QUE ONDA A TODOS, AQUI BRAVETHUNDER REPORTANDOSE CON OTRO CAPITULO MÁS DE ESTE GRANDIOSO FIC. SE QUE PASO MUCHO TIEMPO DESDE LA ULTIMA VEZ QUE ACTUALICE PERO FUE POR BUENAS RAZONES;

*SABIENDO QUE QUIZAS USTEDES ESTABAN PERDIENDO EL INTERES EN ESTA HISTORIA COMENCE A MODIFICAR ALGUNAS COSAS, OBVIAMENTE LA TRAMA ES LO QUE ES PERO COMO SIEMPRE HE DICHO "NO SE CONFIEN POR LO QUE HAY A PRIMERA VISTA, SIEMPRE HAY ALGUIEN DETRAS DE LO QUE LEEN" Y EN ESTE CASO ASI ES, MODIFIQUE LA HISTORIA DE FORMA QUE SEA MEJOR PARA USTEDES, SI. IGUAL HABRA CAPITULOS MUY LARGOS, EXAGERADAMENTE LARGOS. PERO COMO ESTE CASO NO LO ES PORQUE HABIA DICHO ANTES, EQUESTRIA ESTA TAN DAÑADA QUE EL TIEMPO YA NO TIENE UNA CONTINUIDAD COMO TAL. SINO QUE "ALGO" LO AFECTO Y POR ESO AUNQUE LEAN QUE EL CAPITULO ES CONTINUACION AL ANTERIOR DENTRO DE LA TRAMA PODRIAN PASAR 3 MESES DE DIFERENCIA O UN DIA ANTES DE LO QUE PASO ESE CAPITULO ASI QUE ESTE CAPITULO ES EL INICIO A ESA DISTORSION. DEJE ALGUNAS COSAS OBVIAS, Y OTRAS NO TANTO. PORQUE ASI COMO LO HICE EN REENCARNACION HAGO LO MISMO AQUI, SEÑALARE COSAS QUE SON MUY IMPORTANTES PARA QUE LO TENGAN EN MENTE Y OTRAS. PARA QUE LO INVESITGUEN.

*HE ESTADO ALGO INACTIVO EN MI PAGINA DE FACEBOOK, LO SE. PERO TODO ESTO PORQUE HE ESTADO TRABAJANDO EN UN DIARIO. EL CUAL VAN A SABER DE EL MAS ADELANTE, ESE DIARIO TIENE MUCHAS ANOTACIONES SOBRE ESTA HISTORIA, LITERAL ES TODA LA TRAMA. TODO LO ESCRITO EN ESE DIARIO HARE LEYENDAS QUE COMPLEMENTARAN ESTA HISTORIA Y SI SALE BIEN, PONDRE UNA LEYENDA HECHA POR MI ANTES DE CADA ARCO IMPORTANTE. Y DE HECHO, YA SE ACERCA EL PRIMER ARCO. Y PRONTO SABRAN LA LEYENDA DE "MALAQUITE: EL CABALLERO ESCUALIDO" LES ENCANTARA.

ESE DIARIO LO TENGO BIEN ESCONDIDO, HA DECIR VERDAD LO LLEVO A MUCHAS PARTES CONMIGO A PESAR DE QUE PARECE UN CUADERNO ESCOLAR XD Y NO DEJO QUE NADIE LO LEA PORQUE AUNQUE NO LO CREAN TENGO LA FORTUNA DE QUE HAY LECTORES EN MI CIUDAD Y ME HAN CONOCIDO PERSONALMENTE Y ESE DIARIO NO LO MUESTRO EN PUBLICO PARA PROTEGER LA TRAMA DE ESTA HISTORIA Y NO ARRUINAR NADA. SI DIGO ESTO ES PORQUE CON EL TIEMPO IRE DANDO FRAGMENTOS DE ESE DIARIO EN MI FACEBOOK Y OTROS AQUI. PARA QUE APARTE DE LAS HISTORIAS QUE HAY EN EL LIBRO DE LA VIDA SE COMPLEMENTEN CON ESE DIARIO. ESPERO HABERME ENTENDIDO XD

EN FIN, SIN MUCHO MAS QUE DECIR (Y DIJE BASTANTE :3) ESPERO LES GUSTE ESTE CAPITULO TANTO COMO A MI AL ESCRIBIRLOS, LOS VERE HASTA LA PROXIMA AMIGOS 3

