EL HOMBRE DEL MAÑANA

CAPÍTULO DOS: EL PROTECTOR DE LA HUMANIDAD PREVALECE

También moviéndose más rápidas que una bala, las noticias sobre un "ángel protector de azul y rojo" que ha ayudado y salvado a toda persona que estuviese en graves problemas tanto en Smallville como en los poblados cercanos recorrieron los rincones de esa zona de Kansas.

¿Quién era? ¿Qué es? ¿De dónde salió? ¿Por qué los ayudaba? Miles de preguntas como esas pasaban de boca en boca generando tanto sentimientos de admiración y alabanza, como de intriga, desconfianza y hasta temor.

Muchas de las personas ayudadas por Lincoln creen que efectivamente es una especie de entidad divina que el Cielo lo puso en la Tierra para protegerlos tanto de las garras de las diversas fuerzas del mal que hay, pero aquellos que no han sido tocados por su mano benevolente no lo veían con tan buenos ojos y cuestionaban lo que hacía y que quería en verdad alguien tan poderoso.

¿Limitarse únicamente a ayudar a las personas recibiendo únicamente un "gracias" como retribución? Eso era demasiado bueno para ser verdad.

-"Tal y como lo oyen, estimados espectadores. Ese vigilante invisible de nuevo hizo de las suyas al salvar a todo un rebaño de vacas de la inundación de la noche anterior. Observen este fugaz vídeo de los hechos"- de nuevo en la TV hablaron sobre el último Kryptoniano con vida.

Una grabación que no enfocaba bien lo que sucedía debido a los movimientos del camarógrafo mostró como un granjero trataba de guiar a su ganado por el cauce de un río mientras una violenta tormenta los golpeaba llenando de pánico a los pobres bovinos.

Lo peor era que una agresiva corriente de agua venía de río arriba, con la fuerza suficiente para ahogar a todos esos animales de granja y a su dueño que debido a lo fangoso del terreno no podía hacer que el caballo en el que está montado saliese para ponerse a salvo.

Y justo en ese momento, el vídeo mostró como Lincoln se acercó volando al lugar cargando una enorme roca que coló en la mitad del río generando un fuerte temblor. No se detuvo ahí, sino que usó Rayos Láser para crear una larga y profunda zanja.

Para que así, una vez que la fuerte corriente chocase contra esa piedra se desviase a la derecha no hiriendo al ranchero y a sus preciados animales que presenciaron todo eso atónitos al haber dado por hecho de que iban a morir en ese mismo instante.

La filmación terminó con la persona que gravaba acercándose corriendo hasta el albino mientras lo llamaba para preguntarle algo, pero él permaneció flotando en el aire un momento viéndolos para asegurarse de que todos estuviesen bien y sin mediar palabra alguna se retiró.

-"Con este tipo de acciones es obvio, para la mayoría de personas, que ese joven de pelo blanco con poderes increíbles está aquí para cuidarnos de toda amenaza. Pero hay varios que no están del todo seguros de sus intenciones"- el reportero se acercó a otro granjero -"¿Qué no le gustó del asombroso acto de ayer, señor?"

-"Pues que ese mocoso al haber desviado el rumbo de ese río, hizo que mis valiosos cultivos se ahogaran. ¡MIREN COMO QUEDARON MIS PATATAS!"- mostró en una cubeta los mencionados vegetales que ahora parecían unas esponjas.

-"Parece que no todo pueden ser flores para ese misterioso joven de pelo blanco. Porque al igual que este señor, muchos dicen que sus actos heroicos son contraproducentes al hacer más mal que bien debido a que los efectos colaterales que genera pueden ser de lo más devastadores. Como hace un mes cuando él supuestamente detuvo un tren de carga que casi cae por un barranco y sus vagones al dispersarse en diferentes direcciones…"

-Me sorprende lo ingratas que pueden ser algunas personas- Lynn apagó el televisor para no oír tanta cháchara y pestes sobre su hijo -¿No puede acaso ver el vaso medio lleno?

-No sé, papá. Creo que tiene algo de razón sobre lo que hice cuando detuve ese tren y causé que sus vagones se descarrilaran, ¿Qué habría pasado si por ese descuido mío alguien hubiese muerto o algo así?- a Kal-El le dio un escalofrío imaginarse a personas aplastadas por esos vagones.

-Todo el mundo tiene derecho a equivocarse, hijo, nadie es perfecto. Mientras que salves a las personas y evites calamidades que puedan costarle la vida a un sinnúmero de estas, entonces todo daño colateral puede ser perdonado- para Rita el fin justifica los medios y no quería que se desanimara o colgase la capa cuando apenas la está usando.

-Ojalá todos pensaran así, mamá. Intento ser lo más cuidadoso que puedo con mis actos, pero el tiempo que me tomaría asegurarme de que mis acciones no generen una reacción negativa, es un lapso en el que alguien en grave peligro necesite de mi ayuda y podría pasarle algo grave si no llego a tiempo para socorrerlo.

-No te acomplejes por eso, cielito. No eres omnipotente, ni omnisciente, ni omnipresente, por lo que no lo puedes lograr todo, y aun así, haces todo lo que puedes para salvar a los que estén en apuros. Es algo que esos ingratos deben aprender y tomar en cuenta cada vez que "sus patatas terminan ahogándose"- la rubia le tomó una mano para transmitirle confianza y seguridad.

-Si todas las personas fuesen así de comprensivas como tú, mamá… el mundo no me necesitaría. Ahora también debo pensar en cómo cambiar la opinión que me tienen aquellos que creen que tengo oscuras intenciones, ¿Creen que deba dejar que alguno de esos reporteros me haga una entrevista exclusiva en dónde explique de dónde soy?- le urgía bastante mejorar su imagen pública y que aquellos que lo aborrecen dejaran de hostigarlo.

-¿Con lo chupasangres que pueden ser varios de esos metiches? Sería casi como si le dieras el alma al Diablo por las miles de preguntas incómodas que te harían, en especial en dónde resides o vives cuando no estás usando los calzones por afuera- su padre no le tenía confianza a los diversos medios de comunicación.

No podía solamente limitarse a hacer buenas acciones esporádicas. Tal vez si hiciese algo digno de alabarse en frente de una enorme multitud conseguiría que tanto los ingratos como aquellos que no le tienen confianza vean que sus actos son puros y le nacen de corazón y que lo que menos desea es engendrar el miedo en ellos.

Requería nuevamente de su asesora personal en estos temas.

(…)

-Así que ya no quieres seguir bajando a gatitos atrapados en un árbol cuando nadie te ve y deseas ir a lo grande, ¿No?- inquirió Jordan cuando la volvió a visitar.

-Por así decirlo. Si deseo acabar con esas conjeturas entonces debo hacer algo realmente sobresaliente ante un gran número de espectadores, ante la prensa, con lo que les diga mediante esa acción que estoy para ayudar y no para causar problemas.

-¿Evitar que trenes caigan al abismo, desviar ríos descontrolados y girar como loco para detener a tornados no son cosas ya muy sobresalientes? ¿O acaso quieres que suceda algo mucho más loco como que un avión caiga y lo detengas en pleno abuelo aterrizándolo en medio de un estadio lleno de mil espectadores o que un peligroso meteorito venga a chocar contra la Tierra y lo destruyas antes de que nos pasé lo mismo que a esas lagartijas gigantes?- a ella le encantaba hacerle mofa de ese modo.

-No digas eso ni en broma, Jordan. Ni loco desearía que ocurriese alguna calamidad peor que las que he enfrentado hasta ahora, es solo que… yo… este…

Detuvo su explicación porque no sabía que era lo que en verdad deseaba para lograr su objetivo. Será un extraterrestre perteneciente a una raza muy diferente a la humana, pero al ser criado justamente por humanos, podía llegar a comportarse como cualquier otro adolescente de su edad y peca en no lograr pensar a futuro enfocándose únicamente en el ahora.

-En boca cerrada no entran moscas- siguió burlándose la castaña porque mantuvo entreabierta la boca al no encontrar las palabras adecuadas -la temporada de tornados aún no termina, así que tienes chance de que otro de esos vuelva a golpear a Smallville y una vez que pase podrás lucirte ante todos; solo ten cuidado de no derretir a nadie con el ácido corrosivo que tienes por vómito.

-Cualquier cosa menos otro tornado…- volvió a hacer una mueca de mareo -aunque también se me había ocurrido que le pidieses ayuda a tu papá- esto tomó la por sorpresa y preguntó a que se refería -él es amigo del dueño del noticiero, ¿Cierto? Tal vez puedas convencerlo para que les pida a sus reporteros que no alimenten las inseguridades de las personas.

-¿Quieres que los medios de comunicación hablen únicamente maravillas de ti y así generar la mejor de las impresiones en los espectadores? No sabía que tenías sangre de político corriendo por tus venas- por más que no le gustase esa comparación, Lincoln no era capaz de negar la gracia que eso le generaba por no distar mucho de la realidad.

-Veré que puedo hacer, aunque no puedo prometer nada. No te lo tomes a mal, Lincoln, pero mi papá pues… está entre la lista de personas que creen que eres un caos ambulante y tal vez solo avive el fuego de la desconfianza.

-Te lo agradeceré un montón si lo logras, Jordan- plantó un tierno beso en sus labios haciendo que desviase la mirada levemente sonrojada.

-Ahora si me disculpas…- él miró por la ventana del cuarto hacia la lejanía -debo detener a un par de toros que están causando miles de destrozos cerca de la tienda de vidrios y ya conoces el refrán de "Es como un toro en una cristalería"

-Solo que el doble de peligroso en este escenario- con esta tontería final, salió por esa ventana emprendiendo lentamente el vuelo al mismo tiempo que se abrió su camisa naranja revelando tener puesto por debajo el traje que Rita le confeccionó para de nuevo ayudar al inocente.

