Una disculpa por subirlo tarde, estuve enferma estos últimos tres días. Todos en el colegio andamos con una virosis y bueno, ha sido difícil no contagiarme. El capítulo estaba listo pero queria volver a leerlo cuando tuviera mejor animo y quería estar segura de haber reparado una contradicción narrativa. Por otro lado, este capítulo no es más largo que el anterior, pero está en el rango de las 10 paginas en word que suelo publicar.

ariadne cullen: Gracias por leer. Déjame una pregunta al menos, jejeje. Es en la interacción con ustedes que es más fácil poder descubrir si hay vacios en la trama. Espero que disfrutes este capítulo y te aseguro que Molly no tiene nada que ver. Sí fue mucha suerte.

Criztal Moon: Bienbenida a la sección de reviews, es maravilloso tenerte por aquí. Me alegra saber que has estado disfrutando la historia y que tienes tantas ganas como yo de empujarlos. Leí tu review como 20 veces para darme animos y sentirme confiada en la trama que estoy desarrollando, así que, te lo agradezco.

Capítulo 16

Una vez zanjada la conversación alrededor de lo que pasó después de la sesión de legeremancia, llegó el momento de armar el hilo de recuerdos para los padres de Hermione.

-Cuando este asunto de las divisiones se haya resuelto será mucho más fácil para usted extraer sus recuerdos sin ayuda. Mientras tanto, necesitará hacerlo con el soporte de mi magia. Supongo que habrá notado algo al usar mi varita.

-De hecho sí, profesor y tengo muchas preguntas

-No creo que pueda imaginar completamente, toda la fuerza de voluntad que le ha requerido no bombardearme con ellas- la cortó él, antes de que ella se dejara llevar por su curiosidad.- Ya habrá tiempo para eso- gruñó- Con la semana que estuvo inconsciente estamos contra el tiempo o ¿quiere perder más clases?- ella negó con la cabeza.

-No, señor, pero..

-Eso creí- Severus la vio morderse el labio de abajo- Está bien, Granger. Una pregunta- ella sonrió

-No he podido formular una pregunta como tal. Lo que pasa es que no entiendo muy bien cómo interactúa su magia con las divisiones, sé que no tienen acceso directo, pero cuando la felina me atacó, ella le dijo que fue gracias a su varita que pudo permanecer en la vigilia, señor- mantuvo su cara sin expresión a pesar de estar impresionado. Su hipótesis de que ellas no podían aprovecharse de su magia no era correcta, había olvidado por completo esa interacción con la felina.

-A decir verdad, tampoco lo entiendo y no he tenido tiempo para pensar en ello- dejó salir un suspiro de cansancio- puedo pensar que lo más probable es que no puedan tomarla directamente y que por simple supervivencia su cuerpo usa mi magia en lugar de la suya, lo que le permite recuperar su energía vital. Al final, si el anfitrión no sobrevive, no hay mucho que puedan hacer los huéspedes.- ella asintió- Sin embargo, indirectamente reciben un beneficio y es que si usted se fortalece, no importa cómo, ellas pueden valerse de esa fuerza para tomar la vigilia.

-Como no está seguro, ¿puedo tener otra pregunta, profesor?- tentó ella

-Buen intento.- dijo mientras negaba con la cabeza y la vio cruzar los brazos sobre su pecho- Pero puede ayudarme a resolver cómo lograr cumplir todas las condiciones para lo que tenemos que hacer- ella asintió- Vamos a usar su varita, necesito poder monitorear de alguna manera su respiración sin tener que mirar porque estaremos en una meditación conjunta, usted debe estar sentada o acostada en caso de que pierda el conocimiento, debo sujetar su mano dominante con la mía para ceder mi magia; además, debo poder asegurar su bienestar en caso de un cambio en la vigilia y al mismo tiempo el mio y finalmente, debo poder recolectar lágrimas de añoranza para la poción rastreadora.

