Luxemburgo espera a Bélgica en su despacho, trabajando en lo que llega. Bélgica llega solo cinco minutos tarde, un poco agobiada porque es ¡cinco minutos tarde! La verdad es que la reunión les va a salir como el culo, creo que los dos están súper distraídos, así que en un punto al llegar el restaurante va a ser como... Bueno, lo hecho, hecho está, tal vez deberíamos hablar de otra cosa.

Bélgica suspira, sintiéndose especialmente cansada y agradeciendo una cerveza, decidiendo que no está segura de poder trabajar la tarde entera.

—¿Cómo te fue ayer al final con Alba, estás más tranquila?

Bélgica suspira, porque no está del todo tranquila.

—Estoy agobiada aún, no sé... no sé.

—¿Por qué? ¿qué pasa?

—Pues es lo que te contaba... de Alba y su... cómo está tomando esto. Está tenso él, estoy tensa yo... y... no sé. Están pasando demasiadas cosas, esto no está siendo propiamente como esperaba.

—Mmmm... ¿pero por qué?

—¿Qué tanto te conté cuando hablamos?

—No mucho, que estabas pensando no...

—Es que... aún siento que le voy a obligar a hacer algo que no quiere.

—Pero él te lo ha pedido y te dijo que sí.

Mais oui, pero... bueno... es que te cuento un poco desde el principio.

Luxemburgo asiente.

—Cuando... pensé que se lo iba a pedir yo nada más, busqué en su casa, sus tradiciones y a alguien que me hiciera un tartán con nuestros colores y pregunté por la boda celta...

—Ajá.

—Y me pareció algo diferente, bonito, hacen cosas así muy con la naturaleza. Y todo muy... no es religioso, más bien es como con un significado a la pareja, y a unir sus cuerpos y sus almas y me pareció romántico y... que a él quizás le parecía más algo que él comprendiera.

—Oh, sí parece romántico, así como la de France y Angleterre que la gente hablaba y eso.

—Exactamente. Algo con mucho significado. La cosa es que le dije eso y casi se muere, porque él... pensaba ir ahí y firmar un poco mecánicamente. Es decir...

—Oh... entiendo.

—Y me parece... feo.

—L-Lo es, un poco.

—Aunque pensé también que ya bastante difícil es acceder a algo que no quieres...

—Es que eso no significa...

—¿Qué?

—Que no sea feo que no quiera.

—Lo qué pasa también es que no quiere... Por... no es personal.

—¿Seguro?

I —De hecho, me parece que a nadie más le diría que si... a esto, más que a mi. No es que no valore lo que hace, de hecho... es que creo que por alguna razón pasé de sentir que hacía algo muy bonito a que era algo que noe ra suficiente, y... no es justo

—Pero aun así... sientes... —la mira.

—Siento que yo voy ahí a... algo distinto a él, y... me ha tomado un poco por sorpresa

—¿Y has hablado con él?

—Todo ha ido mal estos días —la verdad tiene que sacar un Kleenex porque se le humedecen los ojos—. Todo. Siento que siempre sé bien cómo... hacer con él y cómo hacer que las cosas funcionen y vayan bien, pero... esta vez me está costando un poco más de lo que esperaba. Aunque ayer todo fue un poco más normal y dulce, al menos hicimos el... bueno... —se sonroja un poquito y sonríe porque lo de ayer salió bien, y fue dulce y... lindo—. No... no hablamos de esto. Le pasamos por encima y ahora no sé. Ugh, va a ser el tema tabú.

—Ya veo... tal vez no... a veces solo necesitas tomar un poco de aire antes de volver a... meter la cabeza al agua, ¿sabes?

—Tal vez yo estoy viéndolo todo como demasiado más... dramático de lo que es —suspira.

—¿Eso crees? No sé, parece claro que tienes que hablarlo.

—¿Y que le digo?

—Pues como te sientes, ¿no? O sea... No presionándole, ya has respirado un poco y entiendes su postura, pero aún no te sientes bien.

—La impresión que me da es que eso... solo le agobia más —Bélgica aprieta los ojos.

—Ya, pero... ¿Y si se lo dices con calma... o sea... qué le dirías?

—Que no quiero ser Injusta con él y sé que está haciendo algo muy bonito. Y que me da miedo cagarla.

—Eso no suena agobiante.

—Y me da miedo... ir ahí y hacer algo que implique mucho para mí y que para él sea solo un trámite. Me da miedo ser... un poco tonta y estar nerviosa por algo o feliz por algo y solo ser yo.

—Díselo.

—Y... e-en todo este tiempo que llevo con él, nunca me había sentido... sola. P-Pero desde que hablamos de esto, m-me lo he sentido un poquito.

Luxemburgo la mira un poco desconsolado con eso.

—Y-Y no estoy acostumbrada a sentírmelo. Siempre he sentido todo su apoyo y... amor, y seguramente no es justo sentirme sola, solo porque me ha dicho que la boda no significa lo mismo para él que para mí, pero...no se si estoy exagerando un poco, pero de sentir que estábamos bien y significábamos mucho el uno para el otro de repente estúpidamente me sentí un poco... sola en esto.

—Es que no... no puedes guardarte algo así.

—¿Y si estoy exagerando?

—Pues habrá... que calmarte un poco o que ayudarte o hacerte ver que no es como lo estás viendo, pero es que guardarte algo así... estas cosas son las que se enquistan.

—Todo estaba tan... bien —Bélgica suspira pensando que además le ha contado lo OTRO y ha sido un poco también por presionarle.

