Capítulo 13

Al día siguiente, después de pensarlo seriamente, Harry buscaba la dirección que Malfoy había anotado, no es que estuviera tan desesperado por acostarse con él, solo... Sentía curiosidad, o al menos esa había sido la conclusión a la que llego después de hacer una lista de pros y contras de seguir las instrucciones, lo peor que podría pasar seria que el rubio lo estuviera llevando a una trampa y termine muerto, lo cual le sonaba imposible.

Despues de buscar durante media hora recibiendo varias miradas extrañadas cuando pregunto si ese lugar quedaba cerca., logro encontrar la dirección y tras convencer a un guardia que custodiaba el ingreso a un edificio asegurándole de que no era ningún tipo raro logro ingresar al local, dentro todo estaba vagamente iluminado con una luz roja molestando un poco a Harry por la reducción de su ya de por si reducida visión.

La pista de baile no era como la del pub o el club que Harry había visto, era más como un sótano repleto de gente vestida en cuero o de ropas oscuras o lentejuelas que brillaban débilmente, con algunos dejando poco a la imaginación, otros con antifaces, algunos llevando un collar alrededor de sus cuellos o arneses sin nada debajo.

El pelinegro se sintió confundido mientras intentaba pensar en que era lo que le parecía llamativo al rubio acerca de eso, no es que lo juzgara, solo que no se imaginaba al Draco Malfoy del colegio vistiendo un arnés, su mente comenzó a divagar en como el cuero oscuro entraría en contraste con su piel pálida y sacudiendo la cabeza para alejar ese tipo de pensamientos camino hacia la barra, dónde una mujer con rasgos afilados iba sirviendo bebidas.

- ¿Que te ofrezco querido? - pregunto cuando lo vio tomar asiento, su voz ligeramente más grave le resultó llamativa.

- Una cerveza estará bien - rápidamente observó a su alrededor y tras ver cómo un hombre era abofeteado en el rostro se sintió incómodo apartando la mirada de inmediato hacia la barra.

- ¿Primera vez? - pregunto la mujer mientras dejaba su cerveza recorriéndolo con la mirada.

- Si, algo... Algo así – respondió sin siquiera poder alzar la mirada, se sentía incómodo y cualquiera podía notarlo, sus dedos sujetaron la botella de cerveza sintiendo la frialdad del vidrio.

- Si te equivocaste de lugar puedes marcharte ¿Sabes? O si es una apuesta nada conseguirás aquí - la mujer que antes le había hablado con un tono cortes ahora usaba uno tono agresivo Harry alzo la mirada para verla a los ojos.

- No, no, no me equivoqué ni es una apuesta es solo... - se pasó las manos por el cabello y el cuello intentando relajarse - hay alguien, quien realmente me... Me interesa y... Y me dijo que viniera, a... A aprender – hablo mientras hacía ademanes con las manos en un intento de darse a entender, la mujer alzó las cejas con una expresión sorprendida.

- ¿Te lo dijo? -

- Si, yo... No sé, debo, quiero aprender - las manos le sudaban, Merlín como odiaba cuando las manos le sudaban, volvió a sujetar la botella de cerveza esperando que el frio lo ayude a calmarse.

- Entiendo – Harry vio como la mujer se quitó el delantal que llevaba y giro la cabeza sin perderlo de vista - Erin atiende la barra iré un rato atrás -

- Claro - respondió un chico delgado y con bastante maquillaje en los ojos acercándose al lugar donde la mujer estaba.

- Sígueme - ordenó la mujer y cruzo la barra por un costado, Harry asintió con la cabeza dando un suave suspiro para inspirarse confianza camino tras ella sujetando su botella de cerveza.

