Capítulo 8

Fue aproximadamente dos semanas después que logro hablar con Ron ya que siempre estaba ocupado, el trabajo, los planes para la boda, su vida de prometido, fue después de mucho insistir que logro reunirse con él un jueves a la hora del almuerzo en un restaurante muggle cerca de su departamento.

- Yo pediré la langosta - anuncio Ron feliz viendo al camarero.

- Claro Señor -

- Para mí la ensalada cesar sin pollo - no sentía el estómago con suficientes ganas para comer algo más pesado, tenía hambre, pero también una sensación de pesadez que le daba la impresión que terminaría vomitándolo todo, y el pollo... Odiaba el pollo.

- Enseguida regreso -

- Gracias - Ron extendió su servilleta en sus piernas y sonrió viéndolo con sus brillantes ojos azules - ¿Y bien? ¿A qué se debe el almuerzo de chicos? -

- Ah, nada solo... - dio un sorbo a su vaso de agua para intentar quitar la pesadez en su estómago - quería saber cómo iba el compromiso -

- Magnífico, ya sabes, Hermione se está encargando de organizar todo y yo de obedecerle, podría participar más, pero no quiero cagarla – al parecer Ron era más consciente de que muchas de sus habilidades eran principalmente físicas y que se guiaba por el momento y que la planificación no era precisamente su fuerte.

- Genial, ¿Tienen ya una fecha? – preguntó.

- Algo así, estábamos pensando alrededor de junio, ya sabes en verano -

- Cool - Harry asintió con la cabeza y sintió algo de silencio instaurarse entre ambos - Ron... - comenzó cuando sus platillos llegaron.

- Genial, gracias - agradeció Ron al ver su langosta bastante grande ocupando casi todo su plato, Harry observó su ensalada muchísimo más pequeña esperando que al menos pueda comerla sin que las náuseas aumenten.

- Llámenme si necesitan algo -

- Ron... - intento Harry nuevamente mientras lo veía sacar la carne de su langosta y comerla.

- Dime - respondió con la boca llena.

- ¿Qué paso cuando me fui? - Ron trago de golpe antes de responder.

- Ya sabes estuvimos algo tensos por la guerra, pero bien dentro de todo, a Bill aún le costaba lo de ser bueno... ya sabes - hizo un ademán con la mano y dio un gran mordisco a su langosta, Harry noto que el pelirrojo no le dirigía la mirada mientras hablaba - George no quiso salir de casa por unos días hasta que finalmente pensó que trabajar lo ayudaría a mantenerse distraído, Mione y yo continuamos con la búsqueda de sus padres.

Harry recordaba haberlos ayudado cuando aún estaba en Londres y lo extremadamente difícil que era encontrar a un par de muggles de mediana edad en Australia.

- Mamá tuvo unos cuantos días difíciles, pero lo superó, por supuesto, siempre lo hace - encogió sus hombros - Percy vino a disculparse todos los días por dos semanas -

- ¿Lo hizo? - Ron asintió sonriendo de costado.

- Eso fue, en resumen - dio varios mordiscos a las papas asadas que acompañaban su langosta.

- ¿Y… los juicios? - hizo la pregunta sin animarse a verlo, pero por el silencio que hubo al otro lado de la mesa pudo notar que Ron había dejado de comer, removió un poco su ensalada sin probarla todavía y lo escucho carraspear.

- Bueno - vio como su mano tomaba el vaso con agua y lo escucho tragar con fuerza - Estuvieron como siempre, ya sabes, seguimos siendo citados, intentamos dar la mejor excusa del por qué no ibas -

- ¿La mejor? -

- Ajá, dijimos que escapaste con una chica llamada Misty - bromeó y Harry soltó una risa suave - Bueno, los juicios siguieron y fue un alivio cuando terminaron -

Claro que Harry recordaba los juicios, no había día dónde una lechuza del Ministerio no llegue a su ventana recordándole el juicio del día o un nuevo juicio que se llevaría a cabo en los siguientes días, fue ahí donde empezaron sus problemas con las lechuzas, aun cuando esas pobres aves no tenían la culpa de todo lo que lo atormentaba.

