EL LARGO CAMINO PARA SER FELIZ

1 EL INICIO.

Ya ha pasado 1 año desde aquella hermosa fiesta en el Hogar, nuestra heroína a sufrido cambios tanto físicos como emocionales, a sus 18 años su cuerpo de niña a quedado en el pasado, dándole paso a una mujer con voluptuosas curvas que dejan sin aliento a mas de uno, emocionalmente es una mujer estable, libre e independiente. A petición de Albert se había ido a vivir a la mansión de la familia, ya no llevaba el apellido Andrew por que le pidió a Albert que se lo revocara aunque este alego con ella no logrando convencerla, y como siempre respetaba sus dediciones termino aceptando. No sin antes tomar ciertas medidas para el futuro.

Aunque pretendientes no le faltaban, Candy solo los trataba como sus amigos, ya que en su corazón había una herida que se negaba a cicatrizar.

Al fin la Tía Abuela había aceptado su presencia, por que a pesar de su corta edad ayudo a su muy amado Albert durante su amnesia y había arriesgado su reputación ayudando a un hombre al que apenas conocía, al irse a vivir con el. Aunque se negó en un principio a que Candy viviera junto con ella en la mansión la chica poco a poco se fue adentrando en su corazón, y esperaba los días libres de Candy para que esta le dedicara algo de su tiempo ya que sus platicas con ella la hacían reír y además por que le encantaba Regañarla diciéndole que una dama no debía comportarse de la forma en la que ella se comportaba, cuando se subía a los árboles o se tiraba a descansar en la hierba del jardín.

Albert, se había convertido en un gran hombre de negocios, joven guapo y exitoso, pero algo nublaba su éxito y era una joven de hermosos ojos verdes que se negaba a ser feliz y se sentía responsable por ello.

Neil. Heredero de una gran fortuna, al igual que Archie estudiante de leyes, de aquel joven caprichoso y mal educado no quedaba nada, gracias a Candy su personalidad había cambiado totalmente ya que gracias a los cuidados de ella, había salvado su vida cuando los doctores no daban esperanzas, y durante su recuperación Candy le hizo ver el mal camino que llevaba y que la vida era un tesoro de los cuales pocas personas pueden disfrutar plenamente.

Una tarde mientras Annie y Candy tomaban un café en un lindo restaurante, platicaban sobre sus planes a futuro.

Annie. Solo espero que Archie termine pronto su carrera de Abogado para así poder casarnos, lo amo tanto que los días que no estamos juntos parecen siglos.

Candy. (Riendo) hay amiga de verdad que si estas realmente enamorada, pero no se te valla a olvidar que yo seré la madrina.

Annie. (Seria) pero como puedes pensar que alguien que no seas tu sea mi madrina (risas). (En un tono más serio) Candy, me gustaría hacerte una pregunta un tanto personal espero y no te enojes y creas que soy una entrometida

Candy: pero Annie tu sabes que puedes preguntarme lo que sea, entre las amigas no hay secretos.

Annie. Candy ¿eres feliz?

Candy. Claro que soy feliz,

Annie. Pero yo me refiero al estar feliz en el plano personal, querer a alguien amar a una persona en especial

Candy. Annie soy feliz te tengo a ti, a Albert, a la tía Elroy, a todos en el Hogar, a mis pacientes en el hospital y quiero mucho al ratón de biblioteca que tienes por prometido.

Annie (riendo) Archie no es un ratón de biblioteca simplemente se esta esforzando para obtener excelentes calificaciones y ser el primero en su clase, ya que si se te a olvidado, Neil no es tan mal estudiante como todos nosotros habíamos pensado, quien hubiera pensado que ese horrible accidente le habría de cambiar la vida.

Candy. Así es amiga, Neil es un gran muchacho, nada que ver con ese chico grosero y caprichoso que era en el pasado, y verlo ahora tan cambiado y seguro de si mismo (pensativa) esa es la razón por la cual su padre este tan orgulloso de el.

Annie. (Asombrada) no me digas que te has enamorado de Neil

Candy. (Riendo) claro no, Neil es solo un buen amigo y lo quiero como tal

Annie. Candy retomando mi pregunta, no piensas en casarte, tener hijos, formar un hogar, enamorarte.

Candy. (Sorprendida ríe nerviosa) Annie claro que lo he pensado, pero es muy pronto, además no e conocido a nadie de quien pueda enamorarme. (ja ja ja ) además hablas igual que la Tía Elroy, cuando dice que debo de buscar un novio.

Annie. Ya olvidaste a Terry

Candy. (Sorprendida responde seria) no, no lo e olvidado, pero ahora solo pienso en el, como uno mas de mis amigos, además el esta casado con una gran mujer como lo es Susana, así que solamente puedo desearles toda la felicidad que se merecen. (Sonríe tristemente)

Annie. Perdóname Candy, no quería remover viejas heridas, pero desde hace tiempo tenía esa duda, y agradezco tu sinceridad.

Candy. No tengo nada que perdonarte, como ya te había dicho, entre nosotras no hay secretos.

Y así pasaron hablando toda la tarde de temas triviales hasta que ambas regresaron a sus respectivas casas.

Mientras tanto Albert, se encontraba en su despacho tratando unos asuntos muy importantes con George, esperaba a que llegara la rubia de ojos verdes para poder salir a comer, ya que como todas las tardes comían juntos en la mansión.

George. (Al ver a su jefe ansioso por salir) no se preocupe señor la señorita Candy no tardará en llegar

Albert. (Asombrado) si, lo se, pero tengo tantas ganas de verla, hablar con ella.

George. (Serio) señor, perdone mi atrevimiento, esta usted enamorado de la señorita Candy, verdad.

Albert (serio) cuantas veces te he dicho George, que no me digas señor me haces sentir viejo, y déjame de hablar de usted, además sabes que yo te aprecio como al hermano mayor que nunca tuve, y mi padre te quiso como a un hijo, no me hagas repetírtelo de nuevo.

George. Perdón Albert, es la costumbre. Pero no respondiste a mí pregunta esta enamorado de Candy.

Albert. (En tono nervioso) que cosas dices, claro que la quiero mucho, es una niña muy linda

George. No me refiero a eso, además por si no te has dado cuenta Candy a dejado de ser una niña, ahora es una hermosa mujer, por la cual muchos hombres perderían la cabeza, ahí tienes el ejemplo de Neil, como cambio gracias a ella, y ese doctor John que cada vez que puede la visita.

Albert. Ya lo se, mi ángel siempre a tenido la capacidad de cambiara a las personas y es tan bella y es lógico que atraiga a muchos hombres.

George. Pero dime la quieres

Albert. (Resignado) si lo acepto la amo. Todo empezó desde que vivíamos juntos poco a poco se metió aquí (señalando su corazón) y por mas intentos que e hecho no quiere salir, se que el amor que siento es imposible, ya que ella solo me ve como al hermano mayor, su protector y gran amigo. (Su tono se vuelve triste) además ella esta enamorada de otro hombre. Y nada ni nadie lo podrán cambiar

George. Eso no tú ni yo lo sabemos, además ella es una mujer muy fuerte, que se repone rápidamente a las adversidades de la vida. Y si no te decides alguien con mucho mas valor que tu se la llevara.

Ninguno de los 2 hombres sospechaba que Candy sin querer escucho lo ultimo dicho por Albert y George.

