Saludos lectores; este capítulo es cortito pero el próximo quizás lo subo antes para compensar, aún no me decido. Gracias por leerme.
Capítulo 9
No era para él incómodo este tipo de cosas pero esta situación era diferente.
Kiba sabía mucho de las personas por su olfato. Cosas personales para otros, no lo eran para él. Sabía quién se tomó una ducha y quién no, que habían comido las personas, quien estaba enfermo, si las chicas están en su periodo o si están ovulando. Como era normal para él, no le daba mucha importancia, especialmente porque sabía que los demás preferían que las cosas quedaran en privado.
Ejemplo de esto era que supo que su sensei estaba embarazada antes de que ella misma lo supiera; no dijo nada. Cuando Kurenai por fin les contó se puso igual de feliz que todos por la sorpresa. El día en que Hinata tuvo su periodo por primera vez, tampoco dijo nada, era algo que naturalmente pasaba y no le dio importancia. Cuándo perdió su virginidad con Naruto tampoco dijo nada, aunque fue algo incomodo saberlo, Hinata era como su hermana, era la cosa más normal del mundo que los dos tortolos eventualmente durmieran juntos. Él entendía que esas cosas eran personales y que no eran sus asuntos.
Además era usual, entre ellos, saber más de los demás de lo que realmente compartían las personas. Por algo eran el equipo de rastreo y espionaje más importante de la aldea. Él era la nariz, Shino los oídos y Hinata los ojos. En más de una ocasión estaba seguro que Hinata vio cosas de él que quiso ocultar a otros.
Pero esto no era algo para ignorar.
"¡Hey, hey! ¡Hinata! llevas entrenando mucho tiempo." le gritó a ella que no parecía prestar atención a otra cosa que no fuera darle al tronco.
"Solo media hora más Kiba-kun, pronto terminó." ella continúo golpeando el tronco sin prestarle mucha atención, ya sudorosa y respirando con dificultad.
"¡Llevas en está toda la mañana!" Kiba se llevó una mano a su cabello a manera de frustración.
"Soy una kunoichi Kiba-kun, esto no es mucho para mi." Le lanzó una despreocupada sonrisa. Habían veces que estaban de acuerdo en que solían proteger demasiado a Hinata, a pesar de que ella era más que capaz de cuidar de ella misma y de ellos también, si la ocasión lo ameritaba, pero esta no era una de esas veces. Ella necesitaba de alguien.
Shino intervino esta vez. "Estamos preocupados por ti."
"¿De qué hablan?" Ella frunció el ceño confundida pero continuó con su tarea.
"No te ves bien, has perdido peso, y no es que estabas gorda antes! Ah y te ves triste muchas veces. El alivio es que te ves algo mejor de un tiempo para acá, antes te veías mucho peor, no fea fea…ojerosa y... " Kiba busco la mirada de Shino, como buscando apoyo para lo que quería decir.
"...y queremos saber qué es lo que te pasa." Terminó completando Shino.
Ella dejó de darle al tronco. Para mirarlos con ojos nerviosos. Se les hacía difícil en ocasiones hablar con Hinata. Aunque dulce y comprensiva, esas cualidades eran para los demás, con ella solía ser más mezquina y por lo tanto más severa. Rara vez compartía, sus angustias, tristezas y lágrimas. A pesar de que algunas veces han conseguido que ella expresara sus verdaderas emociones, siempre llevaba una armadura en forma de sonrisa que era difícil de penetrar incluso para sus amigos más cercanos. Tenían que tener cuidado en cómo proceder.
"Sabes que puedes hablar con nosotros de cualquier cosa." Shino buscando la manera de traer el tema y que ella no se metiera en su caparazón, era difícil sacarla de ahí cuando entraba. Siendo él introvertido también, podía entenderla pero esta situación estaba fuera de control y no quería ver a Hinata lastimada.
"Cualquier cosa que sea, no te juzgaremos, eres nuestra mejor amiga y siempre has estado aquí para nosotros." dijo esto apoyando su mano en el hombro de ella y mirando a Shino seriamente. Kiba temía que su compañero no fuera tan comprensivo y juzgará a Hinata por lo que estaba pasando, solía ser muy moralista. El ninja de los insectos no pronunciaba muchas palabras pero su silencio de reproche, muchas veces era más hiriente que cualquier otra cosa.
