Capitulo 28 y medio: la princesa y el zorro parte 1

-mamá puedes venir?, boruto me esta molestando-la chica de cabellera corta y ojos perlas suspiró desde la habitación de arriba, dejó de meter la ropa limpia a los cajones y bajó para ver que pasaba con sus hijos

-no boruto suéltalo ya-escuchó a su hija gritarle a su hermano desde la cocina

-ya te dije que yo lo agarre primero, solo lo quieres por que viste que yo lo quería-ahora era la voz de su hijo

-no es verdad-

Cuando entró a la cocina vio con frustración como sus dos hijos se pelaban por el ultimo pudin que ella había guardado para si misma, le entristeció pensar que ahora no podría comerlo

-basta niños, solo compártanlo y ya-los dos entrecerraron la mirada hacia el otro

-no es justo mamá yo lo tomé primero y hima solo lo quiere por que yo lo tomé-hinata sintió la molestia crecer cuando la puerta se escuchó siendo abierta, se alivió al reconocer los pasos de su esposo

-hinata-chan, ya llegué, que hay de comer? -naruto se asomó por el lumbral de la puerta y hinata pudo ver ese brillo cansado al ver que había llegado en un momento complicado-que esta pasando aquí? -preguntó acercándose a hinata y dándole un beso en la mejilla, ella sonrió ante ese gesto

-papá boruto no quiere darme mi pudin-exclamó la oji azul

-pero ya te dije que es mío-exclamó ahora el rubio, naruto analizó la situación y después miró a hinata

-que ese no era el pudin que guardaste para después? -hinata sonrió al ver que su esposo recordaba eso, asintió y naruto frunció el ceño

-muy bien niños dejen eso en el refrigerador, ese pudin su madre lo reservo para ella, ustedes comieron los demás así que basta de peleas-los niños miraron a su madre en busca de ayuda-no me escucharon? -los niños suspiraron y se resignaron a dejar el postre donde estaba-bien ahora vayan a darse una ducha y a dormir-ordenó naruto y hinata lo apoyó con esa orden

Hinata entró a su habitación, después de dormir a los niños ahora quería pasar un momento con su esposo, con el cual no había tenido intimidad en 7 meses y que no había visto en una semana, naruto iba saliendo de la ducha cuando hinata entró

-creí que me esperarías para tomar un baño- dijo un poco decepcionada

-perdón hinata, pero estoy un poco agotado, solo quiero dormir un poco-hinata quería decirle que lo necesitaba, que necesitaba a su marido al menos de manera intima esa noche pero no se atrevió, nunca se atrevía a decir nada, lo vio acostarse para caer dormido al instante, sonrió con amargura y se metió a dar un baño, cuando salió se recostó a su lado, esperaba que en sus sueños la vida no fuera tan monótona

Abrió sus ojos, no recordaba cómo había llegado a ese prado en el bosque, pero por alguna razón no se sentía asustada ni agobiada, enfrente de ella se encontraba un manantial muy hermoso y azulado, se acercó para poder comprobar la temperatura del agua si embargo el sonido de algunas hojas moviéndose la hizo voltear a donde venia el ruido, miró con un poco de angustia como algo parecía irse acercando cuando de pronto un pequeño zorro saltó de entre las hojas, hinata retrocedió del susto, el zorro mostraba sus dientes a la defensiva y hinata estuvo a punto de correr cuando notó una mancha de sangre en la pata trasera del pobre animal

-esta herido-dijo tratando de moverse para ver mejor, pero el zorro solo le gruñó mas fuerte-no voy a hacerte daño, pero debo curar tu herida puedo hacerlo-dijo mostrando un poco de chacra curativo pero este no desistió, hinata decidido sentarse para que así el pequeño animal no se sintiera intimidado con su altura pero este no dejó de gruñir, hinata suspiró y no se movió hasta que después de muchas horas el zorro dejó de gruñir, hinata pudo ver como miraba la luna con preocupación y cojeando con su pata herida se alejó de ella adentrándose al bosque