Sentía que se asfixiaba cada que recibía una, su humor no era el mejor tampoco, siempre estaba a la defensiva o extremadamente decaído, "es una fase, está bien" había dicho Ginny todas las veces que noto su comportamiento, pero la verdad es que no se sentía así y eso solo logro que Harry fuera cortante con ella haciéndola llorar casi todo el tiempo.

Aún recordaba ese día, antes de otro maldito juicio, Ginny salió del cuarto que compartían llorando y Harry sintiéndose frustrado arrojo la maldita corbata que no logro anudar a la cama, supuso que a nadie le importaría que el salvador del mundo use corbata o no.

Sin decir una sola palabra Harry camino hasta el salón, escuchando los sollozos quedos que provenían de la cocina, sabía que debía hacer algo o decirle algo pero todavía se sentía demasiado frustrado, así que sin decir nada opto por agitar su varita y sentir el tirón de la desaparición.

Cuando volvió a aparecer sintió los flashes de las cámaras dejarlo más ciego de lo que de por si estaba al reducir en exceso su agudeza visual.

- Abran paso, abran paso - exigía la voz de un varón, probablemente un auror, que apenas vio a Harry lo tomo del brazo y tiro de él en medio de los reporteros y la gente que solo quería tocarlo.

Cuando ambos ingresaron al ascensor Harry no pudo contener el suspiro de alivio que escapo de sus labios, la frustración que había sentido momentos atrás fue reemplazada por una sensación opresiva en el pecho que solo mejoro cuando las puertas del ascensor se cerraron dejando atrás a todos los que estuvieron siguiéndolos, internamente agradeció por que solo estén ambos en el ascensor.

- ¿Está bien Señor Potter? -

- Claro - Harry decidió ignorar la mirada insistente del Auror, pensando que quizá querría un autógrafo o simplemente estaba vigilándolo, a ese punto no lo sabía con certeza y tampoco tenía humor para querer averiguarlo.

Cuando el ascensor se detuvo Harry vio el largo pasillo de los juzgados, múltiples personas estaban reunidas a ambos lados del pasillo, algunas llorando, otras hablando bajo y al fondo estaban Ron con Hermione rodeados de unos tres aurores que hacían de barrera humana entre ellos y el resto de las personas, ninguno tenía un semblante mejor que él; Hermione llevaba días sin dormir correctamente y también Ron, la búsqueda de sus padres seguía sin dar resultados y había días donde su amiga perdía la esperanza de encontrarlos.

- Chicos - los saludo una vez que estuvo cerca, Ron asintió con la cabeza a modo de saludo y Hermione lo abrazo en silencio con tanta fuerza que Harry pudo notar que era uno de esos días, uno donde Hermione perdió la esperanza de encontrar a sus padres.

- Vayan ingresando - pidió el Auror que lo había acompañado.

Harry vio como sus amigos se tomaban de la mano entrelazando sus dedos y no pudo evitar pensar en Ginny, en cómo la dejo llorando en su departamento y como últimamente solo se la pasaban discutiendo.

- Bienvenidos todos, el juicio de hoy será el de Draco Malfoy, por los delitos de cómplice de secuestro, cómplice del Señor tenebroso derrotado Tom Riddle, mortífago, intento de asesinato, tortura y encubrimiento - la voz de Jack Campbell, el nuevo Presidente del Wizengamont resonaba en todo el lugar, Harry entonces pudo notar que todo el lugar estaba repleto, alguno que otro periodista era bastante discreto escondiendo su cámara, ya que la prensa estaba prohibida, además que la mayoría eran gente que nunca había visto.

Al medio de la sala sentado en una silla de metal se encontraba Draco Malfoy, con su cabello rubio mucho más corto que la última vez que lo vio, así como sucio y tieso apuntando en todas las direcciones, mantenía la mirada fija en sus manos encima de su regazo, ambas conectadas en las muñecas por un par de esposas plateadas que lucían bastante pesadas.

