—CAPITULO39: SACRA PHERICA—

La tierra se partirá en dos, mundos abrirán sus puertas y los astros se arrodillarán delante de él. Ciudades se postrarán mientras que de sus faldas nacerá luz. El viento se quebrará mientras que sus guardianes saldrán y cubrirán el mundo de su santidad y la creación olerá a deidad. Nunca sufriremos del juicio final.

—Profecía del padre de la iglesia de los búhos.

Pherica es una chica vivaz y alegre. Pese a que su nombre es un misterio para ella y todo el reino dado que todos en Terranova tienen nombres con terminación "iel" o "ael" ella tiene un nombre que termina como "Ica" lo cual le ha traído conflictos sociales. Una de las cosas más a destacar de ella es que en su niñez nunca tuvo más amigos que Radiantshield y Reinhardt. Hijos de la emperatriz de la amistad. Y ella se dibujaba alegre al estar con ellos pero cuando era hora de partir, en ella se veía la tristeza.

¿De donde venia? ¿Quién es su padre? ¿Por qué se llama asi? Su madre nunca le respondio ninguna pregunta. Solo dijo que su padre fue un héroe de leyenda que fue maldecido y fue considerado un villano por su pueblo a pesar de haber luchado valientemente contra su abuela.

Tambien su madre le contaba que; su madre no era mala, sino que no supo que hacer con su vida aunque fuera inmortal. Por eso pasaron muchas cosas malas en el pasado y diría cosas que una niña a esa edad no entendería, y actualmente seguiría sin entender.

Pasarían los años y Pherica crecería bajo la educación de su madre pero entrenada por su tia Krysta. Quien en el pasado fue una serafin de alta categoría. Un rango ya extinto para el actual reino pero por palabras de su madre "Ser un serafin en aquel entonces, era un rango de admirar. Aquel que lograra ese rango era digno de respeto y bajo su autoridad había cientos de mundos pues eran seres tan grandes que podían cuidar de la vida de todos esos mundos" aunque aquellos que realmente vivieron del pasado sabían que los serafines eran seres de maldad, arrogancia y perversión.

Y aunque Pherica se preguntaba cuales eran esos mundos que los serafines cuidaban nunca se intereso en saber si seguía habiendo vida en esos mundos. Aunque al poco tiempo se entero de que arriba de esos serafines estaban los lideres. Capitanes de elite que no solo cuidaban de los serafines, sino que cuidaban a toda la creación. Dando como una realidad la existencia de universos diferentes, infinitos y llenos de vida.

Aquellos encargados de mantener esos universos en lugar no eran mas que los "Guardianes" Seres ultra poderosos capaces de traer la paz a esos mundos de un chasquido o acabarlos con un grito. Seres vinculados a la creación del hombre primigenio. Arkzrimiel. Todos los guardianes le rendian cuentas al primigenio y el les otorgaba más vida o se las quitaba hasta que ocurrió la primera guerra divina.

Y fue allí donde su madre paro de contarle el pasado a su hija pero recalcaba mucho que esa guerra divina fue una mentira. Arkzrimiel no se había corrompido. Lo habían corrompido al mandarlo al abismo y fue allí cuando la leyenda del guardian de la creación nació. El guardian Nova nacería milenios más adelante y evitaría que la creación fuera devorada por este cruel Dios.

Ante estos relatos Pherica crearía una imagen casi perfecta de su padre, no sabia que nacería un ser tan poderoso y tan noble como para terminar con una dictadura casi eterna, haría temblar los cimientos de aquel antiguo reino llamado "Göttliche Grenze" y usaría todo su poder para liberar a todos los guardianes de la creación y asi mismo de los habitantes de ese reino.

Mientras Phoenix contaba aquel pasaje, de como el guardian Nova salvo aquel reino. Raphiel hacia una mueca decaída mientras tomaba de la mano a Raphiel, ambas sentadas en el piso de la sala del trono. Y recalcó Phoenix que el guardian Nova volvería una tercera ocasión pero en esa ocasión seria para salvar a toda la creación del corrompido Arkzrimiel quien en su mente solo abundaba la maldad de toda la creación y al ver que Equestria, cuna de la amistad y el amor abundaba de energía opuesta. Estaba dedicado a aniquilar ese mundo por completo.

Queria acabar lo que tanto amaba el guardian Nova.