Hinata abrió los ojos con pesadez, miró a su lado y naruto ya no estaba, como cada mañana, amaba a su esposo y sabia que el la amaba pero ser hokage era un trabajo de tiempo completo que afectaba un poco su vida familiar, se levantó para hacerles el desayuno a sus hijos, los despidió cuando salieron para irse a la academia ninja, regresó a la cocina para limpiar la mesa pero entonces recordó su sueño, por alguna razón se sentía cansada, era como si no hubiera dormido nada, sintió un poco de lastima por ese zorro

Cuando la noche cayó naruto también volvió, lo que le extrañó

-vaya viejo es la primera vez que estas dos días seguidos en casa-dijo boruto

-esta semana adelante trabajo para poder estar viniendo a casa boruto-hinata pudo ver que aun que su hijo parecía molesto por dentro le alegraba tener a su padre con ellos, todos cenaron y en la noche hinata volvió a suspirar al ver dormir a naruto después que ella durmiera a los niños

Se recostó con el como la noche anterior y dejo que Morfeo la abrazara cayendo en su mundo de sueños

Cuando abrió los ojos se encontraba de nuevo en el mismo prado frente al mismo claro, inconscientemente busco al pequeño zorro pero no lo vio, miró al cielo era de noche la misma noche en la que había dejado su sueño anterior, se alarmó al ver en el piso rastros de sangre fresca, se levantó y decidió seguir el rastro sin darse cuenta que poco a poco dejaba el prado para entrar a la oscuridad de ese lugar, en algún punto el rastro de sangre desapareció y fue cuando pudo ver en el lugar donde se encontraba

-oh no, donde estoy? -preguntó al aire sin embargo un quejido la hizo distraer su atención, otro quejido seguido de otro la hizo caminar hasta donde provenía, se llevó las manos a la boca al ver el cuerpo de su esposo desnudo recargado en un árbol, su brazo estaba con un corte vertical

-oh dios naruto, que te pasó?, naruto despierta, háblame por favor-pidió agachándose para poder recargarlo en su cuerpo

-eres ruidosa-hinata se apartó del cuerpo al escuchar una voz totalmente diferente a la de su esposo, cuando naruto abrió los ojos se quedo de piedra, eran esos ojos que naruto tenia cuando usaba el chacra del zorro de nueve colas

-naruto?-preguntó sin embargo la mirada que el le daba era demasiado aterradora como para querer acercarse-eres naruto?-preguntó, el rubio se levantó con dificultad, parecía algo débil, pensó en el rastro de sangre, seguro había perdido mucha sangre y ahora estaba cansado, y por lo que podía ver su brazo seguía goteando

-eso parece-dijo señalando su cuerpo con el brazo sano

-déjame ayudarte con eso-hinata se acercó poco a poco pero naruto solo le mostró los dientes y con una alarido en palabras le gritó

-solo lárgate, no se cómo lograste entrar aquí, pero si no te vas voy a devorarte-hinata detuvo sus pasos y al ver como naruto se acercaba a ella solo salió corriendo, corrió y corrió hasta que para su alivio llegó al claro nuevamente, cuando recuperó la respiración todo se tornó negro

La luz solar que se colaba por la ventana la hizo arrugar los ojos y la frente, estiró la mano para poder tocar a naruto pero no se sorprendió de notar ese espacio vacío

-me lo imaginaba-dijo al aire y se levantó a ducharse, sus hijos no iban a la academia ese día y quería un momento sola por la mañana antes que se levantaran, mientras sentía las gotas del agua en su cuerpo recordó ese sueño, de verdad había soñado con naruto intentando comerla?, sacudió su cabeza, era imposible que naruto fuera de esa manera alguna vez con ella, se despabiló un momento y cuando bajó pudo ver a su hijos mirando la televisión

-creí que despertarían mas tarde-boruto y himawari se miraron entre si confundidos

-mamá de que hablas?, ya son las 12:30-hinata miró alarmada el reloj de pared y su hijo tenía razón, ¿como había podido dormir tanto tiempo?, ella jamás se levantaba tan tarde y ¿por qué seguía sintiendo como si no hubiera descansado nada?

