakugan?- Pregunto Marduk.

Caligula lo lanzo. -¡Bakugan pelea! ¡Bakugan Sky Rider, salta!-.

-¡¿Dijo Sky Rider?!- Exclamo Vladitor.

La esfera se abrió y dio un salto, empezando a brillar en el aire.

-¡Ataca! ¡Fury Darkus!-.

Fury surgió con truenos morados a su alrededor, embistiendo a Vladitor como primer objetivo, haciendo que este suelte a Marduk, quien grito al comenzar a caer al vacío.

-¡Marduk!-.

Selen actuó rápida, y tomo a Marduk con su mano libre antes de que siguiera cayendo más.

-¡¿Fury?!- Exclamo Vladitor, mientras era arrastrado hacía atrás por la embestida del Bakugan enemigo. Con los pies firmes en la tierra, empezó a detener la arremetida antes de salir. Con una mirada rápida adelante, vio que su compañero estaba a salvo.

Vladitor conoció a Fury y a los Nonets cuando fue enviado a la parte más profunda de la Dimensión de la Perdición después de perder en su batalla contra los Seis Antiguos. No se llevó bien con ninguno y el sentimiento era mutuo para todos.

Fury hecho una mirada rápida a Vladitor cuando este lo detuvo de seguir empujándolo. Se veía muy diferente a la última vez que lo vio, no solo su apariencia, sino también su energía: podía sentir lo poderoso que era.

-Ha pasado un tiempo, ¿verdad?-.

-¿Cómo escapaste de la Dimensión de la Perdición?- Eso era lo que Vladitor más quería saber. Él escapo gracias al desbalance que Naga creo al tomar el Núcleo Silente, ya que su estadía en ese abismo se debía en parte a esa energía, pero por lo que sabe, los Nonets están por algo diferente. -¿El resto de tu pandilla vino contigo?-.

-Se me ofreció un trato jugoso que era imposible de negar, y no necesito a cobardes y debiluchos a mi lado- por la respuesta de Fury, Vladitor pudo suponer que, efectivamente estaba solo, y que salió con ayuda de alguien.

Vladitor aparto un poco a Fury, pero este volvió a intentar arremeter en su contra; pero esta vez esta listo. Tomo las manos de Fury con las suyas propias, donde ambos empezaron un forcejeo de fuerza para derribar al otro, eso provoca que el suelo debajo de ellos tiemble ante la fuerte presión y pequeñas descargas de energías Darkus de ambos sean expulsadas.

-Siempre fuiste muy arrogante cuando estabas con nosotros, creyéndote un rey que podía gobernarnos. No sabes el placer que me dará aplastarte- dijo Fury con siniestro placer.

-Mira quien habla. ¡Ángelus Ascendido!-.

-¡Furia de Thor!-.

Ambos activaron sus poderes, que hicieron que sus cuerpos brillaran de tono purpura, el de Vladitor más claro que el de Fury. Chocaron sus cabezas y se separaron con un salto hacía atrás.

Aun brillando, Fury emano relámpagos de su cuerpo que lanzo hacía Vladitor, quien a una gran velocidad los esquivo. Los rayos destrozaban la tierra al no golpear a su objetivo.

Vladitor se acerco a Fury corriendo en zigzag mientras aun evadía los relámpagos. Al darse cuenta que no lograría golpearlo, Fury se elevo en el aire.

-¡Destructor Huesal!- De la muñeca izquierda de Fury surgió un dardo, apunto a Vladitor y disparo. El dardo que parecía estar hecho de huesos se acerco a una gran velocidad que Vladitor apenas lo esquivo, aunque le roso el rostro. Cuando el dardo se estrello contra el suelo, dejo un agujero del tamaño de un auto.

Fury disparo más dardos de sus muñecas como balas hacía Vladitor.

-¡Doble poder activado: Escudo de Endimión + Disco Lunar!-.

Un escudo de energía Haos apareció delante de Vladitor, bloqueando los dardos que se clavaron en la barrera. Fury escucho un ruido acercarse por su espalda e inclino la parte superior de su cuerpo hacía adelante, esquivando un disco de energía Haos que paso por detrás suyo que amenazo con cortarle la cabeza. El disco voló de vuelta hacía él, pero lo destruyo con un rayo.

Selen se puso al lado de Vladitor.

-No necesito de tu ayuda-.

-No es tiempo de ser orgulloso. Tenemos que derrotar, o al menos distraer a este tipo mientras Luna y Marduk intentan recuperar la joya y escapar- espetó Selen.

Vladitor gruño, pero tenía la suficiente consciencia para entender y hacer caso a eso. A pesar de que Fury no le agradaba y quería derrotarlo, no es su prioridad, al menos no ahora.

