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Para todo en la vida va a haber una primera vez, es de lo qué se trata aventurarse a experimentar sobre lo desconocido ya qué una vez teniendo la idea clara de lo qué se siente el juego de emociones con aquella situación en específico, comenzará la trayectoria en dónde tú propia mente y sentido de alerta, clasificará aquél riesgo que tomaste, cómo leve o altamente peligroso, plasmando una señal de alerta, en medio de todas tus neuronas.

¿Pero qué pasaría si a pesar de la advertencia que te da tú cabeza en una luz roja palpitante, no funciona?, Aveces nuestro sentido racional es quién más juega en contra de nosotros mismo..

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Nunca pensé en cómo sería mi primera vez, ni siquiera en mi cabeza podía correr el pensamiento, era demasiado extraño he ilógico para mí tener tales ocurrencias, en mí casa se hablaba de aquello, pero de forma indirecta, cómo tomar el glaseado y lanzar comentarios sacados de contexto con un pimentón, se prefería dejar todo a la vista sin enfatizar en el tema, aveces sentía que no me comunicaban un tema tan trivial, por no querer tener que cargar con mi constante paranoia frente a todo lo nuevo que doblegaba mí caminó recto, cosa que si pasó después de qué mi padre tratará de explicarme la historia de la abejita y la flor, que necesidad de sexualizar cosas tiernas, Dios.

Pensar en el nivel de confianza qué se tenía tras hacer eso con otra persona, versen desnudos y compartir saliva con miles de germenes, me parecía un verdadero suicidio o algo tan mágico como ahogarse en chocolate.

Aún así, considerando que incluso podría no tener la edad apropiada para meterme a hacer ese tipo de cosas, apenas tenía catorce y aunque hubieran chicos que ya hubieran hecho de todo a mi edad, yo era la excepción, no podía pensar en algo así, era demasiado extraño, además que no sabía cómo era mi posición frente a algo cómo el sexo.

Quería ser libre de esté pensamiento, me obligaba a encajar para sentirme un poco menos anormal.

Nunca pensé en eso, ni le encontré importancia, por qué no la meritaba o al menos era de lo que quería convencerme en lo más profundo de mis adentros, todo se revocaba cómo un bucle, cuándo me dí cuenta que grabando aquél pensamiento en mí cerebro, comencé a prestar más atención a mí alrededor, no hacía falta hablar de eso, mis padres parecía que les funcionaba por la forma en la mantenían su deprimente vida matrimonial, eran creativos, lo noté una vez qué mi madre lo mencionó de adrede en una charla tranquila con sus amigas, sin percatarse de qué yo la estaba escuchando o tal vez sí, de por sí nadie en mí casa era normal.

Ser creativo en el sexo, ¿A qué punto se debe llegar para complacer a otra persona?, entré más conocía acerca de esté mundo, era cómo encimismarme de que ésto no iba funcionar nunca.

Aquello sólo me hizo preguntarme, ¿El sexo era realmente necesario para mantenerte feliz?, ¿Casi cómo, comer dormir e ir al baño?, Ya de por sí es realmente extraño imaginar a mis padres en esa posición, era incluso un poco asqueroso...tal vez les funcionaba a mis padres por ser depravados, o el depravado era yo en querer perder algo que nunca recuperaría.

Se sentía cómo una necesidad marital en cada una de las vidas de las personas, estás parecían un motor que necesitaba ser empujado por algo que lo hiciera motivar o sentir felices, yo encontraba la felicidad y motivación en la cocina, realmente amaba cocinar, incluso meditando o tal vez en el arte..

Aunque me costará un poco por mi "enfermedad" mantener la concentración a lo hora de hacer mis diferentes actividades, me llenaba de tranquilidad y seguridad la sola idea de intentar, era cómo sentirse llenó y satisfecho, lo adoraba.

Pero, si a las personas cinco minutos les generaba de todo, me hizo preguntarme si realmente era tan bueno como para qué cada ser viviente lo deseara con desesperó.

Aún así las personas que no lo querían y seguían con sus vidas, quería creer que eran autosuficientes cómo yo y querían lograr sentirse completos de otra forma.

Una vez enfrente a mí madre, está vez enserio, pidiendo una explicación por qué era claro que no me animaba obtener información de alguna otra parte, ella pareció sorprendida, cómo si nunca se esperará que pudiera consultarle algo así, ignorando la veces en que si lo había hecho y me resume en el proceso, era casi cómo si se mostrará más abierta, pero sin darme nada de utilidad, ésto por qué simplemente dijo que en algún momento debería tener sexo con alguna chica, que debería buscar la forma de hacer crecer mi pene para aprender a satisfacer y que las personas que no tenían sexo, eran realmente miserables.., acabarían solos, viento en un departamento pequeño de cuarta y 31 gatos sin saber cómo alimentarlos.