-Pero que cursi puede ser… por eso lo adoro- Jordan lo vio irse con ojos de enamorada al apoyar la cara en su mano derecha luego de recargar el codo contra el marco soltando un suspiro.

(…)

Días después, todo seguía con calma en Smalville y no volvió a pasar nada fuera de lo usual, al menos, nada del Otro Mundo para los adultos porque en la Secundaria se estaba llevando a cabo un Festival de Ciencias en dónde los alumnos querían destacarse al mostrar sus grandes inventos.

Pese a que la mayoría no hacía cosas más allá de los muy, MUY gastados volcanes en miniatura, poner a prueba la inteligencia de un hámster en un laberinto, algunos para nada sorprendentes aparatos electrónicos y robots caseros de mala calidad por decir unos cuantos ejemplos.

A Kal-El le daba mucha risa las cosas creadas por sus compañeros de estudio.

Tal vez nunca fue el chico más popular del instituto o el que más amigos haya tenido debido a que algunas veces podía llegar a comportarse de forma extraña en esas ocasiones cuando le costaba mantener bajo control sus poderes ganándose miradas y opiniones ofensivas, pero en verdad echará de menos a los jóvenes con los que creció cuando se gradúen el año que viene.

Porque con ellos ha aprendido varias cosas, los diversos comportamientos, deseos y necesidades que los humanos puedan poseer desde una edad tan temprana y que en la mayoría de los casos son lo que definirán el tipo de personas que serán en el futuro, tanto para bien como para mal.

-¿Y ese milagro de que esta vez no participarás en el festival? Habría estado genial que mostrases la nave espacial en la que llegaste aquí a la Tierra que me enseñaste esa vez- dejó de divagar cuando Jordan se paró a su derecha tomándole una mano.

-Creo que eso me daría una ventaja demasiado injusta sobre los demás, ¿No?- rieron cómplices -hace un año lo hubiese hecho, pero ahora que me he comprometido a ayudar a las personas, no me puedo distraer por banalidades y debo siempre estar al pendiente de cualquier calamidad.

-¿Cómo evitar que el volcán que creó Kevin nos calcine a todos?- señaló uno de esos volcanes falsos que debido a un pequeño fallo en sus ingredientes expulsó mucha espuma roja, tal y como si de un verdadero volcán en erupción se tratase, salpicando a todos los que estuvieron cerca.

Siguió riendo por eso y luego notó como miembros de la prensa local hacían reportajes sobre los "futuros genios de Smallville" preguntándose ahora si realmente sería buena idea hablar con alguno de ellos y le hagan una entrevista en vivo y en directo para así presentarse formalmente ante el mundo entero y no solo en el lugar que lo vio crecer.

Su indecisión fue interrumpida cuando sus oídos captaron algo. No eran maleantes haciendo de las suyas o animales fuera de control o algún vehículo en peligro de colisión, sino algo mucho más grave y que hizo latir con fuerza su noble corazón.

Con su aguda vista vio como nubes a lo lejos comenzaron a arremolinarse a la vez que el cielo se oscureció. Vivir tanto tiempo en Smallville le ha enseñado lo que eso significaba y todos los peligros que consigo.

Parece que ocurrirá justo lo que Jordan le sugirió para hacerse notar ante muchos espectadores.

-¿Qué pasa, Lincoln?- ella lo vio confundida por su repentino cambio de expresión.

-Un tornado… va a formarse otro tornado… no… ¡Varios tornados!- ella lo soltó y se llevó ambas manos a la boca para ahogar un gemido de sorpresa aterradora.

-Tengo que hacer algo rápido antes de que toquen tierra. Debo ir primero a la granja de mis padres para ponerlos a salvo y a nuestros animales y luego activar las alarmas de tornado para que todos en el pueblo se refugien y tú debes activar la de la escuela y que todos se pongan a salvo también- indicó mientras veía de un lado a otro para retroceder a la oscuridad de un árbol para que nadie lo viese abrirse la camisa y dejar de nuevo al descubierto la S en su pecho.

-¡Espera, Lincoln!- ella le sujetó el antebrazo derecho -¿Seguro de que podrás detener a tantos tornados? La última vez me dijiste que la cabeza te dio vueltas y vomitaste como loco- se arrepentía de las bromas que le hizo a costa de ese suceso.

-No te preocupes. Desarrollé un método para detenerlos sin que vuelva a girar como un trompo sin control, confía en mí- quiso calmarla al dedicarle la misma sonrisa esperanzadora que ha usado con todas las personas que ha ayudado antes -¡Deséame suerte!- sin más charlas se fue volando.

-Mucha suerte, Lincoln. Te… te cuidas mucho- no despegó su vista de él hasta que estuvo muy lejos y fue a activar la alarma de tornados.

Él hizo lo mismo al usar su increíble velocidad yendo a cada uno de los postes dispersos por todo Smallville para hacer sonar las potentes bocinas de alarma y así todas las personas supieran del grave peligro al que están expuestas.

Nadie comprendió que pasaba y los que estaban en sus casas o lugares de trabajo salieron preguntándose quién encendió ese coro mecanizado que en más de una ocasión les puso los pelos de punta, hasta que al ver en el horizonte notaron como los colosales vórtices de aire empezaron a tomar forma despejando cualquier duda o que alguien les quería hacer una broma pesada.

-¿Alarmas de tornados?- preguntó Lynn que junto a Rita le quitaban la lana a las ovejas.

-¡MAMÁ, PAPÁ!- casi se caen cuando Lincoln aterrizó sorpresivamente frente a ellos -¡Dejen lo que están haciendo y vayan al refugio! Varios torbellinos van a formarse y deben mantenerse a salvo.

Sus padres terrenales se vieron asustados y no desperdiciaron tiempo alguno. Tomaron a las ovejas, a las gallinas y los animales que podían cargar para llevarlos al mencionado refugio que era subterráneo y se hallaba debajo del gran cobertizo en dónde guardan las herramientas, maquinarias agrícolas y la nave espacial en la que el albino llegó a la Tierra.

Y que era lo suficientemente espacioso para que cupieran junto con todos sus animales, siendo lo más seguro que Lincoln lo construyó con sus propias manos y así tuviese la resistencia necesaria para soportar todo desastre ambiental casi pareciendo un búnker.

-Estas son las últimas vacas- con cuidado, dejó a los bovinos que cargó con cada brazo junto a las otras criaturas que hacían diferentes sonidos para manifestar su miedo.

-Debo detener a esos tornados. No habrán por nada del mundo la entrada hasta que vuelva.

-Entendido, hijo. Te cuidas mucho y si ves que la situación es imposible, no te arriesgues de más.

-Estaré bien, papá. No se preocupen- también les sonrió esperanzadoramente y se fue cerrando la pesada puerta de metal del refugio.

-Hijo…- Rita se llevó las manos al pecho viendo hacia arriba sintiendo la misma desesperación que cualquier otra madre tendría si sabe que su retoño hará algo potencialmente mortal y apoyó su espalda contra la nave espacial en la que lo encontró esa noche cuando su vida cambió.

Al estar afuera, Lincoln vio como las aspas del molino de viento giraban rápidamente en el sentido de las manecillas del reloj al igual que la veleta sobre el techo de su granja debido a las fuertes brisas que ya habían golpeado a la zona y que agitaban con fuerza su capa.

Con sus Rayos X miró cada esquina del territorio de sus padres corroborando que ninguno de sus animales haya quedado rezagado y volvió a irse porque no había alguno suelto por ahí.

-¡¿Todavía creen que estoy bromeando?! ¡VAYAN AL REFUGIO DE LA ESCUELA ANTES DE QUE SEA TARDE!- por su lado, Jordan tuvo muchas dificultades en convencer a las personas en la Feria de Ciencias para ponerse a salvo.

Solo cuando vieron las ya muy notables siluetas de tornados formándose fue que descubrieron que no era ninguna treta de su parte y presas de un pánico fueron corriendo al interior del instituto como un rebaño de bestias horrorizadas haciendo a un lado a todo lo que estuviese en el camino no importándoles dañar los para nada espectaculares inventos que habían y llegando al grado de que varios al caer eran pisoteados por los demás.

-¡¿Pero qué están haciendo, idiotas?!- impulsada por un deseo de ayudar al prójimo que ha aprendido por parte del peliblanco, socorrió a una de sus profesoras alzándola y que se apoyase en ella para ingresar a la Secundaria.

-¡TODOS RECOJAN SUS COSAS Y VÁMONOS!- escuchó a uno de los reporteros dándole a los miembros de su grupo noticiero la orden de huir en sus camionetas.

La expresión de molestia y desesperación de la castaña cambió a una sonrisa ansiosa al pensar en voz alta la expresión: "¡EUREKA!" porque esta es la oportunidad de oro que Lincoln ha esperado.

-¿En serio quieren irse con el rabo entre las patas? Que poco olfato para las noticias tienen, ¡Si justo se van cuando ese misterioso protector de cabello blanco va a venir a salvarnos!

-¿Cómo dices, niña? ¿Tú conoces a ese joven con poderes increíble?- preguntó ese reportero sujetándose su peluquín que por poco es arrastrado por los fuertes vientos.

-¡Claro que…! No. No lo conozco en persona- debió corregirse al casi decir algo comprometedor -pero apostaría mi trenza a que él aparecerá para de nuevo evitar otra calamidad, ¿Acaso no quieren ver como salva a toda la escuela de los tornados que están por golpearnos y tener una entrevista exclusiva con él?

Sabía que Lincoln volvería para asegurarse de que ella y los demás estuviesen bien, por lo que necesitaba que estos medios de comunicación, tanto los que han hablado maravillas de él como aquellos que solo han cultivado cizaña, estén aquí presentes y al ser salvados por sus manos dejen de lado sus prejuicios y lo expongan como realmente es.

