Disclaimer: Los personajes no me pertenecen. Son obra de Akira Toriyama.

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NOTA PREVIA, [ES IMPORTANTE LEER]: La elaboración de este One-Shot pertenece a la actividad de Halloween de la página de facebook "Trumai, Vegebul, Gochi y más" Por lo que me uno en participar dentro de la categoría de "TEMA LIBRE". Como siempre por el motivo de dejar que mi imaginación vuele para poder crear algo interesante. Así que esta vez simplemente se me ocurrió escribir algo sobre un "Trumai alternativo", pues me daré la oportunidad de utilizar al Trunks Saiyajin & a la Mai de DB (la de ojos azules) como también decidí que el ambiente fuese dentro del "DB clásico". Por lo que en este Fanfic será necesario aclarar que Gokú simplemente fue un ordinario participante de las artes marciales, por lo que no tuvo gran protagonismo & ninguna conexión con Bulma, los Saiyajins & demás; la existencia de Trunks va a derivar de otra relación que tuvo Vegeta, es decir, con alguien de su misma raza haciendo de Trunks un guerrero de raza pura. Sobre el derrumbe del castillo de Pilaf "vamos a imaginar" que simplemente ocurrió por otras causas dejando en misterio la identidad de quién fue el mono gigante o la causa que originó tal transformación. ¿OK? ...Yo sé que TODOS sabemos que no fue así, LO SÉ, pero en este One-Shot, lo imaginaremos de esa manera para atribuirle protagonismo a otros personajes. Así que dejándome llevar por lo que mi mente dicta, espero que esto sea de su total agrado. Cómo también anexo que la imagen de portada no es de mi auditoría por lo que respeto los derechos de su autor original. Aclarando que solo se le agregaron algunos ajustes de edición de mi parte para promocionar el fic. Sin más qué agregar, deseando que esta mezcla no sea del disgusto de nadie, les deseo una grata lectura a todos. MUCHAS GRACIAS por estar aquí.

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Rojo Carmesí

Por

Kuraudea.

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«En el gobierno reina el terror. Y no hay cosa tan cruel como cuando el mismo miedo tiene las armas en la mano.»—Rafael Barrett.

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—¿Sucede algo, Mai?—preguntó Shu al verla retraída, pues había frenado de golpe la motocicleta; poco faltaba para filtrase dentro de los grandes hongos; camino previo hacia el Castillo de Pilaf.

Mai observaba los cielos fijamente, parecía hipnotizada por el mismo firmamento; si la visión no le fallaba, algo raro había notado en él. Debido a ello, en su interior, sintió la extraña sensación de que algo malo ocurriría. Pues la apariencia repentina del color Rojo Carmesí le advertía sobre una terrible catástrofe.

—¿Mai...? ¿Te encuentras bien?—le interrumpieron de nueva cuenta.

—¿Eh...?—volvió en sí para luego dirigirse a su colega—S-Sí, estoy bien, Shu. No te preocupes. Hay que regresar de inmediato, Su Excelencia nos espera—sin saberlo, & sin ni siquiera imaginarlo, el presagio para ella & para todo el Mundo, se volvería en una terrible realidad. Pues seres maliciosos llegarían para acabar con la paz e imponer su voluntad bajo un régimen riguroso.

Fue así, que el ejército de la Capital del Oeste & de la Capital del Norte habían formado alianzas para combatir al nuevo enemigo que los acechaba; la parte Este & Sur, según sus embajadores, diseñaban una estrategia de ataque para que se sumaran a batalla a la brevedad posible. Sin embargo, el haber recibido fuertes perdidas en maquinaria como el deceso lamentable de solados caídos, había causado en el Rey Furry, como en representantes menores del consejo, un gran impacto. Pues sus intentos por defender al mundo habían sido inútiles; ni por tierra, ni por mar, y ni siquiera por vía aérea, pudieron contribuir en contra de la invasión de los extraños seres. E incluso, se sumaron a la lucha personajes habilidosos en las artes marciales, mismos, que no tuvieron el éxito esperado ante la fuerza descomunal del enemigo; ni siquiera se sabía nada del joven "Son Gokú" por lo que se asumió que quizá había sido víctima de la irrupción.

Por otro lado, la "Red Ribbon" se sumó a la lucha en forma independiente. Pues mandaron a combate su mejor maquinaria de guerra como también a sus mejores espías para la investigación del enemigo. Pues así, sus científicos internos fabricarían el arma adecuada para su destrucción; asignaron también a la misión a sus coroneles & soldados más destacados para salir al campo de batalla.

El fundador de la Corporación Cápsula: El prestigiado Dr Brief, en compañía de su hija menor, buscarían la forma de investigar & de contribuir a la causa lo mejor posible; en estas instancias ya no existían bandos opuestos sino alianzas. Pues el objetivo en común de todos era en acabar con los temibles saiyajins & regresar la paz mundial a la humanidad.

—No sé si pueda considerar su oferta—exclamó el de capa roja & linaje justo cuando levitaba frente a la terraza del Rey Furry.

—Tenga un poco de misericordia con los terricolas, Su Majestad—trataba de hablarle con respeto para no hacerle enojar—El planeta Tierra está lleno de bondades; los terricolas son una especie que goza de mucha inteligencia como de otras grandes habilidades.

—Eso lo sé. Es por eso que estoy aquí.

Las alianzas por parte del Rey Furry, de manera muy forzada habían llegado a "buenos términos" con el invasor. Dicho representante de la población quiso llegar a un tratado de paz con él. En el cual, tanto saiyajins como humanos pudieran convivir de forma pacífica en La Tierra, asi tuviesen como condición estar a su merced para su propia supervivencia. En sí, lo importante para el gobernante, era mantener a su población a salvo como también evitar más muertes. Pues desde el primer minuto que pusieron un pie en la esfera terricola, los daños habían sido irreversibles como colaterales. E incluso, la cadena televisiva del ZTVNews, realizó una cobertura muy arriesgada para transmitir a los usuarios sobre el caos que estaban viviendo.