Selen miro a su alrededor. Apenas han activado un par de poderes, pero la zona ya estaba bastante dañada. Si seguían luchando, podrían dañar la ciudad.

-Tenemos que llevar la batalla más lejos de la ciudad-.

-Eso es fácil- dijo Vladitor. reuniendo energía en su mano. -¡Empujón de Oscuridad!- Lanzo una bola de energía Darkus con más energía oscura almacenada en su interior.

-No me hagas reír- Fury se hizo a un lado para evadir la bola, pero cuando esta estuvo cerca de él, exploto, liberando una onda que mando a volar a Fury hasta estrellarse a las afueras de la ciudad.

-Práctico...- dijo Selen.

-Ese ataque me ayuda a lidiar cuando me enfrento a muchos enemigos- dijo Vladitor.

Los dos Bakugan fueron a la dirección en donde se estrello Fury para seguir la batalla y entretenerlo. Sin sus compañeros humanos, no podrían luchar al 100%, pero aplicaba lo mismo para su oponente.

-¡Jujuuu! ¡No hay nada mejor que tener una pelea a muerte con un alienígena!-.

Caligula estaba teniendo una pelea mano a mano contra John, y para sorpresa de todos, le estaba ganando. Al ser un marciano, la fuerza física y resistencia de John son muy superiores a las de un humano promedio sin contar sus poderes, por lo que no debería de afectarle los golpes de un terrícola.

Pero los puños de Caligula le dolían cuando lo golpeaba, y cada vez que intentaba devolver el golpe, este lo esquivaba fácilmente. En un momento de la pelea en que parecía que iba perder, John se harto de jugar limpio y uso su telequinesis para levantar a su enemigo del suelo.

-¡Oye! ¡Si empiezas con tus homosexualidades no puedes jugar!- Grito Caligula.

-¡Esto no es un juego! ¡Esto es para tener la oportunidad de abrazar a mi familia de nuevo! ¡No dejaré que nadie se interponga!- Grito John, nublado totalmente por su deseo.

-Pues piensa rápido- le lanzo una bombita que tenía escondida en su manga a los ojos, haciendo que John los cerrara por el polvo.

Caligula aterrizo y sin ser perezoso, saco un cuchillo escondido y corrió hacía John, clavándole la hoja en un punto vital para los humanos. No sabía si también sería un punto vital para él, pero hay que intentarlo.

John jadeo de dolor, haciendo que al fin suelte la joya. Su expresión cambio a una de ira y de un puñetazo aparto a Caligula, que fue mandando fuerte contra el suelo con su nariz rota y sangrando.

Se saco el cuchillo y lo examino. El metal de la hoja no era de la Tierra, lo sabía con solo verlo. Por eso fue capaz de herirlo. Con sus poderes de cambio de forma, sano su herida, para posterior agacharse a recoger la Piedra Filosofal...

Para que, aprovechando que bajo la guardia, Marduk ruede por su lado y la tome primero. Luna se puso detrás de John a una distancia segura, apuntándole a la cabeza con una pistola.

-¡Devuélvemela! ¡La necesito!-.

-¿Te estas escuchando? Suenas como un drogadicto que pide por su droga- Marduk se incorporo con la guardia alta. -Despierta, John. Solo te están usando como muñeco de trapo. Quien sea que te dijo que esta cosa te devolvería a tu familia, te mintió-.

-Tu no puedes saberlo. Necesito tener esa piedra. Es la única esperanza para Marte, para mi familia-.

-¡¿Y crees que tu familia estaría feliz con como estas ahora?!- Ese grito, y sus palabras, fueron como un shock para John, quien parecía que finalmente tenía un momento para pensar.

Pero por estar tan enfocado en John, Marduk no vio a Caligula hasta que fue tarde, recibiendo una patada en su rostro. Marduk tuvo un segundo para no caer por la patada, dando pasos hacía atrás de manera tonta. Se limpio la sangre que cayo de su nariz y vio a su atacante.

Luna cambio su objetivo de John a Caligula.

Debido a ese golpe, la Piedra Filosofal cayo de las manos de Marduk, quedando en medio de los tres.

-Bueno, bueno...- Caligula miro a Marduk a los ojos, y miro a los de John, la tensión por quien haría el primer movimiento para agarrar el objeto por el que peleaban era alta. -Parece que tenemos una situación aquí-.

-¿Para que quiere Goodwin una joya?- Pregunto Marduk.

-No lo se, ni me importa. Tengo un trabajo y debo cumplirlo, por más que no sea de mi estilo- respondió Caligula fastidiado. -Aun así, no creí que me enfrentaría a un niño y a un alienígena. El mundo se esta volviendo en un lugar muy loco- sonrió ladino.