(…)

Lincoln hubiera preferido volver a recorrer todas las esquinas de Smallville para corroborar que todos sus habitantes ya se ocultaron, pero decidió acabar de raíz con el problema al dirigirse a los tornados justo cuando estos ya tocaron el suelo y detenerlos antes de que llegasen a su hogar y demás pueblos cercanos

-¡Estos tornados son más poderosos que cualquiera que haya enfrentado antes! Es como si quisieran darlo todo en el último día de su temporada…- con dificultad se mantuvo levitando en el aire al estar relativamente cerca de uno de los torbellinos y luchando contra su fuerza de succión.

-Espero que este método que inventé funcione contra tornados de tal magnitud.

Descendió al suelo mientras era golpeado por los diversos objetos que volaban sin control por los aires y aterrizó en la ruta que creyó que el tornado iba a seguir.

Imposible le resultó no quedar intimidado por ver el fenómeno climatológico ir en dirección suya mientras arrancaba de raíz los árboles y demás vegetación y destruyendo las estructuras abandonadas que estuvieran en su camino mandando a volar en todas direcciones todo aquello que no estuviera firmemente sujeto al suelo.

Más que una representación de la furia de la Madre Naturaleza, era como un monstruo cuya única razón de existir era aniquilar todo a su paso, esparcir el caos sin contención alguna y sembrar el terror en aquellos que tengan la horrida desgracia de no lograr huir de sus garras.

-Muy bien… aquí voy- al usar sus Rayos X para verificar que ninguna persona o animal estuviera atrapado por esos violentos vientos, decidió actuar.

Pisó con fuerza incrustando los pies en el suelo para anclarse a sí mismo y no comenzar a girar sin control alguno una vez que el tornado llego hasta su posición.

La primera parte de su plan era dejar que el torbellino lo tragase por completo, cubriéndose la cara con los brazos para protegerse de las cosas que revoloteaban a su alrededor y que despedazarían a cualquier ser vivo, pudiendo mantenerse firma a duras penas en su sitio y que su capa al agitarse con violencia se alzara y le cubriese la cabeza.

Al levantar la mirada, notó que ya estaba justamente en el ojo del tornado, viendo la caída de rayos y truenos ensordecedores como los que habría en una noche de tormenta aun cuando en el extremo superior se podía ver el lejano cielo azul del día.

Era una imagen que ningún humano vería alguna vez en su vida y el sueño de esos Cazadores de Tornados que arriesgan tontamente el pellejo al perseguirlos, pero no había tiempo para admirar el para nada armonioso paisaje que ahora mismo lo rodeaba.

-Espero que funcione y nadie salga herido por lo que voy hacer.

Extendió hacia los lados sus brazos y cerró los ojos respirando profundamente antes de ver nuevamente el extremo superior del torbellino.

-¡IIIAAAHHH!- soltó un profundo rugido de esfuerzo.

Cuando junto las manos por encima de su cabeza con tanta fuerza que creó un Súper Aplauso generando una onda expansiva tan poderosa que mitigó las violentas brisas del torbellino desapareciéndolo por completo tal y como si una bomba hubiese estallado en su interior y que todos los objetos que antes giraban sin control por los aires cayesen.

-Gracias a Dios que esto funcionó- sonrió complacido al sacudirse las manos y ver como el cielo sobre su posición fue totalmente despejado -también debo agradecerle a mamá por haber hecho el traje de la misma tela de la ropa con el que llegué a la Tierra que es súper resistente, porque de lo contrario, ahora mismo estaría todo des…

Detuvo sus reflexiones fuera de lugar y tontas al recordar que aún quedaban varios torbellinos por detener, y que en el lapso de tiempo que le tomó dispersar el que acaba de dispersar, ya se habían acercado peligrosamente a Smallville y otros poblados.

-Espero que Jordan y todos en la escuela hayan logrado refugiarse- volvió a ponerse en marcha.

Iba a repetir esa táctica, pero al acercarse a otro tornado vio con horror como animales y personas dentro de vehículos eran arrastradas por los poderosos vientos sin tener manera de detenerse.

Debían ponerlos a salvo antes de volver a dedicar otro poderoso aplauso.

-¡Te tengo, vaquita!- tomó a una vaca voladora que había estado mugiendo y moviendo las patas desesperadamente -¡¿Tiene licencia para volar?!- ahora sujetó un camión en cuyo interior se hallaba un aterrorizado conductor.

A toda persona y animal que se encontrase volando sin control alguno la llevaba a la seguridad que ofrecían los puentes, en las zonas inferiores de estos debido a la gran resistencia que esas estructuras ofrecían, pero era imposible que todos estuviesen ilesos y aquellos que hayan resultado heridos los trasladaba hacia el hospital lo más rápido posible.

Porque en efecto, cada segundo que se tomase para ayudar en mayor profundidad a las personas que socorría era un segundo en el que otra persona necesitaba su ayuda con urgencia.

-"¿En dónde estás, Lincoln? ¡¿EN DÓNDE ESTÁS?!"- decía una y otra vez Jordan en su mente.

Junto con las demás personas de la Feria de Ciencias, estaba en los sótanos de la Secundaria y a través de una grieta en la pared veía como uno de los torbellinos seguía su destructiva marcha acercándose más y más a su posición.

(…)

-¡FUAH!- repitiendo el procedimiento, Kal-El volvió a disipar otro tornado que estuvo a punto de ingresar a uno de los pueblos vecinos de su hogar.

-Oh, cielos… ¿Cuántos quedan?- físicamente no estará gastado, pero frenar esos desastres ambientales de seguido a la vez que pone a salvo a todo inocente que esté en peligro es algo que a nivel mental lo agobia de sobremanera.

No basta con fuerza bruta e increíbles habilidades sobrehumanas para ayudar a las personas, sino también de una determinación y voluntad de acero para no flaquear en su misión autoimpuesta debido a las diferentes situaciones a las que se expone y que acabarían con la cordura de cualquier humano normal.

Con su aguda visión miró en todas direcciones percatándose de que aún hay dos torbellinos que circulaban en los terrenos aledaños a Smallville.

Abriendo con enorme terror los ojos porque uno de ellos iba justamente a la escuela estando prácticamente a tiro de piedra de distancia.

-Jordan… todos… ¡NO!

Dejando a un lado la sutileza de verificar de que no hubieran heridos a sus alrededores, voló a toda marcha hacia el torbellino creando un sonido de impacto parecido al que generaría un avión Jet de guerra al alcanzar su máxima velocidad.

-¡POR FAVOR, QUE LA ESCUELA RESISTA!- gritó una maestra cuando el tornado llegó hasta ellos.

Primero fueron los vehículos parqueados en la cercanía en ser alzados como meras latas de gaseosa y volar sin control alguno, luego la vegetación que no tenía la fuerza para resistir las poderosas brisas y por últimos los nada asombros inventos que hicieron los estudiantes dispersándose en todas direcciones.

El instituto no tuvo mucha mejor suerte porque si bien no se desbarató enseguida como lo han hecho casas y estructuras hechas de madera, también empezó a despedazarse iniciando primero las ventanas que al estallar dejaron que esa poderosa corriente ingresara y generase destrozos en cada una de las aulas.

Todo empezó a temblar porque el techo lentamente se hacía añicos hasta ser arrancado por completo para que miles de papeles y pupitres fuesen arrastrados con el viento uniéndose a todos los otros objetos jalados por el ventarrón.

Suceso que se sintió por todas las personas en los sótanos porque los pisos superiores colapsaban y generaban violentos temblores al caer desquebrajando al suelo de tal forma que dio vistazo a cada uno de ellos quedando prácticamente al descubierto no habiendo nada que los proteja de la poderosa succión del tornado y comenzaron a gritar sujetándose de dónde podían.

-¡LINCOLN!- Jordan también tuvo que agarrarse a una viga cuando fue atraída hacia arriba quedando sus piernas suspendidas y que sus lágrimas fuesen rápidamente jaladas de su cara.

El mencionado llegó justo a tiempo. Miró impotente como el instituto se despedazaba y como los que ahí están corrían el peligro mortal de ser succionados por la fuerza de los vientos, incluyendo la chica que lo ama y acepta tal y como es sin importar que no sea un ser humano.

Actuó sin pensar siendo guiado por el impulso de proteger a alguien a quién aprecia mucho.

Porque al no haber tiempo de incrustar los pies en el piso, se metió de lleno en el tornado y giró sin control tal y como les sucedía a todos los objetos que revoloteaban a su alrededor.

Hasta que rugió del esfuerzo y con dificultad se pudo mantener firme en medio del tornado frotándose las sienes debido al mareo que le dio haber dado vueltas de esa manera.

-¡Debo detener esta monstruosidad ya!- respiro profundamente y nuevamente chocó las palmas de sus manos generando otra poderosa onda expansiva.

Pudo mitigar el torbellino como a los anteriores, eso no fue el problema, el verdadero problema radica en que al haber hecho eso cerca de la Secundaria fue casi el equivalente de detonar un fuerte explosivo que la dañó más de lo que ya estaba.

Y que todos los objetos arrastrados por el torbellino ya no volasen aleatoriamente, sino que se volvieron peligrosos misiles que se dirigieron en distintas direcciones.

Incluyendo una barra de metal que voló a toda velocidad rumbo a la daña escuela.

Chocando contra Jordan que apenas y se logró parar por sí misma una vez que los fuertes vientos se mitigaron, traspasándola de lado a lado por la espalda y justamente debajo de su seno derecho haciendo que abriese enormemente los ojos y escupiese mucha sangre.

-¡JORDAN!- la misma maestra que antes gritó la sujetó una vez que cayó al suelo -¡AYUDA, AYUDA, POR FAVOR! ¡QUE ALGUIEN LLAME A UN MÉDICO!- miró desesperadamente a las otras personas.

Sus gritos no pasaron por alto para la potente audición de Lincoln que se mantuvo flotando en el aire dándoles la espalda a todos.