Harry apartó la mirada de inmediato sin poder soportar más verlo de ese modo, oyendo lo que decían en el juicio, solo reaccionó cuando fue llamado a testificar, tras varios murmullos que fueron acallados por el Señor Cambell Harry logro hablar.

- Diga su nombre para el registro -

- Harry James Potter Evans -

- Su relación con el acusado -

- Somos ex compañeros de colegio -

- ¿Enemigos? -

- Algo así, no nos llevábamos particularmente bien en el colegio – el tono de voz que empleaba para dar sus respuestas era firme y su semblante seguro de sí mismo.

- Bien señor Potter, ¿Puede explicarnos los eventos ocurridos durante su sexto año? -

- Solo éramos chicos... -

- Por favor limítese a responder las preguntas - Harry vio de reojo a Draco y luego comenzó a hablar.

- Comencé a seguir a Malfoy – murmuro entre dientes esperando que no lo hayan escuchado.

- ¿Por qué? -

- Por qué creí que tramaba algo -

- ¿Algo como qué? -

- No sé, algo relacionado con los mortifagos o con Riddle - escucho murmullos.

- ¿Y sus sospechas llegaron a ser confirmadas? -

- Sí, pero...

- ¿Es verdad que el señor Malfoy tenía planeado infiltrar mortifagos en Hogwarts para asesinar al antiguo director Albus Dumbledore? -

- Sí, pero él... - la gente hablando lo suficientemente alto corto su voz y pudo escuchar gritos de protesta, inclusive vio como alguien lanzo rojizo algo al rostro de Malfoy que simplemente no reaccionó, dejando que el tomate podrido resbale por su barbilla manchando su rostro hasta terminar en el suelo.

- Orden - grito el Señor Campbell, con un movimiento de la mano ordenó que quien sea que haya arrojado algo a Malfoy sea retirado de la sala.

- ¡Él no lo hizo queriendo! - exclamó Harry sin poder contenerse más, sintiendo la adrenalina llenar su pecho y sus manos como si de electricidad se tratara - él lo hizo por qué tenía a Voldemort en su casa, su madre era amenazada todos los días -

- Señor Malfoy - hablo el juez - ¿Fue obligado a recibir la marca? -

- No - murmuró Malfoy, los gritos volvieron a estar presentes y Harry apretó los puños.

- Señor Potter ¿Puede relatarnos lo sucedido en la Mansión Malfoy durante el año oscuro? - habían decidido ponerle ese nombre, no el año de Voldemort o el año de la guerra, solo era el año oscuro.

- Fuimos atrapados por los carroñeros y llevados a la mansión -

- Con fuimos ¿A quiénes se refiere? -

- Mis amigos, Ron Weasley y Hermione Granger -

- ¿Qué sucedió cuando llegaron? -

- Los Malfoy estaban con Bellatrix Lestrange, Hermione alcanzo a ponerme una maldición punzante en el rostro antes de que nos encuentren por lo que mi rostro estaba desfigurado -

- ¿Y después? -

- Lucius Malfoy no pudo reconocerme así que llamo a su hijo para que lo haga -

- ¿Lo reconoció? - Harry negó con la cabeza - ¿Podría simplemente no haberlo reconocido debido a la maldición que le lanzo la Señorita Granger? -

- No, no, Malfoy... Draco - se corrigió sintiéndose extraño al llamarlo por su nombre pero Hermione le había dicho que todos pensaban que usaba su apellido de manera despectiva y si quería tener la más mínima chance de hacer que eluda la prisión debía llamarlo con un tono más neutral - me reconoció, mintió, dijo que no lo hizo - Harry pudo jurar que vio a Malfoy mover la cabeza en su dirección, pero fue tan rápido que bien podría haberlo imaginado.

