Se podría decir que Juvia se había establecido en Phantom Lord y que finalmente había encontrado su equilibrio a pesar de todo.

Se había convertido en su hogar, pero no del todo. ¿Ósea? Bueno, Phantom Lord no era exactamente un lugar agradable y la joven estaba convencida de que un hogar debería ser el lugar donde te sentías bien. No es que estuviera tan mal, al contrario. Pero sentía que todavía faltaba algo. Había algo en ella que le decía que su hogar no era Phantom Lord.

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Juvia ahora tenía una rutina bien definida. Se despertaba, se duchaba, se vestía, desayunaba y luego comenzaba su día. ¿Y cómo era exactamente su día?

El día de Juvia consistía en lecciones de magia, entrenamiento físico y cultura general. Sí, la joven continuaba estudiando a pesar de haber aprendido la mayoría de las cosas.

Aria y Sol disfrutaban ser sus maestros. Y, además, como decía el mago del viento, nunca se dejaba de aprender. Además, el mundo mágico era vasto. Una vida no sería suficiente para saberlo todo.

Juvia comenzaba temprano en la mañana con yoga y danza, que llevaba a cabo en una sala del gremio convertida en un gimnasio especialmente para ella. Después de terminar estas actividades, se dirigía a la sala de estudio, donde Aria y Sol la esperaban.

Los dos magos elementales habían decidido hacer una lista de cada lección que hacían. Obviamente, cada uno de ellos hacia lecciones diferentes, aunque hubo algunas que hicieron juntos.

Ese día en concreto a Juvia le tocó una lección con Sol. Una lección que le gustó mucho a la niña y que también emocionó al mago de la tierra.

¿De qué se trataba? De una lección de idiomas.

A José le gustó esto. Le gustaba saber que sus magos eran educados e instruidos, además de ser un placer personal, también era una victoria contra Fairy Tail, ya que según él la mayoría de los magos de ese gremio eran una pandilla de ignorantes.

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"¡Fantastique madeimoselle!" le felicitó al hombre con el monóculo.

"Merci".

"Madeimoselle debe saber que hay muchos idiomas diferentes aquí en Fiore e incluso en el mundo mágico, hay algunas magias que solo se puede usar con un idioma especial".

"Pero ya no son idiomas usados, ¿no?"

"Oui, la mayoría son lenguas antiguas, pero sin embargo siempre es mejor saber estas cosas, Monsieur Aria et je estamos creando una lección sobre esto".

"Está bien, gracias Monsieur".

"Je vous en prie."

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Además de las lecciones con Aria y Sol, también había los entrenamientos con Gajeel. Y el Dragon Slayer no era muy tierno.

"Gajeel-kun ... podemos... ¿Podemos detenernos un minuto? Juvia necesita beber un poco de agua", dijo sin aliento y visiblemente cansada.

"Cuando estás en batalla y luchando con un enemigo, ¿le dices esto?"

"¿Qué? No".

"Nunca debes bajar la guardia, no importa lo cansada que estés o cuánto necesites parar, ¡no tienes que hacerlo! ¡Debes entender que esto no es un juego, arriesgas tu vida!"

"Juvia entendió, Gajeel-Kun".

"No lo creo".

Ella lo ignoró y tomó la botella de agua para beber, él la dejó hacerlo.

"El enemigo nunca te permitiría hacer esto".

"Y Juvia nunca lo haría en medio de una batalla seria, pero este es un entrenamiento para nosotros, ¿no?"

"Incluso en el entrenamiento hay que tomarlo en serio, mocosa".

"Juvia sabe".

"Mh, bueno, sigamos".

"Deja que Juvia termine de beber".

"¿Pero cuánto bebes?"

"Es una necesidad necesaria, ¿sabes?"

"Tal vez sea porque eres una maga del agua".

"Juvia ya te ha dicho que no es así, todos los seres vivos beben agua, incluso Juvia la necesita".

"De todos modos bebes mucho".

"No es cierto".

"Lo es".

"No lo es".

Después de que dejaron de discutir, los dos reanudaron el entrenamiento con patadas y puñetazos.

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Como Gajeel había hecho meses antes, Totomaru tambièn había cumplido 18 años y finalmente había alcanzado la mayoría de edad.

"Estoy feliz maestro, quería organizar una fiesta ..."

"No", dijo José.

"Una pequeña", le suplicó.

"Totomaru, sabemos muy bien cómo terminan tus fiestas, ¿quieres que te recuerde lo que sucedió hace un tiempo?"

Sí, porque el mago del fuego, en su decimosexto cumpleaños había aprovechado la ausencia del maestro y había organizado una súper mega fiesta, con alcohol, mujeres, música, etc.