-Entiendo- Severus la vio concentrarse y esperaba que ella comprendiera y pudiera proponer exactamente lo que él ya había resuelto.- No creo que le guste esta solución, profesor- ella suspiró.- Creo que podemos estar sentados, pero no ambos de espaldas para que pueda asegurar nuestro bienestar, tampoco frente a frente para que sea más fácil tomar mi mano derecha con su mano derecha; creo que está bien que yo le de la espalda, confío en usted y sé que estoy a salvo, no tengo que protegerme de usted.- La joven había llegado, hasta el momento, a las mismas conclusiones que él.

-Estoy de acuerdo, continue, señorita- ella asintió.

-Co… Con respecto a la respiración y las lágrimas- tropezó al comenzar- Yoo- ella hizo una línea con su boca, cerró los ojos y tomó una gran respiración.- Yo creo que usted puede poner su espalda contra la pared, si asumo que es mejor sentarnos en el suelo.- la vio tragar- Us… usted debe abrir sus piernas para que yo pueda sentarme en medio y pueda poner mi espalda contra su pecho- ella bajó la mirada y empezó a jugar con su manos- y puede poner su mano en mi abdomen, de esa manera podrá verificar mi respiración y si empiezo a sollozar, también podrá darse cuenta de si mi cuerpo se tensiona por alguna razón y también podrá recolectar las lágrimas.

-Muy bien, eso haremos.- Confirmó él. La vio levantar el rostro enrojecido y la mirada dilatada- Estaba esperando poder volver a verla y hablar con usted- dijo él rápidamente al reconocer a la división.

-¿Conmigo?- preguntó G2. Él asintió- ¿Sobre qué?- La vio corregir su postura y mirarlo fijamente

-Si la otra división representa los deseos, lo impulsivo, lo irracional, la emoción en su máxima expresión ¿qué eres tú exactamente?

-Yo no lo pondría en esos términos, yo también soy emoción, solo que soy otra polaridad, una versión razonada de las emociones si prefiere, permeada de expectativas y de creencias estructurante que pueden ser irracionales.

-Por eso suele aparecer la otra primero- ella asintió- y, ayer ¿por qué?

-¿Por qué llegué yo primero?- él asintió- Cuando no pudimos detener el recuerdo y empezamos a revivir la tortura fui yo quien logró mantener la noción de que no era real y que estabamos a salvo.

-Entiendo y ¿por qué me pidió que me alejara?- ella sonrió y la vio sonrojarse.

-Me hubiera quebrado antes. De todas maneras no pude evitar que ocurriera eventualmente. Fue el desconsuelo lo que la trajo a la vigilia. No es algo que se pueda razonar. ¿Eso es todo?

-¿Es la biblioteca producto de la división?- ella negó con la cabeza- ¿Cómo la creó?

-Usted

-¿Yo?

-Durante el verano

-Yo no recuerdo que…

-También está borroso para mí- interrumpió ella rápidamente- no tengo acceso al recuerdo sólo la noción. Ella no tiene acceso ni siquiera la noción.

- ¿Y ahora que puede espiar la vigilia?

-La represión se encargará, hay defensas extrañas alrededor de este verano en el castillo.

-¿Extraña cómo?

-Como si fuera un mezcla bio-mágica, No se siente como algo estrictamente protector de la psiquis y puedo percibir un residuo mágico que no se corresponde a nuestra magia y tampoco a la suya, profesor.- él asintió. Tendrá que pensar en ello más tarde.

-Esto que está oculto ¿Está relacionado con el nuevo objetivo de la poción?- ella sonrió ante su pregunta

- Qué alguien le de 10 puntos a Slytherin, profesor - él dejó salir una risa ahogada- Creo que sí tiene que ver, es como una sensación, pero no una certeza. ¿Recuerda que ella dijo que había logrado resolverlo?- él le asintió- Todas lo creímos, ahora ella tiene otra hipótesis.

