Una infinita oscuridad lo rodeaba. Yuji Itadori flotaba en esa inmensurable oscuridad, mirando hacia la nada.
—¿Donde estoy? —Se preguntó el pelirrosa, mirando a los lados pero sin encontrar absolutamente nada—. ¿Habré muerto? —Fue una pregunta que se hizo así mismo pero que alguien respondió.
—¡Exacto!
De pronto, todo se volvió completamente blanco, cegandolo por un momento. Al abrir sus ojos, se encontro sentado frente a un escritorio. En ella había una chica sentada.
—¿Pero que…?
—Te doy la bienvenida al mas allá, Itadori Yuji-san~ —Dijo la chica sonriendo.
Ella parecía tener su misma edad. Cabello azul largo y suave, sus ojos también eran azules como el cielo. Tenía un hagoromo violeta envuelta en su cuerpo, usando un traje de marinero sin mangas.
Ella se parecía bastante a las idols que Yuji había visto en tv
—Me llamo Aqua, soy una diosa que guía a la gente joven que muere en Japón —Se presento la chica, pero Yuji aun estaba en shock.
—¡Espera un momento! ¿Como que me morí? —Pregunto Yuji, aun sin poder creerlo.
—Por desgracia así es. Tuviste una vida bastante corta, pero hace tiempo que te esperaba —Dijo la diosa, con tranquilidad.
—¿Me esperabas?
—¿No lo recuerdas? Habías muerto una vez, pero "Él" impidió que cruzaras al mas allá.
Yuji lo recordo. Aquella vez que Sukuna le arranco el corazón y que por una razón lo había sanado, aunque no recordaba muy bien el porque…
—Ahh yo esperaba morir después de consumir los dedos de Sukuna —Dijo Yuji, lamentándose—. Por cierto, ¿Como fue que morí?
—Sencillo, caíste y te rompiste el cuello…
—Ah ya veo… ¡Espera! ¡¿Que!?
Yuji se levanto de su silla impactado y conmocionado por la causa de su muerte. Aqua rio ligeramente leyendo el informe.
—Caiste desde el techo cuando ese sujeto te perseguía y te rompiste el cuello, moriste al instante —Explico la diosa que solto una pequeña risa—. La causa fue que te ahogaste con un pedazo de pizza… Que forma tan lamentable de morir jaja.
Yuji se dejo caer en su asiento en shock, no podía creer que fue así que murió. No era la muerte digna que él esperaba…
—Ahh… mi abuelo seguro se reira de mí cuando sepa como morí —Comento Yuji, tapándose el rostro, lamentándose—. Y tampoco pude vengar la muerte de Junpei…
—Bueno, lamentarse no te servira de nada a estas alturas. Ahora mismo tienes dos opciones, Itadori Yuji~ —Dijo Aqua sonriendo—. Una de ellas es renacer de nuevo como una vida completamente nueva y sin ningún recuerdo. La otra opción es que pases toda la eternidad en el cielo como un anciano.
—Espera un momento… ¿No se supone que iría al infierno? —Pregunto Yuji, ladeando la cabeza. Después de todo había matado a gente.
—Oh, te refieres al asunto de los humanos que fueron modificados ¿no? —Yuji asintió—. Tranquilo, hemos decidido no juzgarte por sus muertes. Las almas que liberaste aquel día salieron en tu defensa.
—¿Eh…? —Yuji dejo escapar un suspiro de incredulidad.
—Yoshino Junpei también te defendió. Todos sentían gratitud hacía tí y pidieron que no te juzgaramos por sus muertes —Termino de decir Aqua mirando al pelirrosa.
Yuji bajo la cabeza, apreto con fuerza su pantalón mientras gotas caían en ella. Yuji luchaba por contener sus lágrimas.
—Y-Ya veo… Entiendo… —Dijo Yuji, limpiandose las lagrimas—. Entonces… creo que me gustaría renac-
—¿Seguro?
—¿Eh? Bueno, sí. Creo que sí.
—Hmm para serte franca tengo una propuesta aun mas fascinantes que posiblemente te interese —Dijo la Diosa con un tono de misterio, que llamo un poco la atención de Itadori.
—¿Una propuesta?
La diosa sonrió y aplaudió con fuerza. La oscuridad se apodero nuevamente de los alrededores, alertando a Yuji. Un foco de luz ilumino a Aqua.
