Capítulo 14: Los Digimons Sagrados
Había amanecido en el mundo digital y el primero en despertar fue David, el cual pudo ver como Mario se encontraba aún haciendo su guardia, con lo que se levantó para ir junto a él.
-Parece que has tenido una noche tranquila.-Comentó David mientras se sentaba al lado de su amigo.
-Eso parece.-Acepto Mario antes de mirar a su amigo, y ver su expresión.-David sé que desde hace un tiempo te preocupa algo, ¿se puede saber qué es?-Le preguntó después de acordarse de haberle visto esa expresión varias A veces después de que se enfrentarán a Barbamon.
-¿Recuerdas el día que nos encontramos con nuestros Digimons?-Le preguntó David, a lo que Mario solo apoyando con la cabeza.-Aquel día no le di importancia, pero hace unos días cuando recibiste tú emblema, me puse a pensar que, si son los mismos emblemas que los de la serie, no los de la serie ya me entiendes.-Le empezó a explicar.
-Sé por dónde vas.-Le cortó Mario.-Piensas que cada uno va tener el del color de aquella vez.-Le dijo, con lo que David solo avanzando con la cabeza.-Si no recuerdo mal, él tuyo era naranja, y ese el emblema del valor.-Dijo después de recordar los sucesos de aquel día.
-Así es, pero me conoces y sabes que yo nunca podré hacer que brille, aunque lo consiga, no soy valiente.-Le confesó David.
-No seas tonto, claro que eres valiente, quien más haber podido cantado en medio de tanta gente muerta de vergüenza, o haber parado un puño con su cara para evitar que le dieran a la chica que ama.-Le recordó Mario.-Ahora es mejor que despertemos a los demás para partir cuanto antes.-Le avisó antes de levantarse.
Con lo que una vez que todos se habían despertado habían desayunado, metieron la barca en el agua y mientras Mario y David sujetaban la balsa, los demás iban subiendo y una vez que todos estaban subidos ambos jóvenes empezaron a empujar la balsa antes de subirse a ella.
-¿Y cuánto tardaremos en llegar a esa isla?-Preguntó Yuri observando la inmensidad del océano.
-Pues según los cálculos que hice esta madrugada, un día entero, más o menos.-Contestó Mario después de apartar la vista de la pantalla.
-Me parece a mí que va ser un viaje bastante largo.-Comentó David después de escuchar a su amigo.
Con lo que después de estar un par de horas navegando, gracias tanto a la corriente como al remo que habían hecho pudo ver en la lejanía un enorme objeto, que mientras se acercaban pudieron ver que se trataba de un caparazón verde con tres enormes puntas.
-De quién sea esto, debe ser un Digimon enorme.-Dijo Allyson al ver el caparazón.
Sin que nadie se lo esperase una enorme criatura salió de las aguas.-Dejarme en paz.-Ordeno mientras podía ver que el Digimon se parecía a una morsa con un enorme martillo el cual era sujeto por un brazo humanoide, y el otro parecía una zarpa.
-Cuidado es Zudomon.-Informó Max mientras se sujetaba en la balsa.
Con lo que los siete jóvenes y sus Digimons veían como el Digimon se movía provocando muchas olas.
-Algo le debe haber alterado.-Avisó David.
Con lo que todos empezaron a mirar al mar, para encontrar lo que molestaba al gran Digimon, y fue Desi la primera que lo vio.
-Ahí.-Dijo señalando al fondo mientras se sujetaba a su hermano.-E vio unas hélices.-Les informó.
-Patamon puedes mirar desde el aire, por favor.-Le pidió Yuri a su compañero.
A lo que Patamon se elevó para tener una mejor vista, identificando enseguida los Digimons que atacaban a Zudomon.
-Son un grupo de Divermon.-Les informaron nada más aterrizar otra vez en la balsa.
-¿Cómo les venceremos, ninguno de nuestros Digimons puede luchar en el agua?-Preguntó Naomi.
-Necesitamos a Salamon y Patamon.-Avisó David, con lo que al recibir la mirada de sus amigos se dispuso a explicarse.-Si usan sus ataques, Terriermon digievolucionado a Gargomon, y Renamon podrán acabar con ellos.
