Capitulo 1 "Extraños designios
Tras buscar por más de 45 años a Mathias Conqvist, León Belmont y su familia están en una pequeña casa en un poblado de Hungría, y su hijo mayor estaba viendo un gran mapa. León estaba sentado en una silla y miraba por la ventana a sus tres hijas Calixta, Stefani y Juliette que estaban entrenando con Alexis el más pequeño de los Belmont.
León apartó su mirada de la ventana y con voz sería dijo.
—No te preocupes Joshua se que Mathias no va a ser tan fácil de encontrar y posiblemente no lo vuelva a ver.
Joshua suspiró un poco triste y dijo.
—No te rindas padre estoy seguro de que podremos encontrar a Mathias Conqvist.
León suspiró profundamente se levantó y dijo.
—Mathias es muy astuto por lo que deberán de tener mucho cuidado cuando lo encuentren y si tienen duda de su apariencia no olviden revisar el retrato de él.
León se retiró del salón dejando a Joshua sólo y él dijo para sí.
—¿Dónde te estás ocultado Mathias?
Joshua suspiró esperando poder encontrar a Mathias Conqvist antes de que su enfermo padre muera sin poder arreglar las cosas con Mathias quien alguna vez fue su mejor amigo, pero después de lo ocurrido con Walter Bernhard y la muerte de Sara Trantoul ahora son enemigos a muerte.
Joshua volvió a revisar el mapa esperando poder encontrar a Mathias, pero el no es fácil de localizar y en sus viajes muy pocas personas lo han visto y esto dificulta mucho saber a dónde va.
Mientras tanto...
León estaba entrenando con el Vampire Killer, pero de repente su vista se nublo y cayó al suelo sintiéndose muy mal, y sintió las delicadas manos de su esposa que muy preocupada le preguntó.
—¿Estás bien querido?
León asintió y respondió con una sonrisa.
—No te preocupes tanto Liza estoy bien sólo me resbale por error.
Liza ayudo a León a levantarse y con voz amable dijo.
—Será mejor que descanses un poco mi amor.
León asintió y los dos entraron a la casa, y fueron a la cocina para que Liza le preparará algo de comer a León que la miraba con cariño, y pensaba en que desde el día que la conoció aquella tristeza por la muerte de Sara Trantoul ha dejado su corazón, y espera poder seguir un poco más a su lado.
Cuando Liza terminó le sirvió a León la comida que él comió con gusto y al poco rato sus hijos entraron a la cocina, y León se alegró de comer con toda su familia.
Más tarde León entreno un poco con sus hijos, pero después de un rato se sintió más cansado de lo habitual y Liza lo llevo al dormitorio para que descanse un poco.
León se recostó en la cama sintiéndose extremadamente cansado y vió que sus hijos entraron al cuarto con cara de preocupación, y con una sonrisa dijo.
—No pongan esas caras voy a estar bien, pero ustedes tienen que continuar adelante y encontrar a Mathias Conqvist antes de que sea tarde.
Los cinco asintieron y León incapaz de resistir el cansancio cerró sus ojos, y soltó su último aliento. Todos los presentes lloraron por la partida de su padre y Liza esperaba que su amado pueda descansar.
León despertó en un cuarto obscuro apenas iluminado por unas cuantas velas a su alrededor y León salió de la cama tomó una de las velas, y se dirigió a la salida del cuarto. Antes de salir León pudo escuchar una risotada malvada de una voz muy familiar y rápido salió del cuarto que llevaba a un largo pasillo que parecía no tener fin.
León camino por el pasillo manteniéndose alerta y para cuándo llegó al final del pasillo vió una gran puerta doble con extraños símbolos en esta, y León la abrió para entrar al gran salón que estaba lleno de antorchas, y le recordó al lugar donde peleó contra Walter Bernhard, y al centro del salón estaba esperándolo Muerte que dijo.
—Es hora de que vengas conmigo.
León apretó los puños y con un rápido movimiento desenrollo su látigo en un potente ataque que Muerte apenas pudo esquivar y con tono burlón dijo.
—Combativo hasta el final. Bien que así sea no voy a perder contra ti.
Muerte invocó a un pez infernal que León tuvo que esquivar mientras Muerte se reía malvado y León le arrojó agua bendita al Shinigami que rugió en agonía mientras desaparecía, y apareció en otra parte del campo de batalla, pero León le arrojó varias dagas que Muerte evitó al hacer girar su guadaña, pero cuando terminó León ya estaba frente de él, y le asestó varios latigazos que hirieron a Muerte que usó su guadaña para cortar a León que usó una espada corta para evitar el corte y con varios saltós hacia atrás se alejó de su oponente que dijo.
—No está mal Belmont.
León miró con fiereza a Muerte que invocó a varios perros infernales y otros dos peces infernales, pero León usó sus cruzes boomerang que aturdieron a sus oponentes y con su espada eliminó a los perros infernales, y le arrojó agua bendita a los peces infernales para que desaparezcan y León dijo.
