Hola... Uo.o soy mala con estas cosas jaja, en fin... ojala sea de agrado, los personajes no son míos pero las ideas plasmadas aquí si, notaran (como en muchos mas casos) que las personalidades cambian XD, pero es lo divertido de escribir algo...

hasta el momento no he definido del todo las parejas, pero el TikkyXlavi es de ley (perdón si no es de su agrado) también el Yullen con Allen fem (sorry, pero así pensé la historia) claro que habrá mas parejas, allí clandestinas, hay que ponerle drama y salseo ¿no?

lo principal no será el romance (ya que no me sale muy bien eso T.T) sino la sangre muajajaja no tampoco jaja, de todo un poco, pero ya dije... el romance no es mi fuerte, sino la comedia y verán bastante de ella aquí \n.n/

hasta ahora, es apto para todo publico... creo... Un.ñ aunque hay una escena un poco sangrienta pero nada que no se vea en televisión XD así que supongo que son las advertencias del fic...

los dejo leer... disfruten y gracias de ante mano por estar aquí.

**GLASSY SKY**

La nieve comenzaba a caer, mezclándose con el suelo lleno de cenizas y sangre, veo con temor, casas aun con fuego, humanos y criaturas malheridas por igual, ¿por qué simplemente no pueden convivir?

Mi padre anhelaba esa paz entre especies, pero su vida termino mas pronto de lo pensado.

Mientras que mi abuelo, me decía a cada momento, que era la única en poder darle solución a las cosas, ya que gobernare y pondré orden a este caos, lo hablaba con intensiones de que los seres nocturnos ganaran, odio su egocentrismo, en eso es igual a los humanos y no lo nota.

Pero viendo la situación, donde incluso a los que creía amigos, me traicionaron, ya no hay nada que pensar.

No dudo en exterminar a quien se cruza en el camino, humano, lobo o vampiro, me hierve la sangre, lo único que deseo ahora es deshacerme de este sentimiento de ira, me importa un bledo lo que piense el abuelo, esto lo hago por mi.

Me da igual quien tenga el poder al final, aprieto el mango de la espada con fuerza, esta teñida de rojo, ¿quien diría que la sangre es igual entre seres? Por fuera somos distintos, tan distintos.

Intente proteger a los humanos y me pagaron con traición, a quienes veía con curiosidad, se convirtieron en los peores seres, egoístas y frágiles...

Mi ropa esta manchada igual, el tono escarlata que me da vida, ahora es mas que asqueroso, paso entre los escombros, noto a las demás criaturas luchando aun con los humanos,no pensé que haría alianza con lobos, pero son mas útiles de lo que esperaba.

Veo por fin a quien busco, no puedo evitar sonreír, el único humano que realmente me importo todo este tiempo, piensa que soy YO quien lo apuñalo por la espalda.

Su mirada oscura me observa con recelo, leo dolor en sus ojos, es tarde... veo como desenvaina su espada también, es momento de arreglar las cosas...

~CAPITULO I~

"Solo tu puedes salvarnos"

El cielo había comenzado a tomar su tono cobrizo, el único color diferente que se podía apreciar en la ciudad rodeada por murallas de piedra gris.

La torre del reloj, similar al Big Bell de Inglaterra, justo en el centro, sobresalía de dichas murallas, imponente y magnifico, especialmente para las visitas o mejor dicho, turistas, la ciudad no era muy conocida ya que su ubicación era casi imposible de localizar, los mapas ponían que en el sitio no había nada, más que campo abierto y unas cuantas montañas, aunque al mismo tiempo y por esa razón, se volvió un lugar realmente deseable para visitar, especialmente para cierto tipo de personas.

Las casas eran pequeñas al estilo inglés, al igual que las calles empedradas en tonos rojizos y amarillentos; faroles altos con luces en tono blanco, puentes de piedra cruzando un pequeño rio que surcaba gran parte de la ciudad hasta la salida, donde desembocaba en un lago cristalino.

Poco a poco la ciudad se fue haciendo con fama, aunque seguía sin aparecer en los mapas, por petición personal de los habitantes, no les caía mal la visita de extranjeros, pues obtenían buenas ganancias, pero al mismo tiempo se volvían una molestia.

No solo la belleza de los alrededores de la ciudad eran aclamados, sino también la estructura con la que contaba, las historias que se comentaban en las calles y sobre todo, la actitud amable y hospitalaria de los ciudadanos.

Además de ser uno de los pocos lugares donde se sentía paz aun, por fuera, los desacuerdos entre humanos y nocturnos eran mas frecuentes.

Había familias mestizas, felices, sin preocupaciones grandes, como quien era mas fuerte o imponente que otro.

La ciudad de las murallas "Shinku" (rubí carmesí) era un paraíso.