Girando lentamente la cabeza hacia atrás para otra vez tener el horror impreso en sus ojos azules cuando en estos se reflejó a la castaña gravemente herida.

-¡GIRL JORDAN! ¡NOOOOO!- con la misma velocidad que usa para atrapar balas y tomar por sorpresa a los criminales, llegó hasta ella haciendo a un lado a la tutora -¡RESISTE!- la sostuvo pasando una mano por su cabello.

-Li… Lincoln…- susurró alzando una temblorosa mano para tocarle la cara hasta que se desmayó.

-¿Están filmando esto?- el reportero que ella convenció para quedarse en el lugar de los hechos no desaprovechó la oportunidad para hacer un reportaje con tal tragedia.

Tan parasito chupasangre y mezquino como lo han sido los anteriores que hablan mal del albino.

Debido a la gravedad de esa herida, no podía atenderla por sí mismo y necesitaba llevarla con urgencia al hospital cuando la cargó con la mayor de las sutilezas volviendo a sobrevolar Smallville.

Olvidando completamente al tornado que aún seguía en pie destruyendo todo a su paso.

Quisiera volar a máxima velocidad, pero de hacerlo, el cuerpo de la castaña se haría añicos por la resistencia del viento y fuerza centrífuga que generaría y peor aún por el fierro que tiene incrustado en el cuerpo.

Si en algún momento de su pasado deseo no tener superpoderes para ser una personal totalmente normal y no sentirse un fenómeno, ahora daría lo que fuese por tener el poder de curar heridos para así salvar a la chica que tiene en brazos.

Pero al pasar por encima de las estructuras que fueron afectadas por los torbellinos, se detuvo en pleno aire al igual que los miles de pensamientos erráticos que tenía su mente.

Porque ahora escuchó otro sonido que conoce muy bien… demasiado bien.

Al mirar hacia abajo descubrió a otra banda de maleantes, unos ladrones de poca monta que estaban robando el banco principal, o sea el único, de Smallville.

-¡Más rápido, idiotas! Hay que aprovechar que todos esos imbéciles se han ocultado por los tornados para que nadie nos detenga, ¡Oportunidades como esta solo se dan una vez en la vida!- el que estaba al mando poseía una sonrisa que era casi de oreja a oreja.

-¡Son unos cobardes!- exclamó un guardia de seguridad teniendo las manos atadas tras su espalda.

-¡¿Quién pidió tu opinión, jodido imbécil?!- al darle un puntapié en la cara, motivó a los demás para que lo comenzaran a agredir a punta de patadas regocijándose a lo grande.

No sabiendo de la enorme ira que le generaron a Kal-El comenzó a gruñir y apretar los dientes.

Conoce a la perfección lo que puede generar la codicia humana y como muchos se dejan dominar fácilmente por el deseo de conseguir dinero fácil sin importar a quién tengan que perjudicar en el proceso, pero esto era más de lo que su enorme paciencia podía tolerar.

¿Unos rufianes que aprovechan un fenómeno ambiental en el que muchas personas han salido heridas para poder pasearse a sus anchas y hacer de las suyas lastimando solo por diversión a alguien que apenas y logró salvarse del evento natural ya antes mencionado?

Esta es una de las pocas veces en las que realmente ha estado enfadado.

-Ah… Lincoln… ayúdame… por favor…

De inmediato recordó lo que ahora mismo estaba en juego y vio a Jordan que tosió sangre que le salpicó en la cara.

La desesperación y horror volvieron a apoderarse de su ser, en especial al examinarla con sus Rayos X y después vio a los asaltantes que después de moler a patadas a ese pobre hombre se dirigieron triunfantes hacia su vehículo de escape.

Desde que decidió volverse un justiciero que detiene a los criminales para que no se salgan con la suya, jamás ha dejado que alguno de ellos se le escape de las manos cuando prácticamente están en sus narices, pero con la vida de la chica que ama estando también literalmente en sus manos…

Cerró los ojos y apretó de nuevo los dientes expresando un ronco gemido de impotencia para seguir volando pudiendo oír perfectamente las risas de euforia de todos ellos, incluso comentarios despectivos hacia él sobre que es una pena que no lo tuvieran en frente para darle su merecido no sabiendo la increíble suerte que tuvieron de salirse con la suya.

-¡UN MÉDICO, RÁPIDO!- fue lo primero que salió de su boca apenas aterrizó frente al hospital de Smallville que ya era abarrotado por muchos heridos.

También ganándose miles de miradas y comentarios siendo mayormente de admiración al reconocer al tan mencionado "Ángel Guardián Azul" que ha ayudado a tanta gente, incluyendo a varios de los que ahí se encontraban por culpa de los torbellinos.

Acompañados por diferentes periodistas que fueron a cubrir todo lo sucedido.

-¡ERES TÚ!- sin demora se le acercaron poniéndoles los micrófonos casi en la cara -¡¿Es cierto que has traído al hospital del Smallville a toda persona que fue herida por culpa de esos tornados?!

Ser bombardeado por decenas de preguntas por segundo no le ayudaban en nada a mantener la compostura. En otras circunstancias con todo el placer del mundo les contestaría con la esperanza de engrandecer su imagen y disipar las inseguridades que tantas personas le tienen tal y como ha deseado hacer en estos últimos tiempos.

Pero ahora con su paciencia colgando de un hilo, todas esas preguntas eran como chispas a punto de caer en una caja llena de cartuchos de dinamita.

-¡CÁLLENSE DE UNA BUENA VEZ!- si el grito que acaba de soltar no fuese suficiente para que cerrasen sus bocas, los delgados Rayos Láser que expulsó de sus ojos para derretir los micrófonos y las cámaras hizo que todos retrocediesen mudos del miedo.

-¡¿No se dan cuenta de que tengo a una chica mortalmente herida en mis manos?!- colocó con el mayor de los cuidados a Jordan en una camilla -¡¿DÓNDE HAY UN DOCTOR QUE LA ATIENDA?!

-Dé-déjeme revisarla- temeroso, uno de los médicos fue hasta ellos y examinó a la castaña -¡Tenemos que atender a esta jovencita enseguida! ¡A LA SALA DE OPERACIONES!- sin demora la condujeron a ese lugar para salvarle la vida.

-Dios, por favor, dale la fuerza para sobrevivir a esto…- se rascó desesperado el cabello con ambas manos mientras sudaba de un modo que ni el más feroz de los incendios ha conseguido.

Hasta que nuevamente su potente audición captó un peligro inminente.

-No… ¡EL OTRO TORNADO!- al mirar a través de las edificaciones descubrió que el otro fenómeno ambiental se había adentrado en uno de los pueblos cercanos a Smallville destruyendo todo a su paso.

Viendo perfectamente como personas y animales eran arrastrados por las violentas brisas.

-Que sea la última desgracia del día y no lastime a ningún otro inocente, ¡ES LO ÚNICO QUE PIDO!- dedicándole una plegaria al aire, voló a toda prisa esperando también salvar a los que fueron apresados por las garras esa furia ambiental.

(…)

La amenaza de los tornados llegó a su fin y todos los medios de comunicación hablaban sobre todos los daños materiales que han generado y las vidas que se han perdido.

Y también sobre como las cosas hubieran sido mil veces peor si Kal-El no hubiese interferido. En las TV´S se mostraban filmaciones de él volando directamente hacia los ciclones para detenerlos y también cuando cargaba a personas y animales para llevarlos a lugares seguros.

Seguramente eso serviría para mejorar su imagen ante el público en general, si no fuese por el hecho de que también se revelaron las grabaciones de él gritando furioso a las cámaras antes de derretirlas con sus Rayos Láser o cuando al haber detenido el tornado que casi destruyó la escuela causó que Jordan quedase gravemente herida.

Y que se mostrase perfectamente su expresión de tragedia cuando la cargó antes de llevársela no bastó para calmar las aguas.

-"¡ES COMO SIEMPRE LO HE DICHO! Ese chico sea lo que sea es un peligro para la sociedad y el mundo entero, ¡DEBERÍAN ENCERRARLO EN UN AGUJERO PARA SIEMPRE!"- una entrevista mostró a un completamente enfurecido padre de Jordan y en el fondo se podía ver a su esposa llorando desconsoladamente al lado de su hija que está postrada en una cama del hospital conectada a varias máquinas que la mantenían con vida.

-"¿Héroe o amenaza? Las dudas sobre aquel misterioso joven de cabello blanco solo se hacen más grandes con el correr del tiempo. ¿Usted que está viendo estas noticias piensa que es un ser celestial que vino a protegernos o es como el padre de esa pobre chica y cree que…?"

-Grandísimos desagradecidos…- como lo ha hecho antes, Lynn apagó su televisor ya muy molesto.

-No dejes que te afecten las cosas que esos ingratos dicen de ti, hijo. Pudiste salvar a muchas personas y aquellos que en primera persona vieron como arriesgaste la vida por ayudarlos jamás creerán que eres peor que esos tornados- Rita le tomó una mano a Lincoln al ver lo afectado que estaba.

-No es por eso, mamá, ¡ES POR JORDAN!- comenzó a rascarse de nuevo los costados de la cabeza cuando les dio la espalda alejándose un par de pasos.

-Si ella ahora está debatiéndose entre la vida y la muerte ¡ES POR MI CULPA!- no había caso en contener sus lágrimas preocupándolos de sobremanera.

-Por haber actuado sin pensar al erradicar ese tornado… ¡LOS PUDE HABER MATADO A TODOS!- tomó un pesado motor que servía de adorno y lo comprimió con sus manos hasta volverlo una deforma bola metálica en un intento de descargar su ira.

-¡Lincoln, Lincoln, Lincoln!- su mamá enseguida lo sujetó de los hombros para calmarlo.