—¿Ese es todo tu poder? Para ser el más poderoso sirviente de Mathias eres patético.
Muerte no se inmutó por lo que León le dijo y le arrojó múltiples guadañas a León que hizo lo posible por desviar algunas guadañas con su espada para no ser alcanzado por ese ataque, pero Muerte se apareció a su espalda para cortarlo, y León que ya se esperaba esto rápido se dio la vuelta para detener la guadaña con su espada, y le arrojó agua bendita a muerte que bajo su defensa al quemarse en llamas azules probocadas por la sagrada agua, y León le asestó varios latigazos a Muerte que cayó al suelo muy mal herido, y dijo.
—Veo que no has perdido el tiempo en estos años y te has vuelto mucho más fuerte que la última vez, pero en ese estado no vas a poder vencerme jijijijiji.
León empezó a sentir un horrible dolor en su pecho que se extendía por todo su cuerpo y que lo hizo caer sobre sus rodillas, y se dio cuenta de que si no hace algo Muerte va a acabar con él, pero aquel dolor lo paralizaba, y Muerte se acercó a él levantó su guadaña en el aire, y dijo de manera enigmática.
—Con esto se acaba todo, ya que tú tiempo se ha acabado y nunca podrás regresar.
León cerró sus ojos maldiciendo se a si mismo por no acabar con esto antes y Muerte lo cortó con su guadaña múltiples veces, y una vez que León cayó al suelo inconsciente Muerte con su mano huesuda sacó de entre su roida túnica un pequeño reloj de arena que abrió, y vertió su contenido sobre el cuerpo de León murmuró algo, y se retiró...
León estaba flotando en la profunda obscuridad en un estado de semi inconciencia hasta que escucho una canción tocada por un violín que le recordaba mucho a Mathias Conqvist que lo hizo recuperarse y pensó en buscar una salida de aquella obscuridad.
León no estaba seguro de que estaba pasando porque todavía recuerda que peleó contra Muerte y perdió, pero no podía rendirse, y tenía que encontrar la salida de aquel lugar antes de que Muerte decida volver para acabar con él.
León corrió en la dirección en que podía escuchar con más fuerza la canción hasta que llegó a un punto donde pudo ver un pequeño destello de luz que siguió y al final de aquel camino de luz había alguien esperándolo, pero cuando lo alcanzó este desapareció, y León vió que estaba en un callejón en algún lugar.
León estaba muy confundido con lo que estaba pasando y vió mucha luz al final del callejón, y gente que caminaba de un lado al otro por lo que se acercó con cautela porque tenía un mal presentimiento.
León salió del callejón y vió que estaba en una gran ciudad con gente por todos lados, y extraños artilugios con ruedas que pasan por las calles llenas con el sonido de los mercaderes que gritaban las ofertas del día, y de estruendosa música que venía de la nada.
León camino por la calle para acercarse al mercado cuando vió a una joven con un increíble parecido a Liza que estaba vestida de blanco con líneas de color azul que llevaba una bolsa de papel entre sus brazos cuando un extraño hombre formido salió de entre la multitud y se acercó a la joven que se puso muy nerviosa, y dio un paso hacia atrás como queriendo escapar del tipo que quien sabe que le estaba diciendo, y León pensado que ese tipo estaba molestando a liza corrió hacia ellos, y le dio un tremendo golpe al sujeto que cayó al suelo se dio la vuelta tomó la mano de Liza que estaba muy sorprendida, y se fueron del lugar.
Una vez que estuvieron lo bastante lejos León se detuvo y con una sonrisa dijo.
—Bien, parece que perdimos a ese bruto.
León miró a Liza que estaba muy confundida y se acercó a ella para abrazarla con cariño y dijo.
—No te preocupes tanto Liza ese tipo ya no te molestará más.
La joven se sorprendió mucho, pero antes de que pudiera decirle a León algo importante el tipo llegó furioso y empezó a vociferar.
—¡Maldito granuja! ¡Creíste que podías escapar de mi!
León se separó de Liza, se alejó un poco de ella y miró con fiereza al tipo que se preparó para el combate, y se lanzó al ataque, pero León ya se esperaba eso, y de un rápido movimiento desenrollo su látigo en un poderoso ataque que el tipo recibió, pero no se detuvo, y antes de que él pudiera asestarle un golpe León lo detuvo con su mano izquierda sorprendiendo al tipo que recibió una tremenda patada que lo hizo caer al suelo y la joven dijo.
—Basta no se peleen.
León se mantuvo en guardia porque el tipo se volvió a levantar y con furia dijo.
—Eres muy hábil, pero esta vez no me voy a contener.
León con media sonrisa y tono burlón dijo.
—Pensé que ya estabas peleando enserio bestia porque tus ataques están muy mal cordinados.