—CAPITULO 20: EL BOSQUE DEL CREPUSCULO INFINITO—

Arco de la desterrada

Hace eones, en un viejo mundo. Existió una chica que era capaz de viajar en el tiempo, esta chica tenía el objetivo de salvar al amor de su vida de su cruel muerte. Lo que provocó que esta chica comenzara a viajar en el tiempo una y otra vez. Quedando así atrapada en su propio ciclo. Este arco, de roble sagrado con hermosas gemas rosas posee el don de un amor corrupto y demoniaco, tiene la habilidad única de que sus flechas pueden viajar durante eras hasta asestar a su objetivo. Gracias a la arrogancia de esta chica al tratar de romper las cadenas del destino.

Los chicos avanzaban en medio del bosque, aquel bosque de troncos secos y hojas marrones, las ramas casi desnudas y el suelo cubierto por una delgada cama de hojas secas, guiados por el sonido de sus pisadas bajo el bochorno del sol y el frescor de la luna. Ambos colisionados creando una noche por la mitad de un continente y en la otra mitad un día interminable, ambos astros emanaban un aura respectivo a sus colores y había rocas esparcidas en el cielo, restos de la mitad de la luna que chocó con el sol.

Radiant sonreía alegre de tener su precioso regalo, proveniente del oeste de Equestria. Los chicos veían a Radiant algo incomodos, pero eso no opacaba ese sentimiento. Pherica veía su teléfono celular viendo una foto de ella con su madre. Ambas abrazadas en la sala del trono haciéndose una "Selfie" y en la parte trasera se veía a Krysta extendiendo su mano molesta por la falta de respeto en la habitación más importante del imperio.

—¿Qué crees que este haciendo mamá en el castillo? —Pregunto Pherica sonriendo hacia Raphiel, ella reacciono respondiéndole el gesto mirando el cielo anaranjado.

—Conociendo a tu madre. Posiblemente este jugando sus videojuegos. Ya sabes que a ella le gusta jugar aun con sus responsabilidades —Se expreso Raphiel con una sonrisa, bajando la mirada al frente. Viendo a los chicos caminar parejo.

—¿Sabes de donde saco esas cosas? Sabes, en Equestria ni en Terranova tienen esas cosas que llaman "Videojuegos" o "Consolas" ¿De donde las saco? Ya que se que tu la conoces de muchos años.

—Bueno Pher, es algo complicado explicar.

—¿Por qué?

—Porque digamos que no estamos solos en el universo, lo poco que se de tu madre es que consigue sus videojuegos de otro lado, pero nunca me ha dicho de dónde. Tu madre también es algo extraña con sus pertenencias.

—Bueno eso sí, nunca supe que tenía un espadón así de poderoso. Radiant ¿Qué sabes del espadón de mi madre?

—¿Esto? —Radiant expuso el espadón apartando la túnica de su espalda y el espadón reflejo perfectamente la luz del sol en su enorme hoja —Solo se que en el libro de la vida dice que era un espadón muy poderoso, aparte de que la Reina Phoenix podía usarlo únicamente. ¿Por qué?

—Es que ahora que estamos lejos, estas preguntas me han surgido. ¿A que se deberá?

—Cierto, siempre me he preguntado. Hermano —Reinhardt tomo el regalo de su hermano mirándolo intrigado. Mirando el aparatejo con una extraña mueca —¿Qué es el guardián del mundo?

—¿Él? Bueno, el era un humano. Como tú, pero también era un pony. Como yo.

—No, eso no. ¿Qué es él? ¿Un Dios? ¿La muerte? ¿Qué es él?

—No lo sé —Respondió sin dudar, deteniéndose y el grupo por igual, cerca de un arroyo. Mirando el artefacto en la mano de su hermano. Recordando como lo ganó en una emboscada a una caravana de ladrones cerca de las ruinas de Appleloosa—Solo se que es un hombre, un humano como los de Terranova.

Reinhardt se quedó callado y el grupo retomo su camino, mirando al frente, sin saber bien a donde iban. Pherica tomaba fotos a todo lo que se topaban, capturando en la cámara de su celular los arboles y la cama de hojas marrones y también el anaranjado cielo junto con el sol y la luna, aunque al poco tiempo se aburrió del mismo ambiente por lo monótono y repetitivo que era este. Guardo su celular y se emparejo a Raphiel, quien veía su mochila para buscar algo de entretenimiento.