-Mi adorable angelito enviado del Cielo…- le habló con un tono maternal consiguiendo que de a poco se tranquilizara mientras traspiraba.

-No puedo imaginarme como te sientes en este instante, pero si puedo asegurar de que no tienes la culpa de nada- acarició su mejilla para limpiarle las lágrimas.

-De hecho, si no fuese por tu interferencia tanto Jordan como todas las personas en la escuela habrían muerto por ese tornado al igual que la demás gente de Smallville y los que viven en los pueblos cercanos, ¡Tus acciones han salvado a un sinnúmero de personas! No te puedes dar a ti mismo con el látigo solo porque cometiste un error- Lynn le puso una mano en la espalda.

-Mamá, papá…- sus palabras no tuvieron efecto alguno -sé lo que quieren de hacer y les agradezco tratar de aligerarme la enorme carga que llevo encima. Pero eso no cambia que una de las personas que más amo en esta vida casi muere por mi culpa y que todavía sigue en peligro mortal sin saber si podrá salvarse o no.

-Yo… requiero de un momento a solas- sin decir más, salió volando por la ventana.

-Lincoln…- Rita se llevó las manos al pecho viéndolo irse y Lynn pasó un brazo por sus hombros sabiendo que nada de lo que pudieran decir o hacer servirá para reconfortarlo y que solamente por sí mismo podrá superar la grave encrucijada en la que está metido.

(…)

Viéndola desde la distancia, Lincoln tenía el fuerte impulso de visitar a Jordan y permanecer a su lado, pero al ver cómo tanto la madre como el padre de ella lloraban sin consuelo alguno, decidió permanecer flotando en el aire.

¿Con qué cara los iba a ver a los ojos si siente que por su culpa ella está así de grave?

Para no verlos y oírlos, fue a la parte trasera del hospital cuando se aseguró de que no hubiese nadie cerca. Se sentó en una roca gimiendo pesadamente y se pasó las manos por la cara para tratar de recomponerse emocionalmente.

Hasta que oyó el característico sonido de la sirena de una ambulancia acercándose y por mera curiosidad fue al frente del hospital para ver como bajaban a un oficial que tenía una grave herida de bala en el abdomen.

-¡¿Qué le pasó a este hombre?!- cuestionó un médico apenas fue ingresado.

-¡Parece que estuvo en medio de un tiroteo contra esa banda de ladrones que hace unos días robó el banco de Smallville! Es increíble que aún sigan haciendo de las suyas- explicó el conductor de la ambulancia.

Siendo otra fuerte estaca que se incrustó en el corazón del albino.

Gimió y regresó a la parte trasera del hospital volando levemente cabizbajo ya no importándole quién pudiera verlo volviendo a sentarse en esa piedra apoyando la cara en ambas manos manteniendo la mirada fija en un punto inespecífico.

Un fracasado, un perdedor, un estúpido, un inepto, un incompetente. Así es como se llamaba a sí mismo, odiándose de formas que nunca creyó podría.

Tal vez cumplió en lo que se refiere a proteger a las personas de esos tornados, pero falló de modo garrafal tanto en cuidar a los más cercanos a él como en detener a los criminales cuándo se supone que esto debe serle pan comido.

¿Qué se supone que va hacer a partir de este momento?

Miró las estrellas pegadas en la oscuridad del Firmamento, buscando entre ellas la sabiduría de sus padres biológicos y la respuesta a esa pregunta, esperando a que si en verdad lo amaron como tanto afirmaron los hologramas de ellos cuando descubrió que es de Krypton sus almas se materializaran ante él para reconfortarlo.

Pero nada, no ocurrió nada de nada y la única respuesta que consiguió fue una leve brisa que casi le tumbó su peluca.

De una bolsa que ha tenido consigo en todo este tiempo sacó su traje de justiciero.

Sus cansados ojos vieron fijamente la gran S que tenía en el pecho. La idea original que Rita había tenido para un símbolo característico propio era un águila calva para representar el fuerte sentido de patriotismo que le han inculcado y así ganarse más fácilmente la confianza de los demás Norte Americanos.

Pero ella desechó esa idea por lo muy ostentoso que sería y mejor decidió ponerle en el pecho el mismo símbolo de triángulo invertido con esa gran S en el centro que poseía la pequeña caja que le mostró las imágenes de Pop-El y Myrtle, tanto en el pecho como en la espalda por ser algo mucho más simple y práctico.

Y también porque según los hologramas de sus padres biológicos eso no era una S, sino un símbolo que en Krypton significaba esperanza, algo que iba de la mano con la confianza que ha intentado transmitir en las personas que ha salvado desde la primera vez que se puso ese traje.

Siendo otro fracaso descomunal.

-¿En qué estuve pensando? ¿De verdad creí que al usar esto a la hora de ayudar a los demás haría que todos me aceptasen tal y como soy y dejasen de tacharme como un fenómeno que no pertenece aquí al tratar de hacer de este mundo un lugar mejor? Que idiota soy… que iluso fui…

Se acercó a un bote de basura y luego de dedicarle una última mirada a la S iba a arrojarlo.

-No deberías tirar a la basura algo que tu madre te confeccionó con tanto amor y cariño.

Detuvo su acción y miró de un lado a otro asustado apegando el traje a su pecho al oír esa voz.

Desconcertado quedó cuando un hombre de más o menos la edad de sus padres en silla de ruedas motorizada se le acercó despacio, seguramente siendo uno de los internos del hospital.

Enarcó una ceja preguntándose como no lo había oído acercársele.

-Eh… ¿Disculpe? ¿A qué se refiere?- quiso hacerse el desentendido y escondió tras su espalda el traje; lo que menos necesitaba era que se descubriese ahora su verdadera identidad.

-No tienes que fingir ante mí, Lincoln Loud… ¿O prefieres que te llame por tu nombre Kryptoniano, Kal-El?- ese hombre le sonrió cierto deje burlón.

La boca y ojos del albino lentamente se abrieron a no más poder y soltó un gemido ahogado quedando en un Shock equiparable al que sintió cuando descubrió que es un alienígena.

¿Ese señor sabía quién es? Mejor dicho, ¿Sabe lo que es y de dónde procede?

-Pe-pe-pero cómo… ¡DIGO, DIGO! No sé de qué está hablándome- al querer de nuevo fingir ignorancia, solo logró que ese tipo soltase una leve carcajada.

-Descuida, jovencito. No tiene caso mentirme porque sé todo sobre ti. Vives en la Granja Loud con los granjeros que te han querido como un hijo desde que llegaste a la Tierra en esa nave espacial cuando el Planeta Krypton fue destruido por ese cataclismo y que descubriste tus verdaderos orígenes el año pasado y desde entonces has tratado de hacer la diferencia en este pueblo usando tus habilidades sobrehumanas a favor del bien para proteger el inocente y lograr que las personas te acepten y no te teman o repudien por no ser un humano como ellos- los globos oculares del peliblanco se abrieron a tal punto que sobrepasaron el ancho de sus gafas.

-Y has mantenido oculta tu verdadera identidad con una peluca castaña y anteojos que milagrosamente han sido suficientes para que nadie sepa que eres ese valiente joven de pelo blanco- finalizó su relato volviendo a reír por su expresión de incredulidad.

-No… no puede ser… ¿Quién es usted y como sabe todo eso de mí?- en vista de que no había caso seguir mintiendo, esperó a que ese hombre no lo delatase.

-Soy un amigo en el que puedes confiar, y descuida, no le diré a nadie sobre quién eres- lo primero que dijo es prácticamente lo mismo que él le ha dicho a los que ha ayudado y con aparente dificultad alzó levemente la mano derecha en señal de saludo.

Lincoln dudó en corresponderle el gesto, tanto porque no sabe que desea en verdad como por temor en lastimarlo debido a lo muy delicado que luce. Pero accedió de todas formas y estrechó su mano al mismo tiempo que usó sus Rayos X para examinarlo desde la cabeza hasta los pies.

-¿Nunca te han dicho que es de mala educación mirar el interior de las personas sin su permiso?- retrocedió unos pasos al ser reprendido, porque parecía saber cuándo usa sus poderes de modo discreto.

-Uh… oh… lo siento, no… no quise hacerlo- realmente no sabía que decir, porque era la primera vez que alguien ajeno a sus padres o Jordan sabían que usaba sus poderes discretamente.

-Y… ¿Qué quiere de mí?- quiso ir directo al grano.

-Ayudarte con el problema que te aflige, Lincoln- alzó ambas cejas otra vez sorprendido -al igual que tú, yo no pertenezco a este mundo, ni siquiera a este mismo universo. Yo me muevo entre dimensiones acatando los gritos de ayuda de aquellos que son como tú antes de que se desvíen del camino y se vuelvan aquello que más temen y aborrecen ser.

-¿Cómo dice? Usted… ¿Es también de Krypton? ¿Es un extraterrestre como yo?- no pudo evitar emocionarse por entablar contacto con otra forma de vida no perteneciente a la Tierra.

-No exactamente. Digamos… que he trascendido a un plano existencial que está más allá del entendimiento de cualquier mortal, sea terrícola o extraterrestre. Es algo difícil de explicar y si me tomase la molestia de detallarlo estaría hablando hasta que el gallo cante cuando salga el Sol- hizo otra broma medio tonta.

Lincoln se cruzó de brazos para nuevamente verlo con sospecha y algo de miedo. ¿Qué ha trascendido a otro plano existencial? ¿Cómo un fantasma o espíritu? No podía ser esto, porque es un ser de carne y hueso por lo que acaba de ver y sentir cuando lo saludó.

-Okey… dijo que quiere ayudarme con mi problema, ¿A qué se refiere exactamente? Usted… ¿Puede curar a mi amiga que ahora mismo está muy mal?- pensar en esto causó que su corazón latiese con la esperanza que el símbolo en su traje se supone debe transmitir.

