-Jacob POV-

Observé a Billy antes de encender el auto.

— ¿Es seguro ir con ellos?

— Si, ya es necesario empezar a buscar por otros medios.

Este observaba al frente sumido en sus pensamientos.

Estacioné el auto frente a la gran casa de cristal observando la inmensidad que estaba frente a nosotros, la casa de los Cullen.

Cerré la puerta, caminé rodeando el frente del auto para llegar a Billy y ayudarle a bajar, lo coloqué sobre la silla y empujé hasta la pequeña rampa subiendo hasta la entrada, donde el pálido y rubio que nos habíamos encontrado en mi casa nos esperaba. El Dr. Cullen.

— Billy, Jacob bienvenidos. — le saludó a Billy extendiéndole la mano. — Pasen por favor. No son los primeros en llegar.

Señaló los autos de los mayores de la reserva: Quil Ateara y Harry Clearwater. Traté de no reírme al ver como llevaban en la parte trasera de sus autos sus herramientas para cazar y pescar. Billy me volteó a ver, su mirada me ahorró la futura reprimenda y volví a la seriedad.

A los minutos llegaron el resto, agitados. Seguramente llegaron corriendo en su versión lobuna. Se les notaba la incomodidad.

— ¿Y Sam? — pregunté.

— Aún sigue buscando. — balbuceó Paul mientras tomaba asiento. — Tal vez llegue, pero no promete nada.

Al igual que los demás, no dejaba de observar a distintos puntos de la gran habitación blanca. Carlisle entró a la habitación acompañado de una joven que cargaba una modesta charola de aperitivos, los dejó sobre la mesa del centro. Paul ya estaba dispuesto a agarrar un par cuando Jared lo detuvo pidiéndole que esperara.

— Les agradezco a todos por venir, como acordamos anteriormente este espacio será un espacio neutro cuando necesitemos hacer estas reuniones, pueden estar tranquilos. — Una pareja más entró a la habitación, manteniéndose al margen en la pared más lejana, una rubia y uno de complexión ancha que nos analizaba — Mi familia y yo podemos asegurarles que cumpliremos con nuestra parte del acuerdo.

— Nosotros también. — respondió Billy observando a Paul, advirtiéndole al más temperamental de la manada que tendría que comportarse. Este asintió.

— De acuerdo. Es momento de hablar del tema principal de todo esto — Tomó asiento frente a nosotros — La principal potente amenaza para Forks. Jasper Whitlock.

"El policía" dijo Jared por la línea de comunicación, le observé al igual que Paul.

"Cuando vea a ese hijo de..." Paul se detuvo cuando Harry tomó la palabra.

— Lo siento, pero debo preguntarlo. — aclaró su garganta — ¿Estuvo en la casa de los Swan aquella noche? La noche del incidente.

El doctor Cullen aclaró su garganta, podía jurar que se debatía sin debía contarlo o no. Pero como Billy me había dicho la noche anterior: Ambas partes habían acordado hablar con la verdad.

La joven, su pareja le tomó la mano, alentándolo.

— Si, él me llamó.

— ¿Por qué? — preguntó el viejo Quil. — ¿Acaso fuiste su cómplice o lo estabas encubriendo? ¿es parte de ustedes?

La tensión en la sala creció. Podía sentir como Paul trataba de calmar su temperamento.

"Si admite haberlo ayudado le quebraré esa cabeza".

"Paul" Lo regañó Jared.

"Tal vez él estuvo involucrado también en lo de Emily".

— Es... es complicado. — comenzó — Jasper perteneció un tiempo a nuestra familia, mucho tiempo atrás, incluso algunos de ustedes ni siquiera habían nacido. — se removió incómodo — Nuestro principal alimento no incluye el consumo de sangre humana y a él le costaba adaptarse a nuestra dieta "vegetariana".

— Nos consideramos vegetarianos — su pareja sonrió, transmitiendo una calidez que hasta a Paul le sorprendió. — No nos gusta lastimar a personas para subsistir.

— Jasper tiene lo que llamamos entre nosotros una "habilidad" de manipular las emociones de las personas. — intervino el otro Cullen, la pareja de la rubia. — Pero también pueden afectarle a él.

— ¿Habilidades? ¿manipular emociones? ¿qué ahora tienen superpoderes? — preguntó Paul. La tensión entre ambos. — ¿A qué nos estamos enfrentando?

