Hermano menor y mayor a la vez.

La inquieta llama de una vela iluminaba un pequeño despacho, en dicho despacho se encontraba Morgan, estratega en jefe de la rebelión contra Grima. Asumió el cargo después del "fallecimiento" de su madre; un cargo que le cayó como anillo al dedo, debido a su prodigiosa inteligencia. No obstante, tan importante cargo conllevaba una gran responsabilidad más para alguien de su edad, pero no hubo de otra, ya que al igual que los otros chicos, le tocó crecer deprisa.

Llevaba horas estudiando, leyendo, trazando rutas, peleando con su mente, susurrando posibilidades ventajas y desventajas. Pero el estratega se estaba cansando, restregaba sus ojos de cuando en cuando para no rendirse al sueño, la vacilante llamita de la vela empezaba a ejercer hipnosis, poco a poco sus ojos se cerraban; a punto estaba de caer rendido cuando sintió el leve peso de una mano sobre su hombro, al voltear a ver vio a su hermana parada sosteniendo un plano de comida.

Morgan trato de disimular el agotamiento, volvió su vista hacia los mapas y sonriendo amablemente dijo: No tengo hambre. Lucina puso el plato en la mesa, puso sus manos en los hombros de su hermano, para que lo mirara a los ojos, rápidamente noto el cansancio en su mirada decaída.

– No has comido en todo el día.

– Aun hay mucho por hacer – Contesto seriamente.

Lucina suspiro, acerco una silla, se puso frente a el a observarlo de forma desafiante, una estrategia que Lucina utilizaba para obligarlo a prestarle atención. Morgan trato de ignorar el peso de su presencia, pero no lo logro, empeoro cuando su estómago rugió de hambre y los colores se le subieron al rostro. Entonces dejo la pluma en el tintero, suspiro, tomo el plato de comida, empezó a comer a gusto y a grandes bocados.

Morgan hizo un ultimo intento para demostrar que no había sido derrotado, entonces con la boca llena dijo:

– La estrategia estará lista pronto.

– No trates de ser tan serio hermano – Dijo Lucina.

Ambos se echaron a reír, la barrera general/estratega se había roto. Solo habían dos hermanos disfrutando el momento, algo que a Lucina le gustaba ver e intentaba mantener vivo en estos tiempos tan oscuros.


Sonriente y relajado se encontraba Morgan escogiendo un libro en uno de los estantes de la biblioteca del castillo. Cada vez que estaba en el castillo (y la paz lo permitiera) no perdía oportunidad para leerse un buen libro que hablase de estrategias militares, a lo mejor era un pasatiempo recurrente en su época que compartía con su madre, la única persona que recordaba con claridad, ya que, a diferencia de los otros niños, Morgan llego a esta era con la mente prácticamente en blanco. De no ser por el tiempo, amor y la paciencia de su familia, no pudiera sobrellevar la confusión de los flashbacks que tenía ocasionalmente y la impotencia que le provocaba su amnesia. Otro efecto colateral que sufría era su memoria a corto plazo, volviéndolo olvidadizo de vez en cuando; de hecho (ahora que lo pensaba) estaba buscando el libro perfecto para compartirlo con su madre, ya que Chrom y Lucina estaban fuera del castillo. Con su libro bajo el brazo busco a su madre por el castillo, la servidumbre lo saludaban al verlo pasar, sin sospechar que aquel muchacho era en realidad el futuro príncipe de Yilsse y no un "invitado especial" como Chrom y Robin les habían hecho creer.

Morgan recorrió varias secciones del castillo donde según él debía circundar una reina, al no encontrarla, subió un par de niveles más, recorrió otros pasillos, luego escucho un dulce cantito, Morgan siguió la voz hasta dar finalmente con Robin. La escena con la que se topó no pudo ser más extraña y enternecedora a la vez. Robin estaba en la habitación del príncipe, "su antigua habitación" arrullando a su versión pasada; no la interrumpió, en su lugar se quedó mirándola, un sentimiento de nostalgia lo invadió, al recordar sus abrazos, su tierna voz, todos esos momentos juntos pasaron en su mente tan claros como el agua.

Un par de jalones en su túnica lo hizo volver en sí, miro hacia abajo como una pequeña Lucina de 4 años trataba de llamar su atención.

– Hermano ¿jugamos?

Aunque Chrom y Robin habían sido muy enfáticos en explicarle que eran "personas importantes" por alguna razón, la princesa se empecino en referirse a su versión futura y a él como "hermanos mayores", cargo que Morgan aceptaba gustosamente. Entonces sonrió dócilmente y acepto la petición de su ahora hermana menor. Lucina tomo la mano de Morgan y alegremente lo guio a uno de los jardines del castillo. El jardín en cuestión era un gran campo de flores, de aroma dulce, donde el viento levantaba varios pétalos caídos que acentuaban la placidez del entorno, un sueño hecho realidad para aquellos que han sufrido las crueldades de la guerra. Rápidamente ambos hermanos se enfrascaron en juegos infantiles que inclinan persecuciones, escondidas y canciones. Morgan no podía estar más contento, más aún cuando empezaron a llegar fragmentos de memoria, esa vez, era Lucina quien se dejaba guiar por sus ocurrencias infantiles, todo esto bajo la mirada atenta de sus padres; invertir papeles se sentía tan extraño. Después de corretear un rato, ambos se dejaron caer en el campo de flores. Morgan se entregó a la placidez, pero Lucina se puso a" trabajar" a sus 4 años de edad era muy habilidosa con sus manos, tarareando una melodía, con unas flores y raíces que encontró, construyo dos coronas improvisadas, una para ella y otra para su "hermano mayor". Al momento que Lucina le coloco la corona, Morgan se transporto a un momento en su tiempo, donde un pedazo de tela aterrizo en su cabeza e inmediatamente sintió una leve sacudida.