-Ojalá pudiese ayudarte en ese aspecto, joven Lincoln. Pero curar a personas heridas está más allá de mis capacidades- bajó los hombros y la mirada recuperando el pésimo estado de ánimo que tuvo antes de que ese hombre lo saludase.

-Pero puedo ayudarte a no tirar la toalla en tu misión autoimpuesta. Como te dije, yo viajo entre universos para ayudar a las diferentes versiones que existen de ti cuando sienten que han hecho algo tan atroz que no puede perdonarse a sí mismos y se rinden cuando apenas han salido de la línea de partida.

-¿Diferentes versiones de mí en otros universos? ¡¿Significa que hay más de un Lincoln Loud por allá afuera en algún lugar?!- esto le volvió a generar un enorme asombro.

-¿Diferentes Lincoln Loud´s por ahí? Claro que sí, más de las que puedas imaginar. Pero yo me refería más bien a las encarnaciones que representan al último hijo de Krypton que en su mayoría son llamados Clark Kent en la Tierra teniendo casi el mismo origen básico… aunque tú serías uno de los pocos, por no decir el único, en poseer un peculiar cabello blanco; lo que te hace distinguir fácilmente de entre todos aquellos que han usado el traje azul, capa y calzones rojos por fuera- tal bromita hizo que se apenase.

-¿Dices que en otros universos los últimos Kryptonianos con vida se llaman Clark Kent y que soy la única encarnación de pelo blanco con el nombre de Lincoln Loud? ¿Por qué? ¿Qué me hace diferente al resto?- mientras más explicaciones recibía, más confundido quedaba.

-Pues digamos que algunos universos que no tienen nada que ver uno con el otro chocan entre sí de forma aleatoria y al pasar esto pueden causar que los seres más sobresalientes de estos se combinen en un solo ser teniendo resultados de lo más… peculiares por así decirlo- la forma en como dijo esto indicaba que no quería profundizar en ese tema.

-Retomando a lo que te aflige, joven Lincoln…- hizo que su silla motorizada se posicionase a su lado y con la mirada le indicó que se volviera a sentar en esa roca y así lo hizo aún dudoso.

-Debo reconocer que es digno de aplaudir lo que has logrado hacer en tan solo un año. Dedicarte en cuerpo y alma para ayudar a los necesitados y estando más que dispuesto a lidiar con las diferentes caras de la maldad a una edad tan corta como la tuya, no es algo que todas las diferentes versiones de tu ser están dispuestas a hacer y eligen el total anonimato intentando hacer oídos sordos cuando alguien necesita de su ayuda por no lograr superar sus miedos e inseguridades. Si todas las versiones de Kal-El que existen tuviesen ese mismo ímpetu, todas esas realidades paralelas serían mucho mejores- esto lo dijo más para sí mismo que para Lincoln.

-Por eso estoy aquí, para decirte que no te des por vencido. Sonaré como disco rayado al repetir lo mismo que te dijeron tus padres, pero todos, absolutamente todos, cometemos errores y no puedes permitir que el tropiezo que tuviste por haber herido accidentalmente a tu amiga cuando detuviste ese tornado te impida seguir avanzando.

-La vida nunca es fácil y en algún momento te pondrá duros desafíos para los que no estás preparado y será ahí cuando una persona, sin importar si tiene súper poderes o no, mostrará de lo que realmente está hecha para afrontarlos. Muchos con la capacidad de hacer maravillas por el mundo en general no logran conseguirlo al sentir que hacen más mal que bien siendo incapaces de ver más allá de las acciones y decisiones que toman en el momento.

-¿Tu amiga fue herida accidentalmente por tu mano al detener ese torbellino? De no haber sido por tu mano, ella y todas las personas en esa escuela ahora mismo estarían muertas al igual que toda la gente que pudo haber muerto por los demás tornados si no hubieses intervenido tal y como te lo dijeron tus padres. Estás actuando como los reporteros que hablan mal de ti.

-Oh… sé bien que logré salvar a un montón de personas y que sin mi ayuda habría un enorme número de víctimas. Pero si tan solo hubiese sido más prudente al detener ese ciclón, ella no estaría como lo está ahora- pero ese enorme arrepentimiento persistía en su corazón.

-En los momentos de enorme desesperación cualquiera puede actuar sin pensar en las posibles repercusiones que tendrán sus decisiones. Las experiencias de la vida, incluyendo las negativas, nos pueden ayudar a mejorar como personas y no cometer los mismos errores al pensar con más calma que hacer en una situación crítica; eso lo sé a la perfección.

-No seas como esos ingratos que solo ven el vaso medio vacío. Tus padres te han dicho varias veces que por más poderoso que seas no eres capaz de lograrlo todo, y aunque seas de un mundo totalmente diferente de la Tierra, puedes cometer errores como cualquier ser humano.

-Y como cualquier otro humano, puedes aprender de tus fallas para saber qué hacer y que no hacer cuando de nuevo estés en una situación crítica- del mismo modo en como Lincoln lo ha hecho con las personas que salva quiso tranquilizarlo con una sonrisa de confianza.

Lincoln lo vio fijamente en silencio por un momento y luego posó los ojos en la gran S en su traje al sujetarlo con ambas manos. Ahora sí pudo pensar más allá de sus recientes acciones al visualizar como estaría Smallville, sus padres, Jordan y demás personas si hubiera detenido a los tornados.

Sentía como la insostenible carga emocional que llevaba en su espalda se hizo más ligera, tanto así que pudo sonreír levemente al imaginarse las expresiones de agradecimiento provenientes de aquellos que de corazón confían en él, aceptándolo como tanto lo ha deseado.

Pero al recordar las caras de los padres Jordan, como se sentían, todo lo que han hablado de él…

-En cuanto a aquellos que te temen, aborrecen y odian…- ese señor adivinó lo que pasó por su mente al ver como su expresión cambió bruscamente.

-No te mentiré. Te falta mucho para ganarte la confianza y el afecto de todas las personas de este mundo y que te acepten como uno de ellos. Ya debes saber bien que la gente desconfía de aquello que no entiende y fácilmente se dejan guiar por sus inseguridades y sacan juicios sin fundamentos.

-Y no solo te trataran como un paira, sino que incluso algunos de ellos, en especial los que dedican sus vidas a obrar a favor del mal, trataran de destruirte de todas las formas existentes poniéndote las pruebas más difíciles que la vida pueda darte.

-¿Tratar de destruirme?- estas palabras otra vez llenaron de un terror inconmensurable su corazón y abrazó fuertemente el traje que Rita le creó.

-¿Cómo? Si no hay persona en la Tierra que pueda lastimarme.

-No lo digas tan seguro. Tanto en este mundo como allá afuera en los más lejanos rincones del universo hay seres que si te descuidas podrían ponerte en Jaque y a todos los que amas y en algún mañana deberás hacerles frente para detenerlos.

-Por eso no puedes tirar la toalla ahora, porque si te rindes en este mismo instante esos seres harán desastres mil veces peores que cien tornados juntos y solo tú, con la ayuda de aquellos valientes que también luchan a favor del bien, podrás detenerlos y salvar la Tierra y a sus habitantes, tanto a los que te quieren y aprecian como eres, como a aquellas personas que todavía te ven con malos ojos y que al ser socorridas por tu mano dejaran de temerte y te aceptaran en sus corazones.

Volvió a permanecer en silencio y ahora posó nuevamente su vista en los lejanos astros luminosos para procesar esa nueva información. Solo había contemplado ayudar a la persona promedio de problemas promedio que no sean nada fuera de lo usual.

¿Y ahora ese hombre le dice que en el futuro lidiara contra seres malignos súper poderosos que llegarían a matarlo cuando los tenga en frente?

-Eso… esto… ¡Esto es de locos!- al pararse retrocedió unos pasos -¿Qué lidiare con supervillanos en el futuro como los de los comics que me gusta leer? ¡CON MÁS RAZÓN DEBO DESISTIR AHORA!

-Sé que eso te asusta, ¿A quién no le daría miedo eso? Pero te gusta hacer lo correcto, te gusta ayudar al inocente, te gusta detener a los que hacen el mal y quieres inspirar a las personas a hacer lo correcto al dar el ejemplo con tus propias acciones, ¿Verdad? ¿Qué clase de ejemplo darías si te dejas dominar por el miedo que te genera el misterio del mañana y por la culpa de los errores que has cometido en el ayer? Uno muy malo que no solo va en contra de tu herencia Kryptoniana, de lo que tus padres terrenales te han inculcado, de lo que… tratas de representar.

Alzó el índice derecho para señalar la S de su traje. El albino nuevamente lo miró sintiendo culpa, pero no la misma que tuvo por lo sucedido a Jordan.

Una culpa porque está traicionándose hacia sí mismo, a su naturaleza, a lo que es e intenta ser.

-Entonces… ¿Qué se supone debo hacer cuando esté lidiando con seres y situaciones que estén más allá de lo convencional?

-Sabrás que hacer. Dentro de ti tienes no solo el mismo corazón y voluntad de acero que poseen las demás versiones de Kal-El con las que he cruzado caminos, sino también el ingenio para solucionar problemas que tienen muchos de los Lincoln Loud´s que hay en esas otras realidades alternas.

-Solo recuerda que no debes temer al fracaso, aprende de los errores, no te desanimes por las malas opiniones que te tengan y ayuda tanto al inocente como al que obre mal a salir adelante porque aunque no lo parezca estos si son ayudados a superar sus propios demonios internos algún día y cuando menos te lo esperes te lo retribuirán y dejaran sus malos pasos para recorrer el sendero del bien, pero tampoco te contengas si lidias con alguien que no tiene forma de redimirse y siempre debes estar dispuesto a hacer lo que haga falta para salvar a los inocentes de sus garras.

Lincoln iba a decir algo más, hasta qué sin previo aviso pasó a su lado otro hombre poseedor de gafas parecidas a la suyas y fue hasta el que le dio tantos consejos.