Carlisle intervino.

— Lo que Emmett está tratando de decir es que, algunos, de hecho, son muy extraño, no todos tienen un don o habilidad lo cuál en casos como éste se usan para obrar mal. Creemos que este caos que está desatando en Forks también llega a afectarle tal vez en un menor nivel.

Otro Cullen entró a la habitación lanzándole unas llaves al que Carlisle había llamado Emmett. Las reconocí al instante, era el mismo llavero que Billy había llevado por años. Eran las llaves del auto de Bella.

— Está a salvo. — le dijo a Carlisle. Este asintió. — Jasper consume sangre humana, eso no es nada nuevo que ustedes no hayan asumido. La grave está en que él ha desarrollado una especie de trastorno masoquista. — Nos observó a cada uno, como si pudiera leernos — Además de consumir la sangre de sus víctimas, a él le gusta sentir también el sufrimiento de ellas. Dándoles pequeñas dosis de calma después de cada tortura probando los diferentes limites del umbral del dolor que tiene cada una, además de ser su alimento, claro. — murmuró como si no fuera nada alarmante. — Hasta que su cuerpo no soporta más y acaba con ellas.

Mi cabeza estallaba por el mundo de preguntas que a Jared y a Paul les pasaba por la mente. Hasta que Sam intervino en la línea de comunicación.

"Pregúntale como sabe eso".

"¿Por qué no vienes y se lo preguntas tú?" le respondió Paul, recibiendo una sarta de maldiciones y reprimendas que no pude evitar reírme en silencio junto con Jared.

— ¿Cómo sabes eso? — preguntó Paul finalmente.

— Pude leer sus pensamientos en el encuentro de hoy.

Los tres nos callamos.

"¿Puede leer la mente?"

"¿Nos está leyendo la mente ahorita mismo a nosotros?"

Los adultos no pudieron evitar maldecir.

— Emily, una de nosotros está desaparecida.

— Tenemos que encontrarla antes de que acabe con ella. — Paul palideció, lo detuve.

— Espera, dijiste encuentro de hoy. — dije cambiando mi postura a una más recta. — Las llaves, son de la hija de Charlie.

El pálido ve a Carlisle y este asiente.

— Hoy intentó llevársela como su siguiente víctima, a Bella Swan. — Sentí un escalofrío. — Pude ver un poco en su mente.

— ¿Por qué tras Bella? — lo interrumpí.

— Ella, en particular tiene una — tosió incómodo — esencia que volvería loco a cualquier vampiro que tuviera cerca.

No ocupaba admitirme que él también había tenido ese efecto, la culpa lo delataba.

— ¿Cómo supiste que iría tras ella?

— Uno de nosotros tuvo una visión sobre... sobre la decisión que había tomado.

"Un manipulador, un psíquico y un lector de mentes" balbuceó Paul "nos metieron en la cueva del lobo"

— ¿Por qué no intervinieron antes de llegar a esto? ¿Por qué no lo detuvieron antes?

— Las primeras veces. — Carlisle tomó la palabra. — Vino arrepentido, llorando por lo que habían sentido sus... sus víctimas, estaba asqueado de si mismo. Pensamos que se había redimido y bueno, nosotros siempre creemos en las segundas oportunidades. Hasta que comenzó a ausentarse y bueno, los periódicos comenzaron a hablar semanas después. Intentamos hablar con él, convencerlo de que dejara ese camino, pero fue Alice quién nos advirtió sobre las visiones que tenía de él. Y fue Edward —señaló al lector de mentes — quién nos confirmó que Jasper comenzaba a abrazar esa parte de él y que, aunque sentía la tortura en carne propia, comenzó a volverse adictivo de él.

— Como una descarga de adrenalina. — añadió Edward con la vista perdida.

— Una adicción que en nuestra familia no estamos dispuestos a aceptar, le pedimos que tomara su camino lejos de nuestros alrededores.

— Pareció tomarlo como un desafío. — murmuró Emmett.

— Entonces, la vez del incidente de la casa de los Swan... — murmuró Billy intentando atar los hilos. — ¿Fuiste porque...?