-¿Qué es..?- ella negó con la cabeza

-No me corresponde, profesor, es parte de la hipótesis, hay líneas que no podemos cruzar, por su bienestar. Solo puedo confirmarle que usted es esencial.

-Entiendo y hoy ¿qué hace aquí?- preguntó con curiosidad. G2 le sonrió.

-Ella no sabía cómo iba a reaccionar a su idea, había mucho pasando en su cabeza, así que me adelanté por contingencia.- él asintió

- ¿Algo más que pueda ser útil?- preguntó sabiendo que esta división podría darle alguna pista.

-Tómese su tiempo para autoanalizarse, el hecho de que usted no recuerde cómo estuvo involucrado con la estructuración de la biblioteca debe darle una pista.- La joven recostó la cabeza en el espaldar de la silla y cerró los ojos- Esto fue demasiado, profesor- dijo jadeando. Severus supo que su alumna había vuelto.

Severus no estuvo muy seguro de que la conversación había valido la pena viendo lo débil que había quedado la castaña. Se levantó y caminó hacía ella. Tocó la frente de la joven con su mano, estaba sudando frío. Hizo una mueca de preocupación, eso solo los retrasaría.

-Voy a cargarla a la cama- le advirtió antes de tomarla en sus brazos para que no se sobresaltara.

-¿Qué pasó?- preguntó aún sin aliento- No recuerdo que… - tuvo que detenerse y tomar grandes bocanadas de aire. Tenía la cabeza recostada en el lado izquierdo del pecho del pocionista y podía escuchar el ritmo tranquilo de su corazón

-Shhh, no importa, sólo respire, trate de igualar mi ritmo.- Ella asintió. Percibió que se había sentado en la cama con ella en brazos- Voy a tomar su mano izquierda- le anticipó antes de tocarla. Ella sintió la piel tibia y el cosquilleo de la magia de su maestro. Su cuerpo dejó de sentirse pesado y su respiración se coordinó con la del pocionista.

Severus sabía podía llevarla a la cama con un hechizo, no tenía que estrecharla contra su cuerpo ni esperar a que su respiración se regulara para dejarla, no tenía que tomar las respiraciones tan profundas para que ella lo imitara, no tenía que estar disfrutando del aroma que despedía el cabello de la leona, pero le estaba siendo extremadamente difícil evitar rendirse ante cada oportunidad de contacto corporal que se le presentaba.

Con lo ocurrido la noche anterior se había dado cuenta del efecto tranquilizador que tenía en él el simple hecho de tocarla, aunque su cuerpo lo había descubierto mucho antes de que él se atreviera a aceptarlo.

-¿Me dirá qué pasó, profesor?- dijo ella cuando estuvo fortalecida y él soltó su mano

-Hay una razón protectora por la que no lo recuerda, señorita, eso dijo la división. Considero prudente tomar su consejo y por eso, no diré nada.- Ella no estaba satisfecha con la respuesta, pero tenía sentido y no iba a discutir con él al respecto. Por otro lado, ninguno de los dos quería alejarse, no era una posición precisamente cómoda, pero tenía sus ventajas- ¿Ya se siente mejor?- ella respiró profundo y abrió los ojos, escucharlo hablar era una cosa, pero sentirlo hablar…

-Sí, gracias- ella se incorporó empujándose del pecho de él.- ¿Por qué la mano izquierda?- preguntó una vez estuvo de pie frente a él. Severus levantó una ceja como un reflejo automático frente al despliegue de curiosidad. Sí, en definitiva, ella ya estaba bien.

-Los canales energéticos de recepción se encuentran del lado izquierdo del cuerpo- dijo poniéndose de pie.- ¿Se siente bien para realizar el hilo?- indagó él sintiendo la presión del tiempo. Ella asintió.

-Entonces ¿por qué debe tomar mi mano derecha y no la izquierda en lo que vamos a hacer?

