Toda la familia de Tucker se encontraba en el jardín, preparándose para lo qué sería un asado, los padres del pelinegro parecían en especial disfrutar de la cercanía con éstos..

De cierta forma el hombre pelirrojo parecía llevarse bien con sus yernos y cierta mujer rubia, de igual forma con las hermanas de su marido, todo el ambiente era suave, claro hasta que venía cierta mujer anciana a hacer comentarios para arruinar la fiesta.

Miéntras tanto, los chicos aprovechaban el tiempo libre para jugar uno, en aquella mesa de campo se encontraban algunos de los primos del pelinegro y la pequeña pelinaranja..

Empezamos por las gemelas, Red y Sally, las cuáles siempre viven discutiendo por sus clara diferencias, cómo el hecho de que una tiene novio y la otra no, estás tiene de hermanito menor a el pequeño Dougie, quién comparte diferencia de meses con cierta pelinaranja, el odio entré éstos dos es mutuo, les siguen las dos hermanas, hijas de la hermana del medio, Sophie y Shauna, estás son un poco más pacíficas, por el simple hecho de que no les importa un carajo lo que la otra haga..

Así se conforman los primos de parte paterna de esté par de niños, todos se llevan de alguna forma bien, además conviven mucho en la escuela, así que se deben ver de forma recurrente, al pelinegro no le iba mal de cierta forma, a pesar de ser casi todas mujeres, pero su relación con Red, era la mejor a comparación..

Ahora las parejas, en aquél lugar estaba presente el rubió, novio obvio del pelinegro, aquél chico friki que estaba junto a su novia, una de las gemelas, la más gruñona y por último aquél castaño diabético que junto a su novia habían ido hablarle a la abuela, para entretenerla de no meter las narices y deprimir a los demás..

En fin, suficiente de la familia Tucker, todos estaban aún más estresados por el juego.

- ¡UNO!, ¡JAJAJAHA! - Exclamó con una risa malvada, cierta pelirroja miéntras sacudía su melena y su novio junto a ella asentía orgulloso.

- ¡Carajo Red!, ¡Es la quinta vez!, ¡No es justo, tramposaaaa! - Mencionó la pequeña pelirroja furiosa miéntras que está le sacaba la lengua.

- Esté juego es una mierda si está Red, creo que iré a mirar que me robó para picar - Mencionó una de las gemelas dirigiéndose a el asado a hacer precisamente lo predicho, mientras que su hermana rodeaba los ojos fastidiada.

- Bien, Craig deja respirar un poco a Tweek, no a puesto todavía una carta - Mencionó está haciendo mención en lo pegado que estaba Cierto chico a su novio, cómo para haber dejado de poner cartas después de un rato.

- Pero, cómo dijiste "Uno" creí que ya habías ganado - Mencionó el rubió en lo qué está se encogió de hombros y simplemente asintió..

- Si, pero fue reciente, así que divertido esperar por lo que pueda pasar y... ¡PON UNA JODIDA CARTA! - El rubió asintió asustado, poniendo lo primero que tomó en sus manos.

- ¡4! - Realmente era nuevo en el juego, así que no sabía mucho del significado de las cartas, sólo hasta que el lugar se llenó de un gran silenció y la pelirroja se dejó caer en la mesa para llorar..

- ¡Amor no!, ¡Eres más fuerte que esto! - La pelirroja chillo mientras negaba.

- No lo soy Kevin... No lo soy - Mencionó echa un mar de lágrimas miéntras que el rubió sentía algo de culpa y más tras escuchar cómo la pequeña pelinaranja reía..

- ¡Lo siento! - Mencionó en su defensa miéntras que está le daba un golpe en el brazo..

- ¡Ja!, ¡Lo tenías merecido! - Está le mostró la lengua a ambos y en lo qué cierto friki la trataba de insensible, aquél rubió se percató de algo..

Cierta anciana espantó a la parejita que le estaban haciendo la charla, pero ahora en su lugar, había una chica de cabello cobrizo a quién le decía algo en el oído y no dejaba de señalar el lugar en dónde se encontraban ésto, no quiso pensar que ésto podría ser algún tipo de paranoia de su parte, así que volteó a ver al pelinegro quién parecía más concentrado en estar encima suyo que de otra cosa.

Lo último que vió fue cómo está se empezaba a acercar y justo en aquél momento, su novio lo soltó un poco para ver el celular, aquella chica golpeó la mesa con fuerza..

- ¡Hola chicos!, ¿Qué están haciendo? - Mencionó espantandolos a casi todos en la mesa, menos al pelinegro.

- ¡Carajo Shauna!, ¡Vete a la mierda!, ¡Casi nos da un infarto! - Alegó aquella pelirroja junto a su novio quienes dejaron de discutir con la pequeña después de esto..

- Ay sorry - Está posó su mano en su pecho simulando disculpa, pero luego de ver al pelinegro, se sentó descaradamente junto a esté, miéntras sujetaba su brazo - Oh~ Craig~, que lindo verte, no sueles escribirme a menudo - El pelinegro frunció el ceño y siguió en lo suyo, ignorando su existencia, pero ésto no le pareció a cierto rubió quién no paraba de mirarla mal..

- Ésto me huele a una bendición especial - Mencionó el friki haciendo reír a su novia que luego le dijo que se callara..

Miéntras que de parte de esta, no dejaba de pegarse al novio de esté, al punto de subirle la pierna, esté intentó quitarla, pero era cómo si la hubiera enredado en la de esté.

- Ay que golfa, dile algo - Mencionó la pelirroja golpeando el hombro de esté, quién se veía realmente molestó, por cosas de la vida, desvío levemente la mirada, viendo que allí se encontraba cierta anciana, mirándolo con aires de superioridad..

Ahí fue dónde supo que esté juego, ya había comenzado..