-lo siento queridos, ahora mismo les preparo algo de comer-himawari negó con la cabeza

-no te preocupes mami, papi nos dio de comer antes de irse, nos dijo que te dejáramos descansar-eso si la sorprendió, naruto había hecho de comer?

-oh, entonces me podrá a preparar el almuerzo-sus hijo siguieron viendo el televisor y hinata entró a la cocina, el día volvió a pasar sin contra tiempos, naruto llegó temprano y convivieron como familia, eso parecía mejorar en esos días, sin embargo su matrimonio como tal seguía estancado, no sabia que hacía naruto últimamente que lo tenia tan cansado como para dormir en cuanto su cabeza tocaba la almohada

Hinata despertó de nuevo en el prado, y por alguna razón ahora era totalmente consiente de que estaba dentro de sus sueños, ahora era de día y a lo lejos acostado y aparentemente dormido vio a aquel zorro malherido, su pata ya no sangraba pero se veía que no había sido tratada, hinata quiso acercarse pero también temió que el zorro despertara y la mordiera, entonces a su mente vino la imagen de naruto herido y sintió lastima de ese pobre animal

Se acercó con sigilo con cuidado de no pisar nada que pudiera despertar al zorrito, una vez que estuvo cerca acercó sus manos y uso un jutsu de curación, vio con alegría como la herida comenzaba a cerrar dejando solo una mancha de sangre como prueba de lo que alguna vez fue una herida

-grr-el gruñido a lado de ella le hizo mirar con terror al zorro que ahora se encontraba despierto mostrando los dientes y con el pelaje en crispado, hinata se paralizó de golpe, el aura de ese animal era tan fuerte que la tenía inmóvil, el zorro sin dejar de verla bajó su hocico para oler su pata y lamer donde anteriormente estaba su herida, se le notaba confundido

-yo lo cure, lamento hacerlo sin tu consentimiento-dijo hinata, el zorro miró el cielo y como si fuera impulsado por un resorte comenzó a correr adentrándose al bosque, hinata miró al cielo dándose cuenta que comenzaba anochecer, se levantó corriendo tras el zorro

-espera, espera, quiero ayudarte, oye-pero el zorro naranja no dejaba de correr, durante la persecución hinata no dejó de ver al zorro alejarse de ella, pero en algún momento este se detuvo en medio de bosque, hinata al fin recuperó un poco el aliento, la imagen del zorro mirando la luna la conmovió, era una escena hermosa, el zorro era iluminado con la luz lunar dándole un aspecto fantástico y cautivador a su entorno, pero entonces la silueta del zorro comenzó a cambiar, se volvió más alta y estética, mas fuerte e imponente y hinata pensó en el error que había sido seguir a ese zorro, pues cuando esos ojos rojos se posaron sobre ella todo su cuerpo se erizo y sin pensarlo dos veces corrió lejos de ahí

¿Que estaba pasando?, ¿acaso el zorro se había convertido en humano?,¿como era eso posible?, escuchó los pasos apresurados detrás de ella, el la estaba siguiendo, intentó activar su línea sucesora pero no podía, como era posible usar jutsus médicos, pero no su byakugan?, ese sueño era extraño, entonces se detuvo

-eso es-dijo pensativa escuchando los pasos mas cerca de ella-es un sueño-volteó enfrentando a la bestia detrás de ella -no puedes herirme-en ese momento la criatura se quedó estática frente a ella y hinata pudo ver de nuevo a naruto, totalmente desnudo y con esos ojos carmesí-naruto?, tu, tu eres ese zorro?-pero el no respondió, entonces una idea descabellada le cruzo por la cabeza-k-Kurama?-este entrecerró los ojos respondiendo al nombre-eres Kurama?-el se acercó a ella quedando solo a unos centímetros de ella