Cuando José regresó a la mañana siguiente, encontró al gremio en una situación verdaderamente desastrosa. A partir de entonces, a Totomaru ya no se le permitió organizar nada.

"¡Oh, vamos maestro! ¡Fue una pequeña e inocente fiesta!"

"¿Inocente? ¡Había más prostitutas allí que en un burdel real!"

"Oh bueno, pero yo había invitado a dos, tres chicas, las otras fueron traídas por las demás, lo juro maestro".

"¡No me importa y además sabes muy bien que odio las fiestas!"

De hecho, Totomaru organizó esa fiesta allí sin su consentimiento.

"Oh, bueno, y usted sale a caminar a algún lugar mientras nosotros celebramos", propuso el chico echandose a reír.

"Te estás tomando demasiadas libertades y no me gusta".

"Estaba bromeando ..."

"No me gustan los chistes".

"Esta vez se lo digo sinceramente maestro y con todo respeto, pero es un poco aburrido".

"Soy un hombre de negocios, el maestro de un gremio, un miembro del consejo mágico y uno de los diez magos sagrados, soy un hombre con muchos compromisos y responsabilidades, pero entiendo que alguien como tú piense que esto es aburrido".

"Afortunadamente usted entiende".

"Me pregunto por qué entre tantos magos de fuego te elegí a ti".

"Porque soy el mejor".

"Pero también eres el más molesto".

Sin embargo, para llevar a cabo sus planes, José estaba dispuesto a hacer cualquier cosa, incluso soportar la molesta personalidad de uno de los cuatro elementos.

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¡José estaba furioso!

Acababa de regresar del consejo, donde desafortunadamente se había cruzado con su archienemigo, Makarov Dreyar, maestro de Fairy Tail que le había comunicado una noticia que era la causa de su mal humor y su envidia.

Una vez más, Aria fue el único que tuvo el coraje de hablar con él y pedirle información.

"¿Qué pasó esta vez?"

"¡Odio ese gremio! ¡LO ODIO!"

"No es ningún secreto para nadie, ¿qué pasó de nuevo?"

"Gildarts Clive, el as, el mago más poderoso de Fairy Tail ..."

"¿Sí?"

"¡Recibió el consentimiento para partir para la misión de los cien años!"

Aria se sorprendió.

"Es la misión más codiciada por todo mago".

"Y son pocos los que pueden hacerlo".

"Pero él tiene todos los requisitos".

"¡Pero es un mago de Fairy Tail!"

"El problema siempre es eso para usted, ¿verdad?"

"¡Por supuesto!"

El mago del aire suspiró.

"No significa que lo completará, le recuerdo que nadie ha tenido éxito".

"¿Ya y te das cuenta de lo que podría pasar si tuviera éxito? ¡Fairy Tail estaría lleno de gloria! ¡Y no puedo permitirlo!"

"Maestro, con el debido respeto, pero creo que debería centrarse en Phantom, los magos aquí, Júpiter y todo lo demás, olvídese de Fairy Tail por el momento".

"Tienes razón Aria, pero me da rabia".

"Lo sé".

"Pero llegará el día en que Phantom Lord ganará".

"Claro, pero concéntrese en dirigir este gremio, luego piensa en Fairy Tail".

"Sí".

"¿Puedo preguntarle cómo va con Júpiter?"

"Pronto terminarán de completarlo".

"¿Planea hacerlo legalmente?"

"Desafortunadamente sí, pero solo porque sin el permiso del consejo no sería posible para mí traer tal arma aquí".

"¿Pero el consejo no suele guardar estas armas para sí mismo?"

"Sí, pero logré convencer a los superiores de que es mejor que Phantom tenga a Júpiter y luego, ya que es mi invento ..."

"Ya veo, ¿qué pasa con Abyss Break?"

"Todavía no es el momento".

"Está bien".

"Sin embargo, todavía hay un largo camino por recorrer antes de que se complete Júpiter, solo después de que se complete el cañón quiero que tú y Sol enseñen Abyss Break a Juvia y Totomaru".

"Como quiera... pero ¿saben realmente los superiores para qué sirve realmente Júpiter?"

"No, por supuesto que no, les dije que es un arma mágica que quería para Phantom, al final no es tan extraño que un gremio tenga un arma mágica en su arsenal".

"Claro, ¿así que supongo que ni siquiera saben sobre el hechizo y la conexión?"

"No, aunque creo que hay alguien en el consejo que sospecha algo".

"¿Sobre Júpiter y Abyss Break?"

"No exactamente".

"¿Y de qué entonces?"