Candy (Sorprendida piensa) así que es cierto Albert esta enamorado, quien será esa dama misteriosa que le a robado el corazón. Esa será mi nueva tarea conocer a esa mujer. (Alejándose del lugar).

Mientras tanto en el despacho, Albert y George continúan su charla.

George. (Molesto) no puedo creer lo que estoy escuchando Albert, eres un hombre de retos. No puedes darte por vencido sin antes haber luchado, además tienes muchas cosas a tu favor, solo es cuestión de que lo intentes.

Albert. (Resignado) pero George esta pelea la tengo perdida desde antes de comenzar.

George. Ahora veo que no tienes el valor para luchar por ella, y aun así dices que la amas. Te creía más valiente

Albert. Claro que tengo el valor de decirle lo que siento, pero temo al rechazo me rompería el corazón una negativa de su parte y corro el riesgo de perder su amistad y peor aun que se vaya de la casa. No soportaría tenerla lejos de mí, si no tengo su amor al menos prefiero su amistad.

George. Solo te puedo aconsejar que es mejor haberlo intentado y perdido a nunca haberlo intentado.

El silencio reino por varios minutos, hasta que la puerta se abrió de par en par. Sorprendiendo a los hombre que estaban concentrados en unos documentos.

Candy. (Ríe divertida) perdón por no tocar antes de entrar, pero como no escuchaba ningún ruido pensé que habían muerto de aburrimiento.

Albert. (Sonriendo) no tienes que disculparte Candy, sabes que estas en tu casa.

George. De todas maneras ya habíamos terminando, (toma los papeles y se dirige a la puerta) hasta mañana Albert.

Candy. Hasta mañana George.

George. Hasta mañana señorita Candy. (Dirigiéndose a Albert) y recuerda lo que hablamos.

Albert. No te preocupes George lo pensare. (Al decir esto George sale de la habitación).

Candy. Y de que hablaron si se puede saber.

Albert. De asuntos de negocios, te aburrirías.

Candy. (Pensativa) Albert, nunca as pensado en casarte

Albert. (Sorprendido) claro que lo e pensado, pero quien le gustaría estar con un hombre como yo, que esta todos días en los negocios, y que en mis ratos libres me gusta estar en contacto con la naturaleza, quien se fijaría en mí.

Candy. (Sorprendida) pero que estoy oyendo Albert, eres un buen hombre, inteligente, sencillo, cariñoso, amable, responsable y muy atractivo (al decir esto ultimo se sonroja, cosa que no pasa inadvertida por el rubio).

Albert. (Asombrado y feliz) vaya nunca pensé que tuvieras esa opinión de mi pequeña.

Candy. Eres un gran hombre, Albert, que si no te quisiera como mi hermano mayor te pediría que te casaras conmigo. (Comienza a reír)

Albert. (Piensa, no sabes como me duelen tus palabras y tristemente le dice) gracias por tus palabras.

Candy. (Al verlo triste) pero no pongas así Albert, discúlpame si te hice sentir mal. No era mi intención, es solo que me gustaría verte feliz… (Apenada baja la cabeza)

Albert. No te preocupes, ya la Tía abuela me ha dicho lo mismo que ya es hora de que me case, y tratare de buscar esposa en la fiesta que se celebrara dentro un mes, con motivo de mi cumpleaños (Diciendo esto toma la barbilla de Candy obligándola así a mirarlo a los ojos)

Al sentir la mano de Albert en su cara, Candy no puede pensar en nada más que no sea esos hermosos ojos azules y en lo guapo que es el rubio, tan perdida estaba que no se dio cuenta cuando Albert empezó acariciarle la cara, los labios y como poco a poco fue acercándose a su boca y estaba apunto de besarla cuando repentinamente la puerta se abrió. Era George

George. (Apenado) perdonen ustedes no quise interrumpir, solo vine por unos documentos. (Dicho esto busca una carpeta en el escritorio y se marcha.)

Candy y Albert no salen del asombro estuvieron a punto de besarse. Ella es la primera en reaccionar, sale corriendo del despacho, y sube a su habitación, donde se tira en la cama a llorar de forma desconsolada. (Sola en su habitación piensa) pero que fue lo que me paso, sentí la necesidad de estar mas cerca de el, pero de otra forma, que esto que siento, ahora no podré verlo a los ojos, además el esta enamorado de otra, y ¿yo solo lo quiero como a un hermano, o no?

Mientras tanto en el despacho un muy desesperado Albert piensa. Que me paso, solo se que al tocar su hermoso rostro perdí totalmente el control, creo que fue mi imaginación pero sentí que ella se estremecía con mi caricia, y estábamos a punto de besarnos, ahora no querrá ni verme, como le explico lo que siento. Sin perder su amistad. Tengo que pedirle una disculpa.

Una de las sirvientas, toca la puerta del despacho, y entra.

Doroty. Sr. William ya esta lista la comida, ya puede pasar al comedor.

Albert. Gracias Doroty enseguida voy.

Estaba la muchacha a punto de irse cuando Albert le pregunta si Candy ya estaba en el comedor, a lo que le contesta que se disculpo con la Sra. Elroy que no comería con ellos, y que había salido.

Albert. (Viendo hacia la ventana) donde habrás ido pequeña.

Mientras tanto en la cima de un gran árbol en las afueras de la mansión. Que es lo que me pasa, será que yo también deseaba ese beso, nunca había sentido esto, al sentir su piel fue como si algo escondido dentro de mí saliera a flote, pero es diferente a lo que sentí por Terry, lo que siento por Albert es mas fuerte, su caricia despertó en mis cosas de nunca había sentido, en sus manos tenia el broche de su amado príncipe, sonreía ya que Albert era su príncipe, el hombre que siempre estuvo ahí en sus momentos mas difíciles, la persona que la consoló cuando termino con Terry, de pronto se dio cuenta que lo amaba, por eso siempre necesitaba su abrazo, sentir su calor, estar cerca de el.

Candy. Dios mió lo amo, tengo que arrancar este sentimiento de mi corazón, el esta enamorado de otra, por que siempre tengo que amar a la persona equivocada (llorando)

Han pasado varias días, desde aquel incidente en el despacho del los Andrew, y ninguno de los dos había tenido tiempo de aclarar las cosas, Candy había estado muy ocupada en el hospital debido a la gran cantidad de heridos traído del frente de batalla y Albert en un sin numero de comidas y cenas de negocios.

Un día antes de la fiesta ambos jóvenes regresaban de sus respectivas ocupaciones, Albert esta sentado de espalda en uno de los grandes sillones de la sala, cuando de pronto entra la rubia con John un joven medico que trabaja con ella en el hospital, el cual le pedía una cita

John. Solo dame una razón por la cual no quieres salir conmigo

Candy. Te lo he dicho muchas veces John, solo te aprecio como uno mas de mis amigos, y solo puedo ofrecerte mi amistad, no me gustaría que te hicieras ilusiones.

John. Bien no insistiré mas, solo respóndeme una pregunta

Candy. Claro dime

John. Estas enamorada de alguien más.

Candy. Por favor, no puedo contestar tu pregunta sin lastimarte

John. Si realmente me aprecias como dices, respóndeme con la verdad por mas cruel que sea.

Candy. Mi corazón le pertenece a otra persona, pero esta muy lejos de mi alcance, y prefiero tener su amistad a perderlo para siempre.