Investigue sobre eso, comí un montón de libros en la biblioteca para llegar a una conclusión mejor, incluso alquile DVD's, fue de lo más loco que nunca me creí capaz de hacer, definitivamente no volvería a hacer algo así, creí que conociendo más o menos lo que era, dejaría de tener la necesidad de pensar en eso cada minuto de mi existencia, pensar tanto en el tema ya comenzaba a enfermarme mucho, pero lo único que gane fue, sentir más intriga, pero era una intriga extraña..

Ví miles de películas porno de mujeres y hombres, la verdad por algunos segundos perdí el interés, no creía que mí pene crecería tanto cómo para satisfacer a alguien, tal vez si tomaba esteroides, pero era imposible, no veía mi futuro como físico culturista, incluso me producía un poco de asco ver sus partes íntimas, me preguntaba si las partes a las que menos préstamos atención, eran las más descuidadas, estaba mejor la historia que el mismo sexo, pero, ¿Si el sexo no me producía ese tipo de interés, por qué mi madre me dijo que era lo mejor de mundo?, Incluso obligó a sus amigas a contarme un poco al respecto y entendí que había estado mejor antes de preguntar, ¿Que carajos era una rusa?.

En fin era una estupidez, no sentía que el sexo fuera lo mío, ya estaba preparado para ser miserable y tal vez haría lo qué cualquier chico normal de mí edad, fingir que ya lo había hecho.

Justo cuándo hacía eso, mi loro se cayó de su palito, cómo tenía las alas cortas tuve que levantarme a recogerlo o los gnomos se lo llevarían, esos desgraciados, pero los DvD's continuaron reproduciéndose de forma aleatoria y en uno de éstos, se reprodujo un vídeo gay, no sabía que había comprado algo cómo ésto y menos que lo vendieran en un pueblo tan conservador, tal vez para algún reprimido, pensé en retirarlo por qué no quería ver y ganarme un problema, al igual que tampoco querer tener cuentas pendientes con Dios, pero no pude evitar echarle un vistazo, ahí supe qué debía apagarlo, luego de un rato, me sentí realmente excitado, ¿Cómo lo sabía si nunca experimenté algo similar?, por eso mismo, ¿Podría ser más extraño?, Nunca me había sentido así, incluso se me paró, no podía verme en la posición con una mujer debajo mío, gritando... Yo quería ser el qué gritará de cierta forma.

Esté pensamiento era insípido y me hacía sentir tanto asco conmigo mismo, ¿Por qué estaba deseando tanto algo así?..

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Nunca he sido muy social, por eso habían cosas que acontecía en mi vida y yo nunca terminaría de comprender..

- ¡Ack!, ¡Bebé!, ¿Puedo p-preguntarte algo? - Estaba en el cuarto de bebé junto a ella, por alguna razón, en el último tiempo nos habíamos vuelto más cercanos, luego de dejarla quedar en mi casa cuándo su madre la echo a la calle y escucharla cuándo decía que sus amigas eran unas perras..

Incluso por un tiempo mi madre creyó que ella era mi novia, pero después dijo que era demasiado marica para algo así, en lo primero qué pensé, era en qué no debería desaprovechar la oportunidad por qué era realmente linda y lo sabía, pero sólo éramos buenos amigos, mi madre nunca fue la mejor consejera de todas, eso quedó demostrado de todas las formas posibles, de hecho, ninguno.

Bebé hablaba mucho de sexo, decía cosas que realmente no entendía y nunca me medité entender, sabía que sería algo asqueroso, pero ahora me daba pena decir algo así.., después de haberme evitado el Show y ahora tener que devolver los DVD'S, era mejor haberlos comprado, ya qué...

- Lo que quieras amiguis, con confianza, ¿oye crees que las tangas rosas son más bonitas que las azules?, Aunque creo que las moradas son mis favoritas, pero me quedan grandes - Así eran nuestras conversaciones en cada momento, pero de todas formas, bebé era de alguna forma la mejor del mundo, era muy divertida y me agradaba.