»Queridos televidentes—saludaba el reportero en compañía de un joven camarógrafo; a pasos lentos mostraba el ambiente de destrucción, como los grandes huecos & diversas tomas de las naves esféricas—Estamos aquí para mostrarles un poco de los daños que han causado estos seres invasores. Se sabe muy poco de ellos pero hemos investigado que se denominan como "Raza Saiyajin" Estos seres crueles han causado daños a pequeños poblados e islas ubicados a unos kilómetros de la Capital del Oeste; sin duda esto es aterrador. Procuren no salir de casa—aconsejó. En eso, se apreció repentinamente una gran explosión a distancia, ocasionando que el equipo de reporteros fuera a dar contra el suelo para poder protegerse; se aferraba con uñas & dientes para no salir volando junto con las misma ráfagas de viento «¡AHHH!».

A medida de la colonización de los Saiyajins, el cielo se fue tiñendo de Rojo Carmesí. Cómo si este fuese el reflejo de la sangre derramada & la injusticia. E incluso, las personas fueron atribuyendo al fenómeno como un "malestar" o un "padecimiento" del propio planeta Tierra. Pues poderes extraños & personajes sin iguales volaban en grupos infestando las alturas y marcando huella a su paso. Entre risas sádicas se escuchaba «¡Mueran asquerosos terricolas!» «¡El planeta Tierra nos pertenece a ahora»; desde entonces, el comienzo de una extraño estilo de vida había comenzado para la humanidad, pues como había pactado el Rey Furry, tenían que ceder a la barbarie de los enemigos para sobrevivir.

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Se habían cumplido al rededor de nueve meses de la invasión Saiyajin. Y desde entonces, cada noche, la misma pesadilla le atormentaba. Había llegado a experimentar un gran odio hacía ellos como también un inmenso terror. Ya no sabía que era lo mejor, pues tenía miedo de cerrar los ojos como también de abrirlos.

—¡¿Quienes son ustedes & qué hacen aquí?!

—Pero qué mujer tan vulgar—expresó un miembro de las fuerzas armadas—Venimos de parte del ejército de Príncipe Trunks. A su majestad le apetece instalarse en este gran Castillo para su estadía en la Tierra—sonrió con cinismo & luego, indicó:— Así que les ordeno que se larguen de aquí.

—¡¿Qué has dicho?!—de inmediato les apuntó con la pistola, estaba bastante molesta—Eso nunca, ¡¿me escucharon?! ¡Este castillo es nuestro hogar!.

—¿Así qué no lo harás?

—¡NO!

Y la furia de uno de ellos salió a relucir:—¡Si valoras tu vida y la de ellos, más vale que nos obedezcas, mujer!.

Mai volteó a sus espaldas & se dirigió a los que protegía:—Mi Señor Pilaf, Shu, salgan ahora mismo de aquí. Yo me encargaré del enemigo; refúgiense en el subterráneo.

—¡¿P-Pero qué diablos dices, Mai?!—cuestionó Pilaf al parecerle absurda su decisión.

A lo que también Shu agregó:—Hay que huir los tres. ¡Anda, vámonos, Mai!

— ¡Les dije que se salgan de aquí!—les gritó en desesperación.

Sin embargo, su tiempo de escapar había terminado. Pues un extraño poder proveniente de la palma de la mano de uno de los sujetos, los atacaría—Entonces no me dejan otra opción, ¡MUERAAAN!

Recién había despertado del sueño profundo del recuerdo cruel que le acompañaba desde entonces. El cuerpo le dolía debido a los restos de escombros que habían caído sobre su cuerpo. No sabía en realidad qué había pasado, pues a lo poco que recordaba estuvo en medio de un repentino temblor; se quejaba—Ah...mi cabeza...

El tratado de paz de convivencia entre invasores & terricolas, había sido irrumpido en diversas ocasiones; las agresiones eran de esperarse de parte del ejército del Príncipe Trunks. Aunque con el paso del tiempo se habían evidenciado pocos atentados de su parte. A lo que extrañamente se empezó a percibir en el ambiente natural de la Tierra una atmósfera de misterio; en el aire se resoplaba el sonido del miedo por la incertidumbre de qué pasaría o cuáles serían las consecuencias de la incursión.

Entre parpadeos, mientras su visión se clarificaba, no supo en qué lugar estaba. Se asustó de repente & hasta se preguntó a sí misma si había muerto. Sin embargo, estaba tan viva como la propia voz que escuchó decirle:—Hasta que al fin despiertas.

La de gabardina verde tocó su frente, entre siseos pudo sentir que un vendaje le rodeaba la cabeza, incorporó medio cuerpo, & preguntó confundida—¿D-Dónde estoy...?

—Estamos en un refugio subterráneo en las montañas— contestaron a media luz de la lámpara que alumbraba de manera tenue la mitad de su rostro; en tiempos de catástrofes, cavidades así, eran la mejor manera de ocultarse—¿Cuál es tu nombre?—preguntó el varón de cabellos rojos & gabardina de mezclilla.

—M-Mi nombre es Mai—contestó—Pertenezco a la última generación del ejército soviético de las Estrellas Rojas. Me uni a la lucha debido a que hace meses atacaron el castillo que protegía. Yo estaba a cargo de la protección del Emperador Pilaf. He viajado desde el Desierto del...—el hombre le quitó la palabra de la boca.

—El Desierto del diablo.

—Así es

—Estamos al límite de la Capital del Norte, ¿lo sabes, cierto?—el hombre le miró firmemente —Has viajado desde El Desierto del Diablo hasta la línea fronteriza del septentrión. Seguro que existe un buen motivo que te inspiró—tiró la colilla del cigarrillo que recién había terminado de fumar—¿Por qué estás aquí?