—Pero es que tú misma lo dices, me parece que es una de las cosas que más orgullosa te sientes de esta relación. Hablaos las cosas, incluso las difíciles. ¿Cuántas veces no has acabado llorando porque te ha dicho cosas que no te gustan y luego al cabo del tiempo has acabado diciendo que preferías pasarlo mal pero aclararlo completamente? Pues tal vez es su turno de llorar un poco.

—N-No sé si... sea el mejor momento. Me contó otra cosa suya, por presionarle, algo qué pasó hace mucho tiempo... Ugh. Es que todo está mal un poco por mi culpa.

—¿Qué cosa?

—Una cosa... personal y complicada —hace un gesto con la mano —. No te la puedo contar, pero es algo que no me quería contar y lo forcé... es como si lo forzara a todo últimamente.

—A veces las personas necesitan que las fuerces... insisto en que él también te fuerza a ti en cosas.

—Es que siento que... quizás es un poco tonto, pero siento como si de golpe me hubiera dejado de querer un poco —un poco de drama latino.

—Es que como vas a quedarte con esos pensamientos, ¡es horrible! —aprieta los ojos.

—No quiero que deje de quererme... no quiero que se case si el precio es dejar de quererme.

—Eso no tiene mucho sentido... ¿por qué iba a dejar de quererte si se casa? Se supone que casarse es justo para lo contrario... Es decir... ¿qué es lo que le da tanto miedo o le preocupa tanto de casarse? A lo mejor podrías plantearlo como France, solo una ceremonia para decirle a todo el mundo que sí, que estáis juntos y os queréis, nada de papeles o de dioses.

—Creo que va a decir que eso es innecesario, que para eso ya hicimos lo del otro día.

—Sí, pero no. Igualmente bastante mal salió lo del otro día... porque no le cuentas... o sea, qué parte es la que es importante para ti de una boda. Qué cosas son las que te hacen ilusión. Así sea ponerte el vestido o comer tarta. No tenéis porque hacerlo todo, a lo mejor si a ti te da igual lo de... yo qué sé, bailar, por ejemplo y a él le pone nervioso, pues podéis no hacerlo. O si a él lo que le apetece es... qué sé yo, lo de la barra libre, pues centrarte más en esa parte. Darle más importancia. Sabes "quiero hacer una boda porque quiero que todo el mundo beba a nuestra salud" y la boda podría ser que todos fuéramos ahí nada más y brindáramos por vosotros.

—Es que eso podría ser si pudiéramos hablar del tema abiertamente, como hablamos de todo lo demás. Decirle lo que siento o lo que quiero, o pensar realmente en lo que quiero... o lo que quiere él... pero con él. Y es como si repentinamente no pudiéramos hablar de esto.

—Pues... es que... creo que estás empezando a ver que lo que hace él contigo tampoco es fácil y aun así lo hace y siempre le criticamos por despiadado. Insisto en que creo que te toca a ti ser despiadada ahora.

—¿Dices que debería hablar con él sin importar si él... no está conforme con lo que digo o si le da miedo?

Oui. Creo que deberías decírselo todo. Hacérselo entender. Luego él ya tomará las decisiones que quiera, pero al menos no quedarte tú con él "si se lo hubiera dicho tal vez..."

—No creo tampoco que vaya a dejarme por ser sincera... —suspira.

—Eso es lo que siempre predica, ¿no?

—Y si lo cumple... es un buen hombre, de verdad, solo hay ciertas cosas en las que es un poco testarudo. Creo que... no digo que no sea grave, pero quizás lo estoy viendo un poco más grave de lo que realmente es

—Me preocupa que lo veas así —le sonríe un poco de todos modos

—Es que, sí es serio y grave, pero yo estoy sintiéndome más angustiada de lo que debería

—Pero por algo será. O sea, es que todo eso de sentirte sola y que no te quiere... tienes que resolverlo.

—Es que es un poco raro tener unos líos terribles el día que te piden matrimonio... N-No es lo que esperas —Bélgica aprieta los ojos.

—Nada en esta relación ha sido lo que esperabas... —sonríe de ladito y Bélgica sonríe.

—Ugh... Es un poco la gracia. Nunca es lo que espero, pero siempre es... un poco mejor.

—Las cosas buenas vendrán pronto, entonces—se encoge de hombros y Bélgica sonríe un poco más.

—En realidad, es lo más probable, siempre es un poco turbulento y sufrido, pero... es que Alba es un buen tipo.

—Si me dieran un euro cada vez que oigo eso...

—Es que sé que no me crees... bueno quizás ahora empieces a creerme más. ¿Qué tal estás tú con Cymru?

—Ehm... bien. Está... estoy acogiéndole en casa unos días, ya sabes —se sonroja un poco por el repentino cambio de tema.

—Acogiéndole...

—Por lo de Galia y eso, ya te lo había contado.

—Solo me... hizo gracia la forma de ponerlo. ¿Y qué... tal te va con él? ¿Todo bien? ¿Ya te agobió un poco?

—¿Agobiarme?

—¿No habías invitado a France? ¿Cómo fue con él y Angleterre?

—Un desastre.

—Poooooooor? —Bélgica levanta las cejas

Angleterre... empezaron a pelearse y todo se salió de control y...

—Oh, dime que no te rompieron nada... —Bélgica se muerde el labio.

—¿Romper?

—¿Hubo golpes?

—¿Golpes? —parpadea.

—Luego se pelean a golpes... ¿no viste a Alba y a Cymru?