John. Tienes un alma tan generosa, agradezco la sinceridad de tus palabras, y dime conozco a ese afortunado hombre que es dueño de tu corazón.

Candy. No puedes saber quien es, nadie que no sea yo conoce su nombre.

John. Respeto tu silencio, espero y sigamos siendo amigos.

Candy. Gracias John, no sabes lo bien que me hacen tus palabras. (Su tono es triste)

John (dirigiéndose a la puerta) pero no pongas esa cara, que nada opaque la belleza de tu sonrisa, me retiro ya es tarde y me esperan en el hospital,

Candy. Gracias por traerme, y perdóname si lastime tu corazón, eres un buen hombre y espero

Que algún día encuentres la felicidad que tanto mereces. (Ambos salen de la habitación)

John. Espero y algún día seas muy feliz amiga Candy. Siempre seré tu amigo.

Ninguno de los jóvenes noto la presencia de Albert que estaba casi al fondo del salón. Solo en la habitación pensaba. Ahora se que mi ángel, sigue enamorada de Terry, su corazón se lleno de una gran tristeza y las lagrimas recorrieron sus mejillas. Tendré que tomar medidas para separarme de ella, por ningún motivo tiene que saber cuanto la amo (Pensaba). Estaba tan absortos en sus pensamientos que no escucho cuando Candy entro en la habitación, y lo vio ahí sentado con los ojos cerrados, las lagrimas aun corrían por sus mejilla y en el fondo sintió un profundo dolor, como era posible que esa "mujer" no viera al maravilloso ser humano que era Albert, y ala vez pensaba que ella sabia y entendía perfectamente su dolor ya que ella había llorado demasiado a causa de su separación con Terry, y sin pensarlo empezó enjugarle las lagrimas, al sentir el calido liquido en sus manos confirmo cuanto lo amaba.

Albert pensaba que estaba en un sueño, sentir las pequeñas manos de un ángel acariciando su rostro, estaba en éxtasis, como deseaba que fueran las manos de su querida Candy que lo acariciaran, tenía miedo de abrir los ojos. Candy, miraba los labios de Albert, los cuales estaba humedecido y pensó, que se sentirá ser besada por un hombre como el, sentir sus abrazos alrededor de mi cuerpo. Tan distraída estaba que se dio cuenta que unos hermosos ojos azules la miraban asombrados. Al verse sorprendida retira las manos del rostro del rubio, pero este con sus manos atrapan las de la joven y dice.

Albert. Por favor, no lo hagas, continua, ahora más que nunca te necesito.

Candy. (Sorprendida) Albert, yo lo siento pensé que dormías, no quise ser inoportuna, yo (el No la deja terminar y dice)

Albert. Necesito decirte algo, ahora que tengo el valor tienes que saber que yo te a…

Candy. (En tono triste lo interrumpe) se lo que vas a decirme, y créeme te entiendo perfectamente, escuche la charla que tuvieron George y tu hace unas semanas, se lo que sientes amar a quien no te ama

Albert. Dime. Que fue lo que escuchaste exactamente –asombrado-

Candy. Bueno que estabas enamorado de una mujer, la cual amaba a otro.-apenada-

Albert. Entonces no escuchaste el nombre de la chica

Candy. No, pero si me dices quien es, yo podría… (Diciendo tristemente)

Decirle lo maravilloso que eres y…

Albert. (Tomando sus manos y llevándolas hacia su corazón) pero mi ángel no te as dado cuenta que tu eres la mujer a la cual amo con todo mi corazón, no se como ni cuando empezó esto que siento, lo que si se es que mi alma y mi corazón son tuyos, no te había dicho lo que siento por miedo a perder tu amistad y compañía.

Candy. Albert, yo…nunca imagine que tu…

Albert. No digas nada, se que amas a alguien mas, solo te pido perdón por amarte, se que nunca sentirás amor por mi, por eso e tomado la decisión de alejarte de ti. Me iré de viaje dentro de poco.

Candy. (Abrazándolo) Lo último que quisiera es que te alejaras de mi, no se como paso pero desde hace un tiempo mis sentimientos hacia ti han cambiado, me sentía culpable ya que pensé que solo me querías como a la hermanita menor que nunca tuviste, y al saberte enamorado de otra, pensaba en como borrar este amor que empezaba a crecer dentro de mi corazón.

Albert. (Confundido) que dijiste. Repítelo por favor,

Candy. No se como fue, pero poco a poco necesitaba estar cerca de ti, escucharte, al principio creí que era un amor de hermanos, pero no fue así, el día en que casi nos besamos yo lo deseaba tanto, y descubrí lo mucho que me atraes no como hermano sino como hombre. Te amo, te amo mi Príncipe no te vayas de mi lado por favor (Lo abraza fuertemente)

Albert. (Emocionado) es verdad, lo que escucho. Me quieres, (la abraza y gira con ella alrededor de la habitación) gracias amor mío, mi corazón esta que no cabe de felicidad, quisiera contarle al mundo que mi amor es totalmente correspondido.

Candy (riendo y llorando) nunca imagine que tu, soy una tonta, en mi mente solo estaba la idea de alejarme de ti.

Albert. Como pudiste algo así, si lo hubieras hechos me habrías matado en vida. (Pensativo) Se que es muy precipitado lo que voy a pedirte, Candy aceptas casarte conmigo

Candy. (Sorprendida) casarme contigo.

Albert. Claro te amo desde hace mucho tiempo y deseo que seas mi esposa.

Candy. Si, pero tengo miedo, siempre pasa algo malo con la personas a las que amo.

Albert. Nada malo va a pasar, a menos que me dejaras de amar, me matarías. (Ambos se funde en un abrazo, y permanecen así unos minutos).

Candy es la primera en separarse de Albert.

Albert. Que pasa amor

Candy. Es que me siento tan feliz, que tengo miedo que todo esto sea un sueño.

Albert. Pero es una realidad mi amor, nuestra realidad.

Candy. (Abrazándolo de nuevo) te quiero Albert, acepto casarme contigo

Albert. Te amo mi gatita, mañana en la fiesta are público nuestro compromiso. Deseo gritarle al mundo lo mucho que te quiero, lo feliz que soy a tu lado.

Candy. (Asombrada) no te parece que es demasiado pronto, además no deseo arruinarle la noche a Annie y Archie ya que se anunciara su compromiso matrimonial.

Albert. Es que acaso no deseas que nuestros amigos se enteren de que ya somos novios. Por que somos novios verdad.

Candy. Claro pero, no se como vayan a reaccionar nuestros amigos, todo es tan precipitado.

Albert. Candy mi amor. No me gustaría que me aceptaras solo por compasión. Esta segura de lo que sientes.

Candy. (Seria) claro que te amo, no jugaría con eso, y te confesare algo, cuando creí que estabas enamorado de otra sentí celos, celos de no ser la única persona que amabas. Que para no verte y pensar en ti doblaba los turnos en el hospital para no verte e irme haciendo a la idea de que nunca me amarías. Nunca dudes lo mucho que te amo

Albert. Hemos sido unos ciegos, pero ahora nada ni nadie impedirán que seamos felices lo prometo, te amo tanto que siento que voy a explotar.

