Proyecto 1: Erase una vez.

En un palacio lejano a todos y cerca a todos, cubierto en unos gases fluorescentes y opacos, una bella niña flotaba ya con su pequeña pijama puesta pero, sin tener sueño y abrazando un osito de peluche, andaba entre los oscuros pasillos cuya iluminación era de aquellas antorchas flamantes e incandescentes de prismáticos y nebulosas llamas que si bien, iluminaban muy poco, era suficiente para que aquella infante divisara un ramillo de luz anaranjada, proveniente del cuarto de sus padres quienes, seguramente, estarían aún despiertos.

Toc, Toc *

- Hmm? Quien es...?

- Papá - Hablo aquella pequeña niña de hebras blanquecinas, usando un mameluco blanco de mangas rosadas con capucha integrada y puesta, asomo su pequeña figura flotante, viendo a su padre quien, a diferencia de la madre que ya estaba durmiendo plácidamente en aquella cama matrimonial cuidadosamente tapada por las mantas, el señor de igual cabello blanquecino y usando una sencilla pijama de tonos azul profundo de adornos en plata como los botones, estaba sentado y leyendo un libro cuando levanto la vista y admiraba a su hija pequeña tras la suave luz de la lámpara - No tengo sueño... ¿Me cuentas un cuento~?

- Hmmm.. Ya veo... - Respondio el ser quien, Haciéndole un simple gesto de mano, dejo que su pequeña niña se sentara en su regazo para acomodarse en su brazo quien la envolvió y de su mano libre, un libro de aspecto tan antiguo y tan grueso, levitara a su altura luego de haber sido invocado de la biblioteca a su mano - Mi pequeña niña... ¿Sabes de donde se origina los signos Zodiacales...?

- ¿Hmm? - Mirando curiosa a su padre, ladeo leve la cabeza - ¿ No son aquellos guerreros que protegen a Athenea?

- No, ellos solo tomaron prestado el poder de sus mismos Signos.. - Fue su respuesta cuando le enseñó la portada del libro: En ella, manchas de lo que podría haber sido sangre, rastros de rasguños, zonas quemadas y pequeños motes de polvo estelar presentaban el título 'Proyecto 1: Zodiaco [Fallido]' - Hablo de las constelaciones que uno ve en la tierra durante las noches, en ciertas épocas del mes - Explico, a medida que abría el libro quien se posiciono en el capítulo 1 - Hubo un tiempo pasado... en el que no eran 12 signos, sino 13.. Y podías verlos a todos por todo el año sin problemas...

- ¡Oh! - Exclamó la niña sorprendida de oir eso.

- Esta historia... Con un final triste, dicta su primer capitulo...

En una época tan antigua cuyo tiempo aún era joven, una doncella nació entre los residuos del Big Bang. Aquella doncella, de gran inocencia e ingenuidad, veía tantas estrellas y no entendía que debía hacer.

Aquel creador admiraba a esa niña perdida sin saber que hacer, hasta que se le ocurrió lo siguiente

「Tu, ya se que trabajo darte: Te encargaras de administrar las estrellas. Tu crearas figuras que tendrán vida y archivaras la historia tras las mismas estrellas」

Sonaba complejo, ¿cierto? Eso mismo pensaba ella, pero con esfuerzo, logró crear sus primeras figuras hechas con las estrellas que el dragón Primigenio creaba siendo así su primer asistente.

「Aun no entiendo bien mi profesión.. Aunque el señor es muy amable, me siento... ¿Como se diría...? ¿Sola? Que extraña palabra...」

Sus manos, en suaves movimientos y, nublada en sus pensamientos, distraidamente comenzó a ordenar las estrellas de una forma que nadie más vería, que cuando terminó, solto un suspiro y una voz nueva, capto su atención...

「¿Qué es ese sonido tan deprimente que has soltado? ¡Levanta la cabeza, que pisas mi cola!」

Bajando su mirada, aquella doncella noto que efectivamente, le estaba pisando la cola a alguien pero... ¿Que hacia una cola en primer lugar..? Aun con esa duda, levantó su pie y admiro como aquella extremidad, de pelaje oscuro y punta negra se levantaba ante aquella figura que, hasta ese momento, ni se percato de su existencia.

