Hola jóvenes caballeros, cómo dicen que les va? espero que muy pero muy bien.
Hace rato quería escribir sobre Albafica y Shion, no sólo porque los shippeo sino porque individualmente me encantan (al carnerito le tengo demasiado cariño).
Así que ,viendo el capítulo de lost canvas en dónde Albafica muere (me lloro todo que lo sepan sniff sniff),se me ocurrió hacer este pequeño texto,algo triste porque describí lo que Shion sintió (para mí),cuando pasó. Espero lo disfruten o lloren conmigo jaja.
Aclaración 1:Los personajes de Saint Seiya no me pertenecen sino a Masami Kurumada,y the lost canvas a la señorita Shiori Teshirogi.
Aclaración 2:Este es un texto creado para fines de entretenimiento sin fines lucrativos.
Aclaración 3:Las imágenes las tomé de Google así que créditos a sus respectivos autores.
Aclaración 4:Está obra es pura y exclusivamente mía.
Lele
"A menudo el sepulcro encierra,sin saberlo,dos corazones en el mismo ataúd."- Alphonse de Lamartine
Capítulo 7: La última rosa
La muerte es algo que tenía tan arraigado en mi mente que mis mismas palabras me traicionan en este momento en que me regalas el último suspiro que te resta. Las rosas que Minos había roto renacían ante mí y, hubiese querido que tú lo hicieras también .
(...)
-Mira, los pétalos que habían volado con Minos. Ahora están de regreso, y no carecen de su fragancia. Sabes?, siempre estuve junto a estas rosas envenenadas. Pero por primera vez en mi vida, las encuentro… Hermosas- Se te escuchaba entrecortadamente.
Tu rostro se veía tan cansado pero a la vez el azul de tus ojos se unió al cielo, siempre hicieron una buena dupla con el clima despejado, cómo si de un cuadro degradé se tratara y aunque la sangre ha sido tu estigma quedaba increíblemente bien en este momento tiñéndote.
No.
No puede estar pasando.
No te despidas.
Maldición ,quédate conmigo.
(...)
Mis palabras se perdían en mí mente porque ni siquiera fui capaz de decirte lo que pensaba, aunque mis piernas se movieron por inercia hacía ti y acaricié tu rostro.
Cuando me refería a que nuestro destino era proteger a Athena y la tierra posiblemente muriendo en el proceso irónicamente, porque eso nos hace caballeros, hacer arder nuestro cosmo hasta su última llama,no me refería a ti. Es que no se me hubiera cruzado por la mente y ahora es todo tan real que me golpea duramente haciendo temblar mí cuerpo. Perdón, dé nuevo,por ser tan débil está vez.
(...)
"Perdóname por haber llegado tarde"
(...)
Tarde? Pero si te has ocupado de todo,yo...yo fui quién llegó tarde. No hiciste más que salvarme, al igual que cuando te conocí. Aquel día que el patriarca te dio la armadura de piscis, desde ese momento supe que tú eras alguien especial.
Albafica debí haberte azotado solo por interrumpir, aunque cuando te vi sentí que el irrespetuoso había sido yo. Porqué ?maldición ,siempre fuiste un orgulloso.
Recuerdo como mis piernas fallaron, y mis rodillas chocaron contra el suelo frente a él. Mí cuerpo a la merced de un sucio espectro: Minos.
Y claro, apareciste tú.
(...)
"Shion, aún puedo pelear "
(..)
...Lo sé perfectamente pero no lo hagas ... -susurre por lo bajo, no me escuchaste porque en realidad mí mente lo dijo de nuevo.
Porque tuve que apartarme? Ser tan débil? Sé que eras fuerte, no pienses que te estoy ofendiendo. No es mí intención pero tu sangre ,aquella que te protegía y maldecía a la vez. Tu mayor debilidad y fuerza. Irónicamente fue la que me protegió, la que terminó por matarte y matarlo.
(...)
-"Solo te pido un favor.No dejes que nadie más que el enemigo se acerque"
(...)
Tomé a aquella niña que bramaba tu nombre, lloraba y desee tener el valor que tenía de expresar sus sentimientos.
"Cristal wall"
Lo encerré. Si sólo lo hubiera hecho antes, pero no, te fallé. Nadie se acercó, ni siquiera él. Rodorio está bien,Agasha está bien ,Minos... desapareció. Yo estoy aquí.
Sangre... sangre ...sangre
..Albafica...
La última rosa con tu sangre envenenada en el corazón de Minos. Brillante, cómo su portador.
Tu cuerpo cayó, te sostuve pensando que esa sería la última vez que podría escuchar tu voz. No sé si me oíste pero mis palabras fueron un te amo, tardío pero al fin estuvo para sellar aquella confesión con un beso robado de tus labios, aún puedo sentir ese picor de tu sangre en los míos pero no me importa. El sol brilla en tus cabellos regalándote todo su esplendor que creo ha robado de ti.
(...)
"No es algo que podamos controlar", le dije a la niña que lloraba tu muerte.
(...)
Tu muerte. Me aprisiona el pecho mirándote entre mis brazos porque está no era la manera que imaginaba fuera tenerte entre ellos.
Pensé que esas marcas de sangre en tu piel, no te quedaban . Ahora que te veo más de cerca, la verdad incluso ellas te hacen ver tan magnífico, perdón, no puedo evitar llorar en estos momentos. Sé qué debería ser fuerte y seguramente me estés regañando por llevarte sobre mí pecho,pero es que siento que es la única manera en la que puedo aferrarme a lo último de ti.
