MÁS ALLÁ DE LAS LETRAS
Por
Kuraudea.
.
.
Capítulo 6
FINAL
"Más allá de todo"
.
.
«Te amaría de cualquier forma, en cualquier mundo, con cualquier pasado»
.
.
El haber extendido el brazo & no sentir el cuerpo de su amada a su lado, lo hizo despertar—¿Amor...?—a media voz le llamó con el bello adjetivo, que desde ahora, sería la forma correcta para dirigirse a ella. Tras no recibir respuesta de su parte, talló sus ojos & parte de su frente para despejarse, pues había decidido por cuenta propia salir de la habitación a buscarle. Pensó: «Seguramente está en la cocina preparando algo para desayunar» Así que con el brazo alcanzó su celular que se mantenía sobre el buró para observar la hora; al ser consciente de que ya era tarde, se sentó al raz de la cama & tomó sus ropajes del suelo para vestirse.
Aún tenía esa grata sensación de satisfacción en su interior por lo que había ocurrido en la madrugada: la mujer quien se mantuvo sentada sobre su cuerpo, fue dirigida con la ayuda de sus brazos fornidos quienes mantuvieron el ritmo del vaivén en intachable sincronía. Había sido para ellos la posición perfecta para hacerse el amor, pues no hubo un instante sin dejar de mirarse a los ojos; suspiró ante lo ocurrido; en los orbes negros descubrió una magia sinigual; un cosmo, un universo, & sobre todo, lo que tanto había buscado: Un amor.
Un amor genuino que lo había hecho sentirse realizado, pleno & bastante satisfecho como nunca en la vida, pues sin importar el poco tiempo de su relación, él se sentía cien porciento seguro de su sentir & de lo vivido. Dedujo entonces, que ahora, lo de mayor significación era el haber encontrado a la persona correcta. Así que con optimismo reafirmó que al fin había encontrado el verdadero amor de vida.
—Aquí vamos...—expresó perfecto. Pues tenía la estela de la ilusión de llenar la bañera para invitar a la mujer a darse una ducha con él.
Salió de la habitación. Y lo que parecía una discusión había llegado a sus oídos. Todo indicaba que era la voz de Mai aunque resaltaba un vocablo desconocido para él. Pues éste, particularmente, se escuchaba histérico. Caminó por el pasillo dirigiéndose hacia la entrada. Ciertamente la curiosidad le había ganado, pensó entonces que quizá Mai necesitaba un poco de ayuda. En eso, al no estar la puerta totalmente cerrada, observó a su mujer enfrentarse con un hombre de baja estatura «¿Pero qué pasa aquí?»—se cuestionó, e incluso hasta estaba a punto de intervenir. Aunque sin querer, algo de información por parte de los que se hacían de palabras, le causaría un inmenso dolor.
—Mi señor, verá...yo...
—YA BASTA. Tienes al pez gordo en tus manos, ¡¿qué esperas para actuar, Mai?!¡¿dónde está su caja fuerte?! ¡¿sus ahorros?! ¡¿tarjetas de créditos?! Ya llevas más de un mes como para no haber cumplido tu objetivo, ¿qué se supone que has estado haciendo? ¡Hay tantos prospectos con los cuáles hay que trabajar! ¡No te puedes quedar para siempre con el mismo!
—Yo...
—Escúchame con atención. Una semana te doy para que dejes de jugar a la "noviecita romántica" termina de una vez con esto. ¡Quiero todo el dinero de Trunks Brief! ¡Hasta si es posible déjalo hasta sin alma! ¡Saca todo el provecho que puedas de él!—ella solamente agachó la mirada, pues la amenaza ya se había dictado por parte de Su Señor Pilaf—Bien, me largo de aquí. Te veo al rato en el laboratorio.
—P-Pero...Mi Señor Pilaf.
Estaba en resistencia. Sabía sus obligaciones pero también sabía qué era lo que quería en su vida; estaba harta de seguir órdenes. Así que tras apretar los puños & fruncir la sien, se había decidido en actuar—Se acabó. No pienso seguir con esto—le dijo a la nada. Pues ahora la única prioridad en su vida giraría en torno a ella & a su felicidad.
Sin embargo, decidió tomar las riendas sueltas de su viveza demasiado tarde. Pues a sus espaldas, un hermoso corazón que había expresado todo su amor genuino & el cual depositó toda su confianza en ella, se hizo añicos tras haber escuchado lo que se "suponía" era la verdad.
