Capítulo 22
Kate abrió los ojos y Matthew estaba en la camilla a su lado, él le sonrió y se levantó para ir hasta donde ella, llevaba un cabestrillo y tenía mejor aspecto que en la noche
—Que bueno que volviste, pensé que estabas en diabetilandia todavía— dijo él alcanzando una poción Salustio que estaba a su lado.
Madame Pomfrey entró y los revisó a ambos, luego examinó a Bill y se marchó, Fleur estaba con él y se notaba en sus ojeras que no había dormido mucho. Luego Matthew le contó que estaban citados en el Gran Comedor ya que se iba a realizar el funeral de Dumbledore en unas horas. Kate preguntó por Harry y su amigo le dijo que Potter había estado hacía unas horas con Ginny y su madre.
—Despertaste— dijo Remus entrando a la enfermería— ¿cómo te sientes?
Kate inventó que le dolía algo la cabeza pero la respuesta a esa pregunta no se la podía dar a Remus. Luego su padrino saludó a Matthew y le preguntó si tenía algún síntoma, Matt le dijo que no, solo sentía dolor cuando movía su brazo. Minutos después entró Veronique que llevaba puesto su uniforme de Beauxbaton y saludando a los que estaban ahí luego besó a su novio y este le contó lo que había sucedido.
Kate se levantó de la cama con ayuda de Remus y le pidió que la acompañara a desayunar, no era que tuviera hambre pero tomó la bandeja de comida que Madame Pomfrey le había llevado y se hicieron en una camilla lejos de los otros —Disculpa por como te hablé anoche, no quiero que pienses que fue el momento, ya te había dicho lo mismo pero ayer no lo dije de la mejor manera— dijo Kate colocando una mano sobre el hombro del licántropo.
Lupin sonrió —Disculpas aceptadas, aunque creo que necesitaba escucharlo de esa forma—.
—Inglaterra está en guerra ahora— dijo Kate pero Remus la interrumpió.
—Ya hablaremos de lo que vendrá, hoy es un día de duelo, Dumbledore ha muerto y debemos honrarlo— dijo él entregando una manzana a Kate.
Ella volvió a ver el recuerdo y casi no pudo comer nada de lo que tenía enfrente. Sabía cuál era el plan de Dumbledore pero también sabía que muchas vidas se perderían para que el plan se realizara, sólo ahí estaba el ejemplo de su propia muerte.
Tonks entró a la enfermería y luego de saludar a los Weasley y a Matthew con Veronique se acercó a Kate y Remus, le preguntó a ella como seguía y la abrazó fuertemente.
—Estoy bien, solo fue un bajón de azúcar y todas las emociones juntas— dijo Kate.
—Ni que lo digas— dijo Tonks y colocó una mano sobre el hombro de Remus.
Kate sonrió al ver como él ponía su mano sobre la de ella, luego miró a Tonks —¿Por qué no me lo dijiste? Te habría ayudado a que èl entrara en razón antes—.
—Pensé que lo ibas a apoyar al ser familia— dijo Tonks blanqueando los ojos.
—Justamente al ser familia habría ayudado más— replicó Kate, luego tomó la mano de ambos— Les deseo mucha felicidad, ambos la merecen y si la encuentran en el otro espero que sea por mucho tiempo.
Minutos después llegó Amelia y todos juntos bajaron a los terrenos del colegio para el funeral, Kate se acercó a Harry y lo abrazó, quería decirle muchas cosas pero sabía que su hermano estaba de duelo por la muerte de su mentor. Despues de la ceremonia Kate vio a Harry y Ginny cerca al Lago Negro, pero también vio a Rufus Scrimegour ir tras ellos; Kate miró a los miembros de la orden y vio como varios se ponian en alerta por la escena, fue Ojoloco Moody quien le devolvió la mirada y se fue detrás del Primer Ministro.