Actualmente, Pherica recordaba con tanto cariño los relatos de su madre del guardian Nova mientras llegaban al muelle de una de las costas de Equestria, ella no veía la preocupación de sus amigos al estar tan sumida en sus pensamientos. ¿Cómo era el guardian? ¿Qué era lo que lo hacia tan fuerte ante los peligros? ¿Qué le daba ese poder?

—¡Pherica! —Pherica daría un pequeño salto mirando a sus amigos y ellos estarían sentados en el centro del muelle tomando un descanso—¿Te encuentras bien? —Radiantshield entrecerraría los ojos queriendo enfocar a Pherica.

El sol y el bochorno del fin del mundo era más intenso en las costas de Equestria por la carencia de los arboles o estructuras que generaban sombra y la brisa que sentían era calida en vez de fresca a comparación al centro del continente.

—Sí…Sí estoy bien—Pherica caminaría hacia sus amigos mirando a todas partes. Era desconcertante que no hubiera nada en las orillas del continente que solo ese muelle de madera.

—Supongo que debería decir que te equivocaste Pher—Raphiel le daría un suave golpe en el hombro a Pherica con una pequeña sonrisa sentándose junto a los chicos en el borde del muelle.

—Sí. Tambien—Pherica trataría de sonreir pero solo quedaría una sonrisa amarga dando media vuelta, sus amigos la verían caminar hacia una pequeña choza al pie del muelle.

—Pher. No te sientas mal, no te culpes—Radiantshield se levantaría de su lugar caminando hacia ella—No sabias como nosotros lo que pasaría. A cualquiera de nosotros nos pudo haber pasado esto, inclusive encontrando el modo habriamos terminado aquí de cualquier forma.

—Sí. Podria ser también. Simplemente quería ser de utilidad—Radiant se detendría a mitad de su camino y Pher seguiría su caminar con una pequeña sonrisa y entraría a dicha cabaña. Donde vería a sus lados varias cañas de pescar y barriles llenos de agua con algunos pescados muertos flotando.

El hedor asfixiaría su nariz pero a los pocos minutos se adaptaría y notaria delante de ella un mostrador con una caja registradora y detrás un gran pescado colgando en la pared como trofeo. Se subiría al mostrador y se recostaría encima de este poniendo la cabeza en la caja registradora viendo las vigas de madera.

Aunque ella mostraba una mirada triste y una personalidad apática en ese momento, en realidad se encontraba tranquila.

Pequeña criatura. No sabes lo que deseas, pero deseas poder. ¿Qué hacer contigo? ¿Qué hacer contigo pequeña mestiza?

Pherica sentía algo mirar dentro de ella, escarbar en sus entrañas y mallugar su corazón mientras usaba su cabeza para buscar una respuesta; Ella sabe lo que quiere, sabe lo que busca y lo que anhela. Anhela lo mismo que su madre y desea verlo cuanto antes pero sabe que es imposible.

¿Asi que deseas conocerlo? ¿Es que acaso no sabes las atrocidades que hizo? Podra ser un héroe para tu pueblo pero para mi cuerpo es un criminal, mira lo que me ha hecho. Ha acabado con mi vida; Mis amados animales, mis hermosas flores. Todas marchitas y cegadas pues por su egoismo me ha llevado entre las patas.

Pherica quería saber si en verdad esas historias que su madre relataba eran verdad, y aun recuerda una historia, una en la que el guardian del mundo había luchado contra el Rey de Equestria. Un hombre desalmado, carente de lógica y razón. Habia escuchado como su padre se desenvolvió en la pelea valientemente contra el infame Rey pero en una cruel trampa que el Rey puso sobre él, cayo velozmente y casi pierde la vida con el arma de su madre, sostenida por las manos paganas del Rey.

Pherica odiaba al Rey, era algo más que notorio y no pudo evitar recordar su pelea con Shanalotte. Días antes de regresar a la ilusión, recordar aquellas mismas manos queriendo arrebatarle su inmortalidad para oscuros deseos mientras su madre y Krysta peleaban contra las hermanas de la susodicha reina de Equestria y de no haber sido por el poder de su madre, aquella ave Fenix que late en su interior. No habría salido victoriosa pero tendría consecuencia; Shanalotte tendría su mano derecha carbonizada.