—Por obvias razones...—agachó la mirada e hizo un silencio. Luego continuó:—Asesinaron a mi Señor Pilaf & a Shu. Y todo por querer situar un nuevo cuartel en nuestro castillo. Nos negamos...y... atacaron.

—Encontraron un sitio mejor, al parecer.

—Lo sé—asintió despacio—Durante mi trayecto encontré un artefacto de uno de ellos. Es como un rastreador que usan en la mitad de su rostro. El lenguaje es complejo, pero la numerología es la misma; al presionar su único botón, marcó una cantidad en kilómetros que al investigar con una brújula, me di cuenta que pertenecía al límite de la Capital del Norte, por lo que asumí que reubicaron una nueva base allí.

—Es correcto.

—Después ya no supe qué pasó. Mientras me dirigía hasta acá, y por lo que recuerdo, un cerro se desgajó repentinamente a mi paso; al mismo tiempo se escuchó el eco de un gran rugir —eso le hizo sentir una sensación de terror en el pecho. Pues sin saber a ciencia cierta de qué se trataba, le brincó a la mente aquel recuerdo del ataque de la gran bestia que derrumbó el castillo de Su Excelencia; restaurarlo en aquel tiempo había sido complicado, pues ahora con el ataque de los Saiyajins ni escombros de la fortaleza habían quedado, mucho menos el recuerdo de la antigua construcción. Al dirigirse al extraño, le cuestionó— ¿Usted quien es...?

—Coronel Silver de la Red Ribbon. Parece entonces que tenemos un cometido en común.

—Eso parece ...—agachó nuevamente la mirada.

—A mi me mandaron a luchar e investigar al enemigo. Dime, ¿cuál es tu plan?.

—No lo sé aún...—analizó por un momento la pregunta & contestó según a su hoja de ruta—Me filtraré a su fortaleza. No sé cómo lo haré... pero tengo que escabullirme para aniquilar a la cabeza principal de toda esta monarquía—deseaba vengarse del Príncipe Trunks por el óbito de sus amigos.

Fue así, que una tercera voz les interrumpió—¡He llegado, mi Coronel!—saludó con la mano sobre su frente.

—¿Cómo te fue, Violet? ¿Qué has investigado?—se dirigió hacia la mujer de cabellos lilas.

—Estamos a pocos kilómetros del cuartel de los Saiyajins, mi Señor. El cielo Rojo Carmesí a medida de estos meses ha prevalecido durante periodos más largos de tiempo; cada vez se ve menos la luz del sol. En realidad puedo decir que todo el día se ve la Luna sobre los cielos, es como si se tratara de un holograma o algo así. Los ecos de los rugidos han sido constantes, mi Coronel: unos más cortos & otros más prolongados. Los ataques han disminuido, pero los derrumbes y esos ecos cada vez son más frecuentes—fue así que Violet se percató de la presencia de Mai «¿eh...?» misma que aún se encontrada sentada sobre el suelo con una manta cubriendo sus piernas—...¿Y ella quién es...?—parpadeó curiosa.

—Será nuestra nueva integrante: su nombre es Mai. Es soldado de los antiguo ejército de las Estrellas Rojas; trabajaba para un emperador.

—Entiendo.—se dirigió hacía ella con el típico saludo de soldado a soldado, a lo que Mai simplemente asintió.

—Algo muy extraño pasa aquí—el Coronel llevó su mano a la barbilla, analizaba los sucesos—No puede ser que estos cretinos estén tan relajados. Seguro debe de existir "algo más" en todo esto.

Fue entonces, que Mai volvió a sugerir su único plan en mente:—Lo descubriríamos si nos filtramos a su cuartel...—frunció el entrecejo & apretó parte de la frazada con sus puños.

Violet & Silver se observaron. Y al paso de escasos segundos, ambos asintieron en aprobación. Pues en realidad era lo único que los llevaría a descubrir todo lo que estaba detrás de la invasión «¡Hagámoslo!».

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Tubos de laboratorio se agitaban a cierto ritmo dentro del mezclador científico. El inquisitivo personaje con características escuálidas a lo que parecía un reptil, analizaba minuciosamente todo el proceso de su plan.—El príncipe Trunks quedará muy satisfecho con los resultados—mostró una sonrisa vil—De eso no tengo la menor duda.

Otro soldado de piel morada que estaba a su lado, cuestionó:—¿En verdad crees que va a funcionar todo esto, Negi?

—Todo indica que sí, Shiso—rió ambicioso—Ya verás que poco a poco volverá a resurgir el gran imperio de los Saiyajins. El plan de la Terapia Genética ha sido perfecto. E incluso, sus primeras dosis han funcionado de maravilla.

—¿Qué pensará el gran Freezer de todo esto?

Negi elevó el tono de su voz:—¡Más vale que ni se te ocurra abrir la boca!—Esto solamente es asunto del Príncipe Trunks, ¿te quedó claro?—al tomar calma, comentó—Seguramente el Rey Vegeta estaría orgulloso de él.

El plan de la "Terapia Genética" era algo que mantenía ocupado a los invasores; toda su atención se centraba en el diseño de las novedosas & poderosas vacunas de ADN que cambiarían por completo su destino. El continuar con los estudios, fue el motivo por el cual había perdurado la "extraña sensación de paz" en la Tierra durante los últimos meses.

La rebelión contra el gran Freezer en dónde murieron gran parte de los "auténticos Saiyajins" junto con la explosión de su propio planeta, trajo como consecuencia su extinción. Por lo que otro tipo de extraterrestres tuvieron que unirse al ejército de los nuevos invasores que se denominaban en conjunto "Saiyajins" sin ni siquiera serlo.