Cuando Mai volteó hacia atrás, el alma se le vino al suelo: se petrificó de la impresión & lo único que se le ocurrió decir en ese momento, fue:—Y-Yo puedo explicarlo, te juro que todo se trata de un gran malentendido, Trunks.
A lo que sólamente, con el fruncir en su mirar & ante la decepción experimentada, le contestaron a secas:—Creo que no hay nada qué explicar—y la puerta se cerró dejando un gran impacto en Mai.
—¡Trunks, por favor abre la puerta! ¡Te juro que las cosas no así!—con desespero tocaba en súplica—¡Escúchame, por favor!
El joven llevó su mano a tapar sus labios. En estado de resistencia negaba con la cabeza a un ritmo despacio «No...»; su faz era de estar en completo shock. Y no entendía el porqué, pues otra vez se repetía "la misma historia" de toda su vida. La mayoría de las personas, a excepción de Goten, se acercaban a él por ser Trunks Brief. Ese apellido tan privilegiado & a la vez tan maldito, le traicionó de nueva cuenta.
Entretanto, Mai se aferraba:—¡Por favor, Trunks!—lágrimas se deslizaban sobre sus mejillas blancas. Pues qué se suponía qué iba a hacer con todo este caos. Amaba al muchacho con todo su ser, se sentía feliz & plena a su lado. Así, que después de un breve silencio de su parte, reflexionó al respecto & no había otra cosa más que hablar con la verdad, aunque como resultado traería consigo el jamás volver estar con Trunks. Respiró hondo, limpió sus lágrimas & afrontó la responsabilidad.
—Sé que estás molesto...y no te culpo por ello, Trunks. Porque seguramente de estar yo en tu lugar estaría igual. Sé que nunca podrás discúlparme —se quebró su voz de momento—Pero te juro que todo fue verdadero. Solo que esta situación se me escapó de las manos—tomaba valor para continuar—Tal & como lo escuchaste he vivido de la peor manera tratando de aprovecharme de los demás. Ese hombre que viste—se refería a Pilaf—es "mi jefe" y hace un poco se le ocurrió la gran idea de utilizar la aplicación de "Bubbles" y demás...Ahí te conocí gracias a que me saludaste—Trunks estaba del otro lado de la puerta escuchando—platiqué contigo y ... descubrí lo que había más allá de la letras de TB-Ouji; descubrí la gran persona que eres...y...—ante el silencio, se secó las lágrimas. Pues ya no había nada qué decir y tal vez lo que faltaba por aclarar estaba de sobra. Entonces comprendió dentro de la sintonía del cruel silencio que todo se había acabado. Por lo que al final, justo antes de darse la vuelta e irse, le dijo:—Espero algún día puedas perdonarme...
—Vete...—fue lo único que escuchó por parte del muchacho.
.
.
.
De todas las cosas que le habían pasado en su vida, específicamente hablando de las malas experiencias amorosas, lo de Mai había sido lo peor. Y no se explicaba el cómo le había perjudicado tanto, puesto que con otras mujeres nunca se quebró y al día siguiente iba a trabajar como sí no hubiese pasado nada. Tal vez la razón se originaba en que en sus anteriores "deslices ocasionales" no eran nada serios. A lo contrario de lo que pasó con la mujer militar, pues en realidad se había enamorado de ella locamente.
Dos semanas se había cumplido y desde entonces ya no supo nada de la mujer. El chat que tanto los unió estaba en completo abandono. Y como la vida tenía que seguir, se colocó la máscara de la monotonía sobre su rostro para que nadie supiera de su dolor. Bebió, fumó, y en soledad visitó algunos bares de clase media para ser tratado como un simple consumidor. Y por cada shot de tequila que ardía en su garganta, llegaba el recuerdo de su agridulce amor junto con el sabor de sus besos.
El hombre que atendía la barra del bar, al verle afligido, y sin querer ser imprudente, le obsequió un whisky en las rocas—Aquí tiene, mi buen amigo.
—¿Eh...?—el joven le dirigió la mirada.
—Cortesía de la casa.
—G-Gracias.