Ambos sabían que Hinata estaba acostándose con Sasuke y este conocimiento los tenía muy tensos por ponerle nombre a lo que sentían.
No sabían porque su compañera tendría una aventura con el Uchiha. Ellos sabían que ella amaba a Naruto y no estaba en su naturaleza la traición, sabían de antemano que ella no era capaz de herir ni una mosca, mucho menos a alguien que ella amaba tan profundamente. Nada hacía sentido.
Pero la nariz de Kiba no mentía. Hinata apestaba a Sasuke.
Eso era desconcertante en muchos aspectos. Primero Hinata llevaba meses pálida, ojerosa, perdiendo peso y en ocasiones completamente ida; ellos desconocían la razón. Claro que su sospecha principal era que tenía que ver con Naruto. De un tiempo para acá algo en la relación no estaba bien aunque ellos desconocían que era.
Desde que comenzaron la relación, Hinata estaba que volaba de la felicidad, se reía por cualquier tontería, sus ojos brillaban más que nunca, siempre tenía una melodía en los labios, junto a una sonrisa que no desaparecía nunca. Los tenía muy felices por ella. Adoraban a Hinata y por mucho tiempo les dolió ver como ella se complacía con ver a Naruto desde lejos mientras el nombrado solo tenía ojos para Sakura. Por tal razón, al comienzo de la relación, tuvieron sus reservas porque Hinata merecía más que un amor a medias.
Al parecer el tiempo les dio la razón en ser cautelosos, sabían que algo no estaba bien, porque ella, a poco tiempo del noviazgo, comenzó desmejorar y todo eso que los hacía estar contentos por ella empezó a esfumarse.
Ahora, para su desconcierto, Hinata empezó a verse de mejor ánimo pero junto a esto, estaba el hecho inquietante, que olía a Sasuke. No era el olor que uno tiene cuando compartes caseta con otro ninja, era el olor que no desaparece en semanas.
Kiba no era estúpido, sabía muy bien qué significaba eso.
"Hinata sabemos... sabemos que..." Kiba se tocaba la nuca incomodo, no sabía ni como traer el penoso tema.
Shino interrumpió a Kiba. "sabemos que estás teniendo problemas con Naruto." Kiba lo miró sin comprender. Para él, ese no era el problema principal.
Ella bajó la cabeza. No podían ver su rostro a través de su pelo.
"¿Qué es lo que está pasando Hinata?" Los dos se pegaron a ella y Kiba le buscó la mirada, se le apretó el corazón al ver sus ojos tristes.
"Bueno... Naruto... él... él... bueno yo... estamos teniendo dificultades y..." No termino el balbuceo, regresando a jugar con sus manos como cuando era niña. Claramente estaba buscando un lugar seguro dentro de ella, en donde no tuviera que enfrentar cualquier cosa que estuviera pasándole. Sabían que tenían que ser delicados pero no era una de las características de los dos y menos la de Kiba que estaba frustrado.
Kiba recordaba lo increíble que fue para él desde el principio. El día que noto la presencia de Sasuke en ella, se quedó tan pasmado que tardo horas en reaccionar. Ya en su casa, acostado en su cama, sin poder dormir, grito del horror despertando a su madre y hermana, que le cayeron a golpes toda la noche.
"¿Qué dificultades puede estar teniendo él contigo Hinata? Tu haces cualquier cosa por el tonto ese, eso lo saben todos." No mentía, pero Kiba obvio lo de Sasuke; odiaba la idea que Hinata estuviera íntimamente con el Uchiha, le revolcaba el estómago. ¿Qué vería ella en él? Jamás había mostrado interés en nadie que no fuera Naruto y ¡ahora esto! Además qué podría querer el frío hombre, que ni atención le prestaba a su propia novia, con su compañera de equipo.
"Descuiden muchachos, ya estoy mejor y estamos tratando de arreglarlo. Son tonterías de pareja. Pero gracias muchachos por preocuparse, significa mucho para mi, de verdad." Les lanzó una sonrisa enorme y con esto Hinata se puso su escudo. No hablaría sobre el tema ni lo que le pasaba.