Fue así, que el Rey Vegeta antes de morir en batalla, le encomendo al Príncipe Trunks hacer resurgir su imperio de una forma más rápida para colonizar planetas. Y no precisamente que existiera la cuestión de "preñar" a mujeres para crear seres híbridos perfectos. Pues mientras continuaran con ese viejo método donde la herencia se transmitiera directamente pero con la desventaja de esperar los nueve meses de gestación y los primeros 5 años de vida para un entrenamiento adecuado, los mantendría de cierta forma en desventaja. Así que debían de tener bajo la manga una alternativa más presurosa como eficaz para transmitir genes con la particularidad de solo poder convertirse en "Ozarus"; virtud con la que gozaría su nuevo ejército de "PRIMER NIVEL" como serían denominados. Pues éstos no sobrepasarían sus niveles de fuerza & por su "naturaleza humana" los utilizarían solo para conquistar planetas bajos. En términos simples: serían solados desechables. Así que mientras los Soldados de Primer Nivel colonizan, la féminas presas terminarían de gestar & criar tranquilamente a su tiempo.

—Recuerdo que el Rey Vegeta se convertía en Ozaru para poder sacar de su médula espinal el ADN de esa transformación. Al controlar perfectamente su consciencia me fue bastante fácil tomar varias muestras para la elaboración de una fórmula efectiva.

—Conque de eso se tratan las vacunas, eh...—Shiso estaba impresionado.

—Así es. La terapia de transferencia de genes introduce nuevo material genético en las células. Solo alternaremos el código del ADN de los humanos con la "fórmula Ozaru". La terapia puede introducir genes que en automático recibirán instrucciones. Así que con la ayuda de una "Luna Artificial" o bien, con los "Rayos Bruits" será suficiente para motivar las transformaciones; el plan será un éxito.

—¿Entonces la transformación a Ozaru también se puede lograr con los Rayos Bruits?

—En teoría, sí. Ya que éstos son una clase de luz que produce la Luna cuando está llena; los Saiyajins los absorben a través de un avistamiento directo aunque en forma concentrada. Recuerda que ahora los humanos aunque no serán cien porciento Saiyajins, tendrán un "toque especial"—rió.

—Interesante...

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El frío era extremo, insoportable.Y con la percepción del riesgo que tomarían se hacía notar con más crudeza. Tanto así, que calaba hasta los huesos. Tal vez esa sensación se debía a que venía mezclada con una pizca de nerviosismo como por la suave pero letal caricia de la muerte; el miedo latía al ritmo de sus palpitaciones. Pues al fin & al cabo tales sensaciones como otros tantos sentimientos, eran parte esencial de ser simples humanos. Sin embargo, ellos eran valientes, tenaces & pese a lo critico de la situación darían lo mejor de ellos para contribuir a su nación.

Los especialistas para no resaltar, trotaban sigilosamente sin importar que sus gabardinas de los lados excedentes jugaran con el viento invernal; como gatos pardos, camuflados por la luz nocturna & el Rojo Carmesí de las nubes que pese a lo oscuro se apreciaba; cruzaron diversos techos de relieves cubiertos de nieve aproximándose cada vez más a la base de los Saiyajins.

El límite de la Capital de Norte había tomado una apariencia protervia, nada parecido a lo que los Coroneles de la Red Ribbon recordaban.—Parece que a estos cretinos les gustan los climas extremos—aseguró Silver quien con una bufanda cubría su boca & nariz para mitigar lo fresco.

Pese a predominar lo frígido, los Saiyajins construyeron en un santiamén una gran base impenetrable; consistía de muros en color arena y su diseño se valía de formas ovaladas. No era una base lujosa, por lo contrario, era muy simple; aunque sin importar la sencillez de su estructura seguramente su protección sería intachable como letal, por lo que no se permitirían bajar la guardia.

Tras esconderse detrás de una roca grande, justo a pocos metros del lugar, Violet dijo:— ¿Cómo se supone que acabaremos con ellos? Quiero decir que su ejército es fuerte, además poseen unas armas que arrojan rayos láser & demás poderes. Seguramente en cuanto nos vean nos matarán—juntó ambas manos y resopló en medio de ellas para mantener una sensación térmica.

—Estoy pensando, Violet...solo dame unos segundos...—agregó el de cabello rojos, más pronto indicó—Lo más viable sería saber cómo está la distribución del lugar. Sé que ellos son fuertes & poseen poderes sobrehumanos, pero nosotros también somos hábiles. Y no solo eso, también somos inteligentes. Tal vez nuestra mejor herramienta sería utilizar otro tipo de método contra ellos. Además, si escuchan el impacto de nuestras armas, los alertará; hay que ser cautelosos.

—¿Y qué les parece utilizar somniferos con los primeros guardias a nuestro paso...?—sugirió Mai de repente—Estar dentro de su ejército sería la clave para visualizar la distribución e idear un mejor plan.

—De entrada creo estaría bien—aceptó el Coronel tras asentir—Fue así, que al descomprimir una cápsula Hoi-Poi (cortesía de la Corporación Cápsula para los combatientes), les hizo entrega a las mujeres de algunas "armas blancas". Pues consigo llevarían navajas como diferentes derivados del mismo: sais, cuchillos & wakizashi ocultos en sus ropajes; por si las dudas también les entregó algunas bombas de gas & de pólvora para poder emprender huída; spray de gas pimienta, bastones de electricidad, pistolas, pañoletas & potentes somníferos como un reloj de mano con el plus de tener la función "Walkie-Talkie" para poder comunicarse entre ellos. Mientras las mujeres alistaban sus municiones, les observó & preguntó:—¿Están listas?

—Sí—contestó, la violeta.

—¿Y tú, Mai?

Con sed de venganza, aseguró:—Lo estoy.

—Bien—asintió & ocultó la pistola dentro de la gabardina, pues él estaba listo también—Ahora les enseñaré a esos malditos Saiyajins porque no deben meterse con el Coronel Silver de la Red Ribbon. Prepárense.— después de haber observado el panorama, les dió la señal —¡AHORA!