Ahhh…Con que luchaste con la representante del Rey y ganaste. Bueno, una victoria situacional. Pero a fin de cuentas, es una victoria. Quizas debería de guiarte un poco más. Podras tener su sangre pero también noto en ti algo de…Humanidad. Una muy diferente a la que profanó mi piel con sus sucios pies. ¿Qué será? Mestiza ¿quizás? Eres un ser divino pero también en ti hay sangre humana. Pero esta sangre, esta vacia. Carece de un… ¿Alma? Pero tu SÍ tienes alma. Entonces por qué te siento vacia.

Pherica Twonagasis, revisa en el monte Aris. Si lo deseas, ves con tus amigos. De no confiar en ellos, ves por tu cuenta.

Pherica despertaría mirando a todas partes, se encontraba en el mismo lugar y se levantaría bajándose del mostrador caminando hacia la salida, miraría a su izquierda y sus amigos estarían sentados alrededor de una fogata mientras que el cielo se oscurecio un poco pero lo suficiente para no ver claro el camino de regreso o el mar que apenas reflejaban algunas ascuas del sol dando tonos rojizos, como de rayos.

—Hasta que te despiertas—Radiantshield recibiría a Pherica con una sonrisa mientras ella se sentaba a un lado de él sonriendo cruzando las piernas—Ya nos habias preocupado.

—¿Por qué? ¿Cuánto tiempo dormi?

—Dias enteros—Responderia Raphiel cruzada de brazos sentada en la arena a un lado de Reinhardt, quien estaba a la izquierda de Radiantshield—Se que amas dormir pero no abuses tanto de eso. Nos atrasamos mucho por ti.

—Tranquila Raphiel, no es para tanto—Reinhardt tomaría del hombro a Raphiel defendiendo a Pherica y ella se sonrojaría de la pena—De todos modos necesitábamos un descanso. Ya fuera corto o largo, Despues de todo ustedes lucharon contra la Reina Shanalotte.

—Cierto—Interrumpiria Radiant con una sonrisa—¿Cómo le ganaron?

Pherica vería a Raphiel y ella haría una mueca mirando hacia un costado. Ambas guardaron silencio por un rato hasta que Raphiel tomo arena y la arrojo a la fogata.

—La desgraciada no nos dejo alternativa—Raphiel vería a Pherica y ella asentiria—Le dañamos el brazo derecho. Tenia su clarividencia, nosotras la divinidad. No podía matarnos con cualquier cosa, asi que uso un arma humana, una pistola para ser exacta.

—Nunca lo he entedido Raphiel. ¿Cómo es que las armas humanas pueden matarlas pero no otra cosa? —Radiant vería a Raphiel y ella dudaría en responder mordiéndose el labio inferior.

—Porque las armas son aquello que nosotros dejamos atrás, los humanos son seres terrenales, mundanos y aunque ambos poseemos grande inteligencia ellos carecen de valor en la creación. Las armas que ellos crearon, aunque no intencionalmente. Van en contra de nuestra creencia, nosotros no creemos en la muerte. Ellos sí. O bueno, eso creíamos. Sabemos que hay muerte, pero siguen siendo aquella mitad que nosotros abandonamos hace eones.

—Es que es algo muy complicado amigos—Pherica sonreiría mirando a los chicos—Mi madre una vez me dijo que las armas humanas son la parte que nosotros no tenemos; Sí, tenemos los mismos rasgos físicos y tenemos un alma, pero como especie dejamos atrás aquello que nos distingue del resto de especies.

—Humanidad—Afirmaria Radiant y Pherica asentiría.

—Sí. Tenemos almas pero alcanzamos un nivel de ascensión muy diferente. Y desde hace años que no hacemos lo que hacia un humano. Hasta ahora claro.

Los chicos guardarían silencio por un rato, sus platicas pese a ser cortas. Estaban llenas de conocimiento, en especial del lado de las chicas, quienes estaban totalmente conectadas al mundo, al contrario de los chicos, que teniendo una gran avanzada edad. Apenas conocían donde vivian.

Pherica vería a sus amigos con una sonrisa, quería mucho a sus amigos. Sentía una gran conexión con ellos, una familia en ellos pese a que ninguno de los cuatro tuviera recuerdos de su infancia. Y si tenían una era esporádica.

Cada uno de ellos tenia una gran esperanza de reestablecer el orden al mundo, cada uno de ellos representaba un aspecto importante para cada familia y no era sorpresa, Pues Radiantshield y Reinhardt eran hijos de la condesa de la amistad. Y por ende representan los 7 elementos de la armonía que hay en el mundo y por la tal tenían todo para vivir libremente sin esforzarse en tener amistades. Eso seria en un mundo natural, en orden. Pero no en ese.