—Mmm... rompieron una ventana, pero no me dijeron nada de golpearse entre ellos.

—¿Una... ventana? —levanta una ceja —. Se partieron el labio y Cymru tenía un ojo morado el otro día porque se pelearon entre sí.

—Pues la del parlamento. ¿Eso fue de... pelear entre ellos?

—Cielos, es que en serio que no le hago publicidad a Alba, solo... se pelean, se lían, se gritan... y ya está —Bélgica se sonroja un poco.

—Estuvieron diciéndose cosas horribles y acabé por tener que echar a France un poco bruscamente.

—Uuuuuhhh!

—No a las malas, pareció entenderlo, pero... —suspira—. No me extrañaría que Galles no vuelva a hablarse con Angleterre.

—Nah... —Bélgica sonríe de lado.

—¡Pues tú no estuviste! Se estuvieron diciendo... Angleterre no paraba de decir que había traicionado a Galia y que le había roto el corazón y que era una persona horrible y que solo estaba con ella para fastidiar a France y que desecha a la gente sin piedad... y a mí me llamó rompe hogares. Y Galles no paraba de decirle a él que France se acostaba con todos y que no le quería realmente, ni a él ni a nadie y que sé yo.

—Suelen ser bastante horribles entre sí, sí... solo mira las cosas horribles que dice de mí, mi suegra

—Pero... pero... o sea, sí, y siempre hemos dicho que Ecosse debería... responder de otras formas, pero...

—Mañana estarán más tranquilos

—¿Tú crees? Es que si a mí me dijerais algo así...

—Les he visto destrozarse un día con cosas que a mí me harían llorar en un rincón y al día siguiente ir a jugar golf como si nada.

—No, bueno, intenté no meterme mucho, pero es que... nunca había visto así a Angleterre.

—Uff, él además —Bélgica arruga la nariz —. Me cae bastante mal.

—Lo sé, lo sé... Dijo que... Galles y yo éramos amantes desde quien sabe cuándo y que Galles había dejado a Galia ahora para robarte el foco de atención de la boda.

—¿Y Galles que hacía? Aguantan bastante.

—Estaba... en plan pasivo agresivo, parecía completamente fuera de sí. Dijeron que se había bebido una botella entera de algo.

—Ya, bueno, eso es como algo que hace diario, lo de la botella. Galia se preocupaba con eso...

—Yo no le había visto así... o sea... sí bebe y eso, pero no me parece... bueno, quien sabe. No es como que esté con él todo el día.

—Se ponen además más necios e impertinentes... —Bélgica suspira —. No dudes que Anglaterre haya llegado medio borracho igual, entre más tensa la cuerda uno, más pueden beber así de golpe. Aunque admito que he visto a Galles mucho menos borrachos de lo que pensé que estaría con lo de Galia.

Gales pide a Bélgica que no le ayude, gracias.

—No parecía... uf, no lo sé.

—Aún así... —Bélgica sonríe de ladito —. ¿Cómo vaaaas?

—¿Eh? ¿De qué?

—Con esoooo... ¿te hace gracia o... meh?

—Ah —se sonroja un poco—. B-Bueno, o sea... No creo que deba seguir yendo por ahí.

—Ohhhh ¿No? ¿Pooor?

—Pues es que France... y Angleterre... creo que Galles solo está... usándome un poco para olvidarse de Galia y... no... no creo que sea una buena idea que sea eso. Es decir... France si me dijo que le gusto un poco o que le hago gracia, de hecho, Angleterre insinuaba que había dejado a Galia para venir por mí, lo cual es sumamente absurdo.

—Pues... no se hablaban antes ¿o sí? No creo que nunca siquiera me preguntara por ti.

—Non, non, pero... sí que creo que podría estar usando esto para no pensar en Galia, de hecho es justo lo que creo que hace y... yo no debería darle cuerda —aprieta los ojos porque sabe que se la da.

—¿Por?

—Pues porque... sí me gusta un poco y tal vez me guste más. Y es muy triste que él solo esté intentando olvidar a su esposa y yo...

—Hmmm... o sea crees que cuando olvide a Galia gracias a ti... ¿va a olvidarte a ti?

—Lo que pasa es que... no es real. Solo es pasajero. Lo que significa que... sí, cuando supere a Galia es probable que se dé cuenta que yo como entretenimiento bien, pero que no soy... Era lo mismo con France, Belbel.

—¿Con France?

—Yo le gustaba a France... como pasatiempo, cuando tú no estabas o... cuando... cuando fuera, ni siquiera lo sé y a mi él se me llevaba por delante, hasta que aprendí a no... a no darle importancia por muchas ganas que yo tuviera que fuera importante. Esto es lo mismo.

—No creo que ellos sean como France para nada.

—Bueno, no exactamente, pero es la misma situación en la que... necesita otra persona para no estar pensando en que Galia ya no está. La diferencia es que France tenía como quince personas para eso y aquí parece que... solo estoy yo, pero sigue siendo igual de problemática la situación.

—Pensé que te referías a que Galia era como France para él...

—Non, non, el problema es que yo... Yo no necesito esto, si a mí me atrae es solo porque... me atrae. Pero él... es que si solo hiciera ya unos meses que dejó a su esposa y hubiera superado la separación... pero así soy solo un parche para no... sanar la herida.

—No sé qué tan capaces sean de... tener un parche —Bélgica se lo piensa un poco.