Corrieron a toda velocidad hacia el lugar en pos de lucha. Adelante iba el hombre & a sus costados las féminas. Los tres soldados estaban unidos por la misma causa & la misma misión: hacer justicia a su mundo. Pues aunque ésta fuese mínima, sería significativa para los que quisieran continuar con el camino que iban a forjar; subían por algunos relieves & llanuras, hasta que de pronto llegaron a un muro impenetrable; casi se adherían a la barda como si fuesen calcomanías.

—Hemos llegados—dijo, el hombre; los tres voltearon hacia arriba para dimensionar la altura de la barda—Les ayudaré a impulsarlas—ellas asintieron.

Ayudó primero a Violet, después a Mai & por último él tomó un poco de impulso y con la ayuda de unos ganchos, logró pasarse al otro lado de la barda. Al caer, se colocó sobre una de sus rodillas, y con mano armada apuntaba hacia enfrente. En la misma sincronía Mai se fue detrás de él apuntando hacia un lado mientras que Violet vigiló la parte trasera. Por lo que "sin moros en la costa" avanzaron lentamente. Al querer filtrarse por un largo pasillo iluminado de blanco, tuvieron que retroceder inmediatamente, pues un soldado venía a su paso.

Sin embargo, era el momento indicado para atacar. Una de las pañoletas fue impregnada con el potente somnifero que sería su arma letal. El hombre se fue lento detrás de los pasos del soldado: lo atrapó. Y con todas sus fuerzas estrangulaba su cuello mientras que con la mano libre sujetaba el trapo en su rostro; Violet & Mai en contribución sujetaron las piernas del individuo hasta que éste colapsó.

—Bien hecho.—dijo Mai, entre jadeos.

Luego, agregó Violet:—Supongo que esta es la parte trasera de la base, Coronel. Quizá podríamos encontrar algunos uniformes extras por aquí—observó a Silver & un tanto pícara, le dijo:—Por lo pronto usted ya tiene el suyo.

El hombre esbozó media sonrisa a lo que solo le contestó un:—Continuemos.

Tras haber llegado a lo que parecía una bodega, encontraron lo que necesitaba. De forma inmediata vistieron la típica armadura del enemigo, solo que para salir desapercibidos se colocaron unos cascos para ocultar sus rostros.

—De ahora en adelante nos dividiremos—ordenó el hombre—Cualquier cosa nos mantendremos en comunicación. Por favor, traten de ser lo más inteligentes posible; Violet, tu tienes una gran misión en la cocina.

—Así es, mi Coronel—asintió con astucia la de cabellos cortos.

—Yo trataré de investigar qué rayos pasa en el área del laboratorio. Este silencio repentino no me da buena espina. Además por las rarezas que hemos percibido como los derrumbes & los rugidos, puedo asegurar que hay algo oculto en todo esto—el Coronel volteó hacia Mai—Y tú...—estaba a punto de darle órdenes, pero ella solo se ofreció en decir:

—Yo iré en busca del Príncipe Trunks—pues quería llevar su objetivo de aniquilarlo con sus propias manos.

El Coronel no se quiso oponer, sabía que sería absurdo—Esta bien. Sean inteligentes, que no les gane la ira. Lo que sea que puedan investigar será de ayuda para todos los terricolas. —luego dió la última indicación—Esta bodega será nuestro punto de reunión.

—De acuerdo—contestaron ambas mujeres.

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Mai fue guiada por su objetivo personal, no daría marcha atrás, estaba decidida. Así que caminó sin problemas al marcar sus pasos con seguridad, pues ciertamente el casco había sido de gran ayuda para mitigar los nervios o cualquier tipo de gesticulación derivada por la impresión a lo desconocido. Fue así, que observó a una persona vestida con una túnica negra; no se miraba en lo absoluto su rostro. Entonces escuchó de otro soldado, decir: «Lleva esto a la alcoba del Príncipe Trunks» e hizo entrega del carrito que llevaba varios platillos & algunas bebidas. Al observar ese "atuendo especial" dedujo que el manjar, en efecto, era para el soberano.

Antes de llegar al lugar indicado, la mujer sigilosamente se valió de los somniferos. Sin embargo, decidió primero atacar con el bastón de corto circuito; acorraló por detrás al sirviente e hizo la descarga justo en el área de las costillas. Tapó sus labios con la tela impregnada por la sustancia, hasta que éste quedó totalmente inconsciente—Eso es.

El cuerpo lo arrojó por un ventanal a su paso; la evidencia desapareció de la vista gracias a la nevada que lo cubrió. En cuestión de segundos se deshizo del casco y se vistió con la túnica. Con el atuendo listo empujó el carrito & continuó con el camino que la conduciría con el máximo representante de los invasores.

Estaba ansiosa pero su sed de venganza le daba el valor para no flaquear—Te aniquilaré maldito canalla—dijo, entre susurros. Hasta que de un momento a otro llegó a una puerta con el grabado de una "Y". Entonces tocó y le respondieron—Adelante.—tomó aire, luego entró.

Mai divisó una gran cama con sábanas blancas. El diseño de la cabecera no era muy común & tenía el mismo grabado de la puerta. A su costado estaba un baño con una enorme bañera diseñada por piedras pulidas en tonalidades grises. Realmente todo se miraba algo austero, aunque por su naturaleza asesina o por su estilo de vida, quizá no necesitaban de muchos lujos para subsistir. Luego observó que en una de la paredes había un cuadro de gran tamaño a lo que parecía que era el príncipe sobre las piernas de una mujer; detrás de ellos estaba un hombre imponente de armadura & capa roja; supuso entonces que ambos adultos se trataban de sus padres.

El concepto de "Familia" le sorprendió sobremanera. Pues cómo era posible que estos seres viles tuvieran un vínculo o un núcleo de consanguinidad. Quizá tenían su manera de mostrarse afecto—Es increíble...—susurró, pero luego la interrumpieron.