Poco a poco, cada uno de ellos se quedaría durmiendo siendo Raphiel la primera en quedarse dormida, después seria Radiantshield y finalmente Reinhardt. Quienes estarían durmiendo en las espaldas del otro con sus armas en brazos. Pherica era la única que podía ver a sus queridos amigos dormir y una vez que se aseguro de eso se levantaría de su lugar limpiándose la arena de las piernas, caminaría hacia el este. Rumbo al monte Aris.

No sabia a la perfeccion porque quería ir a ese lugar, pero sentía que debia hacerlo.

Pasaban los minutos asi como los metros se acortaban entre Pherica y el monte. Y no evitaba pensar en como ese lugar se vino abajo con los años.

Las 7 academias de la armonía, junto con las princesas del querer y la Reina de Equestria hicieron lo mejor para que los hipogrifos no se extinguieran pero no tuvieron lo suficiente para salvarlos. Nadie sabe como es que la Reina de Equestria, Celestia sabia de su existencia. Solo fue algo que apareció esporádicamente en una celebración, mientras que el guardian se encontraba en otro punto de la creación. Ella los menciono mientras se encontraban bajo ataque por un malvado Rey. El cual se hacía llamar Rey Tormenta. Invadió súbitamente tierras Equestres con un medio cuerno llamada TempestShadow, quien traicionaría a su pueblo por un cuerno completo y asediaron Canterlot durante dicha celebración.

En esta, en aquel entonces. La princesa Celestia junto con su hermana y la princesa Cadence terminarían siendo prisioneras de ambos seres que utilizarían piedras rúnicas de origen desconocido para convertirlas en piedra. Pasaria el tiempo y la princesa Twilight junto con las demás academias viajarian al Monte Aris tras pasar por varios poblados desconocidos y sufrir por el desierto. Harian trato con los hipogrifos para ayudarles a combatir el ejercito del rey tormenta quien profanaría el poder de las princesas para dominar el dia y la noche asi como el amor de los súbditos quienes serian esclavos por este tirano.

Aquí sucedería lo que la princesa de la amistad llamó "Doble amanecer" el cual se veían ambos astros en el cielo, tanto la luna como el sol se postraban sobre Equestria, algo que no tendría consecuencias pero seria un presagio de que volvería a suceder en el futuro. Ahora, en la actualidad.

Y seria la primera vez que la condesa de la amistad iría en contra de su elemento y asesinaría al rey de la tormenta junto con la medio cuerno que abriría los ojos y se reformaría apoyando nuevamente a su especie.

Y descubrirían aquel artefacto, entre los restos del Rey tormenta, "El bastón de la tormenta un poderoso artefacto creado a partir del árbol de la armonía junto con un trozo de roble divino. Se cree que fue creado por Star Swirl para detener a las sirenas hace siglos.

Dicho baston tenia la habilidad de drenar la magia y fuerza vital de quien señalase pero seria la forma en la que Twilight Sparkle restauraría el orden a Equestria, usando todo su poder para reconstruir el deteriorado reino.

Y la medio cuerno seria perdonada por sus crímenes y formaría parte de una de las escuelas de la armonía, en la academia de Rarity y viajaría con el mundo para esparcir la palabra de la amistad pero no se volvería a saber nada de ella, aun se cree que viaja por todos los corazones de quienes creyeron su palabra y quisieron confiar en la amistad como la respuesta ante toda maldad.

Todo eso sucedería mientras el guardian se encontraba luchando en otra dimensión y el Rey de Equestria había muerto por primera vez y para cuando renacio todo había quedado atrás.

Pherica se planto delante del puente del monte Aris; Un hermoso puente de mármol y decoraciones de oro, con los dichosos animales dibujados en relieve en el suelo y farolas a los costados, sobre los barandales. Pherica tragaría saliva con temor, pues la isla se había acercado más a la costa por el choque de las placas tectónicas por el cataclismo universal tras la muerte del guardián por lo que había zonas aplastadas del puente.

Al fondo se divisaba el gran monte rodeado de un gran muro en forma de alas de pegaso con una torre en la cima, uno de los faros instalados por la Reina Phoenix antes de la extinción de dicha especie. Y el centro podía ver las casas derrumbadas y apenas visibles por la oscuridad que reinaba en el monte. No albergaba ningún tipo de vida, era un cementerio ascendente.