Belgique... la cosa aquí es que no es buena idea ahora empezar una relación de ese tipo con él. O sea, ni con él ni con nadie. ¿Tú querrías ahora empezar con alguien más si de repente dejarás a Ecosse? Es que no está con la mente y los sentimientos para fijarse realmente y ver y aprender lo que significaría una relación conmigo.

Bélgica sonríe de lado.

—No me extrañaría... que empezara a hacer cosas raras —sigue Luxemburgo—. A buscar a Galia en mí. Ayer ya lo hizo. Me levantó en brazos como si fuera ella y no digo que no pueda levantarme en brazos, pero no quiero que lo haga porque eso es lo que hacía con ella. Yo... yo soy yo, no quiero ser un sustituto.

—Ohhh... bueno sin hablar de si él sería o no un sustituto para ti... ¿qué hay de Mónaco?

—Yo no la estoy dejando a Mónaco. No necesito un sustituto para ella. La tengo a ella... y ya está lo bastante enfadada.

—Y estas hablando de empezar una relación...

—Es que... France también me preguntó que iba a hacer con Mónaco —confiesa.

—Yo solo voy a decirte esto... no he visto con ellos nunca algo así que sea pasajero e intrascendente.

—¿Algo así qué?

—Quizás me equivoco, pero me parecen del modelo que no entrega su corazón a cualquiera, pero cuando lo hacen no es tan fácil de... borrar. Y no creo que tú quieras convertirte en un France.

—Desde luego que no me voy a convertir en France, pero es que peor me lo pones entonces, Belgique... Aun no hace una semana que se separó de su esposa, es imposible que YO como persona, yo, por mí mismo, le atraiga realmente.

—¿Por? Tú estás con Mónaco y él te atrae como persona y por sí mismo, ¿no?

—Pero es que es muy diferente.

—Mmmm ¿si?

—Yo no estoy intentando que esto pase, yo no estoy buscando a nadie, ni necesito a nadie en este momento.

—Lo que temo es que sea como sea te conviertas un poco en su nueva obsesión.

—Pues es que no me importa gustarle si... le gusto, porque sí. Lo que no quiero es que me utilice. Bastante me ha utilizado todo el mundo en otros momentos.

—Es que tú también te has puesto ahí justo para que te utilice... —Bélgica suspira

—¿Y qué crees que debería hacer?

—Mandarle a casa.

—Je... —Se humedece los labios y vacila, porque no quiere hacer eso, pero probablemente Bélgica tenga razón y eso sea lo mejor—. Está bien lo haré —suspira derrotado.

—Solo digo que... bueno, es que tiene que ir a casa y pensarse lo que acaba de pasar y... quizás puedas acompañarle en el proceso o algo, pero no... puedes quejarte por una parte de que te usa y no supera a Galia y por otra que esté en tu casa sin hacerlo.

—No me estoy quejando de que me use, solo te estoy explicando porque yo tengo que... detenerme a mí mismo.

—Tarde o temprano tiene que enfrentar lo que acaba de pasar y quizás después...

—Tal vez... —asiente y suspira. Bélgica estira la mano hacia él.

—¿Estas sufriendo con la idea de enviarle a casa?

—Soy un idiota.

—Nah, no eres un idiota... Él va a sufrir con la idea de que lo mandes a casa también.

—Bueno, sí, pero... yo no debería. En fin. Le diré que el sábado. Mónaco quiere que venga a cenar el viernes. Me parece un poco feo decirle que se marche antes, pero hacerle venir a cenar.

—Espera, tampoco sé si... no sé si lo que te estoy diciendo de echarle sea del todo la mejor de las opciones.

—Es por mí... Creo que sí es una buena idea para mí. Volver a centrarme en Mónaco, ha sido divertido, pero... —A ver si puedeeees.

—Si eso es lo que quieres puedo hablar con Alba y... decirle eso también para que presione un poquito a Cymru para ello —propone ella.

—Pues es que...

—¿Se han... besado o algo?

—No lo sé. Es que no veo como esto podría ser de otra manera—niega con la cabeza como respuesta.

—Él sonaba... ilusionado cuando hablamos con él. Le hemos dicho que no te agobiara... pero si sonaba... —Bélgica aprieta los ojos porque quizás si está siendo un poco dura con Gales —. Siendo objetivos también, creo que esto de Galia lleva bastante tiempo bastante mal como para que él pueda haber superado un poco ya en el camino. Ugh, es que eres mi hermano pequeño, como te... haga algo le mato. Creo que sí quiere algo un poco más en serio contigo que olvidar a Galia.

—Pero Belbel... cómo va a... —la mira.

—Así, idiota como es. Mon dieu, yo qué sé, porque le gustas. Y ahora la que parece que está presionando esto soy yo y no quiero... échale si quieres, concéntrate en Mónaco si quieres, solo... Ugh... ¿No pudieran ir... lento?

—¡Pero si ni vamos!

—¿Estás seguro de ello? Voy a recordarte que Alba me puso un ojo morado en la primera cita, de haberme preguntado qué pasaba en esos tiempos te habría dicho que no... esto. Son torpes.

—Es que... insisto, no voy a ser un sustituto. Si cuando... supere su matrimonio aún está interesado, pues veremos, pero es que no me creo que ya se le haya pasado el trauma. No es lo mismo pensar en dejarla que hacerlo.

—Eso... suena bastante maduro de tu parte —Bélgica le sonríe.

¡Gales dice que él no está intentando otra cosa aún!

—Eso... es porque ya hemos pasado por esto antes, ya lo sabes. Ojalá... ¿crees que podría decirle a Mónaco que Galles no vaya?

Oui, ¿por qué no?