La sonrisa de León se hizo más grande al ver cómo su oponente se enfurecia y rápido se lanzó al ataque, pero León esquivaba, y Bloqueaba todos los golpes de su oponente, y la joven dijo.
—¡Detente padre García!
García no le hizo caso a la joven que fue por ayuda para detener está pelea sin sentido mientras que León esquivó otro golpe y con su látigo atrapó la pierna de García al que tiro al suelo dio un pequeño salto para darle un codazo en el plexo solar, pero García apenas pudo bloquearlo y León con un rápido movimiento se alejó de su oponente que se levantó con trabajos y León dijo.
—No piensas rendirte bestia.
García corrió hacia León que suspiró guardó su látigo y con su mano derecha detuvo el golpe de García que trato de darle un golpe con su mano restante, pero León lo detuvo le dio una patada en la rodilla para hacerlo caer sobre su rodilla, y con un rápido movimiento jalo a García hacia él para darle un tremendo rodillazo, y codazo con tanta fuerza que Rompió el húmero de García que gritó en agonía, y el Belmont dijo.
—A ver si así aprendes a no meterte conmigo bestia.
García miró a León con furia y León vió a Sabrina que había regresado con un sacerdote de cabello plateado recogido en una cola de caballo, y gafas que dijo.
—Deje en paz al padre León García y rindete.
León estaba estupefacto por saber que el tipo al que le rompió el brazo era un sacerdote y le dijo a Liza.
—¿Qué estás haciendo Liza?
La joven miró al Belmont con una mescolanza de sentimientos reflejados en su cara y dijo.
—Te equivocas yo no soy liza mi nombre es Sabrina Renais.
León se sorprendió mucho y el sacerdote se acercó a él para arrestarlo, pero León no se dejó atrapar, y se fue corriendo de ahí. Sabrina lo vió alejarse de ahí perseguido por el sacerdote y no entiendo porque se sintió horrible al decirle a León Belmont que no era Liza.
León corría por las calles mientras esquivaba la multitud en el mercado esperando poder escapar del sacerdote que lo persigue y pensaba en.
—¿Qué clase de broma enferma es está? ¿Por qué Muerte me trajo a este lugar?
León corrió hasta que llegó a un lugar donde no había tanta gente y el sacerdote que lo perseguía dijo.
—Rindete ya no hay lugar a donde puedas esconderte.
León se dio la vuelta y miró con fiereza a su perseguidor al que le dijo.
—No pienso dejar que los de la iglesia me atrapen todavía tengo que encontrar a Mathias Conqvist antes de que le haga más daño a la gente así que déjame ir y por lo de las Cruzadas no me arrepiento de haber desertado.
León se preparó para pelear y el sacerdote se sorprendió mucho de lo que el Belmont le dijo y contesta.
—Espera un momento ¿Eres un viajero del tiempo?
León sin perder la concentración respondió un poco molesto.
—¿De que tonterías estás hablando? No dejaré que me confundas.
León se lanzó al ataque y el sacerdote se espanto, y torpemente trato de esquiva los ataques de León que no usó su látigo porque le pareció que su oponente no es como el salvaje que enfrentó antes, y con voz agitada el sacerdote dijo.
—Espera no hay necesidad de pelear. Yo te puedo ayudar por favor escucha me.
León continúo atacando y el sacerdote no tuvo de otra más que sacar su pistola, y disparar al aire haciendo que León cayera sobre sus rodillas tapando su oídos con sus manos, y gritó.
—¿¡Qué clase de magia es está!? ¡Mis oídos!
León pensó que ese sacerdote lo mataría con esa extraña magia, pero eso no pasó y una vez que el zumbido en sus oídos terminó, escucho que el sacerdote le dijo.
—Soy Abel Nigthroad y estás en el año 3035 del calendario sagrado estás ahora en el Vaticano, y las Cruzadas terminaron hace mucho por lo que ya no eres perseguido, y como tú amigo te ayudaré a adaptarte a este tiempo.
Al darse cuenta de en que año estaba los ojos de León se llenaron de lágrimas y bajo la cabeza para ocultar un poco su tristeza ya que su amada Liza se a ido hace mucho, y no podrá volverla a ver nunca, y con la voz quebrada por su gran tristeza dijo.
—Soy León Belmont.
Abel sonrió con porque entiende como se siente León y dijo.
—No estés triste estoy seguro de que encontraremos la forma de hacerte regresar a tu tiempo.
León levantó su cabeza y sonrió, pero las últimas palabras de Muerte todavía resonaban en su cabeza, y algo en su corazón le decía que el familiar de Mathias Conqvist tenía razón.
León se levantó y Abel con una sonrisa dijo.
—Ven te llevaré con mi jefa para arreglar todo y te puedas quedar aquí en lo que regresas a tu tiempo.
León suspiró profundamente asintió y los dos se dirigieron a la oficina de Caterina Sforza...