Y sin más, le compartió una bella frase:— "Cuando la capacidad de amar es grande, igual de grande será la capacidad para sentir dolor"...Eso es inevitable, ¿no?. Así que sea lo que sea, ya pasará o se arreglará de alguna u otra forma. Qué tenga buena noche.
—Se lo agradezco—aunque para Trunks no tenía ya nada salvación.
.
.
.
En ese momento cuando se dió la media vuelta & en su espalda llevaba el gran peso del dolor & del arrepentimiento; se fue caminando a su casa. No supo cuántas horas hizo en llegar, ya que su mente estaba en blanco. Se sentía como si fuese un zombi que solamente andaba por ahí "porque sí". Pero finalmente lo logró, pues como si se tratara de un buen perro guardián, dió con la ruta correcta.
Al atravesar la puerta del viejo almacén, le saludaron—Y bien...¿cumpliste con tu misión al fin?—Pilaf simplemente pensó que le entregaría un generosa cantidad de zenys. Sin embargo vio su faz, & al conocerla bien, expresó—¿Y ahora qué te sucede?
La mujer volteó con él. Y en respuesta, le dijo—"¿Que qué me pasa?"
—Sí. Se supone que deberías de estar feliz por el dinero, ¿no?.
Y después de reservarse, expresó con crudeza—Lo qué pasa aquí...es que usted es un gran idiota.
—¡¿Qué!? ¡¿qué has dicho?!
Al fruncir aún más la mirada & al apretar sus puños, volvió a decírselo en un tono de voz más elevado—¡USTED ES UN GRAN IDIOTA!
—¡¿P-PERO?!
Y ella, explotó:—Por primera vez en mi vida puedo decir que sentí un poco de felicidad. Siempre traté de complacerlo en todo, ¡en todo! Poniéndolo a usted en primer lugar antes que a mí, para saciar su avaricia, su comodidad & brindarle todo mi servicio & lealtad por todos estos años. Y ahora cuando yo me sentía tan plena con alguien, ¡¿NO PUDO QUEDARSE CALLADO?! ¡¿NO PUDO TENER UN POCO DE EMPATÍA POR MI?! ¡No le interesa ni cómo me siento & solo me pregunta por el maldito dinero!...Su Excelencia, el mundo no gira en torno a usted; todos merecemos gozar de las virtudes de la vida—al dejarlo con la boca abierta & con el ojo cuadrado, finalizó con un—¡Y renunció a este estúpido plan! ¿quiere dinero?, ¡adelante! continué sin mi. ¡SE ACABÓ!
.
.
.
Quince días se habían cumplido desde entonces & puso todo de su parte para no mandarle un mensaje a Trunks, luchó con todas sus fuerzas para no hacerlo. Pues sin lugar a dudas, uno se acostumbra a los buenos tratos, a los cariños & bellos gestos. No negaría que extrañaba sobremanera cada sonido de notificación de su celular con un mensaje de buenos días por parte del muchacho. Sin embargo, era consciente que debía de pagar & afrontar las consecuencias de sus actos. Pues desde entonces había decidido que llevaría una vida tranquila & nada más.
Fue así, que se olvidó de todo vestuario lindo, y regresó a lo que ella era: la misma Mai con paliacate & cara lavada. Entonces, para tener alguna solvencia económica, le pidió a Hiroshi que si podía trabajar en el supermercado con él. A lo cual, el joven cajero aceptó.
—Creo que en el área de cajas estamos completos, Mai. Pero ocupo a alguien para la limpieza de pasillo y reacamodo de mercancía, ¿te interesa?
—Por supuesto. No tengo problema con ello—sonrió después de no haber gesticulando esa expresión por días—¡Te agradezco tanto, Hiroshi!
—Es un gusto. Ya sabes, Mai.
.
.
.
Por otro lado, en otro ambiente & con otros protagonistas, el interrogatorio comenzaba, pues había muchas dudas en el aire.
—¿Entonces no utilizaste la aplicación de BUBBLES, Trunks?—la visita inesperada de Goten fue de sorpresa para el presidente. Y más que éste estaba lleno de documentos por firmar.
—No, no lo utilicé. Seguro es una tontería—se mostraba apático el de lentes.
—Vaya, pensé que la curiosidad te iba a ganar, aunque respondes como si en verdad lo superas.
—Pues ya ves que no.
—Supongo que eso de las redes sociales no son tu fuerte. Ya llegará algo, descuida.
—Sí, eso supongo.