- ¿Por qué cree eso? -

- No lo sé, tal vez estaba harto de tener a su familia viviendo con Voldemort - la gente contuvo el aliento - Ellos se veían... - "cómo la mierda" quiso decir, pero las palabras solo quedaron en su boca

Recordaba a Lucius Malfoy completamente destruido, tan delgado que parecía no haber comido apropiadamente en meses con su antes largo y sedoso cabello ahora opaco y desordenado, la señora Malfoy estaba tan delgada y ojerosa que no parecía viva realmente, como si fuese un fantasma obligado a continuar vagando, Malfoy, Draco, él, tenía el peor aspecto de todos, delgado hasta los huesos, con su ropa luciendo más grande de lo que en realidad era, ojeroso, con el cabello rubio cayendo por su rostro con su piel tan pálida y ausente de vida, no se parecía ni un poco al Draco Malfoy del colegio

- Hartos de su presencia - completó.

- Muy bien creo que escuchamos suficiente - Harry quería decir más cosas, pero no sabía que decir en concreto, sentía que debía decir algo, debía lograr que Malfoy quede libre, se lo debía a la señora Malfoy, todos debían saberlo, todos... - el acusado, ¿Cómo se declara de todos los cargos? -

- Culpable - murmuró Malfoy con la cabeza baja, de nuevo el bullicio y Harry quiso bajar y abofetear a Malfoy para que entre en razón, quería decirle que se declare inocente.

- ¿Se arrepiente de sus actos? – silencio.

- Lo hago -

- Bien - el Señor Campbell golpeó su martillo contra la tribuna captando la atención de todos - Señor Malfoy se lo declara culpable de todos los cargos - Harry sintió su garganta cerrarse, quería gritar y sin embargo ningún sonido salía de su garganta, los ojos le escocían por las lágrimas que luchaban por salir - pero teniendo en cuenta los testimonios de los testigos, tendrá una condena reducida, 3 meses en Azkaban - Harry sentía su corazón latiendo con tanta fuerza que podía escucharlo en sus tímpanos, sus manos comenzaron a temblar en contra de su voluntad, estaba teniendo uno de esos.

'esos' eran los que solo tenían como propósito joderle el momento, la hora, el día a Harry, esos eran horrendos y Harry los odiaba desde lo más profundo de su alma.

- Su varita estará limitada a hechizos básicos e inofensivos cuando salga de Azkaban durante 3 meses, llévenselo -

Harry quería salir corriendo tras los aurores, gritarles que no podían hacer eso, que él no podía dejar que hagan eso, se lo debía, le debía a Narcissa Malfoy la vida de su hijo, no podía hacerle eso, no cuando ella había salvado su vida y por consiguiente la de todos los ahí presentes.

Pero solo alcanzó a salir corriendo hacia el baño sin poder evitar más la oleada de nauseas que subió desde su estómago hasta su garganta vómito todo su desayuno y sintiendo su cuerpo tembloroso sello la salida con magia, al enfrentarse a su reflejo las ganas de vomitar, llorar y gritar aumentaron.

10 minutos después salió del baño con la mano escondida en su túnica, los ojos vidriosos y la mirada perdida.

- Debo irme - le murmuró a Hermione, su amiga asintió con la cabeza y logro acompañarlo a la zona de desaparición, Harry no recordaba si ella le había dicho algo mas pero su cerebro quizá considero que no era importante en ese momento, solo quería irse.

Cuando Harry llegó a su departamento corrió a la habitación que compartía con Ginny, sintió las lágrimas escocer de nuevo en sus ojos.

- Harry, Harry ¿Está todo bien? - pregunto Ginny corriendo hacia él aún tenía los ojos rojos por el llanto, esos ojos azules ahora lo miraban con preocupación, lo encontró dando vueltas en la habitación sujetándose la cabeza tirando de sus oscuros cabellos, una de sus manos con una venda mal colocada manchada con sangre en la parte de los nudillos - ¿Te hirieron? -

- Debo irme Ginny - logro decir con la voz estrangulada - No puedo Ginny no puedo - repetía sin dejar de caminar, la pelirroja sintió una oleada de miedo bajado por su espalda, intento tomar su hombro, pero el pelinegro estaba en trance, caminaba sin verla - ya no puedo, debo, quiero, quiero irme, por favor, por favor - rogaba a quien sea que lo esté atormentando dentro de su cabeza.