—¿Qué haces Raph? —Pregunto Pherica asomando la cabeza por la mochila.

—Buscando algo interesante—Dijo sin apartar la mirada del interior de la mochila—Turime nos dio muchas cosas, pero nada para entretenernos, solo cosas para la sobrevivencia.

Pherica miro la mochila y vio los frascos de veneno, temibles para todo Terra-humano. Y también algunas provisiones como comida, bebidas y golosinas. También contando el oro para intercambiar, aunque hasta ahora no le han dado un uso ya que los habitantes del exterior no aceptan el oro del interior de Equestria.

—Radiant—Pherica se acercó al chico y e volteo a verle sin detenerse, emparejándosele—¿Dónde estamos?

—Supongo que seguimos yendo al sur, pasando la antigua granja Pie. Pero no estoy muy seguro. Este bosque es muy confuso—Radiant miro a su alrededor con una pequeña preocupación, mirando a su alrededor, viendo la infinidad del bosque a su alrededor, con las hojas marrones balanceándose lentamente al caer. Bajando la mirada hacia la cama de hojas en el suelo casi ocultando el marchito pasto de color verde—No sabía que pasaríamos mucho tiempo caminando.

—Creo yo que debimos haberle pedido un mapa a Turime—Respondió Reinhardt deteniéndose delante del grupo, pasando la mano por la corteza de un árbol—Hermano, deberíamos descansar un poco. Tengo el presentimiento que cuando "anochezca" será más difícil movernos.

Radiant miro a su hermano por un largo rato, mirando sus ojos, y era claro que tenia razón. Comprendió que tenía una corazonada, y se dejo caer en medio del grupo. Mirando el cielo con el enorme espadón en su espalda y la esfera rodar hacia un costado de él.

Raphiel se sentó cruzándose de piernas respirando aliviada, el dolor en sus piernas comenzaba a ser insoportable y Pherica se sentó a su lado recargándose en su hombro descansando la vista.

Reinhardt se recargo en aquel árbol mirando a su hermano barriga al aire, respirando aliviado, pero tenía que preguntarlo.

—¿Cuánto tiempo llevamos aquí?

—No lo sé Rein—Respondió Radiant Girándose en la cama de hojas quitándose el espadón y la capa al rodar, y el espadón quedo parcialmente cubierto por la capa y el mango y la mitad de la hoja se mostraba reflejando la luz anaranjada—Quizás una semana, un mes, un año. Ni idea.

—¿Cómo estarán las cosas allí dentro? —Pregunto Pherica mirando hacia la gran montaña purpura, donde el castillo de la Reina se alzaba con ese deplorable aspecto y todavía humeando.

—Supongo que igual, con eso de que viven bajo la ilusión del guardián legendario—Reafirmo Radiant sentándose en el pasto mirando el espadón y la esfera rodar lentamente hacia ella chocando con el mango y resonar en un tenue golpe agudo.

—¿Mamá estará bien Raphiel?

—Si Pherica, tu mamá esta bien, la conozco desde hace mucho tiempo y aunque no lo parezca. Ella es muy fuerte—Raphiel acaricio la cabeza de Pherica y ella sonrió restregando su cabeza sobre su hombro con ternura ruborizando a Raphiel.

—¿Cómo crees que este nuestra madre Radiant? —Reinhardt miró a su hermano y el apenas mostro interés por la pregunta demostrándolo con un pequeño gesto en su rostro y encogiéndose de hombros—¿Todavía estas molesto con nuestra madre?

—¡Obvio! —Radiant tomo la esfera con su magia, obviando el hecho de que no tenía un cuerno, pero su pata derecha se iluminaba en un aura dorado—¿Cómo debería de actuar si toda tu vida te han mentido?

—Vamos hermano, no seas tan rencoroso. Nadie se esperaba que nuestra madre nos mentiría de esa forma. Nosotros, los guardianes de la leyenda. ¡Increíble! Pero ¿Usarnos para sus experimentos? —Radiant bajo la mirada con tristeza, mirando su reflejo en la hoja del espadón tomándolo con magia. Lo sostuvo frente a el de forma vertical mirando su reflejo y las chicas detrás de él, sentadas mirando los objetos de la mochila con interés.

—Se que lo que hizo mamá estuvo mal, nunca supe porque nos usaba para sus experimentos, pero tengo la esperanza que lo hizo por el bien de Equestria, ahora que estamos en el exterior ahora comprendo porque lo hacía.