Con lo que con una mirada todos decidieron hacer caso, a lo dicho por David.
-Terriermon es hora de que empezamos nosotros primero.-Anunció Allyson a su compañero poniéndose de pies, aunque esta pudo mantener el equilibrio a duras penas.-Carta de ida, accesorio S de digievolución.-Dijo mientras pasaba la carta por su dispositivo digital .
-Terriermon, digievoluciona en.-Empezó a decir mientras una luz blanca le cubría-Gargomon.
-Salamon/Patamon, ahora-Dijeron a la vez Desi y Max.
Con lo que, metiendo la cabeza en el agua, usaron sus ataques aullido de cachorro y disparo de aire, para formar una gran onda sonora en el agua, que hizo que los Divermon parasen, momento que aprovechó a Gargomon desde el borde de la balsa, y Renamon salta hacia el aire para lanzar sus ataques.
-Gargoperdigones/Koyotetsu.-Dijeron ambos Digimons a la vez.
Cuando los disparos de Gargomon y los cristales de hielo de Renamon traspasaron el agua, e impactaron contra los Divermon, provocaron la destrucción de muchos de ellos, mientras que otros huían del lugar, al ver que los Divermon habían dejado de molestarle Zudomon se quedó quieto. viendo como los tamers y sus compañeros acaban con ellos.
-Muchas gracias.-Les agradeció Zudomon una vez que los Divermon que quedaban se habían marchado.-Un momento vosotros sois los tamers elegidos.-Dijo al reconocer a los jóvenes como humanos.
-Así es, y nos dirigimos al castillo de los Digimons sagrados, cuando nos encontramos contigo.-Le contestó Mario.
-Entonces dejarme que os lleve, es lo mínimo que puedo hacer por haberme ayudado.-Les pidió Zudomon.
-Está bien, iremos más rápidos que en esta balsa.-Aceptó Naomi.
Con lo que con cuidado empezaron a subirse al caparazón de Zudomon, él cuál una vez que estaban todos en su espalda empezó a nadar alcanzando mucha más velocidad.
-¿Y por qué no se defendía de aquellos Digimons?-Le preguntó Desi a Zudomon.
-Esos Divermon son demasiado rápidos, como para poder golpearles, aparte de que si usaba mi ataque podría dañar a otros seres.-Les explicó.
Pasado tres horas desde que se encontraron con Zudomon, pudieron ver a lo lejos un enorme edificio.
-Chicos fijaos es un castillo.-Indicó Yuri señalando al frente.
-Así es, ya estamos llegando ese es el castillo que los tres ángeles usaron como cuartel en su lucha contra los grandes señores demonios, hace ya mucho tiempo.-Les explicó Zudomon.
Con lo que una vez que el Digimon marino se acercó a tierra, los jóvenes tamers y sus Digimons saltaron de su caparazón, después de haberle agradecido por su ayuda y se despidieron del Digimon, emprendieron su camino hacia lo alto de la isla donde estaba el. castillo.
-¿Y sabéis de que Digimons se tratan esos ángeles?-Les preguntó Allyson a los chicos.
-Se trata de Seraphimon, Ophanimon y Kerpymon, son los tres Digimons de nivel híper campeón de tipo ángel más poderoso.-Les explicó Mario.
-Cada uno de ellos tiene un cargo, que según se dice fue impuesto por Dios, Seraphimon se encarga de impartir la justicia, Kerpymon es el encargado de la sabiduría, y por último Ophanimon que se encarga de impartir el amor y la misericordia de Dios. .-Les termino de explicar Max.
-Entonces son la máxima autoridad en el mundo digital.-Comentó Naomi después de entender lo explicado por ambos chicos.
-No al principio, las cuatro bestias sagradas eran las encargadas de eso, pero según se dice al vencer Lucemon a su líder perdió el control del mundo digital, y cuando los Digimons sagrados salieron hubo muchos conflictos entre los seguidores de ambos bandos, que al final se pudo resolver.-Le contestó Renamon.
-¿Y no se sabe dónde están las cuatro bestias?-Preguntó David.