Ambos caminaron a través de la pista, durante el trayecto Harry pudo notar como varias personas saludaban a la mujer que lo guiaba recibiendo una sonrisa de parte de ella como respuesta, una vez atravesaron la pista continuaron hacia un pasillo protegido por otro guardia que tras verlo junto a la mujer tan solo realizando un asentimiento de cabeza los dejo pasar, tras cerrar la puerta la música se hizo menos estridente, tan solo se escuchaba vagamente de fondo como si las paredes estuvieran lo suficientemente reforzadas para evitar que reducir los sonidos, delante de ambos habia un largo pasillo con puertas ubicadas a cada, quizá 3 a cada lado y al final del pasillo solo había unas escaleras - ¿Cuál es tu nombre? -

- Harry, yo... Soy Harry -

- Mucho gusto Harry soy Estella - se presentó la mujer sin detenerse.

Harry la observo de reojo, era alta, quizá más alta que el, además llevaba unos tacones en punta que sin duda lucían dolorosos para el pero ella no parecía molesta en lo absoluto, su figura era delgada y solo la curva de su cintura se marcaba por el vestido de lentejuelas con el que iba vestida.

Sin decir más palabras ambos subieron las gradas hacia otro pasillo con tan solo dos puertas, Estella entro a la de la derecha y también lo hizo Harry - cierra la puerta – pidió sin girar a verlo.

Harry cerró la puerta y vio la habitación, era un simple despacho con colores sobrios, un escritorio de caoba iba en el medio y librerías repletas de libros a los alrededores, Estella tomo asiento tras el escritorio y entrelazó sus dedos encima del mismo resaltando sus uñas rojo fuego que contrastaban con su piel morena, Harry poco sabia de uñas o maquillaje, pero tranquilamente podía describir a esa mujer como estilizada y realmente preocupada por su aspecto, luciendo realmente bien.

- Toma asiento - Harry obedeció de inmediato sentándose frente a ella sosteniendo su botella de cerveza con las manos - cuéntame más de esta persona - sus ojos negros lo veían fijamente - cómo es ella o el -

- Él -

- Bien, ¿Es tu novio? ¿Amigos con derechos? -

- Es complicado – por más que Harry lo pensó y le dio vueltas al asunto no sabía realmente como definir su relación así que opto por ser completamente sincero, la mujer torció los labios y reclino su espalda contra su asiento - no es mi novio, pero... No sé, tuvimos algo -

- Y este algo, ¿Fue bastante íntimo? -

- Bastante - Harry no sabía por qué, pero la mirada de Estella no lo intimidaba, tampoco lo hacía sentir mal, lo hacía sentir seguro, seguro de decir todo abiertamente, de expresar como se sentía, casi libre.

- ¿Se conocen de antes? -

- Algo así, fuimos enemigos durante bastante tiempo ahora... No lo sé - Estella asintió complacida por su sinceridad.

- Debes entender algo acerca de las relaciones de BDSM -

- ¿BDSM? – interrumpió pestañeando rápidamente.

- Bondage, Disciplina, Dominación, Sumisión, Sadismo, Masoquismo - explico la mujer con calma - una relación así no es lo que la gente lo ha popularizado, no es simplemente un fetiche de agonía y golpes, va mucho más allá - con calma de su escritorio saco un collar de cuero negro - es confianza, es comunicación, es el entender los riesgos y consecuencias, conocer que hay límites y entender cuando detenerse, es saber que tu pareja te respeta y saber que tú la respetas - Harry vio como sus hermosas uñas recorrían el collar de una manera lenta e hipnotizante - es la confianza mutua la que está en medio, confianza en que las sogas apretaran lo suficiente para sentirse seguro, de que los azotes no serán una tortura sino una liberación - Harry volvió a verla a los ojos - ¿Lo entiendes?

- Algo así señora - respondió automáticamente con la espalda recta, sintiéndose como un niño de 14 en la oficina del director.

- ¿Cuál es la parte que no comprendes? – Harry se froto el labio inferior con su dedo índice pensativo.

- ¿La parte de la comunicación? Bueno si se que en una relación la comunicación es fundamental, pero en esta parte… mmm... ¿Cómo? ¿Cómo es la comunicación? Se refiere a si necesita que vaya más rápido o… - se sonrojo con solo preguntarlo, pero Estella no parecía molesta o avergonzada, en vez, sonrió como interesada por su curiosidad.