-Es simple, la varita.- Los ojos de la leona se abrieron y destellaron en comprensión

-Claro- ella lo vio sacar su varita- es un elemento conductor, técnicamente no va a estar compartiendo su magia a mí directamente sino que la varita lo usara como fuente mágica mientras yo dirijo el hechizo- Él sonrió y asintió con orgullo. Ella se sonrojó. Él le estaba sonriendo.

-Eso es lo que pasa cuando usa ese magnífico cerebro suyo para interrelacionar la información, en lugar de almacenar y repetir todo lo que lee, Granger.- había querido sonar menos irónico y burlón, pero fue inevitable que su personalidad venenosa escapara.

-Gracias, profesor- respondió pudiendo leer entre líneas el cumplido. No era un secreto para nadie que el jefe de la casa de la serpiente no sabía darlos y mucho menos recibirlos, sin embargo, parecía que se había esforzado por darle uno.

****
Harry le había pedido a Ron que se encontraran en el espacio compartido que tenían como aurores en niño que vivió sonreía en sus adentros satisfecho al ver a su amigo zanahorio tomar todo el contenido del vaso donde había puesto la dosis correspondiente de veritaserum.

-¿Qué sucede, Harry?- preguntó el pelirrojo al notar que su amigo lo miraba fijamente

-¿Por qué atacaste a Hermione?- Harry no se molestó en tantear el terreno. La expresión del Weasley se ensombreció y su brillante mirada parecía ausente.- ¿Ron?- preguntó después de varios minutos de silencio.

-¿si?- preguntó después de escuchar su nombre y Harry notó que su expresión volvió a ser la misma de siempre. Como si no le hubiera preguntado nada.

-¿Qué pasó con Hermione?-Cambió la pregunta y notó la expresión triste de su amigo

-No lo sé, Harry- El joven suspiró- Ella se fue de la casa un día, no sé qué le dijo a mamá, pero ninguna de las dos me habla, mamá no quiere verme, nadie me dice nada- no era posible que estuviera mintiendo con el veritaserum en el sistema y podía percibir el tristeza en su tono de voz- ¿por qué preguntas? ¿Sabes algo de ella? Si es así Harry, quiero verla, merezco una explicación, eramos amigos, si algo estaba mal pudo habérmelo dicho- Harry pudo reconocer la indignación y la confusión de su amigo en cada palabra- sé que la hacía enojar y la molestaba con mis celos e inseguridades, pero si ya no me quería podía ser honesta conmigo o dejar un carta- la cara de su amigo se había puesto roja de lo rápido que hablaba.

-No se nada- mintió- por eso preguntaba, estoy preocupado.

Algo estaba mal. No era posible que Ron hubiera vencido la poción y le creía a Hermione. Ron estaba mintiendo pero ¿cómo lo había logrado?

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Flashback

-Señorita Granger ¿qué hace aquí?- Minerva McGonagall se había puesto de pie al verla entrar al despacho de la dirección. Hermione se encogió de hombros- No me mal entienda, me alegra verla, solo es inesperado.

-He venido a ayudar en la reparación del castillo. Sabe que planeo regresar a terminar mi último año. Y, también quisiera pedirle un favor, profesora.

-¿De qué se trata?- La nueva directora se sentó y señaló la silla frente a ella como invitación para que la joven se sentara frente a ella.

-Gracias- dijo con una sonrisa- Quisiera pedirle que me permita quedarme en el castillo

-Pensé que se trataba de otra cosa, niña. Claro que puedes quedarte. Las salas comunes no han sufrido daños y los lugares más críticos son el comedor, la torre de astronomía, los alrededores y la biblioteca.

-¿La biblioteca?- preguntó preocupada

-Tranquila. Sé que usé la palabra crítico, pero es porque es mucho trabajo especializado y sin madame Pince para encargarse…- Hermione había olvidado que la bibliotecaria no había logrado sobrevivir.

-Yo puedo ayudar con la biblioteca, directora. Estoy familiarizada con el sistema de madame Pince, ella me dejaba ayudarla a veces.