—¡No importa! —Grito Radiant estirándose dejándose caer de espaldas y dejando caer el espadón enterrándose en el suelo, sonrió mirando los arboles marchitos y los rayos de los astros en el cielo caer sobre su rostro—Eso ya no importa, lo que importa es que Equestria necesita de nosotros y el guardián legendario también. Debemos de sacarlos de su prisión.

—¿Y que hacemos entonces? ¿Qué haremos con esa cosa? —Señaló Reinhardt hacia la esfera dorada.

—Averiguar que hace.

Las chicas se acercaron a Radiant y Reinhardt sentándose alrededor del pegaso, tomo la esfera viendo su centro rugoso y las grietas rectas de un extremo a otro y en forma vertical. Raphiel saco de su mochila una pequeña antorcha cubierta de un pañuelo de color verde, la encendió con una chispa de su magia y una pequeña llama, pero potente enterrando la antorcha en el suelo.

La llama verde se debía al pañuelo, era un pañuelo bañado en aceite verde, eficaz para dar calidez a los que rodee además de acelerar el descanso. Regalo de la Reina de Terranova.

Reinhardt estaba sentado de piernas cruzadas con la lanza clavada a un lado suyo, Pherica tenia su celular en la mano jugando un videojuego, pero entre partida y partida veía la esfera.

—Entonces ¿Qué es? —Pregunto Raphiel dejando la mochila a un lado viendo la esfera en la pata de Radiant dándole vuelta lentamente.

—Ni idea, cuando lo obtuve no me dijeron que era.

—¿Sera que no te dijeron porque lo robaste? —Dijo Raphiel golpeando el hombro del chico con cierto desapruebo. Aunque el chico sonrió entre la vergüenza por la verdad.

—Bueno, realmente no es algo que me digan con mucho gusto si voy a preguntarles.

—¿Y por qué te lo llevaste?

—No lo sé, lo vi en un estante en el carruaje y me lo llevé.

—¿Y no se te hace raro que este hecho de oro? —Reinhardt dijo algo certero, Radiant ya no veía la esfera como un botín ordinario, sino algo diferente.

Radiant veía la esfera con curiosidad ahora, tratando de entender porque está hecha de oro.

—Eso explicaría porque nos persiguieron por un Kilómetro—Esbozo una pequeña risa maliciosa lanzándole la esfera a Raphiel y ella la sostuvo con ambas manos, pasando los pulgares por las partes rugosas con interés.

—Ahora da risa, pero en ese instante huíamos por nuestras vidas—Raphiel también esbozo una sonrisa jugueteando con la esfera, pasando su dedo índice por una gran parte rugosa y una protuberancia en el centro.

—Es interesante y preocupante a la vez que sea oro genuino—¿Sera que es oro Equestre?

—No lo se Rein, posiblemente. ¿Qué opinas Pher? ¿Qué te dice tu martillo? —Pherica saco de su bolso un martillo en miniatura de color negro, lo interesante con el martillo era que tenia una gran maza rectangular con un águila en el costado de alas plateadas y el extremo del mango tenia una pequeña esfera dorada, un arma que encontraron hace días en una región perdida de Equestria, en un solitario manglar y este martillo estaba enterrado en el suelo, abandonado. Desahuciado.

Martillo negro

"Aquel guardián de armadura plateada fue una horrible persona, pero tenía razones para existir" El martillo negro es una enorme maza rectangular con el relieve de un águila en el costado, este enorme martillo tiene la habilidad de clonar la determinación de su portador, así como sus capacidades siendo este un arma con mentalidad propia y capaz de atravesar mundos con tal de cumplir los deseos del portador, el favorito de Chase, el devastador.

Aunque Pherica había encontrado por su cuenta este martillo tomo apariencia de un inocente llavero, aunque era algo ingenioso para distraer a los enemigos por su aparente inutilidad, tenia muchos secretos escondidos. Uno de ellos fue que podía aumentar su tamaño o encogerse a voluntad de su dueño, otro talento era que era capaz de identificar objetos de su calibre o verificar si eran reales o inexistentes.

Raphiel acerco la esfera a Pherica y ella aumento el tamaño de su martillo para que encajara con su mano y paso la maza cerca de la esfera de un lado a otro. De arriba hacia abajo y en diagonal. El martillo lanzaba pequeños halos de luz azulados rodeando la esfera y traspasándola hasta que el martillo se volvió a encoger y Pherica abrió los ojos con sorpresa mirando la esfera.