—No sé si lo encontrará raro, pero es que si France lo ha notado ella lo va a notar también y... se va a enfadar conmigo.

Mon amour... Mónaco vive enfadada contigo. La verdad, hay un punto en que sí pienso si Mónaco... Hay un mundo más allá de alguien que vive enfadada contigo

—No seas cruel, ella es MUY paciente conmigo.

—Es que... no debería ser tan complejo.

—Ya bueno, pero estas cosas no se me dan bien.

—Pff... eso es lo que crees. No se. Independientemente de este asunto con Cymru... mira que ella me cae bien, pero odio que todo lo que me digas siempre de Mónaco sea "se va a enfadar" o "está enfadada".

—Es que eso es mi culpa —aprieta los ojos.

—Admito que estarte ligando con alguien más mientras estás con ella si es... para que se enfade. Lo que no debería pasar sería que te gustara alguien más mientras estás con ella.

—Esas cosas son incontrolables.

—Si... y no. Es la mezcla de todo. En fin... no voy a decirte lo que hagas o no.

—¿Mezcla?

—Pues no solo es que Mónaco se enfade, sino que tiene razón y ahora este lío raro con Cymru... no sé, Lux... me preocupas.

—Es que este lío raro... este lío raro es solo... es... probablemente demasiada exposición. O sea, no es la primera vez que me pasa, ni a mí ni a ella, que de repente te empieza a hacer gracia alguien más, incluso sabiendo que no va a ningún lado. De hecho, tal vez precisamente por eso.

—Me... preocupa un poco Cymru —Bélgica suspira.

—¿Por?

—Es que llevan toda la mañana en el golf... y me lo puedo imaginar todo ridículo contándoles a los otros lo que ha pasado contigo. Y tú... diciéndome que esto no va a ningún lado... —se muerde el labio.

—Es que... no sé qué decirte. Probablemente sí sea genuino lo que siente, pero... no es sano. Es lo mismo que pasaba con France. No creo que France no me apreciara y que no le gustara, pero... no. No era... cómo debía ser. Tal vez si hubiera... empezado antes de dejarla hubiera creído que... realmente no estaban bien y él solo... Bueno, pues un poco como me está pasando a mi o si... la hubiera dejado yo qué sé hace unos cuantos meses.

—Ya... este es como el peor momento igual. Quizás si sea mejor alejarte un poco de él... Al menos si vuelve por ti estarás seguro de que si es por ti y no por la situación actual.

—O tal vez solo me estoy imaginando cosas, no es como que haya pasado nada.

—No te las estás imaginando yo le oí... confesar.

—¿Y qué… dijo? —le mira, más interesado de lo que debería después de ese discurso.

—Es que yo misma le he reclamado que hacía cinco minutos estaba con Galia.

—No me extraña.

—Y en realidad él ha insistido que eran amigos y que sabe que tú tienes novia. Que no está invadiendo tu relación con Mónaco.

—Entonces solo me estoy imaginando cosas.

—Pero con todo esto que me estás diciendo tú veo que si te ha agobiado y si se te ha insinuado y si está funcionándole.

—Non, non, tal vez solo... yo estoy malinterpretando.

—Es que yo tenía la misma sensación.

—¿Y?

—En un momento dado Cymru pregunto a Alba que qué hacía había estado hablando conmigo, Alba dijo que yo lo había deducido sola.

—Ajá...

—Me parece más que claro... que yo estaba pensando eso y que todos sabían que lo estaba pensando. Además, que lo han hablado entre sí. A ver, vale, igual y... le gustas y él mismo se está deteniendo por esta situación con Galia... ¿Has pensado en esa opción?

—Puede ser, pero, aun así, si es así tal vez sea mejor para el también esperar un poco.

Oui, si ese es el caso, entonces ya veremos cómo van las cosas en un par de meses, mientras tanto… ¿qué vas a hacer? ¿Pedirle que se vaya?

Voy a decir que para no ayudar a la causa... le llega un mensaje a Luxemburgo, el primero del día.

—Creo que oui. Y aún estoy pensando lo del viernes —explica sacando el teléfono.

—Es que no sé qué vas a hacer con Mónaco y Cymru ahí si te gusta...

—Es que lo va a notar y se va a enfadar... y... para nada.

—Pues no te metas en líos y sácale de la ecuación, aunque no se si ella lo va a considerar sospechoso.

Es una tonta selfie de Gales vestido de anaranjado con amarillo con verde, con una boina a juego, sosteniendo la pelota de golf entre los dedos. Luxemburgo sonríe un poco al ver la foto.

"Recién sacada del lago."

"No me creeré que la has sacado del lago hasta que no te vea como para hacer de Miss camiseta mojada."

"Bueno consideremos que solo estaba en el borde..." foto de sus pies, que traen unos zapatos con u dragón dibujado que no sé de dónde ha sacado, metidos un poco en el fango.

Se ríe y Bélgica levanta una ceja.

—Dijo que me traería una pelota —Luxemburgo la mira y luego le muestra la foto.

—Vaya...

Quoi?

—No, que me hace gracia que te mande fotos —se ríe un poco.

—Supongo que quiere que vea su ropa fea.

—¿Su ropa fea? ¿Por qué querría que vieras eso?

—Lleva toda la semana amenazándome con que la va a traer.

—Ohh... que amenazas —otra vez se ríe —. Son un desastre con eso.

Oui? Solo porque le dije que el polo que llevaba el domingo no me gusta.

—Espero que... no sea su favorita.

—¿Por? Creo que dijo que sí.