-Magnífico. Seve... El profesor Snape- corrigió rápidamente- estará contigo.- Hermione abrió los ojos en señal de sorpresa- Aunque te advierto que está de peor humor que de costumbre. El ministerio lo ha dejado bajo mi custodia y le han prohibido hacer uso de su magia.

-Entiendo. ¿Cómo sigue él?

-Mucho mejor. Sus cuerdas vocales se han recuperado perfectamente y las lágrimas de fénix cerraron la herida sin cicatriz. A decir verdad si tuviera algún problema tampoco lo sabría, no es muy comunicativo. Ya sabe cómo es él, Señorita.- Hermione asintió y sonrió.

-¿Dónde puedo quedarme?

-El dormitorio y la cama usual de su casa están disponibles- Hermione asintió

-¿Puedo usar el baño de prefectos?- Minerva sonrió

-La contraseña no ha cambiado ¿la recuerda?

-Sí, gracias directora

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Dejó su equipaje sobre la cama de la habitación que solía compartir y tomó su kit de aseo y ropa limpia. El baño de prefectos la dejó entrar sin problemas. Llenó la gran bañera con agua tibia y esencia de rosas. Dejó todo sobre una repisa y se desvistió. Había marcas moradas alrededor de sus muñecas, tenía rasguños en sus hombros y también había morados entre sus muslos. Solo hasta ese momento se percató de lo mucho que le dolía el cuerpo.

Caminó hacia la tina con la bata para cercarse entre las manos. Dejó la bata en el suelo lo suficientemente cerca para alcanzarla, pero no para que se mojara en caso de que salpicara agua hacia afuera. El agua tibia recibió su cuerpo como si la estuviera abrazando. Se sentó en un escalón de la piscina, tenía el cabello recogido para no mojarlo, abrazó las rodillas contra su pecho, escondió la cara entre sus manos y rompió en llanto.

Estaba tan ausente que no notó que la puerta le había dado permiso a alguien más para ingresar, no notó los pasos acercándose, tampoco notó la figura oculta que estuvo observándola desde la pared de la entrada y mucho menos cuando un minuto después se marchó de mal humor.

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Severus se encontraba yendo camino a la biblioteca después de finalizar su almuerzo. Sus días ahí le habían servido para categorizar los libros que habían quedado fuera de su lugar y tenía la clara intención de descifrar el sistema de códigos y ubicación de la organizada madame Pince. El sonido producto de la vibración de las tuberías del baño de prefectos detuvo su camino en seco y retomó sus pasos en dirección al nuevo destino tras su descubrimiento. Había un estudiante en el colegio.
Fin del flashback

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La sensación de la pared fría en su espalda contrastaba estrepitosamente con el calor sobre su pecho al estar en contacto con la espalda de la joven Gryffindor. Ella descansaba su cabeza contra el lado derecho de su rostro, acunado por su cuello. Entre los dos dos sostenían su varita contra su sien. El olor a canela y manzana verde contribuyeron a acelerar su corazón. Él pudo percibir las revoluciones del ritmo cardiaco al tener su mano izquierda sobre el abdomen de su alumna.

-Entiendo que esté nerviosa, Granger.- habló sin levantar el tono de voz.- Trate de regular su ritmo cardiaco, respire conmigo.- Ella siguió su indicación, sentía su cara caliente en vergüenza. Tenía que controlarse o sus sentimientos se harían evidentes, él se daría cuenta y no la ayudaría, la alejaría, se burlaría y sin saber muy bien el objetivo de la poción, su mente le soltó como un bomba la idea de que seguramente moriría si él la rechazaba.

Se soltó del agarré del pocionista y apoyó sus manos en la piernas de él para empujar su cuerpo hacia adelante- Voy a morir.- dijo con voz temblorosa y empezó a llorar. Cubrió su rostro con su manos.- No sabemos cuál es el nuevo objetivo de la poción- las lágrimas se deslizaron por sus mejillas y su cara se había puesto roja- y si hacemos algo mal, voy a morir- los sollozos solo hacían imposible ignorar la angustia que trataba de ocultar.