– Te refriaras – Dijo Lucina que en ese momento rondaba los 10 años.

Si no estaba equivocado, esa vez perdieron en uno de los bosques del reino cuando perseguían un insecto de espalda naranja y puntos blancos, una fuerte lluvia reventó, a duras penas alcanzaron a refugiarse en una cueva. La lluvia era fuerte y estruendosa por los rayos ocasionales caían, remarcando el de por si miedo de estar perdidos. Pero Lucina siempre se mantuvo serena, pese a que quizá ella también sintiera la misma angustia; ahora que lo pensaba su hermana siempre le dio esa sensación de seguridad.

– ¡Hermano… Hermano mira! Soy una guerrera.

Morgan salió de su flashback al escucharla, vio a Lucina zarandear una rama muerta de un lado para otro, imitando torpemente los tajos y estocadas de una espada. Morgan sintió un doloroso piquete en la cabeza, recordó una noche, donde las antorchas rugían furiosas moviéndose de igual forma, una armada ingresando a una zona enemiga, no recordaba con claridad el objetivo de esa misión, pero si recordó el resultado: una emboscada fallida, donde varias unidades cayeron como piezas de domino; la peor parte fue recordar a Lucina ponerse al frente de aquel desastre, lanzándose hacia el enemigo para dar tiempo suficiente para que pudieran escapar. Esa vez Lucina termino moribunda y bañada en sangre.

Perturbado por aquel recuerdo, se levanto y le quito el palo a Lucina, se inclino a su nivel y con voz fuerte le dijo:

– ¡Eres una princesa, no permitiré que vuelvas a blandir una espada! ¡Me oyes!

Asustada por el violento arrebato de Morgan, los ojos de Lucina empezaron a llenarse de lágrimas. Al ver aquella expresión de miedo hizo que Morgan se sintiera el peor de los canallas, abrazo a su hermana y entre lágrimas se disculpó.

– Si tan solo hubiera nacido antes, o por lo menos hubiera sido tan fuerte como nuestro padre, no tendrías esa carga tan pesada en tus hombros.

La expresión de Lucina paso del miedo a la confusión, no entendía aquel estado anímico tan repentino, así que hizo lo que una niña inocente podía hacer abrazar a su hermano y olvidar aquel mal rato.

– No. Nosotros somos quienes deberíamos disculparnos – Escucho tras de sí.

Lucina soltó a Morgan y alegremente fue a encontrarse con el regazo de su madre, Morgan seco sus lagrimas e intento recomponerse, no obstante no hay nada que ocultar ante el ojo entrenado de una madre. Dejaron que Lucina siguiera divirtiéndose, mientas madre e hijo se sentaron a conversar. Fue una conversación larga, donde la paciencia era el método elegido, las palabras sinceras y consejos el resultado; así era antes, antes de que Grima destruyera todo y cada uno debía asumir una responsabilidad por el bien común. La conversación llego a su fin cuando la hora de la siesta llego, bostezando y tropezando de somnolencia la pequeña Lucina se rindió en el regazo de su madre. Robin enternecida por el sueño inocente de su hija, hizo un juramento que aligero la pesadumbre del joven estratega.

– Esta vez, ni tu padre ni yo les fallaremos en darles un mejor futuro, un futuro donde no tengan que pelear nunca más.


Notas de la autora:

Bueno, al fin decidí serializar esta sección, así que esperen más capítulos, la mecánica será la misma que Rivalidades en Street figther, cada capitulo se trataran personajes y situaciones diferentes, voy a tratar de intercalar acontecimientos de pasado y futuro como lo dice el titulo.

Creo que es bastante evidente, pero por si las dudas aclarare que la pareja Chrom x Robin se mantendrá inamovible en toda esta sección.

Hablando del capitulo. En volver al futuro se nos dice que no podemos encontrarnos cara a cara con nuestro yo del pasado por el peligro de las paradojas y demás. Aquí y quizá en capítulos posteriores seré más indulgente en esta cuestión, lo tratare del mismo modo que Mortal Kombat 11 donde los personajes interactúan con sus versiones más jóvenes sin problemas.

Dicho lo anterior dos cosas a tomar en cuenta:

La primera para efectos de este capitulo he hecho que haya pasado cierto tiempo y toda la segunda generación ya ha interactuado con sus padres, por eso Morgan esta en el castillo xDDD

La segunda es que en el juego, Morgan al igual que su madre llega con la mente en blanco, con la diferencia que sus experiencias con Robin se encuentran intactas, el porque de esto es bastante ambiguo. Para efectos de este one shot y por lo antes dicho que son años después de su llegada, ha convivido con su familia y por ende le han ayudado, haciendo que Morgan tenga flashback ocasionales y basándome en los diálogos de soporte de Chrom y Lucina (en el caso de que sea hijo y hermano respectivamente) se ve que Morgan si tiene recuerdos o por lo menos se ha esforzado en recuperar.

Bien... espero les haya gustado. Iré escribiendo más cosas a medida que se me ocurran, no creo que sea muy larga esta sección pero aun asi espero sea de su agrado.

Hasta la próxima

Fic actualizado 17/09/2023.