Busco sus labios para besarla por primera vez, ella lo acepta gustosa, es el segundo beso de amor que recibe en su vida, pero es diferente este beso es tierno apasionado, ella lo recibe feliz pasa sus manos alrededor de su cuello, acaricia sus cabellos, la caricia encienden en el sus ansias de tenerla mas cerca, acariciar su piel. Así que poco a poco se separa de ella.

Candy. (Soltándose del abrazo de el) será mejor que me vaya a mi habitación, estoy cansada y la tía me espera para cenar.

Albert. Entonces hoy cenare con ustedes, deseo pasar mas tiempo contigo mi amor.

Candy. (Saliendo del despacho) bien, entonces tendré que ponerme bonita para ti.

Albert. Pero si ya eres hermosa tal y como eres.

La rubia no alcanza a escuchar lo dicho por Albert, ya que cerró la puerta a toda prisa, y corrió hacia su habitación, donde se tiro a la cama a reír y llorar de alegría.

Candy. Que feliz me siento, Albert me ama tanto como yo a el.

En ese momento llega Doroty.

Doroty. Solo vine a decirte que tu baño esta listo, recuerda que la Sra. Elroy te espera a cenar y tienes que.

No termino la chica de hablar, se dio cuenta que la rubia estaba en otro mundo.

Me estas escuchando candy.

- Perdón doroty, decías.

Doroty. Te decía que la Sra. Elroy te espera para cenar y que tu baño ya esta listo, pero deja de dar vueltas que me mareas-

- Doroty estoy tan feliz, el me ama, me ama

- Pero quien te ama dime

- Albert, dory, albert me ama tal y como yo lo amo a el.

Doroty. (Sorprendida) vaya, hasta que por fin.

Candy. (ASOMBRADA) que dices Doroty

Doroty. Todos es en la casa sabemos que el esta enamorado de ti, solo vasta con verlo cuando esta cerca de ti, su sonrisa es diferente, no puedo creer que no te habías dado cuenta, tu que eres la sra. Corazón en persona.

Candy. Si pero tu sabes que a veces soy tan distraída y torpe que paso algunas cosas por alto.

Doroty. (Alegre) de verdad candy de todo corazón te felicito, eso quiere decir que próximamente tendremos 2 bodas en puerta.

Llega la hora de la cena, a ambos lados de la Sra. Elroy están Albert y candy, la sabia mujer siente el amor en el aire a lo que dice.

Tía. Bueno me van a decir que es lo que les pasa a ustedes, porque tienen esas caras

Albert. Tía tengo algo que decirle, candy acepto ser mi novia, y esperamos casarnos pronto.

Tía. (Sorprendida grita) ¡Vaya al fin ¡ hasta que te decidiste pensé que nunca le confesarías lo que sientes.

Candy. Como dice tía

Tía. Mira hija ya estoy vieja y me doy cuenta de las cosas a mi alrededor, desde hace un tiempo soy testigo de su amor, aunque ninguno de los dos quería admitirlo. Soy muy feliz al saber que todos los seres a los que amo serán felices, espero que me den muchos nietos ya que me siento muy sola en esta enorme casa.

Candy (apenada) pero que cosas dice Tía,

Albert (serio) además es muy pronto para eso, no hemos fijado todavía la fecha de la boda, y creo que los primeros que van a darte nietos serán annie y archie, ya que ellos se casaran dentro de 6 meses.

Mientas tanto en el hogar de Pony un misterioso hombre se encuentra hablando con la Hna. María, el hombre le hacia una serie de preguntas sobre las niñas que había sido criadas hace casi 18 años, a las cuales solo dos niñas habían llegado al hogar por esas fechas y eran Annie y Candy. El hombre tenia cierto aire misterioso pero le inspiro confianza a la religiosa la cual respondía a todas las preguntas. Se despidió muy amablemente de la religiosa y en cuanto llego al pueblo más cercano se comunico con otra persona. Este hombre era un investigador privado que estaba en busca de una niña que había sido arrebatada de los brazos de su madre.

2 BUSCANDO LA VERDAD ENCUENTRO CON EL PASADO

América 18 años atrás

El Sr. Eduart C. Wilson Grant y su esposa Sandy Forbes de Wilson, regresaban de un viaje de negocios, una mañana a principios del invierno cuando el tren en el que viajaban fue asaltado, con ellos viajaban sus 2 hijos el pequeño Sean Alexander de 6 años y la pequeña Catherine Scarlett quienes estaban al cuidado de la Sra. Vivian Spencer su nana, esta adoraba a los pequeños, en especial a la bebe que le recordaba a su hija que había fallecido hacia algunos años, de grandes ojos verdes y mirada picara, cariñosamente apodada Cat, la niña era la luz de sus padres. Al momento del asalto la nana, abrazo a los niños, pero los delincuentes al ver que los pasajeros llevaban muchas cosas de valor comenzaron a disparar hiriendo a los padres de los niños, al verlos caer la Sra. Vivian a como pudo salio del tren y corrió con ambos niños en dirección a un bosque cercano pensando que la espesura de los árboles los protegería, pero mientras corría el pequeño Sean Alexander se soltó de su mano este al ver a los delincuentes que los seguían se subió a la cima de un árbol escondiéndose y espero hasta que llego la noche, pero el cansancio y el frió lo venció, regresando sin proponérselo al tren donde ya había médicos y enfermeras auxiliando a los heridos, alcanzo a ver a su padre que estaba siendo atendido, el señor Wilson estaba gravemente herido había perdido mucha sangre, cerca de su padre estaba su madre la cual solamente tenia un herida poco profunda en su hombro, pero estaba en shock por no saber de sus hijos, al ver Sean se tranquilizo un poco pero después de que el niño le contara que su hermana no estaba con el, la mujer se desmayo.

Ajena a lo que ocurría, Vivian corría con la niña, la cual comenzaba a llorar victima del hambre y del frió, los delincuentes imaginaron que la mujer corría por que llevaba las joyas de su señora, pero cuando la alcanzaron, solo vieron que tenia a la niña, y sin piedad golpearon a la mujer hasta dejarla inconsciente, el jefe de la banda propuso que dejaran a la niña junto al cuerpo de la mujer a la cual creían muerta, para que corriera con la misma suerte, pasaron los minutos, la niña no dejaba de llorar y poco a poco se fue quedando dormida. Un par de horas después la Sra. Vivian aun aturdida por los golpes logro levantarse, pero no encontró a la pequeña Cat, pensando lo peor se adentro mas en el bosque con el afán de buscarla, pero solo encontró una pequeña granja, donde solo pudieron ayudarla a limpiar sus heridas, victima del dolor y el frió Vivian cayo en un profundo sueño.

A la pequeña, se la había llevado uno de los delincuentes que volvió después de que sus compañeros abandonaron el lugar, ya que no tenia hijos pensó que la hermosa niña seria aceptada por su esposa Jean la cual al ver a la bebe tan linda la acepto gustosa.

Los pasajeros del tren eran trasladados a los hospitales más cercanos, el pequeño Sean en todo momento estaba al lado de sus padres pero no dejaba de pensar en su pequeña hermana, y a pesar de su corta edad se sentía responsable por si algo malo le pasaba, ya que le encantaba su papel de hermano mayor.