-no se que haces aquí, pero no es un lugar donde los humanos puedan entrar, así que lárgate y no te vuelvas a aparecer-hinata estaba confundida

-cómo no podría entrar en mi sueño-Kurama elevó una ceja sin cambiar su seria expresión

-crees que esto te pertenece, aquí solo puedo entrar yo-Kurama le tomó del cuello con fuerza y hinata sintió como el aire comenzaba a faltarle-no se por que sigues viniendo pero eso se acabó, podre ser amigo de tu hombre pero no te voy a permitir invadir mi mente-hinata abrió los ojos aterrada, ella no estaba soñando?, ella estaba dentro de la mente del demonio que naruto tenía dentro?, como había llegado ahí?

-yo no pedí venir maldita bestia-dijo con el poco aire que le quedaba cayendo al fin desmayada por eso mismo, no solía ser grosera pero venga casi Moria

Kurama miró el cuerpo dormido de la peliazul, desde hacía un par de días ella volvía a donde el, no sabía que había hecho para lograr eso, miró su brazo ahora curado, cuando naruto había tenido esa pelea el maldito de su enemigo había logrado traspasar su mente hasta el logrando herir su cuerpo espiritual, y por más que había intentado sanar no lo lograba y eso estaba afectando la energía de naruto, dio una vuelta dispuesto a dejarla ahí pero entonces se detuvo, el cielo comenzaba a mostrar signos de lluvia, él y su estúpido sentido de gratitud, la tomó en brazos y la llevó a donde la primera cueva cercana, la recostó ahí y él se quedó ahí sentado, otra cosa que el estúpido enemigo había logrado era alterar su forma espiritual, por alguna razón cada que la luna salía el tomaba el cuerpo de naruto, era claro que nada de eso naruto lo sabía, para él, el seguía siendo ese zorro enorme dentro de él, era claro que naruto no podía entrar dentro de su subconsciente, pero entonces como es que ellos los habían logrado?, pensó sin dejar de ver a la peliazul

-mh-escuchó el pequeño gemido de parte de ella, comenzaba a despertar-donde estoy?-preguntó tomando su cabeza, hinata levantó la mirada y pudo ver la silueta de Kurama, era raro que el se viera como naruto

-te lo preguntare una última vez,¿ como lograste entrar a este lugar?-dijo con esa voz gruesa y grave

-no lo sé-contestó hinata apartándose poco a poco a la parte mas lejana de la cueva, pudo escuchar el sonido de varias gotas caer seguida de miles más, había comenzado a llover-primero pensé que esto era un sueño, no creí que fuera tu subconsciente-

-debes estar aquí por alguna razón, descúbrela y arréglalo, si vuelves aquí quédate en el prado y no entres al bosque o juro que te comeré-hinata bajo el rostro y asintió, no tenia de otra, intentó dormir pero la voz de Kurama no la dejo-no hables de este lugar con naruto-hinata frunció el ceño-

-pero tal vez el sepa porque estoy aquí-intentó hacerle razonar

-dije que no dirás nada-exclamó en un grito-gruñido que la hizo pegarse mas a la pared de la cueva

-esta bien, lo resolveré yo misma-dicho esto Kurama se levantó y sin más salió de la cueva dejándola completamente sola, hinata se recostó y durmió

El sonido de la lluvia la despertó, aun era de noche y caía una tormenta afuera, hinata se levantó y miró a naruto dormir, tomó su bata y salió al balcón, recordaba todo lo que había pasado con Kurama, miró la luna y un pensamiento le hizo sentir triste

-debe sentirse solo-dijo al aire, después de todo nadie estaba con él y el seguía dentro de naruto, que tan solitario debía ser para tener esa actitud tan defensiva, pensó en sus palabras, era cierto que debía encontrar la razón por la que ella entraba en la mente de Kurama e iba a hacerlo pero mientras lo hacia ella trataría de darle un poco de compañía, después de todo que tan malo podía ser si la había resguardado de la lluvia, fácil pudo dejarla tirada pero no lo hizo verdad?, si, ella iba a darle su amistad, le gustara o no