—Es que verás ...Pares tiene una prima muy linda & entonces pensé que ella & tú ...
—Me olvidaré de ese tema por un buen tiempo. Además con tanto trabajo, ya sabes que se me complica demasiado.
Goten notó algo raro a su amigo. Y más con esas respuestas tan desganadas de su parte. Entonces, le preguntó:—¿Oye Trunks, todo está bien?
El muchacho dejó de firmar algunos de los papeles para dirigirse con su amigo—Estoy bien. No te preocupes. Aún así, te agradezco por preguntar, Goten.
—Entonces, anda, bebamos algo, ¿qué dices, eh?—el Son sonrió & Trunks le contestó con la misma expresión. Pues al igual que la mujer, no había sonreído después de algún tiempo.
—¿Cerveza?
—Por supuesto.
.
.
.
—Oye Mai, ¿sabes manejar motocicleta?—le preguntó Hiroshi de momento mientras acomodaba algunas latas sobre la estantería «¿Eh...?»—Es que nuestro repartidor se reportó enfermo & hay algunas despensas de nuestros clientes por entregar—Y como tienes "finta" de una chica intrépida, es por eso es que vine a preguntarte—esbozó una sonrisa el joven.
—Bueno pues ...S-Sí sé. Puedo ayudarte con gusto.
—Perfecto. Te anotaré en un papel las direcciones.
—E-Está bien.
El recorrido de entrega había empezado para Mai. Solo bastó colocarse el casco & rectificar que la mercancía estuviese completa. Al darle el último visto a las direcciones, armó en su mente un croquis en el cual haría de su ruta más óptima —Listo, aquí vamos.—La mujer partió atenta a los señalamientos de tránsito, semáforos & demás. Al acelerar & con la ligereza del aire revoloteando su corta melena, pensaba que el tener un empleo honrado & una vida tranquila, no era tan malo después de todo. Qué le costaba a Su Excelencia poner los pies sobre la tierra y llevar así una cotidianidad pacifica. O ella incluso desde hace años haberse independizado para continuar por su cuenta.
Fue así, que mientras el oleaje acariciaba sus mejillas, en un parque situado a su costado quemaban un bulto de hojas secas; el sentimiento de nostalgia le abordó al percibir ese aroma otoñal. Pues bien sabían que en estos instantes era muy probable que estaría al lado del Brief. Sin embargo, a veces las circunstancias no son del todo agradables, era consciente que tenía que seguir y que el tiempo iba a menguar el dolor algún día, hasta que desapareciera por completo. El color rojo le advirtió & tuvo que frenar para dejar que los automóviles del otro carril avanzarán. En eso, sus ojos captaron el cómo cruzaba la avenida una limusina con el logotipo de la Corporación Cápsula: se petrificó. Tragó saliva, los nervios llegaron a su estómago y pudo observar al joven. O más bien, parte de su silueta desde el cristal de la ventana. Él iba de brazos cruzados observando el camino que tomaba su chófer.
El corazón simplemente se le apachurró. Tenía tantas ganas de ir corriendo & decirle: "Lo siento, lo siento muchísimo" pero la inmovilidad de su cuerpo junto con el sentimiento de culpa, se lo impidieron. Fue así, que solo sus orbes captaron el cómo la limusina se marchaba.
—Trunks...—susurró su nombre & después del sonido del claxon del vehículo de atrás, le hizo reaccionar que el semáforo ya estaba en verde «¡Dese prisa, mujer!» le gritaron & ésta rápido continuó con su camino.
.
.
Sola hacía falta la última entrega del día. Mai estacionó la motocicleta & al abrir un botellón de agua bebió de ella—Pero qué día...—esbozó ante el cansancio & la fatiga. Así que por motivo de que había mucho tráfico optó mejor por cruzar la avenida caminado & hacer entrega del paquete personalmente.
Con bolsas en brazos se fue a colocar justo al inicio del cruce peatonal, tenía que esperar la señal para poder cruzar. Sin embargo, aturdida por el tráfico & la gente, no se dió cuenta que en la segunda fila de autos estaba en espera la limusina de la famosa empresa.