—¡Existe un mundo amenazado por las fuerzas del Ejército del Rey Demonio! ¡La vida de sus habitante son arrebatadas cruelmente por los monstruos! ¡Los saqueos, invasiones y matanzas han sembrado el terror en los corazones de los habitante! —Exclamo Aqua dramáticamente.
—Que cliché —Pensó Yuji con una gota en la nuca. La habitación volvió a la normalidad mientras la diosa tomaba asiento nuevamente.
—Gracias a eso las personas que murieron en este mundo tienen miedo de renacer de nuevo en este mundo y por consecuencia la población esta disminuyendo drásticamente —Dijo con calma, ignorando la actuación dramática de hace rato—. Así que se nos ocurrió una idea. Encontrar personas jovenes y que aún deseen vivir, enviarlos con sus recuerdos y cuerpos originales. ¿Que te parece mi propuesta? Por supuesto te daremos un regalo antes de enviarte alla, puede ser desde una habilidad asombrosa o una super arma nivel dios~
Yuji no pudo evitar emocionarse con eso. Le interesaba mucho esa propuesta y sobretodo ayudar a derrotar a ese Rey Demonio que causa destrucción a ese mundo.
—Jeje~ veo que te emocionaste~ —Dijo la diosa sonriendo—. ¿Te interesa?
—¡Por supuesto que sí! —Exclamo Yuji con emoción. Después de todo, siempre deseo ir a un mundo alterno y salvar a las personas, ademas podría cumplir su deseo de ayudar a los demas—. Oh, ahora que me acuerdo… Mi cuerpo original esta ligada a Sukuna, entonces ¿Ese bastardo vendra conmigo? —Pregunto con el ceño fruncido. La sola idea de que Sukuna renaciera con él…
—Oh para nada, eliminaremos su alma de tu cuerpo, si es lo que quieres.
—¿Enserio? ¡Asombroso! ¡Eliminen a ese bastardo y mandenlo al infierno!
Yuji estaba realmente felíz. Odiaba con mucha fuerza a Sukuna y nada mas le haría feliz que ardiera en el infierno. Aunque… le hubiera encantado que fuera erradicado también de su mundo.
En ese momento, el recordo algo también importante.
—Y… ¿Que pasará con el idioma de este lugar? ¿Tendre que aprender desde cero su idioma? —Pregunto Yuji, con curiosidad. Sería un fastidio tener que ir a una escuela aprender un nuevo idioma.
—Eso no sería un problema. Con nuestra ayuda, tú aprenderás instantáneamente el idioma directamente en tu cerebro en el momento en que llegues al otro mundo. Naturalmente podrás leer y escribir también. Pero hay un efecto secundario, si eres desafortunado podrías quedar decerebrado… —Murmuro la última parte y la mas importante—. ¡Solo queda que escogas una habilidad especial o arma!
Yuji miraba seriamente a la diosa quien sonreía ampliamente.
—Creo que escuche mal… ¿Dijiste que podría si tengo mala suerte se me fundiria el cerebro…?
—No dije eso
—¡Si lo dijiste!
Yuji la señalo acusadoramente, sin importarle si ella es una diosa. Aqua solamente lo ignoro y le lanzo un libro similar a un catálogo a Yuji.
—Como sea, solo escoge una habilidad o arma que tu quieras.
Yuji bufo un poco y recogio el catálogo. Le echó un vistazo a cada página.
—Veamos; "Super Fuerza" "Magia Divina" "Suerte extraordinaria" "Espada Divina: Excalibur" "Espada Demoniaca: Murasame"... —Yuji estaba indeciso, habían tantas habilidades y cosas que le encantaban, sobretodo las armas.
Debía ser cuidadoso en lo que escogería. Escogería algo que se ajuste a sus habilidades físicas, pero le llamaba mucho la atención las armas y la magia.
Aqua miraba desinteresadamente al pelirrosa, comiendo unas papas saladas.
—Oye apresurate ¿Quieres? Aún hay muchas almas muertas que deben ser guiadas por mi. Escoge una rápido —Dijo Aqua. Esto solo hizo que Yuji gruñera.
—¡Hay muchas opciones aquí, debo escoger una que me ayude a vencer al Rey Demonio! —Exclamo Yuji, un poco enojado.
—Dudo mucho que logres hacer alguna diferencia. No eres el primero que enviamos allí, muchos iguales a tí dicen que derrotaran al Rey Demonio y terminan muriendo de nuevo. No tengo muchas esperanzas contigo, así que escoge cualquiera rápido~ —Dijo Aqua comiendo sus papitas tranquilamente.
