Holi!

Estoy volviendo ya!

Y para esta nueva versión de Caso Cerrado, Rose es bastante diferente de lo que podrán recordar.

Sigue la misma secuencia temporal (18 o ya 19 años), pero siempre ubicada temporalmente en el día de hoy (septiembre 2023).

Hay partes en que reinterpreto el texto original de Richelle Mead, traducido a mano alzada, pero sin perder su sentido original.

Y en otras, puedo mezclar hechos históricos, según me vayan susurrando los personajes.

Dicho todo esto, la historia original es Siempre de Richelle Mead.


Preludio: Desde las sombras

La luz del día sólo acentuaba sus facciones, ya de por sí contorsionadas por la ira, y algo más... ¿sería temor?

Desde un pilar -invisible a los espectadores que asomaban ante el chisme fresquito que podían hacer correr desde ya-, una mujer de unos 37 años, de pelo muy crespo y rojizo movía la cabeza con molestia, y sacaba de entre su ropa un teléfono móvil, en el que marcó sin ocuparse de mirar el número.

"Escucha. La arrestaron. Aún no sé a título de qué... Usualmente Croft me llama para alaraquear, de esto o de aquello, pero no hoy...ok...ok... se lo diré, aunque tenga que matar... a alguien para llegar a ella".

Y terminando la llamada, caminó veloz -y muy gruñona-, a dónde estaba la mujer que arrastraban los guardianes.

Y empujó a varios, fuera de su camino.

Chiquita pero... más peligrosa que el veneno en el frasco más pequeño, decían a su espalda.

"Ella es mi hija, y le tengo un recado, ¡así que no me toquen a mí, pendejos de mierda!", y llegó junto a ella, seseando algo muy difícil de comprender.

La otra mujer (más joven, y su hija en sus palabras), la miró y asintió; y dejó que se la llevaran.

No sin antes saludar a su parentela y a los desconsiderados moroi que olvidaron ponerse el alusaplast en el pajarito que cantó hasta morir.

(Don't want a short short man

Innie weeny teeny weeny shriveled short short man

...

Do you need some twiezers to put that little thing away?

That has got to be

the smallest rrr- I've ever seen, in my whole life

...

Don't want a short short man)

"Pequeñito, muy pequeñito", canturreó y tarareó ella mirando al público, al que guiñó un ojo.

La pelirroja no se detuvo a oír la letra de la canción (o a criticar el tono destemplado del mismo), sino que caminó hacia el hombre alto que observaba, la baba (o el café) corriendo por la comisura de sus labios.

Lo agarró de la solapa (una hazaña, era muy pequeña de estatura, pero temible en sus puños), y tiró de él hacia su cara.

Si se partía la espalda, no era su problema.

"Si llego a saber que esto es tu culpa, habrás deseado realmente morir en las cuevas, ¡o que mi hija te exterminara en Rusia!".

Y empujándolo también, se fue en el sentido contrario, -¿aparentemente?- abandonando la escena, ante el evidente alivio de todos por allí.

"¿Y qué bicho le picó a esta loca, esta vez?", se dijo el hombre, mientras miraba cómo arrastraban a la otra mujer, fuera de su vista.

Porque... no era su culpa, ¿verdad?.

Y sólo moviéndose de ahí lo podría averiguar.

Preliminares.

"¡Hathaway, tienes una llamada de tu abogaducho!", le gruñó el guardián de la puerta, pasándole un teléfono tan añejo como el pan que tenía en el plato.

Y se quedó a oír (¿el chisme, noticias, algo?).

Según él, tenía que reportar todo sobre ella.

Así que ella pasaba sentada en el WC,o haciéndose las uñas de las manos, o lijándose las de los pies.

"Hathaway es mi madre", gruñó la mujer, arrebatándole el cuernófono (¿los nokia siguen funcionando?) de las manos. "¿Dark Vader?", y el guardián dió un respingo.

Esperen, ¿quién dijo que era?.

La mujer sólo oía. A veces asentía.

Tal vez emitió algunos Ajá en varios idiomas, miró al guardián (cuya paila ya no sólo estaba roja, sino que tiritaba a esta altura), y volvía a asentir.

Sus ojos se enangostaron, como recordando algo muy lejano, y miró hacia un extremo, como forzando su memoria.

Y entonces sonrió.

Y todo pareció caer en una espesa tiniebla, de lo siniestro que era.

"Ten tu nokia", le dijo al Guardia, "y Dark Vader avisa de que te cuides de las sombras. Cualquiera. La tuya incluída".

Y el Guardián se volvió, nervioso.

"¿Y... pero... tiene un nombre?".

"¿Al que llamaste abogaducho?, créeme, tú jamás podrás pagarlo. A mi madre y a mí no nos han tratado de putas a nuestras espaldas, y de frente, por nada".

"¿Da... Damon Tarus?", palideció.

El más prestigioso entre los morois, según parecía.

"Dark Vader dijo que no le entregaría un caso a ese comunitario, ni que fuera por una uña quebrada de mi madre, mientras mecía la cuna del moroi que le hace moroisitting. Sus palabras. Mi interpretación. Seguro fue algo menos diplomático que eso, pero..."


En cursiva: Short Short Man, de Gillette

(Algo de picardía, al estilo Rose Hathaway y Mazur, según Lizzie)

Espero lo difrutren!