El holograma en movimiento le dió a sus peatones la oportunidad de disponer de 20 segundos; entonces, Mai cruzó. Y él, quien se mantenía leyendo un libro, elevó la mirada & la reconoció al instante. Esbozó en un susurró su nombre—Mai...—& sus bellos ojos azules protegidos por el armazón grueso de los anteojos, la observaron a detalle. Se dió cuenta que llevaba unas bolsas sobre los brazos, así como la sencillez del atuendo que le vestía. Pudo percibir el "dije" de la Estrella Roja rodeando su cuello y la misma se revoloteaba en el aire al compás de su corta melena; en su rostro ni una pizca de maquillaje resaltaba. Sin embargo, pudo notar la tristeza en su faz. Fue así, que de nueva cuenta, susurró un—¿Qué haces, Mai?
—Disculpe, Señor Brief, ¿ha ordenado algo?—cuestionó el chófer con la mirada en el retrovisor.
—A-Ah, no... discúlpame, por favor—el hombre tras asentir continuó con el trayecto justo cuando el verde lo indicó.
.
.
.
Los mismos días que tenía sin hablar con Trunks, era la misma jornada que tenía sin dirigirle la palabra a Pilaf. Así que para llevar una estadía tranquila, optó por situarse en otra parte del almacén, llevó su cama, el viejo ventilador & demás artículos personales a su nuevo aposento. E incluso, hasta tuvo que ingeniárselas en hacer funcionar una televisión de antaño e improvisar una cocina con la ayuda de una parrilla eléctrica. Misma, que tenía la misión de hervir el agua para la sopa instantánea que comería dentro de poco.
Al situarse en la cama con las piernas cruzadas, y en medio de ellas, aguardaba el vasito de sopa; juntó ambas manos para agradecer por la cena —Buen provecho— Y así, degustó de los sabrosos fideos & de un que otro trozo de carne. Entretanto, dirigió su mirada en la pequeña ventana de la pared; observó el cielo estrellado & pensó en él: en el amor & la culpa que le aturdía aún, pues deseaba con todo su ser sanar, o en todo caso, llegar a una serena resignación para calma de sus sentimientos; no negaría que lo extrañaba demasiado.
—Quisiera que todo hubiese sido diferente...—le dijo a la nada. Más luego llevó a su boca un probado de la pasta.
.
.
.
Nada novedoso era para él el llegar y saludar a la soledad de sus paredes. Si no fuese por el pequeño encanto de Tama Tercero, sería demasiado abrumador estar ahí—Hola, amiguito—saludó & tras atender a la única creatura que le mostraba bondad, se fue a tomar una ducha en un santiamén; deseaba con toda el alma quitarse ese aburrido uniforme lo más rápido posible. En pijama, & sobre su cama, en compañía de un que otro refrigerio, trató de buscar algo qué ver en la televisión, quería mantener la mente ocupada para no caer en el recuerdo. Sin embargo, siempre fallaba, ¿y cómo no iba fallar? Si estaba en la suavidad del lecho en dónde se habían amado, en dónde se suponía que habían sido sinceros con ellos mismos. En dónde en sus ojos pudo ver la verdad & encontrar el amor que tanto había esperado. Y eso lo abrumó. Lo hizo del tal manera que hasta sintió un hueco en el estómago, pues si bien su departamento fue el testigo de su gran amor & por desgracia también testigo de la verdad, le provocaba una revoltura de sentimientos que le hacían sentirse extraño & bastante confundido.
Y no se pudo resistir al hecho de tomar su celular para revisar & releer cada mensaje de parte de Estrella Roja. Y algo, a lo que "según intuía", era que Más allá de las letras él pudo sentir mucho más que simples frases, de eso estaba seguro, si no era un tonto. Y no conforme, lo sintió en cada beso, en cada mirada, y en el timbre de su voz; lo confirmó con sello de garantía cuando se hicieron el amor en esa noche plateada. Entonces, se preguntaba en su interior: ¿qué era lo que había pasado en realidad? ¿quién era ese extraño hombre? E incluso, cuando ella trató de explicarle todo detrás de la puerta, percibió que en verdad se sentía afligida. Sin embargo, al creerse engañado solo le dijo "Vete". Fue así, que al acostarse por completo en su cama con los brazos extendidos, cerró los ojos y a media voz dijo—¿Qué rayos pasó...?—acompañado después de un hondo & sentido suspiro, pues en definitiva, & pese a todo: la extrañaba.
.
.
.