Era un caso perdido para ambos muchachos insistir en el tema.
Ella los abrazó con fuerza, se despidió de Akamaru y se marchó del campo de entrenamiento.
"¡Agh! ¿por qué no me dejaste hablar sobre el traidor ese? ¡Ahora no nos dirá nada! ¡Ese tipo es peligroso, no está bien de la mente, Shino!" Kiba se agarraba la cabeza con ambas manos molesto con toda la situación. Sasuke era un traidor que casi mata a todos porque tenía una tendencia a reaccionar de la peor manera posible. No quería a Hinata ni de amiga con él; había sido bastante explícito con ella sobre el tema.
"¿Cómo te sentirías si fueras ella? No le puedes soltar que sabes que está durmiendo con el mejor amigo de su novio como si no fuera nada. Ni siquiera quiere hablar de Naruto va a hablar de eso." Shino miraba serio por donde se había marchado Hinata con sus manos en los bolsillos. Meditaba sobre cuáles serían sus próximas acciones.
"Debimos decírselo a Kurenai desde el primer día en que vimos que Hinata no estaba bien, ella tiene mejor tacto que nosotros dos y siempre ha sabido lidiar con Hinata." Expresaba con una voz de derrota, acuclillado al lado de Akamaru, buscando consuelo por su estupidez.
"Claramente está muy avergonzada, por eso no nos ha contado nada, no creo que quiera que más personas lo sepan. Hay que apoyarla como podamos pero tenemos que darle su espacio." Shino no se caracterizaba por ser impulsivo o imprudente pero estaba a punto de serlo. La virtud más grande de Hinata era también su debilidad; ver bondad en todas partes incluso donde no existía.
"¡¿No vamos a hacer nada?! Es Hinata con con... ¡Agh! ¡No puedo ni decirlo!" Se levantó y miró con desespero a Shino, no sabía qué hacer. No podía quedarse de brazos cruzados y pensar que Hinata estaba en una mala situación.
"Eso no fue lo que dije, hay que velar por ella y ver qué se trae Naruto y sobre todo el Uchiha." Shino levantó sus dos manos y parte de su orbe de insectos salieron por sus mangas esparciéndose por el camino que su compañera había tomado. No estaba bien, pero si algún momento estaba bien ser imprudente, era este. Tenía que saber que Hinata no estaba metida en algo muy peligroso.
"Shino te puedes meter en problemas por esto, me sorprende que tomes una decisión tan... inmoral." Kiba lo miraba con la boca abierta y una mano en el pecho pero también había algo de orgullo en sus palabras.
"No eres el único que está frustrado con esta situación." Diciendo lo ultimo Shino se marchó también.
Kiba puso cara de asco mientras se tapaba la nariz. "¿Akamaru como lo haces eh? Dime el secreto porque estoy a punto de arrancarme la nariz por la peste de ese bastardo traidor. Nooo ¡el Uchiha nooo Hinata!"
El horror que personas supieran cosas así, de uno mismo, por el olfato nada más. Me moriría de la vergüenza. ¿Qué creen de la reacción de Kiba y Shino? ¿Enfrentarian ustedes sus amistades con algo así? Gracias a todos por sus comentarios, se aprecia muchísimo que se tomen de su tiempo para escribirme algo; ElyBet, Jane Nylleve, Gab, Francisvict y demás. Que bueno que les este gustando; uno nunca sabe cómo se van a tomar este tipo de capítulos y es siempre grato saber que son bien recibidos. Hay como me has hecho reir ElyBet, estos dos se van a dar más que gustitos en esta historia jajaja ya veras. Francisvict; me gusta escribir a Kakashi astuto pero sobre todo pervertido lol aunque de corazón, está preocupado por sus estudiantes. El que se encontraran en el cuarto de Sasuke era un must para su segundo encuentro, no los quería de nuevo en la sala de alguien teniendo un rapidito jajaja y se que ustedes también lo iban a apreciar. Prontamente estare subiendo otra historia Sasuhina pero aquella va a ser menos drama, más corta y no la subire con la misma frecuencia. Los mantendré al tanto.