Había especialistas en controlar a los nocturnos que se salían de control, por cualquier motivo, desde detenerlos hasta la exterminación, siendo el ultimo caso el menos utilizado, eran casos extremadamente especiales.

Frente a la gran puerta de metal negro, un automóvil rojo se detuvo, esperando que le dieran el pase, el mecanismo que abría la entrada se dejó escuchar por un corto tiempo, a pesar de ser antigua la construcción resistía la fuerza que se necesitaba de unas cadenas para dar paso a las personas.

Después de tomar unos caminos y perderse por un rato, el automóvil y sus pasajeros dieron con la dirección indicada.

Salió del automóvil, estirándose con energía, un joven de cabello rojo, ojos esmeralda y un parche en su ojo derecho, seguido de un joven japonés, de cabello largo atado en una coleta alta y mirada oscura.

-por fin estamos de regreso- sonrió- ¿no Yu?

-no me digas así, conejo.

De la casa, salió un hombre de mediana edad, padre del japones; Froid les ayudo con el equipaje; adentro, el recibidor era pequeño, justo para dos persona, con un estante para los zapatos, con algunas pantuflas, el perchero de tono oscuro, un tapete con la palabra "bienvenidos" en inglés, un bote con un par de sombrillas en la esquina; el pasillo largo pero algo angosto de madera opaca, con pinturas de la autoría del profesor y algunos de sus alumnos a lo largo de este, a unos pasos más, un arco en la pared que daba paso a la sala, tres sillones rojizos con bordados dorados, la alfombra blanca se veía suave y mullida, una mesita en el centro, de vidrio transparente, con un dulcero lleno de golosinas, delante de esta una chimenea de ladrillo gris.

Las cortinas blancas con un listón rojo atándolas justo por la mitad, algunas macetas se podían ver por la ventana ya que quedaban debajo de esta, en la parte de afuera.

Siguiendo por el pasillo principal, había dos puertas más, una daba al comedor y cocina y la última al baño, justamente a un lado las escaleras que daban al segundo piso, tenían un tono amarillento brilloso.

Subiendo las escaleras, se veían cuatro habitaciones, una lógicamente era la de Froid, y un segundo baño.

La habitación de invitados y el cuarto de Kanda.

Todo seguía igual, dejo su maleta en el piso y se recostó en la cama, fue el mes mas pesado que había tenido, ademas de viajar con Lavi, trabajaban bien juntos pero el exceso de energía que tenia el pelirrojo, solía abrumarlo.

Sintió la brisa fresca entrando por la ventana, entre abrió los ojos y miro las cortinas danzando suavemente, había oscurecido, ¿Cuánto tiempo durmió? Se quedo un rato mas acostado, había tenido un sueño extraño, una persona de ojos rojizos le extendía su mano, mientras esbozaba una tétrica sonrisa.

-Yu... no recordaba que hoy empieza el festival de la cosecha- decía emocionado Lavi a un lado de Tiedoll.

-¿y que con eso?

-vamos- su ojo esmeralda brillo.

-podemos cenar fuera de casa- siguió Tiedoll- sabes que la soba de aquí es buena.

Lavi sonrió con malicia, todo el tiempo que estuvieron de viaje, el japonés no había probado su preciada soba, de hecho no habían comido decentemente en esos días, el cazar a esas alimañas era pesado, cada día aparecían mas, a pesar del acuerdo que había entre razas, algunos seguían cometiendo atrocidades, incluso los humanos, ninguno era un santo.

No era necesario ir en coche, la plaza principal quedaba a 15 minutos de la casa de Froid, los faroles se encendieron al mismo tiempo. Veían personas por todos lados, en puestos de comida, algunos globos, arreglos y pinturas, incluso hacían retratos allí mismo, era como una feria pero sin tanto ajetreo.

La plaza, tenía una fuente de agua, con un par de lobos sentados sobre una especie de piedra, por donde salía el agua cristalina, a los alrededores amplios maceteros con árboles verdosos y grandes, cinco bancas azules bajo la sombra de dichos árboles, y no podían faltar, los cestos metálicos para la basura.

Entre la multitud una mirada gris se cruzo con la oscura de Kanda, sin darle importancia siguieron cada uno con su camino.

-este año hay mas gente.

-también hay muchos estudiantes de Black Orden- menciono Froid.

-¿habrá pasado algo? No es común que manden alumnos a este tipo de eventos.

-hubo varios ataques mientras no estaban, me pidieron apoyo hace unas semanas, pero el problema se erradico por completo, aun así Komui pidió vigilancia estos días.

El festival duraba cerca de tres días, una forma de agradecer la convivencia entre especies y un año productivo.

-y ... ¿por que no dijo nada?- alzo su ceja.