Un mes se había cumplido & la monotonía revistió sus escenarios por cada día transcurrido. Pues para ambos era despertar, vestirse, trabajar, volver a casa & dormir. Al día siguiente volvían a despertar. La añoranza les acompañaba en su jornada: él firmaba documentos, ella acomodaba latas en las estanterías del supermercado. Y al final del día, se extrañaban; el insomnio les saludaba & cuando éste se hartaba de ellos, se dormían.
—O-Oye Mai ...Shu & yo hicimos algo delicioso para comer. Así que me preguntaba si deseabas un poco de ...—Mai pasó de largo ignorando por completo al hombre que llamaba Su Excelencia. Al principio Pilaf creyó que solo se trataba de un simple capricho de su parte. Pero los días pasaron, y el hecho de que ella le ignorara le estaba cobrando factura. Para él, Mai, era un complemento importante en su clan, pues no podían ser dos, ¡Eso nunca! Ellos tenían que ser tres por siempre & para siempre. Extrañaba su tenacidad.
—¿Sucede algo, Mi Señor Pilaf?—preguntó Shu al hombresillo verde tras verle serio.
—No. Nada.
.
.
.
—Señor Brief...—se comunicaba su asistente personal desde el intercomunicador.
—¿Qué sucede, Rita?—contestó, el solicitado.
—Bueno, verá...en la otra línea hay alguien muy insistente que desea comunicarse con usted. Solo que no logro distinguir exactamente quién es; su voz es demasiado rara.
—¿Alguien extraño...?
—Si usted gusta le puedo decir que no se encuentra disponible, Señor Brief.
Trunks al sentir un poco de curiosidad, tomó la llamada—No te preocupes, Rita, creo que puedo manejar esto bien. Gracias.
—Entonces enlazaré la llamada.
—De acuerdo—al entrar la llamada el empresario lo primero que dijo, fue: —¿Diga...?
.
.
.
El acomodar latas y otra variedad de mercancía, era parte de sus labores diarios—¡Uff~~!—expresó tras poner una caja pesada en el piso—Ha habido mucho trabajo, eso me da gusto—sonrió, pues mantener la mente ocupada era su pasatiempo favorito.
—¡Oye, Mai!—le gritó Hiroshi desde el área de cajas.
—¿Sí?—volteó hacía él—¿Qué sucede?.
—Hay alguien en la banqueta preguntado por ti. Dice que si puedes salir unos segundos a charlar.
—¿Qué...? ¿alguien en la banqueta?
—Así como lo oyes.
«¿Quién rayos será?»—se preguntó a sí misma y luego, contestó:—Salgo en un momento, iré a lavarme las manos.
—Claro, yo aviso.
.
.
.
Mai salió, volteó para todos los lados & no miraba a nadie—¿Qué clase de broma es esta?—se sintió un poco irritada.
—Estoy aquí.
—¿Eh...?—y vió al hombresillo verde detrás de un poste—¡¿P-Pero qué hace aquí, Su Excelencia?!
—Solo vine a saludar.
—¡¿A SALUDAR?!—la situación para Mai parecía un mal chiste, pues después de todo vivían en la misma casa.
—Quiero que me digas cómo te sentiste con lo que pasó con Trunks.
—¿C-Cómo dice...? N-No comprendo...—más pronto frunció la mirada al pensar que se trataba de alguna tontería de su parte, Fue así, que mostró sus dientes furiosa & alzó la voz—¡YA VA A EMPEZAR CON LO MISMO OTRA VEZ! ¡¿ENSERIO QUIERE VOLVER A ESCUCHARLO?!.
—Sí, así es.
Apretó sus puños debido al coraje, y en voz alta, le dijo:—¡PUES ME SIENTO MAL! ¡Me siento arrepentida y jamás me perdonaré el haberle hecho daño! ¡Yo nunca pensé que esto se iba a salir de control! ¡Jamás creí que llegaría a conocer a alguien tal bello & mucho menos pensé que me enamoraría de él! ¡Y eso duele & duele mucho! —lágrimas salían de sus ojos—¡He trabajado duro todo este mes para retomar mi vida fuera de todo plan absurdo a su lado! ¡En pagar las consecuencias de mis actos! ¡Como también he luchado con todas mis fuerzas para no ir a buscarle y no escribirle más!
—¿Entonces estás arrepentida? ¿Lo amas?