Pasaron tres días y el Sr. Wilson aun herido en el Hospital organizo una búsqueda para localizar a su hija, ya que su esposa había entrado en un profunda depresión por la ausencia de su bebe, pero solo hallaron a la pobre Sra. Spencer gravemente golpeada a la cual trasladaron al hospital para su pronta atención. Cuando tuvo las fuerzas para hablar les relato a los investigadores que cuando recobro el conocimiento la niña no estaba a su lado, y todo indicaba que los delincuentes se la habían llevado.

Jean empezó a sentir curiosidad, sobre como había llegado la bebe a manos de su esposo, a si que le pregunto directamente y grande fue su sorpresa al saber la verdad.

Pasaron varios días y una mañana unos hombres llegaron a la casa de la Sra. Jean. Preguntando si les podía regalar un poco de agua. Muy amablemente les dio a los hombres agua fresca, nunca imaginaron que en esa casa se encontraba la niña que tanto buscaban. El miedo se apodero de Jean, pensando que tal vez iría a la cárcel por tener a la bebe ideo un plan para desaparecerla, como su esposo tardaría días en regresar, tomo a la niña la puso en una canasta. Camino hasta una estación de tren compro un boleto hacia un rumbo desconocido y al bajar en la estación, una carreta paso y Jean pidió un aventón, dio las gracias al bajarse y camino hasta que comenzó a nevar, para protegerse del frió espero en una cabaña abandonada, hasta que amaneció, pero empezó una terrible tormenta mientras caminaba sin rumbo, hasta que se perdió poco a poco la desesperación se apodero de ella, la niña comenzaba a llorar debido al hambre y el frió a si que con dolor y lagrimas en los ojos la dejo en las faldas de un árbol que se encontraba cerca de una "iglesia" ( según vio ella, ya que no sabia leer una casa con una cruz alo alto). Se alejo rápidamente del lugar no sin antes darle la bendición a la niña. Al cabo de unos minutos dos niñas habían sido encontradas por unas bondadosas mujer, la Srita. Pony y la Hna. Maria.

Al volver a su casa Jean pensó en que decirle a su esposo acerca de la niña, ideo un plan que no le fallaría. Cuando llego su esposo le informo que la niña había muerto, a causa del frió, al oír esto su esposo respiro aliviado ya que le habían llegado informes que la policía buscaba a una niña que había sido plagiada el día del asalto al tren.

Victimas del pánico empacaron sus pocas pertenencias y abandonaron su pobre casa.

Pasaron las semanas, los Wilson habían salido del hospital, ni la policía, ni los detectives privados pudieron dar con el paradero de la pequeña Catherine. Así que solo el Sr. Eduart Wilson acepto con dolor que había perdido a su hija para siempre, menos su esposa y su hijo que nunca perdieron la esperanza.

La versión dada por la policía fue que a la niña la había sido vendida a los extranjeros, o que posiblemente los malhechores la habían asesinado y desaparecido el cadáver. Y que por esa razón nunca habían encontrado rastros de la pequeña. Convencidos con esta versión, los Wilson dejaron de buscar a la pequeña Catherine, solo Sandy Wilson rezaba todos los días por que su hija fuera feliz donde sea que estuviera y que en su camino encontrara a gente buena que la amara y la hiciera feliz. Sean Alexander al ver todos los días el dolor y sufrimiento de su madre, se juro a si mismo devolverle la felicidad.

Para olvidar la tragedia de su hija los Wilson se fueron al extranjero, quedarse en América era muy doloroso, corrían rumores de una gran recompensa a quien devolviera la niña, por temor a ser engañados y que les dieran un bebe que no fuera Catherine decidieron irse del país, la desaparición de su hija fue la muerte para la familia.

Con el paso de los años Sean se volvió un excelente hombre de negocios, alto de finas facciones y algunas pecas cubrían su rostro, de cabello castaño claro semi rizado parecido a su padre, serio e implacable para lo negocios, pero dulce tierno y alegre para sus padres, ya que en fondo sentía la necesidad de llenar el vacío que la pequeña Catherine había dejado en ellos.

Tras años de vivir en el extranjero el Sr. Wilson decidió volver a América, con el único propósito de encontrar a su hija, la cual ya seria una mujer. Así que contrato a un detective privado, con el propósito de localizar a su hija.

Para tal misión empleo a detective Charles Taylor al cual le habían recomendado ampliamente como el mejor en su trabajo. Tras meses de analizar los archivos de la jefatura de policía que cubrió el caso del robo al tren, y tras el relato hecho por la Sra. Vivian Spencer el detective Taylor encontró la casa en la que había habitado Sra. Jean, y según un testigo una día la vieron salir con un bebe de su casa, cosa que le extraño ya que ella no podía tener hijos, y que misteriosamente días después Jean y su marido desaparecieron de aquel lugar.

Con mucho trabajo Charles Taylor dio con el paradero de Jean, esta le había contado todo lo que había hecho muchos años atrás, estaba realmente arrepentida colaboro con el detective en todo lo que pidió con la condición de no ir a la cárcel. El detective acepto, ya que solo tenía que encontrar a la hora Srita. Wilson y devolverla a los brazos de sus padres. La Sra. Jean lo llevo a su antigua casa y le mostró paso a paso lo que hizo con la niña como no recordaba muy bien dónde estaba la iglesia le dio los datos al señor Taylor, le contó la mentira que la había dicho a su esposo y la forma de cómo salieron huyendo del lugar.

En sus manos Charles Taylor sostenía la fotografía de la hija de Eduart y Sandy Wilson. La joven era muy parecida a su madre. No había la menor duda Candice White era una Wilson.

Ahora que sabía quien era la persona que buscaba tenía que informarle a su jefe el Sr. Wilson ya que después de más de 2 años de búsqueda su trabajo había terminado, solo tenia que decir el nombre actual de la joven y quien la había adoptado, para que los Wilson la vieran por primera vez a Catherine.

3 EL PODEROSO LLAMADO DE LA SANGRE

El día de la fiesta en la mansión Andrew, la tía abuela, estaba tan ocupada con los sirvientes, diciéndoles donde iba la comida, la decoración etc.

Tía A. (diciéndoles a los sirvientes) hoy es una gran noche, tendremos invitados muy importantes y deseo que todo este perfecto, no admitiré errores de su parte, entendido.

- (Respondiendo todos a la vez) si sra. Elroy.

Mientras tanto en una de las habitaciones de la mansión el joven Archie, se paseaba nervioso.

Archie (pensando) hoy es el gran día después de años de noviazgo al fin el mundo sabrá que me voy a casar con la mujer que amo. Quien lo dijera, cuando acepte estar junto a Annie nunca pensé que llegaría a sentir este gran amor que siento.

De pronto Albert entra en la habitación, Archie brinca por el susto, por lo cual el joven rubio sonríe.

-. Perdón sobrino no quise asustarte, toque pero no contestaste, estas muy nervioso

- Estaba pensando, el tiempo pasó tan rápido, parece que fue ayer que Annie y yo decidimos casarnos, no tienes idea de cuanto la amo. Dijo Archie emocionado

-. Claro que te entiendo, recuerda que yo también amo locamente a una bella mujer, y quiero gritarle a todo el mundo que mi amor es plenamente correspondido.

-. Ahora me entiendes tío, deseo tener Annie junto a mi protegerla, amarla, las horas sin ella me parecen eternas, nunca pensé necesitar a una persona tanto como la necesito a ella.

