Encuentros.


Sabía perfectamente que estaba mal, desde que sus ojos cielos se fijaron en ella por simple capricho, para alimentar su ego, volverse a sentir como ese adolescente indomable o simplemente porque se encontraba aburrido de la rutina diaria que había adquirido su vida. Porque se dio cuenta que ya no era un joven de diecisiete años, sino un hombre adulto de casi veintinueve años, alguien que según su Clan ya debería haber desposado a una hiciera poderosa incluso a estas alturas convertirse en padre por lo menos de un futuro heredero; pero no esos nunca fueron sus planes, no después de su pelea con Fushiguro Toji, la muerte de Riko y por último la muerte de su mejor amigo. Donde él no volvió a hacer el mismo, nunca.

Sus ideales era cambiar esas ideas arcaicas de los altos mandos, que las nuevas generaciones no sean solo piezas de ajedrez dispuestos a dar su vida. Querer reconocer que para ser hechicero se necesitaba un grado considerable de locura de soportar lo que se enfrentarían incluso sobre las ordenes de esos vejestorios, todo eso y más tenía planeado, pero ahora solo se encontraba sumergiéndose a ese mar de sensaciones que le regalaba esta joven de cabello cian.

- M-Mas rápido, Satoru-san. – dirigió su mirada a aquel rostro sonrojado mientras seguía moviéndose dentro del paraíso que le regalaba su entrepierna. – P-Por favor….

Su sonrisa se amplió al ver como pequeñas lagrimas caían en la mirada nublada de placer de ella, de detallar como sus caricias bruscas quedaban marcadas sobre su piel blanca, como apretaba las blancas sabanas de ese hotel que había reservado como tantas veces.

- ¿Dijiste algo, cariño? – su tono de voz fue divertido y más aún al detener sus movimientos viendo como la respiración de ella se agitaba mas mientras arrugaba el entrecejo, seguramente insatisfecha. – Creo no haberte escuchado, bien.

Su tono cantarín hizo que las mejillas de la ojiazul adquirieran más tonalidad, más aún contando en el momento en que el peliblanco se encontraba bromeando. Aparto su mirada, no deseaba observar la sonrisa llena de orgullo del hombre.

- D-Dije que quería más. – susurro pero su tono fue lo suficiente entendible.

- No te escuche. – bajando su rostro cerca del oído. - ¿Por qué no me convences con tus palabras de niña grande?

La piel de la joven se erizo al sentir como la lengua de él hacia un trayecto de su cuello hasta sus labios, donde le daría acceso para comenzar una pelea con sus bocas siendo siempre Satoru el ganador. Cuando se separaron noto el hilo de saliva que los unía, pero en estos momentos se encontraba tan excitada que su pudor quedo en segundo plano.

- Satoru-san por favor…- cerro los ojos para volverlos a abrir rápido encontrándose con el contraste de azul de él quedando prendada como la primera vez que lo vio. – Quiero que me folles más duro.

Decía rápidamente esas palabras por la pena ya que fue adquiriendo ese vocabulario en cada encuentro con el peliblanco, ganándose así una sonrisa salvaje de Gojou que se incorporó en sus rodillas llevándose consigo el cuerpo de ella y comenzar a embestirla más fuerte ganando un gemido de sorpresa por parte de la ojiazul.

- Así. – maravillado por ver como su miembro se perdía en el sexo de la ella. – ¿O quieres experimentar nuevamente lo otro?

Abrió sus ojos nublados de deseo, pero negó rápidamente ante la idea de que Satoru y ella repitieran esa posición o más bien el lugar en específico que excitaba al hombre. Recordándole el dolor que la atravesó al sentir en su entrada trasera, sorprendida de las capacidades del hombre en la cama y como en cada encuentro buscaba la forma de hacer más placenteros sus encuentros.

- N-No así… ¡espera!. – grito al ver como Gojou salía de ella para voltearla y alzando sus caderas acercando su miembro en los pliegues de su intimidad provocando un gemido insatisfecho.

- Tranquila. – mordiendo su hombro. – Por el momento solo haremos lo tradicional, la próxima semana podremos poner en marcha esas lindas esposas que compre junto con ese traje de colegiala.