- No cariño – hablo con un tono suave – Con la comunicación me refiero a que ambos deben formar un nexo de mutuo entendimiento, de otra manera no sabras cuales son sus necesidades y la otra parte no sabrá cuales son las tuyas, así mismo con sus límites, es una base para que puedan formar la confianza y consentimiento, por fuera esta actividad se puede ver como una llena de tortura y agonía, pero en esta relación, ambos deben estar de acuerdo con lo que se hará, para eso es necesaria la comunicación, aprender a escuchar y a ser escuchado – Harry asintió lentamente con la cabeza mientras asimilaba sus palabras – además la relación de BDSM no necesariamente tiene que culminar con el acto sexual, muchos pueden obtener placer de los castigos o de otro tipo de recompensas, eso depende de las parejas. ¿Ahora lo captas mejor? –

- Si, mucho mejor, gracias – Harry esbozo una pequeña sonrisa.

- Bien - Estella dejo de acariciar el collar e inclinó su rostro encima del escritorio - ahora, ¿Que eres tú? ¿Y qué es tu pareja? -

- Eh... No sé, supongo ¿Que soy el de arriba? Bueno esa vez no recibí, él, él se encargó de todo - balbuceo sonrojado reviviendo esa noche.

- Bien, no me refería exactamente a eso, pero está bien, al hacerlo ¿Te dio órdenes? -

- Si -

- ¿Te hizo daño? -

- No, bueno no se sintió así, solo amarro mis manos a la cama, no quería que lo toque -

- Y obedeciste - concluyo Estella con una media sonrisa.

- Si, él quería hacerlo, ¿Por qué no obedecería? - la sonrisa de Estella se amplió mostrando dos hileras de perfectos y blancos dientes.

- Bien, eso que ejerció sobre ti, es control, ¿Querías tocarlo? -

- Como si la vida se me fuera en ello, me refiero a que realmente quería quitarme las sogas – soltó en un suspiro lastimero y Estella rio ante la sinceridad del pelinegro haciéndolo sentir pequeño, pero no de un modo incómodo, sino pequeño y seguro.

- Bien - pronunció - no creo que seas un Sum, pero tampoco eres un Dom neto -

- ¿eh? -

- Sumiso o Dominante, son términos utilizados a menudo en el "juego" el juego es parte de la relación, ¿Que viste afuera? -

- Gente, mucha gente con cuero, collares y arneses -

- Y tú ¿Qué crees que hacían los que llevaban collares? -

- No sé, ser llevados supongo -

- Correcto, ellos confiaban en que sus Dominantes, sus amos, los estaban guiando - Harry sentía que era una información algo abstracta para su cerebro, pero estaba dispuesto a comprenderla - los Dominantes cuidan de sus sumisos durante y después del "juego", los respetan y esperan respeto a cambio -

- ¿Y qué pasa si se rompe el pacto de respeto? -

- Se rompe la relación - respondió con sencillez - pero no te equivoques, cada uno sabe cómo se rompe esa confianza y ese respeto es por eso que la comunicación es importante, para algunos puede ser el simplemente obligar a usar el collar en contra de su voluntad o el recibir castigos injustificados -

- ¿Castigos? -

- En cada relación hay un castigo esto siguiendo la línea de por cada acción hay una reacción, dependerá de ambos el tipo de castigo que puede ser el límite, el amo será el que los aplique y el sumiso definirá cuando ha sido suficiente, el amo y el sumiso deben llegar a términos que a ambos les parezcan adecuados, los castigos pueden ser implementados por disciplina, corrección a ciertas actitudes o un intercambio de poder para incrementar los sentimientos de dominación y sumisión, pero debes entender que los limites son la parte clave -