-Señorita Granger- Severus dejó caer el peso de sus manos sobre los hombros de ella. Su voz grave transmitía tranquilidad. No podía estar seguro de que no fuera una de las divisiones- míreme - ella giró su torso en la dirección contraria a las manecillas del reloj y se limpió el rostro. El cuerpo del pocionista se relajó al ver la mirada habitual de la joven, seguramente su cuerpo no podría resistir otro cambio y si ocurría tendrían que esperar hasta el día siguiente.- Escúcheme, no me gusta hacer promesas ni asegurar cosas que no sé si puedo cumplir, pero haré todo lo posible para que no muera, trabajaremos en esto hasta que lo solucionemos o que ya no haya tiempo.- Ella le dedicó una pequeña sonrisa, considerando quién era él, ese era el mejor intento de consuelo que iba a poder poner sobre la mesa. En un rápido movimiento se inclinó hacia el cuerpo de él girando completamente para ponerse de rodillas y lo abrazó por sobre los hombros.

-Gracias, señor.- Ella trató de tranquilizarse con sus palabras, sin embargo había tanto que podía salir mal. Había pensado que aceptar sus sentimientos por él era el nuevo objetivo de la poció lo era. Ahora, creía que tal vez era poder dar el primer paso y decirle lo que sentía, hacer el intento, tomar el riesgo, ser valiente, pero también estaba la posibilidad de que fuera lograr conquistarlo, hacer que la viera como algo más que su alumna y estaba tan lejos de lo primero como de lo segundo.- No sabría qué hacer sin su apoyo.- dijo en susurro. Las rodillas le estaban doliendo por la posición ¿cuánto tiempo lo había estado abrazando?

Su cuerpo se relajó después de superar la sorpresa inicial por el rápido movimiento de su alumna y ahora, la estaba rodeando con sus brazos de tal manera que no estaba ejerciendo presión para ajustarla contra sí mismo. En su mente, era una forma sútil de corresponder su abrazo y al mismo tiempo de sostener la ridícula idea de que estaba manteniendo la distancia.

Como ya se había vuelto costumbre, la dejó tranquilizarse y cuando la sintió removerse supo que ella estaba lista. Ella empujó su cuerpo hacía atrás al apoyar ambas manos en la pared detrás del pocionista. No fue un movimiento rápido y se detuvo cuando estuvo frente a frente con él. Para ambos había algo que se sentía familiar en el contacto visual que estaban compartiendo ¿la cercanía de sus rostros? ¿Qué era? Ella se relamió los labios y notó que él miró su boca cuando lo hizo. Hubo una ligera inclinación de ambos hacia adelante como si una fuerza magnética los invitara a aproximarse.

Severus carraspeó. La tomó de cada lado y aumentó la distancia- ¿Está bien, Granger? parece que va a caer sobre mí- el pocionista logró ocultar su nerviosismo e incomodidad articulando cada palabra con su monótona voz. ¿Acaso se le había desconectado el cerebro? ¡Él se había inclinado para besar a su alumna! ¿Acaso ella lo había notado y por eso se había quedado pasmada? No. Si ese fuera el caso, la sola idea de que él fuera a besarla le hubiera parecido repulsivo y se le hubiera notado en la cara.

-Perdone, profesor- Hermione agachó la cabeza para ocultar su sonrojo- creo que me mareé un poco- volvió a acomodarse sentada entre las piernas de él dándole la espalda- ya estoy lista, no habrá más dudas- dijo más para sí misma que para él. Dejó salir una fuerte exhalación y recostó su espalda contra su pecho. ¿Acaso él notó que ella había querido besarlo? No. Si ese fuera el caso, no lo dejaría pesar tan tranquilamente, le hubiera dicho que si se había golpeado la cabeza o por lo menos hubiera visto el disgusto en su rostro.