-. Solo deseo que seas un buen marido y un gran padre para sus futuros hijos.

-. Y así será tío.

Mientras tanto en otra habitación, Candy y Annie estaban terminando de arreglarse.

Candy (subiendo el cierre de Annie) quédate quieta Annie o nunca cerrara este vestido

- Lo siento, es que estoy tan nerviosa, creo que fue mala idea tuya de que me vistiera aquí, siento que Archie me esta viendo y no puedo dejar de temblar.

- pero que dices Annie (Dijo Candy riendo) además evite que tu madre te vistiera a su manera, y además aquí puedes ver mejor lo que hace tu novio antes de la fiesta, no crees.

-. Tienes razón después de todo fue una excelente idea, y ahora que recuerdo, estoy molesta contigo por no haberme dicho lo tuyo con Albert, eres una mala amiga.-dijo la morena fingiendo molestia.

-. Perdóname, pasó todo tan rápido, estaba tan feliz, que solo deseaba estar junto al hombre que amo.

-. Te perdono, pero recuerda que yo seré la madrina de la boda.

-. Tendré 2 madrinas, Patty y tú.

-. Patty vendrá,- dijo emocionada la morena

-. Le mande un telegrama, avisando el día de la fiesta, pero desgraciadamente no pudo venir, ya que la abuela Martha se encuentra un poco mal de salud. Pero me mando sus felicitaciones, y te manda saludos.

-. Solo espero que la abuela Martha se recupere pronto para que ambas puedan venir a nuestras respectivas bodas. Pero dejemos de hablar y apresurémonos que ya es tarde y los invitados no tardan en llegar.

Terminaron de arreglarse y continuaron conversando sobre sus planes a futuro, mientras tanto los invitados comenzaban a llegar, tanto la Sra. Elroy, como Albert les daban la bienvenida. De pronto un joven alto, y muy serio llamo la atención de Albert le recordaba a alguien, el joven en cuestión venia acompañado con un hombre mayor al cual Albert conocía bien.

Harry. (Saludando) buenas noches Sr. Andrew, le presento al Sr. Sean Alexander. Wilson

Albert. (Estrechando la mano) es un placer Sr. Wilson, William Albert Andrew

Sean. (Tomando con fuerza la mano) mucho gusto Sr. Andrew, al fin nos conocemos, espero pronto hablar con usted de negocios.

- Cuando usted guste sr. Wilson, pero mientras eso pasa, adelante disfruten de la fiesta el baile esta por comenzar.

-. Gracias.

Ambos hombres se pierden entre los invitados. De pronto todos los presentes miran hacia las escaleras de donde 2 hermosas jóvenes vienen bajando. Annie, portando un vestido color vino que acentuaban sus curvas, estaba radiante inmensamente feliz. Candy portaba un vestido verde esmeralda que se pegaba a su cuerpo como una segunda piel, sus ojos brillaban como nunca lo habían hecho, llevaba un collar y aretes de brillantes regalo de la Sra. Elroy, guantes blancos acentuaban su vestimenta, el escote en su espalda estaba cubierto por su cabello, que solo 2 pequeños broches sujetaban.

Albert estaba sin habla al ver bajar lentamente a la mujer de sus sueños, que no se dio cuenta cuando alguien se adelanto a solicitarle el primer baile a la rubia.

El joven Wilson quedo muy impresionado con la rubia, algo en su interior le gritaba que estuviera cerca de ella, por lo que antes que nadie se adelanto a pedirle el primer baile.

- (Extendiendo su mano). Me concede el honor de este baile señorita-dijo el joven Wilson

Candy al ver al joven, quedo muy impresionada, era muy guapo y le inspiraba confianza sintió que lo conocía, por lo que no vio nada de malo de regalarle el primer baile. Además se vería muy descortés de su parte ya que se dio cuenta en la forma en los invitados la miraban.

Candy (tomando la mano del joven) encantada ¿Sr.?-dijo mirando sorprendida al joven

-. Sean Alexander Wilson Forbes, para servirla, Srita.

-. Candice White es un placer sr. Wilson

-. El placer es todo mió, es grato conocer a una mujer tan hermosa Srita. White

-. Gracias sr. Wilson

-. Por favor llámame Alex es mucho mas corto, me permitirá tutearla verdad.

-. Claro que si Alex, espero que seamos buenos amigos

-. Eso espero candy.

Continuaron hablando alegremente, sin sospechar que 2 pares de ojos los miraban con celos, uno de ellos era Albert, que estaba muerto de celos al ver la forma en la que su novia bailaba con ese desconocido, y fue en ese instante en el que una antipatía creció en el corazón de Albert hacia el apuesto joven.

Alex no entendía el por que se sentía tan bien en los brazos de aquella hermosa Joven, en su interior un sentimiento de querer proteger a la rubia crecía conforme bailaban, ninguna mujer le había inspirado ese sentimiento.

El otro par de ojos eran los de Neil, que vio en el desconocido un nuevo rival que vencer para ganarse el amor de la bella rubia.

Al terminar la pieza Albert se acercó rápidamente a Candy solicitando el siguiente baile. Wilson que era casi de la misma edad, se dio cuenta que el joven Andrew estaba celoso lo cual le extraño.

- Un placer bailar con usted Candy. La dejo en compañía de su primo.-dijo esperando ver la reacción de Albert

- Disculpe sr. Wilson pero candy no es mi prima, si no mi novia-dijo mirando fijamente a Alex mientras tomaba la mano de la joven

-. Perdone usted, sr. Andrew, no creí que- dijo sorprendido

El sr. Harris viendo la incomoda situación, fue en ayuda de su jefe, al cual con mucho tacto lo saco de la penosa situación en la que estaba.

Harris. Sr. Wilson venga por favor hay unas personas que me gustaría presentarle.

-. Bien Harris, con permiso Sr. Andrew, Candy- dijo agradeciendo en el fondo la intervención de su empleado

-. Espero volver a verlo pronto Alex.-dijo Candy amablemente

-. Y así será mi bella dama, a si será- dijo Sean Alexander antes de perderse entre los invitados

Se inicia de nuevo el baile, Albert lleva a Candy a al pista, pero la rubia nota extraño a su apuesto novio.

Candy. Pasa algo malo Albert

- no me pasa nada por que tú pregunta- dijo seriamente el rubio

-. No se te noto muy serio, estas enojado por algo dime, entre tú y yo no hay secretos.

-. Si estoy molesto, por que no me esperaste para iniciar los bailes juntos.-le reprocho

-. (Sonriendo) discúlpame, te busque con la mirada y no te vi, entonces Alex se me acerco y me pidió la pieza y no quise se grosera con uno de tus invitados.

-. Ahora lo tuteas, parece que te dejo muy impresionada- dijo sorprendido

- No es eso amor, solo que me inspiro mucha confianza, estas celoso.

Albert. (Serio) Claro que no estoy celoso, solo que no me parece que le demuestres tanta confianza a ese tipo a penas lo conoces.

-. SI esta celoso. No tienes por que estarlo, es que no te as dado cuenta que la única persona que amo eres tu.- dijo acariciando su mentón

- (Apenado) Discúlpame, pero estas tan hermosas que tengo celos de todos los que te miran.

Candy. (Sonrojada) gracias, me arregle solo para ti. Además la única mirada que me interesa es la tuya.