—Bueno no quieres odiar su polo favorita ¿o sí? Aunque supongo que eso sería importante sólo si estuvieras interesado en él de verdad y él en ti sin el lío de Galia. Que no parece ser el caso.

—Pues... ahora es tarde como para no odiarlo —se encoge de hombros.

—Es bueno saber tanta pasión hacia sus atuendos —Bélgica se ríe un poco.

—Creo que le gusta que le diga que los odio.

—Creo que le gusta que le digas lo que sea...

—No creo, mira —escribe "Lo que sea" y se lo manda porque tu hermano es muy tonto cuando quiere, Bélgica.

"No crees que estaba en el borde? ¿Y dónde crees que estaba?"

—¿Ves? Está hablando de la pelota, dice que la sacó del borde del lago —se encoge de hombros.

"Tengo más de una pelota, si cae en el centro del lago se queda ahí"

—Ay, Lux... —Bélgica se ríe otra vez.

"Ya me imagino que tienes al menos dos."

"¿Eso ha sido con doble sentido?"

"Bueno, solo si por esas sí que irías al centro del lago."

"Habitualmente... Si acaso las llegara perder, seguro que iría por ellas."

—Ugh... —se ríe y se sonroja porque... no le va a responder lo que se le ha ocurrido—. Ehm... perdona.

—Te has sonrojadoooo. ¿Qué le iba a poner?

—Bueno, ehm… Oui, solo es que iba a contestarle... pero mejor no.

—¿Ahora vas a ignorarle? Venga ya, ¡si tienes ganas de contestarle, contéstale!

—Es que... —se muerde el labio—. Está hablando en doble sentido y como em iba a traer una, le iba a decir...

Quoi? —Bélgica sonríe de lado.

—Que me trajera... —se encoje de hombros—. Pues una de esas.

—Oh! Venga ya. ¡Pónselo! Seguro se muere de risa.

—Ugh! —se ríe y... vale, se lo escribe "A lo mejor deberías traerme una de esas."

Desgraciadamente vas a perderte el sonrojo absoluto. La verdad, pone el móvil del revés porque también le da vergüenza ver la respuesta.

—Ayer... — empieza mientras esperan la respuesta que va a tardar—. Angleterre quería que me diera un beso.

Angleterre... quoi? ¿Por? Cielos... ¿Y no se atrevió?

—Yo le... dije que no.

—Uuuugh!

—Pues no quería que me besara por una apuesta tonta y que notara que... —aprieta los ojos—. Y Angleterre empezó a decirle que yo le había rechazado y que era un ridículo.

—Ya, bueno, desde... buff... desde luego conociéndoles...

Quoi?

—Pues tienen ese asunto de France, lo he oído mil veces sobre las no sé cuántas veces que le pidió matrimonio y le dijo que no, y es como el motivo de burla más cruel. Ahora que tu ni un beso le quisieras dar es casi como matarlos.

—P-Pero es que no... no es que no pudiera... besarle es que...

—Eh, entiendo tu punto —le sonríe sinceramente—. Lo que creo es que Anglaterre iba a interpretarlo de la peor forma posible. Sey le hace eso a Eire a veces. ¿Qué hizo Cymru?

—Ponerse sarcástico otra vez.

—Eso suele funcionarles, creo que cada uno reacciona de manera distinta. Eire se muere de risa o protesta, Alba... se suele poner super serio con esas burlas en plan "tú de qué vas, esto no tiene gracia", y Galles hace eso, sarcasmo. Suelen ser bastante hábiles todos para defenderse.

—Tal vez... tal vez sí. Le pedí perdón luego.

—¿Y qué dijo?

—Él me pidió perdón también.

—Awww ¿por?

—Por el comportamiento de Angleterre.

—Ya, es que es terrible.

—Pero luego todo fue bien.

—¿Sí?

Oui, cuando se fueron jugamos un par de manos de Black Jack y me hizo un truco de magia

—Eso suena... divertido. En realidad, lo que parece es que la están pasando muy bien los dos. O sea, tú, jugando blackjack en martes...

—Ya... ya, pues igual que tener a France y Angleterre cenando ahí. Mónaco se enfadó con eso también.

—Ugh! No me ayudas.

—Dijo que debía invitarla. Probablemente debía. Ya estaba enfadada por lo del domingo y esto no ha ayudado.

—Es que… Estás empezando a sonarme que...

—¿Aja?

—Lo estás pasando muy bien con él... mejor que con otras personas. Y no tiene nada de malo.

—Bueno... —aprieta los ojos.

—Solo... es que mira lo contento que estás escribiendo con él y jugando con él en martes. ¿Hace cuanto no estás así con Mónaco?

—Pero porque no... no dejo a Mónaco hacer estas cosas.

—¿Exactamente... por?

—Todo es muy estructurado, no puedo, de hecho, aguantar este ritmo mucho más.

Control freak.

Luxemburgo aprieta los ojos y Bélgica se ríe.

—Mira lo bien que ha ido la reunión de hoy por culpa de eso.

—Lo dices como si yo no tuviera nada que ver.

Non, non, claro que tiene que ver, pero...

—Entonces ¿te desorganiza mucho las cosas?

—Pues sí.

—¿Él? ¿Qué te hace? Ponle a... oír música o a leer, es fácil distraerles.

—Ya, eso funcionó el lunes.

—Funciona diario... lleva a tu oficina varios libros y verás.

—Aunque parece que lo ha leído todo —asiente igual porque parece buena idea.

