Los personajes no me pertenecen.

Fanfic escrito para el reto #Sextember4 de la página de Facebook Fanfics y fanarts de Ranma Latinoamerica.

Advertencia de lemon. AU y OoC.

Juegos de amor: Coincidencias.

Akane y Kagome miraban divertidas cómo sus esposos hacían las mismas posturas, iguales gestos y se movían más sincronizados que video musical.

-¡Vaya que son idénticos! ¿Seguro que no son gemelos separados al nacer? Del tío Genma puedo esperar cualquier cosa- decía entre risas la menor de las Tendo.

-No creo, a menos que tu tío Genma también sea un viajero del tiempo- contestó Kagome- aunque si no fuera por las orejas de Inu, tendría la misma duda.

-¡Esto es increíble!- dijeron al unísono ambos varones estrechando sus manos.

-¿Las orejas son reales?- Preguntó Ranma- porque fuera de eso somos como gotas de agua.

-Muy reales- contestó Inuyasha- a veces me resulta incómodo ocultarlas o que me las agarren, pero de ahí en fuera no son un problema.

-¿Qué les parece si desempacan y vamos a comer? Muero de hambre- propuso Kagome.

-Me parece una excelente idea- contestó Akane- solo para confirmar ¿quieren seguir adelante con el juego?-

-Estoy seguro que ustedes aceptaron porque somos idénticos. Por mi parte no tengo problema ¿tú que dices, "hermanito"?- bromeó el Semi-demonio.

-¡Yo digo que vayamos a alimentarnos y que nos divirtamos como enanos, "mi sangre"!- contestó Ranma haciendo énfasis en la última frase.

Durante la comida la plática fue muy animada, saliendo a relucir más coincidencias: ambos trabajaban para la misma empresa en idéntico puesto en su respectiva ciudad, el modo en que se conocieron y cómo se fueron enamorando, la manera en que se mantenían en buena condición practicando artes marciales y el odio que tenían ellas por las "arrastradas" amiguitas.

La sobremesa se extendió hasta la cena, los nervios y el deseo ya eran evidentes, finalmente todos levantaron sus copas brindado por la naciente amistad.

-Todo está claro y me parece que es hora de jugar- dijo decididamente Kagome -a menos que alguien tenga aún dudas-

Los demás negaron con la cabeza.

-¿Les parece bien si por hoy usamos cuartos diferentes?- Propuso Ranma.

Los involucrados asintieron, acto seguido cambiaron de pareja no sin antes despedirse e intercambiar amorosas frases y apasionados besos.

Ya en su respectiva habitación, Akane acariciaba las orejas de su canjeada pareja mientras él le lamia los labios vaginales y el clítoris con demasiada parsimonia.

-¿No te molesta si hago esto?- preguntó dejando escapar un ardiente gemido mientras el gozo corría de su entrepierna a todo su ser.

-Antes no me gustaba pero en este momento me resulta agradable- contestó el varón mientras atrapaba el botón y lo succionaba- ¿Quieres dos o tres dedos?-

-¡Calla y sigue chupando!- Contestó la aludida mientras le jalaba la cabeza con ambas manos y lo atrapaba entre los muslos.

En la habitación vecina…

-¡Por Rumiko, esto es delicioso!- Exclamó Ranma mientras su verga era aprisionada entre los senos de Kagome al tiempo que le daba lengüetazos en el glande.

-Me agrada que te guste- dijo ella metiendo el miembro en su boca.

-Lo haces muy rico pero- en ese momento el hombre la recostó en la cama, le puso el pene cerca del rostro mientras su mano empezaba a acariciar el monte de Venus aplicando presión en el punto exacto -quiero que también disfrutes-

Ella sólo pudo asentir gimiendo y devorando.

Inuyasha penetró a Akane lentamente, mientras la joven lo jalaba para abrazarlo sentía la deliciosa verga llegarle hasta el fondo; los besos y caricias en los pechos no se hicieron esperar al mismo tiempo que la fémina estrechaba el cerco y las embestidas con las piernas.

Kagome no podía parar de gemir mientras su pareja le jalaba el pelo, el vaivén del falo era hipnótico y las nalgadas resonaban en la recámara, Ranma la atrajo hacia sí, sus manos recorrieron su costado hasta alcanzar los pechos, pellizcó los pezones y chupó el lóbulo de la oreja.

Inuyasha miraba extasiado cómo rebotaban los senos de Akane al cabalgar su envergadura; las mejores caderas de Nerima subían, bajaban o hacían círculos mientras él alternaba los pezones en su boca agarrando las nalgas para mantener el ritmo.

El glande de Ranma se abría paso a través de la húmeda vagina de Kagome para continuar con la batalla, los movimientos eran rápidos y los gemidos daban paso a los gritos de placer, ya había perdido la cuenta de los orgasmos y uno más empezaba a nacerle mientras él le lamia el cuello y apretaba su seno.

-Kagome, me vengo ¿dónde quieres que lo haga?- preguntó Ranma.

La mujer rompió el abrazo, se introdujo el palpitante músculo en la boca y lo mamó hasta que la descarga de semen fue a parar a su garganta.

-¡Por Rumikooooo!-

Akane no podía parar de gemir mientras sus pies rebotaban en los hombros de Inu, él la agarraba de la cintura mientras su miembro entraba y salía de la encharcada vagina cada vez más rápido, también le preguntó donde quería recibir el semen.

-¡En… mis… pechos!- contestó.

Obediente, soltó su descarga sobre los senos, salpicando también parte de la cara. Al ver que ya no salía más, la muchacha tomó la verga y la metió en su boca para dejarla limpia.

Los cuatro descansaban en sus respectivos cuartos, ellas pensaban que eran demasiadas coincidencias pues hasta para preguntar donde podían eyacular eran iguales.

Breves momentos después, Ranma dejaba un camino de besos por el cuerpo de Kagome. Comenzó en la boca pasando por los pezones y continuando hacia el ombligo, empezó a recorrer los labios y chupar el capuchón; en otra habitación, Inuyasha volvía a meter la cabeza entre los muslos de Akane mientras ella saboreaba el glande.

La noche apenas empezaba…

Continuará…

Agradezco sus comentarios a los a los fics anteriores y el apoyo de Carol F Vargas para que mis escritos sean entendibles… lean sus fics, miel pura.