Y sin previo aviso volvió a entrar en ella viendo como el sudor brotaba de su piel, como recargaba su cabeza en la almohada de seda ocultando su rostro sonrojado con la serie de gemidos que salían de su rosada boca y excitándose demasiado de la forma en que su nombre salía de ellos.

- Eres demasiado linda. – perdiendo el control y sintiendo que llegaba en lo más profundo de su interior. – Tan buena y linda que me dan ganas de quedarme así contigo siempre.

Las roncas palabras de Gojou erizaron la piel de ella, más porque sentía lo mismo, desde aquel accidente en esa misión que los uniría de forma intima no había noche ni día en que no deseara o anhelara en sentir las caricias, besos, mordeduras e incluso las palabras obscenas del hombre que admiraba y que con el tiempo aprendió amar.

- S-Satoru estoy al límite…por favor. – eso lo sabía perfectamente, el sexo de ella comenzó a apretarlo más haciendo más difícil su tarea.

Incluso su miembro también estaba a punto de explotar, con una mano enderezo el cuerpo de la joven cian quedando ambos de rodillas en la amplia cama contemplando en ese espejo como sus cuerpos perdían sincronía alguno por sus embistes más rápidos y necesitados de ella, como sus senos brincaban a cada movimiento, además de fijar como el menudo cuerpo de esa adolescente se complementaba aun con esa diferencia de estatura demasiado notoria.

- Beso. – ordeno Gojou besando su cuello, entonces ella volteo un poco para besarlo como él le había enseñado, ambos sus bocas se debatían así como la unión de sus sexos.

Pero no fue hasta que el gemido placentero de ella hizo que se separara centímetros de su boca contemplando nuevamente hipnotizado como llegan al orgasmo juntos depositando su semilla en las paredes internas de esa joven que lo miraba como lo más hermoso del mundo, como un héroe o ejemplo a seguir. Pero sobre todo lo que Miwa Kasumi aquella estudiante de segundo año de Hechicería veía en él…al ser humano, porque alguien tan cuerdo y puro como ella no se dejaba guiar por espejismos, ella era autentica, noble y por extraño que pareciera en su mundo: Ella tenía todos sus tornillos en su lugar, sin un gramo de locura.

- Cada día lo haces mejor. – viendo como después de elevarse ambos al cielo, nuevamente venia la faceta tímida de ella.

- Gracias…supongo. – respondió con una sonrisa amable. – Creo que se debe porque he tenido muy buen sensei.

Ambos cuerpos fueron recostándose lentamente en la cama, Satoru salió de su interior mientras depositaba su espalda en la suavidad de las cobijas llevándose consigo el cuerpo de Kasumi, ambos sudorosos por su reciente actividad y al escucharla su sonrisa se amplió orgulloso.

- Eso es cierto. – depositándole un beso en la frente. – Pero posiblemente sea mejor incrementar las clases de reforzamiento, ¿no lo crees, Kasumi-chan?

Delineando con las yemas de sus dedos los hombros de Miwa, quien simplemente asintió.

- Creo que por primero vez en la vida, podre agradecerle algo a Utahime.

Kasumi enarco una ceja sin comprender, pero al sentir nuevamente el cuerpo de Gojou Satoru sobre ella.

- Ya que sin gracias a esa misión, ni tu ni yo estaríamos en estos momentos disfrutando de estos encuentros tan placenteros.

Volvió a besarla mientras ingresaba de nuevo, sin importarle el cansancio o que ya lo hubieran hecho dos veces más, lo único que necesitaba Gojou Satoru era disfrutar segundo a segundo lo que Kasumi le entregaba en esos encuentros, sin imaginar que dentro de poco Shibuya los esperaba a la puerta de la esquina.


Hello nuevamente, se que no es una actualización de mis anteriores historias GojoxMiwa (prometo pronto actualizar), pero la verdad ultimamente se me han venido a la mente pequeños oneshot con diferentes tematicas. Ya tengo en mente unas cinco, sin embargo tambien estoy abierta a varias posibilidades que me comenten o que tipo de tematica les gustaria en un Oneshot, puede ser tierna, romantica (aunque con Gojo gana mas lo pervertido que romantico XD), tambien puede incluir lemon, etc.

Muchas gracias por acompañarme en esta travesia de esta linda shipp, ademas de su apoyo incondicional en cada una de mis historias.

Besos y abrazos.

TheOtherDestiny :)