—Entonces llévale un clásico... o uno de los libros que le gustan, pero en francés. Esos les divierten mucho, aunque... parlotean TODO EL RATO.

—¿Lo hacen? ¿Qué dicen?

—Sobre lo mal que está traducido y lo ridículos que son los nombres, cosas así.

—Entiendo…

—Y lo mal que es el estilo y lo terrible que está noséquién... ya lo verás. Pídele a Charlotte que te lleve Harry Potter y algo de Shakespeare en francés.

—Se lo diré, merci. Aunque si el sábado se va...

—¿De verdad quieres que se vaya?

—¡Pues tú lo has dicho!

—Pero es que mírate que contento estás.

—Ya, pero...

—Pero nada, si estás contento...

—Pero no tiene por qué ser buena idea —añade igualmente mirando de reojo el teléfono porque hace rato que no vibra.

Como si le llamaras, vibra en ese momento y Luxemburgo se sonroja.

—Es que si realmente no está pasando nada tan terrible no veo por qué sea mala.

—Porque el trasfondo.

—Siempre haces lo que tienes que hacer, si esto está haciéndote sonreír y sonrojar no veo por qué razón parar.

—Porque no puedo dejar que me pase por encima. ¿Y si destruye lo de Mónaco para luego ser nada más...?

—¿Pero no estás diciendo que no está pasando realmente nada?

—No, pero si tú y France y Angleterre y... todos pensáis que algo está pasando...

—Todos nos estamos armando historias de que te está pidiendo matrimonio.

Quoi?

—Pues es el... chiste de siempre con él.

—Ah... non, non —toma el teléfono distraídamente a ver qué le ha dicho sin pensar a lo que... está respondiendo.

—¿No te lo ha pedido?

"Esas... las llevo a donde quieras"

—Mais non.

"Salvo a Westminster según tu hermano"

"Uhhh... eso ha sido bajo"

—O sea es que si nos estamos haciendo ideas, pero no están pasando ¿cual es el problema?

"Quizás es que las guardo para ocasiones mejores."

"No tan bajo, al nivel de lo que hablamos"

—Eh? Perdona... Quoi? —pregunta porque por estar contestando no la ha oído.

"Nivel medio... ¿para que llevar eso a Westminster cuando puedo regalarte una...?"

—¡No me estás oyendo! —se ríe, acusándole.

—Eh? Non, oui, oui —se defiende.

—¡Qué vas a hacerme caso!

—Que sí, que sí te hago —la mira y le sonríe, Bélgica se ríe.

—¿Qué dice?

Se vuelve al teléfono y le escribe "quiero la izquierda"

"Buena elección, es la más grande" ESTO ES CULPA DE QUE ESTÁ CON SUS HERMANOS Y SEGURAMENTE HA BEBIDO...

"Precisamente, el tamaño importa"

"Pensé que serías del modelo de pensar que no importa tanto el tamaño como lo que se hace con ello."

—¿Qué diceeeee?

—Es... nada, tonterías —sonríe de ladito. "Eso solo lo dicen los que la tienen pequeña ¿Crees que es mi caso?"

Alguien escupe un poco el whiskey que está bebiendo

—Tonterías quizás, pero...

—Mira, lee —le deja el teléfono. El triple parpadeo de Bélgica... arruga la nariz.

—Esto es un flirteo... descarado.

—Oh, venga, es una broma.

—Acabo de perder la inocencia.

—¡Anda ya! —se ríe Luxemburgo.

—Yo era una persona super decente hasta que los conocí.

—Ah, hablas de tu marido, claro.

—No, tonto... hablo de ti y de lo que está haciendo Cymru contigo —se sonroja igual con esa forma de ponerlo y se ríe.

Oui, oui... buena forma de esquivar lo obvio...

—Probablemente Cymru termine antes siendo tu marido que Alba el mío.

—Oh, no seas así, venga... —la mira un poco desconsolado.

—Es brooooma, venga, seguramente no —levanta las manos y sigue sonriendo, porque sí lo ha dicho en broma.

—Siendo "seguramente" un concepto súper tranquilizador.

—Bueno, la única garantía aquí es que Cymru va a pedirte que te cases.

—Y ya veremos que le digo, mira qué me escribe. Suena como que él la tiene pequeña. ¿Qué tal que el sexo es un desastre? Yo no soy gay, ¿sabes?

—Creo que no es multi... desgraciadamente. Pero no creo que la tenga especialmente pequeña.

—¿Ves? Peor aún. ¿No?

—Pues tú has oído a England, ¿crees que si la tuviera pequeña no se burlarían de él hasta el cansancio? Galia... no se quejaba del sexo hasta donde sé. Aunque no dejaba a los otros... quizás si no es bueno en la cama. Podrías preguntarle a Sey.

—He visto lo que hacía con Galia.

Quoi?

—Lo he visto, como lo hace con Galia. Es difícil saber el tamaño sin comparar, aunque no parecía especialmente... nada. Ni pequeña ni grande.

—Lo viste en los videos de Prusse o dónde?

—Oui —asiente.

—¡Estás TAN jodido, hermanito!

—¡Solo era curiosidad! Y para molestarle. Sabe que los compré.

—Ya, claaaaaaaaaro... ¿y qué te pareció?

—Galia... no hablaba mucho con él.

—¿Mientras?

—En ningún punto.

—Ohh... ya... y te pareció que tu… ¿Que tu hablarías más con él? ¿Galia al menos parecía disfrutar?

Oui... oui.

—No es como que ella no tenga experiencia... es como France. Algo debe haber aprendido. Pero ya... tú no eres gay.