Dudaria en cruzar y vería hacia atrás, viendo si alguno de sus amigos le seguían pero la cruel realidad era que no notaron cuando se levanto y se fue sin ellos.

Tragaria saliva y avanzaría.

Sus pisadas comenzarían hacer eco por todo el puente mientras se acercaba, podía oler la podredumbre y la salmuera a sus pies conforme avanzaba. Trataba de no recordar nada de los hipogrifos, es una especie que luchó hasta el final contra el leviatán e inclusive las gobernantes de Equestria lucharían para salvarlos pues el monte Aris formaba parte de la ilusión del guardian.

Pero no lo lograrían, el leviatan seria un monstruo de gran tamaño con multiples lenguas y longitud similar a la montaña de Canterlot, un ser despiadado y cruel. Devoraría a todos los guerreros y casi mataría a Shanalotte de no haber sido por Phoenix que daría una de sus alas como sacrificio por tal heroico acto. Aunque repondría su perdida con años de curación mágica y divinidad.

Nadie sabia de donde salió el leviatan, simplemente surgio un par de décadas despues de la desaparición del guardian, por lo que no le culparían de traer dicha bestia al mundo. Teorias por parte de Starlight y Twilight afirman que el leviatan despertó cuando el mundo comenzó a desquebrajarse y salió a la superficie. Que siempre vivió dentro de lo profundo del mundo y al tener una salida fue cuando ellos lo conocieron.

Durante la lucha, la princesa Twilight utilizaría un misterioso martillo el cual llamo "Martillo del alba" justificando su existencia como producto de mezclar los últimos fragmentos del árbol de la armonía con la magia del guardian. Seria un arma tan poderosa que calmaría por minutos a la bestia pero no lo suficiente para salvar a los hipogrifos quienes eran devorados por el leviatan como golosinas.

En un movimiento desesperado por parte de todos los seres más poderosos, canalizarían toda su magia al martillo del alba y lo incrustarían sobre la cabeza del leviatan acabando con su vida pero también la magia seria tan fuerte que terminaría de matar a los pocos sobrevivientes del reino. Una horrible pelea donde nadie gano. Solo se perdió y con el tiempo se perdió aun más. Nadie recuerda a los hipogrifos, ni siquiera los que pelearon por sus vidas, la princesa de la amistad corto la conexión con el monte Aris al poco tiempo de derrotar al leviatan por lo que ese lugar seria un cementerio al igual que los poblados abandonados fuera de la ilusión.

Pherica se plantaria a los pies de la montaña, viendo un sendero de piedra y algunas plantas. Vería a los costados, en la costa del monte varios esqueletos enterrados por partes e inclusive vería una pequeña osamenta a un costado. Tragaría saliva con temor y continuaría caminando, subiendo lentamente, esperando dar algo de respeto a los hipogrifos que fallecieron cruelmente y su destino se perdería en ese lugar asi como su legado.

Las casas a los costados se asomarían con cada paso que daba, las casas a medio caer y algunos esqueletos pasaban de lado de Pherica y ella se mantenía serena, o al menos eso aparentaba. Se tomaría de las manos rezando a nombre de su madre y su padre aunque seria inaudible pero despertaría a una criatura en la cima de la montaña.

¿Asi que has venido? No creo que debas estar aquí. Pero… ¡Ah! Eres tú. Criatura, noble criatura. Lo que presencias aquí es lo que dejo una guerra, la princesa Twilight creyó que repondría su pecado pero no fue asi, el monte aris es el pináculo de su mediocridad, es la primera vez que fracasó como líder tras la muerte del guardian. ¿Qué triste no es asi?

El guardian engaño a todo un reino, engaño a una princesa y te engaño a ti. Pequeña Pherica, acércate. Que quiero verte.

Pherica se detendría en seco y miraría delante de ella el cadáver del leviatan, más bien. Su cabeza, asomada por una fosa en el corazón del monte aris, entrada al reino submarino de los hipogrifos, alrededor de la cabeza del leviatan habría un centenar de huesos y cráneos de todos aquellos que fueron victimas de la cruel bestia e inclusive se podían distinguir huesos humanos y Equestres.