- Ninguna, m-mejor las r-rojas, van contigo... Y ésto es una estupidez, pero, c-cómo has t-tenido m-mucho s-sexo, quería preguntarte algo... Es extraño p-pero aún así...- No sabía cómo preguntarle pero su mirada ya me intimidaba mucho de por sí.

- ¿Quieres perder la virginidad?, Que lindo... ¿Ya tienes con quién?, ¿Quién es ella?, Asegúrate de qué no sea una perra - Miéntras parecía darme un infarto ella saltó sobre mí emocionada, diciendo un montón de cosas que ni entendí.

- ¡Agh!, ¡No, no, no!, E-es qué... Creo que p-paso algo m-muy malo, y-yo sólo quería ver que era y p-por a-accidente ví un DVD's gay, bueno se reprodujo sólo, n-no s-sabía ... ¡Y-yo sólo q-quiero ya dejar de p-pensar e-en ésto!, ¡Bájate! - No había podido evitar llorar mientras que bebé seguía acostada sobre mí, mirándome mal, en realidad era muy pesada y tampoco me estaba dejando respirar..

- Oye, si eres gay, no pasa nada Tweek, el sexo anal también genera placer o eso me han dicho mis amigas mayores, por qué en lo personal aún no lo he practicado, pero bueno... sabes qué esas cosas son muy mal vistas, entonces lo ideal es qué no se le digas a nadie, de igual forma guardaré tú secreto,menos mal me lo contaste a mí.. - Lo único que hizo fue espantarme más.

- ¡Yo n-no s-soy m-marica b-bebé!, ¡Agh! - Otra vez me vió miéntras fruncía el ceño, era bastante transparente con sus pensamientos de forma gestual y directa también.

- ¿Entonces, te gustan las mujeres?, Si es así... ¿No tendrías problema en tener sexo conmigo? - Definitivamente estaba loca, ahora me preguntaba si haberle preguntado, fue realmente una buena idea, tal vez ser la mejor del mundo, no la hacía muy sensible.

- No, no, n-no s-seas rara, e-eso sería muy e-extraño, ¿Sabes?, L-lo dejaré así, sólo tengo catorce, ¡T-tal vez lo v-vuelva a c-considerar a los v-veinte! - Planeé escapar pero de nuevo no me dejó, seguía apoyándose sobré mi

- ¿Eso qué?, ¿No tenemos acaso la misma edad?, La edad es sugestiva, hace tiempo que debiste haber tenido sexo, payaso - Parecía enfadada por mí comentario, Pero no lo había hecho con la intención de fastidiarla o molestarla, así que simplemente me quedé ahí, tratando de no gritar del estrés - Mirá, todos perdemos la inocencia doble vez, por el ano o por nuestra vagina y pene, entonces, yo de ti intentaría perder primero la anal por qué al menos otro hombre te va a dominar y ahí sabrás si lo tuyo es estar abajo o arriba... Además hay muchos gays que viven en el anonimato, puedes tener una pareja, fingir qué son novios y de puertas para fuera ser un gay en potencia-

- ¡N-no lo voy a h-hacer!, ¡¿Y s-si me d-duele mucho?! - Enserio quería irme, era un tema del qué me asustaba mucho hablar y recién lo noté.

- Pues te vas a aplicar crema y tú mismo introduciras tus dedos, conocete Tweek, carajo - Ví cómo rodeaba sus ojos y suspiraba - Hagamos una cosa, pruébalo y cuándo te decidas, te llevaré conmigo a una de las fiestas que organizan mis amigas con chicos universitarios, esos son demasiado sexys y ya tienen bien definido lo que quieren hacer con sus vidas - De la nada comenzó a fantasear y gritó emocionada, su gritó me hizo asustar.

- B-bebé, y-yo n-no creó qué... - Al final me tapo la boca miéntras negaba con su cabeza de lado a lado.

- No me digas nada, sólo piénsalo, si al final no te gusta, puedes hacerlo conmigo, a mi no me importa si eres un rarito, un ovni o un transformer, sigo siendo tú amiga por siempre, además, dentro de poco ambos tendremos quince, debemos aprovechar el tiempo - Sabía que no era una buena idea, aún no me sentía seguro...

Pero dentro de mí cabeza no dejaba de reproducirse la idea del sexo, deseaba saber qué era, el estrés me estaba matando, caí cómo pescado en anzuelo por la idea de algo que no sabía si realmente quería, sólo por qué deseaba saber, cómo sería tener tú primera vez, por más cursi que ésto sonará.

Aveces sigo sintiendo, si estaba mejor antes de buscar lo qué no necesitaba.

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