—Exacto.

—¿Te... excitó el video?

Belgique! —se sonroja.

—¡Es una pregunta válida!

—No, ¡no lo es! Es... no voy a responder a eso —vuelve a mirar el teléfono a ver si le ha respondido, solo para no mirarla a ella.

—Eso es un si entonces, directamente.

—Non! —protesta sonrojándose.

"No pareces tener ningún trauma."

"No lo tengo."

—¡Pues lo es! ¡Ja! Además... te parece que Galia no habla lo bastante... ¿él sí?

—M-Me refiero a... que no le sigue las bromas.

—Para no ser gay has estado muy enfocado en verle y disfrutar...

Luxemburgo la fulmina un poco intentando esconder la sonrisa, pero sonrojado igual.

—Yo no iría a ver ese video si no fuera a pensar que puede excitarme. ¿Hay muchos?

—Non. Solo era por curiosidad. También vería los tuyos si los hubiera.

—Ugh! No te creo.

Mais oui! ¿Por qué no? Y los de Hollande. ¿Te lo imaginas?

—Ugh! No tengo ni idea de cómo sean ni hubo de ustedes en la cama, ¡pero no quiero ni imaginarlo! Tú por lo visto, hablas.

—¿Por qué no? Es... un asunto un poco de curiosidad morbosa. Como los de Allemagne.

—Le diré a Prusse que ponga cámaras en tu casa.

—Non! Aunque Liechtenstein hace buenos descuentos con eso, pero puedo permitirme el precio completo.

—¿Hace descuentos?

Oui. Si proporcionas material que tiene buena salida luego comprar videos de los demás es más barato.

—Quizás podrías poner en la habitación de Gales... y comprarlos todos tú con descuento —se ríe de la idea idiota.

—Eso es un poco... invasivo e irrespetuoso, ¿no?

Bélgica se ríe

—Vengaaa! Para eso, ponlas en tú casa, que vuestro no tiene nada y seguro se pagaría caro lo del multiorgasmo. Pasa lo mismo con Britania

—Ugh! No! ¡Y nadie quiere ver a Britania!

—Eso lo dices tú, yo le he regalado algunos de ella a Espagne para fastidiarle.

—Y los has visto, por lo visto.

—Nah, yo no. También sé que Sey sí ha visto alguno.

—Sey?! Ugh pooooorr?

—Por lo que sé, justamente por lo del multiorgasmo.

—¿Quería aprender?

Oui.

—Pero Britania es… Ugh, vale, menos mal que no hay grabaciones mías que me moriría de vergüenza.

Luxemburgo se ríe con ello

—Es que... la verdad dime, Cymru que no es... bueno, no es Galia o Roma o... así. ¿Esos videos le favorecen en algo?

—¿Quieres ver uno?

—Pues así como querer... —se ríe, porque si quiere ver más o menos como se ve—. A ver...

—¡Anda ya! —busca uno igual poniéndolo en el teléfono.

—¡Es increíble que tengas estos videos en tu teléfono a medio restaurante, señorito!

Y van a poder ver como... cinco minutos nada más antes de que sea hora de irse.

—Pues las nuevas tecnologías, Belbel, se puede acceder desde cualquier dispositivo con la contraseña de usuario

—Ya, ya... y ver porno local... cielos, Galia es súper guapa.

—Ya, ya lo sé... y según Liechtenstein es como Autriche que siempre sale bien y nunca se ve obsceno...

—Ya, ya... buff... y Cymru —Bélgica sonríe de lado porque es igual de flacucho y desgarbado que el suyo.

—La verdad, da un poco de penita. No hacen muy buena pareja.

—¿Porque ella es súper guapa y el... feito?

Luxemburgo asiente.

—No seas cruel, eso no debería tener que ver.

—Pues no digo que no funcionaran, pero... estéticamente...

—Es que estéticamente en general con cualquiera... contigo sería un desastre también —se ríe un poco otra vez.

Excuse moi? ¿Insinúas que Galia es más guapa que yo?

—No hablaba de Galia, hablaba de Cymru...

—Ah, claro... No como tú, que haces pareja perfecta con su hermanito

—Bueno, yo soy feita.

—¡Anda ya!¡ —vuelve a reírse

—Sí, yo no resalto contra Alba, él se ve guapo a mi lado.

Luxemburgo le sonríe porque ella es tan dulce y ella sonríe un poco también.

—Tú en cambio... tan habituado a Mónaco...este hombre te debe... ay, las caras —se sonroja un poco porque sí se parece a Escocia—, parecer un esperpento.

—La belleza es subjetiva —se encoge de hombros mirando la pantallita de reojo y Bélgica sonríe de lado con eso.

—Estoy de verdad de acuerdo... ¿te parece guapo? —pregunta dulcemente.

Luxemburgo niega, sin mirarla.

—Jo, yo que por fin pensé que alguien iba a entender por qué a mi Alba si me lo parece...

—Eso te pasa porque tú estás enamorada.

Bélgica se ríe y se sonroja

—¿Sabes? Es que creo que este estado de enamoramiento tonto era pasajero, pero...

—Ya, ya... todos vemos que no se te pasa.

—Ugh, callaaa —protesta sonrojándose —. ¡Mejor vámonos ya que es tarde!

Oui, oui —apaga el video y se levanta para ir a pagar.

Bélgica sonríe un poco más, y saca el teléfono para escribirle a Escocia, dejándose invitar por supuesto, como todos por lo visto. Pues Luxemburgo le dijo que viniera.