Amelia se despidió de su hija y quedaron de verse más tarde. Kate buscó a Matthew y lo encontró tomado de la mano con Veronique mirando hacia el castillo. Ella iba a acercarse pero lo pensó dos veces, su amigo estaba con ella y no quería molestarlo. Fue hasta la Sala de menesteres pero antes fue interceptada por una lechuza que le entregó un paquete, no tenía remitente pero Kate sabía quién lo enviaba; dentro había un espejo de bolsillo en una bolsa de terciopelo. Al abrirlo el espejo no dio su reflejo pero sí el de Severus Snape.
—¿Estás bien?— fue lo primero que él le preguntó.
—No tanto como tu— dijo Kate con un ligero temblor en las manos— Si vas a decirme algo dimelo pronto porque solo quiero estrellar este espejo contra el piso
—Kate no es lo que parece, todo esto tiene una razón— le dijo Severus.
—Si ya lo sé, así como Dumbledore jugaba al ajedrez contigo también lo hizo conmigo— replicó Kate tratando de mantener la calma— Sé lo del anillo y lo que pidió ¿Algo más qué quieres decir?
—Espera— pidió Snape aunque se veía algo desorientado— Quería contártelo pero prometí no hacerlo, no me quería separar de ti, jamás.
—Que mala suerte porque justo eso pasó, sigue con tu misión, sigue con lo que planearon con Dumbledore, no me importa que pase contigo o con cualquier otra cosa que te hayan encomendado, lo unico que si debes tener presente es que no dejaré que mi hermano muera, ni lo entregaré al matadero para que tu amo muera, si eso significa enfrentarme a cualquiera lo haré— dijo Kate y con todas sus fuerzas arrojó el espejo al suelo, este se hizo añicos. Luego arrojó el reloj que él le había dado y encantó un incendio, ambas piezas comenzaron a arder y Kate llorando, vio cómo quedaban en cenizas.
Alguien la abrazó por detrás y giró para ver a Matthew con su cabestrillo ahí en la sala de menesteres —¿Quieres que hablemos?— le preguntó y ambos amigos se sentaron en uno de los sillones que la sala había hecho aparecer cerca a una chimenea.
Kate le contó todo a Matthew, su historia con Snape y lo que había pasado meses atrás. No le contó lo que acababa de ver en el recuerdo de Dumbledore pero sí mencionó que aunque la muerte la habían acordado entre los dos, al final la misión era matar a Voldemort.
Matthew se acomodó el cabestrillo y suspiró agotado, su amiga había hablado por casi una hora y él lo había escuchado todo, solo había hecho un par de preguntas pero ninguna era para juzgarla.
—¿Qué vas hacer ahora? Sabes que seguirá buscándote y El que no debe ser nombrado va ir a por ti apenas el hechizo de amor deje de hacer efecto en unos meses— preguntó Matt.
—Él tomó su decisión, yo la mía, voy ayudar a Harry y si eso significa enfrentarlo lo haré— dijo Kate determinante.
Matthew tomó su mano con la sana y le sonrió a su amiga —Yo estaré contigo, sabes que te apoyaré, pero no me lo pongas tan difícil no contándolo todo por favor—.
Kate asintió y luego lo abrazó. Ambos salieron de la sala y Kate fue a buscar a Harry, lo encontró hablando con Ron y Hermione cerca del Lago Negro, le pidió a los dos amigos que le dieran un momento a solas con su hermano.
—¿Cómo seguiste? Lupin me dijo que estabas mucho mejor— dijo Harry mirándola.
—Estoy bien, todo lo que pasó ayer se juntó, además no ayuda el nivel de azúcar en la sangre— trató de bromear pero supo que estaba fuera de lugar.
Harry le sonrió tristemente y cuando ella le preguntó lo que haría ahora, él le contó que después de la boda de Bill y Fleur irían al Valle de Godric y luego a buscar los horrocruxes.
—Dumbledore habló conmigo en vacaciones y me dijo que buscarías los objetos— Kate tomó aire y continuó— Como le dijo a los demás, tu eres la mejor opción, debo distraerlo y la mejor opción es haciendo lo opuesto.
—No me digas más, por tu seguridad— le dijo Harry algo triste.
Kate sacó de su bolsillo el sobre que llevaba para Harry —Te lo iba entregar ayer, son unas fotos que encontré en un álbum— adentro iban unas unas fotos tipo polaroid en la que estaba Lily con ambos bebés en sus brazos.