—¿Qué...?—agachó la cabeza. Y en voz serena, contestó un tanto desorbitada—Por supuesto que estoy arrepentida & yo...
—¿Ajá...?
—Yo lo amo...
—¿Qué? ¿qué dices? No logro escucharte, Mai. ¡DILO MÁS FUERTE!
La de paliacate se molestó de nueva cuenta. Así que en voz alta, le dijo—¡LO AMO! ¡LO AMO! ¡LO AMO! ¡LO AMO COMO JAMÁS AMÉ A ALGUIEN! ¡¿SATISFECHO?!
—Claro—& la mirada de Pilaf sobrepasó a Mai—Ahora creo que sí alcanzó a escuchar.
—¿C-Cómo dice...?
—¿Así que me amas? —preguntaron a sus espaldas. Ese timbre de voz era muy conocido para ella; su corazón palpitó a mil por hora. En eso, Pilaf divisó la escena por un instante, pues él había sido el causante del improvisado encuentro «¿D-Diga?» de pronto una voz amenazante, le dijo: «¡Escúchame Trunks Brief! ¡Tienes que ir a la dirrección que te voy a proporcionar y más te vale que no me dejes plantado!»; enmendado su error, continuó con su camino pues el resto les correspondería a los jóvenes arreglar. Por lo que ahora, su famoso clan ya no se conformaría de dos sino de nuevo serían tres, como en los viejos tiempos. Tal & como los tres mosqueteros: "uno para todos & todos para uno" Solo que ahora con lo diferencia de que existiría la tolerancia en su mandato & dejaría, aunque sea un poquito, esa supremacía que lo caracterizaba tanto. Pues un buen líder, al final de cuentas, tiene que ver por los suyos y no poner en juego su felicidad.
—Mi Señor Pilaf...—Mai entendió perfectamente la disculpa; sabía bien que Su Excelencia era muy orgulloso y que de su boca jamás saldría un "Lo siento" pero la acción valió más que mil disculpas. Entonces, ella volteó lentamente & descubrió que Trunks estaba a sus espaldas; de la impresión de haberle visto, llevó sus manos a cubrir sus labios.
—¿Me amas?—preguntó de nueva cuenta el trajeado.
Entre lágrimas y con ambas manos cubriendo sus labios, asintió una & otra vez, hasta que le contestó:—Te amo...
—Y yo te amo a ti, mi querida Estrella Roja.
Mai le dirigió la mirada & tras observarse breves segundo, llegó el abrazo que les reconfortó. Pues si bien, cuando las palabras son pocas o no se encuentra qué decir, solo basta el abrazar; el abrazar fuerte para decirse todo hasta que sus protagonistas se hicieran de la voz.
—Te extrañé. Te extrañe tanto, Mai—le daba múltiples besos en eso rostro, en sus labios—Te pido disculpas por no haberte dado la oportunidad de explicarme qué había pasado, lo siento tanto. Soy un idiota, un tonto. Debí de escucharte.
—No, no lo eres. Todo fue mi culpa por no ser sincera contigo desde el principio. Perdóname tu a mi, por favor.
—No hay nada qué perdonar—el abrazo se intensificó. Y cuando tuvieron fuerzas & ánimos, el joven le preguntó:—¿Nos vamos a casa, mi amor?
—¿A c-casa...?—sin embargo, ella hizo conciencia de que estaba en horario laboral.
Pero entonces, Hiroshi, quien fue testigo de tan emotivo momento, intervino—Adelante Mai, ve con él. Le diré al jefe que tomarás la tarde libre.
Ella asintió con gusto—Gracias Hiroshi—& se fue a los brazos de su gran amor.
—Descuida Mai, de ahora en adelante yo me encargaré de ti. Te prometo que jamás te dejaré sola & te apoyaré siempre en lo que desees continuar, ya sea aquí o en cualquier otro lugar o proyecto.
—Gracias Trunks...
Los que alguna vez fueron TB-Ouji & Estrella Roja, continuarían su camino tomados de las manos; aún tendrían muchas pendientes por cumplir: en la cama, en la bañera, bajo la luz plateada de la Luna, o incluso, en el lugar más recóndito del mundo. Aunque ciertamente el lugar no importaba pues lo único que deseaban era compartir todos los días de su vida despertando juntos & coincidiendo infinidad de veces una & otra vez sin importar en qué forma: solo bastaba el concicidir. Comprendieron entonces, que las curiosidades del amor eran bastante complejas, y la mismas, llegaban por diferente vías a sus destinatarios. Ya sea por un saludo, por una mirada o Más allá de las letras. Pues el amor de cada uno de ellos, era su propia existencia en su vivir.