—¿Y qué es?

Pherica vio a Radiant con ese gesto preocupando al chico y al grupo.

—Un globo terráqueo.

—¿Qué?

Los chicos miraron la esfera, no tenia ninguna apariencia de globo terráqueo, ni las características para tenerlo; No poseía montañas, no poseía relieves que lo distinguieran, solo algunos relieves cortados por las muescas, Radiant tomó la esfera con su magia girándola lentamente, inspeccionándola de nuevo.

—Esto no tiene nada de globo terráqueo, no tiene la capital ni el continente. Solo muescas.

—eso es porque no has metido tu dedo en la parte inferior —Y Radiant giro la esfera colocándola de cabeza, con un orificio en el centro, asomo ligeramente la vista viendo en su interior un pequeño botón, apenas visible por la luz del ocaso. Pherica se acerco y metió su dedo índice presionándolo con un suave Clic y la esfera comenzó a moverse sobre sus piezas, aquellos relieves incompletos y las muescas desaparecían mostrando otras caras interiores con otros relieves formando las tres enormes islas que formaban una cuarta parte de todo su planeta; del lado izquierdo, pasando por un sendero pequeño una península con otra enorme montaña de la mitad de tamaño que Equestria, del lado opuesto otra enorme isla con varias más pequeñas a su alrededor y en la parte inferior la abandonada zona oscura, dominaba por un viejo Rey Loco hace siglos.

Y en lo más inferior aquella zona gélida donde fueron hace apenas un mes, donde lucharon con aquel titan, hijo del guardián legendario. El guardián del mundo, aquel que tiene muchos nombres y cambia con el tiempo y ahora, es un guardián legendario.

Ahí todos miraron, en esa isla que ocupaba el polo sur del planeta, recordando toda su odisea imaginándose que sabrían muchas cosas del mundo y recordar la recompensa; un estoque de hielo. Y todos se preguntaron ¿Por donde vamos? ¿Qué tanto hemos caminado?

Era obvio que a esas alturas del viaje todos sabían lo difícil que era viajar por ese mundo, si es que era viajar porque han estado perdidos desde que salieron de aquella isla helada y ahora buscan al segundo titan que vive en el exterior que dicen que vive en el reino Griffin. Griffinstone.

—Radiant, hermano—Hablo Reinhardt, con algo de temor.

—Dime hermano.

—¿Cuánto tiempo llevamos aquí afuera? ¿Tienes las cuentas?

—Según lo que se, tenemos ya un mes de salir. Pero no se si es en realidad un mes, puede ser más o menos—Respondió con esa misma incertidumbre sin apartar su mirada de la esfera—No estoy del todo seguro.

—¿Y a donde vamos? —Pregunto Raphiel, apartando la mirada del grupo, viendo al horizonte, aquel bosque otoñal infinito. Como si todo lo que viesen fuese una ilusión. Una prisión.

—Al Este, como lo dijo Llanas. Debemos ir al este.

—Pero ¿Cuál es el este? —Pherica hizo que la sangre se helara para el grupo, todos se estremecieron mirando a la chica.

—No lo sé—Dijo fríamente Radiantshield mientras se levantaba con el espadón en su espalda y colgaba de nueva cuenta aquel estoque, que permaneció oculto bajo su túnica como por casualidad del destino, aquello emanaba un aura blanquecina y una agradable brisa helada con algunos copos de nieve, símbolo del frio corazón del líder de la manada—Pero debemos de seguir, El guardián legendario depende de nosotros. Si no volvemos antes de que termine el año nuestra madre morirá.

—Hermano, ¿Vas a salvarla en serio? ¿Después de todo lo que sufrimos?

—Si Rein, la salvare. No permitiré que la magia del abismo la consuma. El guardián legendario me dijo que la cura estaba aquí afuera y a eso venimos. Juntaremos las 4 reliquias de los cuatro grandes y la salvaremos. Andando.

Los chicos tomaron sus cosas y se levantaron, Pherica se quedó atrás del grupo nuevamente. Radiantshield le lanzo la esfera y ella lo atrapo fácilmente y observo los tres continentes, con una tristeza en su corazón. Quería volver a Terranova y abrazar a su madre y a su padre.

"El mundo esta como debe de estar, pero este reino no debería de estar bien".

—Diario de una vieja leyenda. Parte del libro de la vida—