Continuación de Un Fuerte de Almohadas

Un Traje A la Medida

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Estaba desayunando con su familia, tomó un sorbo de su bebida mientras veía a su padre leer el periódico, su madre había preparado una comida estupenda. Su hermano no le había hablado desde que pelearon y su hermana era la única que parecía estar fuera de lugar.

–¿Cómo va todo con la Señorita Elwes? – Preguntó su madre de forma cariñosa, en el transcurso de los años ella aún pudo verla en algunas ocasiones.

–Bien, mamá. Está un poco nerviosa porque Matt se va a casar.

–¿Matt se va a casar? ¡A mi no me invitó a la boda! –Reclamó James sintiéndose ofendido por el supuesto desplante.

–James, si estamos invitados a la boda. – Lily corrigió al mayor, parecía ser el único que no estaba enterado de dicho evento.

–¿Cómo que si? Apenas me estoy enterando de todo. – James seguía ofendido por ser el último en saber de dicho acontecimiento.

–Hay una tarjeta en la mesa, como sabrás es una invitación muggle así que no se iba a abrir como las invitaciones que hemos recibido. – Harry observó a su hijo mientras el seguía sin poder creer que si habían contado con él.

–Tenemos 5 pases para ir. –Albus dijo mientras seguía desayunando tranquilamente, aún no le había preguntado a Lottie que tipo de vestuario debía llevar.

–¿Eso quiere decir que no puedo llevar mi capa por ser una boda muggle?

Albus sentía que su hermano le estaba colmando la paciencia, a todo le estaba encontrando un pretexto, a este paso solo 4 de los Potter irán a la celebración.

–James te estás comportando como un niño chiquito. – Finalmente estalló contra su hermano, su familia lo observó al ver que le había hablado con dureza.

–¡Yo quiero llevar mi capa!

–Si la llevas los invitados creerán que estás loco, no es época de lluvias.

–¿Por qué tenías que fijarte en una muggle sin gracia? Podría hacerla volar con mi varita, te apuesto que gritaría asustada. – Se burló de Albus creyendo que no recibiría alguna respuesta, su hermano solía ignorarlo, incluso Scorpius lo hacía cuando los molestaba en Hogwarts.

Nunca esperó la reacción de Albus, el chico de ojos verdes sacó su varita, la colocó a la altura del cuello de James, el mayor por primera vez sintió temor de su hermano menor. Vio en sus ojos verdes una amenaza nada sutil.

–Atrévete a hechizarla y no voy a contenerme, no dejaré que le hagas daño.

–Albus Severus, James Sirius. ¡Ya basta! James discúlpate con tu hermano, Y tú Albus baja esa varita ahora mismo, o yo los hechizo a ambos. – Ginny regañó a sus dos hijos, ambos hermanos obedecieron a su madre en el acto.

–Lo siento Albus.

Albus no respondió decidió que lo mejor que podía hacer era marcharse, debía dar una vuelta, él no iba a disculparse, no cuando su hermano mayor había dicho que le haría algo a su prometida.

Su familia lo vio cerrar la puerta con sigilo. Lily fue la primera en hablar rompiendo el ambiente tenso.

–James, eres un tonto. Ya es la segunda vez que discutes con Al.

–Quizás suene infantil pero él no está siguiendo la tradición de los Potter.

–Ni la va a seguir, supéralo. – Lily solo quería que esa situación terminara James debía dejar de hacerle reproches a Albus por sus decisiones.

–Ven aquí muchacho, tenemos que hablar. – Harry tomó del hombro a James, quien no podía entender porque le había hecho daño a su hermano menor con sus palabras.

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Albus vio través de la vitrina la ropa que estaba puesta en los maniquí de la tienda, sabía que no podía ir vestido de cierta manera a la boda, era la primera vez que iría a una boda muggle, así que no sabía cómo celebraban ellos.

–¿Albus? – Escuchó que le llamaban, no esperaba verla en este lugar.

–¿Lottie?

–Veo que te gustan los trajes de la tienda.

–Pensaba en qué puedo llevar para la boda de Matt.

–Si gustas puedes entrar conmigo a la tienda, vengo a recoger dos vestidos, el de mi mamá y el mío. Quizás podríamos encontrarte un traje a la medida. ¿Es a la primera boda a la que vas?

–He ido a otras pero esta vez es diferente. – Reconoció sintiéndose nervioso, las boda mágicas incluían carpas si eran bodas sencillas o en mansiones si eran lujosas.

–Matt se va a casar por el civil. – Albus pudo notar que Lottie estaba sentimental en ese momento. – Mira lo calculé que este traje sería de tu talla: es pantalón, saco, camisa, corbata y zapatos. Pruébatelo, si no te gusta o no te queda buscaremos otras opciones.

Albus se probó las prendas, la verdad era que le gustaba el conjunto de ropa, su padre le había enseñado a utilizar tanto dinero muggle como dinero del mundo mágico así que no fue difícil para el comprarlo.

–El traje te ha quedado perfecto. – Lottie sonrió con dulzura mientras trataba de darle ánimos, colocó su mano sobre su hombro.

–Gracias, mi amor. – Albus sentía que ella sanaba su corazón con su sonrisa.

–¡Oye Al! ¿Quieres ir a la boda de mi Pequeñín conmigo? Sé que mamá les envío una invitación y 5 pases a la recepción del evento. Pero me gustaría que vinieras como mi acompañante. – Por fin había hecho la pregunta, solo sabía que habían dos posibilidades ir acompañada o ir sola.

–¿El Pequeñín?

–Bueno es que hace años yo molestaba a Matt por la diferencia de alturas como soy la mayor fui más alta que el durante varios años, solía molestarlo con ese apodo. Hasta que creció, me alcanzó y me dejó. Incluso tú eres más alto que yo. No le digas a mi hermano que te dije su apodo familiar.

–No te preocupes, mi amor. Iré contigo.

–Tù tampoco te preocupes, todo saldrá bien en la fiesta. No quedarás fuera de lugar, muchos no entenderán que puede pasar si sacas tú ramita.

–Es una varita en realidad. – Albus sonrió al ver que ella confundía los términos.

Los dos sonrieron porque al menos habían encontrado un traje que hacía sentir bien al chico de ojos verdes.