—Hasta que llegaste. Estoy que muero de hambre.—la de la túnica simplemente asintió. Comenzó entonces a repartir los platillos extraños que lucían algunos tonos exóticos sobre la mesa hecha de piedra. El príncipe bebió de golpe una copa de vino tinto, luego exigió más del líquido sin muchos modales—Sírveme más...—la mujer de nueva cuenta asintió & sirvió. Trunks le dió un sorbo y le dijo:—¿Sabes? De todos mis sirvientes eres el que mejor me cae; me obedeces en todo—mostró media sonrisa—No críticas, no me juzgas, no hablas. Bien hecho.

La de la túnica volvió a asentir ante el "supuesto cumplido". En realidad Mai estaba que le hervía la sangre por dentro «Acabaré contigo, te lo juro»—fue lo que pensó.

—Tomaré una ducha después de la cena. Entretanto puedes llenar la bañera en lo que terminó; en un momento te veré ahí.

Mientras Mai llenaba la bañera, observó de momento su reflejo escondido bajo la túnica negra. Estaba impactada, quién pensaría que su mayor enemigo tuviera una apariencia tan humana & no como el resto de los soldados de su ejército. Sin embargo, su pensar se vió interrumpido debido que el joven príncipe se metió a la bañera complemente desnudo, el rostro de la fémina se sonrojó entre la oscuridad.

—Talla mi espalda—ordenó—La siervente se colocó de rodillas para estar al mismo nivel del hombre, tomó una de las esponjas e hizo lo indicado. Trunks simplemente hablaba —Espero que el Plan de la Terapia Genética sea todo un éxito, ¿te imaginas? conquistar planetas con la ayuda de los terricolas.

«¿Con ayuda de los terricolas?»—Mai se había inquietando.

—El Dr Negi me acaba de mandar una muestra de la fórmula Ozaru. De hecho, un lote de ellas fueron aplicadas con humanos & al parecer ha sido efectivas. Pudo saberlo al escuchar los ecos de los rugidos—rió con gracia— ¿Me preguntó si su débil cuerpo soportará tal cambio?

»¿Fórmula Ozaru...?

»De modo que eso tiene que ver con los repentinos derrumbes & rugidos—comenzaba atar cabos.

—Bueno, da igual, son simples humanos—Mai al escuchar esa expresión tan despreciativa & frívola de su parte, frenó el tallado—¿Y a ti qué te pasa? ¿por qué te detienes de repente?—le observó con el azul asesino de sus orbes, luego desvió la mirada y con cierto desgano, expresó:—Ya no importa, termina de una buena vez. Deseo que masajes mi espalda & cadera. Hoy tuve que donar espermas; me sorprende la capacidad de las mujeres terricolas que tienen para gestar. Es mucho mejor que las incubadoras del planeta Vegeta—sin más, salió de golpe de la bañera & se fue a la habitación.

»N-No puede ser...están utilizando a mujeres para su reproducción...—estaba impactada, pero aún así no comprendía cuál era el efecto de la "Fórmula Ozaru"

—¿Oye, quieres apresurarte?

Aterrorizada asintió de nueva cuenta como muestra de un "Sí".

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El de cabellos rojos quien vestía el uniforme del enemigo & con el afán de investigar, bajó por una ruta subterránea que conducía a un área en donde había personas presas en celdas & encadenadas de sus manos, en su mayoría mujeres —de inmediato, pensó:—¿Pero qué es esto...?—pues gritos de dolor aturdieron sus oídos sobremanera. A pasos sigilosos continuó. Se percató entonces por el sonido viscoso de sus pasos que caminaba por diversos charcos de sangre. Por lo que su corazonada le indicó sin fallas que algo definitivamente no estaba bien. Así que solo le bastó un par de pasos más para que al igual que Mai, quedara totalmente impresionado. Pues los alaridos eran a causa de partos clandestinos que "según" atendían. «¡Duele, duele mucho!»—expresaba una joven con la faz de su rostro desencajada mientras la mantenían acostada con piernas flexionadas & con manos amarradas. «Cierra la boca maldita terricola & puja más!» «¡PUJA!» le ordenaron y los gritos no cesaban «¡AAAH!» Entretanto, a otras de las féminas se les practicaba fecundación en contra de su voluntad, introducían pipetas dentro de sus vaginas con genes auténticos de Saiyajin «¡Suéltenme, suéltenme!» «¡No lo hagan, se los suplico!»

—Maldición...—el Coronel estaba aterrado. Al esconderse detrás de un pilar, se dijo a sí mismo—De modo que estos infelices además de adueñarse de La Tierra quieren reproducirse ...¿Pero los derrumbes & rugidos de qué se tratarán?—Con la información necesaria salió de los subterráneos. Sin embargo, dentro de él se formó un sentimiento de dualidad entre la vulnerabilidad y el coraje; la sangre le hervía debido a quería salvar a todas las mujeres afligidas del lugar, pero un movimiento de justicia de su parte echaría a perder toda la misión. Así que sentidamente & bajo su pesar, continuó.

Teniendo ubicado el lugar donde se encontraba el laboratorio de los Saiyajins, fingió escoltar la entrada principal para obtener más información. Por fortuna alcanzó a escuchar del propio Doctor Negi, decir:—Le mandé una muestra de la "Fórmula Ozaru" al Príncipe Trunks. Ya estará listo el primer pelotón de humanos para el ejército del PRIMER NIVEL.

Y de inmediato el Coronel pensó en la Estrella Roja quien podría correr peligro—Mai...

En eso, un gran rugido se escuchó potente en toda la zona. Mismo que alertó a Mai desde la alcoba del príncipe & a Violet en la cocina «¡¿Pero qué sucede?!» pues el rugido vino seguido de un gran temblor.