-No, esa historia es muy vieja, y se ha perdido con el paso del tiempo.-Contestó Gabumon antes de llegar a las puertas del castillo, las cuales se empezaron a abrir.
-Por favor seguirme, mis señores los esperan.-Les pidieron un Digimon con apariencia humanoide, pero cubierto por una antigua armadura medieval.
Con lo que los siete domadores y sus compañeros le empezaron a seguir, hasta llegar a una enorme sala con una mesa enorme y unas cuantas sillas.
-Gracias por escoltarlos hasta aquí Knightmon.-Le agradeció uno de los tres Digimons de la sala, la cual tenía aspecto humanoide, cubierta por una armadura azul que solo dejaba su vientre al descubierto.
-Así un placer, mi señora Ophanimon.-Contestó Knightmon antes de retirarse.-Gracias por llegar hasta aquí niños, incluso dejando atrás su mundo.-Les agradeció.
-No tienes por qué agradecerme, según lo que nos ha explicado Jijimon, somos los únicos que podemos salvar los dos mundos.-Le restó importancia Mario.
-Puede ser, pero la misión que os toca emprender es difícil, debéis recorrer este mundo para encontrar los demás emblemas, y este viaje os podréis encontrar con muchos Digimons que sirven a los señores demonios.-Les avisó Seraphimon.
-¿Sabéis dónde se encuentran los demás emblemas?-Les preguntó Yuri.
-Me temo que solo conocemos la ubicación de dos de los emblemas más.-Contestó Seraphimon.-Por eso mientras Kerpymon dirige a Desi y Yuri hasta el lugar, nosotros nos quedaremos aquí.-Les indicó, antes de ver a su amigo asentir.
-Seguirme por favor.-Les pidió Kerpymon a ambos jóvenes.
-No se preocupen, Kerpymon cuidara bien de ellos.-Les ávido Seraphimon al ver las miradas preocupadas de David y de Naomi, ya que le había cogido cariño a la pequeña.
-¿Por qué saben que son ellos?-Les preguntó David aun preocupado por su hermana.
-Los hemos estado observando mucho antes de mandaros a vuestros compañeros.-Le contestó Seraphimon.
-¿Fuisteis vosotros?-Preguntó esta vez incrédula Naomi.
-Así es, estuvimos buscando desde hace mucho tiempo a jóvenes con vuestras características, para ayudarnos a detener esta amenaza tanto para el mundo digital como para el vuestro.-Les explico Ophanimon.-Y solo vosotros eran los elegidos, pero cómo sería demasiado difícil Decidimos daros un poco de ayuda.
-Cómo Tobias y el resto.-Comentó Allyson.
-Así es, ellos fueron seleccionados para ayudaros, pero solo vosotros tenéis el poder necesario para acabar con esta guerra.-Les avisó Seraphimon.
-¿Y saben cómo podemos ayudar a nuestros Digimons a llegar a los siguientes niveles?-Les preguntó David.
Pero antes de que alguno de los Digimons ángeles pudiese decir nada el castillo empezó a tambalearse, y un grupo de Knightmon entró dentro de la sala.
-Señores, las fuerzas de los señores demonios están atacando el castillo, y parece que les comanda Laylamon.-Les avisó Knightmon.
-Volved al campo de batalla y ayudar a vuestros compañeros, nosotros iremos enseguida.-Les ordenó Seraphimon.
-Nosotros también os ayudaremos.-Les dijo David sacando su D-Power para luchar junto con su compañero una vez más.
-Me temo que no puede ser, debéis reuniros con vuestros amigos e iros de aquí.-Le nego Ophanimon.
-Juntos fuimos capaces de derrotar a Barbamon, si unimos nuestras fuerzas y las vuestras podremos vencerla.-Le dijo Mario uniéndose a su amigo.
-Me temo que no será así, Barbamon era el más débil de los siete grandes señores demonios, con vuestro poder solo conseguiréis que os maten, y dejaréis que ellos ganen esta guerra.-Les avisó Seraphimon.