"Los Element Four"

"¿Por qué?"

"Bueno, ya sabes lo que dicen sobre la unión de los cuatro elementos".

"¿Por supuesto y cree que esto es un problema?"

"No, no tenemos que preocuparnos por ahora".

"Está bien".

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Era de noche, Gajeel estaba bajo la lluvia mirando al cielo con una mirada indescifrable.

"Shin Shin To".

Juvia lo alcanzó sin siquiera saber cómo y por qué.

"¿Gajeel-Kun?"

"Ameonna".

Fue suficiente para que la peli azul lo mirara para saber que algo andaba mal.

"¿Estás bien?"

"Estoy bien".

"Te enfermarás si sigues bajo la lluvia sin siquiera un paraguas y un abrigo".

"¿Sabes cuánto me importa?"

"¿Qué está pasando? Todos te evitaron más de lo habitual hoy y Totomaru-San le dijo que no te molestara y que también el año pasado, este mismo día fuiste así".

Gajeel se sorprendió. No esperaba que se diera cuenta.

"Solo el año pasado, Juvia no tuvo el coraje y la confianza para hablarte así".

"Olvídalo, vuelve a entrar", dijo mientras tomaba otro sorbo de cerveza.

"Gajeel-Kun, si tienes un problema ... puedes hablar con Juvia, ella intentará ayudarte, te lo promete".

"¡No digas tonterías! ¡No necesito ayuda, y mucho menos la tuya!" gritó.

Ella se quedó allí en silencio, sentada a su lado. Juvia no lo sabía, pero ese simple gesto fue bueno para el Dragon Slayer que se sentía menos solo. Porque sí, incluso Gajeel se sentía solo e incomprendido, solo que no se lo mostraba a nadie, ni siquiera a sí mismo.

"Hoy es 7 de julio", dijo.

Juvia lo escuchó sin interrumpirlo.

"Es el día en que el imbécil y el bastardo de Metallicana se fue y me abandonó".

"Oh, Gajeel-Kun".

"Esta mañana escuché que vieron un dragón cerca, pero como de costumbre era falso".

"¿Como de costumbre?"

"A la gente le encanta inventar que vieron dragones cerca ... Me lo creí otra vez".

"Quizás ... Solo esperabas que fuera verdad y que fuera él".

"Pero siempre es mentira".

"No te desesperes Gajeel-Kun, tal vez algún día..."

"No me importa".

"Entonces, ¿por qué fuiste a buscarlo y te heriste a ti mismo?"

"No me sentí mal, solo si fuera él me gustaría verlo para escupir en su cara y luego matarlo con mis manos".

Juvia no lo creyó, pero no dijo nada. Dejó que Gajeel se desahogara y se paró en silencio a su lado.

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Rincón de la autora.

Buenas noches a todos.

Aquí hay un nuevo capítulo.

Me gusta pensar que a pesar de todo Phantom era una especie de hogar para Juvia, no como Fairy Tail, por supuesto, pero siempre un hogar.

¿Cuántos idiomas creen que hay en Fiore? Es decir, ¿crees que cada reino y cada lugar mostrado tiene su propio dialecto o todos tienen el mismo idioma?

Sería bueno si Mashima profundizara en esto.

Y Totomaru también ha alcanzado la mayoría de edad. Me reí mientras escribía esta parte. No sé por qué, pero me hace reír tanto Totomaru. Luego vale, cosas serias, pero también hay que reír.

Leyendo en la wiki de Fairy Tail Timeline descubrí que Gildarts partió para la misión de los cien años en el año 781.I decidió que cada fecha importante para Fairy Tail, fecha canon, la agregaré. En este mismo año Mirajane alcanzará el rango de clase S, del que hablaremos en un par de capítulos, pero antes de eso todavía hay otros temas. Obviamente no hablaré de todos los eventos solo de los más relevantes y que tienen un poco más que ver con Phantom.

Y aquí Aria y José conversan de nuevo sobre Júpiter y Abyss Break. ¿Qué piensan al respecto?

Finalmente pude agregar la parte sobre el 7 de julio. Nada de que, una simple mención. Entonces no sé, tal vez algún día también haga un one-shot, luego veremos.

En el próximo capítulo habrá otra misión para el Elemento Cuatro y luego Juvia se enterará de los chismes "Sophie". Quien ha leído mis historias anteriores ya lo sabe, porque lo mencioné varias veces, sin embargo, tiene que ver con Gajeel. Pero no aparecerá en persona, solo hablaremos de ella.

Dicho esto, muchas gracias a los que leen, revisan y nos vemos la próxima vez.

Buenas noches.

GruviaSilver.