No era tan alto, bueno, quizás un poco. De melena negra rebelde, ojos ámbar que despedía y exumaba respeto, de piel morena, cuerpo no torneado, pero tampoco era escuálido. Fornida y fuerte era la palabra correcta para aquel extraño cuerpo cuyas vestimentas solo eran unas túnicas blancas que habían aparecido para cubrir, lo cual, dificultaba más el saber que era precisamente. Al final, unas pequeñas orejas no humanas se asomaron en su melena.

「¿Qué tanto me ves? 」

「¿Qué eres...?」

「¿Es en serio? Recién acabo de nacer, ¿¡y lo primero que dices Qué que soy!? ¡Hija de...!」

- Que salvaje - Concluyó la pequeña, interrumpiendo sin querer la historia pero muy entretenida.

- ... Seh: Siempre detesto la inocencia de su madre.. A futuro entendería porque su desprecio.. - De ahi, prosiguió al pasar de página.

Siendo recibida por unos fuertes coscorrones que dieron aviso a su superior aquellos gritos y llantos en respuesta a, aquel dragón observo con incredulidad la majestuosa obra de arte que creo..

「... Ya veo...」

「Mi señora... Es cierto que le dio el don de crear figuras y estas tuvieran vida.. Pero es la primera vez que realmente da vida a una formación específica de estrellas: Todas las demás solo se mueven..」

「¿Qué acaso no es bueno siquiera?」

Aquel creador, empezando a entender que sucedía, se cruzo de brazos en lo que pensaba en una solución. Entre tanto, el ser de cuerpo insierto miraba todo a su alrededor con notoria confusión y curiosidad.

「Creo saber que hacer...」

「¿Qué se le ocurrió, Creador?」

「Gaia, hace poco, me presento un 'animal', dijo que su fuente de alimento sería la carne de otros animales, su imponencia radicaba en su melena.. Sería considerado para los animales como su 'Rey'... ¿Por qué no le ponemos un nombre a tu creación...? Tiene esa cola y esas orejas.. Su mirada pide a gritos que lo respeten.. Y su melena es tan abundante como la de aquel 'Rey'... Si, suena bien, pero no deseo copiar el nombre del animal... Si, ya lo tengo...」

「¿Ah?」

Estaba claro que en ese momento, ninguno entendía siquiera las palabras del creador. Así pues, ella procedió a dictar el nombre de la primera constelacion...

「Tu te llamaras Leo. Así como el León, tu representaras al Rey de los Animales, como el Rey de las futuras creaciones de tu creadora.. Te daré el poder planetario, Así como el León es llamativo y brilla como el sol, ese será tu poder: Tu serás el Astro Rey, tu liderarás y alimentaras de energía a tus semejantes y a tu alrededor. Leo, el sol será tu guía y también será la fuente de tu poder.. El fuego será tu firma, el poder será tu fuerza, tu controlarás y manipularas los lazos y tu veras que hacer con ese poder que te eh entregado.. Pero por favor, no armes escándalo.. A cambio de eso, tu forma estelar, será vista por todos en el cielo nocturno...」

- Leo, fue la primera constelacion en ser creada de forma accidental, aunque los humanos aún no saben y ni se deciden que constelacion nació primero, ella fue la primer Signo Zodiacal como los conocemos ahora... - Le explico ese punto a su hija quien había pegado un bostezo.

- Suena bien.. pero, ¿por qué todos hablan de Leo como si fuese un ser androgino? - Pregunto la infante con su mirada ahora somnolienta.

- Principalmente porque Leo siempre pudo agudizar y agrabar su voz sin problemas, aunado a eso, nunca se identifico como hombre y mujer.. Aunque quizás para alguien, Leo era bastante tierna... - Concluyó antes de generar un separador de lámina de cristal en donde se quedó y cerrarla cuando ve a su pequeña niña quedarse dormida plácidamente en sus brazos - que duermas bien, mi niña.. Que el Signo de Leo te ilumine entre tus sueños y disfrutes del sol placidamente...