John parecía estar desconectado de la charla, sus ojos no dejaban de ver entre Marduk y Caligula.

Luna se movió un poco, rodeando a Caligula. -Ríndete, Caligula. Ni tu puedes sobrevivir si tienes una bala atravesada en el cráneo-.

-Oh, pequeña Luna, que lenguaje tan vulgar, ¿así te crio tu padre?- Dijo riendo Caligula.

El rostro de Marduk se torno en confusión, aunque aun mantenía su expresión seria. -¿Se conocen?-.

-Así que no lo sabe- Caligula se dio cuenta, esta era una buena oportunidad para joder un poco a la niña y tener la ventaja para llevarse la joya. -¿Te llamas Marduk? Quiero saber algo. ¿Luna te contó cual es su apellido?-.

-¿Eso que tiene que ver?-.

-Oh no- Luna se dio cuenta de lo que intentaba hacer Caligula, por lo que intento detenerlo. Le disparo a los pies en señal de advertencia. -¡No digas ni una palabra más!-.

-Parece que no te lo conto- Caligula ni se inmuto por el disparo. -¿No te parece raro que ella este tan insistente en detener a Rex? ¿O que haya hecho todo por una joya que ese tipo quería?-.

Marduk mantuvo su expresión seria, pero Caligula sabía bien que el chico se había hecho esas preguntas, por lo que su sonrisa aumento.

-Pues la respuesta es más fácil de lo que crees...-.

-¡Cállate!- Luna le disparo a Caligula, quien esquivo el disparo antes de dar su declaración.

-: ¡Es porque el nombre de Luna es Luna Goodwin! ¡Es la hija de Rex!-.

Marduk abrió los ojos y John quedo atónito. Un silencio asfixiante lleno a su alrededor cuando se escucharon las palabras de Caligula. Luna, por su parte, solo puede sentir como el sudor empieza a recorrerle el rostro mientras todo su cuerpo empieza a temblar en espasmos.

-No, no, no, no-.

Marduk miro un momento a Luna. -Ya veo... eso explica todo-.

-La madre de Luna fue una de las personas que ayudo a Rex a fundar su compañía y además estaba enamorada de él, pero era de cuerpo débil y su esperanza de vida era poca, por lo que en un acto, le pidió a Goodwin tener a su hijo, a lo cual nuestro bastardo amigo acepto, ya que la chica era una preciosura, y tal vez también por compasión. Cuando la mujer murió, Rex se hizo cargo de la pequeña Luna y la educo de tal forma que lo ayudaría en su plan. Por lo que escuche, fue muy estricto y poco cariñoso con ella-.

Un sentimiento de pavor empieza a invadir a Luna al escuchar la explicación que estaba dando Caligula de su vida. Eso hacía que los recuerdos mientras crecía volvieran.

Recuerdos que la hacían ver que, más que una hija, Rex Goodwin criaba a un sirviente fiel... ni una vez lo escucho decirle que la quería.

-¡Basta! ¡Que se calle! Yo... ¡yo no elegí tenerlo a él como Padre!-.

Caligula ve como sus palabras afectan a Luna, y sonríe con dulce placer. -Te cansaste de ser la niña obediente de papi, ¿no? Por eso haces todo esto, quieres entrometerte en los planes de tu padre porque así lo desafías, demuestras que eres tu propia persona, ¿no? Pero usas las mismas tácticas que él. ¡Digna Goodwin eres! ¡Haha!-.

Luna grita chillantemente, mientras cae de rodillas.

N/A: Capitulo algo fuerte, ¿no? Además que hay nuevo opening. La canción es el cover del opening 2 de Fate/Apocrypha.

Lo de Luna ya planeaba revelarlo, espero que eso haya sorprendido a más de uno.

También se revelo el tercer secuas de Goodwin, que parece saber mucho más sobre él de lo que aparenta. Hay muchas cosas que aun faltan por descubrir.

Meter a Fury era algo que ya pensaba hacer cuando planeaba hacer esta historia, fue un persona demasiado desperdiciado en el canon, literal, solo apareció para morir. Aquí le daré un papel más importante como uno de los Bakugan enemigos.

La conversación de Camilo y Leonidas puede parecer oseosa, pero no la olviden, ya que tiene detalles importantes.

Tenzalucard123: Todos concuerdan con eso al parecer.

El Redentor 777: John estuvo prisionero por muchos años y perdió a su familia y su mundo, es normal que siga traumado. Me gusto esa frase que dijiste, y es muy acertada con Fabia.

chaosspartan: Que bueno que te entretuvo el capitulo y te haya parecido bien como escribí la escena de robo, que fue lo que más me complico.

Sin nada más que decir me despido. Visiten y comenten el resto de mis historias por favor. CHAO.