Quiso volver a dormir, pero al ver que faltaba una hora para empezar a preparar los almuerzos de todos decidió bajar a cocinar estaba por salir de la habitación cuando la luz de un rayo iluminó el cuarto, si aquí afuera estaba lloviendo ¿eso quería decir que el subconsciente de naruto o el de ella podía provocar la lluvia dentro de la mente de Kurama?, llevó su dedo al mentón y tuvo una idea algo loca

Cuando la noche cayó y naruto volvió del trabajo hinata aprovechó que este hablaba con los niños para subir un plato con onigiris al cuarto, los dejó dentro del cajón del buró de a lado de naruto, la puerta se abrió dejando entrar a naruto

-los niños se han dormido-hinata sonrió y se metió a la cama

-parece que la academia los deja agotados últimamente-dijo hinata acomodándose para dormir, pero la mano de naruto colándose en su blusa la sorprendió-naruto?-cuando giró el rostro sintió los labios de su esposo sobre su boca iniciando juego de lenguas y suspiros que extasiaron a hinata, sin embargo por mucho que deseara hacer el amor con naruto esa noche en específico quería dormir, estaba ansiosa, quería saber si su experimento daría resultado después descubriría el error que implicaba no hacer el amor con naruto

-naruto basta-el rubio se separó confundido, jamás desde que se habían casado hinata lo había detenido

-qué pasa? -preguntó sentándose mejor en la cama

-nada, es solo que hoy fue un día algo agotador, perdona amor pero tengo un poco de sueño-dijo y enseguida cerró los ojos sin poder ver la expresión de confusión de su esposo

Abrió los ojos nuevamente en ese lugar, y cuando su mente pudo asimilar al fin que estaba dentro de la mente de Kurama se puso a buscar con la mirada algo en especifico hasta que lo encontró, sonrió feliz de que su experimento se hiciera realidad, a un lado del claro se encontraba el plato con onigiris que había colocado cerca de naruto, fue a tomarlo rápidamente, se dio cuenta que era de noche así que Kurama debía estar en el bosque, tomó un par de hoja largas que había cerca las lavó en el claro y con ella envolvió los onigiris y salió en busca del demonio, aun que corrió por varias horas hinata no pudo dar con el

-tal vez esta evitándome-dijo al recordar las palabras del kyubi en su ultimo encuentro sobre que ella se quedara en la pradera, sus piernas se sintieron cansadas así que se decidido sentarse en el tronco de un árbol a descansar, pensó en la cueva donde se había resguardado de la lluvia tal vez el estuviera ahí, se levantó y comenzó a caminar en busca de esa cueva y para su buena suerte después de una hora buscando la encontró, corrió dentro de ella y efectivamente ahí estaba Kurama, su negra silueta desnuda se notaba en el piso durmiendo o eso pensaba ella

-veo que el mocoso no es el único idiota-hinata frunció el ceño ante su comentario-te dije que si te volvía a ver te comería-aun que su voz era de lo mas tenebrosa hinata no se inmuto, ya que la noche anterior había llegado a la conclusión que aun ese no era un sueño no quería decir que él podía lastimarla, ya que su cuerpo real seguía a lado de su esposo

-que te parece si en vez de comerme a mi comes esto-dijo acercándose a el y para su sorpresa el no pareció gruñir o molestarse por eso, abrió las hojas mostrando los onigiris, vio la expresión de sorpresa en los ojos rojos ya que era lo único que se podía distinguir en la oscuridad

-comida humana-dijo Kurama quien de un manotazo tiró todo al piso, hinata miro entristecida el arroz en el suelo-que te hace pensar que quiero eso-