Así que cada uno de los solados combatientes descubrieron desde los respectivos ventanales de sus áreas, la súplica de un inocente hombre situado en un amplio terreno. De rodillas imploraba—"Por favor, no lo hagan. No quiero vivir con esa maldición, se los una familia que cuidar, qué será de mis hijos"—Sin embargo, las sonrisas sádicas de los invasores hicieron lo propio sin consentimiento «¡Por favor no, NO LO HAGAN!»«¡NOOO!»; después de escasos segundos & ante sus ojos el efecto de la fórmula Ozaru hizo que del sujeto se manifestara una impactante transformación bajo los embriagantes efectos de la luz de Luna Llena motivada por ondas Bruits que intensificaron el Rojo Carmesí del firmamento nocturno; tal escenario parecía el mismo infierno.

El trío de soldados quedaron boquiabiertos. Violet al quedar impactada solo pudo expresar—E-Es una bestia...—& Mai desde la alcoba real no lo expresó más sí lo pensó & recordó tal escena vivida al lado de Su Excelencia

«E-Esto no puede ser...», pues traumas del pasado parecía que volvían por ella.

Fue así, que Silver trataba de comunicarse con su colega mientras escapaba de la escena—¡¿Violet?! ¡¿Violet me escuchas?!

Y al instante, le contestaron:—L-Lo escucho, Coronel. E-Es solo que...—se escuchaba nerviosa a lo que él supuso que se había dado cuenta de la bestia gigante.

—Tenemos que largarnos de aquí. ¡AHORA! ¿Terminaste con la misión?

—S-Sí, Mi Coronel—pues cientos de platillos fueron preparados, servidos & repartidos a gran parte del ejército Saiyajin con el poderoso polvo de Adelfa; flor conocida por su amplia toxicidad cuyas hojas, pétalos, tallos, ramas y semillas son extremadamente venenosas.

—Entonces te veo en el punto de reunión.

—Sí.

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—N-No, puede ser...—Mai continuaba petrificada al ser testigo de los efectos de la famosa "Fórmula Ozaru"; de nueva cuenta esa bestia aparecía en su vida.—No puede ser...—expresó la misma frase mientras que sus manos temblaban. A lo que dedujo que los Saiyajins, de algún modo, habían estado presentes en diferentes escenas de su vida: en el derrumbe del Castillo de Pilaf, en el óbito de sus amigos & ahora estando al lado de su máximo representante. ¿Sería acaso que La Tierra siempre fue el blanco para sus experimentos a lo largo de los años?

—¿Maravilloso, no?—interrumpieron su trance de nerviosismo mientras que el soberano se sentía satisfecho por los resultados; el joven se cubría con una bata de seda de color azul rey pues su sesión de masajes había terminado.

En eso, el Coronel Silver trataba de localizar a Mai para saber si ya se dirigía al punto acordado. Sin embargo, para no levantar sospechas con el Príncipe silenció de inmediato el comunicador de su muñeca. A lo que provocó que el hombre se sintiera desesperado por no saber de su paradero «¡¿Por qué no contestas, Mai?!»«¡Maldita sea!» «¡CONTESTA!»

El saber que iba a morir cambiaba todo su panorama. Tras la partida de sus amigos, apreció las cosas de un modo diferente, muy distintas a lo que eran antes. Sin embargo, la gente no aprecia el valor de sus vidas hasta que llegan a puntos críticos. Es como si bebieran del vaso de agua sin saborearlo. Así, que el momento de su venganza había llegado para sacar todo su ira en contra del Príncipe Trunks sin importar qué pasara.

Fue así, que el personaje oculto bajo túnica negra, expresó abiertamente:—Te mataré.

El príncipe Trunks lentamente se dirigió a su sirviente extrañado—¿...Qué has dicho...?

La mujer ya tenía un navaja oculta en la palma de su mano; darle en la yugular era su misión, pues en teoría se suponía que ni el más fuerte sobrevivía a ello. Entonces volvió a repetir:

—Dije que te mataré, maldito infeliz.—y cómo avalancha se fue en contra del hombre.

—¡¿Pero?!

El cuerpo del príncipe fue a dar a la cama. La mujer quien pretendía apuñalarlo fallaba constantemente al darle al colchón pues el hombre azul se movía con rapidez. Sin embargo, ella no se rendía —¡MUERE, MUERE, MUERE, maldito bastando!

—¡¿QUIÉN RAYOS ERES?! —durante el forcejeó se descubrió su rostro junto con el azul de sus orbes & cabello largo.

—¡Cómo si eso fuese de tu importancia! ¡Tu gente asesinó a mi Señor Pilaf & a Shu! ¡Acabaron con nuestro castillo, con nuestra vidas, con nuestro mundo! ¡Y ahora deseas utilizar a los humanos como si se trataran de objetos para tu beneficio!—continuaba atacando sin tener éxito—¡MALDITO, MALDITO!

El joven azul le detuvo ambas manos paralizando la acción de ataque—Debo de admitir que tienes bastantes agallas por haber llegado hasta aquí—por un momento, y gracias a su instinto animal, se sintió excitado por los ataques de la fémina —Fueras un excelente soldado para mi ejército. También fueras una excelente amante para mí; si tú lo desearas fueras hasta mi reina. Solo déjame brindarte un poco de nuestras virtudes para hacerte poderosa.

Mai jadeante observó el rostro del joven. Y tras protagonizar un silencio, al aproximarse a sus labios, le dijo:—Primero muerta...—y ante el descuido de la realeza, le hirió su rostro & parte del pecho.

—Eres una desgraciada. Eres una maldita terricola sin clase—forcejearon entre navajazos & fuerza. Fue así, que Mai logró escabullirse de sus garras, y tras querer escapar, el hombre con rasguños en el rostro, le dijo:—Ya eres parte de nuestras raíces.—Mai sintió repentinos mareos & náuseas—Pudiste ser la mejor de mis amantes, pero no. Preferiste revelarte en mi contra—Fue así, que la mujer militar divisó en su mano la inyección de la fórmula Ozaru sin el líquido.