— Porque pensé que esta vez se había arrepentido. — confesó Carlisle — Y al ver que no había dañado a la hija de Charlie, que no había consumido su... su sangre, por lo menos no directamente de ella, pero sí de sus heridas y eso lo hizo descontrolarse como nunca antes. Pensé que finalmente había puesto un freno a todo esto cuando me llamó pidiendo ayuda, y asumí que algo había salido mal con su plan de irse de Forks. Por eso desapareció papeles de la investigación de Charlie, para alejar las pistas de él e irse.

— ¿Pero? — preguntó Billy.

— Pero el haber probado la sangre de la hija de Charlie lo hizo querer anclarse a Forks, por lo menos hasta que cerrara su etapa de crímenes en este pueblo con la cereza del pastel, con ella.

— Y ¿por qué no se llevó a Bella ese día? — pregunté. — Yo estuve ahí, él insistió en cuidarla.

— Bella para él es como el postre final, sabe que nada de lo que haya hecho hasta ahora se igualará a ese festín, está jugando al gato y al ratón.

Era demasiada información que procesar. Jared maldice asqueado.

— Pero Bella está bien, está aún aquí — interrumpió Jared — Volvamos a las desaparecidas ¿Su psíquica no puede ver donde está Emily? — preguntó mi compañero.

Rebuscó en su pantalón una imagen de ella, la del cartel de desaparecida.

— Alice. — llamó Emmett.

La más pequeña y delgada de los Cullen entró a la habitación, parecía una pequeña hada sacada de un cuento. Le acercan el papel de Jared y ella lo ve concentrada.

— ¿Qué fue lo que pensó ese chupasangre cuando interviniste por Bella? — La sola idea de mencionarlo hacia que me hirviera la sangre, y él lo supo.

— Él comienza ver a Bella como una presa que le está costando obtener. Dispara más su adrenalina y lo que haga con ella cuando finalmente la tenga lo hará disfrutarlo aún más que con cualquiera de sus víctimas. ¿Han tenido contacto previo con él?

Nos vemos entre los tres y es Paul quien decide tomar la palabra.

— Antes de que Emily desapareciera — se aclara la garganta — ayudábamos a Charlie con la búsqueda, Bella y Sam encontraron algo. Él intento acercarse a Bella, queriendo alejarla de nosotros. Sam se interpuso entre ellos. Emily es la pareja de Sam.

— Solo han hecho que su juego se convierta más entretenido, ahora solo esta jugando con todos ustedes.

Un sonido nos distrajo, Alice arrugó el papel y sus ojos se humedecieron. Sam iba entrando a la habitación. Edward observó a Alice.

— Sácala de aquí. — le pidió a la rubia. Esme las siguió.

— ¿Qué pasó? — pregunta viendo a las tres vampiras irse.

— Siéntate. — le indicó Paul.

— Todo lo que Jasper ha hecho antes no es nada. Esto apenas ha comenzado.

— ¿Qué harán? — preguntó Billy.

— Proteger a Bella y a cualquier posible víctima que se cruce en su camino.

— Es lo mínimo que podemos hacer por ustedes al haber intervenido en mi liberación. — respondió Carlisle — Es momento de decidir como actuaremos desde nuestros perspectivos territorios de acuerdo al tratado, antes de que esto escale a otro nivel.

Los primeros en irse fue la manada, Sam, Jared y Paul. Después le siguieron Harry y Quil diciéndole a Billy que lo esperarían en casa de Charlie para limar las asperezas y tener contacto cercano a él. Billy yo somos los últimos en salir de la casa Cullen.

— Debo ir por Bella antes de que salga del trabajo. — le murmura Edward a Carlisle tomando las llaves de su auto. Salió al mismo tiempo que nosotros.

Su presencia no era de mi agrado, al parecer era mutuo. La tregua estaba a punto de finalizar.

— ¿Qué fue lo que ella vio? — pregunté al vampiro — cuando Sam llegó.

— Jasper acaba de hacer su primer movimiento.

No entendí a que se refería.

— ¿Quién es el segundo al mando entre ustedes? — dudé si en responderle.

— Paul ¿por qué? — pregunté confundido.

— Dile que esté preparado para sustituir a Sam desde esta noche.

— ¿Por qué?

— Según la visión de Alice, esto podría destrozar a Sam.

Sentí que la sangre se me congelaba. No pasó ni un minuto cuando lo sentí, por la línea de comunicación entre la manada el sufrimiento de Sam, casi podía escuchar su grito desgarrador.

El vampiro ya iba hacia su auto, se detuvo y se giró hacia mí.

— Lo siento.