Tragaria saliva y vería la cabeza de la bestia atorada por la entrada al reino aquatico, entre sus tres hileras de dientes puntiagudos se encontraban varios huesos y algunos cráneos de los extintos hipogrifos y algunos humanos y Equestres por igual, todos amontonados entre los dientes que apenas podía distinguirse de quien era el hueso que se encontraba allí.

Sobre la bestia, habría un gran objeto de color plateado con mango negro, era el dichoso Martillo del alba. Pero sobre el martillo, en una estatua de un hipogrifo sin cabeza habría una mujer. De ojos color avellana con un vestido negro rasgado. Se apoyaba sobre su rodilla mirando a Pherica y sus ojos eran lo único que brillaba en la sala.

—No pensé que vendrías Pherica Twonagasis—Esta chica sonreiría girando la cabeza a un lado dejando caer su cabello oscuro, era tan largo que llegaba a hasta sus piernas y todavía colgaba por el borde de la estatua.

—¿Quién eres tu? —Pherica retrocedería con temor sujetándose de las manos y la sonrisa de la chica desaparecería.

—No no, no temas. No quiero lastimarte. Fui yo quien te llamo—La chica extendería sus brazos con sorpresa y Pherica se detendría mirándola con temor, escondida entre una de sus coletas.

—¿Me llamaste? ¿Cómo me llamaste?

—¿No recuerdas? Desde que salieron de la ilusión del guardian; Esa sensación de melancolia. De extrañez, de no encajar en algo más grande. Pherica, represento todo lo que el guardian ha dañado.

—¿Dañado? Pero el trata de salvarnos. Trata de arreglar lo que Arkzrimiel ha estado haciendo desde hace mucho.

—¿Eso crees? Te han enseñado mentiras niña. Mira a tu alrededor, todo esto surgio tras su desaparición. El guardian dejo abierta la puerta al apocalipsis. Mira mi mundo, mi tierra. Marchita, carente de vida. Nada nace por su culpa, por su "divinidad" y su falsa esperanza.

—¡No es asi! El guardian busca la salvación para todos, nos ha escogido como sus últimos guardianes. Somos nosotros quienes debemos traerlo de regreso para salvar el mundo.

—Eso ya lo se querida, yo lo he visto. He visto todo desde antes que nacieran, como el guardian planeo todo, como el guardian abandono el mundo, como el guardian…Abandono a un ser amado.

Y la chica saltaría cayendo detrás del martillo mirándolo con cierta familiaridad, tras esto Pherica vería con mayor claridad a la chica. Era una niña. Alrededor de unos 12 años. Su rostro era muy fino con una pequeña nariz pero lo que destacaba eran sus ojeras, unas bien remarcadas y oscuras ojeras. No parecía un ser divino, a primera vista. "¿Una humana?" Se preguntaría Pherica mientras la niña no alejaba su mirada del martillo.

—¿Qué quieres de mi…?

—Angela. Me llamo Angela—La niña levantaría la mirada viendo nuevamente a Pherica con esa mirada, llena de melancolia y desvelo—Y quiero que hagas lo correcto.

—¿Hacer que? Ahora mismo no puedo, tengo a mis amigos descansando y cuando despierten regresaremos nuestro camino.

—Eso es lo que haras; Iras con tus amigos y me mostraras lo que planea el guardian Nova.

—¿Por qué?

—Porque el mundo debe ser rescatado, soy la esencia de lo que queda del mundo. Soy aquello que el guardian profano con sus impuros pies y profano con su sucia llamarada que llama "Bondad". Y quiero que seas tu ese balance Pherica Twonagasis…Y su apellido.

—¿Y si te ayudo? ¿Qué ganan mis amigos? —Y la chica, Angela haría una mueca retrocediendo un mínimo paso mientras que Pherica tomaba un poco de su frágil valor para confrontarla.

—Ellos. ¿Por qué ellos? ¿No quieres nada para ti? Las recompensas son únicas, no deben compartirse.

—Pero son mis amigos. No, mi familia y somos UNA sola. Si gano algo con ayudarte, que ellos también lo ganen—Y Angela se guardaría sus palabras y miraría fijamente los ojos de Pherica y podía sentir su poder en ella, podía sentir la llama del guardian del mundo representado en esa chica y sus ojos lo demostraban en un aura dorado.