Por supuesto, eso no le agrado ni un poco a Yuji. Se había reído de su muerte y ahora lo tachaba de un incompetente que no durara mucho allá. Su actitud engreida y desinteresada tampoco le gusto.
Entonces se le ocurrió algo~
—Bien, ¿Dijiste que podría llevarme lo que quiera verdad? —Pregunto Yuji, cerrando el catálogo y sonreír.
—Si, ¿ya escogiste lo que llevaras contigo? —Pregunto la diosa.
—Oh por supuesto que sí… A tí —Dijo con una gran sonrisa animada mientras la señalaba.
Aqua lo miro sorprendida por un momento y continuó comiendo sus papas.
— Está bien, entonces por favor no te muevas del centro de este círculo mágico… —Aqua de repente dejó de hablar—. ¡Espera! ¿Que dijiste?
En ese momento un círculo mágico dorado apareció en el cielo y de ella salió una mujer con alas de angel, cabello rubio y usando una túnica blanca.
—¡Hemos escuchado la solicitud de Itadori Yuji-san y ha sido aceptada! —Exclamo la mujer descendiendo elegantemente al suelo.
—¡Wow! ¡Un Ángel! —Exclamo Yuji completamente emocionado y embobado.
—... ¿Eh? —Aqua seguía en shock mientras un círculo mágico aparecía bajo sus pies al igual que Yuji, quien solto un jadeo de asombro.
—Desde ahora me hare cargo de su trabajo, Aqua-sama.
—Espera, ah, ¿Qué está pasando? Esto es una broma ¿cierto? No no no no no, espera, no, ¡esto es raro! ¡Llevarse a una Diosa debería estar prohibido! Es ilegal ¿no? ¡Dime que esta prohibido! ¡Espera! —Aqua estaba en pánico y llorando.
— Que tenga un buen viaje, Aqua-sama. Por favor déjeme el resto a mí. Le enviaremos personal para darle la bienvenida de regreso justo cuando el rey demonio sea derrotado —Dijo el Ángel con una sonrisa.
—¡Espera! ¡Espera! ¡Como yo soy una diosa poseo poderes curativos, pero no poderes para pelear! ¡Es imposible para mí derrotar al rey demonio!
El ángel ignoró completamente Aqua, quien colapsó en el piso llorando, y se acerco a Yuji sonriendo gentilmente.
—Itadori Yuji-san~ Te estarás dirigiendo a otro mundo ahora y te convertirás en uno de los héroes candidatos para derrotar al rey demonio. Recibirás un regalo de los dioses en el momento que derrotes al rey demonio —Explicó el Ángel, llamando la atención del chico.
—¿Un regalo?
—Así es, un regalo digno del Salvador de un Mundo… ¡Se te concedera cualquier deseo que escogas! —Exclamo el Ángel, asombrando a Yuji.
—¡Hey esa es mi linea!
Yuji lo pensó: si consigue ganarle al Rey Demonio… Podría desear eliminar por completo a las maldiciones junto a la energía maldita y así librar a Japón de una vez por todas de su condena.
El espíritu de lucha de Yuji se encendio mas que nunca.
—¡Bien! ¡Voy a derrotar a ese Rey Demonio y liberare mi mundo de las maldiciones! —Exclamo Yuji apretando su puño y sonriendo con determinación.
El Ángel sonrió mientras Aqua y Yuji comenzaron a flotar hacía el círculo en el cielo.
—¡Nooo! ¡Espera! ¡Yo no quiero ir! —Grito Aqua mientras Yuji se acercó y puso su brazo sobre los hombros de ella.
—¡Animate, Diosa! ¡Contigo a mi lado pondremos vencer a ese tirano y salvar al mundo de su amenaza! ¡JAJAJAJAJAJA! —Exclamo Yuji bastante contento, sobretodo por ver aquella diosa que lo desprecio en ese estado.
—¡Kyaaa! ¡Alejate! ¡Sueltame! ¡No quiero ir contigooooo!
—¡Nuevo mundo allá vamos!
—¡Adelante, Heroe! ¡Rezo por que seas quien salgas victorioso entre todos los héroes y se convierta en aquel quien derrotó al Rey Demonio! —Exclamo el Ángel con una gran sonrisa.
—¡Waaa! ¡Esa es mi lineaaa!
Tras eso, Yuji Itadori y la Diosa Aqua, fueron enviados a otro mundo cuando el círculo mágico desapareció.
¡Una grandiosa aventura les espera a nuestros heroes!
