Mi madre está sin trabajo y mi padre murió cuando yo era un bebe, necesitamos dinero, hace unas semanas hable con mi abuela Kaede, ella trabaja de sirvienta, para una familia muy rica, ella hablo con sus jefes, para que me dieran trabajo solo Para el verano, ellos accedieron, ya que tendrían una gran fiesta, pues su hijo mayor iba a estar de cumpleaños.

Toco el timbre, un hombre de mediana edad me abre la puerta.

-¿Señorita?

-Kagome, soy la nieta de Kaede y prima de Rin. -Mi prima es tres años mayor que yo, trabaja de hace unos meses para los Taisho, ella se encarga de lavar y planchar.

-La señora Taisho la espera en la sala.

El me acompaña, la mansión es hermosa, las paredes son blancas, el piso brilla, cuando llegamos a la sala veo que los muebles están perfectamente limpios, la señora Taisho es muy linda, tiene el pelo largo y negro y unos ojos de color marrón. , su rostro es dulce.

-Encantada de conocerte Kagome, mi nombre es Izayoi-Me extiende su mano y yo la tomo.

-El gusto es mío señora. -Ella me sonríe.

-Bueno, hablemos de tu trabajo, estarás a carga de limpiar y ordenar el cuarto de mi hijo menor Inuyasha, también ayudaras a servir la comida, pero dentro de unos días será el cumpleaños de mi hijo mayor,Sesshomaru y tú serás la encargada de atender a los invitados-Yo asiento con la cabeza, estoy nervioso ¿Y si no puedo hacer bien el trabajo? Puedo limpiar y ordenar, pero y si a su hijo no le gusta... ¿Y si no atiendo bien a los invitados en la fiesta de Sesshomaru?

-Ven, te mostrare tu cuarto-La sigo, subimos las escaleras y llegamos al segundo piso, entramos en el tercer cuarto.

Mis ojos se abren por la sorpresa, el cuarto es grande, hay una cama de dos plazas con un velador a cada lado, un armario y al fondo hay una puerta, no puedo creerlo voy a tener un baño privado.

-Espero que te guste...tu no usaras los cuartos destinados para las personas de servicio, este cuarto está al lado de mi hijo Inuyasha.

-¿Por qué no usare un cuarto destinado a los empleados?

-Porque estarás más cerca del cuarto de Inuyasha, por si el necesita algo, a de más, este cuarto es más cómodo que el de los empleados. Si necesitas mandar a lavar tú ropa o la de mi hijo, la lavandería está en el primer piso, en el pasillo de la derecha y es en la primera puerta, solo se la tienes que entregar a Rin, ella se encarga del resto.

-Gracias-No sé qué más decir, ayer estaba compartiendo cuarto con mi madre y ahora tengo mi propio cuarto, con baño privado.

-Encontrarás tu uniforme en el armario...me iré para que te cambies y puedas comenzar a trabajar.

Abro el armario, y veo mi uniforme, es un vestido negro de mangas cortas, con un delantal blanco, me cambio rápido, el vestido me queda un poco más arriba de la rodilla y se ajusta un poco a mi cuerpo, me subo mi cabello. azabache en una coleta alta.

Voy al cuarto de Inuyasha, toco la puerta, no recibo respuesta, decidido entrar, el cuarto es un desastre, hay ropa tirada por todas partes, la cama sin hacer, hay libros tirados en el piso, en su escritorio los papeles están desordenados. Ese muchacho debe de ser un desastre.

Comenzo a recoger la ropa ya ponerla en la canasta de ropa sucia, tendré que llevarla con Rin después, estoy muy concentrada ordenando cuando de pronto la puerta se abre de golpe, me asusto y me paro como un recurso, me giro y lo veo. ..sus hermosos ojos dorados recorren mi cuerpo y se distinguieron finalmente en mis ojos, cuando nuestras miradas se encuentran siento...mariposas...las famosas mariposas en el estómago.

-Tu...eres, ¿La nieta de Kaede?

-Sssi-Que vergüenza estoy tartamudeando.

-Mucho gusto soy Inuyasha y tu...

-Kagome.