- ¿Que límites? -

- Los que ambos establezcan a través de la comunicación, te colocare un ejemplo, si ambos, el Dominante y el Sumiso han establecido que el Sumiso no puede utilizar palabras mal sonantes el Dominante o amo podrá aplicar un castigo cuando el Sumiso vaya en contra de su orden, este es un ejemplo relativamente sencillo, pero los limites son extensos y depende de ambos aprenderlos – tomo un poco de aire antes de continuar hablando – En cuanto a los castigos hay un montón de castigos y premios que puedes otorgar cómo amo, golpear con la fusta podría ser considerado un premio o un castigo de acuerdo al sumiso, casi siempre el castigo es físico y muy pocos optan por el psicológico ya que este es bastante peligroso tanto para el sumiso como para el dominante, sin embargo durante el castigo el sumiso es el que decide que castigo es suficiente al decir la palabra de seguridad o la seña de seguridad -

- Ya veo... - murmuró más confundido que nunca, pero entendiendo poco a poco a qué se refería.

- Ven, sígueme y deja esa cerveza que seguramente ya está fría - Estella se incorporó y salió de la oficina, Harry comprobó que efectivamente el vidrio de la botella ya no se sentía frio sino tibio, lo dejo en el escritorio de caoba y no perdió un solo segundo en seguirla, tras bajar las escaleras volvieron al pasillo de las puertas y Estella abrió la segunda de la derecha sin tocar siquiera.

Dentro estaba semi oscuro, una luz violeta iluminaba vagamente la cama donde estaba una mujer de cabellos oscuros completamente desnuda, con gruesas sogas rojas rodeando su cuerpo como si fuesen serpientes.

- Tella - saludo un hombre al frente de la cama donde se encontraba la mujer, era bajo pero corpulento, en su mano sostenía lo que parecía una paleta de cuero y solo iba vestido con unos pantalones formales y una camisa blanca, ni siquiera llevaba zapatos.

- Joe - saludo con un asentimiento de la cabeza - él es Harry, es nuevo aquí y vino para aprender algunas cosas, ¿Te molesta? -

- Por supuesto que no, sabes que Jess y yo siempre estamos dispuestos - le dedicó una sonrisa a Estella y luego sus ojos azules se posaron en Harry haciendo que el pelinegro trague saliva ligeramente nervioso - bienvenido chico - agrego con una sonrisa corta antes de apartar la mirada y caminar hacia la mujer con una expresión seria, Harry cruzo miradas fugazmente con ella antes de ver cómo Joe impactaba la paleta contra uno de sus muslos, Jess emitió un chillido agudo pero no dijo ni una sola palabra aun cuando de las esquinas de sus ojos lagrimas amenazaban con escapar.

- Calma, es su juego - le dijo Estella al notar como Harry quería caminar hacia ellos para intervenir, el pelinegro se mantuvo en su posición tensando la mandíbula y vio como Joe golpeaba un par de veces más a Jess antes de acariciar con suavidad las marcas rojas que había dejado su paleta en los tersos muslos de la mujer.

- Está bien cariño - decía con voz suave - está bien, ¿Quieres que use la fusta ahora? - Jess asintió con la cabeza rápidamente, algunas lagrimillas lograron escapar de sus ojos cafés - bien - Joe depósito un beso en sus muslos, Harry pudo notar como la mujer temblaba por la caricia, vio como el hombre corpulento camino hacia una mesa cercana que contenía varios objetos que Harry nunca había visto.

El pelinegro pudo ver como Joe tomaba una fusta que el recordaba haber visto que los jinetes usaban en las competencias de caballos que tío Vernon solía ver en la televisión.

- Uh esto se pondrá interesante – Hablo la voz de su cabeza y Harry quiso preguntar a que se refería cuando el sonido del cuero impactando contra la piel lo saco de sus pensamientos seguido de un gimoteo agudo, Joe continúo impactando la fusta contra la piel de las pantorrillas de la mujer arrancando gimoteos de ella.