- Harry, Harry escúchame - sostuvo sus hombros con toda la fuerza que pudo sacar y noto cómo lágrimas caían sin cesar de sus ojos esmeralda formando riachuelos por sus bronceadas mejillas - ¿Dónde quieres ir Harry? -

- No sé, solo quiero irme, quiero irme - Ginny mordió su labio inferior para intentar no derramar más lágrimas.

- ¿Quieres que te acompañe? - No necesito la respuesta, aquellos ojos esmeralda que siempre la habían visto con cariño reaccionaron de inmediato con miedo al escuchar la pregunta, Ginny sintió un nudo en la garganta e intento tragarlo, lo abrazo con fuerza, sin embargo Harry no correspondió - está bien Harry está bien – palmeo su espalda suavemente sintiendo sus músculos tensarse, tan solidos como una roca.

El pelinegro no supo en qué momento cayó dormido, pero cuando despertó estaba solo en la habitación, con una nota escrita a mano a su lado.

Ginny se marchaba y le pedía que vaya a buscar lo que él necesite encontrar.

El sonido de Ron dejando sus cubiertos encima de su plato le recordó que estaban comiendo, que esa era la realidad y que Ginny se había marchado hace mucho tiempo.

- ¿Todo bien? - pregunto Ron al encontrar su mirada, Harry compuso una sonrisa.

- Si solo... - dio un mordisco perezoso a su ensalada, estaba casi intacta - el otro día acompañe a Luna a una de sus investigaciones y me tope con Zabini - Ron se detuvo a la mitad de su sorbo de agua - el menciono algo... No sé, quizá no sea importante -

- Hablo de la cacería - dijo Ron con la voz sería y el ceño fruncido.

- ¿Que fue todo eso Ron? - su amigo reviso momentáneamente sus alrededores y Harry sintió como colocaba un muffliato no verbal.

- Fue una mierda amigo - tenía el ceño fruncido - un grupo de imbéciles creyó que eran los elegidos de Merlin para eliminar a todos los magos tenebrosos, pensaron que debían eliminar a todos los mortifagos, a sus familias y a cualquiera que tuviera relación con ellos - sus manos se cerraron en puños por encima de la mesa - hubo corrupción en Azkaban, mataron a muchos, demasiados -

- También los torturaron - concluyó Harry recordando las cicatrices de Zabini, Ron asintió con la cabeza.

- Pero no fue todo, a algunos... Los violaron, los obligaron a ver las torturas, yo realmente... Deseé no haberte ayudado a salvarlos - Harry pudo notar la furia en los ojos de su amigo mezclándose con la impotencia - nos tomó bastante encontrar a todos, pero el daño estaba hecho, algunos aún se esconden pensando que los imbéciles volverán a cazarlos, dicen que otros abandonaron la magia definitivamente, Kingsley hizo de todo para que no se salga de control, pero ya sabes, no hay nada que se esconda por siempre -

- Es por eso que Zabini lucia así... - murmuró para sí mismo y Ron no dijo nada, fingiendo que no lo había escuchado.

De repente Harry se preguntó si Malfoy tenía las mismas cicatrices, largas y cortas recorriendo su pálida piel, pero la última vez que lo vio no parecía tener nada... De hecho... No tenía su marca.

- ¿Hubo alguna manera de quitarles la marca? - pregunto Harry – Ya sabes, para evitar que se vuelvan un blanco fácil.

- Ninguna - respondió Ron negando con la cabeza - fue por eso que los atraparon más fácilmente – toco su barbilla momentáneamente – Aunque había un rumor de que alguien creo un hechizo que cubría todas las marcas, pero no logramos confirmarlo.

Harry frunció el ceño, ¿Malfoy utilizaría ese hechizo para protegerse?

Ron cambio el tema de conversación abruptamente a uno de Quidditch y Harry solo siguió la conversación sin tener toda su mente en ella.

Hola, hola.

Espero que se encuentren saludables.

"Esos" los explicare más adelante ya que tienen suficiente relevancia en la historia. Si alguno se sintió identificado con lo que Harry experimento después del juicio recuerden que es bueno pedir ayuda.

Háganme saber si tienen alguna duda o comentario, los leo :)

Hasta la siguiente^^