En pocos días, como se había prometido, Hanabi y Hiashi habían regresado de su peregrinación a la madre patria Hyuga. Como se sospechaba, Hanabi parecía divertirse más de lo que esperaba. Pero no hubo tanto descanso poco después, como esa mañana, Naruto, Sakura y Hinata habían sido llamados a la oficina del Hokage. El trío caminó juntos por la ciudad, mientras las damas hablaban entre ellas sobre la información que podría tener. ¿Pero Naruto? Él seguía alegremente detrás de ellas, con las manos en los bolsillos, mirando con una pequeña sonrisa.
Sakura tomó nota de este comportamiento por encima de su hombro. Levantando una ceja, ella le miró con escrutinio.
"Hmm... Naruto... estás muy tranquilo hoy." Ella señaló, para su inocente sorpresa. Normalmente estaba listo para rebotar en las paredes, especialmente cuando se acercaba a su antiguo sensei. "¿Te despertaste en el lado equivocado de la cama esta mañana, o algo así?" sus manos encontraron sus caderas.
Pensó en ello... bueno, no, definitivamente no. Se había despertado con Hinata esa mañana, escabulléndose temprano antes de que su familia regresara. Dormía muy bien las últimas noches... estar a su lado toda la noche le daba serenidad y le daba energía al mismo tiempo. Se sentía en paz, y tal vez su lenguaje corporal lo demostraba.
"N-no del todo". Admitió, encogiéndose de hombros. "Supongo que sólo estoy disfrutando del día, eso es todo. Las cosas se han estado calentando un poco últimamente."
Hinata se encontró preocupada... ¿era cierto, Naruto estaba actuando de forma diferente? Se giró para inspeccionar por sí misma, pero cuando cerraron los ojos, y la incomodidad se apoderó de él. Sonrió, frotando la parte posterior de su cabeza y desviando su mirada con un ligero rubor.
"¿Qué pasa con el tercer grado de todos modos, Sakura? ¿No deberíamos ir deprisa a ver a Kakashi sensei?" se rio, pero actuó un poco a la defensiva. Sakura mantuvo una pequeña sonrisa, mientras se daba la vuelta. Le pareció que Naruto finalmente pudo encontrar algo de tranquilidad en su vida. Finalmente... los problemas parecían seguirlo como una sombra. Sakura sonrió para sí misma.
Habían llegado a la oficina del sexto hokage, donde estaba sentado en su escritorio tan fresco como siempre.
"Me alegro de verlos a todos." El Lord Hokage habló, apoyando la cabeza en sus nudillos. "Por favor, cierren la puerta."
Cada uno de ellos se endureció un poco en esto. No fue un encuentro casual, no. Fue algo más confidencial. Sakura agarró la manija de la puerta, tirando de ella antes de que cada uno se acercara un poco más.
"Hinata, me alegra saber que te sientes mejor. ¿Has estado experimentando algún otro síntoma extraño?" preguntó. Ella sacudió la cabeza lentamente a su pregunta, con un pequeño ruido disidente.
"No, en absoluto. Mis recuerdos han estado bien. Aunque mis recuerdos de haber perdido la memoria son ahora borrosos..." Admitió, torciendo un pie debajo de ella un poco torpemente.
"Eso definitivamente no fue un accidente..." Sakura especuló. "Quienquiera que sea está intentando proteger su identidad, y lo está haciendo bastante bien. Desearía que tuviéramos más para seguir adelante, para que pudiéramos rastrear a esta escoria."
"No te preocupes, Sakura. He tenido a un agente especial investigando en la tierra de las olas, y creo que finalmente tenemos una pista prometedora."
Naruto, Hinata y Sakura toman cada uno una inhalación audible a las palabras de Kakashi. Naruto da medio paso más cerca de Hinata, de una manera de apoyo, o quizás de una manera de protección. Estaba listo para golpear a quien se atreviera a meterse con ella.
"Bueno, ¿quién era el bastardo? Se metió con la Shinobi equivocada". Gruñó, mientras sentía que su corazón bombeaba con un poco más de energía.
"Yo... supongo que sería mejor que viniera de la fuente." Dijo Kakashi, volviendo su atención hacia la ventana. De repente, en un destello que se sintió como el viento, una figura encapuchada se paró ante ellos...
"¿S-Sasuke?" Sakura se levantó primero, un remolino de emoción envolviendo su cuerpo. Una sonrisa satisfecha y decidida de lado adornó el lado derecho del rostro bigotudo de Naruto. Esta fue una de las primeras veces que regresó, desde que se fue hace unos años.
"Se llama Kansuru." Sasuke no esperó para empezar a explicar todos los detalles, su mirada fría y calculada como siempre. "Es un nómada, pero he revelado que su laboratorio está situado en la tierra de las olas."