-dijiste que me comerías no?, supuse que tendrías hambre entonces-dijo comenzando a juntar lo que quedaba de la comida en el suelo, cuando de pronto sintió un aliento cálido detrás de su oreja, así como un cosquilleo en su pierna, tarde se dio cuenta que ese cosquilleo era la mano del demonio, quien de un tirón logro acostarla boca abajo y el colocarse encima

-cuando hablo de comerte princesa, no me refiero a tragar tu carne-hinata abrió los ojos aterrada al sentir la erección de el sobre su vientre y como bajaba su boca hasta su cuello pasando de manera salvaje su lengua por el-si no de saborearla-hinata forcejeó, pero la fuerza que Kurama poseía era impresionante

-basta, yo solo quiero ser tu amiga-la risa desquiciada que soltó Kurama resonó en toda la cueva

-no sabes lo peligroso que es que alguien como tu este en un lugar como este sola conmigo-su lengua bajó al inicio de sus senos, sintió un pequeño tirón en su bata seguido del sonido de está rompiéndose lentamente, Kurama la esta abriendo para que sus pechos fueran libres

-no entiendo que estás haciendo, déjame por favor, ahgr-soltó un pequeño gemido de incomodidad combinado de sorpresa al sentir su boca tomar uno de sus pezones, comenzó a sentir algunas lagrimas salir y su garganta picar-n-no por favor, prometo no molestarte mas ya bastaaa-pero por más que quería gritar y moverse no podía, entonces sintió un succión tan placentera que tuvo que obligarse a no gemir, mierda, aun que le asqueaba que alguien mas la tocara la verdad era que la sensación de placer solo aumentaba al sentir su miembro restregarse en su intimidad y esa lengua jugar con su botón rosado

-no puedes verlo verdad?, lo que tu esencia logra en bestias como yo-su aliento en su piel se sentía demasiado caliente

-basta por favor-pero Kurama no se detuvo y de un tirón logro romper lo que quedaba de la bata dejándola totalmente desnuda, en un intento desesperado intentó taparse pero Kurama aprovechó esa acción para bajar hasta su intimidad y ante la sorpresa de hinata saborearla como si fuera la primera comida de su vida, hinata intentó levantarse pero el placer que comenzaba a sentir no le daba fuerzas para hacerlo, quería huir, quería escapar y abrazar a su esposo pero también no podía negar cuanto había deseado esa clase de placer desde hace tiempo, y se sentía culpablemente bien

-ahh, no, esto no… ahh si-gemía y suspiraba cada que Kurama pasaba esa lengua caliente por si clítoris y los pliegues de su vagina, cada lamida, cada succión y cada respiración sobre su vulva estaban acercándola al clímax, solo faltaba poco y justo cuando sentía que no podía sentirse más bien Kurama la cubrió por completo con su boca presionando con su lengua su botón y así haciéndola llegar en un orgasmo, un orgasmo muy fuerte, hinata cerró los ojos frustrada y complacida, había dejado que un demonio le hiciera sexo oral y no solo eso, lo había disfrutado, era una mala persona sin dudas, sintió a Kurama levantarse y ella solo pudo mirarlo con esos ojos en lagrimados

-si vuelves a venir a mí eso será poco comparado con lo que pienso hacerte-dicho eso salió de la cueva dejándola sola y cayendo al fin dormida

Mientras que lejos de la cueva Kurama fruncía el ceño y apretaba las manos y los dientes, desde que naruto había conocido a hinata de niños Kurama había podido percibir una fuerza atrayente en él, y después de años pudo entender que era, era una heredera de sangre, y la peor de todas, era una maldita domadora de bestias, más bien de bijuus, ese poder que tanto anhelaba madera uchiha y que pocas personas podía heredar, y en ese momento el maldito lívido de naruto y el deseo de tomar a su esposa lo habían afectado completamente

-mierda-exclamó volviendo en sus pasos, su boca se sentía tan deliciosa y ansiaba más, mas e iba a tenerlo, pero al regresar se frustró de no verla en la cueva, ella ya había vuelto a su cuerpo, sonrió con sorna-esperemos que te quedes en el prado a partir de ahora