-debían estar ocupados- sonrió- ademas, recuerda que fui general de cazadores.

-...- Lavi lo miro con dureza, el hombre se había convertido en su otro padre y le preocupaba.

Unos gritos de pánico los sacaron de su conversación, en lo que seria el escenario, pequeñas gotas de sangre escurrían por el borde de madera, por encima podía verse un pelaje rubio, los ojos del lobo en blanco totalmente, los estudiantes de Black Orden (encargados del orden, específicamente con las criaturas que desobedecían la ley, no distinguían entre humanos o nocturnos, la paz era la paz), alejaron a las personas lo mas pronto que pudieron, evitando un poco mas el pánico y horror en los civiles.

-conejo- lo miro de reojo, el pelirrojo tenia los puños apretados con fuerza.

-no pasa nada- trato de sonreír.

Lavi era un licántropo, normal que se enojara viendo como uno de los suyos fue asesinado y expuesto de esa forma.

-tengo el olor- comenzado a correr en su dirección.

-tsk- siguió al oji verde.

Cuando quiso darse cuenta, Tiedoll no los veía por ningún lado, estarían bien, después de todo eran de los seleccionados para su siguiente rango, *General*, se quedo ayudando a los estudiantes.

Salió del camino para evitar a la gente, no portaba el uniforme, así que seria mas fácil llegar al agresor.

-¿y bien?

-perdí el rastro, hay muchos olores aquí- cubrió su nariz- que desagradable.

Las afueras de la ciudad eran solo bosque inmenso, se encontraban en medio de la nada, escucharon un chillido agudo a lo lejos, por lo que se pusieron en marcha.

-por aquí- señalo detrás de unos arbustos, a lo que Kanda desenfundo su katana- e-espera Yu no es...

Al saltar sobre la criatura, nuevamente esos grises que llamaron su atención en la calle, quiso detener su ataque pero le fue imposible en medio del aire, termino en el suelo, con el filo de Mugen a centímetros de un cuello ajeno, su brazo era inmovilizado por una especie de tela blanca.

Ninguno perdió el contacto con el otro, hasta que sintieron la presencia de alguien mas, levantándose del suelo con rapidez, un hombre casi esquelético los miraba con los ojos desorbitados y llenos de sangre, al igual que su boca, murmuraba para si mismo.

Los dos trataron al mismo tiempo de atacar al sujeto, pero chocaron en el acto.

-deja de estorbarme.

-eres tu el que sobra aquí.

Una nueva embestida del sujeto los hizo apartarse, pero logro rasguñar la mejilla de Kanda y el brazo de la joven albina.

-ya me hartaste- dijo con sonrisa frívola.

El sujeto dejo de moverse, empezando a temblar y pedir piedad, el japonés no entendía el porque hasta que observo la mano de la chica, unas garras platinadas en su mano oscura sostenían lo que parecía ser el corazón del esbirro, lo presionaba con poca delicadeza.

-me obligo a hacerlo... yo... nunca lo haría...

-...- advirtió lo que pasaría a continuación- espera.

-...- sonrió y aplasto con fuerza el órgano, desintegrando al sujeto al momento.

Las garras desaparecieron dejando un mano normal con un guante cubierto de rojo, la albina sacudió su mano para quitar los restos de tejido que se fue volviendo cenizas poco a poco.

-¿eres un cazador no?

-...- la miraba fijamente.

No pasaría de los 20 años, cabello largo platinado, atado en una coleta baja, con un pantalón café y una sudadera negra, con algunas manchas de tierra y sangre.

-eso no te importa.

-¿qué?- lo miro con molestia.

-¡Yu!

-shojo, ¿estas bien?

Los dos salieron al mismo tiempo de los arbustos, sorprendiéndose al notarlo, un hombre moreno de ojos ámbar y un cigarrillo en los labios con un traje oscuro estaba su lado.

-perdón, Yu, el nivel C se me escapo y...- percibió el aroma a sangre podrida.

-veo que no ocupabas ayuda, de nuevo- sonrió, recargándose en un árbol.

-tsk

-vámonos.

Lavi no dijo nada, notaba la molestia de Kanda, pero quería vivir un poco mas, esperaría a que se calmara un poco para preguntar quienes eran.

...CONTINUARA...

hola de nuevo jeje ¿Qué les pareció? un desastre? si, lo se XD pensé que había quedado largo el capitulo pero... al editarlo noto que no, espero sea suficiente jaja

¿Quién dice que Allen siempre debe ser amable y un pan de Dios?

dejen su review si gustan, así sabré que les gusto, que no y si quieren dejar amenazas de muerte... "no soy yo, es mi cabeza" *o*

creo que no se me olvida nada... espero... así que:

NOS LEEMOS LUEGO?

BYE BYE