El tiempo siempre será el mejor autor para todos los momentos catastróficos, pues buscará con su lenta pero muy efectiva fórmula la manera de enmendar todo daño & malentendido; aunque si bien, la sinceridad es un gran valor que tiene que ir por delante en todo momento sin pretextos; los que están destinados a estar juntos, juntos terminarán. Así que en reconciliación & por una vida por delante supieron desde el primer "Hola" que habían caído en el lugar correcto.
Ahora serían ellos: los auténticos "Trunks & Mai" sin el disfraz de sus seudónimos. Los mismos que se amarían & se respetarían e incluso Más allá de las letras.
FIN
.
.
.
NOTA DEL FINAL:
Hola ¿Cómo están, queridos lectores? Espero que todos estén muy bien. Estoy muy contenta por haber terminado este sencillo & pequeño trabajo. Pese a no ser muy largo fue muy significativo para mí, ya que desde hace algunos años no me daba la tarea de escribir un longfic. Sé que es pequeño en comparación a otros trabajos anteriores, e incluso hasta me había prometido a mí misma en no hacer más fanfics de este formato, y miren, aquí estoy xD
Lo que se supone que iba a ser un simple One-Shot, se convirtió en esta historia de seis capítulos, de los cuales, disfruté mucho durante su elaboración. Hacer un long que tuviera de protagonistas al Trumai GT me pareció bastante atractivo. Por lo que espero que este sea el primero de muchos que estén por venir por parte de otros grandes Fickers en el fandom, o bien, si en algún momento me brinca el "chispazo artistico", con gusto también podría seguir contribuyendo en él.
El Trumai GT al tener muy poco contenido en el mundillo de los fanfics, me dió la sensación de que le faltaba mucho amor & apreciación por parte de todos los fans de esta pareja. Por lo que decidí diseñar los últimos One- Shots a ellos como éste longfic; sumándole, que al menos para mí, el Trumai GT tiene un auténtico encanto que me fascina. Espero poder seguir escribiendo más sobre esta linda pareja. Ojalá cosas interesantes me brinquen a la mente.
Y bueno, para los que llegaron hasta aquí, lo agradezco & atesoro muchísimo su esfuerzo ¡Así que muchas GRACIAS por haberme acompañado una vez más!
A los grupos, páginas & comunidades que tienen le gentileza de compartir mis trabajos, muchas gracias. A los lectores en Wattpad como a los que me dejan comentarios, ¡Gracias! A mi querida comunidad de lectores silenciosos en Fanfiction [¡Hola otra vez XD!] espero algún día se animen a saludarme. A los que siguen mi fanpage de "Kuraudea Rorena" y reacciona con mucho amor a cada publicación de actualización, ¡Gracias, gracias, gracias!
Saludos especiales a Sho, Lya, Shirley, Silbermond, Nancy, Rot Ten Tiger, Kya, K.L Angelo, Heaven, Inmary, Aliza Morgan & a mi amiga Bren por si se de casualidad anda por aquí, & a un querido lector que me ha estado escribiendo últimamente por Wattpad: Máximo Leguizamon ¡muchas gracias!
Les mando un fuerte abrazo a todos (quiero que TODOS sientan ese gran abrazo de oso) & mi total agradecimiento. Desde el corazón: muchas gracias.
Dedico esta historia a mi gatita "Blanquita" quien tenía seis años a mi lado, y que durante el proceso del fic, cruzó el arcoiris. Al igual que al pequeño cachorro callejero que acogí: "Terry" víctima del parvo. Los extraño, pero algún día nos vamos a encontrar. Y no solamente los veré a ustedes sino a todo mi gran zoológico de amados peludos que se me adelantaron.
Y bien, pues estamos en el mejor cuatrimestre del año, ¡Yeiii~~!¡A disfrutar de los festejos! Me adelanto con un "¡Viva México!" para todos mis paisanos mexicanos & por supuesto les deseo mucha salud & bendiciones a cada uno de ustedes.
Cariños por siempre:
Kuraudea.
¡Nos leemos pronto!