—Tu...qué me hiciste...

—Hice lo mejor para ti.

La mujer militar fue a dar contra el suelo; sintió que el corazón le palpitaba a mil por hora; el aire le faltaba. Se levantó con desespero & como si no tuviese el control de su propio cuerpo, y en contra de su voluntad, se dirigió hacía el gran ventanal en busca de la luz de la Luna Llena. Al declararse a la matriarca, sus pupilas se tornaron de un color rojo intenso mientras que la sangre en sus venas irradiaba un extraño calor que dolía. Entretanto, su fisionomía presentaba convulsiones debido al estiramiento de su piel: estaba desgraciada, maldita & manchada por las raíces de los Saiyajins. Lo supo desde aquel día que se tiñó el cielo de Rojo Carmesí; sabía que moriría, sabía que existía la posibilidad de no volver a ser un humano ordinario nunca más, como el hecho de que quizá su cuerpo no resistiera a tal cambio.

Ante el proceso de transformación, la locura le ganó & rió a carcajadas; no había otra cosa más que reír. Pues internamente era el significado de lágrimas oprimidas que solo de esa manera las podía expresar.

Sin embargo, las carcajadas se hicieron aún más amplias & llenas de locura al ver que el propio Príncipe Trunks se desvanecía contra el suelo, pues su majestad comenzó a escupir repentinamente sangre. A falto de oxígeno, sus pupilas, al igual que las de ella, del azul pasaron al rojo: ella por la inevitable transformación de Ozaru, él por el efecto venenoso de la Adelfa que Violet alcanzó a espolvorear a sus alimentos. Mismo efecto que se produjo en masa en el área de los comedores del palacio; el festín de alimentos se convirtió en una cena teñida de Roja Carmesí. De alguna forma el invasor intuyó lo que pasaba y le acompañó en su compulsiva risión.

Con grandes intervalos de locura supo que no se iría sola de este mundo pues se llevaría a Su Majestad como contribución a su nación; había cumplido con su venganza.

—Maldita terricola...—fueron sus últimas palabras, más la sonrisa sádica de su rostro prevaleció. Se fue con la esperanza de que cuando ya no hubiese más espacio en el infierno, de nueva cuenta pisaría La Tierra para cumplir con sus objetivos.

Ella solo suplicaba misericordia para reencontrarse con sus seres queridos, pues sabía que tanto el Coronel Silver & Violet se mantuvieran con vida, terminarían de erradicar todo rastro del enemigo. Por lo pronto, ya llevaban una gran ventaja.

—Mi señor Pilaf, Shu...—les nombró justo antes de perder la consciencia.

Fue así, que sus vidas en distintas perspectivas fueron destruidas por el inicio de todo: por la mancha, por el veneno, por la maldición & sobre todo:

Por el Rojo Carmesí.

Fin.

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NOTA DEL FINAL:

Agradezco a todos los que llegaron hasta aquí, muchas gracias por leer. Crear un escrito donde tuviese un tema "catastrófico" y un poco de "suspenso" me pareció bastante interesante, sé que no es completamente algo de terror/horror, pero traté de hacer algo diferente en donde los Saiyajins estuviesen involucrados, como otros personajes secundarios. Así que me fue muy entretenido volver a usar a los Coroneles Violet & Silver, han de saber que ellos dos son mis coroneles favoritos de toda la Red Ribbon. Ya los había utilizado antes en los Fanfics de "Hacia el mismo Rumbo" & por supuesto en "Flor Artificial" en esta ocasión haberlos hecho aliados de Mai fue algo bastante interesante para mí, como el hecho de que esta vez Trunks & Mai fueran enemigos. El contexto fue un poco fuera de lo común, seguí lo que mi mente me ofreció, así que el arriesgarme en utilizar a mi pareja favorita bajo un enfoque distinto se requiere de mucha creatividad por lo que fue un gran reto personal. Así que de corazón espero que este sencillo fanfic haya sido de su total agrado. El cielo rojo me recordó mucho cuando el cielo del futuro de Trunks se tiñó de verde debido a la maldad de Zamasu. Definitivamente, cuando existe la maldad, hasta los entornos más bellos se manchan. Los nombres de los Ocs de Negi & Shiso, derivan de las palabras en japonés de cebolla & perilla. Sumándole a esto algunas otras investigaciones necesaria para complementar al escrito.

Sin más qué agregar, me resta agradecer a la página de Trumai, Vegebul, Gochi & más" por la bonita actividad de Halloween, que seguramente saldrán muchos otros escritos de parte de la bella comunidad Trumai así como hermosos fanarts.

También agradezco a los grupos, a las diversas páginas & comunidades que tienen le gentileza de compartir mis trabajos, muchas gracias. A los lectores en Wattpad como a los que me dejan comentarios, ¡Gracias! A mi querida comunidad de lectores silenciosos en Fanfiction [¡Holis XD!] espero algún día se animen a saludarme. A los que siguen mi fanpage de "Kuraudea Rorena" y reacciona con mucho amor a cada publicación de actualización, ¡Gracias, gracias, gracias!

Saludos especiales a Sho, Lya, Shirley, Silbermond, Nancy, Rot Ten Tiger, Inmary & a mi amiga Bren por si se de casualidad anda por aquí.

A mis queridos amigos & compañeros Fickers: "EnterradoR" & "Esplandian" que por algún extraño motivo los tuve muy presentes durante toda la elaboración de este fic, les saludo con cariño. Si de casualidad se pasan por aquí, les mando un abrazo gigante, los aprecio e admiro, chicos 3

Desde el corazón: muchas gracias a todos.

Cariños:

Kuraudea.

Nos leemos pronto 3

¡Feliz Halloween!