Continuaron bailando hasta que alguien solicito una pieza con la hermosa rubia.

- Tío me permites bailar con ella- dijo Neil amablemente

- Claro, si candy así lo desea- dijo Albert

-. No te molesta albert.- recalco Candy

- No pequeña, de paso atiendo a los invitados, los tengo muy abandonados por tu culpa

- Gracias tío (dijo Neil mientras comienza a bailar con la rubia) que hermosa luces esta noche, pero dime te noto diferente, te pasa algo, tienes un brillo muy especial en los ojos

- Neil soy tan feliz, estoy enamorada de un hombre maravilloso que ama tanto como yo a el.

- y quien es ese hombre, acaso ese doctor con el que siempre te veo cuando voy a buscarte al hospital, dime o es acaso Granchester has vuelto a verlo. -Dijo molesto Neil

-.John es solo un buen amigo al igual que tu.-dijo la rubia sorprendida- Hoy sabrás quien es el hombre dueño de mi corazón, y Terry solo es un bello recuerdo de mi pasado, no entiendo el por que tu pregunta.

-. Discúlpame, es que tú sabes lo que siento por ti y pensé que tal vez algún día podrías llegar a quererme.

- Pero Neil, ya habíamos hablado de que solo seriamos amigos, a pesar de todo lo malo que fuiste conmigo, reconozco que as cambiado y eres un ser humano maravilloso, pero no soy mujer para ti.

-Perdóname candy, tienes razón solo somos amigos, y como tal te deseo que seas muy feliz con el hombre que as elegido, y cuando me vas a presentar a ese afortunado dueño de tu corazón.

-. Esta noche lo sabrás, anunciara nuestro compromiso esperamos casarnos pronto.

Mientras los invitados bailaban alegremente, Alex observaba los movimientos de la joven rubia, no entendía por que no podía quitarle los ojos de encima, por primera vez una mujer le llamaba poderosamente la atención, mientras al otro lado del salón, Albert observaba como el joven Wilson miraba a su prometida, la cual era el centro de atención de todas las miradas masculinas. El sr. Harris se dio cuenta de la situación y le dijo a su jefe que no era correcto la forma en la que estaba actuando que nunca lo había visto comportarse así.

-Señor, perdóneme el atrevimiento pero si sigue viendo a la Srita. Candy de esa manera tendremos problemas con su familia, varios invitados cometan su forma de verla.

-. No me importa lo que la gente piensa de mí, además no soy el único que la mira, no puedo creer que alguien como ella se vaya a casar con William.

- Según se, ellos se conocen muy bien, el sr. Andrew era el tutor de la Srita. Candice, el esta muy orgulloso de ella, estudio enfermería a pesar de la oposición de su familia, trabaja en el Hospital Santa Juana, como asistente quirúrgico.

- Esa joven es una verdadera caja de sorpresas, ¿William fue su tutor?, el me dijo que era su prometida.

-. (Harris -Sorprendido) pues es una nueva noticia, jamás pensé que ellos, (pensativo) aunque ahora que lo comenta, la mayoría del tiempo se les veía junto, cenando o en alguna fiesta. Además el Sr. Andrew nunca se le ha visto con otra joven que no sea la Srita. Candice. Eso lo explica todo.

Pasaron los minutos y Albert solicito a los invitados un minuto de silencio.

Albert. Antes que nada, les agradezco a todos ustedes su presencia, el motivo de esta fiesta es para anunciar formalmente el compromiso matrimonial de mi sobrino Archibal Corwell Andrew con la hermosa Srita. Annie Briter, la boda se llevara acabo dentro de 5 meses.

Se escucha aplausos y felicitaciones para la joven pareja. Annie esta mas roja que un tomate, decía una mujer de mediana edad, otra comentaba, se lleva a uno de los solteros mas cotizados del país. Las menos atrevidas comentaban la suerte de la chica. La Sra. Briter estaba que no cabía de la felicidad, su única hija se casaría, el Sr. Briter solo abrazo a su hija y le dio unas palmadas en la espalda a su futuro yerno, el cual estaba radiante de felicidad.

Sr. Briter. (Diciéndole a Archie) te llevas una gran mujer, solo te digo que la cuides, la protejas, ella es mi más grande tesoro.

- Lo se señor, pondré todo de mi parte para hacerla inmensamente feliz.

Sr. Briter. Eso espero, por que si no te las veras conmigo.

Annie. (Acercándose a ellos) papa, archie, que tanto hablan

-. Nada mi amor, es solo que tu papa esta preocupado por nuestro futuro

-. No tienes nada de que preocuparte, Archie es el hombre que amo y seremos muy felices juntos

-. Lo se hija, pero como padre no dejo de preocuparme por tu futuro.

Sra. Briter (que había escuchado todo) no te preocupes querido, ellos tendrán que aprender solos a llevar su futuro matrimonio, además ellos se aman y eso es lo que realmente importa.

Albert. Felicidades a los 2, espero que esta felicidad le dure para toda la vida.

Archie. Gracias tío, yo también te deseo lo mismo.

Annie. Y cuando anunciaran su compromiso

Albert. Dentro de unos minutos, no quiero arruinar su momento de felicidad.

En ese momento se acerca Candy en compañía de Neil.

- Felicidades primo te llevas a una gran mujer.

-. Gracias Neil, espero que tu algún día encuentres la felicidad.

-eso espero, pero que esperan que no empezar a bailar para celebrar este hermoso acontecimiento. Annie te ves hermosa, primo te llevas un tesoro.

-. Gracias Neil, tu como siempre todo un caballero-dijo Annie apenada

Comienza de nuevo la música, Albert, y candy se dirigen a la pista seguidos de Annie y Archie. Y Neil se queda a conversar con algunos hombres de negocios. Bailan tanto que el tiempo pasa rápido, cuando Albert recuerda que tiene otro anuncio que hacer, le dirige su mirada hacia la Sra. Elroy que estaba muy ocupada atendiendo a todos los invitados, al ver a Albert, se disculpa de las personas con las cuales hablaba y se dirige en dirección a su sobrino nieto favorito.

Tía e. (dirigiéndose a los invitados) señoras y señores un momento de su atención por favor, es un honor y placer anunciarle a todos los aquí presentes, que mi nieto William Albert Andrew, se a comprometido en matrimonio con la Srita. Candice White. Mi protegida, estoy más que feliz, ya que 2 miembros importantes de la familia se casaran muy pronto.

Los reporteros comienzan toman sus fotos, ya que será el chisme del año dos de los solteros mas cotizados del país, se casarían pronto.

La noche pasa muy rápido y poco a poco los invitados se marchaban de una de las mejores fiestas del año. Pero Alex deseaba despedirse de una rubia que lo tenia muy impresionado, pero accidentalmente se tropezó con Neil legan

Sean. Discúlpeme venia distraído

Neil. No hay problema, de seguro buscaba a una hermosa dama verdad

-.claro como adivino (SORPRENDIDO)

-. Por que esa cara pongo yo cuando busco a la mujer que me trae loco. Dijo Neil sonriendo

-. Perdón no me e presentado Sean Alexander Wilson, un placer. (Extendiendo su mano)

-. Mucho gusto, Neil Legan Andrew (dándole su mano) y disculpa mi pregunta buscas a tu novia o esposa.