Harry sonrió al ver las fotos y la colocó cerca a Kate —Si te pareces mucho a ella— dijo viendo las tres fotos, las dos primeras solo estaban ellos tres y en la última un sonriente James alargaba su brazo tratando de tomar la foto de los cuatro.
—Sí y tú también te pareces mucho a él— dijo Kate tomando la última foto colocándola cerca a Harry.
Kate abrazó a su hermano y le dijo lo mucho que lo quería —Nos veremos pronto Harry, sé que será así— dijo ella dándole un beso.
Más tarde ese día al llegar a casa Kate fue recibida por su familia, le extrañó ver a su padre cocinando ya que en los últimos años él siempre estaba en el despacho o en otro lugar, pero junto a Mina estaban haciendo limonada. Los siguientes días fueron así, los cuatro estuvieron juntos la mayor parte del tiempo y trataron de no salir mucho de casa por seguridad de todos.
Solo unos días antes del cumpleaños 17 de Kate, sus padres y ella se reunieron con Kingsley, Tonks y Remus, discutieron el plan para ese día. Gracias a Dumbledore, se había acordado que el lugar seguro para los Grant sería con los Scamander, incluso Theseus Scamander había creado el plan para mover a la familia junto a Kingsley.
—Yo conduciré con ustedes mientras Lupin y Tonks vigilan desde el cielo, luego nos reuniremos en un punto y allá la familia Scamander nos espera para entrar en sus terrenos. Solo nosotros sabemos el paradero final— dijo Kingsley seriamente— Lo haremos el 30 de julio ya que debemos trasladar a Harry también.
Kate asintió y todos estuvieron de acuerdo, el reloj marcó las 10 de la noche y antes de irse ella le pidió a Lupin hablar a solas.
—Estuviste muy callada en el repaso del plan— dijo Remus dándole unos golpecitos en el hombro.
—Estoy preocupada por mis hermanos y por mis padres también— dijo ella cruzándose de brazos— No es que no confíe en el plan pero temo por todos
Lupin colocó sus manos sobre los hombros de ella —Estaremos bien, todo saldrá bien, además recuerda lo que dijo Dumbledore, Harry es nuestra mejor opción—.
Kate dio un paso y abrazó a Lupin con algunas lágrimas en los ojos, él la tranquilizó —Remus por favor cuidate y a Tonks, ese anillo no es solo una promesa hecha y ya— Lupin quedó frío y abrió la boca sorprendido— La vi guardando el anillo antes de entrar a la sala
—Nos casamos en Gales hace unas semanas, pensábamos hacerlo después pero..— dijo Lupin pero no logró terminar la frase.
Kate lo volvió a abrazar y lo felicitó. Cuando los magos se fueron los tres Grant se fueron a dormir, claro que Kate no pudo conciliar el sueño por lo mucho que lo intentara, así que fue al cuarto de Mina y se acomodó en la cama sencilla de su hermana, ella al darse cuenta se acercó a su hermana mayor para abrazarla y así Kate esperó a que la mañana llegara.
El ánimo en la casa estaba bajo, por mucho que todos intentaran animarse por Mia, incluso su madre se le notaba algo somnolienta. Kate leyó un libro con Mina y cuando casi eran las 3 de la tarde los Grant comenzaron a llevar las maletas al auto, el plan era salir en la hora con más tráfico para distraer a cualquiera.
Kate pasó a la cocina y terminó el té que estaba preparado, llamó a su familia y todos acudieron, para Mina había jugo de sandía como siempre.
—Todo saldrá bien, será un viaje corto— dijo Robert tratando de animar la situación.
Las mujeres sonrieron y tomaron el té. A los pocos segundos Kingsley llegó y el primero en caer al suelo completamente dormido fue Robert, Shack alcanzó a detenerlo en el aire con la varita, Amelia miró a su esposo y luego Mina cayó dormida también, Kate la sostuvo y la acunó; Amelia caminó hasta donde Kate y cayó de rodillas frente a ella.
—No Kate, por favor no lo hagas— dijo con lágrimas en los ojos pero no demoró en caer también en un sueño.