-Muy bien- Severus no estaba completamente convencido, pero no podían seguir dándose el lujo de retrasar más la construcción del hilo.

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Lograron entrar en la meditación conjunta pasados 20 minutos aproximadamente. Ambos asumieron que el retraso se debía a su propia agitación emocional. Embriagados por el olor y el calor que proporcionaba el cuerpo del otro y auto-recriminándose la imprudencia que estuvieron a punto de cometer. Finalmente, lograron regularse con la idea de que al menos el otro no se había dado cuenta.

- "Muy bien, Granger"- confirmó él cuando la conexión se estableció- "el hilo no tiene que llevar una secuencia temporal entonces no se preocupe por el orden en el que los escoja. Los pondremos en la mente de sus padres y su cerebro se encargará de darle un sentido cronológico."

- "No estoy muy segura de los recuerdos que quiero en el hilo ¿todo lo que piense irá automáticamente?"- Le preguntó nerviosa

- "No, tiene que pescar el recuerdo con la magia de la varita para que lo capture. Escoja el primero y yo la guiaré"

Severus estuvo guiando la construcción del hilo de memoria que Hermione llevaba a cabo. Por medio de la meditación conjunta él podía tranquilizarla y ver lo que ella estaba eligiendo. Él le aclaró que todo sería contado desde su perspectiva y que era desde ahí que sus padres podrían recuperar las memorias. Le advirtió que si quería que parecieran propias tendría que modificarlas. Ella dijo que no tendría sentido modificarlas ya que sabrían que se las había quitado en primer lugar.

El primer recuerdo que seleccionó para el hilo fue el de ella lanzando el obliviate para protegerlos durante la guerra. Lo envolvió con todo el dolor del momento, ellos también lo sentirían. También incluyó el relato de sus padres sobre la revelación del embarazo y otros momentos de cuando era más grande y empezaron a bromear con el hecho de que ella había sido producto de uno de sus celebraciones de aniversario. Añadió algunos recuerdos compartidos para que ellos supieran que habían sido excelentes padres, su primer estallido de magia y cuándo supieron que ella era una bruja.

Al finalizar la pesca del último recuerdo, Severus logró capturar las lágrimas de añoranza. Había sido un momento conmovedor. Parecía que la habían llevado a una de sus celebraciones de aniversario cuando tenía 14 años. Estaban en un restaurante semi elegante con música en vivo. Severus contempló desde el punto de vista de Hermione el amor entre sus padres. El señor era por lo menos 15 años mayor que la señora y la miraba embelesado mientras le cantaba la canción muggle que sonaba de fondo. Sintió el orgullo de ella en ese momento y luego el sentimiento de añoranza lo invadió. Ella lo ayudó a destapar el vial con la mano izquierda mientras él lo sostenía y guió su mano hasta el lagrimal.

Pusieron el nudo final al hilo antes de romper la conexión de la meditación conjunta. Tan pronto soltó la varita Severus sintió el cuerpo de la joven descargar todo su escaso peso sobre él, ambas manos descansaban sobre su abdomen y su cabeza sobre su pecho. El particular ritmo respiratorio le hizo saber que ella se había desmayado.

Dejó el vial con las lágrimas a un costado y sacó otro de su bolsillo para guardar el hilo. Envió los dos viales al soporte que estaba en su despacho con un movimiento de varita. Habían estado siete horas trabajando en el hilo sin descanso, aunque él le había ofrecido varias veces parar, ella no quiso. Tal vez fue la mejor decisión, seguramente ella podía prever que perdería el conocimiento si lo hacía.

Tenía entumecido el trasero y las piernas. Dudaba de poder llevarse a sí mismo a cualquier parte y además también tenía que encargarse de ella. No tuvo más remedio que levitarla a la cama. Estiró su cuerpo recostándose en el piso por un par de minutos antes de incorporarse.

