Finn había estado esperando este momento durante mucho tiempo. Fantaseando con ello durante sus largos meses de terapia física, y en esas noches en las que Poe estaba La Fuerza sabe dónde luchar contra un enemigo que Finn conocía muy bien. Había oído rumores, susurros de que acostarse con Poe era una experiencia .

Y una vez que pudo calmar los sentimientos de celos en su pecho (porque, por supuesto, alguien tan atractivo y maravilloso como Poe habría tenido muchas parejas antes), se emocionó ante la perspectiva.

No era que Finn fuera virgen.

Los policías tuvieron sexo, en abundancia. No tenían mucho más que hacer en su tiempo libre aparte de leer libros aprobados por la Primera Orden y, finalmente, las cosas siempre se habían convertido en actividades más carnales. Era sólo que en aquel entonces había sido un alivio del estrés, algo rápido, nada que alguien pudiera describir en tonos tan desconcertantes.

Entonces tal vez estaba un poco emocionado, y considerando que Poe estaba acostado en su cama, desnudo y tan hermoso como siempre emocionado era un eufemismo.

Finn se inclina hacia adelante juntando sus labios, necesitando desesperadamente capturar la hermosa imagen que tiene ante él. Su mano desciende entre ellos agarrando la polla de Poe. No puede evitar sonreír cuando Poe hace un sonido de lamento contra sus labios.

Cuando se retira, recibe la imagen de Poe sonrojado, con los ojos cerrados y los labios entreabiertos ligeramente.

"No puedo esperar a tenerte dentro de mí", suena completamente poco sexy en la cabeza de Finn, pero llama la atención de Poe de inmediato, los ojos del otro hombre se abren de golpe.

Hay oscuridad en ellos, un hambre por algo que Finn también anhela profundamente, pero también hay un indicio de algo que parece vacilación.

"Cajón de la mesita de noche, agarra el", gime, distraído por la mano de la polla. Su cabeza cayó hacia atrás para exponer la línea de su cuello. Cualquier elocuencia que Poe pueda tener fuera de la cama parece perderse en el momento en que se desliza entre las sábanas.

"El", solicita Finn.

Afloja su agarre y recibe a cambio una mirada ligeramente traicionada, que se transforma muy pronto en algo burlón. Los labios de Poe se arquean con picardía.

"Casco, Finn, tienes que ponerte el casco. La seguridad es lo primero, lo sabes todo, siempre debes usar tu cubo. De lo contrario, conseguirás los piojos".

"Disculpe."

Poe se ríe, sinceramente, se ríe, como si acabara de hacer el chiste más grande del mundo. Sus labios hacen un pequeño puchero cuando Finn no se une a él en la broma. "Condón."

Oh.

Finn suspira.

Entonces esto es lo que querían decir con experiencia .

"Sabes que podrías haber dicho eso en primer lugar".

"Oh, pero ¿dónde está la diversión en eso?"

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Había pensado que el chiste del condón era malo, pero cuando se lo contó más tarde en tono semi-bromeante a algunos miembros del escuadrón de Poe, ellos simplemente se encogieron de hombros.

Snap incluso había llegado a decir que no era lo peor que se le había ocurrido a Poe.

Lo cual fue un poco alarmante. ¿Cómo podía alguien ser tan suave y atractivo fuera de la cama y, dentro de ella, de repente convertirse en el mayor idiota del mundo?

El sexo había sido fantástico, alucinante. Poe puso el placer de Finn por encima del suyo propio, una vez que superó sus chistes aburridos, había sido una de las noches más agradables de la vida de Finn. Era simplemente todo lo que había conducido a eso.

"¿Quizás podría amordazarlo? Él podría estar interesado en eso, ¿verdad?"

"Podrías amordazarlo con tu polla", dice Jessika con la cara más seria imaginable.

"Sabes que no es mala idea", responde Finn, medio en broma.

Ciertamente no esperaba que el hombre en cuestión apareciera sobre su hombro, apoyando su cabeza contra la de Finn en un movimiento tan doméstico que hizo que su corazón se apretara de inmediato. Poe Dameron pudo haber sido un idiota, pero era el idiota de Finn, y eso tenía que contar para algo.

"¿Están hablando de mí?", pregunta Poe, sonando fingidamente herido.

El otro piloto apenas le presta atención a su tono. "Por supuesto que no, comandante. ¿Por qué haríamos eso?

Poe no puede verlo, pero a juzgar por el rostro de Jessika es probable que haya recibido un gesto grosero como respuesta.

"Bueno, como claramente no estás hablando de nada importante, voy a robarme a Finn".

"Adónde vamos", dice Finn, ya deslizándose de su lugar en el banco.

Y Poe... Poe simplemente le sonríe con la misma mirada que Finn está seguro que perseguirá en sus pesadillas. "Quiero mostrarte mi cabina". Como si Finn pudiera pasar por alto la terrible insinuación, lo remata todo con el guiño más dramático del mundo.

Hay un momento de silencio, antes de que Poe parezca mirar por encima del hombro de Finn hacia donde está su escuadrón y diga: "Entiendan, muchachos, mi cabina ".

Morir de vergüenza de repente parece una realidad. Ha vivido desertando de la Primera Orden, chocando con un caza TIE e incluso luchando contra un aspirante a Lord Sith, y esto iba a ser lo que lo mataría: Poe Dameron y sus aburridos chistes sexuales.

Al menos esta vez Finn no fue el único que se quejó de los chistes.

"Consíguelo, Finn, consíguelo ".

"Sí, lo entiendo, ahora vámonos porque cambio de opinión".

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"Sargento, qué cargadas están los iones de iones", pregunta Poe, su voz adopta ese tono serio de negocios. Un momento de tono que probablemente habría sido sexy si no fuera en medio de algún extraño escenario de juego de roles.

Al menos era mejor que los ruidos del X-Wing que había estado haciendo antes.

"Sabes, Poe, realmente me gustas, pero estoy bastante seguro de que puedo encontrar un mejor uso para tu boca que todos esos chistes cursis".

Por un segundo le preocupa que Poe se ofenda, pero cuando su sonrisa burlona desaparece de su rostro, no es reemplazada por un ceño fruncido. En lugar de eso, Finn es recibido con una sutil separación de sus labios, la lengua demasiado rosada de Poe saliendo para recorrerlos.

"¿Y qué podría ser eso, señor ?"

Finn tira de Poe para darle un beso rápido en lugar de responder. Puede que no le guste que le pregunten sobre sus cañones de iones , pero algo acerca de escuchar al señor caer de los labios de Poe lo puso un poco nervioso. Finn levanta su mano para retorcer los rizos de Poe tal como le gusta, alejándolo de los labios de Finn con solo una pizca de presión.

Puede ver en los ojos de Poe que el movimiento fue apreciado, y cuando empuja a Poe muy suavemente hacia abajo, el otro hombre no duda ni un segundo antes de caer de rodillas.

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Finn casi cree que eso es todo.

Debería haberlo sabido mejor.

Aún así, eso no le impide volver a casi morir de vergüenza cuando Poe entra a la sala de control alardeando con orgullo: "¿Adivina quién golpeó a un soldado de asalto anoche? Una y otra vez".