Al ver que ni los jóvenes, ni sus compañeros Digimons estaban dispuestos a irse, Ophanimon tuvo que dar el primer paso llamando a uno de sus compañeros Digimons, el cual al entrar en la sala pudo ver que se parecía a una bola peluda con alas, dos piernas y brazos, en el cual llevaba una lanza.
-Piximon, llévalos con sus amigos y sácalos de aquí.-Le pidió Ophanimon, con lo que haciéndole caso a Ophanimon, Piximon creó una burbuja donde metió a los jóvenes y sus Digimons que no se querían mover.-Prestad atención debéis encontrar a las cuatro bestias y pedirles ayuda, esa es tu prioridad ahora, junto con encontrar los emblemas.-Les avisó la Digimon ángel
Una vez dicho eso, los tamers y sus Digimons pudieron ver como Ophanimon y Seraphimon se dirigieron hacía el campo batalla, mientras ellos eran llevados por Piximon hacía la zona baja del castillo, donde pudieron ver como Kerpymon conducía a Desi y Yuri hacía la sala donde habían estado hacía unos minutos.
-Kerpymon, Ophanimon me ha ordenado pi, que les lleve a un lugar seguro, pi.-Le explico Piximon.
A lo que Kerpymon solo se acercaba con una sonrisa antes de dirigirse fuera del castillo para ayudar a sus amigos, mientras Piximon dirigía la esfera hacía el otro lado una vez que los dos niños y sus compañeros eran ingresados en la esfera.
-Piximon detente, tenemos que ayudarte.-Le pedía Naomi, mientras veía como David intentaba abrir un agujero a golpes.
-Lo siento, pero no puedo, pi.-Contestó Piximon antes de llegar a una de las torres.-Ahora es hora de que os vayáis.-Les avisó antes de golpear la esfera con su lanza, mandando la burbuja lejos del castillo.
-Mirad.-Dijo rápidamente Mario al mirar hacia abajo.
Cuando hicieron caso pudieron ver como los compañeros de los tres ángeles luchaban contra Digimons oscuros, y los tres ángeles luchaban contra una fija humanoide de la cual pudieron distinguir que era una mujer y que iba de negro, cuando la esfera se alejó de la zona de batalla, el D-Power de Desi empezó a brillar.
-Tamers, nosotros no podremos ayudaros mucho más, pero recordar debéis encontrar a las cuatro bestias y pedirles ayuda, ellos saben lo que hacer.-Les hablo la voz de Ophanimon, antes de que D-Power se apaga.
-Ophanimon.-Llamaron todos al ver que no había ninguna comunicación más.
Pero antes de poder decir más la esfera en donde iban encerrados se estrelló contra suelo firme.
-¿Creéis que ellos están bien?-Preguntó Desi.
-No lo sé, pero lo único que podemos hacer ahora, es encontrar los emblemas y las bestias sagradas.-Dijo David queriendo olvidar la batalla que habían visto.
-¿Por cierto que emblema habéis recibido?-Les preguntó Naomi a Desi y Yuri.
-Yuri ha recibido el emblema de la esperanza, y yo el de la luz.-Contestó Desi, antes de sacar el emblema al igual que Yuri y revelarlos.
Cuando ambos emblemas recibieron la luz del sol, tres rayos de luz procedentes de donde habían venido chocaron con ellos metiéndose en los D-Power de Desi, Yuri y Max.
-¿Qué ha sido eso?-Preguntó Terriermon después de quitarse las orejas de los ojos.
-Parecía ser una poderosa esencia.-Comentó Renamon.
-Creo que será mejor que nos quedemos aquí por hoy.-Propuso Naomi al ver como todos se encontraban distraídos.
A lo que todos estuvieron de acuerdo en eso, con lo que todos sacaron sus cosas y se sentaron para poder distraerse.
Aquí está el final del capítulo catorce, donde los tamers han llegado al destino que les había indicado Jijimon, donde han conocido a los tres ángeles, aunque estos les han puesto una nueva misión para equilibrar la balanza en el mundo digital. Quiero dar las gracias a todos los que estáis leyendo esta historia, y que cualquier cosa podéis dejar un comentario . Un saludo, y hasta la próxima actualización.