Levanta su mano para que yo la tome, y yo la acepto con gusto, cuando nuestras manos se tocan siento una corriente eléctrica recorrer mi cuerpo, él me sonríe la sonrisa más hermosa que he visto en mi vida, lleva mi mano a sus labios y la besa, mi corazón tarde a toda velocidad. Sus ojos bajan a mis labios...quiero que me bese...quiero sentir su boca sobre la mía, yo nunca he tenido novio, nunca he dejado que nadie me bese...pero quiero que él lo haga separo un poco mis labios, y él se acerca, siento su aliento mezclándose con el mío, me besa y yo le devuelvo el beso al instante, sus manos van a mi cintura y las mías a su cabello plateado, él intensifica el beso, me muero de vergüenza al darme cuenta que se me escapa un gemido, no quiero que esto termine, quiero que mis labios se queden pegados a los de él para siempre.. Nos separamos buscando aire,

-Yo...esto está mal muy mal, eres el hijo de mis jefes, y nos acabábamos de conocer. -Mi respiración es irregular y, mi corazón late como loco.

-No me importa que yo sea el hijo de tus jefes-Toma mi mano en la pone en su pecho, justo es su corazón, que late alocado, igual que el mío-Lo sientes...late por ti, cuando te vi. ..me sentí...nunca antes yo...había sentido esto por una chica...-Esta nervioso y sonrojado. -Siento como si te hubiera estado buscando toda mi vida y al fin, te encontré.

-Yo también siento lo mismo, creé que mi corazón va a estallar en cualquier momento. -Pero también es cierto que soy la empleada, él me dijo que no le importa, eso me alivia, pero ¿Y sus padres? ¿Qué dirían sus padres? Se supone que estoy aquí para trabajar, no para meterme con su hijo menor.

-¿Inuyasha? Ya encontraste el libro-Nos separamos de golpe al escuchar esa voz, es una chica.

-¿Es tu novia? -Mi tono de voz es bajo, solo para que él me escuche. Me relajo cuando él niega con la cabeza, pienso que Inuyasha tiene novia, se me revuelve el estómago con solo pensarlo.

-¡Si Kikyo! Ya lo encontré.

-¿Qué esperas? ¡Ya vamos, rápido! Te espero abajo-Inuyasha toma un libro que estaba debajo de su cama.

-Yo...tengo que irme, pero nos vemos más tarde-Me da un corto beso en los labios y se va. No sé a qué me va a llevar esto con Inuyasha, pero me voy a dejar guiar por mi corazón. Llevo mi mano a mis labios y sonrío...me gusta Inuyasha.

Lo mejor será llevar la canasta con la ropa sucia de inuyasha a Rin, no me cuesta nada encontrar la lavandería, entro sin tocar, mis ojos se abren como platos y dejo caer la ropa al suelo, mi prima no está sola, se separan bruscamente. al sentir mi presencia, pero es tarde, los vi besándose.

-Kagome...yo solo...

-¿Kagome?-El chico me habla, por su color de pelo y ojos sé que es Sesshomaru, el hermano mayor de Inuyasha.Él mira a Rin y ella asiente con la cabeza-Soy Sesshomaru Taisho y... novio de Rin. -Sigo sorprendida. ¿Novio?

-Pero, Kagome, tiene que prometer que no le dirás a nadie lo que viste, ni mucho menos que él y yo somos novios.

-Si, claro, está bien, no diré nada-No traicionaría a mi prima de esa manera, la quiero mucho, siempre hemos sido muy unidas, y también con que cara lo aria, si yo también tengo "algo" con el otro hijo de los jefes.

Sesshomaru se larga diciendo que tiene que ir a ver unos asuntos de la universidad, yo recojo la ropa de Inuyasha y se la entregó a Rin.

-Nosotros llevamos tres meses juntos...aún no le decimos a sus padres...yo voy a dejar el trabajo porque el próximo año iré a la Universidad que esta al otro lado de la cuidad, se lo contaremos después de eso, cuando ya no sea su empleada. -Asiento con la cabeza, entiendo a mi prima, no sería bien visto que una empleada tuviera una relación amorosa con uno de los hijos de los jefes. -Y.…¿Ya conociste a Inuyasha?-Con solo escuchar su nombre se me acelera el pulso, es inevitable olvidar los dos besos que nos dimos en su cuarto, todo fue muy rápido.

-Si…ya lo conocí. -Le entrego la ropa sucia y ella la recibe con una sonrisa.