****
Hermione despertó en algún momento de la madrugada más cercano a la media noche que del amanecer con su estómago reclamando algo de comida. No recordaba haberse ido a la cama, pero ahí estaba. Se sentó y pudo ver en la pequeña sala a su profesor sentado en la silla de un puesto muy cerca de la chimenea, sus ojos estaban cerrados y su entrecejo relajado, señal de que estaba dormido. Ella sonrió. También pudo reconocer sobre la mesa una bandeja cubierta.

Salió de la cama de un brinco y el frío de la mazmorra la abrazó, él había puesto un hechizo térmico para mantenerla cómoda. Caminó abrazándose a sí misma y levantó la tapa que cubría el contenido de la bandeja. Devoró el par de sandwiches de queso y chocolate caliente que él le había dejado. Revisó sus últimos recuerdos y se sintió aliviada de haber podido terminar el hilo de recuerdos. Miró nuevamente a su profesor al ponerse de pie. Estando resuelta la necesidad alimenticia sintió el resentimiento de su cuerpo al haber estado en una misma posición por tanto tiempo. "No es justo que él no pueda descansar apropiadamente" pensó y sin darle tanta vuelta, usó la varita del pocionista para levitarlo a la cama.

Decidió acostarlo en el lugar que ella había estado ocupando con la idea de que aún conservaba su calor corporal y él podría beneficiarse de ese hecho. Dejó salir un suspiro de alivio cuando logró terminar el hechizo sin que su maestro despertara. Se acercó al borde de la cama y lo observó por un momento, parecía tan tranquilo. Tomó con cuidado la cobija y la deslizó sobre su cuerpo para cubrirlo hasta el pecho.

- "Entra"- fue la voz de la división felina en cabeza. Hermione negó con la cabeza

- "Me quedaré en el sillón"- respondió

- "Si tú no entras a la cama, yo tomaré la vigilia"- Hermione tembló

- "¿Cómo voy a explicar la situación?"

- "Solo le dices que quería que descansaran apropiadamente"- Era la otra división esta vez

- "Bien"- No hubo mucha resistencia de su parte, no es como si pudiera negarse que estar a su lado era lo que quería.

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Severus sintió su cuerpo envuelto en una sensación cálida y al inhalar profundamente no solo fue invadido por el olor de la castaña sino que sintió un peso extra sobre el lado derecho de su pecho y lo que suponía era la sensación de una mano sobre el lado izquierdo.

-Despierte, Granger- dijo con firmeza. Su voz sonaba más profunda al ser el primer uso que le daba en el día. Notó que su brazo derecho rodeaba la cintura de la chica y lo retiró rápidamente. La combinación entre el movimiento y la voz del pocionista lograron sacar a la leona de su descanso.

-Lo siento, señor- se excusó sentándose de un brinco.- Yooo… mmm- empezó en un intento de explicarse- no me pareció justo que no pudiera descansar apropiadamente, pero estaba haciendo mucho frío y solo puso el hechizo térmico en este lado de la cama- habló tan rápido que hubiera si él no hubiera estado acostumbrado no hubiera podido entenderla.

-Fuera de mi vista, Granger- le gruñó pasándose la mano por toda la cara aun sin abrir los ojos. La joven saltó fuera de la cama y corrió en dirección al despacho. Sentía la cara caliente y el corazón agitado. No se permitió llorar y las voces de las divisiones le insistían en que la reacción de su maestro no había sido una mala y que, aunque no debía hacerse ilusiones, no podía perder la esperanza.

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En el siguiente capítulo tendremos una carta de Ginny. Preguntas preguntonas: ¿Cómo creen que va a reaccionar? ¿Les gusta este formato de comunicación por cartar? ¿Cómo creen que Ron logró vencer el veritaserum? ¿Qué piensan de las memorias perdidas de Severus alrededor del verano?

Nos vemos antes del 15. :D