Tampoco pudo notar su presencia con anticipación.

-Señor Reeve, es hora de irnos- le dijo al tomar los sujetadores de la silla de ruedas.

-¿Tan pronto, Henry? El tiempo sí que vuela cuando enderezo a los que están por descarrilarse. Bueno, joven Lincoln, fue un placer hablar contigo, pero debo retirarme. Hace no mucho hubo un reinicio que ha generado todo un embrollo poniendo patas arriba a muchas realidades paralelas y debo aconsejar a otras versiones de Kal-El para que tampoco flaqueen ni se den por vencidos.

-Así que buena suerte y recuerda todo lo que hemos charlado. Vámonos, Henry- le pidió al recién llegado que empujara su silla.

-¡Esperen!- los llamó extendiendo una mano -muchas… muchas gracias por sus palabras. Me han servido para calmar las locuras que pasaron por mi cabeza, pero ¿Quién es usted?

-Christopher, ese es mi nombre- volvió a sonreírle con amabilidad -¿Alguna última pregunta?

-Sí, podría… ¿Darme un buen nombre para mi alter-ego? No se me ha ocurrido ninguno- tanto Christopher como Henry rieron por esa petición.

-Cuando sea el momento en el que realmente todo el mundo sepa de tu existencia, recibirás el nombre por el que siempre serás recordado y con el que dejarás un legado que jamás podrás ser borrado, te lo aseguro- el consejero le chequeó un ojo.

-Ahora debes visitar a su amiga. Ella y tú tienen mucho de qué hablar.

No entendió a qué se refería, pero su oído captó los llantos de alegría de los padres de Jordan y al mirar el cuarto en dónde ella está descubrió que recuperó el conocimiento.

-¡JORDAN DESPERTÓ!- sonrió enormemente -bendito sea Dios… ¿Cómo supo que…?

Al mirar hacia adelante ellos ya no estaban. Intentó localizarlos con su potente vista, pero no los encontró por ningún lado, como si la tierra se los hubiera tragado.

O simplemente desaparecieron de este plano existencial.

Al rascarse la sien derecha se cuestionó si todo eso en verdad pasó o fue un invento de su imaginación.

(…)

Más tarde esa misma noche, Jordan ahora dormía plácidamente por sí misma sin tener una mascarilla en la cara y de modo profundo a pesar del sonido causado por las máquinas que aún tiene conectadas a su cuerpo.

Hasta que sintió como alguien acarició su cabello.

-Jordan…- era Lincoln que entró por la ventana de su habitación llevando puesto su traje azul.

-Ah… Lincoln… eres tú… eso significa que pudiste detener a esos tornados- sonrió débilmente, pero hizo una mueca de dolor.

-No te exijas, estás muy débil- tomo asiento a su lado -me alegra saber que pudiste despertar. Estos cinco días en los que permaneciste inconsciente han sido un calvario peor que detener a esos torbellinos- sujetó su mano derecha.

-¿Ya pasaron cinco días? Vaya… el tiempo sí que vuela cuando uno siente estar flotando entre las nubes…- quiso bromear, pero de nuevo rugió adolorida.

-Dímelo a mí- le siguió la corriente hasta que carraspeó -estuve asustado como no tienes idea y tengo que pedirte perdón- ella lo vio confundida por tales palabras.

-Cuando detuve el tornado que estuvo por destruir la escuela, por accidente causé que esa barra se incrustara a tu cuerpo. Estuviste a punto de morir por mi culpa y si eso hubiese pasado, yo…- los labios comenzaron a temblarle y apretó los ojos para no llorar.

-Ay, Lincoln…- ella tuvo las fuerzas suficientes para acariciarle una mejilla -de no haber metido mano yo seguramente habría terminado atravesada por mil barras al igual que todos en la escuela, ¿Acaso tus padres no te dijeron que salvaste a muchas más personas de las que se hubieran logrado salvar si no fuese por tu interferencia?

-Sí, trataron de hacerme sentir mejor al decirme eso. Pero me sentí tan mal por lo que te pasó, que estuve a punto de renunciar en mis intentos por ayudar a las personas- ella quedó atónita por oírle decir eso -pero estuve hablando con alguien que me motivó a seguir adelante y a no rendirme solo porque me equivoque tal y como lo haría un humano normal.

-¿Qué alguien habló contigo de eso? ¿Quién?- no podía visualizar a alguien aparte de ella o los padres de él dándole consejos sobre seguir en su misión autoimpuesta de ayudar al prójimo.

-Es complicado de explicar… pero lo que importa es que seguiré poniendo de mi parte para hacer de este mundo un mejor lugar y ganarme la confianza de todos y transmitirles el mensaje de que todos tenemos el potencial de hacer el bien sin importar quiénes seamos o de dónde provengamos- hizo que tocase la S en su pecho para transferirle lo que ese símbolo significa.

-Sé que lo lograrás, Lincoln. También apostaría mi trenza por eso- mucha alegría le daba saber que continuará con esa labor -entonces… ¿Aún deseas que alguno de esos chupasangre te entreviste para que todos sepan lo que eres en verdad?

-No, creo que lo mejor será continuar lo más anónimo posible. Con lo ocurrido con los tornados, es mejor no agitar más las aguas.

-Es comprensible. No hace falta aclarar que te seguiré apoyando en lo que decidas hacer con tu vida- volvió a sobarle un cachete.

-Y siempre estaré agradecido contigo por eso y mucho más, Jordan…- sonrió conmovido y sujetó su mano con las suyas propias -aunque lo estaría más si tuvieras un buen nombre para mi alter-ego y que no suene tan absurdo- rieron por tal tontería.

(…)

Después de charlar, Lincoln regresaba a su granja con los ánimos totalmente renovados. En verdad sintió que se quitó una enorme carga en su espalda más pesada que todo el planeta recuperando todos sus deseos de ayudar al necesitado y no permitir que los malosos hagan de las suyas.

Y hablando de eso…

Detuvo su vuelo cuando divisó a la misma banda de ladrones que ahora asaltaban una estación de servicio.

Iba siendo hora de darles una valiosa lección.

-Sigo sin poder creer lo bien que nos está yendo, ¡SOMOS LOS REYES DEL MUNDO!- gritó eufórico uno de ellos por los farros de billetes en sus manos.

-Lo que me sorprende es que ese mocoso de pelo blanco que supuestamente se encarga de detener a los ladrones no haya venido por nosotros, ¿Qué le habrá pasado?

-De seguro se perdió en su lucha contra esos tornados y terminó en una pila de estiércol de vaca. Es una pena, pero ni modo, la vida sigue y nosotros debemos aprovechar que no está para meter sus narices en lo que no le importa.

-¿Me hablaban?- todos detuvieron sus acciones cuando Kal-El descendió despacio frente a ellos con los brazos cruzados y dedicándoles una mirada amenazante al hacer brillar de rojo sus ojos.

-E-e-e-e… ¡ERES TÚ!- de inmediato el miedo y desesperación los apoderó.

-El mismo que viste y calza. Lamento haber estado ausente estos días, pero es tiempo de que de nuevo meta mis narices en lo que no me importa- derritió con su Visión Láser sus armas.

-Y demostrarles a los que juagan a favor del mal que de nuevo estoy en el campo de juego- se dio el lujo de reír burlón por las expresiones que le dedicaron.

(…)

El tiempo pasaba y Lincoln continuaba ejerciendo su labor de protector lo más anónimo que pudiera. Smallville y los pueblos vecinos seguían hablando de él cada vez que hacía algo por el bien común todavía haciendo preguntas sobre quién es y que quería.

Pero no podía seguir limitándose a dar apoyo a los poblados que ya conocía y comenzó a pensar a lo grande: ayudar a toda la humanidad.

Si tiene el poder de ayudar a todas las personas que pasan por problemas que no entran en lo convencional, ¿Por qué no dar el siguiente paso? En especial porque dentro de poco se graduará de la Secundaria, la etapa que para muchos jóvenes de Estados Unidos representan el fin de la niñez para dar sus primeros pasos en la vida adulta que les traerá un sinfín de cambios.

Y no todos esos cambios son de su agrado.

-¿Tus padres se mudarán luego de tu graduación?- una fuerte punzada sufrió su corazón cuando Jordan le dijo esto.

-Así es. Desde que casi muero por ese tornado el año pasado ya tenían esa decisión y la aplazaron hasta que me graduase. Intenté por todos los medios posibles convencerlos de permanecer aquí en Smallville, o por lo menos, seguir viviendo en Norte América, pero están tan firmes en su decisión de mudarse a Europa… que no hay fuerza en este mundo que los persuada.

Sin dudas, siempre habrá problemas que nunca podrá resolver por más poderoso que sea.

-Jordan…- no resistió el impulso de abrazarla compartiendo lágrimas de desdicha -lo que daría para que pudieras permanecer aquí, a mi lado…

-Yo también quisiera estar siempre contigo, Lincoln…- le quitó su peluca y lentes -pero si algún día quiero heredar la empresa de la familia y hacerla crecer, debo hacerlo.

-Lo entiendo, lo entiendo. Nuestro sentido del deber y de la responsabilidad algunas veces nos obliga sacrificar muchas cosas que atesoramos- casi sentía que ella volvía a morirse en sus brazos.

-Pero no llores tanto por mí. Siempre podrás volar a Europa cada vez que quieras ver mi imagen inmaculada, ¿O es que acaso necesitas pasaporte para viajar?- siendo ya hábito de su parte, bromeó para aminorar la tensión.

-No, pero no deseo que me confundan con esos Ovnis que les gusta generar mil teorías conspirativas- rieron un poco, hasta que desviaron pensativos las miradas.

-Entonces… ¿Qué harás luego de que te den el diploma? ¿Seguir los pasos de tus padres o te dedicarás a tiempo completo en ser el defensor de la verdad, la paz y la justicia?