-Y ¿Qué tal?

-¿Qué tal? Bueno es...simpático.

-¿Simpático? Vamos Kagome, debes de darte cuenta de que Inuyasha es más que solo simpático...al igual que mi novio, Inuyasha es...atractivo...aunque Sesshomaru lo es aún más. -Siento que mis mejillas arden...claro que Inuyasha es atractivo...es el chico más atractivo que eh visto en mi vida.

-Kagome...no me digas que ¿Te gusto Inuyasha?

-Bueno...puede que...

-¡Kagome!-Rin tiene una sonrisa traviesa. -Te gusta Inuyasha Taisho.

-Si-Me tapo el rostro avergonzada, me gusta él chico, me gusto apenas lo vi, Inuyasha me flecho apenas entró en su cuarto.

-Hay algo que aún no me ha contado.

-Rin...nos besamos...dos beses

-Tu primer beso fue con Inuyasha Taisho.

-Tengo que seguir trabajando y tú también nos vemos luego.

-Si claro adiós, no te salvas, después quiero los detalles. -Escucho su risa cuando cierra la puerta de tras de mí. ¿Que tendrán esos hermanos Taisho?

Me paso las siguientes dos horas ordenando el desastre del cuarto de Inuyasha, pero la verdad me gustó mucho el resultado, ahora tengo que bajar, porque voy a ayudar a servir la cena.

La cocinera me entrega la primera bandeja, caundo llego a la mesa, pongo el plato al frete de Inu no Taisho, el padre de Inuyasha y Sesshomaru, el me da las gracias, a si continúo sirviendo los platos de la cena, hasta que Llega el turno de servir a Inuyasha, intento disimular los nervios que siento cuando estoy a su lado, Inuyasha me sonríe y cuando pongo su plato en la mesa y me da las gracias, cuando me retiro siento su mirada en mi espalda.

Ya es la hora de descansar, me doy un baño y me pongo mi ropa para dormir de color rosa claro, que consiste en una polera sin mangas y en un pantalón muy corto, que me llega a la mitad de los muslos. Eh tenido un día muy movido, estoy agotada, voy a mi cama, cuando siento que tocan la puerta.

-Adelante.

-Hola...Kagome.

-Inuyasha, pero...

-Vamos-Su mirada recorre mi cuerpo-Eh...creo...que es mejor que te pongas una bata antes. -Aparta su mirada avergonzada.

Voy al closet y saco mi bata blanca, no es tan larga, pero me va a cubrir bien.

-Listo...pero ¿A dónde vamos?

-Es una sorpresa...pero antes ven-Me acerco a él un poco tímida-Dame un beso.

No tiene que repetírmelo dos beses, me acerco y pego su boca a la mía, una corriente eléctrica recorre todo mi cuerpo.

-Ahora si podemos irnos. -Le doy una sonrisa y el me la devuelve al instante.

Salimos al jardín trasero, miro hacia la mansión están las luces apagadas de los dormitorios...no hay peligro de que alguien pueda vernos.

No puedo creerlo, hay una manta en el pasto con una canasta de picnic, también hay un ramo de rosas, Inuyasha va a buscarlas y me entrega el ramo.

-Desde el primer instante en que te vi supe que eras especial, eres la chica que siempre soñé...este ramo de rosas es para ti. -Cuando me las entrega siento como mi corazón se hincha de felicidad.

-Nunca ningún chico me había regalado rosas, eres el primero.

-Y tú eres la primera chica que le regalo rosas.

-Espero ser siempre la única chica que le regales rosas.

-Siempre serás la única, para mí solo existe tu Kagome solo tu. Todas las rosas de esta mansión te pertenecen.

Esa noche Inuyasha y yo tuvimos nuestra primera cita en el jardín, una que a pesar de que muchas personas podrían describir como simple, pera mi fue maravillosa, la mejor noche de mi vida, nos pudimos conocer mejor y nos besamos bajo las estrellas. Esa noche me fui a dormir con una sonrisa en mi rostro, no quiero que el verano termine, no quiero separarme de Inuyasha, aunque sé que es inevitable.

¡Hola! Esta historia está contada por Kagome, esta historia se complementa con Herida, que es contada por Kikyo...pueden leer ambas o por separados ¡Espero que les guste!