—Esta bien…Que asi sea—Angela se acercaría de nuevo al martillo y lo acariciaría del mango con la punta de sus dedos—Te dare una recompensa por tu gran bondad, y te dire una verdad. Este martillo no fue creado por la condesa de la amistad o la princesa Twilight. Este martillo pertencio a un enemigo jurado del guardian Nova. Un guardian de un mundo distante, este guardian demostró que había vida más allá del planeta tierra y Equestria, pero carecio de importancia. Pues al poco tiempo, el guardian le derrotó y cuando acabo con Sophitia. Esos mundos perecieron…Habia tantas vidas inocentes en esos mundos, pero el guardian los dejó aislados al acabar con la conexión entre el Limite Divino y dichos mundos y ahora. Ya no hay nada, no hay vida en el universo. Solo nosotros…

Pherica no diría nada pero se acercaría a Angela.

—¿Y quien era ese guardian? ¿Por qué Twilight mentiría con el origen de este martillo?

—Porque este martillo representa los miedos del guardian Nova, aunque ganó en aquel entonces y mato al otro guardian. Hasta el dia de hoy le aterra escuchar ese nombre—Angela vería a Pherica y ella comenzaría a trepar por la cabeza del leviatan hasta postrarse delante del martillo.

—¿Cómo se llamaba ese guardian?

—Chase Morten Delling. Era el guardian de la destrucción.

Y Pherica se estremecería, algo dentro de ella cobraría vida y le haría aterrarse, se arrodillaría mirando a Angela y ella simplemente mantenía su mirada cansada sobre ella.

—¿Y que tengo que hacer? —Angela se acercaría a Pherica con la intención más inofensiva posible, vería a Pherica como un cachorro y para no asustarlo extendería sus brazos y al estar cerca la tomaría de las manos acariciando su mejilla con ellas.

—Tienes que llevarla a la iglesia de los búhos. Ellos sabran que hacer con el martillo. Pero no te preocupes, será tuyo cuando te lo devuelvan de mala gana.

—¿De mala gana? —Angela jalaría una de las manos de Pherica y la haría tomar el martillo, y este estallaría en una luz blanquecina pero no tardaría mucho para retorcerse y convertirse en una luz oscura, con gritos en el fondo. Alaridos, Pherica trataría de soltar el martillo pero este ya seria parte de su cuerpo, podía escuchar los gritos de millones de inocentes, victimas del martillo. Quien el guardian de la destrucción usaría para someter dichos mundos.

—¡Por qué! —Pherica lloraría tratando de taparse los oídos pero era en vano, el martillo en su mano derecha le impedia cubrirse los oídos y escucharía todos los gritos. Hasta que escucharía la voz del guardian del mundo acabando con la vida de Chase y la de una chica de nombre olvidado, perdido por los albores del tiempo y como este martillo se destruiría al no tener dueño.

—Porque tienes que restaurar el balance en la tierra, debe revivir el mundo. Con o sin el guardian. Si haces lo que digo, lo inevitable no sucederá y yo podre traer un único balance. Uno natural—Y los gritos cesarian de los oídos de Pherica y ella caería rodando por la cabeza del leviatán hasta caer al suelo golpeándose en la cabeza. Comenzaría a perder consciencia de todo lo que le rodeaba por el inmenso poder que comenzaba a rodear su cuerpo—Lo siento mucho Pherica, pero tienes que hacerlo, salva al mundo. Tienes que salvarme…Hasta la próxima…

Y Pherica perdería la conscienca desapareciendo su mirada de toda realidad, y no tardaría mucho para despertar de un salto y jadeando. Vería alrededor y seguiría en la playa con sus amigos dormidos, voltearía hacia su mano derecha y no vería el dichoso martillo pero escucharía caer algo fuera de su bolsa. La tomaría y vería un llavero con la forma del martillo; El mismo mango rectangular con el mango de cuero entrelazado. Pherica se asustaría pero no seria por un largo rato, miraría el martillo con una sonrisa. Sentia que tenia un propósito.

¿Cuál será el propósito de aquella chica? Angela, esencia de la naturaleza en Equestria y por que querra que una chica como Pherica sea su estandarte.

Baston de sacanas

Tras liberar su verdadero poder el bastón de Sacanas es capaz de absorber la magia divina con el fin de controlar a todo aquel que se le oponga. Incluso la Reina de Terranova temió al ver el horrible potencial, desterrándolo a un árido yermo donde años después sería encontrado por la cazadora y su madre. ¿Qué uso le darán contra la divina especie que el guardián del mundo tanto protege?