Kate se secó las lágrimas y ayudó a Kingsley a llevarlos al auto, habían acomodado la camioneta para que la parte de atrás pareciera que no iba nadie.
—Kate deberías venir, el lugar de los Scamander es muy seguro y no irán a buscarte ahí— dijo Kingsley tratando de convencerla.
Kate dio un paso y lo abrazó —Sabes que no es así, gracias por hacer esto Shack, no solo esto, todo lo que haz hecho por nosotros, es algo que creo nunca voy a poder pagar—.
Los ojos de Kingsley se cristalizaron casi apunto de llorar pero se limitó a abrazar a Kate —Lo haría mil veces, ustedes son importantes para mi, como mi familia—.
Kate abrió el garaje y se despidió de Shack quien salió rápido hacia el norte de la ciudad.
Sola en casa Kate escribió una carta para Matthew y la dejó en el buzón de la casa, Matt había prometido ir a Hogwarts, después de varias discusiones Kate lo había convencido que podía ayudar más ahí. Quiso llamar a su hermano pero sabía que podía alertarlo y por eso deshizo la idea.
Horas después un patronus con forma de lince la visitó, llevaba el mensaje: Tus padres y tu hermana están a salvo con los Scamander, siguen durmiendo. Lupin y Tonks trataron de ir por ti pero tuve que convencerlos.
Kate susurró un "gracias" y el patronus desapareció. Miró el reloj y vio que solo quedaban 30 minutos para las 12, cumpliría 17 años en nada. Tomó uno de los viales con poción Salustio y lo bebió, de un momento a otro una nube negra la rodeó y la tumbó al suelo, trató de agarrar su varita pero alguien la maldijo con un Cruciatus y sintió su cuerpo contraerse en una descarga eléctrica.
—No seas tan rápida que te escapas— dijo con voz burlona Bellatrix Lestrange, luego con la punta de sus zapatos golpeó a Kate en las costillas haciendo que se encogiera de dolor.
—La casa está vacía— dijo una voz masculina, probablemente Lucius Malfoy.
—Así que te sacrificaste por esos muggles, que valiente pequeña bruja— espetó Lestrange lanzando otro cruciatus.
Cuando pudo moverse Kate levantó la mirada y vio como los mortifagos entre los que se encontraba la familia Malfoy y los Carrow, se inclinaban dándole espacio a su amo que entraba a la sala de la casa con su fiel serpiente. Con un movimiento de varita Voldemort levantó a Kate y ella lo miró a los ojos rojos de serpiente.
—Nos conocemos por fin Katherine— dijo Voldemort mirando atento la expresión de ira de Kate— Ese encuentro en el Ministerio fue muy breve y no pude verte bien
Kate no respondió pero lo miró desafiante, aunque tratara de moverse no podía ya que sentía como si unas cuerdas invisibles la estuviera rodeando. Al no tener respuesta Voldemort prosiguió —Espero que no te moleste, asesinamos a una familia a pocas calles de acá, pensamos que eran tus padres muggles pero creo que no lo eran— dijo riendo con maldad.
—Tenga cuidado, tal vez tendrían un bebé de 1 año y sabes lo peligroso que son para ust… Aghhh!— Kate gritó de dolor, no solo Bellatrix la estaba maldiciendo sino que Morgan Carrow también lo hacía.
Voldemort levantó una huesuda mano para que se detuvieran, dio un paso hacia Kate y con una huesuda mano tocó su mejilla —Si te pareces a tu madre jovencita, pero no en la mirada, tu si deseas pelear y no vas a suplicar clemencia tan fácil. Eso hará todo más interesante—.
El señor oscuro ordenó que la llevaran a la Mansión, Narcisa Malfoy dio un paso y la tomó del brazo, ambas hicieron aparición conjunta y llegaron a lo que parecía la entrada de la Mansión Malfoy. Kate fue arrastrada hasta un sótano, antes de cerrar la puerta Draco Malfoy dio un paso adelante —No hagas algo estupido Grant, el Señor Oscuro sabe que no te entregaste fácil por nada—.