"No te acerques tanto Shion"-Te oigo decidir en un murmullo que me gustaría fuera real.
No me importa. Por hoy me siento un osado desacatando tu orden suprema, aunque hubiese preferido hacerlo muchos días atrás, lo lamento tanto. Tus cabellos celestes llevan algunas manchas escarlata y me hacen cosquillas en el cuello, dónde dejan una parte libre los cuernos de aries que brillan en tu rostro.
Te sostengo más fuerte,por si a caso mis piernas vuelven a fallar, no quiero dejarte caer, te apretó más aunque no sientas mis dedos en tu cuerpo que ahora yace inerte entre mis brazos. Las lágrimas caen, y dejo que lo hagan mientras me dirijo al santuario, no las retengo ni siento vergüenza porque los caballeros también tenemos derecho a llorar.
En realidad no sé si yo merezco tal cosa pero sucede que hoy siento que perdí una parte de mí. Si, ya sé qué vas a decir y un poco me sonrió por mí atrevimiento, sé que somos caballeros de Athena, y velamos por ella ,sin embargo tú siempre haz sido mí mayor motivación para ser mejor.
Albafica, me perdonas por haber sido un completo cobarde y jamás haberte dicho cuánto te amo? Es que creí que el tiempo sobraba, aunque, pensándolo quizás no sentías lo mismo, tal vez te hubiera incomodado sin poder aprovechar aquellos momentos que me regalaste.
Que imbécil, soy consciente que me veo horrible por la batalla y me siento aún peor por haberte perdido.
La casa de Aries estaba ante mí cuando levanté la vista y claro está vez mis rodillas fallaron. Te sigo sosteniendo porque este momento, esto ,es lo único que me queda de ti y aunque sea un cuerpo vacío no puedo evitar aferrarme a lo que fuiste. Cierro mis ojos, los aprieto, deseando que sea una estúpida pesadilla, queriendo que al abrirlos me regales una sonrisa como todas las mañanas que subía con algún pretexto para verte, o escuchar un sonido de tus labios, cualquiera ,que me hacía vibrar el alma. Y si , escucho.
-Abre tus ojos Shion.
...Alba...
-Shion.
Pero no es tu voz, y aunque Dohko es mí mejor amigo no era a quién deseaba oír. No quiero abrirlos, cómo un niño me aferro a tu cuerpo sintiendo unas cosquillas en mis manos.
-Shion,sueltalo-Me dice apaciblemente a la vez que toca mí hombro.
Dohko siempre supo leerme a la perfección, sus palabras son sólo porque seguramente me ve tan fuera de lo que siempre que soy que de seguro sólo me protege sin embargo me suena como si quisiera arrebatarme esos segundos que alargo a tu lado en vano, protegiendo una cáscara que guardo con recelo para no sentir que vuelven a arrebatármela.
-No puedo.
-Sé qué es difícil pero no está ahí, date espacio y déjalo.
Sé porqué lo dice, pero no me importa tu sangre envenenada, nunca le temí, y supongo por eso me dejabas acercarme un poco más a ti. Aunque soy consciente que ahora está escurriendo por mí piel y estoy siendo nada cuidadoso con las heridas de mí propio cuerpo.
En algún momento los caballeros se despidieron junto a Athena,y tu cuerpo desapareció de mis brazos. No sé si yo te puse dónde descansarás o Kardia,o Dégel,la verdad es que en un parpadeo estaba tu lápida , siento un beso de Athena ,un abrazo de Dohko y me veo caminando de vuelta hacia Aries. Me pesa el cuerpo,y aún tengo los colores ahora algo bordó en mí piel.
Toda la realidad cayó sobre mí. Nunca más te veré, ni me hablaras, nunca más estará ese juego al querer al menos rozarte y tus ojos no volverán a mirarme reprendiéndome por mí atrevimiento. Creo que golpee el vidrio del baño en algún momento porque veo pedazos de él y sangre nueva en mis puños. Lo siento, no puedo dejar de sentirme así.
El espejo delata lo que es obvio, soy un desastre y desearía ser más de la forma que me muestro frente al resto pero que me vea controlado no significa que no haya cosas que me rompan. De todos modos soy el caballero dorado de Aries. Te prometo que valdrá la pena ,tu muerte no será en vano Albafica. Por hoy saco pedazo por pedazo mí armadura mientras algunos músculos me duelen en el proceso, podría evitarlo pero no, en parte es un contacto de ese último instante contigo.
El agua tibia cubre mí cuerpo ,tengo que lavar toda esta porquería , y puedo sentir el reflejo de lo que Minos dejó . Pensar que tú fuiste el que evitó un desastre me hace sentir débil, supongo en parte mí orgullo me pasa factura por como terminaron las cosas.
Aries resuena en la pandora box, parece llorar, y no la culpo, al contrario la abrazo con mí cosmo.
Dohko apareció de repente y se ve tan abatido como yo. Apoya su mano en mí hombro ,y me sonríe tratando de esconder la tristeza en su rostro que como siempre tan expresivo lo delata pero igual le devuelvo el gesto. Es el mejor amigo y compañero de armas que pude haber tenido.
Sólo silencio. Miro los ojos de mí amigo y encuentro un poco de consuelo. Él lo sabe. Termina por entender mejor que nadie aquello que callo,por eso espera,por algo que quizás no pueda ofrecerle hoy: palabras.
Hoy no puedo hacer un lado a Shion, necesito que aries me cubra con cariño y abrazarla en silencio.
Una mirada.
-Las guerras son crudas pero, valdrá a pena.
-Lo sé.
Sobre todo la pena, la pena de haberte perdido Albafica.