-. Busco a una bella rubia, su nombre es Candice White,

-. Mi prima Candy, bueno Sean y donde la conociste

-. La conocí en esta fiesta, y para serte sincero me dejo muy impresionado, lastima que ya se haya comprometido con tu tío.

-. Fue una sorpresa para todos, hasta para mí- dijo Neil sinceramente

- acaso no sabias nada de su compromiso- dijo Alex sorprendido

- No, tanto Candy como Albert son dos personas libres e independientes que no tienen por que darle explicación a nadie, además siempre estaban juntos eran confidentes y grandes amigos desde hace mucho tiempo era lógico que entre ellos surgiera el amor.

- Si tu lo dices, bueno Neil, un placer conocerte, espero volver a verte no tengo conocidos en la ciudad y me gustaría que fueras mi amigo.

- Claro, cuando quieras puedes venir a una de nuestras oficinas del consorcio Legan & Legan yo soy el director general y con mucho gusto te atenderé

-. Gracias Neil, lo tendré en cuenta. Tendré que irme sin despedirme de tu prima. Nos veremos muy pronto, ya que mi compañía invertirá en el consorcio de tu familia. Que tengas una excelente noche (alejándose)

- Igualmente, espero saludarte muy pronto

El hombre se aleja, ya que en la puerta lo espera Harris con el coche listo para salir. A los pocos minutos de irse, candy y albert se acercan a Neil.

-. Sobrino por que tan solo, no te vi bailar, ni socializar con nadie

Neil. De hecho acabo de hacer un amigo creo que lo conoces se llama Sean Alexander Wilson, por lo que me comento ara negocios con los Andrew, me cayo muy bien, y parece que le impresiono nuestra querida Candy.

- Si lo se, me di cuenta cuando se apresuro antes que nadie para sacarla a bailar.

- Pero ya te dije amor, que solo acepte bailar con el por que era uno de tus invitados y no quise ser grosera, y no tienes que estar celoso.

- No estoy celoso, es solo que pensé que mi novia me concedería el honor de bailar la primera pieza con ella.

- Veo que van a comenzar a pelear, mejor me voy los pleitos de enamorados no son buenos para mi autoestima. Mejor me hubiera quedado en la casa a seguir pelando con Elisa.

- No lo tomes en serio solo estamos jugando verdad Albert. (Jalando el brazo de Albert)

-. Claro que si, es broma sobrino, pero por que no vino tu bella hermana

-. Como si no la conocieras tío, la envidia y los celos la matan, además es mejor así no me hubiera gustado que les arruinara la noche a ustedes. Además como mis padres ya escogieron a su futuro esposo esta de pésimo humor. Pero por lo que se es un buen hombre algo mayor que ella pero mi hermanita no se merece más.

- No hables así Neil, a pesar de todo el mal que a hecho, Elisa tiene derecho a ser feliz.-dijo Candy

-. Candy tiene razón, ojala y ese hombre la haga feliz.

- Lo siento por el que no sabe en lo que se esta metiendo. Ja ja ja ja, me despido, buenas noches, me despiden de la Tía, después del anuncio del compromiso no la volvía ver. Por cierto candy me las debes, no me dijiste nada de tu compromiso y eso que somos amigos.

- Perdona Neil, pero lo tenía tan en secreto que ni Albert sabia lo que sentía mi corazón.

-. Es verdad sobrino, ambos fuimos unos ciegos, pero a Dios gracias que se cayo la venda de los ojos y podemos decirle al mundo lo mucho que nos queremos.

- Esta bien los perdono, me retiro hasta pronto, buenas noches.

Se aleja de la feliz pareja, y a la vez pensaba, la cara que pondrá Elisa cuando sepa que el tío se va a casar con Candy, me voy a divertir horrores al verla rabiar, pero me siento muy mal ya que acabo de perder a la mujer que amo, seré feliz al verla a ella feliz, solo espero que el tío Albert la haga feliz, si no se las vera conmigo.

La casa esta casi vacía es de madrugada, solo los sirvientes se encuentran haciendo labores de limpieza. Archie fue a dejar a Annie a su casa, ya que sus padres se habían retirado y el chico se ofreció a llevar a su novia a su casa. Mientras tanto en los jardines de la mansión Andrew una pareja de rubios estaba sentados en una de la bancas cerca de un hermoso rosal.

- (Abrazando a la rubia) soy tan feliz, ni en mis sueños más locos imagine el tenerte en mis brazos, nunca pensé que llegaras a amarme.

- (Abrazándolo) te amo Albert, nunca había sentido esto por nadie.

-. (Pensativo) Ni siquiera por Terry.

-. Es algo diferente, el fue mi amor de adolescencia, algo que pertenece al pasado, pero lo tuyo es diferente tu eres mi presente y próximo futuro. Te amo tanto que ciento que mi corazón estallara en mil pedazos si no estas junto a mí.

-. En verdad me amas, por que yo siento lo mismo. Y me dolería que confundieras lo que sientes por mí, fui testigo de tu sufrimiento por Terry y se lo mucho que lo amaste.

-. Si lo se, pero eso es algo que pertenece al pasado, el eligió su camino y yo tuve que aceptar su decisión, y fue lo mejor para todos, solo espero que el sea feliz, tal y como yo lo soy ahora.

Los dos se fundieron en un tierno beso, para Albert era la culminación de uno de sus mas grandes sueños. Para ella era el inicio de una nueva vida, al fin se sentía en un lugar al que podía llamar hogar, y ese lugar eran los brazos fuertes y amorosos de Albert. El fue el primero en separarse de ella.

- Gracias Albert.

-. Gracias de que

-. Gracias por quererme, por estar conmigo,

-. Yo puedo decirte lo mismo, mi princesa.

Volvieron a besarse, pero este beso era diferente, mas apasionado, el exploraba su boca, lentamente, provocando en ella sensaciones que jamás había sentido, el estaba en éxtasis, tener en sus brazos a la mujer que mas deseaba era una verdadera tortura. Así que poco a poco se fue separando de ella. Candy deseaba seguir sintiendo los labios de Albert sobre los suyos, y no entendía el por que se alejo de ella.

Aturdida, La joven se fue hacia la casa, había sido la noche más feliz de toda su vida, llego a su habitación y estaba tan emocionada que no podía conciliar el sueño. Mientras tanto en el jardín un joven rubio no cabía de la felicidad, aquella también había sido una de las noches más felices de su vida. Y paso un rato contemplando las estrellas las cuales le parecieron más brillantes que antes. Después se fue a dormir.

Al día siguiente en todos lo periódicos en la primera página anunciaba el compromiso matrimonial del joven Archibal Corwell Andrew y la Srita. Annie Briter en una fotografía aparecían ambos jóvenes abrazados, dentro de5 meses se llevaría acabo la boda en los jardines de la mansión Andrew a lo cual asistiría toda la crema y nata de la sociedad del país. Un poco mas abajo estaba otra fotografía del Sr. William Andrew junto a su prometida la Srita. Candice White anunciando sorpresivamente su compromiso con la bella rubia, el estaba serio pero se le notaba una dulzura en sus ojos, ella esta realmente hermosa y radiante.

NOTA. Hola es mi primer fic, espero y les guste. Doy las gracias a la WarriorQueenFC, por su paciencia y explicarme como subir el capitulo. Y Calemon por ser una fuente de mi inspiración.

Se reciben criticas constructivas y destructivas.