Harry vio brevemente a Estella preguntándole sin hablar si la mujer siendo castigada estaba bien y la mujer alta solo le respondió con una sonrisa calmada, el pelinegro continúo observando la escena sintiendo una leve picazón en la boca del estómago ¿Eso quería Malfoy que aprenda? La idea del rubio siendo azotado mientras gimoteos escapaban de sus labios rosados ocasiono que un cosquilleo se extienda por las puntas de sus dedos, Harry no supo identificar si esa sensación fue agradable o molesta.

Tras varios minutos Estella lo saco de la habitación en silencio, apenas cerró la puerta giro para verlo analizando la expresión del pelinegro.

- Joe es un Dom nato, Jess una sumisa experimentada, Joe odiaba ser visto y Jess es voyeurista, cómo verás ambos llegaron a un acuerdo donde pueden ser vistos, pero en un ambiente que ambos decidan, ambos cedieron y respetaron los deseos otro - Harry lo comprendía mejor, de repente todo era menos abstracto - ¿Estás seguro que estás dispuesto a esto por él? - Harry no pudo evitar sentir como sus orejas se enrojecían de solo recordar que minutos antes había tenido pensamientos del rubio siendo azotado, pensó un poco en la respuesta que daría.

- Si - respondió viéndola a los ojos, si Malfoy se sentía cómodo con eso a él no podía molestarle, Estella sonrió y le dio un suave apretón en el hombro.

- Bien, primero debes saber que eres, dominante o sumiso -

- ¿Y si no sé qué soy? -

- ¿Que te dice tu instinto? ¿Qué sentiste ese día cuando te amarro? ¿Querías ceder por completo? ¿O ansiabas luchar contra el dominio? -

- No, quería agarrarlo, quería que mis manos se liberarán para poder tocarlo, realmente luche bastante -

- ¿Tienes problemas con controlar lo que te rodea? –

- No soy contro… - guardo silencio y pensó un par de segundos – Si, soy algo controlador – confeso sintiéndose levemente avergonzado, pero de nuevo Estella no parecía sorprendida ni molesta.

- ¿Alguna vez has perdido el control sobre ti mismo? -

- Lo hice - nadie lo sabía, ni siquiera sus amigos.

- ¿Cómo se sintió eso? -

- Horrible, lo peor de mi vida, no intento controlar todo, pero sentir que no tenía control sobre mi - gruño - horrible – repitió mordiendo el lado interno de su mejilla.

- Bien - Estella dejo de tocarlo y se llevó una mano a la barbilla - supongo que eres un Dominante, no uno agresivo por suerte, pero no tienes lo suficiente para ser un sumiso, ¿Sabes si él es sumiso? -

- No parecía serlo, no, no creo, aunque… las cuerdas -

- También hay sumisos que solo actúan de manera dominante para esperar recibir un castigo – aclaro Estella – En caso de que él no sea un sumiso ¿Estarías dispuesto a ser su sumiso? - Harry se preguntó internamente si realmente aguantaría que Malfoy lo amarre y haga lo que sea que él quiera, una pequeña parte que era de su pasado no pareció agradarle la idea, pero el Harry actual, el que se conocía mucho mejor que hace años no pareció afectado en absoluto.

- Sí, supongo que si - respondió tras varios segundos Estella asintió con la cabeza sonriendo de lado.

- Vamos a enseñarte ambos roles, Sumiso o Dominante, quien seas lo definirán ambos, ¿Existe la posibilidad de que él se una a tu enseñanza? - Harry negó con la cabeza.

- Solo me dijo que esté listo para el 5 de junio -

- No tenemos tiempo que perder entonces, hay que impresionarlo, ¿No crees? - Harry asintió sonriente sintiéndose libre y fresco por primera vez en bastante tiempo.

Hola

Primero quiero aclarar que para escribir de BDSM tuve que investigar un poco, porque mientras más leía más me sentía confundida así que tuve que releer y releer, si tengo algún error no olviden hacérmelo saber.

Hasta la siguiente ^^