"¿Laboratorio? ¿Qué clase de laboratorio?" Naruto preguntó, con sus ojos parpadeando y sus manos haciendo bolas.
"Es un excientífico del pueblo escondido en la niebla - parece que su particular juego de guerra fue considerado demasiado malicioso e inestable, así como potencialmente alterador del mundo. Aunque siguió siendo persistente, sus capacidades fueron innecesarias después de la guerra".
"¿Alterar el mundo?" Hinata resonó con inseguridad, llevando sus manos a su pecho tímidamente. Sasuke asintió con la cabeza en silencio; tampoco estaba muy seguro de cómo explicarlo. Todo lo que sabía era que era peligroso.
"Amenazante para nuestra existencia tal como la conocemos".
"Entonces está decidido." Kakashi se acercó, de pie desde su asiento. "No tengo elección, necesito a mis mejores reclutas para el trabajo. ¿Cuándo pueden irse los cuatro?"
Sakura internamente anhelaba la oportunidad de estar cerca de Sasuke. Se sentiría como en los viejos tiempos. Incluso Naruto se emocionó por ello... pero de nuevo, había un grito de duda en el fondo de su mente.
"Acepto la misión, pero... con una condición..." su vista cayó al suelo, mientras se preparaba para lo que iba a decir.
"Nómbralo, Naruto." El hokage miró con curiosidad, al igual que los otros. Naruto se volvió hacia Hinata.
"Hinata... tienes que quedarte fuera de esto, y quedarte aquí en la aldea donde es seguro." Miró profundamente a sus ojos de lavanda, pensando que el malentendido flotaba en ellos. Después de todo lo que les había pasado, no podía soportar la idea de perderla de nuevo. ¿Quién sabía lo que este supuesto científico quería de ella?
"Naruto, eso es irresponsable..." Sakura dijo, su temperamento saliendo ligeramente. "Nos vendría muy bien el Byakugan de Hinata, y ella es la única entre nosotros que ha entrado en contacto con él directamente, aunque le cueste recordarlo."
"Es más fácil para mí protegerte si... -" se alejó, ya que Hinata había roto su mirada, una mirada de descontento en su rostro cuando se volvió hacia Kakashi en su lugar. Quizás era más fácil para ella decir lo que tenía que decirle a él, que a Naruto.
"Lord Hokage..." comenzó, "Entiendo la preocupación de todos por mí desde mi regreso de la luna, y mis problemas de memoria..." tenía incluso a su padre en mente, y a sus camaradas. "...pero sólo porque he enfrentado algunas duras adversidades últimamente no significa que sea menos kunoichi de la hoja escondida. He jurado mi lealtad para proteger esta aldea y la gente que la habita, y nunca me retracto de mi palabra. Por favor, permítame ir a esta misión". Se inclinó respetuosa y honorablemente. Naruto miró y escuchó, incapaz de hablar cuando las palabras se sintieron atrapadas en su garganta. Kakashi guardó silencio momentáneamente, quizás en deliberación, antes de asentir con la cabeza.
"Permiso concedido". Dijo, antes de mirar a Naruto. "Y petición denegada".
"Muchas gracias". Su voz delicada habló con delicadeza, antes de que girara sobre un tacón y saliera de la habitación mientras todos la veían irse. La Sakura envió a Naruto una mirada que podría haber amenazado su vida... y Naruto supo en ese momento que debía haber hablado mal... incluso si tenía una intención pura.
"Naruto..." Sasuke pronunció su nombre para llamar su atención, aunque no había entendido exactamente el alcance de la naturaleza defensiva de sus camaradas hacia Hinata. "Kansuru es un maestro en el combate emocional. Ser capaz de coaccionar a la gente para que deje que sus emociones más profundas obtengan lo mejor de ellos no es sólo su fuerte, sino que es su estrategia. Por eso mi instinto me dice que su objetivo no es Hinata en absoluto, sino tú."
"¿Yo?" Naruto hizo eco, su voz ronca por el dolor que aún sentía por el intercambio.
"Sí. Así que no le des una mano antes de que empecemos. ¿Está claro?"
Dudó y luego asintió. "Ya lo tengo".
"La misión comienza tan pronto como te hayas preparado y montado, es decir, lo antes posible. Si este Kansuru es tan peligroso como Sasuke describe, necesita que me neutralice inmediatamente."
Naruto dio un paso hacia la puerta. Era obvio que tenía la intención de ir tras Hinata, pero Sakura le agarró del brazo.
"Espera." Ella instruyó, mientras él la miraba inseguro. "Iré tras ella". Se giró para dar una última mirada de despedida a Sasuke que miró fijamente de forma bastante enigmática, antes de desaparecer por la puerta.