-En verdad no lo sé. Pensaba en una profesión en la que pueda enterarme enseguida de sucesos potencialmente mortales para detenerlos antes de que hagan daño, como un policía o bombero o algo así y acercarme a situaciones de grave peligro sin levantar sospechas.

Jordan iba a decirle algo, hasta que en la TV de la sala de su casa dieron un importante anuncio.

-"¡Aquí Margot Kidder con lo último en noticias! Un voraz incendio cerca del Oeste de Ciudad Metrópolis se propaga como una plaga de langostas amenazando con reducir a cenizas el antiguo Bosque de Secuoyas que tiene centenares de años de antigüedad"- se mostró a una reportera cerca de esas violentas llamas que destruyen todo a su paso.

-Muy bien… parece que el deber me llama, Jordan- Lincoln no se iba a quedar quieto sin hacer nada y se dispuso a hacer lo que hiciese falta para detener ese otro desastre ambiental.

-A esos buitres les encanta arriesgar el pellejo para conseguir los mejores encabezados. ¿En serio todos ellos tienen tan poco sentido común?- la castaña negó con la cabeza.

No viendo como un foco se encendió sobre la cabeza del albino.

Reporteros… una de las pocas personas que quieren adentrarse en la boca del lobo y que casi siempre son los primeros en enterarse de eventos que puedan poner en peligro a los demás…

¡ESO ES! La respuesta la ha tenido prácticamente en la cara todo este tiempo, algo muy irónico si también se toma en cuenta que alguna vez quiso hacerse conocer ante el mundo mediante ellos.

(…)

-Mucha suerte en lo que decidas hacer con tu vida desde ahora, cariño. Gracias por siempre estar dispuesta a ayudar a mi hijo en lo que necesitase y por jamás revelar su identidad secreta- en un aeropuerto lejano a Smallville, Rita y Lynn se despedían de Jordan.

-No, gracias por darme el honor de ser amiga de alguien tan maravilloso como es él- después de intercambiar unas cuantas palabras, ella se acercó al Kryptoniano -Lincoln… yo…

-Sí, yo también te voy a echar mucho de menos- con anterioridad ya se habían dicho todo lo que tenían que decirse, así que no habría caso alargar algo tan doloroso como esto y se volvieron a abrazar y darse un último beso apasionado.

-Por favor prométeme que me irás a visitar cada vez que puedas- pidió casi suplicando.

-Sabes que lo haré, ¿Cuándo alguna vez he faltado a mi palabra?

No se fue del aeropuerto hasta que el avión que ella abordó despegó yéndose más allá de su potente visión. Deprimido como pocas veces lo ha estado, se retiró con las manos metidas en sus bolsillos y seguido por sus padres que trataban de animarlo lo mejor que podían.

Hasta que a nueva cuenta sus oídos captaron a un maleante robándole las maletas a una pareja de ancianos para escapar en una moto.

-Ah… mamá, papá, discúlpenme un momento. Debo ir por otro de esos rufianes; ahora sí que los necesito para mantener la mente distraída de los problemas de la vida.

-Lo entendemos, hijo. Solo procura no pasarte de la mano con él- no oponiéndose a eso, le dejaron irse esperando que no se desquitase con nadie por la tristeza que lo invade.

(…)

Con el tiempo ya se recuperó lo suficiente para volver a patrullar en los terrenos cercanos a Smallville preguntándose como está Jordan en este instante y como hará para proteger al resto del mundo cuando decida expandir sus horizontes.

Le hubiera gustado hacer más preguntas a Christopher sobre que más le depara el futuro, pero aprendió que lo mejor era dejar esto en misterio porque aquellos que intentan cambiar su destino para que las cosas siempre salgan a su favor por lo general terminan consiguiendo los resultados opuestos a lo que deseen.

Se elevó hasta más allá de la atmósfera de la Tierra y llegó al espacio exterior para admirarla en todo su esplendor. Tan bella, tan gloriosa, tan llena de cosas maravillosas por las que vale totalmente la pena luchar y proteger al igual que sus habitantes.

Sabe bien que al dar el siguiente paso se topará con situaciones, escenarios y seres mucho más nefastos que cualquiera de las cosas que se ha enfrentado hasta ahora, pero con tal de hacer su actual hogar un mejor lugar, de ganarse el afecto de la gente y lograr sacar lo mejor de ellos al darles el ejemplo, está más que dispuesto a seguir en el camino que ha tomado.

Detuvo su meditación porque, aún desde su posición en dónde se supone no puede oírse sonido alguno, escuchó como se produjo un fuerte terremoto que al igual que muchos desastres naturales pone en peligro a miles de vidas inocentes.

-Ha seguir haciendo lo que mejor sé hacer- negando con la cabeza, se dispuso a volar de regreso a la Tierra manteniendo el puño derecho extendido.

Hasta que sintió como era observado y al mirar a su izquierda a la pantalla de la PC le dedicó una de sus resplandecientes sonrisas de confianza al espectador antes de continuar con el sendero que ha elegido y en el que vivirá aventuras más allá de lo que él y cualquier otra persona pueda ver en sus sueños.

Capítulo dos completado el 10/10/2023.

Y hasta aquí llegó esta "mini-historia" de este Lincoln-Superman.

Vaya que ha vivido una montaña rusa de emociones con lo poco que lleva ejerciendo su labor como el superhéroe más grande de todos los tiempos y eso que no vive aún en Metrópolis y lidiado con verdaderos enemigos que lo pongan a él y a las personas de cabeza, ¿Qué clase de aventuras vivirá cuando se establezca ahí y reciba el nombre de su alter-ego? (Bueno, sí han visto mis otros fics de ese Metaverso Crossover ya sabrán lo que le espera :P)

Pasando a lo que en verdad importa, espero que les haya gustado la aparición del inigualable y único Christopher Reeve, el que es considerado por muchas personas incluso a día de hoy como la mejor versión Live Action del icónico Hombre de Acero.

¿Por qué lo incluí aquí? Pues en el capítulo anterior dije que esta historia sería un homenaje a un actor muy famoso en su momento y que ya partió a mejor vida y hoy, diez de octubre del 2023, se cumplen 19 años desde que el actor que nos hizo creer que un hombre puede volar dejó este mundo…

Como a mí me gustaron mucho sus películas y fueron con las que crecí cuando era un niño (Al menos la primera y segunda, porque la tercera y cuarta pues… dejaron mucho que desear) decidí hacer esta historia en su honor y ponerlo a él como una especie de ente o espíritu guía que oriente a las diferentes versiones juveniles de Kal-El ha no rendirse y a que sigan ejerciendo sus labores de protectores de la humanidad.

Porque muchos dicen que él no interpretaba a Superman… sino que ÉL ES SUPERMAN. Tal vez para los estándares modernos sea supuestamente anticuado, pero representó muy bien los valores fundamentales que el Último Hijo de Krypton debe tener siendo el verdadero ejemplo a seguir que todo aspirante tanto a Superman como a cualquier otro héroe aspira ser.

Así que les pido un minuto de silencio y piensen en él y lo que representó en su época y todavía sigue representando en la actualidad (Agacho la cabeza en señal de respeto)

En lo que respecta al resto de la historia, tuve que hacer borrones y reescribirla porque mi idea original para que Lincoln dudase de sí mismo era que a Jordan le pasara lo mismo que a Jonatan Kent en la película del Hombre de Acero del 2013, o sea que efectivamente muriese por culpa de un tornado generándole una descomunal culpa.

Pero sería muy copia y pega y por eso cambié varias cosas respecto a eso, pero sin quitar el hecho de que un tornado casi le costó la vida y le generase al peliblanco enormes complejos. Es que en serio, sentir como alguien a quien se quiere mucho casi muera por mano propia… es algo difícil de procesar tanto para una persona normal como para un ser tan poderoso como Kal-El.

Y por supuesto no me contuve al hacer unas MUY OBVIAS referencias al Lore de Superman, tanto en la escena final en la que él sonríe a la cámara tal y como Christopher Reeve lo hacía en sus filmes, como en los cameos de Henry y Margot Kidder (Que de seguro no hace falta explicar quiénes son, ¿O sí?) y también haciendo mención al Multiverso tanto lo sucedido con la reciente película de Flash y cuando universos de diferentes medios de entretenimiento se juntan (TLH y DC en este caso) generando resultados disparatados al mezclarse.

Pero, no puedo irme sin antes decir que por poco no pude publicar este capítulo hoy debido a ciertos problemas personales… y uno de esos era que mis padres ayer mandaron a dormir a uno de sus gatos, un siamés muy bonito llamado Coco al que querían mucho pero que en estos últimos tiempos estuvo muy mal de salud y… ya se imaginaran el resto.

Tanto me desanimó eso que casi perdí las ganas de continuar con la historia, pero como ya tenía el 99% del fic listo, pude sacar las fuerzas para llegar hasta el final. Así que les vuelvo a pedir un minuto de silencio por Coco que también ya está en un mejor lugar allá arriba (Vuelvo a agachar la cabeza y me seco unas lágrimas)

Para finalizar con noticias más alegres, aviso que este doce de octubre ¡CUMPLO AÑOS! (Soplo un espanta suegras y tiro confeti a la pantalla)

Es increíble como cumplo un año más de vida, ¿A dónde se va el tiempo? (En mi caso supongo que es dedicarlo a hacer historias bien locas que nadie más es capaz de hacer porque no tengo nada mejor que hacer XD)

Así que les agradezco de todo corazón que me dedicasen unas palabras de apoyo en ese día especial que solo sucede una vez al año ;D

Dicho todo lo que tenía que decir, me despido. Que tengan un buen día y recuerden: que todos nosotros tenemos en nuestro interior el potencial ser mejores personas y darles el ejemplo a los demás con nuestras acciones para que también mejoren como seres humanos.